FLOR DE SANGUIS
Autor: Miguel Esteban Martínez García
FLOR DE SANGUIS
Autor: Miguel Esteban Martínez García
PREFACIO:
Esta antología de poemas nos lleva por medio de versos a la tierra misma, a la vida. Como su nombre indica, Flor de Sangre nos sumerge en lo vívido del mundo que conocemos y nos acerca al campo, a la naturaleza de los lugares más insospechados que, mediante metáforas, se convierte en nosotros mismos, además de ahondar también en lo inerte, dándole un alma y una historia de la forma más insospechada. Pero no sólo el verso, sino que fotografía y dibujo acompasan y guían, llevándote por lo visual y creando un estilo propio muy interesante.
Rosa Moreno Torralba
Flor de sangre.
Antología
Mayo 2009
Es el ritmo de tu cuerpo, donde el agua y la
poesía hacen el amor.
Es el fondo de tu mirada un manantial de
esmeraldas.
Es el calor de tus piernas.
Es el terciopelo de tu piel.
Es la suavidad de tus caricias.
Es lo que dices sin hablar.
Es todo lo que significas para mí,
lo que me haces sentir.
Lo que me hace seguir adelante
y robarle al tiempo cada minuto cuando
estoy contigo.
Es el agua de tus besos.
Es el fuego de tus labios.
Es el aura de tus cabellos que mueven mis
caricias.
Eres tú.
Eres tú.
Eres tú mi vida, mi sol.
Eres tú en cada noche fría mi calor.
Eres tú la chica que siempre soñé,
la chica que siempre deseé,
la que vivía en mi subconsciente para
cuando apareciese darla lo mejor de mi.
Eres la dueña de mi corazón.
Deseos, anhelos, ilusiones definiendo mis
sentimientos.
Por qué sí por qué no ardiente pasión.
Por ansia mi atracción.
De tus palabras vivi, soñé y me alimenté.
Con la dificultad no murieron las
esperanzas.
En mis recuerdos tus besos sabor de miel.
Tú mi motivo para soñar.
Tú sueño, tú mi dormir, tú todo para mi.
Tú mi alma como agua que se va al mar.
Te vas perdiendo en este cáos de existencia.
Ya me abandonas, ya me dejas hundirme en
la mediocridad.
Tu silencio se hace estridente y te ganan los
llantos.
Tú que quisiste volar por encima de los
mortales
y ahora te quedas sin fuerzas.
Cómo salvarte de este silencio, de esta falta
de inspiración,
de esta depresión.
Quisiera verte altiva como cuando escribí mi
primer poema
que veías un mundo por comerte, llena de
ilusión y vida.
Yo no me hundiré aunque haya gente que te
quiera ver hundida,
alma mía seguiré y luchare para verte como
siempre, dando lo mejor de mi.
Tú mi aliento de vida, tú mi viculación con
el creador yo, tu servidor.
La dificultad es un salto de longitud más con
el que batir mi marca.
Quisiérais un poema, quizás solo tenga uno
el primero de este tema.
Pero todo llegará.
Yo quiero , yo puedo, yo te veo aqui.
Al alcance de mi mano.
Y no me rendiré. Nunca!!! ya que quiero ser
escritor.
Éste soy yo con defectos y virtudes no
busco dinero ni aceptación,
solo hacer todo lo posible por alcanzar mis
sueños,
sin importarme lo que se ponga en mi
camino porque lo sortearé.
Soy un papel en blanco que se irá llenando
de obras preciosas,
con 19 años no veo nada perdido, qué son 2
meses¿?
Un escritor no se hace en 2 meses.
Un saludo a todos.
tablero de existencia
Otro día más.
Otro día menos.
Horas, minutos, segundos
pasan.
Decisiones, esperanzas, vidas truncadas.
Gentes luchando por cambiar el hastío.
Luchando por cambiar la rutina.
Peónes de este juego de ajedrez.
Sólo avanzan en un sentido,
alimentándose de lo que encuentran en su
camino
que avanza sin retroceder hasta llegar al
final del tablero.
Unos ansían convertirse al llegar ahí en
otras fichas más poderosas,
para seguir comiendo a otras gentes.
pero otros acaban siendo comidos por la
torre, la que juzga sus vidas.
Insomnio de amor
Mi soledad sin descansos.
Ojos asolados de un cuerpo recto.
No se cierran por los ocasos.
Ni miran otros lados
donde se alejan crepitando.
Deslices ausentes de trece veleros.
Que navegan en el inmenso
Océano de tu flor.
Navegando con la brújula
De tu palpitación,
tu dulzura de astrolabio.
Limpios y duros yunques
desvelados.
Mis ojos miran un monte
de metales y fríos peñascos.
donde mi cuerpo afila sus venas.
Consulta naipes helados.
el tarot de mi dicha y sentimiento
los martillos entre mi sien cantaban
y soñaban como un taladro
sobre un réquiem sonámbulo
y despierto de 6 días sin dormir.
El insomnio de este marinero del negro puerto.
Sin mar y sin barco.
El insomnio del caballero sin escudero.
El insomnio del jinete sin caballo.
El insomnio del bohemio maltratado
por el tiempo y la vida.
El insomnio del soldado en la trinchera
esperando, viendo la muerte
pasearse por el campo de batalla
la noche me llama temblando
escalofríos me hacen temblar con alarido interno.
¿Qué quiere de mí, qué quiere de mí, amor?
Nadie responde.
Voces de muerte cesaron.
Sólo un resplandor en el cielo se vio,
fue mi amor que escapó de mi cuerpo
y se llevó mi alma.
La pena negra como el carbón brota
Como cenizas que se consumen quemando mi sangre.
Alquitrán brota por mis venas.
Después del Fuego de nuestro amor
quedaron las cenizas sin apagar.
Soledad ¿Qué pena tienes?
Que oscureces y nublas mi pensamiento.
¿Qué quieres de mí?
Que me maltratas sin descanso.
Noche lúgubre y umbría.
Contemplando mi cuerpo desnudo
en la penumbra.
Pasa mis nervios, con gozoso frío,
el arco de lunático violín.
Los fantasmas de mi cabeza cantaban
con delirios de agonía mi melodía,
agujereando mi ansia viva, aumentando mi ira cada día.
Muerte ya vienes a por mí y no perdonas.
Muerto en la soledad de mí cuarto.
Sin más compañía que un rosario y un viejo crucifijo
Dios me ha dado de lado y ha permitido que me convierta
en un muerto en vida.
Va mi barca por el largo río
que divide un confín de otro sinfín y me pregunto:
¿Por qué me agotas con las penas que requiere el corazón?.
¿Por qué me haces sentir que no te merezco?,
Que soy un ser despreciable del cual rehuyes.
Me miro al espejo y no me reconozco te has llevado mi alma.
¿Qué motivo tienes para hacerme daño?,
Y maltratar mi pensamiento y mi corazón.
Que es puro como el agua del manantial de la vida.
Quiero morir a tu vera.
Quiero ser el que te despierte con un beso.
Juntos de la mano.
Sueño sin fin
Sueño del que no quiero mi despertar.
Si amar es sufrir yo he muerto por ti mil veces
y he resucitado otras quinientas.
Recuérdame por lo que fui no por
lo que soy ahora y el monstruo en el que me he convertido.
Sólo tú puedes avivar este fuego.
Pero tú no entiendes de amor.
Juegas y maltratas este corazón de pobre enamorado.
Sólo entiendes de desprecio hipocresía y falsas ilusiones.
Para ti todo esto es un juego,
un amor que me absorbe por dentro y se come mis venas.
Que contamina mi sangre y mi pensamiento,
que me hace ser un muerto en vida.
Un muerto sonámbulo con
vino por sangre y pulmones llenos de humo de
noches enteras sonámbulas fumando
cigarrillos del diablo.
En la oscuridad de mi cuarto te oígo hablar
, voy a abrazarte pero solo eres humo
y te esfumas sin permiso.
¡Ay amor, ay amor!
Nunca podré olvidarte.
Quizás tendré que vivir con esta daga punzándome la razón.
No entiendo ¿Qué he hecho yo para merecer
el mayor de los alaridos?
Que es tu desprecio y tu falta.
Hacia esto que llevo dentro y me corrompe hasta sin razón.
No creíste que mis sentimientos eran tan duros y limpios
como el agua del pozo de los sueños
al que lancé moneda pidiendo tu amor.
¿Qué quiere de mí, amor? Que juegas
Y maltratas a este pobre amor.
¿Qué quieres de mí?
En la lápida pone aquí yace mi amor por ti.
Quemaste mi corazón con tus palabras.
Que fueron trozos de metralla que tengo clavadas en el pecho.
Te amo como las flores al campo.
Te amo como los pájaros a los arboles.
Te amo como los peces al agua.
¡TE AMO! sin perderme en un ocaso,
naciendo en la floresta desnuda,
que riza y descubre
que abre mis sones
quejumbrosos en ternura infernal,
y lo haré hasta que la muerte me lleve y cuando este muerto
mi corazón seguirá llamando, gritando tu nombre entre malvas
y buscándote sin parar hasta que
volvamos a caminar,
como al que le han arrebatado un trozo de ser,
y se ahoga en su soledad.
Pero no sé cómo hacer que creas a este filo enamorado.
Que pasa noches en vela llamándote
¡Pero tú no vienes y no vienes, no vienes, no vienes!
Y tú no vienes, no vienes, no vienes.
AY qué dolor más fuerte encuentro yo
que dolor más fuerte siento yo en mi corazón.
Seguramente porque te estoy queriendo ausente en la razón.
Loco de amor.
Locura de amor.
Hoguera de sentimiento
Insomnio de amor.
Mi soledad cansada.
Sueños chicos.
Sólo ven un horizonte.
Tus labios son como pétalos acolchados de sangre...
Se divisa tierra en esta larga travesía hacia
Las entrañas y los confines de tu amor.
La tierra prometida.
Que si la encuentro te doy mi vida.
JUNIO 2009
Tus besos riegan los rosales de mi corazón,
lo llenan en flor, alimentan esta ilusión.
En tu mirada deseos como los mios,
fieles reflejos de cómo somos,
de lo que queremos.
Momentos que vivimos,
recuerdos inolvidables llaman a un presente,
a una historia que separados no tendría sentido,
sólo sería un injusto desenlace para todo lo que
hemos luchado.
Y luchado en contra de la dificultad, de las dudas,
del futuro.
Y que ahora no me lo imagino si no es para
compartirlo contigo.
OCTUBRE 2009
Libreta
autor: Esteban el Castellano. Yo Miguel
Esteban
Bajo aquel árbol,
justo debajo de aquella piedra y ladrillo
con aquel cristal roto;
encima de un puente con un ruedo de arena
en obras esperando,
que aquel árbol nunca sea sepultado
por asfalto y hormigón;
sólo recordado por aquella huella de
zapatilla
presionada en la arcilla pulida de tu piel;
bajo él, el río de las flores desangradas
y el llavero del que falta mi llave
que abre aquellas puertas del cielo
liberando tu alma,
esa llave la tengo yo;
en mi llavero del día y de la noche
junto al peluche de una serpiente
de amarillos ojos y cuerpo verdiamarillo,
siendo custodiada por el ágÜila bicéfala
de un llavero que pone Toledo
con cabeza en metal y tinta del jaguar
que protege mi corazón con tu historia,
tu tiempo, tu espacio, tus recuerdos
tu ayer y hoy, tu dormir y despertar,
tua vita in memories and love.
Yo the end and begins,
the man who have shout hecce homo,
the black and light,
the red and your blood,
the night and day.
Yo el mundo escrito en mi libreta,
yo bolígrafo macizo de plata y humo rojo,
yo el agua de tus ojos,
el vino de tus besos,
yo el demonio encerrado en versos y
palabras
no dichas;
escritas.
Escritos que jamás
podrán descifrarse y entender:
Un canto al horizonte que sólo llegará
cuando llegue el final
y las trompetas derriben los muros de hojas
de papel
donde crece el árbol de mis raíces;
donde te escondí;
para nunca dar a la luz
la luz de esta realidad
que sois todos vosotros atrapados
en la fantasía del mundo,
de una novela sin tinta,
sólo de imágenes.
En mi libreta duerme el mundo
yo
soy
su
creador.
Y este es vuestro eterno despertar
en papeles en blanco
que uso para liar mis cigarrillos.
Yo escribo la Historia
que es mi gran novela sin tinta;
imágenes, formas, figuras, personas,
lugares, reales;
viviendo, alimentándose, fornicando,
existiendo
en ésta,
la única,
y verdadera realidad
de dos dimensiones.
Yo dirijo sus vidas.
Soy tiempo, soy espacio, soy alma de otro
ser,
que guarda
en una mente ,
y corazón todos vuestros recuerdos.
FEBRERO 2010
Solo un pensamiento:
que yo nací para tus ojos.
No existe reloj alguno que detenga este momento.
Cuando miro de noche
las sombras dibujan tu figura
Tu eres mi doncella yo soy tu bohemio.
Mi alma me dice vive amando muere luchando.
El coraje de luchar por lo que uno quiere en la
vida
es lo que da respeto.
Quisiera ser yo el que te abrace el que te bese el
que te diga
al oido que solo tú y solo yo inseparables los dos.
Estás en mis sueños, en mis
noches mas frías y en las más
calientes.
Only I can wait.
Only I can wait.
Only I can love you.
In the darkness of my soul and
In the heat of my heart.
Al final del camino no importa el destino.
Al pasado le digo adios.
Sin presente ni futuro vagando por el mundo.
Realidad como un sueño con los ojos abiertos.
Tus senos guardan el tesoro de tu corazón.
Cargo mis versos apunto, tu corazón es el blanco
y disparo.
El sufrimiento es mi pasión sin el no sería nada de
lo que fui.
Sin ti no sería nada de lo que soy.
Veo la vida como es cruda y gris.
Tu eres la luna de esa noche cruda y gris que es
mi vida.
No tengo miedo de caminar solo el camino porque
al final de él
estas tu esperándome.
Abandone todo lo que me anclaba al pasado
para navegar sobre mis ilusiones.
Y luchar por alcanzarlas
La medida del amor es amar sin medida.
Y pensar que aquella meta será conseguida.
Cueste lo que cueste.
No me acostare sin verte.
Pase lo que pase.
No quiero que mi amor descanse.
Quiero luchar quiero amar.
Quiero vivir quiero sufrir.
No quiero pensar quiero actuar.
Y no parar, no descansar, solo luchar.
Para poderte amar.
Y así conquistar lo que quiero de verdad.
Y así poder abandonar la soledad.
Quiero vivir junto a ti.
Quiero compartir junto a ti.
Siento que me sientes.
Veo que me ves.
Quiero que me quieras.
Amo que me amas.
Sueño que me sueñas.
Miro que me miras.
Simplemente te veo.
Simplemente te siento.
Simplemente te escucho.
Porque ahora vivo en tu corazón.
MARZO 2010
un besito
Muero por un beso
vivo por un querer
cruel del destino
condena de una pasión
que creó tu pestañeo
al dejarme ver
tu cielo encerrado
fijamente tres minutos,
y morí con tu pestañeo.
Demostró que fui
importante para ti
y que a pesar y muy
a mi pesar de los problemas
seguí en tu mirada atrapado
hasta que la aguja
de aquel reloj de pulso
se paró al pasar 180 segundos
mi cambio de vida
cuando consumí
medio giro al decir
siempre te amaré.
ABRIL 2010
Nada como una mirada al vacío
una mirada al comienzo de todo
con el anticipo de un final que se aproxima
camina rápido vuela veloz se alimenta de estos
cielos
para la tempestad de los dragones alados
de un cielo rojo y negro
de una atmósfera de hierro, un túnel en sus
recuerdos
un solo ser
en su trono postrado
a sus órdenes todas las criaturas que él ha creado
la cruz de metales preciosos
es solo el recuerdo de la batalla que ganó
con él volvió la vida todos temieron su osadía
aunque de la muerte el trajo la vida otra vez.
desde su trono todo ser vivo le obedeció
es solamente un final y un comienzo anunciado.
el infierno no es fuego son cielos teñidos de
sangre
y hierro de los que sólo un Ser quedó vivo.
Traiga nuestra destrucción para salvar la vida
sólo quedó él a la hora del final.
él no la buscó la encontramos nosotros.
Volveremos a nacer.
Eternamente seremos letras para él.
MAYO 2010
viento azul de este cielo nocturno
quien viera tus ojos siguiendo mi marchar
solo sombras en mi camino para buscarte
sentimientos que recobran fuerza
no te vayas de mi lado
sentido de luz compañera
vuelve
como lluvia roja de besos carmin de tus labios
como cielo encerrado de tus ojos
cielo que liberado nunca me abandonará
cielo desconocido cielo sin domar
fiel compañera de dia y de noche
fuego como yo solo avanzando en un sentido
yo contemplando el abismo
nunca cayendo ya que tengo apoyo firme
tú mi apoyo
mi motivo para soñar alto para vivir intenso
meloso tormento de todos los matices
para sentirme cuerdo en un mundo de locos,
pero quien soy yo sin tu calor de palabras
sin tus sentimientos sinceros que me enamoran
que ilusiona y paraliza
la vida de este ponposo corazón que te habla
ansía todo lo que salga del tuyo
porque este ya comienza a sangrar.
Ya te dio su lado
nunca esperé que lo guardases en caja de
madera
Solo es para disfrutarlo en vida
no vivo esperando tierra
lloro viviendo amarte
para soñarte vida para morirte placer
quien da más solo tiempo todo llegará o se ira
naipes del tarot helado
en la hoguera de cartas flameantes al viento
en este oscuro firmamento
del azul sediento teñido de espadas
como pasión nunca matar cariño
solo aumentarlo cada día.
solo decirte que no se cuando seré digno de ti
porque no sé cuando me respetaré a mí.
JUNIO 2010
Con el susurro de la luz en cristal de gotas de
agua
pensamientos calidos me arropan tu compañía
solo una vida solitaria desde aquella lejanía
un sol pernocta durmiendo disfruta su luna
con tacto terciopelo una vida de amor eterno
Un caballero busca a su mujer la extraña
avanza entre montañas de azores
y valles de bosque y ríos dulces
noche de amor entre nubes acolchadas
con el frío de un mundo en sangre
que estaba en guerra.
Ahora su patria era su tierra en la hoguera.
Se despierta frio y solo tras pintar con nostalgias
recuerdos.
y va el ancho río ya en sus llanuras
años no recordaban su vida y explendor
todo se termina comentó el sabio nadie le oyó
la locura es lo único que conocemos infinito
otro la estupidez concluyó
pero uno saltó acaso no somos todos locos
mira la guerra que nos mató.
Miguel Esteban Martinez García.
JULIO 2010
Una nube de tranquilidad me cobija mientras
observo el paisaje;
el caserón vuelve a relucir con el cuchillo dorado
de la piedra caliza, que resiste el embiste del
viento y las lluvias;
la lagartija tomando el sol está, tuerce la cabeza y
cierra un ojito aprovechando los ultimos rayos de
sol;
el escarabajo de tierra camina lento con sus
fuertes patas, tropieza y vuelca quedandose
varios minutos intentando ponerse derecho;
mientras, se despierta uno de los dos grandes
murciélagos, que aquella cámara de la gran casa
rústica ocupaban.
Amapolas y amarillos de espinos, con el verdor de
los pinos.
Vides para cuidar y cultivar, un pequeño jardín con
caseta para las gallinas;
frambuesas y arándanos, en un pequeño huerto al
lado de la puerta,
un pequeño estanque de azulejos en el aljibe,
donde nadan cuatro carpas y un barbo,
oscurece y el joven rapaz de cernícalo primilla del
palomero oscuro de la casa,
se lanza a por un pequello ratón de campo, que
andaba merodeando, buscando algún resto de
harina o de grano.
La mariposa de bellos colores azulados, dando
sus aleatorios vuelos, en busca de flores de
lavanda es atrapada por el pequeño mochuelo,
que salta del agujero de aquella antigua encina.
AGOSTO 2010
Navegando en el horizonte de mi destino,
buscando tu sonrisa en cada amanecer,
velando el tiempo de cada anochecer.
Llamándote en silencio con cada recuerdo,
volviendo siempre al comienzo del sentimiento,
dejándome llevar por el dulce tormento,
conteniendo las palabras en el viento.
Ya quiere caer el lamento, dejar libre el intento,
verte llegar, el silencio deshacerlo.
Saborear tu piel bajo las sábanas,
la miel de tus labios tener,
hacer tus piernas estremecer.
Endulzar el momento con una caricia,
compartir día a día, abrazándote en la noche,
sólo con tu amor ya no sería pobre,
solo tu te quiero se eleva en mi cielo,
mi dulce sustento que quiero.
Mi corazón quiere navegar hoy por tu interior,
sentir cada flor que forma tu piel,
tener tu aroma como velo que embriaga.
Quiero quitarte la ropa, besarte, que me sientas
dentro,
recorrerte en cada caricia, hacerte sentir, oirte
gemir.
Quiero mi despertar para verte llegar.
Viene acariciando,ella,
con sus palabras altivas,
desvanecerse quiere, con letras solitarias.
En sus ojitos los luceros,
por sus labios, disfruta el piropo.
Despeinarla con caricias piden sus manos.
El dulce golpe de su voz quiero escuchar,
dificil de olvidar, todo por ganar.
Creo que la quiero.
Pues díselo.
Calma para llegar,
por poder luchar y no abandonar.
A veces, invade mi pensamiento,
y más deseo crea su recuerdo.
Pienso que no estaré a gusto hasta que no la diga
lo que siento.
SEPTIEMBRE 2010
Vida en gris de la que tú eres mi luna esperada.
Se caban surcos de ti en mi alma soñadora,
por donde fluye el solitario beso;
la tierna caricia anhela ser algo más.
Mis ojos quieren atraparte en su firmamento,
mis sentimientos arroparte con fuego.
Pero yo sólo te quiero a ti, mi vida en verso,
mi motivo para ser solo tuyo, para no necesitar
nada más.
Ser el sueño hecho realidad, la felicidad de dos
caminos
que se cruzaron en el destino.
Tiempo para esperar, vida para soñar,
cuando te vi llegar provocaste mi despertar,
y ya no quiero descansar, solo luchar, te quiero
amar.
Nos merecemos algo más en este papel que
jugamos,
saber si nos amamos, si el deseo quiere ser
pasajero,
el mio quiere hacerse eterno y ser tu sustento,
solo espera su momento, el sueño para vida
plena,
avanza cruza cada noche el cielo azul de matices
violetas,
siempre te encuentra, la soledad me abandonó
para poder servirte.
Ahora avanza la duda, el temor, si realmente te
merezco.
Pero del corazón nace mi valor, lo sincero el dulce
te espero,
el te quiero.
El pensamiento que paraliza cuando te veo, la
sensación del amor.
Todo lo que me queda por decirte y lo que no te
dije,
vida para vivirte.
Avanza, no se separa, no se aleja, te alcanza
porque eres lo más hermoso de mi mundo,
camino que surca nuestro antíguo paraíso.
Permanece como el compás de mi pulso.
And I miss you, you are my love,
desde que te conocí supe para lo que viví.
Fluye mi vida por tu cauce, el camino de mi amor;
Allí donde viven por querer alegrías.
Escojo tu sendero, yo como tu destello en el
secreto,
voy con el manto de tu compañía, allí donde se
oculta el día.
Allí donde nuestro calor se refugia.
Allí donde mi alma no cesa la lucha para ganar tu
dicha.
Con los miedos guardados en un rincón,
el sueño solitario no me abandonó,
con su antigua ilusión envejeció, su imagen viva
guardó.
De él decían que solo quería comprender al amor;
Del verso a la canción, así hablaba el corazón,
Tras una flor la conoció y le preguntó:
¿Qué eres amor?
Intrigante sensación.
Nadie te posee, pero todos quieren encontrarte,
hoy fui más allá y te besé, pará en mi interior
capturarte.
OCTUBRE 2010
Voy allí y te encuentro dormida, al final del
bosque,
te encuentro soñando, con otros días de amores
profundos.
Como el azul del cielo que a tu lado te hacía
brillar,
mi caricia hace una pequeña sonrisa en tu rostro,
mientras acercas tus labios para besar los míos,
y fundimos nuestra vida bajo aquellos árboles.
Vistas de un amor eterno que devolvería vida,
para quitar su despertar de melancolía.
El lobo vigilaba su guarida allí su mano le sacó,
para ver el mundo.
No quiso volver a su cobijo, las palabras dulces y
tiernas,
guiaban mi alma a viajar, uniendo su ser volaba
hasta regresar.
Te necesito más allá de este sentido que grita por
tenerte,
te necesito más que el fuego a la madera, gritó mi
vida por tenerte,
y a la vez te siento, en cada golpe de viento y
reflejo.
Me encuentras, y tu recuerdo reciente me besa,
mientras no puedo evitar recrearme en el deseo y
corresponderte.
DICIEMBRE 2010
Spero che qui' tui sei convertita en una bella
fiorina;
Noster eternity walk toguether,
inside this human life we have.
What do you want to say to you,
if the only thing i want to say to you is that i love
you..
is whaT there is and what there is is what you see.
Green eyes, red blood, red heart, blue soul, my life
around you.
Su naturaleza el mar de abril,
lo frío y húmedo de los montes y cordilleras,
la oscuridad y la tiniebla de una cueva
entre hermanos murciélagos.
Hermanos por vivir y existir en la naturaleza
agua y tierra entre surcos de barbecho,
dormir al ocaso del día,
el alba cuando el gallo nota cambio de luz.
Dar de comer a los galgos y sacar las ovejas
dormir con una lumbre,
despertar con tu sonrisa,
fumar tumbado en la hierba del monte,
ver amaneceres y lunas de hechicería.
Cosecha y agua de aljibe;
Mis besos sin final solo salvajes y libres tuyos y
míos
experiencias pasadas, sueños serán,
sueños serán.
Y se irán, pero tú me despertaste;
cada día si estuvieras, un romance,
un eterno sueño apasionado vivir a tu lado
crear pasado para contar,
hijos bueno cuando lo pidas con dos, dos
hermanillos que jueguen.
yo quiero darte lo que quieras coger de mí, soy
leo soy generoso,
también serpiente sabia,
lobo que baja a la ciudad,
pero que en sueños siempre vive en libertad.
.
Miguel Esteban Martínez García
FEBRERO 2011
Vida vuelve, amor va y viene,
sueño se fue y pesadilla también,
por culpa de quién.
Seguiré amándote en silencio dulce melodía.
Seguiré recordándote a pesar del tiempo,
seguiré en vilo buscándote en mi vía;
Voy a por ti ya lo sabes,
solo te quiero ver feliz,
aunque mi sonrisa sea fea y desgastada,
conserva la esencia de niño pillo.
Agoreros no me pueden, sólo mi conciencia:
No está tranquila sin perdón
de a quien alguna vez por inmaduro pude hacer
daño.
Sin amor no hay vida y sin vida no hay muerte.
Solo sé que cuando me llegue alguien sonreira,
y otros llorarán, de momento me apetece seguir
viviendo;
Como el resto de la gente pero sin envidia ni odio
sin principio ni final
solo un puntito que no sé cuándo llegará.
A la mierda quien llamó barroco a mi estilo;
este corazón late noble pero fugaz.
ABRIL 2011
Volver al eterno sueño de una pasión vivida.
Del amor que cura sin marca la herida.
Aventura del taciturno que busca el idilio;
se pierde en la forma, encuentra el vello fino.
Busca en letras belleza, cuando ella lo es y era.
Algo sencillo y declaración de amor consentida.
Tormentosa pero reconfortante la espera.
Esperaba, calma en su ventana,
tiempo atrás vino una escarcha,
a ella la veía fiel en su mirada,
su palabra sincera la cobijaba,
de terceras alimañas con envidia.
Un argumento y todo era sencillo,
ya fuese realidad o fantasía,
no se perdía en un camino.
Nostalgia llenó su amor de letra prohibida,
de anochecer que ansiaba un mundo sin ira.
Ella no quiso ver una mirada vacía.
Frío y calor se desearon y surgió el beso,
llegó el viento.
MAYO 2011
Me quedo en tus palabras,
en tu cielo de relojes de arenas.
Allí lucho contra las olas del olvido,
de un mar que no te dejó llevar.
Lucho por la promesa de luchar,
luchar por lo que se siente,
porque quise negar que te amaba de verdad,
y ahora cada vez te necesito más.
No es solo mirar atrás,
es querer lo que vendrá.
Aunque me falle la salud,
este corazón no se parará
recogiendo lo que me das
dándote de día en día algo más.
Y te vuelvo a sentir,
quiero volver junto a ti.
JUNIO 2011
Cuatro cartas y diez monedas
Vivo para ti; sueño por un devenir.
Como es arriba es abajo,
pudo ser mi pacto,
pero aún no estoy condenado.
Fidelidad a quien me protege.
Sesenta y siete suman; un pasado.
Doce reyes de salud, tres monedas,
un caliz de vida eterna, una espada.
Para el mundo un sentido, para lo que vendrá,
muchos; pudo ser, vino y se fue.
Sesenta y siete suman,
cuatro cartas y diez monedas de cinco.
No quise saber, solo sumé y escribí,
(50+17=67, 6+7=13)
aunque no entiendas esto no quieras saber
cómo persiguen los números,
ni cómo las letras se enredan por eso
vivo para mi, pero sueño con tu venir.
Julio 2011
Cerré los ojos y allí estabas,
como si no pudieses salir
de mi interior.
Como si quisieras besarme
o decirme algo.
Pero tú bella en sueños
no hablas.
En sueños no hablas.
y nos quedamos mirándonos
a ciegas.
Yo te aviso que en el bosque
de mi mente solo hay un camino,
y es un laberinto.
El final lleva a despertar
y enfrentarse con la realidad.
Pero tú bella en sueños,
no me hablas.
Y yo a primera vista
me enamoré de ti,
por si algún día acaso
el sueño se cumple,
y ya de realidad me dices,
te estaba esperando
siempre te ame.
SEPTIEMBRE 2011
Permanece en mí.
Resplandor de auroras en los recovecos,
donde se refugian mis ilusiones en sueños.
Tu tez conoció mis manos y mis manos te
moldearon
para su recuerdo.
Eterna batalla a la noche, cuando noto tu
ausencia,
la noche que galopa y yo sólo con la palabra
sufrida
de nuestra vida sentida.
Ya no hay felicidad entregada con besos
y roce de nuestros cuerpos,
medida y entregada, ya no buscaré en esa
nostalgia.
Me enamoré de la vida y nada me falta,
porque todo me llena.
Y tú mi bella, volviste a pasearte por mis sueños
y en sueños nos reconciliamos.
Desperté y sentí de nuevo el dulce tormento,
para vivir soñando con el recuerdo,
y amarte soñando despierto.
hoy te vi ayer me doliste
Te v e o y s i e n t o q u e t e q u i e r o ,
que por ti me muero,
te miro y mi mundo se vuelve loco,
te deseo y mi sangre arde como fuego
sólo un pensamiento: que yo nací para tus ojos.
No existe reloj alguno que detenga este momento
mi vida pasa fugaz como el viento,
pero mi corazón sabe que te seguiré queriendo,
estoy enloqueciendo, te veo en todas partes,
en mi cama, bajo mis sabanas, en mi cuarto,
cuando miro de noche, las sombras dibujan tu
figura,
el viento me susurra tu voz,
las flores me recuerdan tus labios,
el agua tus besos, los rayos de sol tus cabellos,
tú eres mi doncella yo soy tu bohemio.
Mi alma me dice vive amando, muere luchando.
El coraje de luchar por lo que uno quiere en la
vida,
es lo que da respeto.
Pero tu tienes otro dueño de tu corazón,
que se lleva las historias de amor,
que escribí con sangre y fuego en mi interior.
El desánimo me invade como olas,
golpeando el acantilado de mis pensamientos,
te llevo dentro de mí,
por ti moriría una y mil veces para demostrarte
que nadie te podrá querer como yo.
Son tus besos algo más, te llevo dentro de mí.
Oigo voces sin razón que me recuerdan mi
desilusión,
no sé vivir sin ti, quisiera ser yo el que te abrace,
el que te bese, el que te diga al oído
que solo tú y solo yo, inseparables los dos.
Una historia de amor imposible de borrar,
escrita en mi interior, pasiones vividas entre los
dos.
Ya no puedo soportar otro día mas sin llorar,
sé que me sigues queriendo,
que lo que yo te hice sentir nadie podrá.
Pasión ardía en nuestro interior.
Pero ya pasó ahora solo queda el recuerdo,
como un boceto que se dibuja cuando cierro los
ojos,
despojos de aquel amor vivido, como un silbido
llamando al olvido
El Castellano
Soy beso del ayer
Soy sólo lo que tus ojos
dictaron para tu corazón.
Soy sombra, reflejo y luz sin otra razón.
Soy verdad, ilusión, camino y mentira,
soy amor.
Soy tantas cosas, pero para ti
lo que sólo tú quieras.
Deseo de nuestras almas risueñas.
Pasión de espíritu que sujetas,
sólo tú eres vida para el telar de mis letras.
Surges como viento, despertando el dragón
iluso y generoso, cálido y tierno,
del interior de mi sentimiento.
Sangra versos humeantes para ti.
Sueño angelado de amor sencillo y
entregado.
Y te recuerdo con este beso a tu imagen
que camina bajo la farola iluminando el
ayer.
Mi palpitar por el hilo del sentimiento
sostienes.
Y caí y me enredé en tus caricias,
reales o escritas para sentir que sólo soy
lo que tus ojos y corazón,
marquen para ti,
esperando algo más que un beso ser.
El Castellano
OCTUBRE 2011
Déjame ser yo.
yo, quien te quiera,
yo, quien a ti aspire
vivo y afortunado música
para tu sentido.
Yo, el que tus labios admire,
el que en tu ser suspire.
El poeta que te escribe y vive,
afortunado,
por la música de tus sentidos.
De tu corazón enamorado,
el que en tu ser suspire y
en tu pecho se adormile
el que en tus ojos se mire y
tus alientos respire,
con tu dulce susurro a mis sueños cobije.
Quiero sentirme poeta de ti,
que con tus cálidos besos
en el edén me imagine,
poeta de ti ilusionado.
Déjame recorrerte,
como si el tiempo no hubiese.
Que tu cuerpo con el mío
se mezclen en un fuego ardiente
y se confundan en uno,
vivir en tu mirada,
serían mis dulces palabras,
pues no mas son reflejo
de la altura de tu alma.
De una amapola
mi amor para una doncella,
viva y eterna,
dulce y risueña.
En esta noche otoñada,
en que las primeras lluvias
fueron alegrías despejadas,
caen tímidas en mi ventana
y me recuerdan a ti,
mi tierna doncella, mi bella,
mi eternamente dulce y risueña,
como sonrisa de altares en primavera
altares de estrellas a la luz de luciérnagas,
como rojas amapolas en la pradera,
y en lo alto.............el cielo lleno de estrellas,
campanillas por miles,
únicos testigos de nuestros amores juveniles,
en el anochecer de plata tu sentir para mí mieles,
esperando que de tus labios broten los sonidos
que me dicen que me quieres,
y así quiero pasarme las noches,
y los días, vida mía.
pues sin ti las noches son frías,
y los días un mar de melancolía,
solo soñando y sintiendo tu esencia muy cerca
mía,
sólo te quiero a ti en mi día.
Como la más cálida sonrisa tierna,
sólo es amor a ti mi bella.
Piedra-corazón
No es una piedra, es mi corazón,
su latido cesó y en piedra cristalizó,
ella lo tiene en cuenco con agua,
a símil de mascota que nunca muere.
Le sonríe cada día, normal es mi corazón,
no huye, es piedra fiel a su amor.
Con caricias sintió que palpitó,
que fué su inspiración, su amor y su dolor,
pero en piedra cristalizó, pudo darle calor,
ya que nunca quiso mi dolor.
Esa piedra-corazón fue músculo,
pero murió y ahora solo le queda esperar,
esperar que el agua y el tiempo,
le otorguen musgo y sangre verde,
que ablande los cristalitos de su interior,
y resucitar.
Quizá algun día cuando ella se olvide
que es una piedra, volverá su palpitar.
Pero yo ya noté la ausencia
de vivir sin corazón.
El Castellano
NOVIEMBRE 2011
Día y noche al compás de una melodía
de sueños por vivir ilusiones por cumplir,
de los besos de tu boca vivir
amar cada parte de ti
como despertar de primavera
a toda vida bella,
Mirar en tus ojos y mirada
el fuego de amor que me acompaña,
sentir que dentro de ti
brilla un corazón que late por mí.
Bailar a la luna nuestros cuerpos
unidos en uno por pasión.
Y alma con alma corazón sin dolor,
beso de la más linda flor que eres tú,
beso en esta noche que te siento
en alma verso y sentimiento.
Y puedo entregarte todo mi amor,
Si no sintiese no escribiría,
y si no te sintiese no viviría,
sería cuerpo sin rumbo,
alma sin motivo de escribir,
porque tu amor me llena,
te alcanzo una estrella
para que sientas que de mis versos
eres tú la dueña, mi más linda y tierna.
Si soy tu poeta, tú eres mi reina,
mi inspiración eterna.
QUIERO beber de tu boca y cuello,
hacerte mía a cada momento.
Con cariño hacerte vivir el cielo,
y por la noche el calor del fuego.
Si tenerte te tengo, quererte te quiero
y amarte lo estoy haciendo,
puedo sentir y con orgullo decir
tú mi vida en verso,
el amor que esperaría una y diecisiete vidas
flor y pasión del romance antiguo
que repetiría cada día y vida.
Siente este beso y caricia
porque sincero es el verso.
Sincero es el amor que tengo
cada vez que te leo y siento.
Porque tu amor me eleva
y me hace ser guerrero inmortal
de la sonrisa plena
de tu corazón sin igual.
Ámame, siénteme, quiéreme
escríbeme, derríteme, soy tuyo sin dudar.
El Castellano
Gran luz, gran luz al conocerte.
Cabalga un sueño hermoso en los albores,
cruzando el mar, su alma está.
Su casa, su amor y su hogar
en el corazón de su doncella está.
Guerrero niño, vasallo nombrado del amor.
Gran luz en su reino, creado de ilusión,
de fuego incombustible su interior.
Cabalga su amor, su doncella más cerca está.
Crecen las flores, en los alrededores están.
Deleitadas y coloradas,
dejando en pétalos su complicidad,
para el romance que viendo están.
Mientras va el río de colores
con paso lento y decidido.
En besos de gotitas,
que dan vida a las almas al pasar.
LLora una plantita con una gota de rocío.
-¿Qué pena tienes tú plantita,
tú que eres linda y la luz y el río
te besa y acaricia cada día?
-Mariposa quisiera ser,
¡¡Mariposa quisiera ser!!
Volar a la otra orilla
y a mi amada margarita,
que está solita, poder besar.
Al viento le pido cada día
que traiga sus semillas,
para que con las mías,
abandonemos la soledad.
El Castellano
DICIEMBRE 2011
Tablero de existencia
Otro día más.
Otro día menos.
Horas, minutos, segundos
pasan.
Decisiones, esperanzas, vidas truncadas.
Gentes luchando por cambiar el hastío.
Luchando por cambiar la rutina.
Peones de este juego de ajedrez.
Sólo avanzan en un sentido,
alimentándose de lo que encuentran en su camino
que avanza sin retroceder hasta llegar al final del
tablero.
Unos ansían convertirse al llegar ahí en otras
fichas más poderosas,
para seguir comiendo a otras gentes.
pero otros acaban siendo comidos por la torre, la
que juzga sus vidas.
Flor de luz en este linde donde corta mi sendero.
Vidas paralelas que avanzan, entrecruzandose
cuando duerme el sol.
Fiel reflejo de mi amor que te doy en sueños.
Intermitentes sentimientos como ánimos en
ánimas inanimadas.
Flores amarillas de espinos creciendo en este
desierto embalse de recuerdos regados con amor.
Labios que sangran palabras de vino.
Pulmones que respiran cigarrillos en un cielo
enterrado.
Manantial subterráneo donde quedé encerrado.
Gritos por eco, pensamientos retumbantes en mi
cabeza, reflectantes de mi existencia.
Quisiera escapar de este pozo quisiera que tú me
rescataras.
Que tu me ayudaras y me besaras pero eso no
depende de mi porque ya me amas con toda el
alma.
Semanas pasan y el olvido me va matando con su
cruel instrumento, a golpes de silencio me voy
consumiendo, sin sentir tu aliento,
te espero fumándome lo que queda de mi cerebro.
Bebiéndome lo que me queda de hígado y
comiendo todas las flores que te regalo en letras.
ENERO 2012
En gota tras gota la esencia de una vida,
que célula tras célula conforman millones de vidas
en una sola, completa, viva,
que toma agua para estar viva,
a sí volver a formar células de agua,
cuál de ellas despertó tu belleza,
cuál de tantos cromosomas
creó tus facciones y piel de azahara,
esa que me atrae,
o fue acaso la belleza de tu alma
la que fue moldeando desde niña
la belleza futura de tu cuerpo
por el que suspira cada uno de mis instintos,
acaso estos deseos
fueron concebidos antes de conocerte
y tu cara fue reflejo de belleza
universal anhelada,
acaso tus labios vieron en los mios lo mismo
o preferiste primero lo abstracto
de los sentimientos de un corazón
que en suspiros te habló,
al imaginar el roce de tu cuerpo,
al ver en tu mirada todas las flores
de la primavera olvidada
esa por la que las hadas cultivaban
hechizos de luna plateada en palabras,
y los gatos entre tus piernas ronroneaban.
Acaso el cielo sería más azul
si lo mirara através de tu mirada,
el frío no sería frio si tus manos me calentaran.
Y la canción sería eterna
si por tus labios fluyera ávida y tierna,
acaso soy yo quien despertó tu ternura
o la experiencia tuya de años y años de vida
sin sentir de tu corazón hablase maldad alguna.
Si tengo que dudar hasta de la duda
estaría seguro que hasta mi duda
es sincera porque al amarte encontré mi verdad
y es que tú tienes todo lo que de verdad mi alma
anhela,
y por tu amor lucharé hasta que muera.
FEBRERO 2012
ROSA DEL JARDÍN ETERNO
Viento nocturno alarido de sangre
en verso de sombras deambulante,
momento que danza marcha atrás
en inmensidad de un tiempo fijo
atado a tu recuerdo suplicante
con el ruido del ritual,
en pétalos deshojados,
por caricias que danzan tus labios.
Misterio en oscuridad
de un latido intenso,
sinistraliedad en dolor recordado,
matado a golpes de humo,
y tatuajes en sangre de vino
y dulces tormentos,
rosa abre tus pétalos al viento,
susurra que no desapareciste
para no volver a florecer,
sé eterna como inmensidad
de firmamento de estrella congelada.
Vuelve a nacer como quien te vio
un sueño muerto recorrer.
Despliega en hojas tus secretos
esos que llaman al ocaso del silencio.
Haz florecer este jardín sangriento,
vuelve azules las amapolas que habitaron
el recuerdo de tu beso,
por no poder tenerlo de nuevo,
por no poder sostenerte en brazos de nuevo,
no mueras en el etéreo recuerdo
vive, vive por siempre
hada azul en mi cuerpo.
Llévame allí donde se oculta el miedo.
Donde el cielo llore tus pétalos,
donde tu aroma provoque sueño mágico,
cual sangre de blanca adormidera,
por tus venas fluirá eterno mi verso,
Si amarilla te veo recordaré
que por tu cuerpo deseé el fuego del paraíso.
Que en tus ojItos encontré
el bosque mágico encantado.
Ven que te haré princesa,
ven que te haré reina.
Ámame como al que te lleva
siglos y siglos esperándote.
Pues no solo beberé de tí tu esencia,
si no del lecho
del eterno romance te coronaré,
a ti me entregaré.
Buscaré el sueño en recuerdo de vida pasada,
ese que te esperaba para morderte y eterna
tenerte.
Fuiste y serás siempre
quien me despertó y me despierte,
aunque este no sea mi cuerpo,
siempre descubrirás que renací para
encontrarte de nuevo.
Tú mi amor eterno,
en beso que recorre todo tu cuerpo
tendrás mi alarido gritando en silencio
que te encontré y te encontraré de nuevo.
Siglos y siglos esperándote en silencio.
El Castellano
MARZO 2012
Sé el tiempo que nunca se fue,
sé mi luz
en este sendero nocturno
como el río
y su agua en arrullo,
como el viento
y su gemido travieso,
sé energía sin materia,
sé amor sin mesura,
belleza sin dolor
sé ternura en fuego prendida.
Eternidad en tus ojos,
mi vida capturada,
por tus deseos atravesada.
Sé mi alma, mi esencia
de tu amor envuelta,
de la primavera sé vida
polen y flor de mariposa.
Sé tú misma
porque eres preciosa.
Mi ninfa, flor y mariposa,
mi hermosa y bella doncella,
sé agua del beso,
calor en el abrazo,
haz de este amor
un sueño en color,
duerme conmigo y despierta
a este corazón
que duerme contigo más allá
de lo sentido,
pues de pasión es placer
de tu querer es ver el mío
tu imagen cada segundo recorrer,
tu cuerpo cada rincón de mi cuerpo
hace estremecer,
para sentirte bajo mi piel,
hacer de tu corazón y el mío
un sólo latido.
Eso es tenerte a ti en mi vida
sentir el cielo cada día.
ABRIL 2012
Y el artesano en su taller pintaba,
en versos de sangre sus amapolas
para la pasión de su alma,
bailase la espada.
Volase su hada,
para posar en los labios su beso.
Amapolas nacieron entre rosas,
claveles, clavelinas,
malvas silvestres,
musgo, violetas
hiedra con venas de sangre,
trébol, campanillas,
pensamientos, margaritas
y florecillas silvestres
cada cual más variada.
Su hada sílfide cuidaba,
cada pétalo y hojita dañada
de su jardín de amor,
la dejó vivir allí en felicidad,
a cambio de su pasión, inspiración y su fidelidad.
Cada noche su sueño de tiernos besos llenó,
de húmedo nectar de deseo
de sus alitas pequeñas
de bella mariposa nocturna mostradas.
Su pluma guió
la naturaleza y amor sus notas
en melodía hermosa no conocida.
De sus versos un piropo para llegar a ella,
la felicidad completa.
Cuando el alma adquiere cuerpo dentro del
cuerpo,
allí estaba ella,
vestida de doncella para su canto y danza
de belleza a la luna mostrar,
fuera del cuerpo,
como espíritu nocturno de enamorada su ritual,
bailando en la flor
de jardín de su humano amor,
de estambre en estambre el cáliz y la flor
cerrando para dormir y despertar,
nueva vida a la siguiente primavera.
El Castellano
MAYO 2012
Entre montañas de azores y valles de ríos dulces,
ven pasar mi espada árboles antíguos
cobijando a los caídos,
ven lejos los astros orgullosos de sí mismos,
desconocen el hijo de un dios que va por los
caminos,
dónde irá ese hombre, sólo él lo sabe,
a una ninfa le prometió una flor de la montaña
más remota.
Con raices la trajo sin un solo pétalo perdido,
a la orilla del río la puso, a la orilla del río ella lo
quiso,
cada primavera iba a visitarla,
cada primavera su flor de color distinto vistió,
un año notó triste a su flor, extrañaba su montaña,
su ninfa le pidió piedras y tierra de donde fue
encontrada,
a si lo quiso, a sí sería,
al llegar a la montaña en el lugar de donde estaba
la flor,
allí una serpiente sabia encontró, cual ella le dijo:
si muere esa flor morirá tu alma,
-¿Qué misterios entraña pues dicha hermosa flor?
Es hija de los cielos como tú, contestó.
Sí quieres saber más pregunta a la reina de las
mariposas,
que yo estoy tomando el sol.
Cogió las piedras y tierra y marchó,
en el camino una mariposa se posó en su hombro,
le dijo al oído sígueme mi madre te espera en el
bosque,
allí fue, la reina de las mariposas, le dijo que esa
flor
fue de las más antiguas en crecer después de los
helechos,
tan antígua que tenía capacidad de sentir intacta
como los humanos.
De ella se despidió tras darla permiso para beber
de su néctar.
Rodeando la flor puso la tierra y las piedras,
decidió tras el consejo de la serpiente y de la reina
mariposa,
visitar a la flor cada mañana,
su ninfa también se alegró y de él se enamoró,
en amor juntos vivieron, un día la flor se cerró,
en su interior semillas vieron nacer; de cada una
de ellas,
la jerarquía de las hadas, ese fue su origen.
El Castellano
JUNIO 2012
Una flor vino del cielo
a la puerta de este mundo.
De sombras libró
los sentimientos puros de corazón,
la señora de las flores silvestres
la adornó del color de la noche.
Luz de luceros caía a ella
sangre de oro, polvo de estrella
quién era la más bella
dormida su nota suspira
única dama de la noche
gustaba la flor llamarse
a quien en sueños la visitase
llave de este mundo
con el mundo de lo inerte
para quién guiándose
por su nota dulce
tocarla osase; la visión
de espíritu suplicante,
blanco vestía, en traje luminoso
sus pétalos abiertos al valle,
de la niebla y la hierba,
valle de árboles cantores
y nereidas como hogueras,
de bellas súcubos en las cuevas,
rezando los guerreros de ojos rojos,
de druidas los lobos,
y de las sílfides los pastos y rebaños,
las margaritas y las hiedras
que las ramas trepan.
De las salamandras de fuego el hierro,
y de ninfas el agua,
dioses combatiendo por el cielo,
mientras reyes celtas
con el deber de serpientes
poblar la tierra
como aconsejaba la tradición.
Para en prosperidad reinar.
Si en sueños llega la 1:30
bien vistosa te veo,
bien dulce te siento,
bien fiel te oígo dentro,
si nací ciego para verte con el corazón,
si no todo en la vida vida mía
con los ojos se ve,
dime sombra por qué has enamorado
cada parte de mi ser,
si existes por qué insistes
en transmitirme como sientes
si ya dentro vives,
si ya de ti me tienes,
si ya has asesinado mi soledad
y feliz voy a vivir contigo la eternidad.
El Castellano
JULIO 2012
Fuego de tus ojos, bosque eterno ardiendo,
ojos aroma de roble, ojos grano de café,
ojos aceitunados de olivo, ojos madera de pino,
ojos tierra de cultivo, ojos tuyos donde vivo,
ojos infierno de amor, tu mirada y su calor,
ojos tiernos y prendidos, ojos de noche y de
infinito,
ojos de brillo, de ilusión, que me tiene perdido,
ojitos tuyos de grillo, ojos sencillos y vivos,
con su paraíso escondido, con su cielo encerrado,
en ellos las nubes de mi ilusión,
con la llama de nuestra pasión.
Tú cuerpo formado con todas las flores
desangradas,
tu piel tersa de mariposa de seda,
pétalo de rosa amarilla, aroma de vodka,
tus besos vino de Dionisio que dan vida
a esta alma mitad artística mitad trágica
con sus años soñando que aparecieras.
Y de un lance pesqué mis sueños, me fundí
contigo,
mi mariposa, mi princesa, mi reina, mi hada,
mi bella amada, mi diosa y mi musa,
de mi cariño la florecita tierna, mi bella Margarita.
Verso y entraña, del suspiro la maraña,
anhelo, felicidad tocando el cielo,
nota tras nota, un compás de tus gemidos,
deseo traido por el viento,
estrellas que acarician tus pupilas,
envidia de aire que roza tu pelo,
envidia de la lluvia que moja tu cuerpo,
de los árboles que te dan sombra,
de la mascota que te lame con tus caricias,
celos del hombre que te mira, del sol que te
admira,
celos de mis ojos por verte tan bella.
Amor de destellos, de centellas por caricias,
de hada tus orejitas, de cuarzo tu sonrisa,
luz brotada de tu alma, melodía antigua nacida,
noche contigo su fuego azul,
canción de lobos nuestros latidos,
luna volviendose estrella para bañarte de aura,
energía fluyendo por la piel
en agua de tormenta meciéndose.
El aullido y el dulce retroceso, se dispara el placer
muerdo tu piel y acabo vencido entre la rosa.
Gota de rocío que se evapora con el sol en su
visita,
una caricia con un beso el despertar contigo,
un te quiero sincero y un te amo amado,
un chupetón acalorado, una sonrisa
y a vestirse de tus caricias.
Amor sin tiempo, amor completo, sencillo y eterno,
apasionado y bello, amor de tus ojos,
designio de unir nuestro camino y caminar juntos
la vida,
cabalgando sueños y saborearlos hechos
realidades.
Tu corazón, mi corazón, dos mitades un solo
latido de pasión.
Vuelve la línea melosa esa que te siente tan
preciosa.
Alma con alma pureza sin control,
nuestro universo llenándose de calor,
amapola nacida en el pecho,
con valor para luchar por ti y por mi,
con fuerza enraizada, del sentimiento suas
semillas,
bendiciones de diosa Flora, regadas por Zeus y
diosa Aurora.
Tu cuerpo cual droga,
tu recuerdo placer estremeciendo que recorre mi
cuerpo,
sentidos despiertos cuando te miro,
tu imagen navegando mi latido,
mi verso con el tuyo como beso con beso en uno
fundido.
Mi promesa junto a ti unir mi vida
y cuando al cuerpo le toque caer como hoja
caduca de otoño,
en otra vida volvernos a unir.
Corazón frágil muerto si te lastimo,
muerto si soltamos nuestras manos en este
destino,
vivo en tus ojos amor de dioses y tierra de flores,
vivo en alas de tu amor a sabiendas que soy tu
consentido,
vivo feliz y duermo cada noche en tu ombligo.
Mi beso para terminar este escrito,
caricia que te recorre el sentido.
Siempre y para siempre tuyo Esteban.
AGOSTO 2012
De tus besos nacen espigas de agua,
de tu corazón crece sin cesar la zarzamora
mis sentimientos acechando sus moras
cada latido que a mí diriges mil explosiones
en fragancias y esencias, mil piropos mecen tus
labios,
mis ilusiones se alimentan de tus sueños,
el camino trazado lo bordean las amapolas
envidiosas de nuestra pasión, hablan entre ellas,
encadenadas a la tierra quisieran tener tus bellas
piernas,
rojas de amor quisieran tener tu corazón,
y su copa tu bello interior.
Los primeros rayos de la aurora me traen
mil destellos donde desde lo simple de una flor
surge la esencia.
Donde una gota de tu amor bastó para incendiar
mis ojos,
donde te siento en cada letra y tu piel se hace
seda.
El ciprés protege a las almas que en la tierra
tienen su segunda vida,
Airón tiene su lago donde oculta la puerta del
abismo.
Si miras mis ojos puedes ver el acantilado,
las olas y el océano con nuestras ilusiones
navegando.
Voy allí a nuestro bosque mágico,
plácida dormida te encuentro en la torre,
el dragón está borracho,
acaricio tu vestido y lo muerdo despacio,
te despiertas y me ves,
pero te haces la dormida hasta el momento del
beso en tu piel.
Me coges la mano y guías su recorrido,
el árbol se despierta y lentamente giramos
envolviéndonos en besos, enredando nuestras
piernas.
Despierto del sueño y lentamente te siento,
de mi interior no te has ido,
pero tu bella en sueños no hablas,
en sueños no hablas y nos quedamos
besándonos a ciegas,
si un día se vuelve a cumplir el sueño te dije
siempre te amaré,
y con esa confesión sabrás como encontrarme
porque ahora vivo en tu corazón.
El Castellano
SEPTIEMBRE 2012
Te quiero como las flores al campo
y la enredadera a su soporte
amándote caballero y guerrero es mi porte
vuelvo a tenerte en mi horizonte
azul sediento de tus besos
y piel que arde como ascua
de tu recuerdo mantengo
las palabras eternas en el viento
y me visto de tus pestañeos
soy el mochuelo de tu olivo
y la serpiente de tu piedra
soy quien te posee entera
eres tú sueño y pasión
cazadora furtiva de mis latidos
la que acompaña
de su mano mi camino
y lo ando contigo
hasta el fin del abismo
y si el amor lo cura todo
tú me has sanado y salvado
me mantengo a tu lado
como el murciélago a su cueva
y el árbol a su tierra
siempre viva esta hoguera
veo tu cuerpo y mi deseo
se vuelve salvaje
te oigo cantar tu te amo
cada noche con tu abrazo
si he nacido para protegerte
cuidarte y amarte que mejor
que escuchar tus latidos dentro
y tener tu esencia
más allá de donde acaba el sentido
y mi sentido es en tus ojos
mantenerme vivo
si tengo el aura dorada o morada
no es problema
en tu interior tengo mi morada
hogar y danza
de nuestras almas en espiral.
El dragón celta
viviendo dentro del tronco
del árbol de la vida
el cáliz de sangre
que da alas de mariposa
para volar contigo mi hada
la espada siniestra mi libertad
y con ella me nombraron caballero
de tu bondad
mineral verde del dragón
esencia de fuego en el corazón
lobo blanco acariciando tus piernas
flor cantante
visión de espíritu suplicante
valle de bruma
flores blancas iluminando
abriéndose en semillas
viaje a un paraje de los andes
hueche a grito eterno
lit et summun canae
el mensaje que en sueños
me trae el ángel negro de ojos rojos
viendo celebrar la victoria
de la batalla del abismo
único con alas doradas
me veo allí abajo
entre soldados vestidos
como sombras
gran luz del arca se abre
en el campo de batalla
flechas certeras contra alados
otra victoria
me toca resucitar a caídos
para que formen en mis filas
una flor que no es de este mundo
veo abrirse en mi interior
desde ese sueño
la voz de un alma que me ama
cuido a mis fantasmas
energía violeta me absorbe en el sueño
y veo la creación de la vida en la tierra
veo vampiros en mi cueva
y ángeles negros a la par
recuerdo mi primer sueño místico
cielo rojo teñido de hierro
y espadas un druida en la montaña
que se eleva al cielo como cruz
veo un trono
y como criaturas pasean la oscuridad
ante la silla de piedra
se difumina
aparece una esfinge en el cielo
y un dragón con alas y cabeza de insecto
camino el bosque de noche
y veo en el suelo una entrada con escaleras
bajo y entro a una cripta
llena de columnas y una tumba abierta
dentro una mujer morena
preciosa sentada de rodillas
me mira piel tersa y blanca
pelo azabache mirada castaña
no deja de mirarme
la digo ¿puedo ayudarte?
de repente la veo con vestido blanco
a la orilla del río
empieza a dolerme la cabeza
y despierto aun a sí
sigo teniendo su voz dentro
cuando estoy despierto.
El Castellano
OCTUBRE 2012
Resurjo de estas cenizas
que me consumieron
alimento a este pájaro de fuego
que me habita
espíritu que surge entre hojas
y hojas de papel escritas
entre versos de sangre
y amapolas con pupilas negras,
vuelvo la hierba rojo carmesí a mi paso
vuelvo tus labios rosas terciopelo
a deseo de adentrarme dentro,
avanzo las flores de tu cuerpo
hasta morder tu cuello,
vuelvo al comienzo de este sentimiento
y echo leña a este fuego.
Noche plateada y nublada
pensando en tu preciosa cara,
quiero los dos árboles de tus ojos,
quiero su tierra de paraíso que guardan
y sustentan fijos en mi mirada,
quiero fundirme con tu saliva
en beso eterno
con la luna de testigo
y las ramas cantando al viento,
quiero que la lluvia nos cubra
y naveguemos a besos nuestros cuerpos.
Quiero abrazarte sin tiempo ni final,
quiero que me llames amor si gustas
porque yo ya te siento como tal ,
mi tierna, mi dulce, mi enamorada,
mi Jessica de la noche en su tierna cara.
Recorro tu cuerpo en sueño
y acaricio con mi sentimiento
cada tesoro tuyo.
De ilusiones se sustentan mis versos
y las palabras mías nunca se las lleva el viento
porque poesía es idioma de los dioses
y cada palabra es reflejo
de este corazón que te habla
en letras deshago el abecedario
y construyo mi hogar y templo eterno,
a ti mi princesa te quiero de musa
si tu corazón gusta.
En eternidad te dejo un momento tierno
en el que le canto al color de tu cabello,
y entro directo por tus ojos a abrazar tu corazón.
Vuela este pájaro de fuego
fénix resurgiendo cual demonio
que siglos espera ocupar
su lugar merecido en el cielo,
quiero tu amor domar y tu corazón habitar,
decidido estoy a en tu vida entrar
a lanza y letra, a que seas mi lucero y mi estrella,
yo solo quiero amar
pero decidido y convencido
que quiero amarte a ti.
Te dejo este beso travieso
y caricia que recorre tu cuerpo
te dejo mi verso y beso,
abro este corazón
exponiéndolo a que lo lastimen,
pero si tengo que sufrir dolor
solo quiero uno
el tuyo amor.
El Castellano
NOVIEMBRE 2012
Luna azul, luna siniestra te ilumina, caminas al filo
de la navaja
el sendero luce su cuchillo dorado al anochecer
la luz se la traga la tierra en soledad y penumbra
te escucho llamarme entre la hierba recién mojada
Te encuentro tumbada y tu recuerdo reciente me
besa
quedando el amor envuelto en mi entraña
escalo tu espalda como araña y como lobo
muerdo tus piernas te brindo mi daga
la noche tiembla entre gemido y gemido a la luna
azul.
El Castellano
DICIEMBRE 2012
Sangre en pétalos de rosas mordidas,
caricias de piel estremecidas,
luna sin sol, sol sin luna
en esta noche que solo brilla en el cielo
tu amor fulgente y ardiente,
tus minutos parecen horas,
y tus besos el inicio de mis latidos
del pecho anclados y a tu luz sumisos,
el momento de despojar la esencia de lo simple,
se construye como el deseo avanza,
corriendo, mordiendo, en placer sucumbiendo,
trepo tu cuerpo y como salamandra de fuego,
tu placer excito, tu piel derrito,
hasta ser dos quimeras de fuego
enganchadas a su trance de amor eterno.
El rey lucero baña de añil tu cuerpo,
y en tus ojos encuentro el campo celestial
donde vivir siendo tu guerrero hasta morir.
Avanzo el campo de amapolas
de ilusiones nacidas como la caricia
al sentir tu cuerpo pidiendo por el beso,
dulce y puro se lo sirvo,
como agua de arroyo y rama brotando en savia.
Lejos de este mundo empieza el nuestro
de pasión y verso,
de ternura e insomnio de sentimiento,
el latido se complace a encontrarte salvaje,
y el unísono es nuestro latir de dos corazones
en un mismo sentimiento anclados,
a florecer de nuestra boca los te amos,
verso tras beso eterno viviré este amor a tu lado,
mi hada, mi dama, mi bella amada,
tu mirar es mi morada,
en tu interior la bella calma,
para soñarte cada noche
y verte a mi lado en mi almohada.
Tu pierna a mí abrazada,
despierto pero al cerrar mis ojos te sigo viendo,
y lo que siento,
es que conmigo de amarte tanto dentro de mi
corazón,
te di hogar y templo,
surqué tu esencia y la encadené a mi pecho,
viviendo vivirte,
amando amarte,
siénteme porque siento como tu sientes,
amo que me ames y a la mañana el despertar
y a mi lado sentirte,
no sueltes mi mano porque yo nunca lo haré,
porque nunca morirá el recuerdo,
nunca sentiré tan hermoso,
y nunca podré verme sin tu amor ni tu cuerpo,
pues antes aquí mi cuerpo quedará muerto,
si muerto es sentir el mayor vacío por dentro,
cuando solo tu corazón
es complemento perfecto de este fuego,
y ardiendo me declaro tuyo
como la nube a su cielo
y como mi boca a tu boca en beso sin tiempo
y placer derritiendo el momento,
siempre a tu lado mi florecita,
mi margarita.
ENERO 2013
Amanecer despierto
en este horizonte de fuego,
como demonio antiguo
avanzo tu cuerpo
en tu pupila me deslumbro
sigo el camino de las rosas
en sangre su esencia de amor
me ahogo en el dulce tormento
que desvelaron tus labios,
tus caricias arropan mi sentimiento,
como condena
no encontrarte de nuevo
en este arrullo no huyo
en los latidos estallo
y la estrella quema el desvelo
de noches y noches soñando tu cuerpo,
hoy en tus mares fluyo,
hoy de tu calma me apodero
para nunca más ser sombra del pasado,
como la malva enraiza la tierra yerma
en tu recuerdo entierro
mi mayor ilusión
esa que nunca te abandonó,
si miras dentro de tu interior
allí estaré amor entonando
mi canción de amor
a las lunas sempiternas
que envolvieron tu ausencia corazón,
soledad con oscuridad
clama la espina de mi corazón ,
en la roja sábana de tu calor
quiero anidar mi ilusión,
anhelos como cuchillos clavados
en el cielo de recuerdos
horizonte gris que baña
este el mío cuerpo
a la cuarta campanada de las doce
en su mirada tiembla el mañana
quiere tu sonrisa amanecida
en mis labios descrita
como los rayos de sol de tus cabellos
y los pajarritos cantarán
en nuestra ventana
trayendo los amores imposibles
que separados nunca soltaron
el primer desvelo de sangre
enamorada del corazón,
hoy canto a esta sangre mi dolor,
años pasan despacio
a golpes de silencio luchando
con la templanza
luchando a golpe de olvido
separando nuestro destino
que se unió por un beso
y donde no llegué a entender
perdí las flores de tu piel,
caballero sediento en las batallas del ayer
como el inicio del sentimiento
vuela y gira por mi mente
como encontrarte siempre resplandeciente,
he venido a hierro a matar este silencio
he venido a beber las amapolas de tus labios
a decirte que recuerdo el sabor a fresa
de tu pintalabios,
a que en mis noches
quiero sacarte de mis ojos para tenerte,
y la sabana fría se viste de tu melodía
llega el violeta en su caricia
su voz del alma hecha súplica
de tu caricia,
grillete y cadena de mi espíritu
a amarte eternamente
hasta el final del latido
donde mi silencio se haga eco eterno
de tu recuerdo,
y la hiedra y cicutas envuelvan mi cuerpo
aquí quedará escrito este amor
que en dificultad
y sin saber años y años de tu mirar
late igual que ayer
por ver junto a mí tu caminar.
Te amo quizás sea algo
que nunca cambiará.
നുന്ചാ അസുമിര്ഇ മി ഫൈനല്
പൊര്ഖുഎ ടെ അമോ ടെ വെര്ദാദ്.
Como el entrañable verso
tu miel obtengo
este firmamento de amapolas
dibuja su dulce tormento,
gime un placer en malva envuelto
taciturno de tu piel
el sueño en su refugio,
siembro mis flores
arando tu alma
arañando tu calma
vistiendo de amor tu entraña,
en esta hora se desliza
suave la sabana
y en su nube
bebo cada gota de agua
de tu boca,
me duermo en tu arrullo
por tus senderos fluyo,
voy al campo del placer despierto
estallo el sentimiento
fundiéndome en tu cuerpo,
siendo serpiente de tu arena
de tu espalda enredadera
lamo tu caricia tierna,
bebo de tu cuello mi reina,
rasga la sombra
en el violeta de la rama,
lucen las estrellas
en sosiego a la luna de plata
que en violeta deja su espada
los árboles cantan con el viento
en sus veredas
donde el grillo de galán
cantaba a la noche su ranchera,
encuentro plácida la sonrisa
tu pupila nunca descrita
encierra tu cielo de ilusión
que quiero domar
acompáñame este sueño,
sé mi luz en el camino,
la esperanza de junto a ti
mirarme en tu corazón
bello y bueno sin razón
donde el mundo jamás
apagó la esperanza de su ilusión
unirme en el fin del tiempo
a tu alma corazón,
cabalgo contigo los trazos de un destino
que incluso en soledad y dolor
siempre dependió de mirarme en tus ojos
flor de amor,
con la gota de luz en su ventana
jamás abandonó a su inspiración
calma de su dolor
el sueño solitario jamás abandonó
de él se decía que solo quería comprender al amor,
verso tras verso la conoció
flor de inspiración
prendió en fuego el pecho
y nunca le abandonó,
baila la rosa con el clavel
afilándose el nervio de amor indomable,
desbordándose el reguero de la sangre
y su calor, desangrándose de tu piel
cada flor que te forma y conforma
llegando al éxtasis del placer
llorado en tus labios
segundo tras segundo el tiempo muerto
vio vencer el amor eterno
donde dos corazones
se fundieron a la noche en el silencio
estridente de su amor,
donde el cielo se abrió
para dar paso al rojo
como por tu lindo cuerpo mi atracción,
condenado el tiempo me visto de tu recuerdo,
donde horas pasan de largo
pero cada noche se repite
mi dulce tormento
de en mi mente verte sin necesitar tenerte,
como un paréntesis del destino
tu imagen siempre quedó
como el beso robó mi alma
declarando que te llevaste contigo
medio corazón,
desafiando a este cielo
por no poder tener tu cuerpo,
por no poder tener tu beso de nuevo
hoy como ayer aquí quedará escrita mi sangre
en cada amanecer
y si algún día te vuelvo a ver
sabré que hice bien en seguir vivo
como ilusión de volver a tener
el brillo en tus ojitos
como aquel anochecer.
Pregunta al mundo
si en mi interior te olvidé
si las noches que te soñé
no pedí al cielo que se cumpliese piel con piel,
te amo mi pequeña rosa amarilla del ayer,
clamo en la tristeza de mi ser
suplicando a este universo volverte a ver
y quizás un día en el camino inesperado
nuestros corazones encadenar
sabiendo que vendería cada mañana
por un ayer contigo amor,
solo sé que sigo vivo
por este dolor de años y años
sin el arrullo de tu voz
sin sentirme afortunado por tenerte a mi lado,
no dejaré nunca el agua correr,
si un día te vuelvo a ver
te seguiré perteneciendo como ayer.
Y hoy como ayer
en tu corazón quiero renacer
a flor de fuego y piel.
FEBRERO 2013
Viento, viento bonito
lleva al cielo cada escrito
arropa este amor en mi cuerpo
en mi corazón te llevo
hadita de mi sentimiento
noche hoy en tu sosiego me encuentro
entre nubes violetas
y el cristal luminoso
de esta luna de invierno
bañan mi cuerpo tus latidos
sordos de oscuridad
y a este cielo sonámbulo
lanzo mis ilusiones al viento
siento tu caricia de alma
y te bebes mi calma
despierta esta rosa sangrienta
y su aroma de romance antiguo
atraviesa el pecho tu amapola
eterna primavera
cuando mis ojos te ven entera
cada sentido despierto
como fiera al acecho de tu latido
hoy en tu bosque me pierdo
tu imagen surca mis sueños
como cada noche que siento tu beso
y como me cuidas,
como soy yo tu alegría
mi vida vistes de amanecida dicha,
hoy la hierba escala mi montaña
la lluvia germina todas mis semillas
de pasión y fuego,
donde entero me entrego
al placer que muerde
y envuelve en margaritas,
como sencilla tu sonrisa
y tierna tu caricia,
ya no hay súplicas
solo felicidad desbordando mis cauces,
te sostengo fuerte en mis brazos
para nunca soltarte
para eterno tenerte
si por soñar soñé acabar con la soledad fría
y escarcha de esta melancolía
llegaste tú a mi vida
como cada noche siento tu melodía
y me acompañas cada día,
salió el sol después de la tormenta
y ame tu esencia
regando mi interior tu voz de alma amada
tu bella y dorada calma,
rompí las cadenas que me anclaban al pasado
para luchar por mis sueños y alcanzarlos,
entendí el idioma del silencio
y hoy contigo
lento construyo mis escaleras al cielo,
este firmamento clama de azul sediento,
ermitaño en su montaña del sentimiento
el amor jamás salió de su cuerpo,
de él decían que quería comprender al amor,
tras una flor la conoció y la preguntó
qué eres, amor,
no solo nací de esta flor
tu inocencia me enamoró,
curaré tus heridas de dolor
viviré de tu amor.
Vuelvo a este dulce tormento
buscando llenar de amor el cielo,
labrando el campo de tu alma
y bella mi amada
te bajaré las estrellas para que puedas acariciarlas,
estas flores cantan la canción
que te enamora el corazón
vuelvo a luchar como ayer
con tu amor jamás desfalleceré
eterno en tus alas viviré.
Sangre y verso
mi dulce tormento
ruge mi calma
por verte a ti mi princesa
a cada momento,
quiero regar de amor tu cuerpo
que sientas rugir la pasión en tu cuello
besar todas las amapolas
de tu cuerpo
cantar a este horizonte
la vuelta del amor a mi cuerpo,
quiero ser tu bella calma
tu verde esperanza
la locura de tu corazón
quiero a fuego morder cada flor
que forma tu cuerpo,
si por soñar soñé en besarte sin tiempo
en tu fuego quedé preso
viendo la amapola florecer del pecho,
a esta luna que solo pido
el calor de tu cuerpo
pido domar tu ternura
como fuego con fuego
crece el calor
me lleno de piropos para tu corazón
cuando solo tú quedaste como esperanza
para salvar este el mío corazón
que sangró en la avenida
de ángeles estrellados en estrellas
y árboles cantando al viento su amor,
en este mundo perdóname
porque solo quiero tu calor
llenar de rojo tu ilusión
quién pinto el cielo en colores a su amada,
merecerá la eternidad en su mirada
como azul sediento que afila su sentimiento,
escudero de tu latido
dando fuerza al amor sentido,
quiero vivir en tu latido
que sientas que te cuido
noble ilusión de este corazoncito,
mi cielo gris prendiste en llamas,
gracias a ti porque tus ojitos se fijaron en mí,
ámame sin tiempo
siente esta inspiración sin tiempo
donde el alma exclama su amor al viento,
y como pasión insostenida
me pierdo en tus secretos,
te ofrezco mi cielo
solo tú lo cuidarás con esmero
quimera de mi fuego,
mi sentimiento despierto
mi estrella en el camino inesperado
que unió nuestro sentir
en la eternidad del amor indomable
que quiero sembrar,
como a mi lado quiero tu caminar
hasta en amor podernos juntar,
luz compañera
fuego de este latido en flor,
no me abandones,
junta tu ilusión en mi pecho,
bebe de mi cuerpo,
en este momento te siento
ardiendo dentro
mi flor de invierno,
llorando el tiempo
deseando juntarme a ti eterno,
como cada amanecer que quiero encontrarte
acariciando mi pelo
ronroneando en mi pecho
donde sin ternura no hay sentimiento
y donde sin tu mirada muero,
en llamas te abrigo en mi pecho
siente esta sangre en verso
que enamorada mi boca pide tu beso,
pudiendo ser y siendo tú
mi maravilla y salvación
como melodía de amor
canto en tu corazón
esperando unir mi latido al tuyo corazón,
guerrero de tus batallas
seré en este cielo
que solo pido tu amor
por ser tú mi dulce y tierno deseo,
como sabrás empiezo amarte
en cada noche que los luceros te envidian
de bonita como linda flor nunca descrita,
a cada día que tus cabellos
como rayos de sol quiero sentir
entre mis dedos
y pintar tus labios a besos
sentir tu aliento preso del sentimiento
que araña tu cuerpo
despojando de su silencio el tormento
de no saber como pedir
y acariciar tu mano ç
princesa ardiendo
de mi sentimiento
por ti siempre en rosas y fuego envuelto,
sienteme avanzando tu cuerpo
hoy tu sangre fluyo
donde quiero vivir tu calor
y quemarme mil veces en tu pasión
de mil luceros,
si querer quiero sentirte
como tormenta de pasión
e incendio de mi corazón
si de tierna te deseo
como estas ilusiones
germinan en amapolas de sangre
mi corazón si de valor lucharé
por tu amor bello corazón
queriendo juntar mi calor contigo
hasta morir de placer en tus labios
como pétalos de rosas
siendo abeja de tu miel
y enredadera que abraza tu piel
siendo quimera de piel verso
y entraña como entrañable
encontrarte en mi presente
que solo pido al cielo
me vista de flores cada recuerdo,
donde princesa de fuego
reina de este sentimiento preso
queriendo habitar por siembre
el latido de tu corazoncito
como en verso te dejo
este besito.
MARZO 2013
Semilla tras semilla nace la dicha,
en tu pupila musita mi vida.
Hoguera encendida, verso, beso y canto,
al horizonte mi encanto.
Vuelo libre, escribo,
siento tu susurro en mi oído.
Ven, ven conmigo.
A través de las colinas, sierras y ríos
surca mi alma el camino.
Bosque, bosque encantado y bonito
vengo a ofrecerte mi aullido.
Mi hada de voz encantada,
dentro de mi alma tu esencia amada.
Visten las hojas tu cuerpo,
en las flores tu melodía encuentro.
Quiero cumplir tus deseos
como la lluvia hace el amor con las plantas,
que nunca estés triste,
quiero tener tu canto siempre alto
y de flores tu manto.
Detengamos el tiempo cada noche
en nuestro regazo,
para sentir eterno el abrazo.
Donde la luna abrigará el recuerdo.
Quiero seguir tu trance día a día
para encontrar dulce la caricia
y el beso de fuego, ardiendo en el labio.
Te siento a mi lado,
fluye la ternura por tu piel
y en tus ojos me vuelvo a ver.
Cada sentido despierto,
gimiendo el alarido,
soñando tu mundo cada día me encuentro.
Feliz el alma de que seas mi amada,
tu dulce primavera riega mi sangre.
Te descubro en cada pensamiento,
devolviendo la alegría de nuevo.
Libre en tus alas permanezco,
viendo el amor enraizar dentro.
Libre el intento abordo tus secretos,
me pierdo en tus besos,
alcanzo la flor del helecho,
surco la puerta de tu reino.
Bienvenido tu calor a mi cuerpo
y la inspiración de fuego.
Muerta la hora, viste la calma de tu alma,
protectora, compañera.
Mi dulce dama, mi enamorada,
mi sentir en la montaña,
me casé con tu latido escrito
y aquí como ayer
darán los jazmines
el aroma a cada letra
nacida de tus jardines.
Vuelas libre mariposa del amor
en mi pecho te posaste
volviéndolo hermosa flor,
hoy te canto que feliz,
de la vida y de ti,
me siento enamorado.
Hoguera en el círculo de piedra,
danzan las estrellas,
la luna y su polvo de nieve,
alegre, crea el sosiego del firmamento.
En fuego, corazón de mi corazón,
jardín de color,
de deseo prendido en tu calor.
Seguirá el destello su camino
de alma viajante.
Hasta en cada raíz siempre encontrarte.
Pensativa mi hada entre las hojas,
se acercarán a ella las mariposas.
Atraparé el verso sin descanso,
siempre de su flor hallaran sus tesoros
mis manos.
Corre el placer libre por el monte,
de flores campestres vestirán las ilusiones.
La piel tersa de seda encontrará los labios
y sus besos de estrella.
A cada luna reina y sol invencible,
orgullosos los astros
lejos se estrechan la mano.
Entre silenciosa oscuridad
ven el violeta de la sombra
estos ojos de insecto
que cambian de color el cielo.
Si el amor me dejara
bien sabe mi alma
que me quedaré con cada flor
que siembren mis manos.
Altivos los ángeles con sus halos
volverán a sembrar la vida como antaño.
Beso tras beso en tus pestañas vivo,
brillo amanecido,
de ilusión en tu bosque de ojos.
Vuelvo a vivir de tus deseos
y en verde se dibujan mis sueños,
como esperanza esperando
vestir mis flores de calma.
El sosiego viene de la noche compañera
a cada latido sordo,
a cada eco de ternura
sembrada entera.
Cruzaré cada camino sin retorno
hasta libre el espíritu
ser uno más entre vidas libres.
Servirá mi canto para desvanecer el llanto,
encontraré de mi hada cada noche el encanto.
Prepararán los indios su amaranto.
Seguiré la estela de la luz viajera,
descansaré en el remanso de la era.
Verá la semilla mi resurrección
y el resurgir de cada sangre de letra.
Crecerán las amapolas al borde de mi camino
los cardillos silvestres abandonarán sus espinas.
Abrigaré el amor del pecho
en mi viaje a encontrarte.
En mi viaje a encontrarme,
en el azul celeste
y la madera de los árboles.
En el viento y el rayo de sol primero,
donde gracias a ti encuentro la fuerza
para seguir escribiendo,
muerta la espera,
veré crecer de mi amor la siembra.
ABRIL 2013
No sabría decir cuántas veces había estado allí, sentado, sintiendo como todo a su alrededor se desvanecía, escuchando a la ciudad respirar, sentado en aquel banco de madrugada donde tuvo su primer beso. Se entretenía viendo las luces de la ciudad y aquel semáforo verde, amarillo, rojo, rojo, verde, amarillo, esperando en aquel banco a su amor que se marchó, una de esas noches una polilla se le posó y le dijo: -Ella vendrá, él creyó estar alucinando. Lo que él no sabía es que él ya estaba muerto.
Alegría, gozosa, fría, amarilla,
se siente tu caricia
cuando el corazón en ardor
pinta y pone rostro al amor
en su color.
Flor de luz en este linde creció,
sinfonía de su juventud.
Pétalos del color del sol.
Certero reflejo de tu ser
clavaste en mi tierra de calma.
Arriba, altiva,
a sí como eres
quiero sentirte cada día,
a sí como tu reguero de ilusión
me colmó
y cada noche me arropó,
a sí como tierna, ilusionada
encontré tu voz.
Podrán pasar semanas a la distancia
pero tu hechizo ya está en el alma
arraigado.
En mi armonía
te adueñaste de cada palabra,
este duende soledad vestía
como azul noche sin brisa.
Ahora me acompañas
siendo cómplice y sombra
de mi alegría.
Entre montañas de azores y valles de ríos dulces, ven pasar mi espada árboles antiguos
cobijando a los caídos, ven lejos los astros orgullosos de sí mismos, desconocen el hijo del viento que va por los caminos, ¿Dónde irá ese hombre?, sólo él lo sabe, a una sidhe le prometió una flor de la montaña más remota.
Con raíces la trajo sin un solo pétalo perdido, a la orilla del río la puso, a la orilla del río ella lo quiso. Cada primavera iba a visitarla, cada primavera su flor de color distinto vistió.
Un año notó triste a su flor, extrañaba su montaña. Su hada le pidió piedras y tierra de donde fue encontrada, a si lo quiso, a sí sería.
Al llegar a la montaña en el lugar de donde estaba la flor, allí una serpiente sabia encontró, cual ella le dijo:
Si muere esa flor morirá tu alma,
-¿Qué misterios entraña pues dicha hermosa flor?
Es hija de los cielos como tú, contestó. Sí quieres saber más pregunta a la reina de las mariposas, que yo estoy tomando el sol.
Cogió las piedras y tierra y marchó, en el camino una mariposa se posó en su hombro,
le dijo al oído sígueme mi madre te espera en el bosque, allí fue, la reina de las mariposas, le dijo que esa flor fue de las más antiguas en crecer después de los helechos,
tan antigua que tenía capacidad de sentir intacta como los humanos.
De ella se despidió tras darla permiso para beber de su néctar.
Rodeando la flor puso la tierra y las piedras, decidió tras el consejo de la serpiente y de la reina mariposa, visitar a la flor cada mañana.
Su hada también se alegró y de él se enamoró, en amor juntos vivieron.
Un día la flor se cerró,
en su interior semillas latieron hasta caer a la tierra con las primeras lluvias;
de cada una de ellas, brotaron plantas jóvenes con los colores del arco-iris en sus hojas,
de cada semilla de esa antigua flor despertaron las hijas sidhe;
hadas que cuidaron el bosque y cada arroyo, ese fue su origen.
MAYO 2013
¿Ves que algo halla cambiado?
veo que eres la misma piedra de silencio
que en mineral de sangre brota.
Y tú yedra de campanas taciturnas
¿Qué esperas de esta existencia?
Acariciar el recuerdo
clavar la tierra con un beso
ser expresión de algo que no cambió
y fue polvo del polvo.
Y tú voz de sangre ¿Qué buscas en el amor?
Busco esencia tras la forma
reflejo y destello de rayo de sol
busco calor y espejo de vida en ardor.
Quizás sonrisa y su caricia.
¿Ves como nada ha cambiado?
Sigo amándote porque tienes
todo lo que no puedo tener.
Indómito palpitar entre noches que dibujan tu silueta,
entre suspiros que exaltan tu belleza invernada.
Recuerdos del frío que te tenía yerta, a mí abrazada.
Cada caricia que sentía tu piel de flores repleta,
cada beso que sentía la lluvia nacer de tus labios.
Ahora es tu sombra la que me guarda,
la que en cada sueño se acurruca en mi almohada.
Es tu mirada algo más, es hoguera que ahuyenta mis fríos,
es brillo y bosque que habité, es donde quiero renacer.
Ecos de tu ternura aún me bañan, aún acampan mi alma
y es en esta calma donde veo que mi corazón te ama.
Vistió la estrella su estela arropando nuestro amanecer.
Este fuego no se apagó, se alimentó de tus latidos sembrados.
Entre mis jardines de sangre mi amor surcó,
entre mis ojos deslumbró y mi ilusión tocó
hondo, quedando todos mis anhelos en tu mirada atrapados.
JUNIO 2013
Descuelgo en tus alas
mi impetuoso servir a tu cantar.
Me adueño de aquel néctar
desvelo de tu silueta.
Donde derrama
el sueño enarbolado de mi calma
que atrapa clamor de fulgores.
Entre tus pupilas que musitan
quédate siempre.
Descampado de ilusiones donde naces
y mi interior floreces.
Oh flor de embeleso,
cristal de tu aliento,
corren puras tus aguas
en los suspiros
donde no encuentro olvido.
Sólo reflejos de tus ojos
a cada hora que se cuela en mi ventana.
Quiero perderme en tu inspiración,
clavar un firmamento con tu sabor,
ser viento que te lleva lo que siento,
ser piel de esencia en tu cuerpo,
rayo que rompe el silencio.
Para tus ojos quizás
solo poeta enamorado,
letra en tu cariño,
jardín en tus recuerdos,
quizás sólo quiera ser yo en tu sonrisa.
Camino tu cielo sin prisa,
me dibujo óleo de tu aliento.
Un nudo de tu destino,
una gota de luz que acampa tu alma.
Quiero ser un latir en tu mirada.
Corre el beso, se afila el verso.
Desafío a este silencio.
Cierro mis ojos y dentro te veo,
sólo sueño
y tu destello se vuelve maravilla
en sus pétalos iridiscentes.
En tus pupilas se disuelve mi vida,
vida.
Te bebes mis nervios
y entre jardines noctámbulos amanezco.
Surcando tu cabello azabache,
vendiendo mis mañanas
por el ayer a tu lado acurrucado.
Efímero el segundo
descansa en tu parpadeo.
Cruzando el río de mi adentro te veo,
dando vida al dulce tormento,
ese que me tiene pintándote de ternura
un firmamento,
del color de tu alma pura.
De tus labios tomo la dulzura,
remolino de cariño te vas volviendo,
cuando tu cuerpo manantial secreto
observa como el agua y la poesía
hacen el amor.
JULIO 2013
Desde un confín a otro confín,
sueña nuestro beso tu voz añil.
Resplandece la hoja quieta,
vive la sílaba en tu boca inquieta
dulce la espera es del agua,
y del agua nació tu lengua.
Respira la noche trenzada a tu pelo,
un calor que quiso ser hielo.
De azul viento bebí tu aliento
firmamento de amor sediento,
escaleras a tu cielo mueve el velo
despierto el placer te celo.
Tu piel, esquiva sangre de pétalo,
destello tierno de tu halo.
Refugio tu corazón, de mi sueño
donde el sentimiento pone empeño.
Desde tu latido al mío,
una flor a la orilla del río.
Desde que te conocí
eres la mejor locura que sentí.
Quiero ser el viento que te besa,
quiero ser la noche que te sueña.
Desde hoy hasta siempre,
desde hoy quiero ser lumbre.
Ven
Creo en la noche de tus labios
que de un latir deshojaron
un tímido beso de amor exhalado.
Me veo en la noche de tus ojos
donde camina el mar
de los suspiros convencidos
en sueño y deseo envuelto,
en alma llamando a mi llama.
Me pierdo en la noche de tu pelo
moldeando caracolas mis dedos,
te beso siendo dueño de tu lengua,
te acaricio en el recuerdo,
me quedo en tus raíces
de piel y encanto,
de colores el cielo de tu noche
que guardo,
como roce de tus labios.
Creo en la noche de los sueños
que contigo se cumplieron,
por eso creo en tu noche
por todas aquellas noches
que nos robamos sin derroche.
Creo en el momento
que venció eterno.
Renaciendo en cada luna
que pensábamos nuestra.
Como runa a la pregunta de tu ternura,
como sendero sin cordura,
viendo que dulce, eres pétalo,
y víctima de nuestro ensueño alzado.
Hoy sin prisa avanzo tu río
siendo sombra de tejo,
y entero ciprés clavado a tu cielo.
Hoy no encuentro desdén
donde acabar el beso, sólo ven,
se mi noche otra vez.
AGOSTO 2013
Cuando escribo
vive el alma
en la palabra nunca dicha,
cuando te leo
encuentro sentido
a la flor que nace dentro
hoy te veo
donde ayer no tenía ojos
hoy te encuentro
en esta piedra-corazón
que fue estrella
el verso se abre
brota esta sangre
olvido que es tristeza
olvido que perdí el camino
olvido que viví
hasta que te vi
amapola del destino.
No quiero despertar del sueño
del que en otra vida te conocí.
Muero por un beso,
vivo por tu querer
sueño del que te llama mi piel,
dulce susurro
en el arrullo de tu cielo,
llamo al instinto
que despierto
bebió de tu cuerpo.
No hace falta
encadenarme
para ser tu sombra
para ser aullido
y lumbre en tu camino.
Sólo nos vimos
y nuestras almas jugaron
a abrazarse sin tiempo,
condena de tu pestañeo
entrega en calor que guarda,
giro en tu sentido
amarte sin razón
solo corazón.
En alas de la pasión,
te encontré
donde gritaba el amor.
De tu boca la fuente
si tan siquiera pudiera
adornar tus afluentes
engalanar de tu piel
las flores y tu sabor.
Si tan solo tus parajes
me recordasen infiernos
y pasiones.
Si solo tus cauces
navegasen mis manos.
Si solo entre tus juncos
me encontrase.
Amaría lo que ya amo
tu sencillez sin disfraces
tu calor entre el sol
y una nube,
amarte entre el viento
y la brisa
dibujarte la sonrisa.
Nunca sería tarde
nunca dejaría el sueño
sin ser tapiz de tu pelo,
Si tan solo pudiese
dibujarte un cielo
solo para nosotros dos,
tan solo buscaría
el poema para acariciarte
sin prisa tus ojos de oliva.
Despertaría los jazmines
y azahares mecidos
los lirios en tu cuerpo,
entre tempestades
nacerían suspiros salvajes.
De nuestras almas hoguera
de tu hoja quieta
mi verdad que tiembla,
mirarme en la noche
sedienta
que tu lengua diga tuya
y tuya la ternura,
mía la ambrosía.
SEPTIEMBRE 2013
Romance:
Suena el río, agua llevaba,
alma de reina silva ella,
bebía en la orilla alegre
flor roja lloró su tierra,
blanca cierva un hada triste
cazador hiere su flecha,
inhiesta espina gemía
flor abierta brotó en la hierba,
hada herida ya descansa
latiendo la parca negra,
yace en helecho silente
suspira su sangre yerta;
Enamorado el helecho
una flor mágica asienta,
alma quieta, llega al agua,
tambores suenan la tierra
los duendes lloran su reina
ahora el helecho era ella,
mueven la piedra ocultada
cazador tropieza cerca,
el río ya lo llevaba,
hada flor de helecho no hierra
duendes cobraron venganza,
cantó lo que el bosque alberga
misterio de su cierva hada.
Hada flor de helecho inverna,
cicutas toman la sangre
veneno hacen, blanca cierva
cuervos la cena discuten,
cazador en agua envuelta
lleva el río su latido,
campanillas suena la hierba
duendes coronaban su hada,
hada su vida celebra
los espinos la cuidaban;
Flor de helecho reina bella.
-
Halle donde me halle,
crecerá del viento
la semilla en su valle.
La hoja muda criará
retoños del ciprés,
mi sol dormirá.
El pececillo de plata
correrá, morderá,
el azúcar de mi sonata.
La dulce cicuta triste
mi piel enraizará,
mi alma dirá viviste.
La nube llorará
mi grama mojada,
el sueño perdurará.
Luna de plata sempiterna
y su réquiem elevado,
mi montaña de nieve eterna.
El río llevará un latido,
nacerán las gotas,
mi árbol será sentido.
Olmo viejo en retozo,
raíz de su padre,
alma anclada en gozo.
Almendro de invierno,
sombra de abeja
deshace mi infierno.
Caracol de mi camino,
encuentra la mata,
olvida el romero su destino.
Tierra viví para sembrarte
mi aliento ciego,
brotado para nunca olvidarte.
Golondrina de solsticio,
vuela tu fuego en círculo,
que tus ojos sean mi vicio.
Amapola de rojo,
sangra mi tierra a tu antojo,
ama mi sed de arrojo.
Cielo pequeño alcánzame
mágico el sonido,
tiene el viento quien le reclame.
Olivo de sembradío,
trigal de sentido,
naranjo de mi regadío.
Salamanquesa de pared
bebe de mis plantas
tu sed.
Helecho de bosque sombrío
alegra el verso seco,
luce la golondrinera su brío.
Hada de mi zarzamora,
tu pena vuelta mora,
espino amarillo de mi demora.
Hierro luce mi espada
esta calma otoñada
mi vida de tu savia preñada.
Salvaje canto de la madrugada,
grillo de galán de noche,
blanca dama de noche, su flor estrellada.
Hinojo al fuego,
semilla de sol latiendo
mi curativo ruego.
Abrojo de campo,
celoso canto de silencio,
muerto en vilo mi tiempo.
Surco de piel labrada,
saco de mis esperanzas,
placer de aquella parada.
Ola de mar que llega
caracola que entona
en sal y arena.
Vid de mi quimera,
uva pasa en la espera,
flor abierta de primavera.
Pozo de mi recuerdo,
en verde musgo un fantasma
de lo vivido muerdo.
Corazón te abrí,
te sentí,
y voló un colibrí.
OCTUBRE 2013
Este duende soledad vestía,
como azul noche sin brisa
en el párpado quedó
cada rasguño a la luna de caramelo,
hoy te siento despojada mi noche
de lamentos vividos
hoy mi pena te encuentra serena
en mi sangre de tierra
hoy los juncos mecen
orillas y yerbas de tu monte
cuerpo divino, olivos
de nuestro paraíso extinto,
hiedra que me trepas
las ganas despiertas,
camino sin prisa
las avenidas de ángeles
estrellados en estrellas,
el asfalto enmudece las palabras bebidas
los semáforos me caminan las soledades,
el hielo se siente cada noche
en la ciudad sin nombre
en los trajes caminantes,
en los gorriones de migas de pan
en los pasos que me llevan a verte
en las calles de mi mente
echo laberinto de peldaños
para alcanzar tu amor,
para comer tu sabor,
conduzco mi camino sin retorno
mordiendo tu sombra pasajera,
el mañana nunca llega
la noche se apodera de cristales en luna
espero en la estación de tu beso,
el matojo vierte flores blancas
entre niebla naciente que desdibuja cuerpos
canciones sin tiempo
palabras a un viento que nunca
nunca fue traicionero
poeta del viento a lo que me califico
de no encontrar razón
a la tempestad de más que trajo
tu aliento bendecido
en cada flor y en cada árbol
de mi pasión,
hoy tus nubes son manjares,
los ríos llevan mi calor,
la cueva se abre al clamor,
estoy clavado en mi arteria de vida
bebiendo la sinfonía,
buscando mi futuro
en las hojas de pétalos dormidos,
quién eres tú que acechas el sentimiento
la guerra tornó de invierno
el corazón soñó el verso
el latido caminó los edificios
las grises verdades caían por los afluentes
los refugios fueron templo en tu piel,
lo vivido se derrumbó como torres de papel,
desperté del eterno sueño que me encadenaba,
mi esencia hablaba de tu flor encontrada
porque sí por qué no
ardiente corazón,
el sí bemol transparente pío
lunática cuerda de mi violín afilada
confín de mi confín que vuelo
hasta llegar a ti,
destino encontrado errores comidos
errores perdidos en el camino
resurgir en las alas blancas de la ilusión
que mece y mece, en cada piropo que te engrandece,
fuego donde te veo
y el sentido despierto se hace fíbula en tu vestido,
destello de nuestro astro soslayado,
luces oscuras que pierden tus caminos,
avenidas de tu lengua descubiertas
cielo de piedras vuelto alfiler de mi albor,
rosas acampan el alma
al viento le cuelgo el sentir
de mariposas nocturnas volándote las luces,
las farolas me tiemblan
la ciudad se me vuelve laberinto sin salida
y huyo al campo de tu cuerpo,
huyo en mi silencio
con un poema y una letra de tu boca
lluvia cae visten mis latidos
profecías de tus caricias,
en los cipreses muertos que velan,
arañas mías que cazan tus mariposas,
déjame caer en el amor que vuelve de tu piel
déjame amar nuestro verdadero amanecer
sin importar nada más que tus pupilas
en mis calles perdidas.
Resplandor templado
en el calor ilusionado
tus flores conocieron mis manos
y mis manos te dibujaron
tempestad de tus latidos
brotando la acacia del sentimiento
en mi montaña de fríos
pupila de tu pupila
que me mira
allí donde el grito
corre transverso
quisiera hablarte del miedo perdido
del suspiro que vuela a abrazarte
estas nubes me sangran
y tus alas me caen
evaporando el aliento.
Luna de tus caricias en vela quieta
cielo de mis sombras
obtuso, vertical,
cae el alarido
en la habitación oscura
que la fiebre te siente
el humo desdibuja tu silueta
es el abrazo
cuando te espero
y la almohada se vuelve
lecho de cardos sin tu presencia
sangra el aliento
dragones y riendas
con sentido a encontrarte
a través de sombras que hablan
de un destino encontrado
en tu flor de pieles.
Hielo erguido
noche con tu abrigo
allí donde las estrellas derretidas
caen por las pestañas sentidas
nervios punzantes
la pócima del clamor
que te bebe el cuerpo
allí donde nada dice el tiempo
y la brisa trae párpados en guiños
grazna el cuervo un piropo sostenido
todo se vuelve cuerda y soga
para treparte
ya no hay pesadilla
solo caricia y camino de flores
para besarte
las zarzas me clavan
los deseos con tu nombre.
NOVIEMBRE 2013
Plubia amôris
Plubia cordis, ardentissime cupere amóris
stupóris, dêsíderium, sempiternusa laetitia.
Diês, carpentum, accrêvî calôris.
Colôris, vita, venerâvî canôris.
Laetitia exspectâre, cupitum nostra.
Ostendi âlae, festînâvî blanditia.
Cropinquus, somnus, versus, littera.
Prôfêcî imus, creâvî blandus.
Bâsium dulcis, aqua pûrus.
Sânô anima, fidus fruor.
Cupidus somnus, flagrô metaphora,
suspirium natura, amâvî ferventis.
Distantia dêstinâvî dedisco côgitâtum.
Volui pûrus, sôlus cordis.
Callis unus, sentido sensisensum.
Fôrmôsa societas, contentum esse vêris.
Ignis, dêlectô noster appetîtus fôrmôsus.
El Castellano
Lluvia amor
Lluvia corazón, suspira por ti amor
estupor, deseo, eterna alegría.
Día, noche, crece calor.
Color, vida, venerada sinfonía.
Alegría soñada, deseada nuestra.
Muestra alas, acelera caricia.
Cercanía, sueño, verso, letra.
Entra profundo, crea sonrisa.
Beso dulce, agua pura.
Cura alma, sinceridad uso.
Deseoso sueño, arde metáfora
suspira esencia, amando fogoso.
Distancia decreta olvido de razón.
Querer puro, solo corazón.
Vía una(vida mía), sentir.
Hermosa compañía, contentarse primavera.
Fuego, complaciendo instinto hermoso.
Miguel Esteban Martínez García
DICIEMBRE 2013
¿Por qué brillas amor en la noche que todo lo cubre de negro,
¿por qué tu nombre me llama
y resalta tu bella silueta alada?,
¿por qué tu voz me suena del río a la montaña?
¿Por qué me brillas en esta oscuridad que te resalta?,
y te amo más que a mi sangre mi bruja.
Te amo más que a una lagartija azul,
te amo más que a un erizo blanco y a un gamusino dorado,
eres mi culebrita ardiente yo tu fiel para enroscarme contigo,
te veo desde el cielo al violeta eterno,
ardiente de embrujo duermo a tu lado siendo duende,
eres flor silvestre y luna morena
eres mi vida entera, lo más bonito que tengo
y todo lo que alcancé a soñar fuiste tú mi reina,
ven, ven aqui mi reina, mi fantasma tierna,
mi aullido a la luna llena,
la luz de mi noche negra,
quemaré esta tierra para regir mi reino de sangre y letra,
ven a mí mi primavera quieta, mi violeta yerta,
mi amada mi vida entera,
te haré la corona de cardillos silvestres,
la crineja te la haré de hojas,
el pañuelo de seda fina y tela de araña
ven ven a mi vera mi preciosa mi loba,
mi amada fiera, aúllo al cielo de tus besos,
clamo a la sangre de mis versos
que eres lo más bonito de mi mundo
tú mi vida solo tú eres mi mundo.
Dulce simiente
Del monte a la montaña,
del valle a mi río
de sangre pasa mi río
de sangre de un amor que se comió mi miedo
de un amor que fue lo más grande en mi vida
que mi sentimiento sea gigante,
y mi arteria se hinche del beso de calor y amor,
cuando amarte se hace arte,
y todo pierde el sentido
y el miedo solo avanza en un sentido
perderte como castigo inimaginable,
y mi demonio te hace alarde
te consume en mi mente,
te desprende,
nace verde para ser simiente,
y mi gota de sangre es suficiente
para rajar el cielo a grito,
para derramar mi amor de mi pluma
y áspera piel esquiva caliente,
sigo en esta orilla de mi razón
de mi respiración,
muerto vivo si camino sin tu latido,
tu guerrero muerto que renació eterno,
porque eterno nace el guerrero
y eterno murió el guerrero,
cultivándote el amor dentro,
a beso de espada y hierro,
a beso de hoguera y verso
hasta la dulce muerte
te verá mi dulce sangre dentro
tan dentro que cavaste mi abismo
para llenarlo de flores
hasta que el tiempo deje de rodar,
te amo flor del campo a los árboles
del viento al cielo
me quedo mil veces contigo adentro,
muerto en mi suspiro
nazco de mi hoja de cardo
para ser el ermitaño que siempre soñé
el amor de mi piel
siempre te seguirá cantando como ayer,
hoy te vuelvo a ver,
cruzas mi vida para tu ser flor
sin secar ni despedida fría,
fuego de enero o de cuando llegue nuestro tiempo
de momento solo quiero seguir viviendo,
robando al cielo tu aliento
llorando las nubes
y prendiendo fuego al cielo,
siendo duende y guerrero eterno,
despertar cada día
para despertar a la vera de mi amor eterno,
de mi esposa sin miedos
para verla brillar como luna de mi cielo
y flor de invierno.
ENERO 2014
Respondes del viento a mi montaña,
del sol a la luna, abres tu flor en la espesura,
ven a mí vestida de hojitas,
ven te haré morada de ramitas,
enamorada vestirán las flores tu calma,
este amor de la mañana dibujarán
pasión nuestras flores,
ardiendo en el sol me encuentro,
enamorado mi corazón a dentro.
hipnotizado hasta mi sentido más despierto,
dulce muerdo tu cuello,
esta noche que vivo en tu ventana,
por verte morena tan bella,
te amo entera,
hermosa hasta decir basta,
hermosa desde tus piernas a tu cabeza morena,
desde tus ojos que a mí me miran,
desde mi reino a la montaña,
desde el abismo al cielo yerto,
eres mi amor sediento,
mi frío y calor de invierno,
eres tú lo que yo amo,
lo que yo tengo dentro,
lo que enamora mi latido
y solo puedo decir que yo a ti te amo
mi vida.
Condena de Sangre, RELATO EXTENSO escrito en tres días y tres noches.
Era una noche oscura de diciembre,
daban las tres de la madrugada
en el reloj de la iglesia del pueblo,
caía una helada de invierno,
y en el cielo reinaba una luna llena de invierno,
ella dormía en su habitación
cobijada con dos mantas,
la luz de aquella luna iluminaba la penumbra de su cuarto,
como una sombra de piel pálida se posó
en el alféizar de su ventana,
con cautela deslizó el cristal
y sigilosamente entró en el cuarto,
podía oler la sangre de su cuello que dormía,
puso su mano helada en la boca de aquella chica,
que abrió sus ojos y solo alcanzó a ver dos colmillos
relucientemente blancos,
el miedo paralizó su cuerpo.
Sintió un escalofrío helado subiendo por su cuello.
Sobre este cielo, reina mi amor quieto,
sobre los vientos y mis nubes de versos,
clava mi colmillo tu cuello,
bebe hasta saciar la sed de mi adentro,
te descubro al vuelo nocturno
y su dama de oscuridad violeta,
pasado de un pasado que nos hacía brillar
en el marco de la ventana al acecho,
lento pierdes el sentido,
vas sintiendo entrar tu nueva vida,
la antigua solo te crea nostalgia y rabia,
te adentra la mente al reino de la sombra,
tu sed se vuelve intensa,
sientes vacías tus venas,
te levantas con la luna, duermes con el sol,
soñando quien te mordió,
las polillas y murciélagos son tus compañeros,
te mudaste de morada
a ese túmulo perdido y olvidado,
donde reposaban guerreros antíguos,
solo la sangre te despierta,
acechas en tu oscuridad compañera,
la oscuridad es más fuerte que tu alma condenada,
cambiaste tus vestimentas por una capa negra,
que esta noche se verá en rojo manchada,
tu interior lo sabe tan bien como tú,
al acecho,a sí sea una rama, o una ventana,
te despiertas fría cada noche que revives tu pesadilla,
no hay lugar ni bar donde calmar tu sed,
solo el cuello de víctimas al anochecer,
la compasión y bondad solo huyó de ti,
solo vive esa sed en ti de tener sangre,
solo una condena te marcó,
para todos y cada uno de los siglos que te vinieron,
algunas noches quedabas saciada
y no rematabas a tu victima
solo la clavabas tu condena en su muñeca,
y vampiro la volvías,
tu capa con los deceníos ya parecía más rojo granate que negra,
te gustaba oler aquella sangre seca y recordar
cada grito y soñar con tu embrujo
y como venía a despertarte, algún vampiro convertido
bajo tu colmillo,
tosías con espanto, el frío y la humedad,
se apoderaron de tu morada,
aquel túmulo, no tenía nínguna criatura de sangre sana,
las polillas y murciélagos volviste vampiros
para tu diversión,
sentiste miedo, tu noche pasada cuando tuviste que matar
un cazavampiros inexperto,
los tiempos no entiendes,
como la gente cambió su superstición,
por materialismo salvaje,
y a los vampiros como tú mandaron a la fantasía y a la literatura,
tu única realidad solo la entiende el demonio,
y a una bruja invitaste a tu morada,
ella te trajo un regalo pero no permitió que la mordieras,
y hoy extraña te sientes con una amiga mortal
que cura tu soledad y tu condena.
Era viernes, ella ansiosa esperaba la llegada del sábado,
a las tres de la madrugada había invitado de nuevo a su hogar
a su amiga mortal,
ella quedó en traer comida y su puchero,
ella esperaba llegada la noche del sábado
con ansiedad y nervios,
como si nunca hubiese conocido a su amiga,
sentía una extraña sensación de deseo al mirarla,
le caía saliva por sus colmillos al mirar su cuello,
se prometía a sí misma no morderla,
pero su naturaleza la torturaba cada vez que la veía,
aquella bruja guardaba un secreto,
sus visitas eran interesadas,
quería pedirle a su amiga vampira
un favor que ella no podría rechazar una vez conquistado su aprecio,
ella le pidió aquella noche que se deslizase en la noche
y volase para morder y matar a tres enemigos de aquella bruja,
los tres hombres que denunciaron a la inquisición a su madre
y ella quedó huérfana cuando quemaron a su madre bruja
en aquella hoguera de la plaza del pueblo,
lo que la inquisición no sabía,
que aquella bruja que quemaron
ya estaba muerta y condenada
pues vampira era,
y el fuego nada la hizo,
vivió en la sombra atormentando a los aldeanos que la creían muerta,
y ella misma fue quien mordió y convirtió en vampiro a la a la que ahora
es la amiga vampira de su hija.
La vampira sin poder renegar de su naturaleza
pidió un precio elevado por su trabajo,
y ese precio fue
que la bruja dejara y permitiera ser mordida por sus colmillos
para ser amigas eternamente siendo vampiras ambas,
la bruja aceptó su nuevo camino y nueva vida
haciendo su pacto de sangre aquella noche con la vampiresa.
Ella llevó un puchero de sangre aquella noche,
sangre de animales cazados en el bosque,
solo consiguió despertar el apetito de su amiga vampiresa
el acuerdo estaba hecho,
y hasta que no matase a esos tres inquisidores no podría morderla el cuello,
se quedaron platicando hasta el amanecer,
y entonces su amiga se fue a su ataúd a dormir hasta la noche siguiente,
al despertar la noche del domingo
una nota en tinta escrita encontró,
quería los ojos de sus enemigos en un tarro,
a sí quiso y a sí sería,
aquella noche, se puso sedienta,
corría veloz como una sombra más,
el cielo corría un helor muerto,
y una neblina que cegaba hasta el sentido más despierto,
era la noche más siniestra elegida para cumplir su encargo a su amiga,
tenía la dirección apuntada con odio
de sus siguientes victimas,
tenía ansiedad por arrebatar aquellos ojos y dejar vacías aquellas venas,
se coló a través de la ventana abierta de la recamara y despensa,
de aquella casa lujosa de clérigo de victima,
ya olía su sangre mientras avanzaba el pasillo,
una luz de una vela la alertó
algo iba mal,
encontró al inquisidor durmiendo con un ojo abierto en una mecedora,
una ballesta cargaba en la mano de lo paranóico que era,
vió la sombra de la vampiresa, y se hizo el dormido,
cuando ella sacó sus colmillos relucientes aproximándose al acecho,
abrió los ojos el cura y disparó su ballesta,
la vampira rápido y veloz saltó y se enganchó en el techo frío,
al segundo después ya tenía ensartado el cuello de su víctima,
que este maldecía asfixiándose en latín antiguo,
a cada oración más rabia sentía aquella criatura de la noche,
clavó sus colmillos en los ojos,
y de un mordisco los escupió en el tarro de cristal,
a continuación tachó el primer nombre de su lista
con unas gotas de sangre fresca,
minutos después ya se encontraba volando
hacia la morada de su amiga bruja en el bosque
tocó a su puerta, ella contestó con dulce voz,
amiga te esperaba temía que algo te hubiese pasado,
abrió la puerta y la invitó a pasar,
Ven siéntate, brindemos por esta noche siniestra tan bella,
la vampira sonrió tenebrosamente luciendo sus colmillos manchados en sangre
agudos como agujas,
veo que mucha hambre no tienes amiga jeje,
al momento sacó de la capa el tarro con aquellos ojos frescos
con el nervio optico intacto y el iris tenebrosamente en color,
como si aquellos ojos siguieran con vida,
uno menos gritó alegre la bruja,
te amo le dijo a la vampiresa,
yo te amo más contestó la vampiresa
al tiempo que caían gotas de saliva por sus colmillos,
le encantaba desnudar el cuello de su amiga con sus frías manos
a modo de caricia tierna.
Te faltan cuatro ojos más para morderme sobria y parca respondió,
lo sé, mañana más pronto que tarde los tendrás,
al tiempo que observaba como la bruja,
abría una rata con un cuchillo
y metía dentro los dos ojos,
a comer sombra misina misina,
apareció corriendo una gorda gata negra
de ojos amarillos como de demonio,
ronroneó y se restregó en las piernas de la invitada,
que contestó ¿puedo morderla?
tan dulce, tierna y sabrosa que se ve,
No contestó medio enfadada
es mi gata y la amo igual o tanto como a ti,
está bien dijo- Cuando seas vampiresa tú misma querrás morderla
a esa morcilla peluda con patas llamada sombra,
ambas rieron y platicaron
hasta tarde en la madrugada,
ya va a amanecer amiga tengo que volver a mi túmulo,
no te preocupes amiga mañana te hago una visita
para que me entregues comida fresca para mi gata,
A sí será ambas se despidieron con un abrazo tierno de hermandad,
llegó la vampiresa y se tumbó en su ataúd.
Despertó a la noche del lunes con retortijones de tripa
y una tos espantosa,
presentía una noche fructuosa de caza,
pues las polillas y murciélagos de su túmulo lucían su colmillos rojos
al anochecer, está es la mía dijo y salió en busca de la siguiente dirección,
emocionada examinó la fachada,
y vio que sería más facil que la noche anterior,
veía una ventana que daba directa al dormitorio
del segundo inquisidor,
un olor a sangre excitaba su sed, y ya sigilosa estaba moviendo el cristal,
una vez dentro vió col gusto y dulzura su alimento,
un cura obeso,
que estaba roncando hartado de vino y carne,
puso su fría mano tapando la boca y la nariz del clérigo
e insertó sus colmillos en su cuello cual espadas,
siguió bebiendo una hora larga de reloj
hasta que aquel corazón dejó de latir,
a continuación,
cercenó las cuencas de los ojos de aquel inquisidor
con precisión de cirujano con sus colmillos prominentes,
escupió los ojos en un tarro de cristal,
al tiempo que pensaba
se va a hinchar esa gata obesa con otra rata rellena de cuatro ojos frescos,
se fue volando riéndose a su siguiente dirección,
tras tachar el segundo nombre de la lista,
ya había llegado a la dirección,
esta vez era una casa cuartel con mazmorra,
del alguacil inquisidor,
no sabía que le esperaba sorpresa aquella noche negra y yerta,
abrió la verja, mordió al perro guardián que ya babeaba con sed de sangre,
abrió la puerta principal que se encontraba rota y crujia,
el escalofrío de la emoción recorría todo el cuerpo de la vampiresa,
encontró al alguacil en su lecho ebrio de vino hasta el hartazgo,
esta vez arrancó los dos ojos con sus uñas
que llevaban siglo y medio sin conocer un corta uñas,
contuvo el grito de desgarro metiendo la esquina de su capa
hasta el fondo de la garganta de su víctima
depositó los ojos en el tarro
y bebió hasta quedar con dolor de tripa,
al ver que el corazón del ciego alguacil dejó de latir,
saboreó un extraño olor de sangre reciente y carne gangrenada,
siguió el rastro hasta las mazmorras
y descubrió el horror que las habitaba
eran las mazmorras de la inquisición
en ellas descansaban hombres encadenados gimiendo y maldiciendo de dolor,
veintiséis cuellos mordió en aquel lugar,
después de llenar una bota de piel que antiguamente guardaba vino,
con sangre de arterías cercenadas,
ya tengo almuerzo merienda, vianda, y ten ten pié para mañana,
pensaba satisfecha al volar a casa de su amiga,
tocó su puerta de su casa de bosque
una voz dulce contestó
ya va cielo,
al abrir la puerta a su amiga desnuda contempló,
estaba haciendo un aquelarre y tenía un extraño olor en la entrepierna,
estoy trabajando contestó la bruja,
pasa y acomódate cielo,
y en que consiste tu trabajo, preguntó con curiosidad la vampiresa
con la boca llena de saliva de deseo,
he preparado un unguento, tradicional que conocemos las brujas
para contactar con el demonio
¿necesitas ayuda? dijo la vampira,
no tranquila,
¿trajiste la comida para sombra?
a sí es contestó orgullosa,
bien sacó una rata de un almanaque y la abrió en dos,
aquí tienes amor
a continuación metió los cuatro ojos de relleno.
Sombra, Sombra misina mis mis tu cena cariño,
salió corriendo con dificultad por estar obesa aquella gata negra de ojos amarillos fijos,
se sobó en las piernas de la amiga invitada y ronroneó de nuevo,
estas contenta he sombra le has cogido cariño a mi amada amiga
miau contestó la gata y se puso comer la rata rellena de ojos sangrantes,
terminó la rata entera, y se quedó durmiendo en su alcoba pequeña
llena de pelos, y raspas de peces del río y plumas,
esa hasta mañana no despierta dijo la bruja riéndose a carcajada siniestra,
trato completo, debes pagar el precio del acuerdo
dijo la vampiresa,
está bien contestó la bruja,
que se untaba un unguento con aroma a sabia y a yedra en su entrepierna,
¿Qué lleva eso? preguntó asombrada
pues bien lleva mandrágora, yedra y daturas de estramonio, machacadas a mortero,
Ammmm,
y eso qué efecto tiene,
ayuda en la adivinación,
y llama al demonio con mi plegaria de odio,
está bien,
te ves rica y deliciosa a sí desnuda,
si fuera hombre esta noche te hacía cinco hijos,
la bruja río para sus adentros,
está bien estoy lista,
inclinó la cabeza mostrando su cuello desnudo a la vampiresa,
se levantó de la mecedora
reluciendo sus colmillos
pasó la lengua por el cuello de la bruja
y le susurró al oído,
dame tu muñeca,
para que seas vampira tu corazón no bebe pararse
ni quedar sin sangre,
a continuación mordió su muñeca,
cerró la ventana y aquella noche se quedó en casa de su amiga,
amaneció y se durmió en su cama abrazada a su amiga aquel día frío de invierno,
llegó la noche del martes,
abrió sus ojitos, emocionada vio que su amiga bruja
que ahora era vampira estaba bebiendo con ansias toda la sangre de aquella bota
que llenó en las mazmorras de la inquisición,
se acabó la sangre,
y más rápida que un rayo la vio mordiendo una pata de su gata,
estaba segura de que tu gata correría tu misma suerte
ambas rieron plácidamente,
toca tu primera noche de cacería amiga,
vamos, vamos dijo emocionada,
al alcalde quiero esta noche por cabrón,
esta bien chuparemos las sangres del alcalde,
treparon el castillo donde vivía
entraron por su ventana y cada una eligió un lado del cuello,
ambas bebieron del cuello del alcalde hasta quedar saciadas,
volaron a su refugio,
y la vampiresa le suplicó a su amiga bruja vampira
que se mudase a vivir con ella a su túmulo y que la daba permiso para llevar allí también
a su gata obesa vampira,
pasaron la noche platicando de cacerías y nuevos objetivos,
con la gata mordiendo murciélagos más grandes que ratas
y ronroneando al lado de su dueña,
llegó el sol y se tumbaron en sus respectivos ataúdes,
esperando con sed su nuevo anochecer eterno.
Fin Primer Capítulo
Segundo capítulo que trata del amor que surge entre las dos amigas:
Erase ya un miércoles nocturno, negro y yerto,
la niebla dibujaba las tinieblas siniestras,
se podía respirar la humedad en el ambiente,
aunque los caracoles por ser invierno todavía no caminaban por la hierba húmeda,
platicando se encontraban en el túmulo las dos amigas,
debatiendo la cena,
-Hoy amiga quiero que me consientas,
hay un hombre del pueblo que no me pagó mi trabajo de bruja
no me pagó la muerte del hombre al que debía dinero este señor,
me costó eslomarme escalando montañas pa conseguir
aquellas yerbas y el sapo pa abrir y meterle el nombre
pa trabajar aquella muerte,
de acuerdo le chuparemos las sangres a ese moroso
¿Dónde vive?
a las afueras del pueblo,
tiene una granja donde cría gorrinos pa vender en el mercado,
está bien iremos pero me prometí a mi misma no morder más animales,
su sangre me da retortijones y empacha,
vale solo le vaciamos el cuello,
y a su esposa también por maruja chismosa.
La noche del miércoles,
se tornaba larga y deliciosa para las dos vampiresas,
ya volaban como dos sombras en aquel cielo nocturno con niebla,
llegaron a la granja,
los gorrinos roncaban,
bueno una gallina no sienta mal a la tripa espérame,
una no fue suficiente mordió 23 gallinas hasta tener retortijones,
abrieron la ventana de la habitación,
y allí estaba el deudor roncando en el lecho con su esposa,
¿ves que tiernamente siniestro se ve nuestro trabajo?
Si mi cielo,
una mordió el cuello del hombre otra el de las esposa,
algo macabro resultó aquello,
de repente la boca de la mujer que dormía empezó a brotar sangre,
la vampira inexperta bruja había incado demasiado hondo sus colmillos
perforando la garganta de su victima,
que bruja eres contestó riéndose
al instante estaba chupando la sangre de la boca,
para no desperdiciarla,
tenían las dos bocas juntas las dos amigas,
y una extraña sensación de nervios sintieron las amigas,
en la oscuridad la boca de una llegó a la boca de la otra,
y con la sangre empezaron a besarse con pasión y deseo,
aquello les daba más placer según pasaba el tiempo,
el corazón de sus víctimas ya no latía y decidieron volverse al túmulo de su vivienda,
allí hablaron larga y tendidamente como si nada hubiera ocurrido,
pero ambas amigas sabían que habían sentido placer en aquel macabro beso de pasión
ya empezaba a asomarse el sol,
y se metieron en sus tumbas,
aun estaba la luna en el cielo y apenas eran las cinco de la madrugada,
aún faltaba hora y media para que saliese el astro rey,
se dieron el besito de buenas noches y se acomodaron en sus respectivas tumbas,
te huele el aliento a gallina amiga
jajaja es broma no te enfades, te quiero,
yo también que descanses bruja,
hacía años que no hacía trabajos de bruja pero amaba que su amiga la llamara bruja,
aún podía sentir la nostalgia de su vida pasada en su ser,
buenas noches amiga hasta esta noche,
yo también te amo,
en la oscuridad del túmulo habitado,
se oyó una tapa de ataúd crujiendo al abrirse,
amiga amada puedo dormir este día a tu lado,
es que la oscuridad me da miedo dijo riéndose siniestramente,
ven bruja te hago un lado en mi ataúd,
las dos juntas allí durmieron en la misma tumba besándose toda la noche
y acariciándose sus piernas,
besándose y haciendo pequeños mordiscos mútuos en sus vaginas,
ambas acordaron al llegar la noche del viernes,
que dormirían todo el invierno juntas en el mismo ataúd,
la gata negra de ojos amarillos sombra tenía muy mal aspecto había engordado 7 quilos
de beber noche tras noche decenas de murciélagos hasta dejarlos vacíos,
a sí en amor y ternura pasaron el invierno frío
hasta que una noche de mayo ya se encontraban en su primera primavera sangrienta
que el amor y la sangre altera.
FIN DEL SEGUNDO CAPÍTULO
CONTINUARÁ
Tercer capítulo
Que trata sobre el encuentro con la madre de la bruja vampiresa
Corría una noche de primavera en aquel pueblo maldecido,
por las criaturas del averno y su muerte sedienta,
despierta bruja, ya es de noche,
ahi no que sueño, me siento como si no hubiera comido en una semana,
mira, mira ha crecido una seta enorme al lado de nuestra tumba,
ajá es una macrolepiota tóxica,
con ella hacía venenos de encargo cuando era bruja,
ahi cuando yo era bruja,
que vida más perra esta he acabado
durmiendo con una vampira siendo yo misma otra vampira,
bueno estamos y somos felices y comida no nos falta,
tienes razón pero como sigamos a este rítmo vamos a beber a todos los del pueblo
y nos reclamaran comida decenas de vampiros hambrientos,
bueno entonces iremos a cazar esta noche al pueblo vecino,
hay unos cuellos que duermen alegres el sueño del gorrino
esperando el san martín de nuestros colmillos.
Si te soy sincera, el pueblo vecino corría de leyendas,
que estaba condenado y maldito por demonios,
a si es beberemos sangres tres veces más ricas de personas poseidas,
amén a sí sea, te aviso que esos demonios duermen despiertos,
no me metas miedo,
los demonios siempre son amigos de las brujas,
diles que te dejen morder su cuello a ver si son tus amigos,
deja el sarcasmo,
soy valiente y fuerte y tengo hambre.
Venga vamos, espera que le cojo un murciélago a mi gata sombra,
con tanta sangre de murciélago va a coger una cirrosis tu gata obesa,
o una diabetes,- Que va esta solo con los huesos fuertes, no está obesa,
sí, sí lo que tu digas,
vamos,
ya estaban volando juntas aquella noche de primavera,
llegaron al pueblo vecino
y se encaramaron a una ventana que estaba iluminada con luz de velas,
mira, que mal rollo ¿ves eso bruja? ese cura da más miedo con ese crucifijo que un cazavampiros,
esperemos que este de espaldas amada y le ensartamos el cuello,
vale a sí lo hicieron,
de un zarpazo tiraron el crucifijo del cura al suelo,
que se encontraba en medio de un exorcismo,
lentamente la sangre del religioso dejó de brotar por su cuello,
lo hemos dejao seco, vamos a por el poseído
de repente contemplaron asombradas como el poseído se doblaba y retorcía
para balbucear sus últimas palabras,
tu madre que condenaron a la hoguera a demás de ser bruja era vampira,
y sigue alimentándose en la oscuridad y la tiniebla,
para puede que este pobre diablo tenga razón,
puede, pero ya conoces al demonio que te cuenta la mentira más bonita
como que hay cerdos con alas de murciélago
que vuelan y son vampiros,
tranquila que si es cierto
puedes comunicarte con tu madre mentalmente y ella vendrá a verte,
escucharon un chirrido en la ventana mientras vaciaban el cuello del poseído,
mira una vampiresa como nosotras,
Madre eres tú,
si hija soy yo,
te he echado de menos todos estos años vigilándote en la sombra,
te echo de menos también
te amo madre,
veo que ahora eres vampira también
si y acabé con los tres hombres que te quemaron en la hoguera,
esa es mi hija
siempre supe que tenías un corazón de guerrera,
tengo que irme hija perdóname por hacerme pasar por bruja quemada,
no te preocupes mami, siempre supe que volvería a verte.
Nosotras también nos vamos ya pronto saldrá el sol.
FIN DEL TERCER CAPÍTULO
CONTINUARÁ
CUARTO CAPÍTULO
Que trata sobre la visita al túmulo del vampiro ermitaño Miguel, y la boda de las dos amantes vampiresas.
Corría una noche lluviosa de mayo,
cuando de repente tocaron a la puerta del túmulo,
las dos vampiras se encogieron del sobresalto llevaban dos décadas sin recibir una condenada visita,
abrieron con cautela la puerta,
¿quién llama? preguntaron
. Soy el ermitaño Miguel, aquel que vive por los siglos en la cueva del monte del regero del gato.
Pase, pase bienvenido sea llevamos mucho tiempo sin una visita cochinera,
adelante mi casa es su casa,
póngase cómodo, que le trae a bajar de su montaña,
Os cuento que llevan decenas de siglos mis barbas bebiendo la sangre por mi,
vengo aterrado de estar enterado que un cazavampiros llamado Juán Belmonte
ha llegado al pueblo a investigar los ataques de nuestra amada familia,
que el demonio la guarde en su seno y morada,
vengo a ponerlas en aviso que no salgan a cazar solas,
ese cazavampiros tiene los huevos mu gordos
y ya a pasado cepillo a siete de los nuestros,
las invito a cenar mañana a ambas a mi cueva para dialogar sobre el asunto,
no quiero ver desaparecer a mis dos amadas vecinas que espío cuando me aburro
y se comen la boca y las piernas con deseo y lujuria,
pero bueno ¿no le han dicho que espiar está muy feo?
perdonadme pero con tantos siglos uno ya se vuelve un poco verde,
no se preocupe con gusto iremos mañana a la noche,
de a cuerdo las espero ansioso,
y cuidado con los caminos de la noche,
con esa estaca de Juan Belmonte.
Cuidado tendremos, nos vemos mañana,
chupe cuellos en paz
igual deseoso de gusto las espero para tomar un cafelito y un vinito de sangre,
hasta una gitana vieja me hizo una canción la del probe Migue
pero soy tímido y solo la escucho cuando estoy triste,
llegó la noche de la cena esperada y las vampiresas fueron a la cueva del reguero del gato
con su gata sombra,
bienvenidas sean a mi humilde morada, pasen, pasen,
más guapas y no despiertan esta noche,
jejé sí el amor nos tiene con piel de lechuga y picores diurnos,
eso es bueno,
bien de cenar hay gorrino vivo a chupar, sopa de rata de agua,
y la panadera del pueblo recién secuestrada,
se veía bien dulce y sabrosa aquella panadera amortajada con unas bragas rojas en la boca,
la rata para mi gata sombra que está a dieta,
de acuerdo iré sirviendo un vinito de sangre gran reserva traida de las mazmorras de la inquisición,
serviré de tapa lenguas humanas estofadas,
que rico y sabroso huele que alimenta,
ya va esperénme sin salir volando.
Se hartaron a cenar y a beber, una estraña sensación de deseos sintieron ambas vampiresas
por aquel ermitaño simpático y risueño llamado Miguel Capote,
antes de un parpadeo estaban en su lecho desnudas bajo su embrujo,
cosa cierta porque aquel vampiro era brujo druida,
hicieron el amor con pasión y lujuria toda la noche,
y acordaron casarse las dos con aquel ermitaño misterioso,
pasaron aquellos tres meses tres días y tres horas
de prometidos cazando y alimentándose juntos
hasta que llegó el esperado día del casamiento,
fueron de invitados, el conde Drácula de Transilvania su esposa Anacleta su sobrino Dante Romero,
un ciervo, un centenar de vampiros murciélago, polillas vampiras de los 3 continentes malditos,
duendes oscuros, hadas asesinas, basiliscos y demás criaturas del averno,
sonaba el flamenco y corría la sangre fresca por doquier,
el otoño siguiente vivían su vida de casadas las dos vampiras amantes
eternamente enamoradas y sedientas de sangre.
Fin del cuarto capítulo
CONTINUARÁ
Quinto capítulo
El amor eterno y desenlace
Trata sobre la lucha contra el cazavampiros Juán Belmonte y la adopción de un niño vampiro Rumano:
Caía ya una noche lúgubre y cálida de junio,
se podía sentir un hedor muerto en el ambiente,
las vampiresas se encontraban alimentándose,
estaban en la granja de un aldeano del pueblo,
este estaba obeso y sano, de alimentarse de tanto puerco y gallina,
ambas tenían un extraño presentimiento,
como si algo no fuese a salir bien aquella noche,
sentían otra presencia en aquella granja,
y a sí era, al salir de la granja,
se encontraron con el cazavampiros Juán Belmonte,
que llevaba una estaca en la mano derecha
y un brazo musculoso,
se quedaron paralizado con aquel cazavampiros,
como si hubieran visto un fantasma tres veces muerto,
de repente se escuchó un fuerte disparo,
y el cazavampiros Juán Belmonte cayó desplomado,
se trataba del ermitaño Miguel
que había acudido al lugar con una escopeta
intenta dejarme de nuevo sin esposas malnacido
desde la tumba, a continuación Miguel
se encontraba mordiendo el cuello del cazavampiros,
que se estaba retorciendo como un gusano
en el suelo tras recibir aquel disparo,
ese es nuestro esposo dijeron las dos vampiresas aliviadas.
Caía ya larga la noche,
y nuestras amigas descansaban en su túmulo platicando,
aquella noche de junio había sido muy intensa para las dos,
que ya se encontraban en una tumba juntas
besándose con pasión y lujuria,
llegó la noche siguiente a aquel pueblo maldito sin nombre,
las dos vampiresas se encontraban apenadas,
a ambas se les había pasado ya el arroz
y a su edad jamás podrían tener hijos,
tras pensarlo largo y detenídamente
decidieron adoptar un niño vampiro,
llegaron a la decisión de que adoptarían al pequeño vampiro,
famoso por sus libros infantiles,
aquel pequeño vampiro era de Rumanía
y se llamaba Rudiger,
fueron al juzgado vampiril rumano,
y tras unas largas burocracias tenían los papeles de la adopción en su mano,
tuvieron que sobornar al juez rumano
para conseguirlo,
le regalaron seis botellas de sangre de vino gran reserva añeja,
y una maleta con el cardenal de la inquisición Española
Bartolomé Diaz Espartaco, se lo regalaros en una maleta de hierro,
con cerrojos y murciélagos grabados,
aquella maleta tenía agujeros a modo de respíradero.
Ya tenían al pequeño Rudiger en casa,
y fue la mayor alegría de su existencia,
jugaron al endemoniado y al ahorcado,
y salieron a cenar y dar un paseo nocturno,
el verano estaba llegando a la aldea maldita sin nombre,
ya pronto serían las fiestas del pueblo.
Fin Del Quinto Capítulo
CONTINUARÁ
Capítulo sexto,
Que trata sobre los orígenes del pueblo vecino endemoniado.
Caía ya una noche de calor y de grillos una noche de julio,
nuestras vampiresas se habían despertado emocionadas,
veían a los murciélagos y las polillas del túmulo gordas y babeando sangre,
vamos bruja esta es nuestra noche hay comida hasta hartarse y son las fiestas del pueblo,
sí, sí sí quiero,
¿me sacas al baile?
¿me llevaras a bailar?
Pero bruja somos vampiras, no mortales,
Ya veo desde hace un siglo y medio largo,
bueno algo podemos hacer,
le pediremos a nuestro esposo que deje la timidez y nos ponga la canción del probe Migue
que le escribieron,
ni hablar se escuchó una voz tras la puerta,
hace una noche pa asar la manteca y no quiero ponerme triste,
por fa, por fa,
bueno está bien pero solo la pondré una vez,
sonaba ya la canción en el gramófono,
Qué le pasará, qué le estará pasando al probe Migue
que hace mucho tiempo que no sale,
dice que se ha vuelto ermitaño en su montaña,
que de ahi no quiere más salir,
allí se hace su cafelito hasta se toma él su vinito,
jajajaj ambas rieron a carcajada siniestra,
es preciosa amor,
te describe hasta la perfección,
bueno fuera la broma o la quito,
jajaja no te enfades,
hoy iremos al pueblo vecino,
algo oscuro y gordo se está cociendo allí hay vampiros poseídos
que nos están haciendo la competencia,
está bien, al rato se encontraban volando al pueblo vecino,
fueron a la iglesia del pueblo
que tenía escrito en la puerta con sangre, pueblo propiedad
del demonio y Calvin klein,
tienen sentido del humor por lo menos nuestros amigos,
si, sí ya le entra a uno mal rollo de verlo,
se escuchó una voz que provenía del campanario,
bienvenidos pasen, pasen
¿da mal rollo ves?
se puede venimos del pueblo vecino
a exponer nuestro problema vampiril,
está bien, pasad y ponéos comodos,
pasaron a los púlpitos de la iglesia,
y bajó del campanario un vampiro anciano jorobado,
con la cara rajada,
me presento soy Odor jorobado de Notredame para servirles,
como podrás ver soy vampiro extranjero francés,
¿que les trae a mi humilde morada?
Pues bien ultimamente estamos teniendo problemas con vampiros endemoniados
de este pueblo que nos hacen la competencia y nos dejan sin alimento,
está bien se acordará lo siguiente el invierno y la primavera sera la veda abierta
para los vampiros de vuestro pueblo, otoño y verano
será nuestra veda para nuestro pueblo del demonio,
las dos estaciones que tendréis vedadas tendréir que ir tirando de despensas de sangre
y sangre que halláis almacenado en botellas, barriles y toneles.
Me parece justo,
una pregunta más y nos marcharemos,
¿a qué se debe tanta presencia del demonio en este pueblo?
Pues corre la historia que san Miguel ARCÁNGEL
bajo del cielo en septiebre porque se gastó todos los dineros en licor, casinos y prostitutas
bajó a hacer la vendimia como todo buen hombre del señor,
y aprovechamos para ensartarle los colmillos y volverlo vampiro,
desde entonces el Arcángel vive en transilvania,
bajo el seudónimo del conde Drácula ese es nuestro origen endemoniado,
sin san Miguel luchando contra el demonio,
cientos de demonios salieron y se apoderaron de todos los aldeanos del pueblo,
brindaron en sangre,
y todos se fueron a dormir pues ya iba a salir el sol.
CONTINUARÁ
El castellano y Leana
FEBRERO 2014
Por la amapola de tu cuerpo
Amada mía flor de mi desvelo,
adorada sinfonía mía tu voz temblando
el viento de mi deseo.
Avanzo tu cuerpo a alarido despierto,
vuelo contigo, voy allí donde mi latido queda disuelto,
te amo en mi campo,
me creciste las flores en mis arterias,
hoy junto a mi amaneces sin importar distancia,
te amo hasta decir basta,
te recorro toda la piel a jauría despierta,
te adoro en mi mundo que quedó yerto,
te adoro, te amo, te necesito, te extraño, te quiero,
eres mi mundo entero,.
eres mi mundo de flores de colores,
eres mi locura despierta y yerta
que mi sangre atisba,
en este río eres gota amada,
eres mi vida entera,
eres mi sentir del río a la montaña.
eres mi vivir en la cueva de tus piernas,
eres mi travesía por los dos montes de tu cuerpo,
eres mi amar y no despertar,
eres mi sueño y mi dormir,
eres todo lo que amo,
eres mi esposa bella,
mi amada tierna.
El Castellano y Leana
Publicado por Miguel Esteban Martínez García en 8.2.14
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jueves, 6 de febrero de 2014
Revive esta sangre, desliza su hierro,
amor sediento marcó a latido feroz,
en la avenida de su arteria,
resurgió,
como resurge el fénix en su cueva,
para ocupar su lugar merecido en el cielo,
despierto clavó su latido,
en la flor yerta y despierta,
que se vestía de deseo,
que temblaba al mirarla,
rosa, rosa mía,
tus pétalos al cielo,
tu cuerpo paraliza,
tu vida me domina,
recorre tu sangre mi amor despierto,
sueño y a tu lado amanezco,
caminas conmigo,
vives conmigo sin ti me desvanezco,
mi cielo crujes mi luna de invierno,
amamantas mi pasión,
y el alarido tuerce su lujuria
corre avanza recorre las piernas de la ambrosía,
demuestro mi valía,
muerdo este amor quieto,
de hombre nuevo me visto,
te encuentro y tu ilusión bebo,
tu cuerpo amanezco,
tus ojos, tus ojos,
tu pelo, tu boca, tu cuerpo,
me dominan el sentimiento,
vengo a casarme con tu aliento,
a vivir a tu lado hasta que mi cuerpo
quede yerto.
MARZO 2014
sangre
En la soledad de mi cuarto
son tus recuerdos los que me hieren,
tus labios, los míos hierven, tiemblan,...
En la oscuridad de mi cuarto es tu figura la que me acecha,
y me provoca un caos febril de deseo y pasión.
Pero tú no estás,y no estás, no estás.
Tu recuerdo recorre todas mis neuronas con miles de imágenes,
cada una añorando un pedacito más de ti.
Agarro mi almohada con fuerza pensando que eres tú.
Una tristeza comienza a invadirme,
lágrimas salen de mis ojos,
en ellas se puede ver tu rostro reflejado en ellas.
Ardores me entran en el pecho de saber
que no vendrás,
que nunca volveré a tenerte,
que estás ausente,
y mis lágrimas se convierten en lágrimas de sangre.
Amada mía te escribo,
esta noche invernada,
detrás de la noche y de la estrella apagada,
que yo te amo amada,.
Luna mía, tú mi flor que brilla,
luces bonita,estrellita mía
sólo tú eres mi vida,
linda mía, jamás se apagará tu boquita,
que llama a la mía,
mía, solo mía,
mi flor de luna.
Solo para mí encendida,
Yo nací para tus ojos,
madera de los cipreses,
yo solo soy escarabajito
que de tu mano caminas despacito
de tu mano abrazado duermo contigo.
II
Sólo soy lo que tus ojos dicen de mí,
solo soy amor, vivo en ti,
yo, nací del rayo de sol,
dije soy fuego sin más razón,
de mí hasta la sangre huyó,
yo, solo viví como vive la flor,
al muerto le di helor,
porque yo viví solo, solo
como vive la flor,
pero ni aroma tuve,
ni tuve color,
solo tuve rojo polen carmín
de mi sangre sin venas
nació un yo te amo amor
que a la tierra llegó.
El Castellano y Leana.
III
Muerto vivo si o te miro,
luna muerta vi encender,
y a mí llegó para yo decir,
viví, fui, amé,reí,y con su amor,
digno, orgulloso,
viví.
Hasta de su boca
morí.
Pero un sábado desperté,
frío,como Sol que fui,
y ella, huyó de mí.
Así mi condena cuando
yo muero ella vive por mí.
IV
Sangre, sangre
color añil,
vida. vida para yo decir
he aquí mi sangre,
y aquí muerto viví.
El Castellano y Leana.
V
Vive en la inmensidad
del azul eterno
para ver este cielo
que encierro yo,
aquí vencí yo.
Aquí solo,
solo,
busqué morir.
Pero eterno viví.
El Castellano y Leana
VI
dESTE CEMENTERIO VENGO
pero yo no he muerto,
yo deste cementereo,
traigo la flor,
pero así la flor
fue muerta por amor.
El Castellano y Leana
VII
Quién fuese verso
para ser verbo.
QUIén fuese poema
para la más bella besar.
Quién
fuese locura
para con ella
loco de amor
amándola,
sanar.
Yo la vi para loco de amor
decir que lombríz felíz morí.
VIII
Ven, ven a mí,
yo nada, ni frío,
ni hielo, puedo ser,
sin ti,
yo tu ausencia llamé infierno,
tu beso llamé parca,
tu amor llamé Satán
pero yo solo soy
el único llamado Dios
que reinó
en tu corazón.
El Castellano y Leana
IX
Cielo tengo si yo te veo,
Vida si yo te tengo,
Sangre, sin ti, yo no tengo,
yo todo lo tengo,
tu amor alimento,
yo corazón tengo,
pero allí solo vive tu recuerdo.
El CaSTELLANO Y LEANA
............................................................
CONTINUARÁ..............................................................
.......................................
IX
Cielo tengo si yo te veo,
Vida si yo te tengo,
Sangre, sin ti, yo no tengo,
yo todo lo tengo,
tu amor alimento,
yo corazón tengo,
pero allí solo vive tu recuerdo.
El CaSTELLANO Y LEANA
X
Locura despierta
locura quieta,
venda,
mi ojo que no vea,
y la vela prenda.
Copa que mi sangre llena,
yo vengo del nacido sin nombre,
que olvidó que perdió todo,
pero le llamaron amor.
XI
AMOR, AMOR, LOCO CORAZÓN,
AL CIELO TU BENDICIÓN.
eSTO QUE DENTRO SIENTO,
ESTO QUE TENGO LATIENDO,
LO LLAMO AMOR, AMOR BENDITO,
AMOR DESPIERTO,
AMOR ARDIENDO,
AMOR DE SANGRE,
AMOR DE ARTERIAS Y VENAS
PORQUE YO TE AMO DE CORAZÓN.
XII
Bendito aquel que muere en el verso,
bendito aquel que muere ardiendo,
porque amor es fuego,
hoguera el corazón,
porque yo sé de esto,
porque sé que duele,
porque yo viví amando,
amé amando,
amé cuando un otoño
aquí morí enamorado.
El Castellano y Leana
XIII
LOMBRIZ, PERDIZ Y CODORNIZ
ASÍ VIVÍ YO FELIZ
PORQUE YO UN DÍA
PUDE DECIR,
NACÍ,
DIJE YO A ELLA LA CONOCÍ,
Y A SU LADO YO POR PRIMERA VEZ
EN LA NOCHE JUNTO A ELLA,
DORMÍ.
PARA DESPERTAR Y DECIR,
SOÑÉ TANTO QUE EL SUEÑO
ES ELLA,
DESPERTÉ PARA VER QUE HAY SUEÑOS QUE SON REALIDAD.
Esteban el Castellano y Leana
XIV
Yo nací, amé, amo, luché, lucho,
viví, vivo,
morí, muero.
Poeta soy, poeta fui,
escribí, escribo,
fui verso, soy poema,
pero la verdad viví escribiendo y me llamaron
hombre enamorado.
ABRIL 2014
Estambre de pelo
Fulgente trasluz me absorbes te comes mis venas
desde la raíz a mi arteria te canta mi semilla
obscura nebulosa me atrapa tu espiral y se come
todo lo que no pudo comerse el tiempo ni el viento
yunques sonámbulos me atrapan
y al tic tac me hacen preso
tímida comunión de estrellas tu voz
y su resorte estridente
tímida y feroz tu voz aullido a la luna
en su nácar y ambrosía
tímida medusa no quisiera que tu cabeza cayera
hazme piedra para vivir al lado de mi flor
que las ama.
Cucú-cucú canta el cuco
y una extraña sensación de cloroformo invade mi cuerpo,
estambres de pelos mis cabellos,
amada flor en la distancia del beso estridente,
cuerpo de árbol recio y rígido
al tiempo que mis gusanos hacen mariposas en mi hiél
y estómago de mente de pollo.
Tic-tac vuelve a sonar y mi cuerpo ya es yodoformo,
ven ven a mí otra noche invernada
seré hielo serás fuego,
al cromático sonido de tu voz
seré sinestesia y todo lo que toque
veré el cielo en colores porque desde que te conocí
vivo allí.
Tic-tac las doce mi hora yerta.
Luna sempiterna
Luna plateada de mi cielo, en las noches voy a tu encuentro,
pero te escondes entre bloques de hormigón y cemento.
Quiero verte, pero incluso te escondes, por las violetas ramas.
Mas los dragones, del cielo sonámbulo te acarician.
Cielo obtuso, de sueños fluorescentes,
tú, de color líquido, solo templado con miradas intermitentes ,
por el tiempo de espera angosto.
El murciélago baila con el colchón de tu luz,
rasgando sombras,
para reposar siendo una más.
Oscura nebulosa de tu vítreo transluz dime,
por qué te siento incluso estando solo.
flores opaco reflejo de luz violeta incluso de noche;
artificie luzzae.
Lucero de ciudad,
rompiendo la obscuridad.
La noche se detiene para sentir que estás conmigo otra vez más,
noche está llamando moviendo su tranquilo velo, noche llama una vez más
para sentir que a mi lado estás,
recuerda que tus ojos tienen sangre
recuerda el viento que aúlla mi nombre
recuerda la luz que tiembla y cruje la noche en las pupilas
recuerda que me hablaste de amor en el tiempo que cae muerto
que pactamos con el hielo la vuelta del invierno,
recuerda cada latido de oscuridad que llama a tus venas de humo
recuérdame en la eternidad del beso, en cada rosa que robe tu cuerpo,
recuerda que vivo para ti dando voz a la soledad asesina,
la flor vive soñando que fue mariposa y abeja,
vive durmiendo la semilla enamorada de la tierra para despertar
y enamorarse del sol,
clávame estas nubes de sangre en el hierro de mi destino,
se me negó la luz encadenada a esta tierra sin cuerpo,
solo tú me sientes en este camino que no lleva retorno
solo espiral anhelada de renacer
el tiempo ya no nos puede sostener
camino buscando el frío en este calor que quema el alarido,
en la puerta del infierno caído,
al viento le diste voz,
a la lluvia la nombraste lágrimas de mi ayer,
le diste ojos a la sombra para mirar,
el cuervo te dio sus ojos,
la espina caía herida, la caricia retornó a las polillas,
la vida marcha deprisa cuando abras los ojos ya todo habrá cambiado
solo encontrarás que seguiré a tu lado
aguardando tu otoño y la caída de tus hojas,
esperando que seas mi acompañante en los siglos y milenios que nos condenaron,
encontrarás esta sed del cielo en cada silencio muerto,
en cada raíz que grita en su tierra
toma de la vida lo que quieras, siembra tu aliento en cada tierra,
tú todo lo tienes yo solo soy una fantasma que sólo tú ves.
Elegía a la resurrección de un pétalo
Todo vuelve y se envuelve
en este tiempo que todo lo envuelve de espiral
amor en el seno de Perseo
amor a su flor
onírico baile de estrellas
entre este cielo fulgente y quimérico
estrellas cosechadas para mi dama
entre baile juegan la rosa y el clavel masculino
al viento su brío
de un pétalo nació mi canción
amarte a fuego mi decisión
polen que me transmutas la luz
de dos almas enamoradas, amantes compañeras
enroscadas en su espiral sagrada,
dónde quedó mi vida en el corazón de mi flor la vi,
la conocí y me convertí en guerrero sin nombre
solo de su reino de pasión,
de su mundo de ternura
infinito trasluz dime mi existir en ella
plasmada de albas y auroras
de poesías silvestres y en pétalos blancos,
puedo atravesar el cielo y el infierno me parece pequeño
amor a su entraña de dama flor
en los recovecos del cuerpo,
donde se cobijan mis ilusiones en sueños
elegía a la vida de un pétalo
y su resurrección,
voy caminando el sendero distante de su cuerpo
por la arena de su cuerpo voy dibujando corazones y besos
quizás algo más, solo el tiempo dirá
y lo boreal y acrisolado es sus labios
cerca y solo cerca de mis labios
si el beso donde quieras siempre podrá ser donde ella decida,
en la vida de este duende,
en mi corazón trashumante que busca sus mejores prados
llenos de margaritas donde solo ella y yo,
giramos enamorados en la yerba recién crecida,
y el pozo de los deseos conceda el paraíso de dos almas compañeras,
que juegan en su tela de araña.
Un espectro en el silencio:
Hablé con la piedra del río
y me dijo:
-Yo nací así pero el agua del río me modela el cuerpo.
Hablé con el árbol sabio el me dijo: -Te diré un secreto,
cuantos más años vivo más años sanos puedo disfrutar
después de los gastados,
en cambio los humanos con suerte vivís 90 años.
Hable con la cueva, me respondió un murciélago,
.Yo no soy ciego más ciego aquel que no quiere ver.
hablé con el diente de león al borde del camino de grama,
ella me dijo: -Pronto vendrá mi galán a besarme
y abriré un molinillo para que vuelen mis hijos al viento.
Hablé con la vida: -Más sabio es aquel que ignora lo malo y
sabe a la perfección lo bueno y bondadoso.
Miguel tuvo un problema con la parca se batió en duelo con ella,
Miguel estaba asustado, Miguel fue a hablar con la montaña,
la montaña le dijo que ella era sabia pero no tenia piernas para ayudarle.
Miguel fue a hablar con el árbol anciano
él le dijo que entendía su problema pero nada podía hacer por él
por estar encadenado a la tierra con raíces.
Miguel por último fue a hablar con un cuervo este no respondió
y le atacó sacándole los ojos y ciego cayo al río
la parca ganó el duelo.
Busco mi vida en esta hoja de papel.
BUSCO MI SANGRE QUE HUYÓ DE MI CUERPO,
busco mi cuerpo que cayó muerto,
busco pero te busco a ti amada mía porque te amé y te amo,
busco mi vida porque la perdí.
busco mis ojos porque tanto horror y saeta alada vieron
que me los arrancaron,
mi infancia vi pasar por mi mente en ese río mientras me ahogaba en él.
Saeta que vuela, saeta alada, saeta del demonio yo te amo,
llévame a tu morada seré tu esposo, demonio mujer, súcubo mujer,
llévame a tu hogar de llamas, hagamos el amor que yo te amo,
yo te amo demonio, yo hombre condenado, hombre maldito,
hombre sin alma, solo, solo, solo, más solo que la soledad en su muerte,
criatura alada del inframundo llévame a volar en tus alas
que seré Perseo una noche y viviré como un rey en el infierno
mi alma quedo escrita y metida en la boca de Volac.
hoy te escribo el verso más bonito del mundo porque nunca
ha sido escrito, sólo sentido y es mi verso yo te amo flor.
Yo lloré, yo amé, yo nací y como flor silvestre morí
te amo flor así no me ames te amaba incluso antes de conocerte
porque eres la mujer de mis sueños,
amapola dime si tu rojo es de más amor que el de una rosa,
no hace falta que contestes yo lo sé,
te amo amapola mía,te adoro mi flor campestre
te adoro solo a ti entre las demás flores del campo,
amapola mía cásate conmigo,
yo te haré la mujer más feliz del mundo aun estando yo muerto,
te quiero a mi lado.
Amapola mía no rechaces mi amor,
ven ven conmigo los cuervos harán hogar con ramitas.
nuestra casita para que vivamos juntitos,
ven, ven conmigo amapola silvestre
quiero que seas mi mujer.
Soy espectro en el silencio, fantasma que atormenta al vivo,
soy flor de espino que secó y dejó su espina,
y mi espina es que yo fui un hombre honrado , generoso
y buena y mala persona
yo ya estoy muerto.
JUNIO 2014
Décima
Enhiesta flor fue semilla,
altiva plantula fue ella.
Quién fuera ella, tan bella.
Él en pupa fue polilla.
Aún plantula fue pilla,
él aún pupa la amaba.
Aún flor la respetaba
juntos cuatro meses bellos
cómo fue lo saben ellos.
Él en pupa la esperaba.
JULIO 2014
Halle donde me halle
viviré en tu abrazo noble
allí donde los árboles te cantan
y tú los abrazas, aún siendo Uri, en tu biblioteca,
o en el valle
donde los cisnes
como mi constelación al nacer a las 8:30 (cisne).
No seré nunca espectro ni espejismo, ni doble,
únicamente lo que tú decidas forever and ever for you,
amar te amo sin hacer daño ni obsesión, ni agobio,
eres mi primera primavera
entera de mi cuerpo,
eres todo en mi paraíso ardiendo, mi viento, mi lluvia,
mi polilla de noche, eres la dueña del tiempo porque sólo
tú lo detuviste con un beso y yo rocé la realidad de un sueño,
te esperaré tu estabilidad, te llamaré, cuando lo desees,
eres la única chica de la que siempre
estuve enamorado,
por lo que ella sabe,
Amén a mi vida amén a su vida.
por habernos conocido un mundo entero de sentimientos,
a sí te hable mi patata del pecho, es cierto.
No hay ilusiones sueños permitidos,
''un hombre sin soñar no es hombre'' (cita de autor famoso).
No quiero hacer daño con mis olas de mar entonadas en cal y arena,
no ser repetitivo prometido no ir de víctima igual,
a pesar de amores de lejos nadie llegó a nuestra complicidad,
no hay pasado ya solo presente y futuro
del pasado se aprende de errores y na más.
''NO DIGAS NUNCA NO DIGAS SIEMPRE Y NUNCA DIGAS
LO QUE TU CORAZÓN NO SIENTE'',
desconozco el autor de esta oración in bloq mayús, no sería plagio.
no me adueño de nada que no sea mío .
nunca bebas de nuevo del agua que no has de beber,
AGOSTO 2014
Flor de Helecho (romance)
Suena el río, agua llevaba,
alma de fada silva ella,
bebía en la orilla alegre
flor roja lloró su tierra,
blanca cierva a fada triste
cazador hiere su flecha,
enhiesta espina gemía
flor abierta brotó en yerba,
fada herida ya descansa
latiendo la parca negra,
yace en helecho silente
suspira su sangre yerta;
Enamorado el helecho
una flor mágica asienta,
tambores suenan la tierra
los duendes lloran su fada,
ahora el helecho era ella,
mueven la piedra ocultada
cazador tropieza cerca,
el río ya lo llevara,
fada flor de helecho yerra
duendes cobraron venganza,
cantó lo que el bosque alberga,
misterio de cierva fada.
Fada flor de helecho inverna,
cicutas toman la sangre
veneno hacen, blanca cierva
cuervos la cena discuten,
cazador ya río lleva,
lleva el río su latido,
campanillas suena yerba
duendes coronaban fada,
fada su vida celebra
los espinos la cuidaban;
Flor de helecho fada bella.
Enhiesta flor fue semilla,
altiva plántula fue ella.
Quién fuera ella, tan linda.
Él fue y es, ella no yerra.
Aún plántula fue fada.
Valor, honor, sí fue cierta.
Él aún duende a ella la ama.
Ella la flor, no era yesca
ellos cuatro siglos ''juntos''.
Los dos sí saben, ''leyenda''.
El Castellano y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
SEPTIEMBRE 2014
El Mundo Utópico del Castellano.
Mi mundo utópico:
Sería un mundo donde fueran realidad todos los mitos y leyendas, griegas, romanas, celtas... En cada continente coexistieran en armonía dioses, héroes, diosas desnudas tocando el arpa, ninfas en bragas blancas cantando a la orilla de los ríos enamorando a mortales, dragones protegiendo tesoros en grutas y bosques, duendes fumando y vendiendo marihuana,
mariposas tan grandes como casas y flores tan grande como árboles,
cupido cazaría torcaces con el arco, y Loki estaría casado con Atenea que luego a luego pariría trescientos dioses lobo espartanos, Dracula estaría en romance con un hada murciélago ninfómana, Van Helsing se vuelve adicto a la coca y le da por cazar gamusinos en vez de vampiros que por supuesto gamusinos como vampiros en este mundo utópico existirían.
Los minotauros son toreados en plazas de toros, espartaco estaría viviendo de torero en vez de gladiador, Martin Luther king por desgracia nacería verde y defendería a los duendes, en contra de los abusos de la sociedad de hadas racistas, las amazonas serían gogos de discoteca. Las plantas tendrían células ciliadas y correrían por el campo, follandose a los bichos que serían gordos y peludos como ratas, éstos vivirían de comer piedras, se invertiría el sentido el que corre el agua las cascadas irían hacia arriba, los pájaros tendrían cuatro alas y serían fosforitos por la noche.
Las luciernagas serían las farolas, y los peces vivirían en las nubes cayendo cuando llueve, no existiría el dinero ni planes globalizadores de reducir la población mundial, ni de crear un nuevo orden mundial, bajo religión de esclavos en ciudades, hombres, fieras y animales tendrían voz y razón propia, en vez de máquinas existirían druidas cuya profesión sería crear seres adecuados a la petición del demandante para que cumpliese determinada tarea feliz e ilusionado.
Los pensamientos se verían en forma de letras encima de nuestra cabeza, a sí no habría crimen pues se vería el plumero antes de actuar.
Neptuno se enamora de la sirenita, que a su vez le deja por viejo y se va con un sireno, se queda embarazada y pare un leviathan que sale a la tierra y se vuelve adicto a la meta-anfetamina que le proporciona una bruja hija de un arcángel y de la hidra del parmeso.
Hacer daño a la naturaleza o quemar un bosque sería castigado con plantar 5555 árboles y ordeñar a las vacas-murciélago y pastar a los cerdogallos.
La religión rendiría culto al Dios sol y a la Diosa luna, cada 10 años habría un eclipse en el que saldrían los vampiros arrasar las granjas chupando el jugo de los tomates, y los hombres lobo rindieran cantos y orgías a la luna, la niña del exorcista compraría sus vestidos y pijamas en la tienda de moda de eduardo manos tijeras y fredi kruger seria carnicero de un supermercado, jack el destripador sería actor porno, bambi cazaría con un ak-47 al cazador, el patito feo se haría la cirujía se cambiaría la cara para acabar de George Cloney para los gansos, los dinosaurios no estarían extinguidos y un tiranosaurus rex comió a rambo y a Conan el barbaro de un bocao, a Shandokan se lo come el tigre, a miki mouse lo arrestan por atracar una charcuteria y llevarse todo el queso, Aladdin tiene una plantación de opio en kazajistán y crea un monopolio exportándolo en bolsitas de infusiones, Ramses se despertaría de ser una momia y le llamarían de secundario para el videoclip de thriller de Mikel Jackson, Elvis sería abducido por alienígenas y poco despues formarían el grupo de música dance ''Daft Punk'', los fantasmas se verían y los demonios se venderían en botellas en tiendas de mascotas, los ángeles serían ministros del aire, los mosquitos pasarían a beber vino, tendríamos 7 vidas como los gatos, los visigodos invaden a los ingleses,Hitler crearía una raza de hombres-salchicha, a Stalin se lo come un bogabante, los mayas clonan a la abeja maya al encontrarla fumada en un país multicolor, el tabaco se fuma a los humanos, los caracoles son gigantes y muerden, los ciegos en vez de cupones venden películas porno, Tito Corleone crea una empresa especializada en pizzas congeladas y se vuelve legal, Sthephen king escribe un libro que se hace realidad y lo asesina un personaje.
En este mundo hay zoos de pókemon y digimones en China, las pinturas de los cuadros hablan y se burlan de la gente, el agua es de colores, los grillos forman charanga por los pueblos... no sé sé que algo me dejo
Mundo utópico del Castellano parte 2:
En este mundo utópico en el que fantasía es realidad tiene cabida el mercado negro de almas de personajes históricos.
Los fantasmas se dedican a las artes y tienen una orquesta sinfónica de alaridos nocturnos.
Las moscas son grandes como pelotas de fútbol y controlan el espacio aéreo. Los vehículos funcionan con vapor de agua como cada máquina creada,
las abejas en vez de miel producen y tienen destilerías de whisky de flores.
La comida no escasea, pues las ciudades son núcleos rurales en los que en cada jardín y corral es posible encontrar plantas con patas tan nutritivas como la carne de animales, es posible encontrar lechugas cantando al amanecer como las gallinas, y tomates con sabor a solomillo.
Los erizos se usan como cepillo atados a un palo, y caracoles hacen las tareas de la casa fregando el suelo.
Los gatos son alistados desde pequeños en una unidad para combatir el crimen de las ratas gigantes de ciudad que han mutado al cruzarse con una diosa encarnada en una rata que llegó a pesar y crecer media tonelada.
Las casas están aisladas del frío y del agua al tener revestimiento de setas de colores, es posible encontrar en los mercados, esencias de pensamientos y sentimientos positivos para usar sin fecha de caducidad. Los ácaros del polvo evolucionan y se vuelven grandes como protagonistas de la película ''Alien Carnage''.
Los murciélagos cazan pájaros, y los pájaros viven de polinizar las flores grandes como árboles.
A las serpientes les crecen patas y pelo y viven en las montañas cuidando rebaños para los dragones.
Los rusos se vuelven rojos y los Irlandeses verdes,
al diablo le da cancer de piel por ponerse cangrejo como un guiri, por veranear en Benidorm. El Dios de los Cristianos se cansa de mandar diluvios universales, y se hace una casa en la playa para vivir en ella con la Virgen del Mar, que pare un ejército de ángeles con aletas en vez de alas.
Dante es proclamado campeón de los pesos pesados, el dios griego Dionisio tiene una discoteca en ibiza en la que explota a musas como chicas de compañía hasta que le cierra el local la policía, Zeus se electrocuta al lanzar un rayo y cae a la tierra convertido en un pollo frito. Los libros se sueñan en vez de leerse, la tele se sintoniza con un cristal de cuarzo pues se emite en otra frecuencia de ondas. Los escoceses nombran al monstruo del lago ness caudillo y protector de las Tierras Altas, el inmortal de las tierras altas se casa con una mujer-cierva celta y tiene un unicornio de hijo.
Los cíclopes en vez de 1 ojo pasan a tener ocho como las arañas y se comen todo bicho que se mueve.
Los príncipes azules de cuentos de hadas en vez de matar dragones, cazan lagartijas.
El dios egipcio Ra hace construir una pirámide trescientas veces más grande llena de luces de colores y plagada de casinos al estilo Las Vegas donde Cleopatra pierde toda su riqueza y tiene que acabar empeñando a su marido y a toda su familia porque se hace ludópata.
La ciudad de Los Angeles se convierte en un guetto de ángeles mercenarios, caídos y renegados.
Los Indios Americanos cazan pioneros y se los fuman en pipas de la paz.
Blancanieves pasa de tener siete enanitos a tener siete gigolos gitanitos.
El señor de los anillos empeña el anillo para comprarse un pollo.
Roko Vidal muere de gangrena del pene al tener relaciones sexuales sin protección con una súcubo.
San Miguel se casa con Lilith, y le sale un hijo vampiro.
Los liliputienses construyen una fortaleza de un metro cuadrado y mantienen guerra contra garrapatas asesinas.
Los profetas desempeñan la profesión de psico-analistas y corredores de apuestas.
A las mujeres de la India ya les ha salido el tercer ojo.
Al ojo de horus le sale astigmatismo y se construye en Egipto una lentilla gigante para él. Continúa, es sólo el marco historico y social...
Tercera parte del mundo utópico del Castellano:
En este mundo imaginario a Angela Merkel un pepino español con patas la viola y la da por culo. Sarcossi es abatido en duelo por los tres mosqueperros. A Don quijote de la mancha se lo comen los gamusinos,
y a Sancho Panza se le aparece el Espíritu santo para decirle que está en cinta. En este mundo si se enciende fuego sale de la llama un fenix pequeño que te quema las cejas. La luna tiene un hijo con el sol siendo este un planeta pequeño de luz fría que orbita en torno al planeta tierra.
Los cometas se descubre que son de azúcar,
al caer uno y llenarse de hormigas.
Los animales se vuelven señores de la guerra y mantienen guerras tribales por las hembras.
Al Zorro le seduce Cameron Díaz y tras un revolcón que otro acaba pariendo zorritas.
Frankestein se enamora de una alcahueta ciega y sorda.
La princesa de las mil y una noches acaba con una vagina que le llega al ombligo.
Las tortugas ninja reciben el premio Principe de Asturias, a batman lo mata Blade al confundirle con un vampiro.
Cat woman se casa con el gato con botas y tiene gatitas.
Los árboles se vuelven carnívoros.
En Africa guepardos, leones y leopardos se preparan para las olimpiadas. En los mundiales de fútbol compiten dioses, filósofos, héroes y reyes de la antiguedad como en la película de Monty Phyton.
Las cruzadas se cruzaron tanto que acabaron como un lio con trescientos nudos dobles y triples, el imperio bizantino vendió a los turcos el imperio romano por una placa de hachís.
La dama de elche es proclamada Miss universo tras responder bien la pregunta de ¿qué pesan más, tus senos o los rulos de tus cabellos?.
Obama se descubre que fue blanco y que cambio su melanina al beber de tres a cinco litros de café todos los días.
En este mundo imaginario el agua emborracha como el vino,
y es como la poción mágica de Asterix.
Si te haces una herida y se te cae una gota de sangre en un ser vivo simple este evoluciona y te atormenta de por vida, o si le caes bien hace tu trabajo. Los pezones de las mujeres son bioluminiscentes por la noche.
Y la barba de los hombres tiene vida propia y nos roba comida cuando comemos.
Los ejércitos están formados por inmortales y tropas mitológicas de cada cultura.
Las mascotas prehistóricas abundan y es normal ver gente sacando a pasear a trilobites, o al mosquito de jurasic park.
Las brujas están más buenas que Carmen Elektra a los 23 años.
Los teutones hacen degustaciones gastronómicas y la fiesta de la cerveza con los dragones.
Los celtas hacen raves hippies en los círculos de piedra, y se pasan en círculo plantas alucinógenas fumables.
Las glaciaciones en las que nieva azúcar glaseada de nubes dulces, llegan en la primavera de las plantas, en las que el cielo y el suelo se cubre del polen alado de flores, que vuela y corre por todos lados.
Los hombres de las cavernas tienen cada cueva habilitada como taberna en las que se es posible degustar carne de dinosaurio, beber batidos de leche de murciélago y fumar tabaco español de la marca Bisonte.
Sé que me dejo algo, continuará...
Cuarta parte del mundo utópico del Castellano:
En este mundo utópico fantasioso los gnomos hacen carreras de fórmula uno montados en caracoles, los bichos son cobardes y huidizos aparte los que vuelan, dan más el coñazo porque te cantan a la oreja canciones de Luis Miguel.
Las hadas secuestran humanos para explotarlos sexualmente y compartir su cama.
Heidy es apaleada por un pastor serpiente peludo de los mencionados anteriormente, que le roba a copito de nieve para su rebaño.
Hércules se casa con Xena la princesa guerrera y tienen hijos que necesitan proteína de musculación para la dieta.
Aquiles le roba el bastón al doctor House y se hace el camino de Santiago.
Helena de troya se queda embarazada de un caballo y dá a luz a un centauro.
El rey Arturo se deja la espada olvidada en la cueva de los Nibelungos y es proclamado rey de Inglaterra un duende adicto al whyski de flores de abeja.
Los sueños e ideaciones cobran vida al ser pintadas, por lo que solo se permite las artes a los fantasmas.
El pirata Garrapata roba el Santo Grial al abordar un barco de los templarios y lo vende por una barril de ron.
Hanibal usa mamuts en vez de elefantes para cruzar los alpes,
los celtíberos ganan a los romanos y los usan de esclavos para pastar a los cerdogallos.
La armada invencible gana e invade Inglaterra, en todo el mundo se habla castellano. A Napoleón se lo come una hormiga-león al caer en su agujero.
Los sapos tienen pelo y comen conejos.
Los jabalís son azules y tienen ojos rojos como terminator.
Las tortugas están blindadas con titanio y corren como las gacelas.
En transilvania toda criatura viviente chupa sangre.
Las sanguijuelas se dedican a producir vino tinto y a tener bodegas tras succionar a toda la familia de Falcon Crest.
La casa de la pradera es maldecida por Holda que la convierte en la de House of Haunted Hill.
En los ríos es posible pescar espíritus que al cocinarlos y comerlos te dan todos sus conocimientos.
No existen entierros pues los esqueletos siguen caminando y con vida tras la muerte, dirigidos por el espíritu que como no tiene alas no va al cielo.
Poseidon ordena a las ballenas y calamares gigantes comerse los barcos que vean en la hora de la siesta.
Rasputin es ministro de Putin y ordena cortar la luz de toda Rusia en invierno para aumentar la población.
Los vikingos ganan la regata mundial de vela.
La bella es tan bella que la bestia le hace 5000 hijos.
A Froid tras un motín en un sanatorio mental, los pacientes le meten por el culo toda la medicación del centro, para acabar pariendo un fenix pequeño cabrón que le quema las cejas cada vez que se va de vientre. Continuará sé que algo me dejo...
TÍTULO ALTERNATIVO:'''El billete de 500 euros imaginario con el rostro del diablo en él' MiguelEstebn Martínez''
EL VAMPIRO ES EL REY DE LOS MUERTOS ASI COMO MI CORAZÓN SE HA QUEDADO CON TUS OJOS DE REINA NINFA MÍA
Sexta parte del mundo Utópico del Castellano.
En este mundo utópico mi reina tú serías mi doncella viviendo en una cueva con tejado de setas bioluminiscentes, tendríamos un dragón de mascota que nos prepararía buena carne asada y a la parrilla.
Tendríamos un caracol gigante de barril de whyski de flores en la cocina, en el huerto tendría mis lechugas con sabor a solomillo con patas. cantando canciones flamencas en el corral.
las amapolas se fumarían a las abejas y se harían eles con las mariposas.
Los arcángeles serían los ministros del aire.Mandarían tormentas en zonas de sequía y convertirían todo el planeta en un mundo en paraíso eterno.
Díos estaría casado con la virgen del mar. Y San Miguel tiene hijas vampiras con Lilith la sombra de Eva.
El papa sería el conde Drácula, en cada castillo viviría una familia de vampiros.
los fantasmas siguen viviendo, los esqueletos caminan sin órganos con motores de dinamo y un chip, y son usados por terroristas para hacer atentados.
Los peces saltan y muerden no existe la pesca porque todos los peces son agresivos y son como tiburones o barracudas.
El día de nuestras celebraciones pondríamos polvos de colores en las lámparas que serían luciérnagas cambiando su luz por otro color.
Los demonios embotellados que se venden en pajarerias te cuentan chistes y te hacen el lío para que los liberes y poseyan tu cuerpo pero en realidad son inofensivos.
Sé que algo me dejo.
El Castellano
Séptima parte del mundo utópico del Castellano:
En este mundo utópico las ninfas secuestrarían a humanos en la orilla de los ríos. Los elfos venderían plantas y semillas en herbolarios.
Los bosques serían orquestas sinfónicas de árboles cantando día y noche, las cigarras pesarían medio quilo y se usarían de despertador.
Los murciélagos comerían pájaros que fertilizan las flores grandes como casas, Ivan Hoe sería vasallo del rey Arturo que estaría gobernando Inglaterra sumida en un caós con dragones quemando las ciudades.
Las hidras serían animales comunes, y te encontrarías por el campo hidras pequeñas de 9 cabezas de 15 centímetros de altura o en cuevas de varios metros de altura.
Las gallinas serían basiliscos y matarían humanos. Los castillos estarían construidos con elementos naturales como el adobe, setas de colores o ramas de espinos y arcilla.
Los escarabajos serían judíos al ponerse de moda entre ellos el libro metamorfosis de Franz Kafka.
El presidente de Estados unidos sería un Indio de Alaska que haría ricos a todos los indios del continente americano con corrupción y casinos.
A las garrapatas en este mundo utópico hay que matarlas con un subfusil de asalto porque si no saltan y te chupan la cabeza.
Los gatos tienen miedo a las ratas de media tonelada. Las cucarachas son inmortales las pisas y salen cien más.
Los cactus cogerían resfriados y al estornudar dispararían espinas a treinta quilómetros por hora. El infierno sale a la superficie de la tierra cada vez que erupciona un volcán. Se crean ejércitos de tropas mitológicas para luchar contra demonios enormes que salen del fuego de los incendios y del infierno de los volcanes y las fosas oceánicas.
el aparato reproductor femenino emite luces y el masculino sonidos.
Los santos seguirían viviendo pero serían semitransparentes, translúcidos e impermeables.
Los fantasmas llevarían los museos y toda la cultura tanto del cine, música y literatura. Fernando alonso conduciría un gorrino vespino a vapor. Y a Miguel Indurain le retiran los tours al descubrirse que los ganó estando poseído por lo que no necesitaba respirar.
Sé que algo me dejo.
Octava parte del mundo utópico del castellano:
Erase un mundo utópico en el que los gatos serían los cocineros de lo que cocinan los italianos en sus restaurantes no porque sea celiaco y no tolero el trigo. Porque ellos cocinan comidas para los gatos que serían los jardineros de las ciudades de este mundo utópico como erase aquella vez el relato, no es una falacia ordinaria, quiero que leas y veas que te traigo imaginación embotellada, antes de comentarios desmotivadores exijo respeto y seriedad en sus comentarios, gracias de mis partes y adiós.
Novena parte del mundo utópico del castellano:
En este mundo los insectos son seres evolucionados y más inteligentes que los mamíferos, las plantas aparte de moverse y correr tienen cerebro y echan partidas de poker y black jack en los bosques. Los pensamientos se verían en forma de letras encima de la cabeza de los animales o de de las personas.
El queso de las vacas murciélago sería tan nutritivo como un bocata de embutido de cerdogallo con queso fundido.
Las serpientes en vez de mordiscos darían ostias como panes hasta te pegarían con palos. Las ratas tendrían su monopolio mafioso en las ciudades. Gengis Kan haría 3 murallas chinas más largas y gruesas que la existente. Los chinos se venderían en las tiendas de chinos para que trabajen ilegalmente para ti.
Los vampiros serían la clase social dominante seguida de los hombres demonio y los arcángeles.
habría vampiros gitanos y hadas ninfómanas en los bosques. Las ninfas siempre estarían desnudas y tendrían mariposas de vello púbico. Cada vez que haces el amor con una te crecen alas de mariposa en la espalda.
En este mundo utópico podrías casarte con criaturas mitológicas del bosque como elfos a centauros hembras. Habría druidas que serían los encargados de la magia. La magia estaría reconocida como religión,
Entre tanta mezcolanza de seres el dinero y el crimen no existiría sería un mundo semi-perfecto dominado por el sexo y los elementos útiles en la vida diaria de la naturaleza como recolectar plantas alucinógenas y nutritivas o setas con luz que cantarían rancheras. Robar estaría castigado con satisfacer sexualmente a las ninfas salvajes. Los dragones se casarían con doncellas, los guerreros celtas son hombres mitad lobo y les encanta los batidos de leche de murciélago y hacer submarinos de tabaco bisonte en las cuevas. Si agarras un seno de una mujer si a la mujer no le gusta el pecho te da un puñetazo en la cara.
No sé sé que algo me dejo.
El Castellano.
OCTUBRE 2014
Viento tráeme a mi amada,
yo que soy hijo tuyo
y de una serpiente,
viviré en aquel lugar
que la construya
a pico y pala,
mas con la azada
dueño duende de mi jardín,
pintaré en nuestra casa cueva
los más bellos motivos,
a sí sean sagrados nuestros,
te amo desde un lucero,
a esta única luna que tenemos
mas lunático ¿Quién es?,
pues el que viene de la luna,
todo siempre y para siempre bien,
yo más feliz que lombriz en su tierra,
que codorniz,
que perdiz,
que regaliz silvestre (Paloduz),
que una pintura acrílica con barniz,
éste es mi dia feliz
tras equinoccio de Septiembre,
éste es Esteban más sano que un gusano,
es guerrero hasta la muerte,
de lo suyo,
y un guerrero sin guerra
es como un pintor sin compresor,
sin brocha o sin pincel,
como un artista sin arte,
como un escritor sin leer,
como un artesano
sin materias ni manos,
vendería todo menos mi alma
ya que ni un demonio la aceptaría,
por ser yo más fuerte y grande que él
y demonio de cuernos Dios celta ,
amo mi naturaleza,
la de mi mujer la adoro
cada día con vela,
más pincel y letra
porque el alma suena.
NOVIEMBRE 2014
Yo crucé montañas, sierras...
sin ayuda, sin mirar atrás,
caminos silvestres interminables,
solo mirando detenidamente
cada planta salvaje,
robando semillas
desde Hispania a Britania,
pasando lo mismo en Escocia e Isla de Man
donde encontré un caracol amarillo
como el limón.
Amé cada vida en color
que va desde plantas
jamás cortando
a flower sin permiso primero
de la mata,
mas Lhiannan Shee me prohibió
y dijo que jamás y nunca en mi vida
cortase una rosa amarilla mía,
amo mi vida pasada de duende
que me he visto en sueños a mí
e incluso he entrado al reino tale
de mi familia.
Mi Lhiannan me regaló un escarabajo
verde inmortal en sueños.
Para defenderme en los sueños
de mis travesías por bosques encantados,
si lo pido antes de dormir
aparece en mis sueños this bug,
jamás me secará una amante del duende
por no tener alma humana yo,
fantasía o realidad cualquier semilla
llevo a flor en mi jardín por ser duende
únicamente agua y tierra.
Bajo el signo serpiente
se vio nacer a este hombre,
sabio que habla con las plantas
y le responde el espíritu que lleva cada planta,
y árbol, todo ser vivo lleva espíritu,
yo, Cuchulain para Lhiannan
vida mucho más antigua que soñé,
sin yo conocer
a sí me llamen loco
son mis creencias
al igual que yo respeto
demás religiones
igual se pide para mi paganismo,
o creencias a fuego y sello.
DICIEMBRE 2014
Lumbre
Eterna batalla a la noche
cuando noto tu ausencia
sólo que llegue la una
fría y yerta media
para sentirte, a si en sueños no hables
bella en sueños te besé
para siempre recordarte
ahora que sé tu nombre nada me vale
tanto han visto mis ojos
que éste mundo me arde
y nunca me abandonarás
en mi corazón te di templo
solo llamarte y me duele
para qué buscar fuera lo que ya tengo
para qué una vida
en la que no me dolías
bella hasta el horizonte
mi vida una, tú.
Estoy acatarrado,
con lo que el resfrío
me dice que estoy vivo
y menos tonto que ayer
Spero che qui'
tui sei convertita
en una bella fiorina;
Noster eternity walk toguether,
inside this human life we have.
What do you want to say to you?,
if the only thing I want to say to you
is that I love you..
is whaT there is
and what there is is what you see.
Green eyes, red blood,
red heart, blue soul,
my life around you.
Su naturaleza el mar de abril,
lo frío y húmedo de los montes y cordilleras,
la oscuridad y la tiniebla de una cueva
entre hermanos murciélagos.
Hermanos por vivir y existir en la naturaleza
agua y tierra entre surcos de barbecho,
dormir al ocaso del día,
el alba cuando el gallo nota cambio de luz.
Dormir con una lumbre,
despertar con tu sonrisa,
fumar tumbado en la hierba del monte,
ver amaneceres y lunas de hechicería.
Cosecha y agua de aljibe;
Mis besos sin final solo salvajes y libres
tuyos y míos
experiencias pasadas,
sueños serán,
sueños serán.
Y se irán, pero tú me despertaste;
cada día si estuvieras, un romance,
Serpiente sabia que sabe la nada,
lobo que baja a la ciudad,
pero que en sueños siempre vive en libertad.
Sinestesia vertical
Corazón rojo encarnado
río de flores desangrado
en la arteria de esta ciudad
junto aquel árbol
que no fue sepultado
aquí está mi cimiento
mas vamos que en esto
del querer soy diestro.
Mas no experto
como buen murciélago
mi vuelo al cielo
colgado cuando duermo
despierto coherente cuerdo,
no soy más que nadie
y nadie es más que yo,
todo es no creerse uno
quién no es,
y el amor pertenece a todo ser vivo
sin más razón que salazón
para qué ser solitario siempre
hay alguien más solitario
para qué ser torre alta y fuerte
siempre llega la torre
más alta y fuerte,
lo cortés no quita lo valiente
y mi esposa integridad a muerte
y a diente así yo no sea gente
que me importa
soy único muerto
en la sociedad dolente
y si atrapo espejismos
con la mente
es para no sentirme ausente
a amada sombra la deseo hasta
en su ángel silente,
en el amor no soy docente,
si algo sé es que soy más que la nada
filosofía mi entraña
locura mi mente,
y así más feliz
de amarme a mí mismo
y poder amar sin abismo
porque mi gota de esencia prendió
hasta su silencio y toda norma
pero espejismo fantasía es
y mi oscuridad sombra lejos de trampa
ya la soñé incluso antes de conocerla
y su voz me encanta
quinto levanta
tira de la manta.
Luna de fuego azul
índigo suspiro ilusionado
dejé mi pasado
mi vida atrás
pero con el saber
de el primer demonio ser.
No God,
mas todo abandonado
ángeles discuten en el cielo
y todos en la sombra
del cielo de tus ojos
sí, creo en algo
en que como es arriba es abajo
pudo ser mi pacto
y único que pedí fue vivir
y aquí estamos
para los Dioses honrarlos
y sí este fénix salió de la hoguera
para ser dragón en vez de pájaro.
Demonio antiguo
que habla en forma de poesía
esa es mi iglesia
eternal life
eternidad en mi mirar
en el frío de tu latido
en el silente, diáfano hogar
a ostión mordí la tierra
y qué pasó
la altura, la grama,
la verdad admirada
con quién hablas
yo ya estoy muerto
loco sí un rato
y hay amanecer
y hay anochecer
tú dices blanco
yo digo negro
más murciélago y no muero
tu amas al que nunca responde
llámose Deus
yo amo al que tanto llaman
Devil,
sí llámame Satán
no tengo un pelo de patán
vamos con el remember:
Saeta que vuela,
Saeta alada
Saeta del Demonio
yo te amo
llévame a tu morada
seré tu claridad
tu amor eterno
de Bécquer
vivito y correteando
llévame a tu hogar de flamas
Súcubo mujer
hagamos el amor
yo hombre condenado
hombre maldito
con la espada a dos manos
hombre sin alma
más vampiro que hombre
más murciélago
que el murciélago
destino lánzalo en réquiem
que si vuela es myotis
y sí confirmo el dicho
como es arriba es abajo
porque a tropiezo
lo he conocido
que reviente otro al enemigo
yo no tengo,
a God lo mató el hombre
si es que existió como hombre
con la iglesia hemos topado
que celebren su navidad
de cocacola,
yo soy de los antiguos
que ven la naturaleza
y sus fuerzas Dioses
este macho cabrío
segirá su brío
y amado destino
de tirar pa'l monte,
y ese monte es mi despierto
horizonte.
Hombre sin alma,
solo, solo, solo,
como la soledad
criatura alada del inframundo
Bean Sidhe llévame en tus alas,
mas seré Perseo esta noche
que el amor baña nuestros cuerpos,
donde el cuerpo y la poesía
hacen el amor de tu carne de mujer.
El Castellano
Miguel Esteban Martínez García
FINAL
FLOR DE CATALEPSIA, SOMBRA DE AGUA
ANTOLOGÍA PERSONAL
AUTOR MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
PREFACIO:
Él; nacido de una madre que era un castillo
y llamado el castellano, Förüq Estebar er-lobo
Bohemio
TODOS LOS ESCRITOS Y POEMAS, Y CONTENIDO
ENTERO DE ESTE LIBRO ANTOLÓGICO,
SELECCIÓN DE POESÍA PROPIA DESDE ALBORES
MI PARTICULAR DESEMPEÑO EN TEJER LA
LETRA DE UNA PASIÓN DE ARTISTA VIVENCIAL
Y VOCACIONAL LLAMADA VIRTUD DEL ARTE
EN ESCRITURA DE POESÍA EN VERSO DESDE
VERSO PROSÁICO A VERSO REDUCIDO, CON
INTENSIDAD Y CADENCIA LEJANA DE MUNDO
CONOCIDO´YO EL AUTOR DUEÑO Y
SEMBRADOR DE MI PROPIO CEMENTERIO,
ESTÁN Y SON OBRA DE QUIEN HABLA.
EL MUERTO INMORTAL AUTOR:
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
N.I.F. 09049494-Y
FÖRÜQ CASTELLANO ER-LOBO BOHEMIO
AUTOR TODO EL CONTENIDO EN ESTE LIBRO
HIJO ANTOLOGÍA PERSONAL:
FLOR DE CATALEPSIA, SOMBRA DE AGUA
NUESTRO HIJO LIBRO.
. REMINISCENCIAS A.T.T. ESTEBAN EL
CASTELLANO
En contenido abarca una selección de poemas desde 2007 recogidos en papel y pasados a limpio,
hasta últimos poemas de temporada presente de escritura.
Contenido
ÍDEM TRASNOCHADO: 7
BOSQUE DE JARDÍN UMBRÍO: 10
URDIMBRE ARGENTA: 12
Noche lúgubre y umbría: 18
SED DE REGUERO: 18
NOCHE VELADA: 22
CEGUERA: 22
Tu voz: 24
Los pequeños detalles: 25
Latido: 26
SER DE ESENCIA: 27
CRISTAL DE PULSO: 28
Hoy te vi ayer me doliste: 28
VORAZ DESTELLO: 29
SENTIR TRASPUESTO: 32
Piedra-corazón: 33
DESVELO DULCE: 34
Vívido desliz: 35
LUNA AZUL: 38
REGODEO: 41
SENTIDO DESCUBIERTO: 43
DESTINO EXPUESTO: 45
MIEL DE SOMBRA: 47
RAZÓN INMISCUÍDA: 57
AZABACHE DE VIDA: 59
Serenata nocturna: 60
PLAÑE TU SONRISA: 62
SEDIENTA LÍNEA: 63
INFINITUD DE ÉTER: 65
SONRISA ALBA: 66
DEVENIR DE CRISOL: 68
DICTÓ EL ARA DE SANGRE: 70
QUIEBRO LUMINOSO: 71
PROPÓSITO: 73
SERVIR ANGELADO: 76
PESQUISA FLAMÍGERA: 78
VIDA EN TU VALS: 79
SENTIR DE CORAJE: 81
SANGUINOSO AÑIL: 82
ILUSIONES EN MANO: 83
GRANA DE ESPIGA EN PECHO: 84
CONCAVIDAD PRESA: 86
MIRAR SU MAGIA ESENCIAL: 87
SENTIR EN BRUTO: 89
SENTIDA SENDA: 91
DESLIZ PASAJERO: 91
SENTIDO OCULTO: 94
SENDERO DESPIERTO: 94
A FLOR DE PIEL: 99
9 100
Suicidio 100
PRIMAVERA: 102
POEMA AL ALBA: 103
Subrepticia 103
Espiral de reposo 104
Atisbo de nácar 105
Canto triunfal: 105
Obtuso marjal: 106
Filosa ataraxia: 107
Pletina alada escarlata: 108
Olmo de espíritu, tercerillas y serventesios: 111
Nocturnidad en colmillo: 112
CONTIGO SANGRE REFULGE: 114
PREÁMBULO DERRAMADO: 118
CATALEPSIA Oda a Leannán Sídhe Musa: 119
Silencio regenerado: 120
DICHA AZUR: 124
Vientecillo elucubrado: 124
Clavo en sombrero: 126
INMENSO PLACER SECUAZ, INEFABLE: 129
CONOCER: 131
JAMÁS MIL MÁQUINAS PODRÁN HACER UNA FLOR: 133
GERMINARTE: 138
EXCELSITUD ARREDRA: 140
LA MANSIÓN DEL RAYO: 142
REGATO DE MI SED DE REGUERO: 144
CREPITAR MINERAL: 146
AMALGAMA JACTA: 148
RUEGO DEL METAL NOBLE: 150
SENTIMIENTO LABRADO: 153
AZAR RELEGADO: 154
SENDERO MI SUERTE: 157
SOTO EN SOL NACIENTE: 158
NIEBLA ENCORAJINADA: 160
La polilla negra: 163
HÁLITO REVERBERA: 164
ELEGÍA ENCAMINADA: 166
Deirdre reina mi dolor, Cosantes: 172
DULCEZA EN CLAROR: 182
SED QUIMÉRICA: 184
OROPEL: 185
LECTURA:
ÍDEM TRASNOCHADO:
Abro esta acuarela terrestre,
pinceles mundanales
que creen que vencen,
es la hora, cuelgo esta soledad
la pongo a bailar,
entre peinetas de brujas
que tengo secas,
abren mis costillas
erosionadas de humos fugaces,
desvalijan blancas ideas,
un ajuar de esferas rotas,
en este diáfano cuarto
de ausencia habitada y ocupada
por mi negro gato,
desploma mi cloro
la z de mi verde mosca,
relampaguea mi costado,
sin sonido ni crepitar interior,
gotea mi retina
por un bostezo que tiembla,
grajean mis pestañas
un halo presidiario
de esta negra noche,
no tengo araña
ella me tiene a mí,
un cordel sin boca
de un evanescer sin sed,
no gasto el punto a mi secuela,
hoguera es tan común
que quedará a la espera,
abro mi blindada generación yerta,
una caja donde duerme
donde reposa mi sangre caliente,
friega mi suerte
la preciosa baldosa
donde lentamente sucumbe
mi talento ausente,
por esta sed demente,
vive que vivirá siempre
mi temple resplandeciente,
mi amor en un tiesto pongo al frente,
florean semblanzas ocultas
que trae mi difusa mente,
yo valgo lo que no vale la cuantía
hasta estirar mi claro
cavando mi fosa.
Buscando encontré
al que me buscó en un papel,
dije no fui yo
fue aquel que se casó con el ayer,
enclaustra este eje de rama,
porque llorará savia
que exclama estoy llorando
una pletina en oropel,
hasta yo envejecer.
El Castellano a 25-04-2017
BOSQUE DE JARDÍN UMBRÍO:
En el bosque de tus ojos quiero perderme.
En el campo celestial de tu mirada
Vivo y quiero vivir, siempre.
Del paraíso de tu cuerpo,
Soy caricia de lluvia,
Soy melodía de viento,
Soy te amo sin tiempo.
Porque de tu corazón, soy eterno,
Y tu amor es lo más bello,
Y caigo en el sueño
En que abres tus pétalos para mí
Bajo aquel árbol del deseo,
Y crecen las flores
Y el lago emana
De la belleza de tu alma
De las violetas y amapolas,
Del jardín de la alegría,
Eres tú la ninfa mía.
Y las flores de malva tienen envidia,
Las rosas celosas crearon sus espinas
Porque mi amor fue para ti.
Las campanillas más sencillas,
Crearon en flores sus voces,
En notas de amor al que llaman
Y buscan trepando y enredándose,
En la maleza y la piedra,
El helecho en duelo
Rechazó la flor y la semilla,
A esperas de ganar tu amor,
Con sus hojitas en belleza
Que se despliegan como un caracol.
Las droseras ansiosas
Su trampa desplegó
En son de atraparte
En sus dulces gotitas de néctar.
El musgo enamorado así se quedó,
Pequeñito y suave como el terciopelo,
Para acariciar tus pies y sonreír
Con la lluvia y el agua.
Donde la belladona cantaba
Y de la luna se creía preferida,
Abrió su amapola azul y negra
La adormidera,
Siendo el sueño de las hadas,
Su prima la golondrinera,
Su amapola amarilla,
Fuego del bosque de las sombras
Liberó su ninfa con una gota de rocío,
Con ella llegó la primavera,
Contigo ninfa mía llegó la belleza,
Y tú amor en alas de mariposa,
Abrigaste cada sueño,
Arropaste cada pensamiento,
Y ahora no sólo eres mi amor,
También la más linda flor de mi sentimiento.
Nunca marchitarás porque si pasa, desnaceré yo.
Gran luz, gran luz al conocerte.
Cabalga un sueño hermoso en los albores,
Cruzando el mar, su alma está.
Su casa, su amor y su hogar
En el corazón de su doncella está.
Guerrero niño, vasallo nombrado del amor.
Gran luz en su reino, creado de ilusión,
De fuego incombustible su interior.
Cabalga su amor, su doncella más cerca está.
Crecen las flores, en los alrededores están.
Deleitadas y coloradas,
Dejando en pétalos su complicidad,
Para el romance que viendo están.
Mientras va el río de colores
Con paso lento y decidido.
En besos de gotitas,
Que dan vida a las almas al pasar.
Llora una plantita con una gota de rocío.
-¿Qué pena tienes tú plantita,
Tú que eres linda y la luz y el río
Te besa y acaricia cada día?
-Mariposa quisiera ser,
¡Mariposa quisiera ser!
Volar a la otra orilla
Y a mi amada margarita,
Que está solita, poder besar.
Al viento le pido cada día
Que traiga sus semillas,
Para que con las mías,
Abandonemos la soledad.
El castellano
URDIMBRE ARGENTA:
Puedo escribir todos mis pensamientos
Y ninguno podrá reflejar mis sentimientos,
El amor no quiere ser pensado,
Ni si quiera ser conocido,
Sólo sentido.
Yo te sentí amor
Y por querer pensarte
Desapareciste entre la tenue luz de luna que me abrigaba.
Allí la razón apagó los latidos de un corazón.
Como tierra yerma
Marchitó aquella flor que un día llamé amor
Y ninguna pudo ocupar su lugar,
Sólo la hiedra brotó hasta tapar la luz que me daba calor.
Pero yo te sentí amor.
Y lo vuelvo a hacer.
Cerré los ojos y allí estabas,
Como si no pudieses salir
De mi interior.
Como si quisieras besarme
O decirme algo.
Pero tú bella en sueños
No hablas.
En sueños no hablas.
Y nos quedamos mirándonos
A ciegas.
Yo te aviso que en el bosque
De mi mente solo hay un camino,
Y es un laberinto.
El final lleva a despertar
Y enfrentarse con la realidad.
Pero tú bella en sueños,
No me hablas.
Y yo a primera vista
Me enamoré de ti,
Por si algún día acaso
El sueño se cumple,
Y ya de realidad me dices,
Te estaba esperando
Siempre te amé.
Logré lo que soñaba,
Logré encontrar amor,
Conseguí felicidad en el pequeño
Y largo momento.
No entendí de ella sus lágrimas,
O quizás sí.
Si su felicidad fue la mía,
Al revés también sería.
Al revés también sería.
Y yo la esperaba como
Aquel día.
Pero con otra compañía.
No lo elegí, sin saberlo
Ella seguía en mi camino.
La consolé cuando llegó en lágrimas,
No me dijo por qué,
Pero sentía su dolor.
Tenía un presente,
Y no soportaba la idea
De quien por ti sufre
Es quien te quiere.
Y esa noche lo que tenía,
Se esfumó como suspiro
De oscuridad del callejón conocido.
Esa noche vinieron los jinetes del tiempo,
Me mataron en el sueño,
Pero el sueño lo termino yo,
Y mejor esa noche solo me quedo
Contigo amor y mejor,
Muero con tu calor
Para terminar en ti con el color
De caricias y besos
Como un romance que no acabó.
Buscándote en el silencio.
Buscándote debajo de una piedra,
O en el fondo de una cueva.
En la flor sin cortar,
O en el fondo del mar.
En la nube o fuera del cielo.
En lo que se ve,
Y en lo que solo se siente.
En el sueño y en el recuerdo,
En mi felicidad o en mi tormento.
Buscando, te encontré lejos.
Ahora que en letras te tengo
Estás cerca de ser mi vida
Y yo, tu verso.
Bella, vuelas libre doncella,
Sol te toca, acaricia tus efímeras alas
De mariposa desvelada.
Viento te lleva, allí donde el amor creó,
Reflejo de libertad soñada.
Encerrada en tu sangre de lluvias pasadas,
Dejaste atrás nubes de tormentos,
Rozando tu destino me arrastras.
El manto de las hojas te protege,
Buscadora de sueños
De la fronda de mis sentimientos.
Viviendo en la ternura de la dulce mirada,
Volando con la fuerza de la palabra sincera.
Durmiendo hasta que se oculta el alba,
Ángeles y dragones arropo en el corazón.
Para tu despertar, mi luz quisiera llevar,
Para encender tu corazón, el fuego de mis ojos,
Cientos de tonterías para tu sonrisa.
Entre las flores de miel y azúcar que forman tu piel,
Pintando mi vida.
En la caída color gris quedó,
Color gris quedó.
En la huida el tiempo y la situación
Que cortó un camino en dos.
Vuela libre, pidiendo ser vista de nuevo.
Su esencia mariposa del amor.
Me llama en la noche,
Me acaricia su velo,
Viene altiva en cada sueño.
Con sus caricias, desvanecerse quiere,
Renacer en la oscuridad del ocaso eterno.
Comprendiendo y llevándose mi dolor.
Yo, sin comprender su aparición.
Recreando su alma viajera.
Sueños serán, mas cada día la amo más.
En la belleza de imaginar,
La complazco con la sencilla palabra de amor
A su alma sin cuerpo.
Que me acompaña desde que sufro
Por el querer.
Fantasma o fantasía,
Me guarda caricia,
Sin saber yo su razón.
Ella, hasta dudando de su existir,
Que yo por amar, la amo.
Más no sé la razón de su compañía,
Cuando el reloj marca la una en madrugada.
Más si pudiese saber preferiría no saber,
Quién es preso de quién o si ella y yo,
Somos presos del querer.
Te vi detrás de la estrella más brillante
Del azul nocturno eterno.
En el suspiro de amor que corre y descansa
Entre la inmensidad de un parpadeo.
Entre la oscuridad que alcanzó a ver
La belleza que envuelve tus piernas.
Adentrándome para reposar contigo,
Siendo una sombra más,
Pero especial para ti.
Te encontré en mi sueño más cálido,
En el cielo encerrado que liberé.
En la noche que la luna baña tu cuerpo,
Y en la noche que mi amor corrió por tus senos.
Y te amé aunque fuese un día en la penumbra,
Para así, por fin, no olvidarte nunca.
Es solo la vida en mis ojos donde un día
Se mide por las veces que te imagino a mi compañía.
Y una noche la vida de mi palpitar sin sueños.
No importa que no te tenga,
No importa que no te vea, porque te siento,
Y te siento más allá de donde acaba el firmamento,
En todo lo bello, en mi nostalgia y en mi recuerdo.
Donde me di cuenta que el sentimiento descansa,
No muere como la flor sale en primavera.
No importa que no te tenga.
Porque después del invierno volverás a florecer,
Te ame y a mi pesar y a mi conciencia te liberé,
Pero con el saber que si vuelves será para quedarte.
Porque te amo a pesar de tus humores y tus huidas
Porque a mí no me engañas, yo soy para ti,
Y muero si no me cuidas. Porque te entregué mi palpitar,
Por lo que somos y por lo que seremos, nos queremos.
No vivo viendo tierra vivo para sembrar en ella,
Y tu amor prefiero sembrarlo a diario,
La luna de guía marcando a tu presencia cada poema y cada letra.
Noche lúgubre y umbría:
A ti noche oscura te escribo.
¿Por qué no me das el sueño que tanto ansío?
Paso noches enteras de insomnio escribiendo poemas hasta enloquecer, llevo ya cinco días sin dormir y veo que se van mermando mis facultades mentales y escribo frases sin sentido,
Garabatos en hojas de papel.
Me asomo a la ventana y contemplo las sombras de la noche como fantasmas,
Deambulando sin rumbo.
Mientras apuro la botella esperando matar esos fantasmas de
Mi cabeza que suenan como delirios con sus voces.
Me estoy volviendo loco.
Solo veo sombras y figuras que se dibujan en tu oscuridad como demonios.
Sólo los gatos y lechuzas salen a cazar como los murciélagos.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo que bajo tu protección de tu oscuridad
Ven salir los ladrones y asesinos a hacer sus acometidos.
De muerte y delito de acero y sangre.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo.
Tú que no entiendes de genocidios ni de muerte ni de fosas comunes selladas con cal y tierra ni de fusilamientos.
Tú solo ciegas la luz del sol y solo el fuego y los fusiles iluminan
Tu oscuridad.
EL CASTELLANO
SED DE REGUERO:
Manantial fulgente de inspiración,
Es tu mirada tierna sin compasión.
Matices de esmeraldas tu pupila
Enfrentada con mi pupila.
La golondrinera el aroma
De tu piel frágil y esquiva,
Con sus amapolas amarillas
El color de tus cabellos.
Un piropo, un suspiro
De mi amor eterno.
Irrefrenable el deseo,
De entre tus afiladas y moldeadas piernas.
Que corre, que escapa y vuelve el cosquilleo.
Tu boca junto a mi boca bebiendo
Del mismo agua del deseo.
Tu piel con mi piel avivando
El fuego del sentimiento.
Aunque te marchaste, sin cumplir mis anhelos,
Me robaste mi primer beso
De niño que nunca había sentido el amor.
Me dolió que te marcharas
A otro país sin despedida.
No te pude decir que te amaba,
Pero si regalarte una rosa amarilla.
Supuse que te lo imaginabas.
Desde que tú recuerdo me acaricia,
Siembro en la misma jardinera,
Al último suspiro de verano,
Golondrineras amarillas y al igual que espero
Sus amarillas amapolas en primavera.
Espero que vuelvas aunque sea como mariposa
O abeja a mi terraza acariciada por los álamos
Y bañada por el monte de horizonte.
Espero.
Vida en gris de la que tú eres mi luna esperada.
Se cavan surcos de ti en mi alma soñadora,
Por donde fluye el solitario beso;
La tierna caricia anhela ser algo más.
Mis ojos quieren atraparte en su firmamento,
Mis sentimientos arroparte con fuego.
Pero yo sólo te quiero a ti, mi vida en verso,
Mi motivo para ser solo tuyo, para no necesitar nada más.
Ser el sueño hecho realidad, la felicidad de dos caminos
Que se cruzaron en el destino.
Tiempo para esperar, vida para soñar,
Cuando te vi llegar provocaste mi despertar,
Y ya no quiero descansar, solo luchar, te quiero amar.
Nos merecemos algo más en este papel que jugamos,
Saber si nos amamos, si el deseo quiere ser pasajero,
El mío quiere hacerse eterno y ser tu sustento,
Sólo espera su momento, el sueño para vida plena,
Avanza cruza cada noche el cielo azul de matices violetas,
Siempre te encuentra, la soledad me abandonó para poder servirte.
Ahora avanza la duda, el temor, si realmente te merezco.
Pero del corazón nace mi valor, lo sincero el dulce te espero,
El te quiero.
El pensamiento que paraliza cuando te veo, la sensación del amor.
Todo lo que me queda por decirte y lo que no te dije,
Vida para vivirte.
Avanza, no se separa, no se aleja, te alcanza.
Porque eres lo más hermoso de mi mundo,
Camino que surca nuestro antiguo paraíso.
Permanece como el compás de mi pulso,
Desde que te conocí supe para lo que viví.
Fluye mi vida por tu cauce, el camino de mi amor;
Allí donde viven por el querer alegrías.
Voy allí y te encuentro dormida, al final del bosque,
Te encuentro soñando, con otros días de amores profundos.
Como el azul del cielo que a tu lado te hacía brillar,
Mi caricia hace una pequeña sonrisa en tu rostro,
Mientras acercas tus labios para besar los míos,
Y fundimos nuestra vida bajo aquellos árboles.
Vistas de un amor eterno que devolvería vida,
Para quitar su despertar de melancolía.
El lobo vigilaba su guarida allí su mano le sacó, para ver el mundo.
No quiso volver a su cobijo, las palabras dulces y tiernas,
Guiaban mi alma a viajar, uniendo su ser volaba hasta regresar.
Te necesito más allá de este sentido que grita por tenerte,
Te necesito más que el fuego a la madera, gritó mi vida por tenerte,
Y a la vez te adoro, en cada golpe de viento y reflejo.
Me encuentras, y tu recuerdo reciente me besa,
Mientras no puedo evitar recrearme
En el deseo y corresponderte.
Transparente sentimiento para sentirlo una vez más.
La noche está llamando, moviendo su tranquilo velo,
A flor los recuerdos, que te piensan, una vez y otra.
En la soledad, mis manos quieren sentirte, mis ojos verte,
Maldita mi suerte, que dejó que te fueras para soñarte.
Ahora, los minutos me ganan sin ti, no quiero el cielo sin ti.
Como la brisa a la mar, mi alma reclama tu compañía,
Cómo encontrar sentido en lo vivido por su final, si ya no está.
Tú mi noche y mi día, quiero verte una vez más,
Para así no sentirte soledad en la oscuridad,
Tu reflejo llegará, allí donde se encuentre mi felicidad, tú estarás.
Hoy la noche me llama una vez más, para soñar que a mi lado estás.
El tiempo para sentirte, lima mis nervios con solo mi despertar,
Y no verte llegar, para no verte llegar.
Amor dónde estás, si te fuiste quién te podrá domar.
El castellano
NOCHE VELADA:
Luna plateada de mi cielo, en las noches voy a tu encuentro,
Pero te escondes entre bloques de hormigón y cemento.
Quiero verte, pero incluso te escondes, por las violetas ramas.
Mas los dragones, del cielo sonámbulo te acarician.
Cielo obtuso, de sueños fluorescentes,
Tú, de color líquido, solo templado con miradas intermitentes,
Por el tiempo de espera angosto.
El murciélago baila con el colchón de tu luz,
Rasgando sombras,
Para reposar siendo una más.
Oscura nebulosa de tu vítreo trasluz dime,
Por qué te busco incluso estando solo.
Flores opaco reflejo de luz violeta incluso de noche;
Artificie luzca.
Lucero de ciudad,
Rompiendo la obscuridad.
La noche se detiene para sentir que estás conmigo otra vez más,
Humo, humo, humo.
De tierra a ceniza llamando,
Le ganó el cigarro y el trago,
Recuerda que tus ojos tienen sangre
Y también se emborrachan.
Cállate sólo eres una fantasma que yo sólo veo.
El castellano
CEGUERA:
No lo veo, pero yo también lo estoy sintiendo,
Esto no es sólo lo que siento, es un simple lamento,
De no hacer todo lo posible porque me sientas en este momento.
Por darme a mi momento, sin haber parado a pensar cómo iba el tuyo,
Quiero compartir que mi base de existir fuiste tú desde conocerte y verte,
Esta es mi vida con la enfermedad mía de la ceguera.
Decirla que la amo aún así de no poder verla, no se vaya de mi lado.
Entre noches de humo y suspiros de minutos,
Busco tu aroma en mi piel entre el calor de mi cama;
Tu sabor en vasos de agua.
Vivo muriendo en el oasis de tu compañía,
En tus recuerdos, esperando la arena de tu piel para adéntrame.
La luna perpetua de noches en vela de navegante,
Sin mar ni tierra, ni final, solo con un duelo al tiempo de tempestad.
Ya olvido quién soy para adaptarme a un tiempo que no me corresponde,
Soñando noches de miel, despertando nubes de nostalgias,
Acercándome a ti al cerrar los ojos alejándome en la tristeza,
Nadando un océano sin saber nadar, navegando a la deriva en tus piernas.
Adentrándome en tu vida sin querer, donde ya se juntó mí querer con el tuyo,
El halagar cala dentro y profundo, llora la distancia;
Comienza el despertar de los tambores, llamando a los soldados de la tierra.
Con el susurro de la luz en cristal de gotas de agua,
Pensamientos cálidos me arropan tu compañía,
Solo una vida solitaria desde aquella lejanía;
Un sol pernocta durmiendo disfruta su luna
Con tacto terciopelo una vida de amor eterno
Un caballero busca a su mujer la extraña.
Avanza entre montañas de azores
Y valles de bosque y ríos dulces,
Noche de amor entre nubes acolchadas
Con el frío de un mundo en sangre que estaba en guerra.
Ahora su patria era su tierra en la hoguera.
Se despierta frío y solo tras pintar con nostalgias recuerdos.
El castellano
Tu voz:
Eres fuego en el agua,
Eres luz en la noche,
Calor en mi alma de hielo,
Amor en mi mundo de ilusiones en viento,
Bésame al final de este deseo de chincharte,
Acaríciame con tus labios,
El mordisquito en la oreja,
El susurro en el cuello,
Noche de eco entre imágenes,
Pupilas mirando pilares al cielo,
Entre verde y violeta de árboles,
Ojos de gato, tu gemido,
Tímido y feroz,
Tu voz.
Entre fuerza y coraje saca su garra al tiempo,
Lo efímero del segundo al pasar del minuto,
La seda del sentimiento, en su carita del beso,
El piropo y su carmín el despertar de su recuerdo,
Acariciando su pelo siendo sus ojos, siendo su boca,
Siento sus nervios, me atrapan enredándose contigo,
El momento que dejó el silencio,
El tímido beso con fuego en el interior, su dulce sabor.
Mariposas recorriendo cada paraje de la piel.
Tú y yo solos los dos, tiempo de infinito, sensible el instinto,
Se sirve de tu aliento, crea mi armonía,
Cada caricia te hace real.
Sostén mi placer cada anochecer,
Sé el tiempo que nunca se fue,
Sé mi sonrisa y cada imagen que quiero ver,
Detén este instante para hacerlo real,
El sueño hecho realidad, la historia sin final,
Mi eterno amor, sin dudar,
Corazón carmesí, como flor de abril,
Navega mi sensación.
Es un te amo lo que me encanta escuchar,
Los mil que me quedan por decirte;
Los que nunca se irán.
El castellano.
Los pequeños detalles:
Una nube de tranquilidad me cobija mientras observo el paisaje;
El caserón vuelve a relucir con el cuchillo dorado de la piedra caliza, que resiste el embiste
Del viento y las lluvias;
La lagartija tomando el sol está, tuerce la cabeza y cierra un ojito aprovechando los últimos rayos de sol;
El escarabajo de tierra camina lento con sus fuertes patas, tropieza y vuelca quedándose
Varios minutos intentando ponerse derecho;
Mientras, se despierta uno de los dos grandes murciélagos, que aquella cámara de la gran casa rústica, ocupaban.
Amapolas y amarillos de espinos, con el verdor de los pinos.
Vides para cuidar y cultivar, un pequeño jardín con caseta para las gallinas;
Frambuesas y arándanos, en un pequeño huerto al lado de la puerta,
Un pequeño están que de azulejos en el aljibe, donde nadan tres carpas y un barbo,
Oscurece y el joven rapaz, de cernícalo primilla, del palomero oscuro de la casa,
Se lanza a por un péquelo ratón de campo, que andaba merodeando, buscando algún resto
De harina o de grano.
Con los primeros rayos de sol, la mariposa de bellos colores azulados, dando sus aleatorios
Vuelos en busca de flores de lavanda, es atrapada por el pequeño mochuelo, que salta del agujero de aquella antigua encina.
El castellano
Latido:
Latido constante, clavado en tu mirar,
Caer y despertar en el incesante sueño,
De compañía a tus efímeras y angeladas
Alas de tu eterna alma.
En sinfonía plena con mi sentir,
Plausible en verso y gesto
Que arde en tu corazón de fuego.
Aviva el recuerdo creando presente
De este soñador despierto,
Para volver a anhelarte mi amor eterno.
Susurro del viento trayendo tu brisa
A mi sentido despierto cuando te veo.
Latidos al compás de tu sentimiento,
Viendo la vida en colores,
Desde que mi pensamiento invades.
Y vivo colgado en tu pestañeo,
Para ser el poeta de tus ojos,
Sencillos y tiernos, vivos y aceitunados,
Y corre mi vida por tu cauce.
Donde el río creado,
Fueron mis lágrimas de felicidad,
De sentirme amado.
El castellano
SER DE ESENCIA:
Soy sólo lo que tus ojos
Dictaron para tu corazón.
Soy sombra, reflejo y luz sin otra razón.
Soy verdad, ilusión, camino y mentira,
Soy amor.
Soy tantas cosas, pero para ti
Lo que sólo tú quieras.
Deseo de nuestras almas risueñas.
Pasión de espíritu que sujetas,
Sólo tú eres vida para el telar de mis letras.
Surges como viento, despertando el dragón
Iluso y generoso, cálido y tierno,
Del interior de mi sentimiento.
Sangra versos humeantes para ti.
Sueño angelado de amor sencillo y entregado.
Y te recuerdo con este beso a tu imagen
Que camina bajo la farola iluminando el ayer.
Mi palpitar por el hilo del sentimiento sostienes.
Y caí y me enredé en tus caricias,
Reales o escritas para sentir
Que sólo soy lo que tus ojos y corazón,
Marquen para ti,
Esperando algo más que un beso ser.
El castellano
CRISTAL DE PULSO:
Inocencia que se hace belleza,
Sonrisa que ilumina el alba,
Con el gorgoje de los pajaritos.
Si el amor no fue a buscarte;
Tú fuiste a encontrarlo.
Y yo sólo quiero lo que quieras,
Y así soñar corresponderte.
Vi el amanecer y el anochecer
Del bello matiz en tus ojos
Que suspiraron.
Y mi amor viajó del bosque
A la montaña y la montaña
Me hizo hombre
Para poder amarte.
Hoy te vi ayer me doliste:
Te veo y reluzco que te quiero,
Que por ti me encuentro,
Te miro y mi mundo se vuelve loco,
Te deseo y mi sangre arde como fuego
Sólo un pensamiento: que yo nací para tus ojos.
No existe reloj ni conteo que detenga este monumento.
Mi vida pasa fugaz como el viento,
Pero mi palpitar sabe que te seguiré queriendo,
Estoy enloqueciendo, te veo en todas partes,
En mi cama, bajo mis sabanas, en mi cuarto,
Cuando miro de noche, las sombras dibujan tu figura,
El viento me susurra tu voz,
Las flores me recuerdan tus labios,
El agua tus besos, los rayos de sol tus cabellos,
Tú eres mi doncella yo soy tu bohemio.
Mi alma me dice vive amando, muere luchando.
El coraje de luchar por lo que uno quiere en la vida,
Es lo que da respeto.
Pero tú tienes otro dueño de tu corazón,
El desánimo me invade como olas,
Golpeando el acantilado de mis pensamientos,
Te llevo dentro de mi ser,
No sé vivir sin ti, quisiera ser yo el que te abrace,
El que te bese, el que te diga al oído
Que solo tú y solo yo, inseparables los dos.
Una historia de realidad, imposible de contar,
Indeleble en mi interior,
Ya no puedo soportar otro día más sin llorar,
Sé que me sigues queriendo,
Pero ya pasó ahora solo queda el recuerdo,
Como un boceto que se dibuja cuando cierro los ojos,
Despojos de aquel amor vivido,
Como un silbido llamando al olvido.
El castellano
VORAZ DESTELLO:
Resplandor de auroras en los recovecos,
Donde se refugian mis ilusiones en sueños.
Tu tez conoció mis manos y mis manos te moldearon
Para su recuerdo.
Eterna batalla a la noche, cuando noto tu ausencia,
La noche que galopa y yo sólo con la palabra sufrida
De nuestra vida sentida.
Ya no hay felicidad entregada con besos
Y roce de nuestros cuerpos,
Medida y entregada, ya no buscaré en esa nostalgia.
Me enamoré de la vida y nada me falta,
Porque todo me llena.
Y tú mi bella, volviste a pasearte por mis sueños
Y en sueños nos reconciliamos.
Desperté y sentí de nuevo el dulce tormento,
Para vivir soñando con el recuerdo,
Y amarte soñando despierto.
Si me marchito sin ti,
No me quemes con letras indecisas,
Porque vives en mí
Y te daré lo que pidas.
Si permanezco en tu recuerdo,
No me quemes, no llames al olvido.
Si acaso me dueles
No es por tus errores.
Es por tus triunfos, sobre mi palpitar.
No me quemes con una lágrima,
Sólo con un beso.
Si te perdono y no vuelves,
No me quemes, porque
El fuego no se quema
Se aviva.
Tu ausencia consume mi alma.
Aumenta mi llama,
No preguntes por qué.
No me quemes sin amor,
Porque no eres mentira, eres pilar,
Pilar que sostiene mi verdad,
Que aunque duelas,
Eres mi amar y no despertar.
No me quemes.
Si vuelvo no te guardes,
Porque vivo de tus detalles.
No me quemes, con amor silenciado,
Haz brillar este fénix.
Sólo calienta este corazón,
Y te dará su fuego sin medida.
Pero si ves que mi llama está extinguida,
No me guardes las cenizas
Échalas de abono a las rosas amarillas.
No me quemes, porque me dejo quemar,
Soy fénix arraigado a tu bondad.
Si el cielo se cierra,
Miraré tus ojos para tener mi cielo,
Mi palpitar te dirá
Que seguiré a tu vera.
Si mis ojos se cierran
Quiero tenerte cerca
Y, coger tu mano,
Sentir que no eres
Un sueño que perdí.
Si despierto te vivo,
Soñando te sigo amando.
Cogiendo cada estrella
En una letra para ti, tú la más bella.
Y el firmamento se cierra
Sin tu mirada tierna.
Mi deseo y mi motivo para acariciarte.
Pasarán lunas, pasarán soles,
Y el sueño volverá,
Con cada latido tuyo.
No te dejo una flor, te dejo las semillas,
Los frutos de este amor.
Porque en mi jardín sembraste,
Tu belleza y bondad.
Porque me llenas de verdad.
Puedo describirte como mi vida giró a mejor,
Con tu sonrisa clavada en mi mirar,
Y el calor de cada letra tuya sentida.
Te quiero de verdad.
Siendo tus nervios que atrapan cada sentido tuyo,
Cada lima que afila tus pensamientos,
Sería tu imaginar constante en amor de dos,
Sueños de un romance correspondido,
Donde no importaría quien se enamoró primero.
Ya estaría atrapado en tus dulces suspiros de amor,
Y tus ardientes palabras de ilusiones lanzadas.
Clavándose en mi alma, lanzándote flores,
Estarían mis poemas y mi razón perdida en tu corazón.
Siendo el poeta en tus ojos, el agua de tus besos,
El rocío en tu cabello, el fuego de tu combustible.
El que guarda tus caricias y hace inventario de cada detalle.
El fiel, el humilde y el noble, el sincero de sentimientos.
Simplemente sería yo, brillando con tu amor.
Quien invocó a la tempestad de roce de nuestros cuerpos.
Quien se abre camino galopando en tus piernas,
Para descansar en tu boca, siendo hielo y fuego a la vez.
Siendo anhelo escondido en corazón,
Y corazón encendido en anhelos cuando te veo.
Tu gemido tímido y feroz, tu voz.
Ocaso que la luna baña de azul, y azul vestido de traje,
De estrellas, un firmamento que convertimos en magia,
A fuego de nuestros cuerpos, a viento que transporta
Nuestros jadeos que crecen, hasta juntarse en canción de lobos.
El castellano
SENTIR TRASPUESTO:
Noche en vela de navegante, sin destino.
Noche despertada por la luna, acariciada
Por sonrisas de estrellas.
Cercanas y lejanas, según sean miradas.
A través de la copa de licor,
O con la nostalgia del corazón.
Luz a la vela que ilumina la pluma.
Tinta de ánima, mezclada con los recuerdos
De una vida a tu compañía, pasada,
Con hielo y fuego, con besos huidizos y efímeros,
Fulgentes y eternos.
Con sueños rotos y días de amor
A la sombra de tu reflejo,
Disuelto por el embiste del tiempo
Que partió mi palpitar en dos
Y cada trozo llorando con clamor.
Tiempo en el que me alimenté
De las flores y rosas que te regalé,
Y que ya secaron como nuestro amor.
Si en el camino, se cerró nuestra puerta,
La del olvido no se construyó.
En su lugar la espina clavada en el corazón,
De un tiempo que fue mejor.
Esta copa de licor en tu honor mi amor.
En recuerdo de una sonrisa que resplandeció.
El castellano
Piedra-corazón:
No es una piedra, es mi palpitar,
Su latido cesó y en piedra cristalizó,
Ella lo tiene en cuenco con agua,
A símil de mascota que nunca muere.
Le sonríe cada día, normal es mi palpitar,
No huye, es piedra fiel a su amor.
Con caricias sintió que palpitó,
Que fue su inspiración, su amor y su dolor,
Pero en piedra cristalizó, pudo darle calor,
Ya que nunca quiso mi dolor.
Esa piedra-corazón fue músculo,
Pero murió y ahora solo le queda esperar,
Esperar que el agua y el tiempo,
Le otorguen musgo y sangre verde,
Que ablande los cristalitos de su interior,
Y resucitar.
Quizá algún día cuando ella se olvide
Que es una piedra, volverá su palpitar.
Pero yo ya noté la ausencia
De vivir sin corazón.
El castellano
DESVELO DULCE:
Café a la una y once de la noche,
Despiertos los murciélagos,
Raspando sombras,
Bailando a la luz de las farolas.
La ciudad que no duerme,
Mi mente volando, siguiéndote,
Enredándome en tu pelo,
Atravesando la luz incandescente,
Como buen murciélago mi vuelo,
Cazando letras para tu sentido despierto.
Sorbo de un café con leche y con hielo,
Anhelos y sueños de un amor eterno.
En aroma de café a la compañía de una Leannán Sídhe,
Leannán Sídhe del reino idílico el mío nocturno,
Tu fuego el día de mi noche,
Quémame porque me dejo quemar,
Soy fénix esperando resucitar.
Con brea de estrella un corazón puro,
Con oro y plata
Los reflejos de la noche en la ciudad.
Como buen murciélago mi vuelo,
Enredándome en tu pelo.
Vívido desliz:
Muero por un beso
vivo por un querer
cruel del destino
condena de una pasión
que creó tu pestañeo
al dejarme ver
tu cielo encerrado
fijamente tres minutos,
y morí con tu pestañeo.
Demostró que fui
importante para ti
y que a pesar y muy
a mi pesar de los problemas
seguí en tu mirada atrapado
hasta que la aguja
de aquel reloj de pulso
se paró al pasar
ciento ochenta segundos
mi cambio de vida
cuando consumí
medio giro al decir:
-Siempre te amaré.
II
Enciendo maquinaria
de este tiempo disuelto,
en pétalos de éter y formol,
desangra la rosa secreta,
y un estambre rige,
destello que precipita,
el albor.
Calidez de ilusión,
y araña que arrastra,
tejiendo el eterno sentimiento.
Yo que arrastro
mis aciertos,
como desnudo Sol.
Una noche cualquiera,
y activé el engranaje
mi reloj de pulso.
III
Mi carmesí caléndula,
fijó su pestañeo
en mi camino de destino.
Alumbraba un candil
dormido, una luna llena
de enero.
Era tiempo suficiente
para huir y quedarse.
En la boca formaba
toda sombra de opacidad.
Destrenzaba un halo
sujeto de una lágrima
pasajera, un segundo más,
y devoró el dulce tormento.
IV
Giré entonces la tuerca
de mi corazón oxidado,
por tantos aullidos nacarados,
y su ente femenino
me atisbó un beso
a mi alma.
Era el crepitar de la llama,
que mandabas como loba
y como luna se prendiesen
todos los colores
de mis sueños
consumiendo mi tiempo abierto,
que completo el giro,
dictó la vuelta
al inicio del sentimiento preso
que sin retorno
siempre te amaré.
El castellano Förüq
LUNA AZUL:
Te amo no sabes cuánto.
Cierro los ojos y te veo.
Tu sonrisa es el mayor de mis regalos,
Tus dientes son evanescentes, que hablan de como tú sientes.
No quiero mi despertar si no es para verte a mi lado
Acariciando mi pelo, diciéndome al oído te amo.
Siento cuando discutimos
Y no lo aguanto.
Vuelvo a nacer cuando me dices te quiero.
A cada instante pienso en ti.
Ahora ya eres parte de mí.
El mundo me parece un infierno si no estás a mi lado.
Tu cuerpo es un dulce bocado.
Estoy preparado para amarte.
Veo que me ves,
Miro que me miras,
Amo que me amas.
Sin ti no soy yo,
Sin ti que mi alma me abandona.
No quiero decirte cosas bonitas para nada.
Sólo para que veas que me tienes loco,
Sí
Que sacas lo mejor de mí,
Que me has alegrado la vida.
Sé que me amas,
Sé que te amo, y que
Sin ti no soy yo.
Confío en ti porque tú lo haces en mí.
Y no te fallaré.
Sólo tienes que ver todos los días cómo estoy sin otra vida y objetivo
Que hacerte feliz.
Sin otro objetivo que compartir contigo todo.
No quiero perderte nunca y eso requiere luchar y dar lo mejor de mí
Para que esto funcione.
Me atormenta pensarlo.
Que cada día estoy más enganchado a ti,
Que cada día que amanece mi amor por ti crece.
No importa nada solo el final del camino,
Que es llenarte como me llenas.
Si te digo que sueño contigo casi todas las noches
No exagero hasta sueño despierto cuando estoy contigo.
Por querer soñar contigo de ti yo me he enamorado.
Eres sueño eres mi dormir, tú lo eres todo para mí
Quieres saber la verdad, me has alegrado la vida.
Has llenado mis ojos de esperanza, de un futuro junto a ti.
Esto no es un poema, es una hoguera de sentimientos que arden en mi interior.
No soy especial, soy de carne y hueso, y me muero por ti esa es mi debilidad.
Te deseo y que mi cuerpo te llama cada noche,
Que cada parte de mi cuerpo te extraña cuando no estás conmigo.
Que cuando me levanto y no te veo me pongo triste.
El ser humano nace. Ama, lucha, y muere.
Yo lucho, te amo y me muero por ti.
Tú eres el timón que guía mis pensamientos,
Eres mi estrella en el firmamento,
El sol que me vislumbra en cada mañana.
Y la luna de mis noches color plata.
Acariciando sueños, viviendo el recuerdo
Como una vida sin sentir, no la quiero,
En el despertar de ilusiones en verso,
Todo es bonito, todo es bello.
La nostalgia crea su velo de dulce tormento,
Para quererte me basta imaginarte,
El velo de traer el pasado al presente,
Cayó de mis ojos pero el corazón,
Lo cogió de venda para la rosa clavada,
Ninguna lágrima fue desperdiciada,
Ningún beso te olvidó, al alma de hielo tu calor.
El hielo, tiempo de insomnio de sentimiento,
Calor, la ilusión que un día
Cayó por tu mejilla
Y evaporó al rozar tu boca en sonrisa.
Frío el canto del viento que llevó mi amor,
Lejos de este cuerpo, lejos de una vida
Que en sangre de poeta lloró por la avenida,
De ángeles estrellados en estrellas,
Y hadas, de mariposa sus alas,
Que fueron capturadas por arañas.
Quien dibujó el cielo con colores a su amada,
Merecerá algo más que un traje
De azul tranquilidad.
En color de dioses y diosas su eternidad,
Junto al escrito del mundo vivo, que seguirá,
Aún cuando el cuerpo caiga como la hoja
Caduca del otoño,
Cuando la melodía eleve al Creador
La esencia de aquel pintor, escritor
Que pintaba con la pluma de su vida.
El castellano
REGODEO:
Si fuese constructor te hacía un océano;
Pero de momento sólo te puedo ofrecer ver mis ojos.
Si fuese piloto subiría a tu ventana, para soplarte al oído;
Pero de momento sólo puedo leerte.
Pero de momento sólo puedo soñar que estoy sorprendiéndote.
Si Frío viniese te abrazaría para sentirlo juntos y que se fuese;
Pero ahora,
Sólo puedo disfrutarlo solo.
Hoy morí al despertar y no verte;
Pero ya me acostumbré al frío
Y perdóname pero me gusta.
Sé quien fui;
Fui un pintor
De lo que hay detrás de los sentidos.
Lo siento.
No puedo amarte porque ya te amo
Porque sólo eres un sueño
Lejano y cercano.
Te busco y no te encuentro
En este mundo actual,
Del que sólo te busco a ti amor sencillo.
Flor de sentimientos y deseos.
Eres realidad eso dijeron pero mi cabeza te negó.
Malos momentos no hubo,
Mala vida ya no hay, solo hay,
Solo hay un te quiero
A palo seco y bebido sin hielo.
Busco tu existir como un beso,
Busco tu felicidad,
Tu bondad ya la encontré
En esta realidad,
En la que se miente
Y niega que haya existido.
Esta realidad dice que no ha existido,
Su eje mi sentimiento,
Su composición mi palpitar ahumado
Despierto;
Que ya no late;
También se niega a sí mismo
Dice que no existe;
Que ahí tengo una roca.
Pero ¡Miente, miente, miente!
Sigue queriendo como ayer.
Nuestro mundo se olvidó de que existió;
En realidad nadie podrá saber si existimos
Y si ''este ban''co se puede atracar y es real
Si te vas y silencias los recuerdos
Porque no sabré si fueron solamente sueños.
SENTIDO DESCUBIERTO:
Ilusiones traídas al presente
Como la niebla que trajo el viento
De tus iridiscentes palabras
Llevándome al abrir mis ojos al mundo
De sueños sin vivir, de sentimientos
Solo para ti. Experiencias para compartir
Como mensaje en una botella
Que salió aflate del lago de la esperanza,
Sin lágrimas te canto, y te escribo,
Que desde que volviste, eres lo más bello
Que pasó por mi campo de amapolas amarillas
De mi palpitar, y memorias de estrellas.
Para ser tus caricias vivas y aradas.
No te vayas compañera, acompáñame
En el viaje a la felicidad, como lo hago yo,
Déjame dedicarte un cielo de sonrisas,
Y cálidas nubes de colores,
De besos incipientes,
Como el fuego de tus ojos,
Con el poder de su mirada,
Y el agua manantial de tu boca.
Déjame soñarte y amarte,
Como si nuestra circunstancia
Hubiera sido otra.
Déjame decirte que declaro amor por ti,
Que me gustas, que no quiero idealizarte
Pero eres lo más lindo que pasa por mi mente,
Desde que volviste y siempre.
Como un beso en la amistad.
Vuelvo a caer en tus alas de amor.
Cuando ilusionas mi palpitar
Que te busca para curar su dolor,
Mi vida tú, desde que apareciste, nuevo comienzo
Amor de siempre
Cuando te veo en cada letra,
Y no puedo evitar corresponderte,
Un alma que te llama para sostener la esperanza.
No espero que me creas porque sé que me sientes,
Solo agradecerte tu huella creada en mi ser.
A fuego de una ilusión en tu mirada quiero seguir
En tu mirada quiero seguir viviendo.
No sufras porque pienso que algo me arde dentro.
Nunca se cerró el camino para ti.
Perdona a este corazón de niño,
Que tuvo que esperar a tu cariño,
Para demostrarte que nunca murió su ilusión
Por ti.
Que nunca te olvidó, porque clavaste
Con fuego tú sentir en mi interior.
Este corazón que empezó a latir
Desde conocer tu alma en letras, como mi alma en letras.
Emocionado, porque develo amor por ti,
Y es correspondido.
Feliz por ser tú mí sueño,
Por sentir que te pertenece mi mejor sentimiento.
Con valor, por sentir lo que sientes,
Por ser alma, de y para tu alma,
Por sentir tú beso y entregarme a ti.
Porque eres lo que deseo.
Y de tu beso de amor,
Nació una amapola en el corazón.
Con valor para luchar por ti
Y por mí,
Para arroparte con fuego el sentimiento.
Para ser tu verso, tu vida y tú, vida, mi sueño.
Me entrego a ti, porque
Ya que, mi verso, corazón, cuerpo y pensamiento
Te llaman, y dicen que yo te pertenezco.
Me quedo a tu ladito pegado.
Para no irme,
Siendo completo en el abrazo,
Tu sed con mi sed juntando.
Me quedo a tu lado mi vida.
Porque me he enamorado.
DESTINO EXPUESTO:
Déjame ser yo.
Yo, quien te quiera,
Yo, quien a ti aspire
Vivo y afortunado música
Para tu sentido.
Yo, el que tus labios admire,
El que en tu ser suspire.
El poeta que te escribe y vive,
Afortunado,
Por la música de tus sentidos.
De tu corazón enamorado,
El que en tu ser suspire y
En tu pecho se adormile
El que en tus ojos se mire y
Tus alientos respiren,
Con tu dulce susurro a mis sueños cobije.
Quiero sentirme poeta de ti,
Que con tus cálidos besos
En el edén me imagine,
Poeta de ti ilusionado.
Déjame recorrerte,
Como si el tiempo no hubiese.
Que tu cuerpo con el mío
Se mezclen en un fuego ardiente
Y se confundan en uno,
Vivir en tu mirada,
Serían mis dulces palabras,
Pues no mas son reflejo
De la altura de tu alma.
De una amapola
Mi amor para una doncella,
Viva y eterna,
Dulce y risueña.
En esta noche otoñada,
En que las primeras lluvias
Fueron alegrías despejadas,
Caen tímidas en mi ventana
Y me recuerdan a ti,
Mi tierna doncella, mi bella,
Mi eternamente dulce y risueña,
Como sonrisa de altares en primavera
Altares de estrellas a la luz de luciérnagas,
Como rojas amapolas en la pradera,
Y en lo alto, el cielo lleno de estrellas,
Campanillas por miles,
Únicos testigos de nuestros amores juveniles,
En el anochecer de plata tu sentir para mí mieles,
Esperando que de tus labios broten los sonidos
Que me dicen que me quieres,
Y así quiero pasarme las noches,
Y los días, vida mía.
Pues sin ti las noches son frías,
Y los días un mar de melancolía,
Solo soñando y sintiendo tú esencia muy cerca de mí
Sólo te quiero a ti en mi día.
Como la más cálida sonrisa tierna,
Sólo es amor a ti mi bella.
__________________
MIEL DE SOMBRA:
Solo tú lo que yo más anhelo
Lo que yo espero y quiero,
Siento que todo lo tierno
Todo lo que en mí provocas
Lo que en mí cautivas
Todo lo que me haces sentir
Todo lo que
Me hace vivir dentro de ti
Para solo servir y ser de ti
Amor sincero
Algo dulce y bello
Como miel de tus labios
Solo tú y sólo yo
Inseparables los dos amor
Lo que por ti
Crece y me arropa y protege
Me crezco y derrito
En tu dulce fuego
Sólo tú como oxígeno y agua,
Para mi vida
Luchando y sintiendo
Que sin ti ahora no sería;
Te has ganado cada pedacito de mí,
Solo tú
Con la que sueño amor completo,
Solo tú y solo yo
Haciendo que viva nuestro dulce ensueño
Porque yo en ti pienso, en ti vivo
De ti soy y quiero ser,
Porque has conquistado con tu dulzura
Cada espacio de mi piel
Me fundo con tus letras,
Para ser tuyo
Y sentir que mi mundo es tuyo,
Para que me creas humildemente que
Solo tú eres mi mundo
Donde quiero vivir,
Donde no hay palabras para describir
Lo que me haces sentir
Porque desean cumplirse en hechos
Todos y cada uno de nuestros versos
Perdóname porque te estoy queriendo
Por querer soñar contigo,
De ti yo me he enamorado.
Puedes sentirlo,
Para ti mi amor soñado
Puedo sentirlo.
En el camino
Se abrió una puerta,
Tras ella
Todas las flores
Hermosas y bellas,
Puedo sentirlo, es amor.
Puedes sentirme, he vencido.
Laureado
Con amor sencillo y entregado,
Puedo sentirte,
Siéntelo amor mío hemos vencido,
Mi palpitar has conquistado,
Ya te tengo en mi sangre,
Y en mi esencia, libre,
De la que te has adueñado,
Que sueña con tenerte bajo mi piel.
Mi boca quiere el agua de tu boca,
En mi palpitar has entrado,
Para amarlo y respetarlo.
Te quiero y necesito a mi lado,
Como la Leannán Sídhe de Leannán Sídhes
Que eres para mí, porque te adoro.
El rey de reyes que soy,
Desde que tu amor me has entregado.
Y te más allá del tiempo,
Más allá del espacio y de una distancia
Que se deshace,
Desde que te dentro.
Muy dentro.
Eso me hace saber que estoy vivo
Y que vivo
De cada flor que te forma.
Toda tú eres belleza
Leannán Sídhe mía.
De ti enamorado.
Vivo, dichoso y orgulloso
Sintiendo, te estoy amando.
Y tú sientes lo mismo,
A tu lado quiero estar
Con nuestras legiones de poemas,
El cielo nos hemos ganado,
Con la bondad y belleza
De nuestra alma,
Nos hemos conquistado
Para una eternidad.
A ti mi amor, mi lealtad.
Me acerco a ti al sentir cada letra,
Voy subiendo besando tu esencia,
Me entrego porque hoy, ayer y mañana;
Decreto que eres lo más lindo.
Me acaricias y caigo rendido,
Sintiéndote y soñándote de noche.
Al día tu fragancia de alegría
Del recuerdo presente del amor ganado,
De tu bondad arropando mi sentimiento.
Y vuelvo a caer en tu cuerpo,
Viendo mi añoranza crecer
Viendo el fuego en mí arder.
Para tuyo ser, quien te guarda
Cada anochecer un beso
Donde tú lo imaginas, gracias a ti
Gracias a ti, mi vida, porque has hecho volar
A este corazón que el tuyo vive, puro.
Más puro que agua de manantial,
De esmeraldas y esperanzas que cada día
Sueñan con vivirte,
Con tomar la miel de tus labios,
Miel de todas las flores que este amor ha creado.
Te abrazo fuerte para seguir a tu lado,
Para que me sientas, que a tu lado,
Me quedo tumbado, a ti besando.
Porque yazco que en nuestro sueño,
Vivo cálido, libre y amado
Fielmente enamorado y sin dudas
Me entrego, porque mi palpitar
No piensa, siente y te quiere
Un beso a ti en esta noche,
Mi palpitar encarnado.
Dulce como melodía de viento
Que acaricia y mece tu pelo
Como sonrisa cálida de amanecer
En tus ojos despiertos y soñados
Nubes sosteniendo ilusiones, sueños.
Me acerco a tu vida porque la mía
Es la tuya y tu dulzura entra,
Y cala más allá de donde alcanzo a entender,
Traspasa mi piel para ser de mi amor
Sueño con tocarte, con besarte
De tu piel ser reflejo de deseo,
Bonito y bello, todo lo que en mí,
Alimenta este deseo de cálido fuego,
Con fuego, en verso de alma y sentimiento
De amor a este sueño, que nos unió en un destino,
Uno solo, amarnos sin tiempo, sin espacio
Ni medida de lo alcanzable por el pensamiento,
Porque lo nuestro es tierno,
Nace del sentimiento, de dos corazones
Que arden deseándose y empiezan a amarse.
Para ti mi beso de amor esta noche y cada noche,
Para que sepas que a cada instante
Te vivo y pienso, en esto no soy experto
Pero me gusta decirte lo que exhalo
Y que te voy queriendo
Mucho más de lo que puedo
Eres ahora mi poesía,
Eres mi amor, ya no hay barreras,
Hay ilusiones y metas,
Sin tristeza, sin melancolía.
Solo mi alma y cuerpo, entero
Para quererte y sentirte cada día,
Como lo más bonito, lo más bello,
Tenerte conmigo vaya donde vaya
Mi amor, mi alma gemela
Solo tú
Solo para ti este poeta
Del que tú eres su música,
Su poesía, y su musa linda, tierna.
Te busqué
Desde lo más profundo del corazón
Acompañando cada latido mío,
Siendo llama de sentimiento
Abrazando cada sueño, cada pensamiento.
En la noche todo mi ser te acompaña,
Para dormir contigo abrazado,
Sintiendo el calor y cariño de tus caricias,
Tus besos,
Que guardo
Junto cada deseo de amor,
Correspondido,
Del que somos dueños,
Y la luna tiene envidia de tu belleza,
Te deja su flor y velo
Cuando se oculta tras las nubes,
Siendo cómplice de nuestro amor,
Y no se sustentan nuestras letras
De la belleza del firmamento
De estrellas, si no, de lo bello,
De nuestra alma y cuerpo,
De nuestra luz en el corazón
Que nos atrae,
Siendo celosa toda la belleza,
Del cielo, porque a tu lado
No hay nada más lindo y tierno,
Vuelvo a mirar dentro de ti
Me alegra contemplar que ahí vivo,
Como en mí, dentro vives,
Irrefrenable el deseo,
Por cuidar cada palabra de amor,
Por seguir correspondiéndote amor.
Decirte que gozas de toda mi admiración,
Que nuestros versos
Son reflejos de nuestros sentimientos.
A ti te entrego cada letra
Salida de este corazón,
Cada suspiro de amor
Y mi vida en verso
De la que eres guía, vida mía,
Para ti cada día, de mi sentir que es el tuyo.
Vivo para amarte y cuidarte,
Quiero besarte.
Te pertenece cada latido escrito,
Y este corazón humilde,
Que se volvió de oro
Por amarte.
Porque soy de ti, para ti
Tuyo y siempre tuyo,
Eternamente enamorado de tui.
Enamorado hasta los huesos,
Me tienes, amor.
Viviéndote en un sueño,
De todos los colores.
A tu lado me tienes,
Fiel e ilusionado,
Felizmente apasionado.
Feliz, mi vida,
Porque te encontré.
Y hoy,
Me encuentro amándote.
Sintiéndote,
En cada palabra sincera,
Que sale de tu alma.
Contigo, mi vida.
Ven amor, ven conmigo
Quédate, quédate conmigo
Ven, acompáñame a este sueño
A la tierra de fuego
Del amor eterno,
De la pasión,
A este amor por el verso,
Soñándote cada día,
Amándote noche y día,
Así estoy yo,
Casándome con la poesía.
Queriéndote más cada día,
Madurez poética frase estúpida es,
Pero amarte amor, vida mía, es arte.
Ven, ven conmigo
Suéñame, víveme, siénteme
Escríbeme, porque en vida, en verso,
Te amo,
Te digo. Y a los cielos grito
Que no solo lo digo,
Lo siento,
Necesidad tengo
De estar aquí, para ti,
Exprimiendo el corazón,
Sangrando mis versos para ti,
Porque en mi sangre pena no hay ya.
Hay amor, ilusión, de alma
Que se volvió tuya.
Dime que me amas como haces,
Como sientes, porque yo también
Te amo y te acompaño,
Rompiendo esta ventana de distancia,
Para que me sientas tuyo en cada verso,
Cada letra, palabra, caricia, sonrisa,
Amanecer, anochecer,
Minuto, segundo y hora,
Momento, instante, brillo y reflejo,
Verso, canción, ilusión, sentido,
Sentimiento, animal, mito, leyenda y realidad.
Porque en todo lo bello te veo,
Enamorado me insuflo.
Acompáñame se mi calor
En nuestra tierra de fuego.
Porque yo siempre a tu lado estaré.
Amor, te encontré
Y aquí estoy, entero y completo
De tu amor felizmente apasionado,
Para nuestro amor
En verso de alma y cuerpo,
De ti, mi musa
Que en mí habitas como diosa
Yo, tu poeta tierno,
Dedicándote mis más nobles versos
Porque este amor me llena,
Vida mía
Y me da alas y fuerza
Para volar a tu lado
Y decirte cuanto te amo
De nuevo aquí para ti,
Sin tiempo, sin nervios
Solo mi palpitar abierto,
Sintiendo,
Viviendo este sueño
Y este mundo que hemos creado,
Desde que nuestros caminos
Se han juntado.
Musa mía,
Te quiero a mi lado,
Tu piel con mi piel juntando,
Ver tu más linda sonrisa
El brillo de tus ojitos
Con mis caricias
Son miles de sueños
Por compartir
Todos los que creas en mí
Solo con tu existir,
Con ver tu amor
Cada día para mí,
Todo el amor
Que salga de este corazón
Que te ama, que te añora,
Solo para ti,
Solo para ti mi Leannán Sídhe, mi tierna.
Donde nuestros caminos se juntaron
Plantamos todas las semillas,
Las flores como letras,
De nuestros sentimientos
En armonía de siempre querernos,
Y así te amo,
Cada día más dentro,
Llenando mi palpitar,
Todo mi ser de lo más lindo
Que alguien puede sentir
Y eso es amor a ti Leannán Sídhe,
Amor a todo lo que te hace ser,
Y ser soy más tuyo
Que las gotitas de agua a las nubes,
Me encanta sorprenderte
No te preocupes
Porque un día no halles mi verso
Es porque estoy sintiendo y construyendo
Como sorprenderte al día siguiente.
Sueño contigo amor,
Mi amor correspondido.
Culpable soy,
Culpable soy
De amarte tan locamente
Como tú lo haces,
Como tú me haces, sentir.
Deslizándome por tu piel,
Trepando el árbol del deseo,
Para darte su fruto,
Que no es otro
Que mi palpitar a ti amarrado.
Sintiendo tus versos voy cayendo
En dulce éxtasis.
Nirvana de un alma que siente
Viajar al mundo de tu alma,
De amor y calma,
Del dulce suspiro en cada letra.
Voy bajando,
Besando tu cuerpo,
Me detengo un momento
Para decirte que te voy queriendo,
Y queriendo me pierdo en tus besos.
Tuyo soy, siénteme tuyo.
Tú mi más lindo fuego de amor.
La luz que me alumbra el camino
Para llegar a tu corazón
Que mío.
Amor de dos, sueño de dos,
Ilusión y deseo de dos.
Viendo mi vida cambiar
Con tu caminar,
Junto al mío,
Por el sendero del amor dulce y tierno.
Fuego con fuego,
Nuestro sentimiento creciendo.
Amor con amor,
Felicidad que no se romperá.
Todo mi sentir gracias a ti,
Contigo voy descubriendo
Que puedo amar de verdad.
Que los versos saliendo solos del corazón están,
Para envolverte en seda de cariño
Y azúcar para comerte entera despacito.
Somos fuertes,
Lo sincero guía nuestras almas
Que se juntan en armonía.
Pisando el suelo y viviendo en el cielo.
Desde que tu vida en la mía entró.
Una sinfonía,
Una eterna dulce sonrisa
Al despertar y sentirte
Más allá de esta tierra.
Muy cerca, muy cerca mía,
En mi esencia a la que tú
Y solo tú acompañas
Y cuidas,
Al edén la elevas.
Has hecho brillar a este hombre
De corazón de niño
Que vive tu amor,
Sintiéndolo y sintiéndose libre.
RAZÓN INMISCUÍDA:
Amar tu corazón mi pasión,
Imaginar el susurro de tu voz en mi oído,
El te amo brotado a fuego de un sentimiento.
Con amor un recuerdo tuyo, inmortal en mi interior.
Con amor una sonrisa que brilla con resplandor,
Con sueños en los que tú, amor,
Estás a mí alrededor.
Con fuego, mi mirada a tú, mi tierna,
Mi admirada bella doncella.
Mis besos en versos, van a ser realidad en tus labios.
Mis caricias, escritas en tu piel, van a ser vistas.
Mis deseos de pasar mi vida a tu lado,
Es todo lo quiero, lo que un te amo ha significado.
Puedo verte si cierro mis ojos,
Tú como ninfa que de mí se ha enamorado,
Yo como dragón y druida que cuida
Tu campo de flores, camuflado.
El que te ama y te espera con el alma entera.
Y pasan lunas, soles y estrellas,
Y solo crece el sentimiento.
Te cuido con mimo, con cariño hago abrir tus pétalos,
Con cariño me das tu polen de mariposa,
Tú esencia más hermosa.
Y vuelvo a rozar los surcos de tus hojas,
En ellas noto un te quiero,
Las lindas venas de tus alas.
En colores de alegría, de matices de tu belleza,
De calor y vida, todo lo que de tu alma nace.
Y el río de sentimientos, sueños y lágrimas de felicidad,
Donde su cauce y corriente, llega profundo, avanza sin pausa.
Solo por el valle del paraíso creado, de tus detalles,
Como flores, en él, naciendo en los amaneceres,
Duros y fieles testigos, los besos y sueños.
De este amor, porque alcanzamos la estrella
Y la derretimos con esta pasión de enamorados,
Creando el agua para la vida de dicha,
En una sencilla sonrisa, en una tierna mirada,
En la sincera palabra, que unió dos destinos,
En un solo recorrido
-Encontrarnos siempre unidos.
El castellano
AZABACHE DE VIDA:
Y las noches
No son noches
Contigo amor,
Son fuego,
Calor de cuerpo,
Beso del deseo,
Y caricia del roce
De tu sentimiento,
El viento travieso
Tu fragancia
Me quiere traer,
Las nubes
El agua
De tu boca,
Y la luna,
La luna
Tu mayor sonrisa.
Cada verso
Se funde dentro
De tu cuerpo.
Tu mirada
Me vuelve
Leoncito tierno.
A besos de amor
Viajo por cada paraíso
De tu piel,
Complazco
El juego
Del fuego ardiendo,
Me mezclo
En alma
De fiera y guerrero,
Para dar placer
A cada parte tuya
Que me deshace.
Como verte e imaginarte
Bañada por mí
Desde que la luna
Visita,
Hasta que el sol
Acaricia.
Y soy yo
Entero, amor,
Enamorado de tu amor.
Viviendo
De cada detalle
Que a mi ser
Complace,
A mi palpitar derrite
Y no hay
Quien me quite,
De decirte
Cada día
Cuanto te amo.
Tu sonrisa
Es un regalo,
Tu cuerpo
Un dulce pecado,
Y tu amor
Es sin duda
Vida mía,
Mi mayor bendición.
Porque te amo.
El castellano
Serenata nocturna:
Escribiendo estos versos a la serenata de la noche
Bañado por el dulce susurro de hojas en violeta por la luna,
Y ámbar de ramas colmadas por la luz de las farolas
Me pregunto cuándo se apagarán las luces de la ciudad
Y dejen su protagonismo a los astros y ángeles nocturnos
Cuando se calentarán nuestros cuerpos bailando al fuego de una hoguera
Y la única música que acuche sea tus te quieres y te amos al hablar en mi oído
Cuando se desprenderá esta alma de mi cuerpo para acariciar y besar tú esencia;
Cuándo nos fundiremos en un beso
Y las flores nazcan de tus cabellos
Y las hadas tus palabras, que bailan, cantan y vuelan
En mis sentidos;
Cuando mis piernas se enredaran en tus piernas,
Y nazca en tu vientre mi amapola blanca adormidera,
Y las montañas de tus senos conozcan el volar de las
Mariposas de mis manos,
Cuándo te tendré tan cerca que podremos comunicarnos con
Los ojos.
Y mi palpitar salga corriendo de mi cuerpo para decirle al tuyo cuanto le pongo en mimo.
Y la luna, dicen quiere ser estrella, pero astros hay perdidos en contar;
Donde luna y sonrisa tuya solo hay una,
Sol está cansado de ser fuego, y quiere ser agua de tu beso
La mariposa quiere ser flor, y la flor abeja,
Yo de tu cuerpo quiero ser el viento, que te acaricia y rodea
De tus ojos pestaña tuya,
Pero de tu alma soy y quiero ser siempre única y solamente
Tu alma.
Pájaro que canta en tu ventana, y pez que nada entre tus pies cuando te bañas en la playa,
Gatito al que acaricias y fiera contigo en la cama.
Solamente soy yo y soy yo el que te ama
Eres tú la doncella por la que esta alma suspira,
Por la que este cuerpo quiere hacerte mía
Eres tú mi vida,
Y ¿qué importa el tiempo, y que pasen lunas y soles?
Si yo en mi palpitar te tengo.
El castellano
PLAÑE TU SONRISA:
Cuando miro tu boca,
Creas en mí el fuego que desea y desea
Besarte a la luz de la luna,
Y tus dientes de estrellas,
De esa noche en la que tu amor y el mío
Serán uno solo,
Bailando a la hoguera de piel y piel,
Fuego y fuego de pasión,
Incontrolable, sintiendo el cielo,
Y en tu boquita el océano,
En tus ojos el universo,
Que esos ojitos marrones que tú tienes,
No son de este mundo, valen severas razones.
En tu bosque quiero perderme,
Y querida falta mi tocón de roble.
Te veo más allá,
Volando en versos en mi palpitar
Y en todo lo bonito y bello,
Porque Leannán Sídhe mía,
Tan linda y tierna sólo quedas tú en la tierra,
Y te espero y quiero, aquí estoy yo te amo,
Porque a tu amor me entrego,
Ya que solo tú volviste a mi palpitar completo.
Mi vida en cada latido mío tú y solo tú.
Eres todo en lo que yo pienso
Y por ti el más precioso y bonito amor
Tengo y exprofeso.
Contigo mi vida quiero vivir la vida,
Quiero quedarme siempre junto a ti
Eso es lo que más deseo porque te quiero.
Naciste para ser el amor de mi vida,
La más linda flor en mí nacida,
Yo nací para amarte con locura y sin medida
Y para acariciarte piel con piel
O en mi sentimiento y pensamiento
Hasta el final de mis días.
Te amo y te adoro,
Beso, beso, beso, donde tú quieras.
Siempre juntos, y este amor sólo crece
Porque tú eres dulce y nos amamos con pasión,
Y tú eres todo de lo que se alegra mi palpitar,
Porque te amo ausente en la razón.
Quiero dibujar una sonrisa en ti cada día de mi vida.
Cierto es, de lo sincero nace el sentimiento.
Eres mi mejor amanecer y el más cálido sueño,
El más sabroso beso en tacita de café,
Tu amor mi combustible, el mío,
Todo lo que contigo hallaría,
Y tú eres mucho más que un sueño,
Eres alma de mi alma, fuego,
Luz, eres mi salud, mi reír por ser feliz, mi soñar,
Al imaginar tu piel con la mía,
Eres mi delicia, tú mi más tierna caricia,
Lo que siempre esperé y recé al cielo que llegase a mi vida.
Te amo Hadita.
Siempre estaré enamorado de ti porque es muy fuerte lo que dentro acuno,
Te amo y me pones tan alegre al leerte cada palabra tuya
Y saber que me amas,
Es lo más lindo que se puede sentir en esta vida mía,
Que cada día se sustenta de amarte.
Mas amarte cada día se vuelve arte.
El castellano
SEDIENTA LÍNEA:
Eres mi mundo,
En tus ojos me pierdo
Y vivo inspirado,
Orgulloso y plenamente enamorado,
En tus ojos viven mis deseos
Que cada día sueñan
Con rozar tus labios
Y fuego, fuego enciendes dentro
Fuego eres, como luz de amor,
En mí vives,
Te quiero y me quieres,
Y cómo puedo rechazar tus flores,
Si en mi palpitar
Con tu amor crecen y crecen.
Te en cada hojita de hierba,
En cada piedra, hoja, árbol, rosa
Y en cada trozo de vida
Que habita este planeta.
En cada río de colores
Que en mí dentro fluye
Cuando tu imagen
Mis ojos y sentimiento recorren.
Y que le voy a hacer
Si me he enamorado,
Si de tu boca y lengua
Soy un apasionado,
Si esas piernas tuyas
Guardan una estufa ardiendo,
Mi amor pleno te entrego,
El mar en un beso,
En una caricia una flor sencilla,
En una mirada el cielo,
Y en mi palpitar,
Nuestro universo mágico,
Y yo de ti confieso
Que guardo cada detalle,
Cada sonrisa, beso que me lanzas
Y la más tierna
Y delicada mirada
Cada palabra nacida
De tu pura alma,
Más cada día entera me ama,
Y yo enamorado te
Y te amo sincero y pleno,
Esperando que mi beso de fuego
Llegue dentro muy dentro.
Del que te ama con toda el alma.
Esteban
INFINITUD DE ÉTER:
Te amo más allá del sentimiento,
Más allá del corazón porque te amo,
En esencia, en alma y conciencia,
En ser y piel, en beso y caricia,
Cosquilla y sonrisa, mirada, verso,
Letra, poema, sueño, suspiro,
Susurro de amor que corre y vuela
A tu ladito mi amor
Para ser tu calor, para envolverte en seda
De Leannán Sídhe y miel de abeja,
De flor de fuego la tierra,
Y te quiero así como eres entera,
Linda y tierna siempre, siempre a sí
Mi Leannán Sídhe, si la locura es la única forma
Decente de amar y a la vez la más dolorosa,
Te amo con locura amor pero sin dolor
Porque hoy de tus labios brotó el te amo,
Y que entera de mí y para mí eres y te entregas,
Llueva o haga sol, frío o calor,
Porque tu amor es fiel y verdadero
Y mi amor reflejo de tu sentimiento
Y de todo lo que yo por ti
Mi bella, mi amada,
Mi gatita traviesa,
En estrellas el brillo de tus ojitos
Que me dicen que me amas.
En violeta de luna el color de tu alma,
Que tan bella y cercana,
Y puedo alzar la mano y acariciarla
Porque me ama.
Si los ángeles discutieran en el cielo
Quien se merece alas por la bondad de su alma,
Ganarías por mayoría plena.
Ven amor, ven conmigo mi cielo te espera,
Mi fuego te llama,
Mas esta llama nunca se apaga,
No quiero el firmamento sin ti,
No quiero ver si no es tu sonrisa y boca
Para besarla.
Y si el cielo se apaga me queda tu mirada.
Y si en la tierra se acabara el agua,
Viviría siempre del agua de tu boca,
A beso suave y dulce que riegue mi alma.
Del que te ama y te ama,
Tu Esteban fiel y tierno como hoy, ayer y mañana,
Solo de ti y para ti, pues enamorado estoy
Y enamorado grito y siento que te amo,
Y que lo haré hasta que el cuerpo
Caiga como hoja de álamo en otoño.
El castellano
SONRISA ALBA:
Más allá del suspiro de amor que se eleva al cielo,
Y al viento grita que de ti me enamorado
Como madera en fuego me consumo sin tu aliento;
Y vuelvo a nacer cuando me dices te quiero,
Si yo tu sol tú mi amada luna,
Y lucero de este firmamento
En el que vuelan tus te quieres y corren nuestros besos,
Los versos se tiñen en color cual flores vistosas
En velo de armonía y serenidad que crea tu sentimiento y el mío
Fundiéndose en gotitas de rocío que forman un río
El de pasión y ternura que mecen tus labios,
En tus ojitos el bosque encantado en el que vivo
En cual tus pestañas en arbolitos,
Tu piel es mi arena de playa cual mi caricia correrá amada.
Y te noche, día y a cada instante de mi vida
Como mariposita que vuela de pelito en pelito mío.
Si hace frío, me calientas más que un abrigo,
Pues tu alma y corazón son fuego de mi fuego
Y vida para este sentimiento y amor eterno.
A tu lado se cierra el infierno de la soledad
Y crecen flores y mariposas de amor
Creando paraíso en alma de guerrero
Que lucha y lucha dándote placer y gusto,
En cada parte y refugio,
De tu ser, y ser eres todo lo tierno y lindo,
Leannán Sídhe, doncella y Leannán Sídhe, de este reino
En llama de pasión y amor,
Que noche a noche te llama.
Noche a noche, en sueños se entrega a tu alma,
Pues cada día, ansía conquistarla, y amarla más;
Y tu mirada no es de este mundo,
Porque a mí me mata,
Cual néctar bebido de tu boca,
Energía para acabar fundido, en el fuego de tus piernas,
A pedazos de vida, te entrego cada destello y secreto,
De este amor que late en verso
Y sin ti sería el poema, de un muerto a una polilla,
Te amo Hadita
Quiero vivir en este fuego, pues dentro,
A este amor tan grande, que yo por ti mezo.
Mi vida, mi amada, mi tierna y adorada,
Mi inspiración y mi alma,
Eres y serás siempre tú,
Lo más hermoso de mi mundo tú.
El castellano
DEVENIR DE CRISOL:
Mi sol, mi mariposa, mi estrella, mi luz,
Mi calor, mi mundo y te cojo de la mano
Y no te suelto por qué contigo corazoncillo
Quiero recorrer esta vida y ser de ti
Todo lo que eres para mí porque te amo con ternura,
Te amo con cariño, te amo con pasión,
Te amo de corazón.
Eres tú mi vida, mi pasión, mi novia dulce y tierna
Que de mi ser y sueños se ha apoderado
Y me encanta más cada día que pasa.
Jamás soltaré tu mano corazoncito,
Porque moriría una parte de mí,
Porque ya eres la mitad de mi alma,
Te tan dentro de mí
Que si sonríes se alegra mi vida.
A ti me entrego en alma, cuerpo, corazón, piel,
Pensamiento, sentimiento, siempre y para siempre
Porque te amo con toda el alma.
Por qué eres tan tierna,
Por qué eres mi amor completo,
Mi alma deseada y todo lo que
Todo lo que un te amo ha significado
Tu mirada linda y tierna en amor tu palabra,
Que enamora y paraliza cada parte de mi vida y alma.
Amar así amor verdadero, solo para ti,
Contigo mi vida hasta el final de mis días
Amándote con locura
Amor completo, contigo mi vida
Siempre fiel y apasionado,
Enamorado.
Mi linda y tierna, mi musa, mi ninfa,
Mi mariposita, mi vida y mi estrellita
Te quiero y amo con locura
Desde donde sale el sol
Hasta donde la luna se acuesta en tu mirada.
Y pedí un deseo encontrar un amor verdadero
Que fuese real y sincero, noble y completo,
Que me correspondiese en completo sentimiento.
Y la vida, o el destino, me regalaron tu sonrisa
Tu mirada y tu amor que cada día me llena y complementa
Que me hace subir al cielo repostar dándote un beso
Y volver a subir al cielo con cada te amo brotado
De tus preciosos labios.
Y contigo se encendió esta llama del deseo
Que creí apagada en vida de sufrimiento,
Tu amor trajo mi mejor sonrisa y la bondad infinita
De mi palpitar para entregarme a ti
Sin condiciones ni medidas, sin restricciones
A ti me entrego completo como soy y pertenezco,
Pues tu corazón con el mío, son un tesoro de amor
Único y precioso, brillante y adorable
Y cálido y apasionado cual llama incombustible
Que arde dentro, y te
En cada golpe de viento y reflejo,
Pues desde que despierto cada sentido tiene tu esencia
Pues el amor de tu alma me ha poseído.
¿Quieres saber una verdad como un templo?
Que si piensas en mí lo más seguro y probable
Que yo me encuentre pensando en ti,
Porque eso hago a cada momento,
Desde que sale el sol e incluso
Cuando te beso en sueños.
Cuando me alimento de tu boca y muero en tus piernas,
Y mis manos se funden por tu torso en caricias,
Tus flores abres para mí,
Yo en pincel pinto tu cuerpo en colores vivos y alegres,
Solo con recorrerlo con mi mente.
Y me tienes de ti como vasallo y guerrero de tu amor,
Pues tu felicidad para mí es lo más sagrado,
Pues de corazón yo te amo.
El castellano
DICTÓ EL ARA DE SANGRE:
Más de este cielo eres tú el lucero,
Eres tú la estrellita y la nube el viento
Por donde fluye el viento y mi beso,
Mi te quiero y te espero,
Mi amor y mi verso,
Que en grito de guerrero
Te recuerda que de mi amor
Todo para ti es sincero
Pues yo te quiero,
Pues yo te amo y te adoro,
Y eres tú mi cielo.
La que me alegra cada día
Y me hace mantenerme
En pie hasta el final de mis días,
Solo tu amor me hizo libre,
Pues libre tu corazón
Para amarlo en entrega fiel
Y sincera, pues mi único interés
Que mueve es amarte, mas amarte y amarte
Más cada día que pase,
Y que pase el tiempo,
Que este corazón y amor, es sincero
Y este latido de fuego jamás consumirá
El amor que yo por ti pongo en tiesto.
Y te en todo lo bonito que veo
Como una lluvia de hojas
En este corazón que vuela alto,
Desde que vive en tus manos.
Soy de ti, de ti enamorado.
Esteban
QUIEBRO LUMINOSO:
Eres tu mi tierna, mi bella, mi Leannán Sídhe,
Mi ninfa, mi doncella, mi bella, mi Leannán Sídhe,
Mi amada, mi estrella, mi sueño,
Mi dormir y no despertar más contigo
Vivo soñando en amor, en un amor que cabalga
Hecho realidad, pues de tu alma es mi alma
Y mi verso solo describe la belleza de tu mirar.
En este mundo que me pierdo y me vuelvo a encontrar
Mirando tus ojitos en despertar
Sueño tu beso, sueño tu caricia por todo mi cuerpo,
Y tu abrazo con mi abrazo, largo y duradero,
Cálido y tierno.
En esta tierra de fuego, nuestro beso
Se unió en un solo deseo,
Ser siempre completos en este amor verdadero,
Ser de la pasión fuego,
Y del verso amor incondicional e incontrolable.
El agua de tu boca tener,
Ver contigo el amanecer,
Arropar cada noche mi sueño con tu compañía
Que me arropes en tus alas de amor
Y volar lejos de este sitio terrenal
A un mundo mágico en el que solo existan
Tus besos y tus caricias,
Donde tus te quieres y te amos
Nazcan como flores en la tierra,
Y nuestros sentimientos sean los dragones
Que protegen nuestra historia de amor.
En ti pienso, contigo sueño y muero en pasión de fuego,
Vivo cada verso, y te entrego la esencia
De mi sentimiento, que vuela, que corre a tu lado
Para amarte y amarte besarte, mirarte y acariciarte,
Llueven rosas y en pétalos envuelven este corazón
Que orgulloso y enamorado
Grita que te quiere y ama,
Más allá de este mundo y razón alguna
Pues te amo de corazón
Y ese fuego de amor no le hace falta explicación
Pues se demuestra y se demuestra sólo con amor,
De tu felicidad es pasión
Para ser tú sustento y tú aliento
Más yo a ti te
Y te pura y hermosa cual diosa.
Si de la naturaleza fueras Leannán Sídhe
Todas las flores te servirían
Y cada pajarito cantaría a tu ventana,
Las fieras serían tiernas solo con tu mirada.
Tu esencia me llevó a tu lado
Para quedarme contigo esta y cada vida,
Mas de ti soy tu esclavo y tu amado,
Tu eternamente guerrero enamorado,
El de la palabra dulce y apasionada
Que dedica y dedica a la grandeza de tu alma.
De este paraíso de amor,
El río que da vida a las almas en color se volvió,
Y la vida cantó su canción de amor
A esta suerte de artesanos de la pasión,
Más de tu cielo soy guardián y redentor,
Soy lluvia y cada gotita que te riega,
Mi margarita amada que en un pétalo
Dejaste escrito que me amabas y querías
Y que lo harías siempre y para siempre,
Aquello me convirtió en luciérnaga eterna
Para posarme en tus hojas
Para siempre ser tu luz y tu amor,
Tu calor y tu ilusión tu amor y tu pasión,
Soy yo tu amor, tu poeta, tu novio, tu guerrero,
Y el que va a estar a tu lado a cada minuto,
Vida y segundo, siempre, siempre, siempre
En tu corazón y a tu alrededor
Pues de tu cuerpo, seré cada flor,
Y tú de mi vida eres y serás cada ilusión,
Cada deseo, sueño y pasión,
Eres mi palpitar, soy tu amor,
Tuyo, tuyo a cada instante y minuto
Pues de alma y corazón, te amo
Ninfa, mariposita, doncella,
Mi dulce, bella y tierna, mi diosa,
Leannán Sídhe y Leannán Sídhe eres y serás siempre
Mi felicidad, amor y pasión, mi todo,
Mi amor verdadero y completo
Y lo que más me alegra,
Que eres mi amor correspondido
Pues tu corazón y el mío
Forman siempre un mismo latido.
Tú mi anhelo fraguado.
El castellano
PROPÓSITO:
Cómo soltar tu mano
Si es algo que ni lo quiero
Hacer ni pienso,
Cómo hacerlo si tu alma
Se ha apoderado
De cada espacio de mi palpitar
Y latido, te amor como mi deseo,
Sueño, sentimiento,
Pasión y verso en fuego,
Pues esos ojitos
Que tú tienes son luceros
De mi más profundo
Mar de sentimientos
Y cálidas ilusiones
Como besarte
Y mirarlos fijamente
Minutos y minutos para decirte
Cuanto te amo,
Tu sonrisa empieza a desplegarse,
Amada ya la horda,
Como tu maravilla.
Y tu corazón me cautiva
Y me toca y toca
El amor de mi alma soñadora.
En esta aurora
Cual tus besos y boca
Danzarán por los astros de mi boca,
Mi mar de ojos
Y tu bosque de ojos
Se fundirán en un horizonte
El de promesas de amor
Y una pasión sin igual.
De mis entrañas nace este te quiero
Y verso, solo completo
Cuando riegue tu corazón
En amor y por tus ojitos
E interior sea recorrido,
Pues este es mi camino
Ser feliz y feliz
Siendo yo tu dulce susurro
Y caricia de amor en tu oído.
Extraño tu cuerpo,
Extraño tu boca, tu caricia,
La melodía de tu boquita
En mi vida escuchada,
El brillo de tu mirada
Encendida e ilusionada
Por cada palabra de mi alma
Para tu alma brotada.
La danza de mi fiera
Por tus piernas,
Y caer rendido en tus alas.
Más tú a mí me amas
Y si me extrañas dímelo,
Dímelo cada día
Que presuroso correré en auxilio
Con mi amor y cariño.
Pues solo contigo noto en mi palpitar,
El brillo y luz
De este fuego de amor
Y pasión que consume
Creando cada día
Nueva y nueva ilusión.
Y soy completo sólo con tu amor,
Soy feliz solo con tu mirar
Y enamorado de ver tu sonrisa brillar.
Soy de ti como jaguar
A la selva de tu mirar,
Como pirata al tesoro
De tu interior.
Como planta bella
Al jardín de tu corazón,
Y pez que vive en el agua de tu boca,
Druida de tu sonrisa
Y guerrero fiero de tu alma.
Soy yo quien te ama y te ama
Quien nunca te dejará.
Y sé que sientes estas palabras
Porque son sinceras.
Ámame sin reservas
Que este corazoncito
Nunca se irá de tu ladito.
Luz de vida, luz de mi vida,
Corazón de mi palpitar,
Musa y alma de mi inspiración,
A ti me entrego en esplendor,
A ti me entrego sin dolor,
Sólo con expectación
De ver brillar tu corazón
Con el fuego de la más cálida
Palabra emanada pues de mi mundo
Eres tú mi calma,
Mi fiera, mi tierna, mi dulce
Mi amada, y tú ninfa, mariposita
Vuelas y vuelas en la belleza
De mi imaginación,
En lo dulce y sensual de mi interior,
Recorres cada paraje de la piel
Posándote y erizando cada vello,
Mas de tu amor no soy plebeyo
Me nombraste guardián y protector,
Y único heredero de tu amor.
Tus alas coloreadas en brillo de colores
La sinestesia de un paraíso,
Lo mágico y soñado, lo místico y profano,
Siendo zarza y zorzal anidando
Es su vientre, rosa de penitente y duende
Que en tus senos se duerme,
Yo todo lo que sueñas y deseas
De ti todo lo que tú quieras,
Pues abrazado en tus alas vivo,
Y vuelo, elevándome en amor eterno,
Recorriendo contigo cada sueño,
Siendo con tu amor inmortal.
Con tu beso sería dios de tu reino,
Pues en sangre, verso y sentimiento,
Te daría todo lo que soy y pinto.
El castellano
SERVIR ANGELADO:
A tu corazón sirvo, mi diosa, mi tierna, mi preciosa,
En tu boca vive el te quiero más lindo y tierno que espero
Y espero en anhelo como tu beso.
En tus manos viven las caricias deseadas,
En tu cuerpo mis besos en suaves y dulces cosquillas,
Para que sientas mi cielo, en tus ojitos el brillo
Que indica que sabes que te quiero, en mi palpitar, alma
E interior el te espero escrito junto con el te amo a fuego.
De este cielo tú y solo tú ninfa mía eres la dueña y alegría.
Pues disipaste la melancolía ahuyentaste el dolor con solo,
Decir aquí te espera un corazón que te quiere, que te ama,
Este corazón que late, siente y piensa que de ti,
Toda la eternidad enamorado estará, te correspondo con fuego
Te complazco con flores de sentimientos, y caricias
Al velo de tu cuerpo más yo a ti te miro y abstengo herir,
Pues tus ojos saben que no miento pues este amor
Es sincero y completo, de tu ser vida, risa y amanecer,
De mi eterna felicidad y río de colores creado
Solo de lagrimas de emoción y amor de sentirme amado,
Bajo tus brazos, y vivo en tus ojitos por tus pestañas
Trepo para enredarme en las flores de tu cabello,
Y soy tu poeta fiel y tierno,
Soy solo lo que yo por ti rizaría, más de ti vivo un sueño
Sueño y deseo mágico y precioso que jamás creí que llegaría,
Porque te dentro mía y respondes a mis te amos,
Hasta tus besos aun no estando tu boca junto a la mía,
Porque yo a ti amor te capturé y te domé y orgulloso complacido
De cada latido escrito, te confieso que llegó el momento
Pues te tengo dentro muy dentro fundida con la esencia
De la melodía de mi alma traviesa y viajera
La que a mi pensamiento y sentimiento da lenguaje y vida,
Corres por mi sangre calentando todo mi cuerpo
Y lo amor por todo el cuerpo,
Tu sonrisa iluminar mi vida,
Tus ojitos atravesarme con fuego,
Y tus lindas y bellas piernas cabalgando encima de mi cuerpo,
Bajo traje azul de estrellas y fuego de nuestros cuerpos,
De fuego al fuego, y agua al agua de nuestra boca,
Te amo y lo haré siempre mientras esta vida mía me deje
Servirte el amor y felicidad que de mi corazoncito para el tuyo,
Rebosa por cada rinconcito de mi ser, y ser soy más tuyo
Que las nubes al cielo pues es mirarlo y te convalido.
Ya que cumpliste mi deseo existes y me amas con el alma entera,
Fiel y sincera, linda y tierna, tú mi amada Leannán Sídhe.
El castellano
PESQUISA FLAMÍGERA:
Sentirte es cuando mi palpitar
De tu alma se viste,
Vivirte es recorrer cada beso tuyo,
Sonrisa y caricia,
Hasta feliz, amado,
Dichoso y apasionado
En mi pecho dormirte.
Tenerte es ver ese amor
Que sientes
En tus ojitos reflejado,
Bellos y alegres,
Tiernos y dulces.
Cual nubes de colores
Mis sentimientos pasan
A llover en tu ventana y mirada.
Mi te amo entra dentro y profundo,
Cual raíz de rosa
En la tierra mojada.
Y tú mi vida eres preciosa.
No basta regalarte una rosa
Sino amarte toda la vida,
Porque mereces eso
Y mil cariños más de alma.
De tus besos
Quiero tener mi aliento,
De tu cuerpo,
El combustible
Para este fuego.
Tú amada florecita
Eres de mí,
Cada despertar alegre,
Sintiendo que me amas
Y que seguro estarás soñando
O pensando en mí,
Porque en mi palpitar
Has escrito mil refugios,
Y tatuado cada verso tuyo.
En mi cuerpo
Tus caricias has dibujado,
Eres de mi vida lo más bonito
Que jamás logré imaginar o alcanzar
Pues me amas y te amo de verdad
Y es un sueño hecho realidad.
Pues tus latidos los oigo
Y junto a los míos,
Tu alma, mi alma ha conquistado.
Y juntas, como nosotros
Viven amándose
Y en fuego a cada momento.
El castellano
VIDA EN TU VALS:
De mi felicidad
Eres la que guía cada sonrisa
Y hace brillar este corazoncito
Que a tu lado amor mío
Te daría el paraíso,
Mi boca el fuego
De beso y beso
Dulce y tierno,
Cálido y apasionado,
Que se alargaría
Minutos y minutos
Hasta llegar incluso
A una noche entera
Dándote besitos
Y mirando al fuego
De tus ojitos.
Mi caricia quiere viajar
Por la arena de tu piel
Y repostar en el oasis
De tus bellas piernas.
Te quiero más como eres
Una pasión entera,
Mi musa linda y tierna,
La que este corazoncito
Quiere y acelera.
La que me besa y besa
En cada sueño,
En el que tengo un cielo
El de tu amor y fuego
Hasta cuando duermo.
Y te amo pues de la belleza
Y bondad de tu alma
Me has enamorado.
No me puedo imaginar
Un mundo sin ti
Aunque no lo creas
Porque es contigo
Con quien quiero pasar
Cada día de mi vida.
Y aunque esto
No parezca un poema
Son mis sentimientos,
Que de ti y para ti
Son y serán siempre bellos
Porque te quiero.
Y te amo hasta el final del tiempo.
Mi ninfa, y preciosa.
Mi bella y mi amada,
Mi Leannán Sídhe.
Mi gatita y fiera,
Mi adorada florecita
Margarita.
Siempre contigo quien de corazón
Y alma te ama yo.
El castellano
SENTIR DE CORAJE:
Y yo te amo y el sol brilla,
Y el alma conoce al cuerpo,
La cabeza se separa y solo
Queda el corazón sintiendo amor.
Y yo te quiero, a mi ladito,
Y yo dándote un beso rico,
Y yo te deseo más que un niño
A un caramelo.
En un piropo de tu boca vivo,
Y a tu corazoncito sirvo.
En abrazo cálido y duradero a ti
Me veo pegadito y mientras pasan
Y pasan los minutos y segundos,
Aquí te sigo sintiendo,
De mi cariño como llama de fuego,
De tu boca yo quien la extraña,
De tus ojitos yo quien vive en tu mirada.
Puedo sentirlo de cada letrita que fluye
Un poquito de amor que crece y crece.
Subo esas montañas de tus senos,
Y vuelvo a caer en tu cuerpo,
Acariciando las flores de tus cabellos.
Sueño en marcha, cabalga mi pasión
Tu alma la sostiene y teje,
Para crear tu abrigo y ropa interior
Que te protege del frío.
Este deseo nace pleno al imaginarte,
Y sentirte tan cercana
Que casi puedo tocarte.
En mis brazos y pecho apoyo tu cabecita,
Para dormirte y tierno como gatito
Acariciarte mientras susurro
En tu orejita todo lo que tu amor
Mágico y verdadero en mí ha provocado.
Que te amo, te amo y te amo,
Más allá del tiempo
Y de una falsa distancia
Pues solo separa nuestros cuerpos,
No está alma que te quiere y ama,
Gritando tú nombre,
Diciéndote a cada segundo,
Que estará siempre a tu lado
Mientras dure el mundo,
Y en su ausencia crearía el de besos
Alegrías y sueños, caricias y te quieres
Para poder seguir viviendo contigo.
El castellano
SANGUINOSO AÑIL:
Pluvia del corazón, ardiente deseo de amor
Con asombro, el deseo, la alegría sempiternas.
Un día, un carruaje, acrecí de calor.
Color, vida, veneraba cantar.
Que esperar a que la alegría, nuestro deseo.
Me mostró las alas, que hizo atractivo prisa.
Cropinquus, el sueño, el verso, la letra.
Su salida se fueron vamos, hemos creado poca fe.
Base es dulce, el agua pura.
Alma sano, leal me gusta.
Deseosos de un sueño profundo, la metáfora, plaga,
Naturaleza suspiro, me encantaba hasta que hierva.
Decidido a distancia olvide lo pensado.
Quería puro, el único del corazón.
Bosque o sendero, sensisensum sentido.
La sociedad Hermosa, para que se contente con las verdades.
El fuego, cogió un apetito nuestro, hermoso.
El castellano
ILUSIONES EN MANO:
Quisiera tenerte en mi pecho,
Decirte al oído cada latido.
Acurrucarme en tu ombligo,
Acariciar tu pelo,
Y mirarte bello todo un mundo
Por descubrir en tus ojos.
Quiero vivir de tus sonrisas,
Beber de tus besos,
Estar contigo hasta que el tiempo
Sea solo una forma de nombrar,
De ti un parpadeo pues contigo
Sería este fugaz y querría
Más y más tiempo contigo hasta
No despegarme de ti un minuto,
Ni soltar tu mano,
Pues a besitos recorrerías mi mundo
Y yo el tuyo.
Como no conjugar, las mil formas
Que tiene un te amo, cuando verte
Lo ha provocado, y sentirte
Lo ha tatuado.
Puedo escribirte un mundo
Pero prefiero vivirlo y sentirlo
Contigo, contigo, solo contigo
Más yo soy sólo tuyo,
Y tú solo mía, la que crea
Esta sonrisa y las mil
Que a tu lado verías.
Puedo recorrerte al cerrar los ojitos,
Puedo amarte de un millón de formas,
Porque la más importante,
Es la que te más dentro
Y esa es amarte de alma.
Porque que tu alma
Está juntita con la mía y mi esencia,
Te vuelvo a decir te amo mi bella,
Porque voy a dormir soñando contigo.
Y es muy bonito dormirme pensando en ti.
Porque más cerca el momento
En el que lo haga a ti abrazadito
Dándote besitos toda la noche.
El castellano
GRANA DE ESPIGA EN PECHO:
Son tus sentimientos
Un tesoro de amor,
Son tus labios
Un arma tierna,
Pues tu palabra
La hacen bella,
Son tus manos
Arpas del tacto,
Pues con ellas
La caricia se vuelve
Melodía de mi placer,
Es tu sincera alma,
El valor y coraje
Ganado en batalla,
En la que de este amor
Ganamos los dos.
Es tu sonrisa
Un horizonte de astros,
Cometas de mi cariño,
Ilusión de trovador.
Es tu beso un vuelo
A un mundo
Anterior al nuestro,
Para finalmente
Y felizmente
Vivir en un romance,
Antiguo.
Es caer en lecho
De amor y pasión,
De rosas y velas
En una cabaña
Junto al río,
Pues el marrón
De tus ojitos la cabaña,
Y el azul y verde
De los míos,
El agua de ese río.
Desde que te conocí
No he sentido frío.
He vivido con fuego
En cada latido,
Y te amo
Con suspiro y suspiro,
Y haciendo al cielo
Mi pedido,
Vivir pronto
Mirando tus ojitos
Junto a los míos.
El castellano
CONCAVIDAD PRESA:
Soy fuego con tu aliento de amor vivo,
Me deslizo por tu suspiro para decirte
Cuanto te admiro,
Cuanto me derrite un gemido,
Tengo tanto que agradecerte,
Gracias a ti vuelvo a sonreír y a ser feliz,
Eres mi vida estrellita mía.
Escribiéndote mi poema de los sentimientos
Que este amor por ti de mi alma emana.
Para que ni una noche extrañes mi cariño
Y amor sincero pues te amo
Y te quiero con el corazón entero.
Más, nunca soltaré tu mano,
Nunca
Nunca
No hace falta que te lo diga
Porque sabes la respuesta
Y es que quiero pasar mi vida entera contigo
Y muero esperando que llegue ese momento
Juntos de la mano sueño sin fin.
Tus ojitos con los míos en fuego de mirada
Tus labios y los míos
Llenándose de agua de un paraíso
El de nuestro amor mágico
De tierra de hadas
Y fuego de dragones.
Mas del verso a tu amor y mío
Sobran explicaciones pues el te amo
Se ha tatuado en tu corazoncito,
En sueño te vivo despierto,
En verso te admiro en inspiración,
Que provoca tu amor en mí
Junto el deseo bonito y divino,
Dulce y sencillo, tierno y lindo,
Como de tu boca el besito.
Junto a ti quiero matar cada minuto,
Arrebatar al destino cada detalle bonito contigo.
Y tener vida y sueños para crear y realizar contigo.
Tú mi amor, yo tu amor, y tu fiel guerrero
En verso y fuego, en caricia y deseo
Que recorre tu cuerpo,
Tú mi sueño, tú todo lo que quiero contigo
Amor completo,
Contigo solo un camino sentirte y amarte
Hasta acabar el universo a besos por todo tu cuerpo.
Tú mi amor soberbio.
Yo tu poeta tierno.
El castellano
MIRAR SU MAGIA ESENCIAL:
Lo mágico de nuestro amor
Cabalga en besos
De lluvias de primavera
Que dan vida a la tierra.
Crean y dibujan la tierna caricia
Que derrite hasta el hielo
De heladas de invierno,
Durmiendo tú en mí pecho,
Yo acariciando tu pelo.
En tus ojos el fuego
Por el que este corazón
Late en suspiro al verte.
Estas manos que ansían tocarte,
Este cuerpo que en su piel
Quiere sentirte.
Mas del amor eres amor,
Del sueño pasión.
Eres tú entera la más linda flor bella.
Aquella que con su amor
En todo mi interior ha enraizado,
Para ser la única que mi mundo
Entero ha cambiado.
Pues de mi mundo te has apoderado,
Mi vida amor, sólo tú has cambiado.
Contigo amor sincero,
Amor tierno, amor completo y verdadero,
De verso y sentimiento,
De corazón, cuerpo y sentimiento.
Yo entero y con todo lo que tengo,
A tu corazón y cuerpo me entrego.
Mi palpitar y amor cada día te entrego.
Pues de mí alma eres alma,
De mi amor eres tú y solo tú amor.
Luz de corazón, luz de vida,
Luz de mi vida.
Te amo como eres tierna y linda.
Yo como caracolito que se alimenta
De tus hojas más tú eres mi florecita tierna.
Prometo siempre amarte,
De mi vida cuidarte con amor y pasión,
Tenerte consentida mi vida,
Pues te quiero besar y acariciar cada día,
Ahí donde lo imaginas.
Te sueño incluso sin sueño,
Porque soñando vivo despierto,
Más tú de un sueño y deseo te hiciste realidad,
Y ahora mi amor a ti es mi única verdad.
Ahora solo tú mi anhelo,
Eres mi felicidad.
Mi despertar enamorado,
Y acostarme durmiendo en tu soñar
Y palpitar, te honro de verdad.
El castellano
Tablero de existencia:
Otro día más.
Otro día menos.
Horas, minutos, segundos
Pasan.
Decisiones, esperanzas, vidas truncadas.
Gentes luchando por cambiar el hastío.
Luchando por cambiar la rutina.
Peones de este juego de ajedrez.
Sólo avanzan en un sentido,
Alimentándose de lo que encuentran en su camino
Que avanza sin retroceder hasta llegar al final del tablero.
Unos ansían convertirse al llegar ahí en otras fichas más poderosas,
Para seguir comiendo a otras gentes.
Pero otros acaban siendo comidos por la torre, la que juzga sus vidas.
SENTIR EN BRUTO:
Flor de luz en este linde donde corta mi sendero.
Vidas paralelas que avanzan, entrecruzándose cuando duerme el sol.
Fiel reflejo de mi amor que te doy en sueños.
Intermitentes sentimientos como ánimos en ánimas inanimadas.
Flores amarillas de espinos creciendo en este desierto embalse de recuerdos regados con amor.
Labios que sangran palabras de vino.
Pulmones que respiran cigarrillos en un cielo enterrado.
Manantial subterráneo donde quedé encerrado.
Gritos por eco, pensamientos retumbantes en mi cabeza, reflectantes de mi existencia.
Quisiera escapar de este pozo quisiera que tú me rescataras.
Que tú me ayudaras y me besaras pero eso no depende de mí porque ya me amas con toda
El alma.
Semanas pasan y el olvido me va matando con su cruel instrumento, a golpes de silencio
Me voy consumiendo, sin sentir tu aliento,
Te espero fumándome lo que queda de mi cerebro.
Bebiéndome lo que me queda de hígado y comiendo todas las flores que te regalo en letras.
Contando mis recuerdos para volver a amarte,
Me pierdo en tus detalles y vuelvo a desearte.
¿Cómo estar triste? Si siempre te tengo presente.
¿Cómo ser débil? Si tu amor me hizo ser fuerte.
Es el ocaso del tiempo que me dispara,
Derrotas y victorias en este campo de batalla.
Una sonrisa y un beso recogieron mi alma
Junto con un te quiero sincero esa fue tu arma.
Mi pensamiento vi volar junto a ti
Desde el momento en que te conocí.
Con mis besos y caricias tu cuerpo recorrí.
Mi pasión mantenerte viva dentro de mí.
Contigo en mi vida, se encendió el fuego del deseo
Y de deseo en deseo encontré mi anhelo,
El insomnio de este vivo sentimiento
No perderte nunca para soñar despierto.
Y a si cada día volver a amarte y desearte.
Tus besos riegan los rosales de mi palpitar,
Lo llenan en flor, alimentan esta ilusión.
En tu mirada deseos como los míos,
Fieles reflejos de cómo somos,
De lo que queremos.
Momentos que vivimos,
Recuerdos inolvidables llaman a un presente,
A una historia que separados no tendría sentido,
Sólo sería un injusto desenlace para todo lo que hemos luchado.
Y luchado en contra de la dificultad, de las dudas, del futuro.
Y que ahora no me lo imagino si no es para compartirlo contigo.
SENTIDA SENDA:
La noche con su aura de misticismo.
Nos conducía hacia las puertas del deseo, y la pasión,
Como algo inevitable, como algo que tenía que pasar.
La preciosidad de todos los factores,
Que envolvían aquel lugar, fue como
Si hubiese estado todo preparado para nosotros dos.
La luz de la luna, y de las estrellas incitaba
Con su velo de romanticismo, a dejarse llevar,
A solo escuchar lo que queríamos de verdad.*
Nada importaba, solo tú y yo, y aquel momento.
Solos tú y yo, en ese instante mágico.
Solos tú y yo, sin importar lo anterior,
Intercambiando amor.
Tenía la sensación de poder alzar la mano y tocar las estrellas*
Y alcanzarlas para ti.
Tus ojitos brillantes, el fuego de tus caricias pidiendo más.
Yo robando a la noche cada minuto.
Galopando en mi corcel, saboreando tus labios sabor de miel,*
Mi cabeza queriendo detener ese instante, para siempre,
La cámara de fotos, de mis ojos, capturando todos los detalles.
Te necesitaba, mas ya no aguantaba esta soledad*
Y me llenaste de nuevo de ti, con tu cariño sincero.
Y te volví a sentir, coraje y seguridad, para luchar por lo que quiero de verdad.
Volvió la felicidad a mi ser, volví a ser.
Tan importante es el ser, tan importante es el estar.
Lucharé y sé cómo ser, ya que ya fui, y no hay barrera, que no pueda superar
Y el deseo que pedí esa noche, a aquella estrella, se cumplirá y me recordarás.
Porque te voy a dar momentos, y recuerdos que nunca olvidarás.
DESLIZ PASAJERO:
Déjame ser quien guarde tus besos,
Quien comparta tus alegrías,
El que cree horizontes contigo,
El que al cerrar tus ojitos veas.
Déjame cumplir todos tus deseos
Como anhelos de que otra realidad es posible,
Hacerte feliz es lo que pide mi alma,
No quiero que te vayas sólo que veas
Que sin ti no soy,
Que sin ti no quiero ser,
Que sin ti,
Sin ti no podría vivir.
Me duele el pecho sólo de pensar en no volverte a ver, mi alma.
Enamorarte lo pide mi palpitar,
Capturarte en mi retina, mis ojos,
No puedo, ni quiero olvidarte, porque te necesito,
Y no me puedo imaginar una vida sin ti, aunque no lo creas
Pero se alegra mi alma, sólo de verte sonreir.
Porque existes en mi mundo.
Porque eres mi mundo.
Vida en color de tormentas de arena,
Polvo de almas errantes jinetes del tiempo,
Ocasos de un tiempo de alba en lo infinito.
Qué cosa mejor, que tu te quiero;
El suave duelo del te espero,
El desespero y me desespero
En el suspiro del cielo.
Si el querer quiso y el poder no pudo
Nada se opondrá,
Todo se verá y quedará,
Nada se irá en la azada;
Se cavan surcos de mí en tu alma
Nunca para desgarrarla ni dolerla.
Solo para acariciarte.
Viento azul de este cielo nocturno
Quien viera tus ojos siguiendo mi marchar
Solo sombras en mi camino para buscarte
Sentimientos que recobran fuerza
No te vayas de mi lado
Sentido de luz compañera
Vuelve
Como lluvia roja de besos carmín de tus labios
Como cielo encerrado de tus ojos
Cielo que liberado nunca me abandonará
Cielo desconocido cielo sin domar
Fiel compañera de día y de noche
Fuego como yo solo avanzando en un sentido
Yo contemplando el abismo
Nunca cayendo ya que tengo apoyo firme
Tú mi apoyo
Mi motivo para soñar alto para vivir intenso
Meloso tormento de todos los matices
Para sentirme cuerdo, en un mundo de locos,
Pero quién soy yo sin tu calor de palabras;
Sin tus sentimientos sinceros que me enamoran
Que ilusiona y paraliza,
La vida de este pomposo corazón que te habla;
Ansía todo lo que salga del tuyo,
Porque este ya comienza a sangrar.
Ya te dio su lado.
Solo es para disfrutarlo en vida
No vivo esperando tierra
Lloro viviendo amarte,
Para soñarte vida para morirte placer.
Quien da más, solo tiempo, todo llegará, o se irá
Naipes del tarot helado
En la hoguera de cartas flameantes al viento,
En este oscuro firmamento
Del azul sediento teñido de espadas
Como pasión nunca matar cariño,
Solo aumentarlo cada día.
SENTIDO OCULTO:
Vida para morir en tus ojos,
Amor para odiar lo malo de esta vida, que destruye,
Y se come por dentro mi noble corazón
Sólo un segundo de ansiedad, tiempo que corre marcha atrás,
Un miedo aflora:
Cómo perder tu mirada fijada en mí con cariño sincero,
Como el peor castigo,
Condena inimaginable, que solo pensarlo, solo pensarlo de observarlo,
Un pozo de miedos, y pensamientos negativos, aflora en mi irracionalidad.
Caes en él y te levantas en minutos, pero el miedo avanza;
Te paraliza,
Te domina,
Como equilibrio de fuerzas para vivirte intensamente;
Para soñarte.
Solo el deseo de conservarme en tu deseo sublime de ilusión;
Un sueño como deseo,
Compartir nuestros caminos, ganará, ganará
Para esta vida.
Felicidad eterna; más allá, de estas funciones vitales mías
Está la posesión de tu alma,
Tu recuerdo,
Tu esencia capturada por cada sentido despierto cuando te miro,
Cuando te leo,
Cuando te pienso,
Cuando te asomo,
Cuando te deseo;
Allí está mi felicidad.
Allí estás tú.
SENDERO DESPIERTO:
Voy allí y te encuentro dormida, al final del bosque,
Te encuentro soñando, con otros días de amores profundos.
Como el azul del cielo que a tu lado te hacía brillar,
Mi caricia hace una pequeña sonrisa en tu rostro,
Mientras acercas tus labios para besar los míos,
Y fundimos nuestra vida bajo aquellos árboles.
Vistas de un amor eterno que devolvería vida, para quitar su despertar de melancolía.
El lobo vigilaba su guarida allí su mano le sacó, para ver el mundo.
No quiso volver a su cobijo, las palabras dulces y tiernas,
Guiaban mi alma a viajar, uniendo su ser volaba hasta regresar.
Te necesito más allá de este sentido que grita por tenerte,
Te necesito más que el fuego a la madera, gritó mi vida por tenerte,
Y a la vez te hablo, en cada golpe de viento y reflejo.
Me encuentras, y tu recuerdo reciente me besa, mientras no puedo evitar recrearme en el deseo y corresponderte.
Para esta vida mía, la estremece,
La atrae a su lado como algo inevitable,
En tus ojos quiero perderme.
Para encontrarme con el momento inolvidable.
Sentido despierto cuando te veo,
Imparable en mi vocabulario el piropeo,
Como el entrañable y dulce deseo,
Te veo tan cerca y a la vez tan lejos.
Escojo tu sendero, yo como tu destello en el secreto,
Voy con el manto de tu compañía, allí donde se oculta el día.
Allí donde nuestro calor se refugia.
Allí donde mi alma no cesa la lucha para ganar tu dicha.
Con los miedos guardados en un rincón,
El sueño solitario no me abandonó,
Con su antigua ilusión envejeció, su imagen viva guardó.
De él decían que solo quería comprender al amor;
Del verso a la canción, así hablaba el corazón,
Tras una flor la conoció y le preguntó:
¿Qué eres amor?
No, solo nací del rayo de sol.
Intrigante sensación.
Nadie te posee, pero todos quieren encontrarte.
Hoy fui más allá y te besé, y así en mi interior tenerte.
Como un paréntesis del destino, su recuerdo siempre quedó.
Tu amor es lo sagrado a lo que aspiro,
Tu dulce complemento entrando en mi vida,
El día para tener los besos de tu firmamento,
Noche para regar las rosas de tu alma.
Cumplir mi deseo, me esfuerzo en mantener tu aprecio.
Tu mirada con mis ojos recorrer,
Ver contigo el amanecer.
Arropar tu cariño con cada detalle.
Sostener en cada noche tu sueño en mi pecho.
Ilusión como íntimo tesoro de dulzura,
Vivir cruzando nuestro existir.
Navegando en el horizonte de mí destino,
Buscando tu sonrisa en cada amanecer,
Velando el tiempo de cada anochecer.
Llamándote en silencio con cada recuerdo,
Volviendo siempre al comienzo del sentimiento,
Dejándome llevar por el dulce tormento,
Conteniendo las palabras en el viento.
Ya quiere caer el lamento, dejar libre el intento,
Verte llegar, el silencio deshacerlo.
Saborear tu piel bajo las sábanas,
La miel de tus labios tener,
Hacer tus piernas estremecer.
Endulzar el momento con una caricia,
Compartir día a día, abrazándote en la noche,
Sólo con tu amor ya no sería pobre,
Solo tú te quiero, se eleva en mi cielo,
Mi dulce sustento que quiero.
Mi palpitar quiere navegar hoy por tu interior,
Sentir cada flor que forma tu piel,
Tener tu aroma como velo que embriaga.
Quiero quitarte la ropa, besarte, que me sientas dentro,
Recorrerte en cada caricia, hacerte sentir, oírte gemir.
Quiero mi despertar para verte llegar.
Amanece y tu silueta recorre sus últimos instantes en mi sueño,
Tenerte cerca cada noche y en mi interior los días,
Ser tu compañía, alagarte con mis letras, entregarme como te entregas.
Cuantos besos soñados y mil abrazos no dados,
Noches para esperar, vida para alcanzarte.
Y sentirte, mi motivo para enamorarme,
El momento de tener tu esencia más allá de donde acaba el sentido.
El castellano
3 PREMISA ARDE:
Cada deseo una ilusión,
Cada ilusión una fantasía,
Cada fantasía una esperanza,
Cada esperanza una promesa,
Cada promesa un juramento,
Cada juramento una palabra,
Cada palabra...y cada palabra,
Un millón de pensamientos,
Un poder inmortal,
Capaz de crear revoluciones,
De crear o de destruir de vencer
O de morir en el olvido,
Capaz de hacer enloquecer o de desnudar,
De amar o de odiar,
De sepultar o de consolar,
De hacer llorar o sudar,
De amenazar o de perdonar.
Una palabra es lo más importante
Cuando sale de un corazón noble
Y tiene un par de valores que la respalden
Te quiero es mi palabra.
Esteban el castellano
7 TIERNA SECUELA:
En la oscuridad de mi cuarto son tus recuerdos los que me invaden, mis labios tiemblan y te alumbran.
Te llaman en silencio.
En la oscuridad de mi cuarto es tu figura la que me acecha, la que me provoca, me alza.
Produce un caos febril de deseo y de pasión.
Pero tú no estás, tú no estás, no estás.
Tu recuerdo recorre todas mis neuronas con miles de imágenes, cada una añorando un
Pedazo más de ti.
Agarro con fuerza mi almohada pensando que eres tú y una tristeza comienza a invadirme,
Lágrimas salen de mis ojos, en ellas se puede ver tu rostro reflejado en ellas.
Ardores me entran en el pecho sé que no vendrás que nunca volveré a tenerte, que estás
Ausente y mis lágrimas se convierten en lágrimas de sangre, ha estallado mi palpitar de
Una sobredosis de sangre.
Esteban el castellano Er lobo bohemio
8
A FLOR DE PIEL:
Simplemente te veo cierro los ojos y estas aquí en mi interior
Como un recuerdo imposible de borrar que me hace soñar y volar sobre
Mis ilusiones
Que quieres que te diga si lo único que quiero decirte es que te quiero
Sueño despierto y no quiero cerrar los ojos si no es para abrirlos y verte cerca mía
Y con cada sonrisa tuya mi palpitar se alegra
Cuanto desearía decirte te amo pero no me atrevo
Solo espero que llegue el momento en el que volvamos a ser uno juntos de la mano
He empezado este poema pero no sé
Cómo acabarlo si no es con un beso
Tus labios rozando los míos
Tu aroma entrando en mi interior como un velo sublime que me embriaga
Mi cuerpo temblando como si fuera el primer y último beso
Sueño sin fin
Sentimiento a flor de piel
Ojos que hablan de cómo te sientes
Sueños sin realizar, no es más fuerte el amas veces se cae y se levanta sino el que nunca
Llega a caerse
Historia imposible de acabar
Corazón bohemio hoguera de sentimiento
Que te quiero y que lo seguiré haciendo hasta que la vida y la enfermedad me lo impidan.
Te llevo dentro de mí en mi sangre por mis venas en mi pensamiento y en mi palpitar
Tú la flor más bella que vieron mis ojos
Amor de una vida cariño profundo y sincero que siento,
Profunda admiración que te tengo
Tu cuerpo que me hace estremecer
Y caer en un profundo sueño en el que hacemos el amor toda la noche
En una habitación llena de rosas y de velas
Mi sentimiento por timón
Mi amor por bandera.
Sin tú moriría por dentro.
Sin tu cariño no soy yo, sería un ser sin alma
Tú has llenado mi palpitar de alegrías y amor
No pararé hasta que seamos uno.
Tú flor de mi vida, que as enraizado profundamente en mi palpitar,
Corazón de bohemio, ni duermo y fumo hasta matarme.
Corazón noble y leal que palpita agitadamente cuando te veo.
Amor sincero.
Enamorado de la vida y de ti.
Gracias por hacerme el hombre más afortunado
De la tierra por tener tú cariño y respeto.
Tu cuerpo me hace estremecer y sudar, me veo reflejado en tus ojos, tus labios, que besaría
Un día entero sin descanso.
Amor de una vida, amistad profunda como nuestro cariño y amor.
Tú que me has alegrado la vida.
Que has hecho que desaparezcan mis penas de enfermedad
A tu lado no tengo miedo a nada.
Porque tengo tu amor.
No tengo miedo a caminar sólo por la vida, porque te tengo aquí en mi palpitar.
Tu amor de una vida o de un mes.
Quiero conocerte
Para amarte más y más.
Para quererte más y más.
Luego soy romántico, te quiero luego soy amante, vivo luego soy vividor
Tú la chica más bella yo, un bohemio rubio de ojos claros de sentimientos y corazón
Tan fuertes y puros como agua de manantial,
Tu sonrisa ilumina mi vida. Siempre estaré tu lado
ESTEBAN EL CASTELLANO
9
Suicidio
Miro mi soledad desde la oscuridad.
Hoy cruce al otro lado donde no hay
Camino de vuelta.
Hoy abandone mi pasado mi presente y
Mi futuro para vivir en lo oscuro.
Un sueño eterno triste y oscuro.
Hoy ganó el averno y me arrastró lejos
De este mundo para siempre.
Voces de muerte oí y las hice caso ahora me arrepiento
Pero ya no hay vuelta atrás.
Mi vida quedo atrás.
Hoy jugué mi última carta sin sangre en las venas desangrado vivo fue mi destino.
Hoy quede atrapado en este mundo vagando
En la oscuridad de las tinieblas.
Yo quería ver la claridad de la luz pero él me engañó y me arrastro lejos de este mundo
Para siempre.
Desangrado vivo fue mi sino.
La única luz que vi fue la del fuego donde incineraron mi cuerpo.
Veo la gente pasar pero ellos no me ven.
Quisiera pedir auxilio pero nadie me oiría.
Mi tiempo ya pasó.
Ahora estoy atrapado en esta eternidad del limbo,
Entre el mundo de lo muerto y de lo vivo.
Esteban er castellano
10 OLVIDO:
Olvido.
Olvidarte nunca podré.
Nunca te podre separar de mí.
Estas en mis sueños, en mis
Noches más frías y en las más
Calientes.
Como una manta que me abriga y me arropa
Cuando me descubro solo.
Como mi sombra.
Como mi reflejo.
Olvido ¿Por qué nunca te encuentro?
Será porque no te busco porque
Vendería todos los mañanas
Por un ayer junto a ti amor.
Ya sé que soy inmaduro,
Pero te quiero y lo sabes.
Si ahora no lo ves ya lo verás.
Pero mi tiempo ya pasó
Como guillotina
Que partió mi palpitar en dos
Para darte una mitad.
Olvido.
Olvidarte nunca podré.
Siempre te amare.
Esteban el castellano
16
PRIMAVERA:
A ti te escribo primavera,
Tú que llenas de vida el campo.
Pones los campos en flor y verde.
Tiñéndolos de color.
Los pájaros silvestres anidan en
Las ramas de tus arboles, dan de comer a sus pachoncillos
Y trinan como nunca antes del alba y después.
Los animalitos nocturnos también salen a cazar
, murciélagos, mochuelos y lechuzas más en esta época
Que hay más vida y alimento.
Los erizos salen de su letargo invernal a cazar caracoles e insectos,
Y frutas silvestres.
A ti primavera te canto que llenas de vida el campo tiñéndolo
De color y vida.
Esteban el castellano
17
POEMA AL ALBA:
A ti te escribo que con los gorjeos de los pájaros
Ven salir tus primeros rayos de sol que iluminan la tierra
Y los campos.
A ti te canto luz del alba.
Ruiseñores, jilgueros y demás pájaros silvestres gorgojan minutos
Antes de ver tus rayos.
Yo veo tus amaneceres azulados y tus puestas de sol rojizas nunca
Me he perdido una.
Quizás soy un loco bohemio que no duerme porque está enamorado
De tu naturaleza.
Esteban el castellano
Subrepticia
Ese mi único secreto,
Revelado entre celdas de leche
Y rosas de sanatorio.
Su encuentro en estadía de larva,
O alma anclada en forma de éter,
Forma concisa,
Fuego en lágrimas mi sangre,
A dulce mordisco
Te di de beber de mi índice.
Hoy, perfección intangible, onírica
Del mundo propio del sueño,
Belleza lejos de mundo conocido.
Fuente los cielos, candor de dragones,
Rizados en todos los colores,
Nube de evolución, granate profundo de ojos,
Partida de sed sanguínea,
Ser perfecto, cómo llamarte,
Que al volar, te dije
Vuelve cuando quieras,
No voy a intentar capturarte.
Förüq castellano
II
Espiral de reposo
Soliviando, viene bregando,
Un azar tangible epicúreo,
Adoctrinado al hervor de la verde cepa.
Raíces al templo del mañana,
Vistas a lo que nunca dio causa
Y siempre estuvo y está.
Inmiscuido como ascua besa
Su final de ceniza.
Empíreo, cromado sentimiento
De conciencia filosa.
Quizá algún día vuelvas,
Subrepticia hermosa,
Quizá más crecida
Tras alimentarte de los cielos,
Y su bruma del gris encorajinado
Y su zinc y su plomo.
Puedes escuchar los sones.
Se afila el clamor
Entre trompetas
De todos los ángeles.
Förüq castellano
III
Atisbo de nácar
Noche de colores enervados
De rienda alzada como vetusta estela
Coloreada por oscuridad sempiterna
Que todo atisbo envuelve.
Es el son sanguíneo del sigilo
Alzo, que dirijo sus resplandores
Consecutivos, es un latido de tierra,
Repicar de los fusiles,
Y sus hocicos al horizonte cantando
Un inmiscuir de la brea
Y su pólvora encendida.
El dormitar de faroles
Y su réplica de luz intransigente
Vuelve al pozo sin poso,
Es mi sola alegría descorchada,
Entre la caricia de mi guardia.
Mi cielo en repiqueteo de colores
Que difuminan la densa oscuridad
De la noche.
Förüq castellano
Canto triunfal:
Lloraba la tierra
Un aquilón de noviembre,
Enfurecido.
Llueve, lentamente llueve,
El cielo blandía feraz carcajada.
Era tiempo insuficiente.
Lloraba Ostara, derritiendo
Su guiño terreno,
Encantaba que encandilaba
Majestuosa tempestad alada.
Tibia desangelada, era ella
Era diosa, era Lluvia.
De febriles cauces sanguinosos,
La flor de Odín Hermoseaba,
Ya lucía sonrisa líquida.
Al resplandor nocturnal que asomaba.
Su oración entre espinos y carrascas,
Brillaba la furia de la deidad,
Como ráfagas de estrellas
Insobornables.
El castellano Förüq
Obtuso marjal:
Plañía la tierra
Su bermellón acequia
Como un eco ciego
Entre forrajes breves,
Y savias precoces.
Un camino encegado abría surco
Por vid y barrizal
Se abría el claro marjal.
Amarilleaban yerbas
Afilando el sentir del monte.
Brilla la sangre verde
Resplandor de cuchillo calizo,
Silbaban lágrimas de atochas,
Y acompañan los brezos de fuego,
Jaras entonan su estridencia recta.
Por verde augurio de falsa avena.
Venzo que avanzo el caduco forraje,
Suave bruma gris,
Ya dicta,
Muerta la estela luminosa,
Desplegaba opacidad su manto,
Para el sueño del resplandecer,
Y su mortecina sed.
El castellano Förüq
Filosa ataraxia:
Emblanquecía por cielo extenso
La llaga nuestro gris,
Destellaba la mortal premura,
Un paréntesis sin sol ni soslayo.
Diáfano sótano de luz,
Donde bailaba tu esencia eternal,
De trémulo discurso llameante,
Que abría surco de nueva llama.
Desnuda estaba la imperial concordia
Quedaba comenzar la revolución,
En aras de aria tierra,
Alzando las vestales hispanas,
Sones que llaman a la tierra,
En febril tamborilear magno.
Soldados, guerreros,
Guerreros, soldados,
Escuchad mi canto.
Förüq el castellano
Pletina alada escarlata:
Acompañada gloria armada,
Esta mi alma ameraba,
De mi ambición llena,
Tornando nuestra.
Desvencijo flagrante reguero
Que arma escuda,
Sola, sola la venidera amapola,
Por almenas
De cúspides, de higueras del demonio.
Oh señora, mi dulce miseria no basta,
Cuan procelosa espina se agita,
Nido y seda en torre virginal medrosa,
Asustadiza sien no huía
Discernible,
Era tiempo de alzar abrojos,
En tu almíbar de vientre.
Abriese cielo, en hondo tajo,
Parlando la unión
De dos gotas del mismo deseo,
Ven, que yo iré,
A derretir el hielo del éter,
Floreciente inmiscúyete,
Cielo y terreno en eterna alianza,
Construiré mi casa
Con un jocoso pino del averno
Sedoso, entre surcos de heno,
Y barrizal dorado,
Tejas de alabastro,
Y cimientos sanguinosos
De arcilla mi piel,
El cuchillo calizo,
Será ventana
De este sentir, travieso,
Arrullarte la canción de tractorcito,
En tus nidos de jara y jazmín,
Tus idólatras piernas
Que ni en terneza de soles pudientes
Conozco,
Crueza blande, sí la osada,
Suave mirada del ocaso,
Entre ojeras de luna,
Y nublos de noviembre,
Sin esculpir tu cuerpo
No me marcho,
Pero tampoco te creo
A semejanza del interés rodero
Que confluye,
Te hago mía y a diferencia,
Debido no soy adorable,
Ni sombra poseo ni hálito,
Ignominioso,
Por si dicen que vivo,
Sólo es porque te miro,
Y me miras Musa del Alba mía.
Esteban el Castellano
Olmo de espíritu, tercerillas y serventesios:
Hadas, Sátiros auras, ninfas solas
Aromos fragantes entre olmos recios
Como si hubiesen erguido corolas,
Flores, magarzas, ababilles necios.
Coronas de rey; alto ahondo
El canto, no destilado,
En remembranza escondo.
Antigua extasía blande,
Como besar a mi Musa
Sin tenerla vista, agrande.
Junto al zarzo no pregunto;
A espiga si sangre acaso
Fue bastante, duro asunto.
Dulce recuerdo plasmado, aquel, tieso
Palpitante su magia por semblanza,
Temblarme pudiera el recuerdo ileso.
Inimaginable nido en templanza.
De telégrafo tu impronta
Belleza la inmiscúyete,
El blasón lámina monta.
El placer de antaño lira
Que mi letra sin escribir
Era tuya, la eterna pira.
Por idearla, delirio entra,
De recuerdo, lo pregunto,
No, mejor la lira encuentra.
Y se me pasa que pacté con velo
Quererte siempre, y bailar las estelas
Resplandeciente, errante no te celo.
Mercurio fecundes, quasi nave. Hielas.
El castellano y Leannán-Sídhe
Nocturnidad en colmillo:
Llameantes pesquisas
De acariciar tu éter sediento
Noctámbulo,
Preciosa de magia insobornable,
Quién pudiera besar
Tú honda alma incuestionable,
Cuando tú escribes Musa,
Los destellos dejan de ser secuaces,
Las mariposas no se aplastan
Embeben tus manos
Por mí encauzadas.
Entiendo la secuencia
Tu rocío suave permisivo,
Sólo dicta que perpetúa fragancia
De nuestra secreta flor.
No llegaré porque sí lo haré
A colmar el Atrio castellano,
Con mi dicha floreciente
Mi sentido a escribirte
Mi sentido a difundirme
En la beldad tú entraña
En ese alarido despierto que clama,
Algunos cambian
Mi amor por ti es más duro que el bronce,
Horda madre de las brujas
Yo por Oscuridad,
Compararte pudiera
Obstara diosa triple que entonas los campos
Prendiendo en flor los campos,
Yo por la flor sea la flor
No osaría compararte
Pero si mi musa es raíz salvaje
Yo abro cielo terreno
Y si no soy raíz de los dioses sus hermanos versos,
Yo no soy hombre soy hartazgo de bestia
E-nominada porque la amo
Sin febril demarcación cuerda,
Si me arrebatan su espina en mi pechera,
No habrá piedad existente
Porque la verdad de las cosas
A veces es su contrario en puridad,
Como es arriba canto
Porque igual ídem es abajo,
Vivir es más complejo
Y fácil morir,
Con lo que morir de gusto
Es vivir de gusto contigo,
Necio sería que no niego,
Si pierdo sin vencer,
Ganarte el cariño es lema,
Reverbera mi palabra de alabastro,
En fuente de ópalo tu regia sangre,
He vencido ya creo escribiendo
Mi una de sangre de la madrugada,
Ay de los que pueden morir dije,
Bienvenida a su nuevo mundo,
Porque naciste golondrina para la eternidad
Única, remembrada pero en condena:
-Jamás sola porque vivo,
FÖRÜQ EL CASTELLANO A 17-11-2019
21
CONTIGO SANGRE REFULGE:
Te ensalzo mi divina amapola,
Por cuántos pétalos
Te hicieron Esfinge de sangre,
Enardece a mi espiga
Que dorada te acompaña,
Mi céfiro que en tu seno
Acoges,
Mi sol blandía
Entre pajarillos
Sones sobre trinos
De cabeza púrpura,
Belleza te tuviera secuestrada,
Yo, con mi áureo espino en mano,
Puras tus alas,
Nosotros,
Carne y cuerpo de tinta en pluma,
Coloso atemporal,
De rayos en perpleja simiente,
Osadía mi amapola,
Traer derecha en frente,
La llameante lira de Occidente,
Al instante, nítida y luciente
Me traes dique inspiraciones,
Por aureola y tu flor secuaz.
Mi vida mi sangre
Bermellón morada,
Te desnudo mi brisa desconocida,
Por mi jazmín
Que ámbares completa,
Tu belleza cuidaba,
Entre los bastiones
Que mi cordura cercaba,
Enramada hasta cintura,
En mi jardín soberano y delicado,
Beso tu brillo de tierra,
Mi amapola.
El castellano, Förüq
PREÁMBULO DERRAMADO:
Devanados de un destino
Fundado en el vals
Mi propio engranaje,
Místico, áspero,
En flor de supremacía
Donde ninfas musas
Bailan,
Destino insumiso,
Parco,
Vestido mi precoz precipitación,
Como gota de rocío
Resbala del precipicio su flor,
A lomos de un caracol
Me pregunto
Si acaso vivir
Tiene sujeción a la vida,
Y la cuerda es de bronce.
Seguiré acontecido
Mi suerte ausente,
Amándote al silencio
Que cerraba los ojos,
Y seguía preguntando,
Si mi ilusión
Colmaba la expectativa,
Ojos del metal noble,
Fuego al hierro
Que mi camino ablanda,
Fecundador de mitos y desgracias
Mi reverberar de nombre,
Solo, traspuesto,
Al océano impredecible,
Como capataz musa,
De tu huerto de estrellas,
Por corralillo
Y redil de estelas
Y destellos indiscernibles,
Voy rumbo al ímpetu
De solana Luna
Y su guiño me cuelga,
Sí acabaré de irme
Dejando alto mi estandarte.
Förüq castellano
CATALEPSIA Oda a Leannán Sídhe Musa:
Catatonia madre de impresión superior,
Que encumbras musa y te encumbra de este nicho de bronce,
Lápida con flor de silencio,
Oh Catatonía,
Flor de muerto de esquela en sangre viva,
Yerto circulaba de aflicción,
En oscuro tapial primero,
Al insubordino universal,
Señero por señal,
De mis signos yertos vitales,
Te ensalzo sangre,
Que amurallo tus sones vestigios os,
Piramidales,
Titánico siembro,
El numen victorioso
Mi gesta,
Vestal de cuervo Förüq,
Su madre Oscuridad, sacerdotisa.
Del tercer orden las cosas habidas,
Dilucidadas extensas.
Queda solear, este solar,
De letra perdida
Hasta atronar mi vuelta a la novena espada,
Que el guerrero Miedo,
Me conocerá.
Para cantar mi victoria
De todo parco lugar.
Förüq Castellano
Silencio regenerado:
Saeta, saeta bella,
Saeta parca,
Saeta ilusa, saeta inocente,
Es el final del show
Saeta madre encumbradora
De toda mentira enclaustrada,
Yo te amo saeta,
Saeta alada,
Saeta heridora,
Saeta encausada,
Saeta parca,
Saeta celestial,
Saeta infernal,
Saeta canta,
Que mis ojos sean tus ojos,
Saeta que mis manos sean tus manos,
Esta cruel noche un diciembre,
Que yo soñaba estaba escribiendo,
Un canto a tu cabello de oscuridad,
Saeta mística,
Saeta horrida y hermosa,
Tu beldad piramidal,
Se estrechen caminos,
El cielo se abra para escucharte
Mi saeta esquiva,
Mi saeta complaciente,
Como es arriba es abajo canto,
Seguir peones vuestro circo,
Que este trovador
De campo llano,
Sabe quién es y de ande llegó,
Ahora te odian saeta,
Ahora te aman saeta alada,
Me diriges por el Parnaso sin final,
O me quitas hasta la vestidura
Más pesada,
Volemos abismos amada,
Volemos cimas inefables cariño,
Hasta donde se oculta el Sol por el este,
Sociedad de creer o no creer
Yo elegí creerte saeta
Y hoy sigo en la cepa
Esta vida que me cabalga la estampa,
Cerros intransigentes
Molinillos al fragor de vientos voraces,
Esparto entre las jaras y solas carrascas
Brezos soleados por flores ausentes
Un invierno que se desdibuja solo,
Saeta amada elévame en tus alas
Yo vine por el son recto,
Blandiéndome de un hinojo solar,
Esta vida que sin ti
Saeta la creería una dulce mentira,
Por la que morir
Y no morir por una crueldad
Impuesta por el ajeno
Que nunca
Nunca serás tú
Mi amada saeta,
Esta existencia
Que se dobla y niega a sí misma
Para decir que yo soy el rey
Que yo soy el cuchillo,
Que yo soy el proceder
Inmiscuyente,
Otra vez Yo sé quién soy mundo
Este es mi manifiesto y
El de mi Saeta bella mi espada,
Mi vida,
Mi indecencia,
Mi crueldad de espira,
Mi corralillo espectros yertos,
Era y es
El hipocritus dejará su vestido,
El trigo limpio
Será trigo limpio
Ahora y siempre,
Espiga y cante
Hasta rodeado
Mi padre trigo.
Vengo de las espigas de abajo,
Asolando verdades,
Mi panida amada,
Por la saeta olvidada,
Se despertará
Por los que venimos
Del trigo limpio.
Volando sobre parajes
Entre tierras de añil barbecho
Y su azada de viento
Mi solaz saeta entre cardos
De todo fértil sendero
Que lleva al infierno.
El castellano Förüq
DICHA AZUR:
Adentro esta bruma azul de mi contento,
Avanzo estas flores del invierno,
Por árboles desnudos y sus cantos,
Yaciente mi sed de nuevo,
Florido cierzo,
Primoroso veo y beso mi sañudo suelo,
Lumbre sin sol
En que la luna no aparece,
Presurosa de melancólica siembra,
Una estrella emblanquece
Por cielo extenso,
Y en lluvia derrama que desgrana
La vejez e la grama vieja del camino,
Custodiado por la señora malva;
Acrecienta mi linde vago por majuelos perennes
Y solas zarzas,
Lágrimas de mi tristura,
Regocijo de varios,
Ya que antiguo son,
Solo mi Leana ablandaba mi lira.
Amores ponderables
Mi ser no rehúya,
Desquicias mayores, otros
Oigan en retirada,
A murmurio grave me alzo,
En esta tela de araña
Y la luz de alborada
Me tiende en extasía.
Förüq el castellano
Vientecillo elucubrado:
Rompe el melancólico fulgor
El sol en corazón
Que la niebla un diciembre
Difumina en son,
Yo bogaba difuso
Como primavera lozana luciente,
Suspiro, oh tempestuoso recuerdo
Mis flores marchaban,
Suspiro de pasión
Vino arrebatarme mi desventura,
Desde navío en reposo,
Cuanto no veas
Acuérdate del agua hermosa,
Tanto en alma
Como en popa de nave,
El cielo carmesí me embravece,
Surcando bonanza,
Acuérdate alma de mí,
Viva fortuna,
Que de boca invoca,
Musa transparente
Su dulce porte,
Semblante de arma en dueño,
Oh sueño,
Contigo tantas veces,
Despacio, o desvarío,
Cómo alzarte y cantarte lleno,
Sin flores ni pajaritos impíos
Sin caléndulas azules,
Locura de dulce armonía,
Lumbre en astro de numen mía,
Agrava como amarte
Derritiéndonos en la nieve.
Cielo, suelo y anhelo
De hojas arrebatadas,
Crujidos de mis tumbas yertas, abiertas,
Dones de sufrimiento desploma,
Sombría yacija de cuna,
Cruel aroma
Estiran las rosas de muerto,
Y no lo claman vanas
De aliento divino,
Quebranto de sosiego anclado
A la fría tierra
De este diciembre
Que viento ardoroso
Aclama en soberana lucha.
Förüq castellano
Clavo en sombrero:
I
Tremola
Vestida de invierno oscuro,
De un renacer exhausto
Honda amapola matutina
Sus ojos en bella profecía,
Brillantísima, pura
Como rayo náufrago
De bravo firmamento,
Eco de destrucción o, ¿La luz?
II
A lo alto del cerro
Blandía un Sol hermoso,
A las lucidas sempiternas
Paseas mi valle umbrío
De deshojado albor
Solo con mi pecho
Enardecido túmulo en beso sembrado.
Primorosa tú
En sol bella a espalda.
III
A lluvia que derramas
Este mercurial aliento,
Y su eclipse
Vívido cada trece años
Reino de sombras
Minúsculo por cielo extenso,
Noche que me acrecientas
El campo melancólico
Que embelleces deliciosa.
IV
Ponderaba que te soñaba,
Mi tristura por llanura,
Por extasiados vértices filosos,
Me exacerbaba
Solitud prolífica
En verte mi verde
Turquesa armonía,
A tu murmurio suave
Encono, rijo y alzo tesitura.
V
Dicha intangible me coses,
Dicha mayor sin retirada
No habrá, no habrá
Porque nací, viví,
Supe para lo que nací,
Amando soñé osar amarte
Y hoy desde mi muerte
Sueño que sigo soñando
Tu interior en amor resplandecerte.
VI
Camino recto ante la luz
Cuan gran sortilegio ofrecerte,
Entre la belleza
De grandes páramos solitarios
De vetustos soliviares,
De parajes de vid y encina,
De caracoleados pinos jocosos,
Brezos entre esparto
De precoces cerros.
VII
Y baldíos bordeados y adentrados
Por caléndulas arvenses.
Más tarde por ababilles
Flamígeros,
Oh sangre de tierra,
Oh sangre de sol,
He venido a embeberte
Y ofrecerte alma,
Vida.
VIII
Negra es mi alma,
Negro es mi amor oscuro,
Negra es mi creencia,
Negra es mi vida
Negro es mi dolor,
Negra es mi esencia,
Negro mi canto en sangre y brea.
Negra blande mi desquicia.
Negra Oscuridad, nec vincere tenebras et amat.
IX
Enredarse mis cantos,
Por baja tierra pudieran,
Sólo tú musa
A osar mi repecho atreves,
En maravilla enraizada
Atenta, de fecunda esencia
Soberana
Huy criatura
Que me bajas la aurora beligerante.
El castellano FÖRÜQ
INMENSO PLACER SECUAZ, INEFABLE:
Clama ante la aurora,
Presurosa aura intranquila,
Ardua la dicha exclama,
Que si por querer fuera
Igualara el agua de los montes
Que subiendo, baja,
Afilo este mi solo intelecto
Por muralla que no cierro
Desvela el clamor de la intranquila rosa,
Quién a igualar mi dicha baja,
Furor ostentado de la piedra Frigia,
Va mi reguero desnudo
Por musario cerro,
Su cernícalo avizor vigía,
Milano señor en soberano cardo,
Luces del alba
Plañen sus rayos
De nueva alborada,
Ven, agita la guardia,
Conmensurable acequia
Mi sangre estrena,
Voy por piedad avistada,
Luna habla,
Destello de noche febril
Que otro año más no enfriaba.
Imperios de ojos cerrados
En nocturnidad encegada,
Franca tapia de espejo
Y su beligerante reflejo.
Amima mi viborilla,
Secuaz tu alma sólo destrenzo,
Tiempo, hálito voraz
Que enciende calor presto
De caballero,
A su dama hoguera,
Corriendo por fuera el granate,
Sanguinoso,
Por escalas a este placer inmenso,
Esfera tu secuela
En faz instintivo,
Desaprendido,
Rumbo al carmesí insobornable,
Destino dicte quedarme
En tu nube intangible,
En vaporoso éter, tu magia,
Hoy vine a besarte,
Y a desprenderme,
De tu cauce en tu cuello
Aliviarte,
Bronce en ala y su verdor
De óxido que rige,
Que envanece,
Que resplandece.
Anhelándote.
Förüq Castellano
CONOCER:
Conocer lo valedero
La esencia cristalina,
Hinco tu magia
Que me ciernes hondísima,
Profunda mirada secuencial,
Difiero, reitero,
Lo rápido comenzado
Entre dos personas únicas
No es agua sobre oro de aceite,
Ni efímero, volátil, veleidoso,
De hoja de otoño
Mecida en voraz viento servil,
Grazno que crascita
Esta sola dicha acompañada,
Vals en réquiem, vanguardia propia,
O avanzada
Afilo mi celada de intelecto
En un, dos, retemblo,
Fuego al través en encuentro;
Que dos personas
Inherentes
Se prestan sus ojos recíprocamente,
Disculpas damisela,
En el negror del fuego,
Siento decirla que su mirada no conozco,
Y sin sangre turbia
Afirmo que voy al tercer aposento
Sin secuela, su vitral, en tercer orden,
No desquito ni despego,
Lo que rápido comienza
Ni en estruendoso crepitar de astro
Se condensa en agua pretil,
Sublima y forja
El nuevo bronce encausado,
Del abismo en destino,
Cantando, buena obra sin mil razones
Mi égida sin cumbre de ego errático,
Quién a acompañarme baja
Subiendo la estela sembrada
Por ella hadita damisela,
Pregunto,
Acaso se pide fuego si lees
Y su alma prende vigor a lo descubierto,
Fuego azul denomino, su lente
Que no habrá dioses del averno
Que me lo arrebaten,
De todas como amo mi destino
Más amo aparezca una turquesa
En mi camino.
El Castellano Förüq
ESTEBAN EL CASTELLANO
JAMÁS MIL MÁQUINAS PODRÁN HACER UNA FLOR:
Quién fuera sombra para acompañarte
el día y cada día durmiendo de noche contigo, quién fuera viento para acariciarte hasta el recuerdo,
y mi alegría hoy descansa en tu pelo, palabras al tiempo que nunca fue mío pero hoy quiero hacerme poema en tu boca, ser mensaje en una botella
que renació a flote en el lago de mi esperanza tu nombre con el mío escrito, iridiscente beso en el ocaso
que tarareó flores de tu piel inverna, sangre de mi sangre que hierve.
Te vi detrás de la estrella más brillante del azul nocturno eterno.
En el suspiro de amor que corre y descansa entre la inmensidad de un parpadeo. Eres fuego en el agua,
eres luz en la noche,
calor en mi alma de hielo,
amor en mi mundo de ilusiones en viento, ilusiones traídas al presente
Como la niebla que trajo la brisa
de tus iridiscentes palabras llevándome al abrir mis ojos al mundo
de sueños sin vivir, de sentimientos
solo para ti. Experiencias para compartir, Si el cielo se cierra,
Miraré tus ojos para tener mi cielo,
mi corazón te dirá
que seguiré a tu vera.
Si mis ojos se cierran
quiero tenerte cerca
y, coger tu mano,
sentir que no eres
un sueño que perdí.
Si despierto te vivo,
soñando te sigo amando.
Cogiendo cada estrella
en una letra para ti, tú la más bella.
Y el firmamento se cierra
sin tu mirada tierna.
Mi deseo y mi motivo para acariciarte. Pasarán lunas pasarán soles,
y el sueño volverá,
con cada latido tuyo.
No te dejo una flor, te dejo las semillas, los frutos de este amor.
Porque en mi jardín sembraste,
tu belleza y bondad.
Porque me llenas de verdad.
Puedo describirte como mi vida giró a mejor, con tu sonrisa clavada en mi mirar, pupila tuya que mira mi caminar
como un mundo sin sentir no lo quiero, cierro mis ojos y dentro te veo
de tus pestañas me suenan las campanas para tu parpadeo susurrarte el beso segundo que me corre transverso
de este azul que nos bebe las caricias jamás mil máquinas podrán hacer una flor y en el latido quedó cada siembra de tu amor hoy te canto sin dolor
que te quiero ver en todo lo bello
que cruza mi firmamento
coger tu mano caminar infiernos surcar cada bosque a perdernos
que después del invierno quiero verte venir a florecer mi alma y aliento
sin sentido no estar a tu vera
y volver a sentir contigo,
estar en eterna primavera.
Matar mi pena con una flecha de tu lengua hoy cabalgando el viento de tu voz quiero despertar en ti nuestra pasión, lunas ciegas y violetas colgantes de cielos fluorescentes
quiero clavar al cielo un latido
quiero despojarme de sombras y gritos
que muerden mi pasado
quiero caminar tu piel como babosa
a encontrar tu mata hermosa,
quiebro el tiempo que nos sintió
rosas azules arden en horizontes perdidos flores de sangre gotean esencia de tu belleza mirada tierna y angelada
sonrisa que me tiembla el deseo ardiendo
de cocinar a lumbre de mi rama
con tu estufita ardiendo,
muero por un beso,
muero por perderme en tu pelo como murciélago, condena de tu pestañeo
que me dejó ver que yo vivía
en tus fogones de ojos marrones,
mi luna dame tu luz siempre
nunca se apagará tu imagen en mi mente,
eso siento cada tiempo que bebo tu cuerpo llenar mis flores de sangre
y reventar al viento el amor que llevo dentro.
II
Tallo prendido del calor de tu amor, destello violáceo del astro bebido,
hilo que mece la zarzamora de mi destino, nube que nuestro invierno desvanece
en el latido del violín sin tiempo,
en el baúl de tu recuerdo
con tu pétalo despierto
con el beso a aquel cielo descuelgo camino tu río de sabores
las dunas de tus piernas se pierden en arena gime el segundo y el tiempo cae sordo noche que los minutos se hacen testigo de tus cielos bellos,
de tus ojos de luna limando mi escarcha, a las tuyas que me acechan la templanza, el matojo reposa su cruel silencio
el hierro tiempla la espada,
la fuerza se vuelve sombra eterna, alma de voz eternamente enamorada,
Sus estrellas, cantan,
la dama se vuelve blanca dama de noche
sus semillas me cuelgan los nervios
en las arterias enardecidas que me surcas,
vid de mi vida a veinticuatro flores de sangre,
mi tierra olvidada niebla
camina nuestros transeúntes
riega tu solana de vida
y tu lengua me tienta.
Suave recorro tus labios de rosa,
quemo la azúcar enraízo tu piel de arena,
te lucen las estrellas y gatos nos acampan el alma, tiembla mi rama te descubre lo perplejo
y de tu campo como el silencio
me vuelvo grillo de tu pelo,
ojos en tus ojos de olivo,
mi vida que me acaricias la viveza acechando mi hora quieta
te hago un vestido a caricias,
nuestro bosque reverbera lo oculto y sentido
así el idioma cae en las pestañas del silbido, blanca dama mía ámame ahora
que el tiempo no es mío
que mi suspiro solo es suspiro si te miro, sángrame los espejos con lluvia carmín del recuerdo, perdamos los bosquejos
entre yedras que nos escalan los cuerpos vueltos ovillos de fuego,
raspa el cielo fluorescente mi murciélago
que encuentra la polilla de tu cuello,
a cada luna que te espero entera,
a cada sombra que te tiembla,
cada parpadeo que descubro nuestro encuentro, en ese árbol está mi aliento de agua
en esa piedra reposa mi fuego
en esa montaña vive mi sentimiento,
por las hojas al viento
habla nuestro secreto,
en cada latido de aliento que te pienso,
en cada distancia vuelta océano de tus mares, vuelta pena de mora,
tejen mis notas de tormenta
mi humor llevado en las sangres del río, amarte como si la noche fueras tú,
mi bella reina Hada.
Miguel Esteban Martínez García
GERMINARTE:
Hierros me forman propia reja,
que oxidan mi vieja calma,
Orna de un atrio
Que beben las estrellas
Pudorosas y ponientes,
Que trepan escalas
Que habla la noche que no calla,
Entre coraje blando,
Y palpitar de sombras perennes
De estirado violáceo ramaje,
Se dibuja un aliento
De purpúreo silencio espectral,
Por campanas suaves de terso bronce,
Clamor al tañer la magia duradera
Vestida de yedra y solo espíritu,
Era un atrio que se entonaba
Como saetas vanas bailaban
Festejando en el patio los condenados,
Como fiero designio
Abre en estribillo,
Como fondo sin poso
Del mal que se atribuye
Sin solución,
Como caos en vena que se desata,
En vertiginosa densa bruma
Que desplaza los cerros,
Y preceden negras formas
Que los descienden,
Oh luminosa parca
Quién te viera vestida
Como viste un almendro,
Su vernal lozanía saludando
A Ostara,
Manto de añil florido,
Nublo de ritmo pausado,
Así como espina da la rosa
El combate al iris
Gira la mariposa,
Gloria que achica
Simientes fecundas
Que enraízan
Y a la tierra conceden
Magna sentencia recíproca.
Förüq el castellano
EXCELSITUD ARREDRA:
Vagaroso
A mi quimera despierto,
Soy yo, la impalpable idea,
Yerto oasis
De cal y sosiego,
Como se abre la noche
Y en su mitad me hallo,
De espectral rivera,
Y nimbo pasajero
Infrecuente,
En su mitad despierto,
Imagen servil en proyector
Al exterior, de cuánto no ha conocido
Y es vil reflejo,
Como carcoma crujiendo en mecedora,
Un evaporar constante
En sidérea lumbre
Las ascuas de mi obsesión
Por ver a mi quimera,
Niebla que no huye,
Y de belleza indemne
Clara tempestad alada
Su manto de nocturnal
Oscuridad en prestancia
Que mis párpados tienden,
Vela de reloj con su martilleo
En yunque despierto
Son mis altas nubes
Chubascos de vida aplomada,
En vals de mi ánimo mercurial por osar
Su nana espectral.
Ella me regaló su fábula de grillo en jaula,
Semper, hornillo de centellas,
Mi sortilegio canta,
Que su imagen ya acecha,
Silueta y sombra de alma,
Yo defiendo y soy dueño
De mi creación,
Limbo de sus pupilas
Es su noche que abre
Y suena en la opacidad
De materia sus ojos;
Místico su sendero
En adorarla descienda,
Cielo
En diosa larva,
Inspiración sempiterna,
Al redil de ascuas apelo,
Este hondo viaje
El sonido de la noche
Que se desviste
En su candelabro
Que tiene por mirada,
Si acaso la conociera...
La tierra portaría secuela
De belleza inviolada
Y temple en la carrasquilla mi pecho,
Magia sin forma,
Ni cumbres desangeladas
Ya no suenan
Por cuerno ni bramido roto,
Un helado trecho
Surco a traerla mi rosa de hielo,
Que tornó hecho.
Förüq el castellano
LA MANSIÓN DEL RAYO:
Temerosa compuerta
Abre de los cielos
Una senda violácea
Como dosel afilado
De azulado, bajo firmamento,
Despierta el capataz del brillo primero,
Bajo sábanas de ardorosa niebla densa,
De cumbre los cerros fugitiva,
A su lado ella;
Oscura perfectísima fantasía,
Feraz sierpe remansa de ternura,
Quiebre mi canto
Fausto destino punible,
De ingenuo rostro
Inamovible,
La bondad por esquela
Dulce bayoneta,
Entre sus laureles sedosos
Vine a recostarme
De esta ambición que gira y mece.
De excelsa siembra resplandeciente,
La sien en hondo surco
De mortal numen
Poema del labrar
Ardua indecencia,
La posada de nubes trashumantes,
Y vasos de estelas
Vorágines,
Dulcísimo corazón sin morada.
Llama un olvido
De gloria brotada,
Laúdes por alba y flor hermosa,
Repiqueteo de la centella
Que no deja huella
Ni fanal fuego en tierra,
Truenos ya silban
El otoñal vientre del cielo,
Entre gris solapado de negror mortecino,
Que apela nueva vida.
Venga a la posada del harto resplandor
Como mar en monte
Su rompiente puedes escuchar,
Y azulado en aire
Sentir tu corazón por cielo.
El Castellano Förüq
REGATO DE MI SED DE REGUERO:
Al profundo encono
Rijo que me alzo
En plenilunio ostentoso
El voraz gemido grave
Luctuoso crascitar
De mi voz grave
Un encontrar abierto el Parnaso,
Y en su agua de lago
El negro cisne
Del rubio Apolo,
Pedir peras a un secuaz olmo
Fue tirar moneda al pozo del pozo
Los deseos,
Me devolvió casamiento
Con mi Quimera Leona,
Un lustre mío se estiraba
Como un cerco de carbono,
En absoluto diamantino,
Como lágrima apodada
Sin poder precipitar
De aquella estrella diamante
Que llamé amor.
Como una ablación cardíaca,
Del corazón que marchó
Al otro Paraninfo yerto.
Un descender primero
Del hálito mercurial
Un sondear con su alma
Para volver a bucear
El fondo su mirada cristalina,
Ella no abacora, no hostiga
Mi incansable ánimo
De grillo en jaula.
Sembré de flores mi patio
Soñando atraer
Su esencial mariposa
De alma,
Salterio es mi hondo gamusino,
De notas y rendija
De oro y platino,
Un empeño de mi dulce miseria,
Oh cristal sonoro,
Oh cuanto yo, deseo mi turquesa
De nido y oleaje
De azada y piel acanelada,
Pidiera agua al monte,
Sueño y aroma de valle,
Mi tersura que suena firme
Como silencio
En la sed de la tierra,
Musa mía mi ofrenda
Para que seas melodía
Del agua mi vida.
Förüq el castellano
CREPITAR MINERAL:
Es esta hora,
Ceñida la espera
Que aguarda,
Como dulce oruguilla
La hoja recorre su boca,
Vengo del son sin tiempo
Rogando al crujir
De mi mecedora
Me deje escuchar el silencio,
Así sea húmedo o seco,
Si el sonido audible
Gime lo que el silencio calla,
O es como sed de tierra
Que todo devora
Llegada esta hora,
Perpetuo blinco
La espalda que mece mi alma
Y en su floresta desnuda
Ahincó alas que posan sus estambres,
Entre ruego y brillantez,
Hablé con su gineceo
Me contó que la flor
Solo deseaba ser la flor,
No osar posesión,
Y en sus pétalos yo posé un beso,
Me devolvió ella la flor,
Un eco sordo de lo que yo esperaba
Descubrir cómo cantaba
El resplandor inviolable
Lo que la belleza era,
Un piropo melodioso
Del silencio volviendo sonido,
Como la negrez escarlata
Presurosa bailaba siendo y tornando
Musa del alba,
Sortilegio en vals de Dante,
Y oscuro armónico,
Entonado sólo al inicio de los tiempos,
Allá donde encendieron
Todos los hoyos del sol
Sus eternales ascuas,
Que lloran prendiendo
Espacios y distancias.
El Castellano Förüq
AMALGAMA JACTA:
He ido este día
A silbar
La sonrisa alba
De la aurora,
Este otoño
Que arrastra aquilones
Y prende cielos en cinta
Abriendo cierzos
Incansables.
Acordeón de viento voraz
Entre ramajes
Después desnudos.
Irisados rayos
De un sol en aspas
De luz sembrado.
He venido a despertar
Esta primavera invisible
De mi suerte,
Por las hojas
De mi olmo arrebatado
Y la horrida sombra
Que el nogal ya no cobija.
Lloró mi suspiro
A la corola mi flor de Odín,
Su oro luciente en pétalos,
Acompasó y no quedó
Vano mi clamor,
Mi férreo ciprés me erguía
De esta tierra muerta
Su verde militar
Plagado de sueños,
No había jancitos silvestres
Sin rebrotar sus cebollitas
En hojas.
Era límpida estación
Del sueño imperturbable.
Era un orar
De nueva vida
Entre hojas fallecidas
Y nuevos brotes nacientes,
Un correr del reguero del cielo,
Forjando nuevo hogar fuerte
A toda raíz,
Moviendo cerros,
Desplazando el ocre,
Atisbado suelo
Que ya de sed no perece,
Y ninfas velan
Nueva sinfonía de agua,
Entre sus venas ya terruños,
Y profundos silos azules
De profundos sueños verdecidos.
A la mortecina tormenta
Alíviate bonita
Que por cerros, montes y valles
Descienda ya, tu solo llanto
Acompañado de vida
Entre raíces
Que forrajes plantaron
Los dioses.
El Castellano Förüq
RUEGO DEL METAL NOBLE:
Me alza tu acento,
Esta sombría noche
Que todo en halo envuelve,
Tu esplendente voz
En rúbrica quiero amimar,
Entre valle umbrío
Y mi jardín noctámbulo,
Mis ojos que tristeza
Ya no amancillan,
Solo en pulcra honrosa
Alegría
Destellan,
Por este campo
De honda llanura
Sin tristura
Extasiados sigan bravos
Por ti mis sentidos,
Esta puridad en estela
Recelosa,
En luz clara,
Ruginosa
Tu alma noble pareciera
Vino de las Pléyades,
Reclino mi espíritu
Para ofrecerte la gloria
De las flores como pureza
Rindiera entre divino laurel
Y alisos que abarcan ya
Los caminos,
Contigo voy al junquillo
Que mi delirio ya sólo imagino,
Te amo como el primer vagido
De un niño a la primera luz
Heridora y afilada.
Tu sonar siento
En nido mi cuclillo,
En la bajera la encina
Prendido el fecundo lirio,
Te siento como noche hermosa
Que la ilumina una tormenta,
Emperras sólo tú
Mi musa en armas,
La dicha que mi razón
No quebranta,
Muerto el sentido misterioso,
Loable en tomo azabache
Beso el mirto e hinojo
De esta suerte,
Si adorarte fuera bastante
Cercenaría este universo
En tangente
Desliz para encontrarte
Y en trísquela
La inmortalidad encumbrarte
Por las veces finitas
Que en espiral renacen
Para volver a eclipsarme
De ternura incesante me irradias
Cantora en faz sin duelo,
Vienes sólo tú
Vestida de amapola,
En un capullo tu aura bebo,
Embriagado, feliz,
Trino, blandiendo
Brillador deseo valedero.
Förüq el castellano
SENTIMIENTO LABRADO:
Viento, viento bonito
Lleva al cielo cada escrito
Arropa este amor en mi cuerpo
En mi corazón te llevo
Hadita de mi sentimiento
Noche hoy en tu sosiego me encuentro entre nubes violetas
Y el cristal luminoso
De esta luna de invierno
Bañan mi cuerpo tus latidos
Sordos de oscuridad
Y a este cielo sonámbulo
Lanzo mis ilusiones al viento
Siento tu caricia de alma
Y te bebes mi calma
Despierta esta rosa sangrienta y su aroma de romance antiguo atraviesa el pecho tu amapola eterna primavera
Cuando mis ojos te ven entera cada sentido despierto
Como fiera al acecho de tu latido hoy en tu bosque me pierdo
Tu imagen surca mis sueños
Como cada noche que ciento tu beso
Y como me cuidas,
Como soy yo tu alegría
Mi vida vistes de amanecida dicha,
Hoy la hierba escala mi montaña
La lluvia germina todas mis semillas
De pasión y fuego,
Donde entero me entrego
Al placer que muerde
Y envuelve en margaritas,
Como sencilla tu sonrisa
Y tierna tu caricia,
Ya no hay súplicas
Solo felicidad desbordando mis cauces,
Te sostengo fuerte en mis brazos
Para nunca soltarte
Para eterno tenerte
Si por soñar soñé acabar con la soledad fría y escarcha de esta melancolía
Llegaste tú a mi vida
Como cada noche siento tu melodía
Y me acompañas cada día,
Salió el sol después de la tormenta
Y ame tu esencia
Regando mi interior tu voz de alma amada
Tú bella y dorada calma,
Rompí las cadenas que me anclaban al pasado para luchar por mis sueños y alcanzarlos, entendí el idioma del silencio
Y hoy contigo
Lento construyo mis escaleras al cielo,
Este firmamento clama de azul sediento, ermitaño en su montaña del sentimiento
El amor jamás salió de su cuerpo,
De él decían que quería comprender al amor, tras una flor la conoció y la preguntó
Qué eres, amor,
No solo nací de esta flor
Tu inocencia me enamoró,
Curaré tus heridas de dolor viviré de tu amor.
Vuelvo a este dulce tormento buscando llenar de amor el cielo, labrando el campo de tu alma
Y bella mi amada
Te bajaré las estrellas para que puedas acariciarlas, estas flores cantan la canción
Que te enamora el corazón
Vuelvo a luchar como ayer
Con tu amor jamás desfalleceré
Eterno en tus alas viviré.
El castellano y Leannan-Sidhe
AZAR RELEGADO:
Navego los límites de tu silencio
Tu luna, reina mi cielo
En este horizonte de ilusiones y sueños
Tus besos florecen mis recuerdos
Las mariposas de tu piel tersa de seda acaricio eterno el momento que escapa entre tus labios cuando brota el te quiero
Y en mis ojos te encuentro,
Donde me enseñaste a vivir el momento
Porque nada es para siempre
Escribo el sentimiento
Ese que me hace amarte despierto
Este viaje sin retorno
Me hace buscarte cada noche
Para que tu amor surque mi sangre
Y mis sueños de tu mano puedan acariciar
Lento muerdo el placer preso
Y la lluvia envuelve nuestros cuerpos
Recorro tus parajes, me pierdo en tu bosque este fuego late en esplendor
Encuentro tu dorado amor
Oigo los aullidos del corazón
Atrapo mis flores de pasión
Quiero y te quiero en cada amanecer
Donde agradezco cada aliento
Cada suspiro que asesina al tiempo
Y da vida a mi sentimiento
Mi eternidad alcanzo acariciando tu cielo, entero me entrego como el calor de un lucero, sintiendo tu amor latiendo,
Avanzando tu cuerpo como quimera de pasión y fuego,
Condenando al tiempo
A morir en nuestro pestañeo con un beso, encontrando el lenguaje del alma en cada verso, cabalgando juntos cada firmamento,
Flor de sangre naciendo en mi pecho
Clamando este amor que te profeso,
Cálido, el momento, de desnudar mi alma
Mi bella, amada, una flor en tu mirada
Vuela libre, doncella, tu esencia mariposa del amor,
En mi interior quedaste
De mi ser te adueñaste
Puedo sentir como tú sientes
En cada pensamiento vives,
A tu lado siento desvanecerse el dolor
Este ardor de pasión jamás me abandonó,
Hoy agradezco que me arropases en tus alas
Para nunca soltarme
Para abrigarme cada noche fría
Por ser mi eterna compañía
Y locura del ansía mía,
Tu amor mi sinfonía
Como tu beso de cada día
Fiel me entrego a la caricia,
Mi amor sin descanso
Incesante fluye el verso por tu abrazo,
A tus pies me encuentro
Esta mi sangre te entrego
Este fuego late en cada beso,
Germinaste dentro todas estas semillas de amor eterno,
Hoy hadita te canto a la orejita
Encuentro tierna tu sonrisa
En cada flor encuentro la belleza amanecida
En tus labios descrita, en tu piel mi caricia
En tu corazón siente mi brisa
Como me hago lluvia y río
En cada silencio que rompemos juntos
Como juntos nos verán hasta el fin del tiempo.
El castellano y Leannan-Sidhe
SENDERO MI SUERTE:
Corro a observar
el vago nublo
del invierno de mi suerte,
tras él el brillante Sol
reluce de nuevo,
una fuente de retozos azules,
y caléndulas,
Flores de Odín
bordeadas por espinos
o majuelos silvestres,
un aspa de luz y de frío vil sordo,
oh de luz, y de frío
era mi azul desquicia yerta,
oh cuan abarca mi ineptitud
entre señeros dulces
y crueles ramajes de idea,
oh de luz, y de frío
era mi azul miedo.
Ámbar blando arredra cantando
de sol y de frío era mi oscuro invierno,
partido,
quebrado entre destellos de Flora,
y sus flores sujetas,
encontrase siguiera
amigos entre los insectos
vendría por mí el solo halo
de soledad que amilano,
vil milano
hermano mi cernícalo avizor,
por altas torres y agrestes sendas
que arregazan caracoleando,
oh mi ámbar
de luz y de frío
sangre del tiempo, petrificado,
por musario cerro
voy con azor en mano
en busca de la insigne
perdiz huidiza mi dulce tormento.
Oh mi suerte, sombra de agua
oh mi luz, y de frío mi insignia pasajera.
Förüq el castellano
SOTO EN SOL NACIENTE:
Noche silenciosa umbría,
de negrez adjunta;
al crujir del halo
que destella su pulcritud en estela,
coraje por violetas ausentes
y flores yescas alumbradas
por la dulce luna casi llena de enero,
mis falanges ensalman
el sendero inencontrable
hasta el portón verdadero
de nueve cerrojillos infranqueables,
orando por mí mismo se abra
esta insepulta tierra
que me sostiene,
mi semblante perdido
jamás abra el yelmo,
en clave de unión
se abra el aleteo fugaz prometido,
que encarnan tus maderas reflejas piernas,
un sopor y obtuve tu anhelado sabor
de tierra nueva virgen,
como letal aleación de savia y raíz
formando tronco y hojas esbeltos,
como dos rocíos se forman en tu sonrisa,
como te enraíza el sórdido éter embelesado,
dictando retorno
de mi primorosa,
mi musa cristalina;
soberana en turmalina esencia,
umbría vivirá nuestra caricia,
por el vespertino cauce
de río en arteria,
bajo que encumbro
el placer nacarado, insubordinado,
rumbo a la tercera estrella
que osó mirarte
colmando tú de lo bello, lo bonito
este parco Horizonte asiduo.
Entonando en primor
la lira toda mi carne.
Es adorarte ferviente.
Förüq el castellano
NIEBLA ENCORAJINADA:
Cielo de tu amor que acaricio,
En el suspiro del tiempo desvanecido, en cada luna que te encuentro,
En cada vida que te siento.
Cómo no hacerlo si vives dentro,
Si cada minuto lo vuelves tierno. Vuelo con este sentimiento de fuego,
Cabalgo el firmamento,
Encontrando el verso despierto.
Como estas ganas de devorarte lento,
Que sientas el deseo morder tu cuello,
Y la sangre de cada flor de piel y verso. Donde el agua y la poesía
Hacen el amor con tu cuerpo.
En este campo de sentimiento
La sangre de la tierra vistió de amapolas, cada beso de amor sin tiempo.
El bronce deja su cuchillo
A las espigas del cielo.
Hierro baña la sangre de este guerrero,
Vivo y muerto por tus suspiros.
De tu corazón preso, guardián de cada latido, redentor en el silencio frío.
Amante serpiente en el calor de la ilusión que te dibuja en mi mente.
Siempre presente, a la hora que la oscuridad late y envuelve.
Donde te volviste mi bendición,
Realidad, abrigo y latido
De la inspiración invencible.
Como invencible dios Sol, que toda vida rige. Amada hada, esposa de este mío sentir,
Acompañante de cada vuelo fulgente.
Tu semilla de amor germinaste en mi pecho, amapola roja y negra, sangre y tinta
Que cada verso expresa sin descanso.
Fluyendo como el río que brota en almas a su paso. Voz amante de tu presencia en mi mente,
Donde el te amo cada noche se siente.
Cura de soledad y maravilla hasta la muerte. Donde mis rosas dejarán su sangre.
Nunca dejaré de escribir al amor,
A esta pasión de tenerte,
A cada luna que de malva el cielo me tiñe,
A todas las flores sencillas donde te veo,
Donde descubrirás que este duende te será fiel,
Y a cada semilla que nace pone tu nombre,
Donde encontró su latido noble,
Y mil veces más fuerte
Lento se apodera de tu bosque.
Las campanillas en flor le oyen
Y distingue el espíritu de cada árbol,
En cada pequeña vida a dios encuentra,
Donde la armonía la acaricia el idioma oculto
De las hojas al viento.
Como el abrazo de la yedra al árbol
Y el beso del rocío primero a las flores del campo.
En paz me siento en mi entorno,
Y en la ciudad muero lento.
Bendita la vida por darme tu amor,
Por darme ojos para ver cada vida en color, siente esta caricia sin dolor
Observa que de mí el cielo se apiadó,
Donde sin envidia ni mal
Eterno vivo, como poeta sin tiempo en tu recuerdo, voy allí lejos de este mundo,
Donde empieza nuestro bosque sin destino,
Donde libre, todo sigue su espiral sagrada,
El ciclo de la vida y la muerte,
El resurgir del agua, la sangre y de la tierra.
Amada te canto, de tu mano siempre mi te amo, contigo siento la fuerza
De la tierra, el agua, el viento, el fuego, y la magia que en arrullo acarician mi cuerpo,
Contigo no temo a ningún abismo, infierno, ni tormento,
A ti te debo cada verso.
El castellano y Leannan-Sidhe
La polilla negra:
Acogía perturbador pensamiento
en tristeza, errático mío,
infortunio, todo dormido ceño,
mi sangre colmaba
lóbrega y repleta,
sobre la frente de nublos negros
que encogidos, no lloraban.
Era gris mi despedida
de noche tranquila, relucida,
noche azulada, indebida,
de destello desvelado,
y pilares al cielo en hondo tributo,
y carros llevando agua imantada
de grises Leviatanes.
Sombra de hombro incierta,
arrastra vendavales furtivos,
en espiral sobrecogedora,
y sones de blanca nocturna luna,
lánguido mi pecho ya profuso,
se alzara
a desmembrar el eterno desliz
de luz anclada
en vals y alas,
pequeña mariposa nocturna,
gira la espiral
su terror escondido,
embebiendo el ingrato desvelo,
fulgor de sus círculos errantes,
quimera desangelada
de vago destino caduco,
derredor intranquila enreda,
misteriosa negrez
sin partitura de blanca seda,
frenesí que jamás se separa de mí.
Coloso de su imán final
de lisonjera luz,
del candil que atraviesa
toda dama Oscuridad,
como su cuerpecito leve, frágil,
tembloroso
que ardió en su atracción final
a la llama en luz intransigente.
Förüq el Castellano
HÁLITO REVERBERA:
Renuevo esta mi sangre,
Tengo tus ojos fijos en mi horizonte,
A cada luna nocturna
Que pido proteja tu amor en mi cuerpo, amaneciendo despierto
El deseo de enredarme en tu cabello,
La pasión rugiendo besar tu cuello, desvaneciéndose el tormento, encontrando el manantial de esmeraldas en tu cuerpo
Sirviendo al placer preso
Rezando a la noche oscura
Encontrarte en cada parpadeo,
Sintiendo el fuego arder dentro, vistiendo mi piel de tus deseos,
Como íntimo tesoro de ternura cuidarte hasta el fin del tiempo que muerde, hasta eterno tenerte
Donde tu esencia surque mi sangre,
Y el velo de fuego destape,
Donde sin verte sigo soñándote,
Como inevitable besarte,
Y entre tu boca encontrarme,
Donde por amarte me resucitaste,
Y la flecha certera me atravesó el pecho para el latido nunca sacarte,
Para verte cada día en mi mente
Como siempre tan resplandeciente,
Mi anhelo queriendo siempre sorprenderte, mi felicidad encontrándote dulce radiante, si escribir solo sé escribir
Lo que dice el corazón
Y siempre sabrás que suspira por ti amor, mi bendición mi locura de pasión,
Mi florecer en rojo tornasol,
Viendo el arco-iris de la ilusión,
Viendo desvanecerse cada día mi dolor, encontrando de tus pechos las perlas amor, avanzando tus cauces
Llegando a tu océano de ilusión,
Abrigando tu interior con mi calor, protegiéndote por ser mi tesoro,
Mi cielo estrellado y cada rayo de sol
Que me acaricia,
Siendo bella princesa de mí reino,
Siendo entera bella,
Siendo de amada tan preciosa como destello en tu mirada, cálida ilusionada
Donde mi calma se vuelve tu agua,
Y naufrago en tu playa.
Me encuentro preso en tu tela de araña,
Siento cálida la sábana,
Me pierdo en cada noche que mi alma te extraña como necesitarte mi esperanza,
Como mi campo en flor sembraste cada flora silvestre,
Como solo tú ahuyentaste cada recuerdo triste, vengo a desafiar a esta inspiración
Con tu corazón invencible,
Donde de sentirte mi mundo, rojo volviste, donde mi amor te encuentra y te desviste, quiero perderme en tus secretos
Recorrer tus parajes para renacer
Como amapola en tu piel,
Donde viviré de tu placer,
Donde solo necesitaré de tu amor para vivir,
A cada luna estridente que encuentro
El verso solitario navegando la sangre
Y vuelo a abrazarte,
Y como paréntesis del destino
De mi interior te adueñaste.
El castellano y Leannan-Sidhe
ELEGÍA ENCAMINADA:
Poeta sin tiempo,
Escriba antiguo
Deshaciendo el sentimiento,
Vuelvo a caer en tus ojos
Miel de dioses,
Vuelvo a desangrar la rosa,
Crece la amapola
Su sangre enraíza,
Este el mío corazón,
Vengo a por tu beso,
Vengo a por tu aliento,
Vengo a morder tu cuello,
Jinetes del tiempo
Muertos
En este horizonte sediento,
Escalé la montaña
Hasta llegar al cielo
Robé allí tu amor eterno,
Ven amada mía
Rompamos las cadenas
Del placer
En gemidos envuelto,
Volvamos
Al dulce momento nacarado
De aullidos a la luna de luz de plata,
Yo lobo celta
Yo antiguo,
Vine a por tu beso solamente
Me llevé tu corazón
De adormideras envuelto,
Las hadas gimieron,
Este amor eterno,
El dragón verde
Me nombró su escudero,
Yo de la rama roja
Yo espíritu antiguo
Amigo de hadas,
Leo la naturaleza,
Ella me dice
Las raíces gritan
Las hojas mueren,
El aire se asfixia,
Los ríos lloran,
Las almas duermen
Buscando venganza
El ser humano,
Depredador
Asesina a su madre y raíces dicen
Todo lo que no puede hablar
En silencio grita
Pero todo muere en silencio.
Este pájaro de fuego
Habita mi cuerpo
Demonio antiguo
Que habla en poesía,
Idioma de dioses,
Flores amando mariposas
Como amores imposibles
Yo alcancé tu alma y esencia,
Yo fundí mi latido
Y mil veces más fuerte
Vengo a derrotar al tormento,
Guerrero de mil batallas del abismo,
Ángel dorado allí abajo
Luchando con legión de sombras
Y demonios convertidos a fe,
Yo surcaré el infierno
Y en la muerte traeré
Tu amor de nuevo,
Serás mi esposa
Aunque tenga que revelarme
A la creación,
Escriba con el demonio dentro,
lit. C et sumun canae,
Miles Dei lumen,
Mea unguis timor alum,
Mors erita exora mea.
Esta amapola canta,
Tu amor dentro late
Como sabia de roble,
Vuelvo al inicio del sentimiento,
Vuelvo a amarte sin tiempo,
En este lecho de antiguo romance
Tu sangre beberé
Mi sangre te daré,
Eternidad en mi pupila,
Muerte sin cielo,
Condena a renacer
En segundo estado
De transmigración de las almas,
En letras rompo mi condena
Para ocupar mi lugar merecido,
Aun mariposa en siguiente vida
Sabré en que flor encontrarte
Mi hada,
Voy allí voy al final del bosque del olvido
Y te encuentro desnuda
Mi caricia te dice
Un te amo
Tu sonrisa despierta el beso
En instante eterno,
A verso lanza y garra,
Rescaté el amor eterno,
Nací de nuevo en tu corazón preso,
Agarré tu piel
Bebí el placer
Respiré el fuego
Probé el vicio y el demonio
Quisieron a golpes
Matar mi inocencia
Hoy he venido a vencer
Mi pasado maldito,
He venido a aceptar a dios
Como fuerza celeste,
Aún rebelde mi fe nunca murió
Hoy como ayer luché
Y tu calor tu amor
Tú rosa, tu piel, tú seda,
Tu bondad pura, me regó,
Flores crecieron en esta mía entraña,
El sol iluminó la oscuridad maldita,
He venido a casarme contigo,
A hacerte mía
Como nadie te ha hecho
A despojar al tiempo de sus ataduras,
A eterno morir en tus besos,
He vuelto y el mundo temblará
Porque de nuevo siento amor,
El corazón siente fuego,
El alma estalla en luz de lucero,
El espíritu habla más allá
De sombras y te abraza,
La batalla como la primera venida
Será dura pero de nuevo venceremos,
A mí la fuerza,
A mí la esperanza de la nueva lucha,
A mí la bendición de diosa luna,
A mí el poder de Dios Sol
A mí su furia de fuego,
Maldigo a quien destruye este planeta,
Maldigo a quien destruye a diosa Flora y a madre natura,
Jamás mis manos mataron un animalito, como celta en armonía vivo
Con la naturaleza de dios Padre, Conchabar Mac Ness dentro
Hoy tú poder siento,
Como serpiente antigua
Eterno viviré en esta tierra,
Y cuando el hombre se destruya
Por avaricia el mundo seguirá su curso sin él y la naturaleza apoderará
Las ciudades
No habrá ningún ser tan dañino
Como el hombre,
Los cielos se volverán rojos
El cielo llorará sangre,
Los ríos sangrientos envenenarán
Y el eterno resurgir vendrá,
Lo más hermoso de este mundo
Es el paraíso de la naturaleza
Pero para el hombre lo más hermoso es el oro y el dinero demonio,
Vengo a amarte sin tiempo,
Vengo a crear mi eternidad en el cielo
Como en la tierra,
Vengo a caminar las aguas
A romper los hielos,
A fundirme en fuegos,
A incendiarme de pasión en tus ojos, vengo a destruir mis cadenas
Y amarte libre
Como el pájaro a su vuelo,
Yo pájaro sin alas,
Yo pez que cortaron sus aletas,
Yo hombre,
Que jamás pudieron cortar su libertad,
A galeón cruzaré la travesía de tus piernas, en tormenta tendré el agua de tu boca,
En caricias prenderé esta hoguera,
En tu corazón sembraré la amapola
Eterna del amor que quema,
Ninfa mía ven conmigo
A esta tierra de fuego,
Luna mía ilumíname el camino,
Sé mi amparo,
Sé mi abrigo en noches de humo,
Dada, Balar, Morirán, Log,
Y tú mi amada Brígida
Elevar mi canto al cielo,
Arroparme este fuego
Que dentro tengo
En fe os sirvo como druida antiguo, os pido bendición,
Artes dame tu fuerza,
Cerdunos caza al cazador, Táranos riega estas tierras
Salva los pocos bosques que quedan,
Peona diosa de la naturaleza sálvala del hombre, ofrezco este humilde canto
A todos vosotros con esta luz
Que me queda darme fuerzas
En este amor que comienza,
Eterno vivo eterno muero,
Eterno sirvo yo guerrero antiguo
Yo druida de la rama roja celta.
Los dragones volverán a surcar el cielo
Y no habrá clemencia para el mal,
Serpientes antiguas la lucha sigue viva.
Este mi humilde canto
Temblará en la tierra,
Iluminadme este amor que ciento
Y que de mi alma se apodera,
Amada mía sé mi sombra
Como yo soy tu luz y tu calor,
Sé entera mía como el pez a su río,
Y la piedra a su montaña,
Sé mía como el árbol a su tierra
Y el ciprés a sus muertos que vela,
Sé mi amparo en la batalla
Hoy de nuevo como ayer
Juntos veremos el nuevo amanecer,
Y la luz que cegará la tierra,
No hay miedo porque te amé y te amo, aun ciego mi amor
Te seguirá perteneciendo
Como la abeja a su flor,
No habrá poder
Que pueda separar mi alma
De tu corazón,
Eterno te serviré
Aún tu esclavo mi reina
Te haré la mujer más feliz del mundo aún en la muerte
Mi alma seguirá el camino a encontrarte y eterna tenerte,
No me desampares el camino duro,
Sé mi fuerza en la lucha
Nuestro amor ganará
Y derribará el mal
Que nos quiso sangrar
Y en vida condenar,
La felicidad sigue viva como la amapola florece cada junio en el camino te amo y lo haré
Aún tenga que enfrentarme al mundo.
El castellano y Leannán-Sídhe
Deirdre reina mi dolor, Cosantes:
DEIRDRE REINA MI DOLOR; COSANTES:
I
Poeta sin tiempo no expira,
Deirdre palpitando siento.
Escriba llaga lo antiguo
Deshaciendo lo averiguo.
Deirdre palpitando siento.
El sentimiento es alado.
Vuelvo en dicha desatado.
Deirdre palpitando siento.
Miel de dioses estado quo,
desangrar rosa es inocuo.
Deirdre palpitando siento.
Poeta sin tiempo, alma expira,
Deirdre palpitando siento.
II
Crece que late amapola
Su sangre enraíza roja.
Este el mío corazón.
Vengo por besar razón.
Su sangre enraíza roja.
Vengo al amar, por tu aliento.
Vengo a morder tu ardimiento.
Su sangre enraíza roja.
Fosa cava mi azadón,
no era pena era sazón.
Su sangre enraíza roja.
Tierra y sangre, la amapola.
Su sangre enraíza roja.
III
En horizonte sediento.
Deirdre heroína mi dolor.
Hasta llegar a las cimas.
Robé el amor que amimas,
Deirdre heroína mi dolor.
Ven amada, liberemos,
quita cadenas, volemos;
Deirdre heroína mi dolor.
Del placer entre calimas
envuelto, pena redimas.
Deirdre heroína mi dolor.
En horizonte sediento,
Deirdre heroína tu dolor.
IV
Al dulce momento vuelto,
sajara aullidos en luna.
De luz de plata igualara.
Yo lobo celta encumbrara,
sajara aullidos en luna.
Yo antiguo luz que cultivo,
Vine por beso asertivo,
sajara aullidos en luna.
Solamente yo grande alzara.
Llevo corazón en ara,
sajara aullidos en luna.
De adormideras envuelto,
sajara aullidos en luna.
V
Las hadas gimieron todas.
La raíz grita, perpetua.
Este amor eterno vale.
El dragón verde sale,
la raíz grita, perpetua.
Me nombraron su escudero.
Rama roja el duradero,
la raíz grita, perpetua.
Yo espíritu antiguo cale,
amigo del duende exhale,
la raíz grita, perpetua.
Leo la naturaleza yerta,
la raíz grita, perpetua.
VI
Ella me lo dice, dicte.
Las raíces gritan rectas.
Las hojas se mueren recias.
El aire asfixia herencias.
Las raíces gritan rectas.
Los ríos lloran sangrando.
Las almas duermen orando.
Las raíces gritan rectas.
Buscando venganza sacias.
El ser humano desprecias.
Las raíces gritan rectas.
Depredador asesina.
Las raíces gritan rectas.
VII
Humano asesina madre.
Todo lo que no puede hablar.
Silencio grita, maldice
y todo muere predice.
Todo lo que no puede hablar.
Este pájaro de fuego.
Habita espíritu luego.
Todo lo que no puede hablar.
Demonio hable, estigmatice.
Que habla en poesía alunice.
Todo lo que no puede hablar.
Idioma de dioses fuertes.
Todo lo que no puede hablar.
VIII
Flores aman mariposas.
Como amores imposibles.
Yo alcancé tu alma y tu esencia.
Fundiera en plañir, latencia.
Como amores imposibles.
Y mil veces más ardiente,
vengo anclar mi descendiente.
Como amores imposibles.
Guerrero de complacencia,
el Ángel dorado esencia.
Como amores imposibles.
Sombras luchando su lugar.
Como amores imposibles.
IX
Demonios convertidos ya.
Yo surcaré el infierno yerto.
Y en la muerte traeré ilesa,
amor nuevo, será empresa.
Yo surcaré el infierno yerto.
sentir que tú serás mi par.
Aunque tenga que destapar.
Yo surcaré el infierno yerto.
A la creación traviesa.
Escriba con letra tiesa.
Yo surcaré el infierno yerto.
Esta amapola que canta.
Yo surcaré el infierno yerto.
El castellano y Leannán-Sídhe
lit. C et sumun canae,
Miles Dei lumen,
Mea unguis timor alum,
Mors erita exora mea.
DULCEZA EN CLAROR:
¿Lo recuerdas?
Cuando creíamos
dentro del ser haber
encontrado algo.
Recuerdo que los días
están hechos,
mantente.
¿Recuerdas un vivir al filo de la navaja?
Tentando la suerte nuestra circunstancia
que nos unió
como agua y oro de aceite.
Recuerdo a veces
llorábamos a las flores,
y otras nos sonreían.
¿Recuerdas el evanescer interior
que se apoderaba del firmamento,
y descendían astros a mecernos?
Recuerdo tu sonrisa pura,
inocencia de escala,
un desear estar contigo,
para volver todo hacerte brillar,
¿Crees amor huido que algo haya cambiado?
Dilucido que seguirás siendo
la misma piedra de melodía,
de eco presuroso,
que se adentraba en mis ojos,
para inaccesible habitarme,
como canción sepulcral
e infinito reverberante,
que me erizaba la piel
completando mi existencia
de palmo a trecho
voy manando,
y aunque hoy piedra
del rayo encegado,
dicha en mi pecho quedaste,
dicha en mi alma blandiste,
por qué yo te conocí
porque yo tuve que sentirte,
como agua de rocío
y destino plañidero,
incluso hoy en sueños, te sigo viendo,
brea de estrella en carne de la belleza,
pupila de mi pupila
por el tiempo helada,
he venido hoy a desafiar a mi dulce tormento,
si tenerte te tengo dentro,
si quererte sigue en vela y cañón,
mi naipe y última carta,
no se reveló.
¿Ves que algo haya cambiado reitero?
Sí, que hoy en día
duermo con tu recuerdo etéreo inimaginado,
y no con tu piel y carne de estrella.
Esteban er-lobo bohemio
SED QUIMÉRICA:
Calma, tranquilidad, paz, sosiego.
Pedernoso pregona arraigo.
Quimera a tiempos,
en puñal pretencioso.
En espigas de idea:
Patria por siempre sin sentar,
oh Castilla.
Fugitiva sin amores,
mi tierra.
Surcos de fugaz simiente
cual verte y no verte.
Docto de tu dulce vientre,
tras fuego
de ababoles.
Entre tierras
de tus reflejas piernas;
sed de mi oscura sangre.
Como suave sollozo
en vals flamígero sin tacto.
Ardoroso terciopelo te siembro.
Compás de ángel y quimera
cual llegada la vigorosa hora,
te enroscaré
como dicta la amapola
y su sed de sangre de tierra
por bandera
en espiral de caracola.
Förüq castellano
OROPEL:
Mi pequeña ángel,
que tan brillante
brillo de metal noble
querías ser,
quien te descubrió
retozando todo el panteón
mis padres fui yo,
ángel pequeño de luz
de ojos esquivos
y mirada endiosada
pura entre las puridades fijadas del hombre,
renombre como oro fino de luz,
tu piel serena
jamás esculpida o modelada,
quién a acompañarte conmigo baja,
oh oro tierno
carne de maravilla,
trenzada tú en el infierno
o paraíso perdido.
Mantente a mi lado,
oremos a la belleza del mundo
que es tu madre,
mantente,
descubriremos a mí me parió una sombra,
y a ti una estela alada,
mi pletina de oropel
mi pequeña ángel,
sálvame
sálvame de este averno terreno,
donde como es arriba
solo es igual abajo,
trenza mi sendero por tu encanto
sembrado,
madre del metal cromado fueres,
bella insignia de metal celeste,
dorada fuere tu apellido,
vamos al submundo de los condenados
ese que su patio
y jardín eterno es franca
de nuestro paraíso perdido olvidado
Pandemonium,
crucemos extasiados los umbrales silentes,
con abismos nacarados,
mi pequeña ángel bebamos de nuestra mano,
Oropel bella, bella Quimera,
que reluces más que un alumbramiento,
todo mi ser ofrezco
para me enraíces Oropel
la panida mi corazón
con tu amor que es y será mi rosa secreta,
oro noble te volveré desde dentro hacia afuera,
manjar de mis dioses yo su progenitor
solo incausado,
crucemos la línea
de este submundo los condenados perfectos,
musa volviste
de una recia lágrima,
Oropel tu letra,
vestidura seda los oros,
vayamos al fin del mundo
a ocupar nuestro merecido lugar,
yo raíz mis hijos dioses sembré
hagamos la luna nuestra señora.
Y al sol nuestra guarda,
pequeño espíritu mío,
quién te colmó de belleza,
que dorada respondías,
quién te vistió cromada tu carita,
desvestiremos al viento con nuestros gemidos,
ardiendo,
por Venus, Júpiter, Ares y Atenea
a ti te olvidaron, tú la más bella.
Esteban castellano er-lobo bohemio
Referencias:
Mi palpitar y pensamiento.
Batallar la centella:
I
Niebla sonora:
cielo no me juzgues,
Pero sí me gustas
Y mil desánimos me invaden
Como amar una utopía,
Enamorarse de una nube
Que surca el azul celeste
De propia vida,
Apagar fuego echando más leña,
Ver una quimera de piel
En imposible caudal
Ambrosíaco,
Ver la luz sin tener ojos,
Enamorarse de una lagartija
De mi jardín y esperar
Que me hable cada día...
Pisar un abrojo
Y saborear dulce
Como imaginar la miel
De tu cuerpo.
Escuchar la niebla del sonido
Es todo lo que siento
Vals de nirvana
Si mi doncella mi boca
Adentra su boca,
Sí de trece veleros
Trece estrellas de luceros
Que es el amor
Que te proceso
Me ayudarías
A amarte
¿Hasta mi honda sepultura?
Llamas de amarte profundas en tus ojos
Un tiempo
De locura en la vida
Llamas de amor
Me sirvan llamas de amor
Me soplan llamas de amor en tus brazos
Te ardo
Llamas de amor
Avisa llegues bien a destino
Profundo en tus ojos
Llamas de amor.
II
Queréis amar como se ama a la bondad,
queréis amar como se ama a la sola, oscura voz,
queréis amar como se ama al primer amor,
pues id a esa piedra,
alegre o triste del invierno lluvioso,
sobre los musgos y su piel aterciopelada, sedosa,
que mi visión
en mí enraizada, no la cambio por nada,
queréis seguir a dios,
sí ese el que crea,
pues no améis mi corazón que es como su amor,
una falange de Piedra,
queréis ver el alba más preciosa,
no sigais banalidades de señoriales utopías,
que mi amor es vida,
y a ella canta el desfase,
a su belleza ignota, mi Musa Armada de Oscuridad en preñez de sílaba,
de paraíso inocente, y miel desvencijada,
así frente al enemigo canto,
queréis amor,
o encontrarlo,
pues id a la Piedra sanguínea del río todas las flores desangradas,
que es mi amor por mi pequeña,
Oscura Ángel,
mi camarada, mi cruz y mi salvatoria,
a una felicidad extasiada,
mi amor que no se vende y sí arriesga,
porque hay certeza,
y es que ella a mí también me arma de pecho a espada.
Förüq Castellano Miguel Esteban
2007 sólo un pensamiento:
Busco encontrar amor
Solo encuentro desilusión
Busco encontrar aceptación
Solo encuentro decepción
Te busco a ti pero no te encuentro
Busco felicidad pero solo es un estado mental
busco buscare buscarini
Busco rimas pero solo encuentro lágrimas
Busco utopías
Solo son fantasías
Busco alegrías
solo son sinfonías
Busco realidades alternativas en mentes cautivas
solo son realidades lascivas
Busco inspiración
Este mundo cruel me las da a millón
Sólo un pensamiento q yo nací para tus ojos
hermosos como la noche y el dia
como el amanecer y el anochecer
como lo fue mi primer beso contigo
te busco a ti Nicole.
ojos de mis ojos, ojos de un cielo, mi cielo.
¿Quién te ha colgado la noche en las pestañas? y la luna en tus pupilas?
tu fuego de corazón mi hoguera. Te amo te deseo eres sueño eres mi dormir lo eres todo para mi ayyy te busco y yo no te encuentro pero no me preocupa no verte no tenerte cerca xq mi amor lo puede todo solo con cerrar los ojos y saber q existes y q un día te besé y que te tendré me hace ser inmortal en cuerpo y alma xq estas en mi corazón
FACE TO FACE HEART TO HEART SOUL TO SOUL DREAM U ALL FOR ME YES YO PREETY I LOVE U YES SPOT LIGHT SO WHAT ARE U DOING TONIGHT? I AM YOUR WOLF FOREVER AND EVER BUT U DONT LOVE ME BECAUSE U DONT BELIVE ME LITTLE CUTTIE you are dream, you are my sleep, you're welcome on me, fack or true, i don't know, but i saw, i need you on my own.
Preavance de mi poesía:
Solo un pensamiento:
Que yo nací para tus ojos.
No existe reloj alguno que detenga este momento.
Cuando miro de noche
Las sombras dibujan tu figura
Tu eres mi doncella yo soy tu bohemio.
Mi alma me dice vive amando muere luchando.
El coraje de luchar por lo que uno quiere en la vida
Es lo que da respeto.
Quisiera ser yo el que te abrace el que te bese el que te diga
Al oído que solo tú y solo yo inseparables los dos.
Estás en mis sueños, en mis
Noches más frías y en las más
Calientes.
Only I can wait.
Only I can wait.
Only I can love you.
In the darkness of my soul and
In the heat of my heart.
Al final del camino no importa el destino.
Al pasado le digo adiós.
Sin presente ni futuro vagando por el mundo.
Realidad como un sueño con los ojos abiertos.
Tus senos guardan el tesoro de tu corazón.
Cargo mis versos apunto, tu corazón es el blanco y disparo.
El sufrimiento es mi pasión sin él no sería nada de lo que fui.
Sin ti no sería nada de lo que soy.
Veo la vida como es cruda y gris.
Tú eres la luna de esa noche cruda y gris que es mi vida.
No tengo miedo de caminar solo el camino porque al final de él
Estas tú esperándome.
Abandone todo lo que me anclaba al pasado
Para navegar sobre mis ilusiones.
Y luchar por alcanzarlas
La medida del amor es amar sin medida.
Y pensar que aquella meta será conseguida.
Cueste lo que cueste.
No me acostare sin verte.
Pase lo que pase.
No quiero que mi amor descanse.
Quiero luchar quiero amar.
Quiero vivir quiero sufrir.
No quiero pensar quiero actuar.
Y no parar, no descansar, solo luchar.
Para poderte amar.
Y así conquistar lo que quiero de verdad.
Y así poder abandonar la soledad.
Quiero vivir junto a ti.
Quiero compartir junto a ti.
Tú qué quieres y que vives no me olvides.
Seré tu dulce amante invisible desde el otro lado para dormir bajo tus brazos.
Vine a por tu beso solamente.
Quiero que guardes tus labios por si vuelvo.
Siento que me sientes.
Veo que me ves.
Quiero que me quieras.
Amo que me amas.
Sueño que me sueñas.
Miro que me miras.
Simplemente te veo.
Simplemente te siento.
Simplemente te escucho.
Porque ahora vivo en tu corazón.
Esteban el castellano
1
Ahora estoy solo aquí en mi habitación dando vueltas a todo lo ocurrido en mi interior y sólo veo decepción, solo veo dolor.
Ahora estoy solo aquí en mi habitación pensando en el amor.
Sólo salen lágrimas de sangre con ardor ha estallado mi corazón.
Ahora estoy sólo aquí en mi habitación y tú no estás alrededor.
Esteban el castellano
2
No sólo acabaste con mi amor, sino que cada palabra tuya fue como espada que se me clavó hasta el esternón.
No te conformaste con ver mi dolor, sino que fuiste a verme hundido en la más cruda desesperación.
Quisiste llevarme hacia el camino hacia mi perdición.
Pero entre la confusión supe distinguir lo real de la ilusión y vi que entre nosotros sólo hubo pasión, nada de amor
Y aprendí a dudar hasta de la duda, a creer solo lo que veía, a juzgar lo que oía y a desechar lo que me dolía.
A ver el amor no como un fin en sí mismo si no como un principio y un fin y comprendí que para nuestra historia había llegado el fin.
Esteban el castellano
3
Cada deseo una ilusión,
Cada ilusión una fantasía,
Cada fantasía una esperanza,
Cada esperanza una promesa,
Cada promesa un juramento,
Cada juramento una palabra,
Cada palabra...y cada palabra,
Un millón de pensamientos,
Un poder inmortal,
Capaz de crear revoluciones,
De crear o de destruir de vencer
O de morir en el olvido,
Capaz de hacer enloquecer o de desnudar,
De amar o de odiar,
De sepultar o de consolar,
De hacer llorar o de hacer sudar,
De amenazar o de perdonar.
Una palabra es lo más importante
Cuando sale de un corazón noble
Y tiene glóbulos rojos que la respalden
Te quiero es mi palabra.
Esteban el castellano
4
Hoy solo tengo whisky por sangre,
Alquitrán en los bronquios y una pena que me consume la cabeza como si cigarro se tratase.
Hoy perdí todo lo que tenía en la vida.
Hoy la pena negra como el carbón brota por mis venas
Y se agarra en el estomago como si me hubiesen clavado un puñal.
Eso es frustración y me hace vomitar.
Cuando te hierve la sangre y la rabia te hace temblar y llorar y no tienes nada que perder matarás por un motivo pendiente.
__________________
ESTEBAN el castellano MiguelEsteban
5
En la soledad de mi cuarto son tus recuerdos los que me hieren, pensando en tus labios, los míos tiemblan, hierven...
Es tu figura en la penumbra la que provocarme quiere, se hace intenso el calor, y tú más aumentas mi fiebre.
Abrazo mi almohada llorando porque sé que estas ausente, y que no podré abrazarte, por más que lo desee.
Poema de recuerdo de una felación en el hospital escrito para mí, no por mí. Autora: María
6
Amor ¿qué es amor?
¿Un estado mental de felicidad?
¿Algo físico que genera atracción de dos personas?
¿Lo que te hace temblar cuando ves a tu ser amado?
¿Lo que te acelera el corazón, lo que te hace
volar y soñar despierto?
Y me pregunto:
¿Qué es el amor?
No lo sé pero si de algo estoy seguro es de que te amo.
Esteban el castellano
7
En la oscuridad de mi cuarto son tus recuerdos los que me invaden, mis labios tiemblan y te llaman en silencio.
En la oscuridad de mi cuarto es tu figura la que me acecha, la que me provoca y me produce un caos febril de deseo y de pasión.
Pero tú no estás, tú no estás, no estás.
Tu recuerdo recorre todas mis neuronas con miles de imágenes, cada una añorando un pedazo más de ti.
Agarro con fuerza mi almohada pensando que eres tú y una tristeza comienza a invadirme, lágrimas salen de mis ojos, en ellas se puede ver tu rostro reflejado en ellas.
Ardores me entran en el pecho sé que no vendrás que nunca volveré a tenerte, que estás ausente y mis lágrimas se convierten en lágrimas de sangre, ha estallado mi corazón de una sobredosis.
Esteban el castellano Er lobo bohemio
Muchedumbre que me observa cuando camino
ojos observantes que se preguntan a donde voy o de donde vengo
rostros que me evalúan algunas veces me juzgaron
con prejuicios
pero hoy lo único que quedó
fue el futuro como un juicio
con testigos
pero sin cerebros.
ojos me observan hasta cuando duermo
un delirio eterno
Ellos tenían mi camino marcado
pero yo creé el mio
simplemente las piedras
estaban en el cielo.
y yo las usé para hacer mi tumba.
Si era oscuro pero hermoso
una noche eterna en una tierra de ángeles
canticos al horizonte se escucharan.
pero cuando llegue el final.
De la oscuridad se creó la luz.
Alas benditas curan almas malditas
la más negra alma la mia
de las cenizas resurgio el ave fenix
de mi dolor resurgió mi amor
de mi corazón resurgió mi pasión
de mi ideal resugió mi felicidad
de mi desilusión resurgió mi frustración
de mi veracidad resurgió mi ansiedad
de mi sangre resurgió el ligre
de mi cabeza resurgió la fiereza
de mi nobleza resurgió la pureza
de mi rima resurgió mi sinfonía
de mi agonia resurgió mi triste melodía
de mi dia a dia resurgió el ansia mia
de mi pensamiento resurgió un testamento
de mi enfermedad resurgió la bondad
de mi locura resurgió la cordura
de mi amistad resurgió la sinceridad
de mi sufrimiento resurgió el linchamiento
de mi tormento resurgió mi aliento
de mil memorias resurgieron mil victorias
de mil fracasos resurgieron mil abrazos
de mil licores surgieron mil amores
de mi torpeza surgió mi belleza
de mi fiereza resurgió mi entereza
de mil fantasmas surgieron mil asmas
de la tristeza resurgio la añoraza
del lamento resurgio el divertimento
de mi cabeza resurgio la esperanza
del ideal resurgio la fuerza vital
del impulso resurgio mi pulso
y de tu amistad resurgio mi vitalidad
Laila eres la lila del jardín
que divide un confín de otro confín
que es el de mi corazón
cordura de mi sinrazón
anestesia de mi sinestesia
droga q me embriaga y me mata de placer
como tu vida es mi amanecer
como tu recuerdo mi credo
solo esto es una pequeña muestra de aprecio
para q olvides todo mi desprecio si alguna vez
lo viste en mis palabras
fueron pataletas
recuerda q estas hablando con un corazón
no con una cabeza
y lo q digo es lo q siento en el momento
no lo q pienso con mi pensamiento
pero q te voy a decir q no sepas
si mi cociente intelectual es como el de las setas
y no puedo engañar ni a un niño de 4 años
pero ya son años los q te conozco laila
y estos años mas q tormentos
fueron buenos momentos 1 saludo
futuro para vivir en lo oscuro.Un sueño eterno triste y oscuro.Mi vida quedo atras.Dance with God histeric ego botellas vacias,ceniceros llenos, hojas de papel xl suelo,psadillas n las paredes,l infierno bajo mis sabanas.Insanity came to me Departamento de Dementes del Hospital Provincial.sí es verdad q sufro. pero oidme: que me importa sufrir si soy poeta.
amor como un estado de gracia no cm 1fin nsi mismo cm 1 principio y 1 fin, para mi ya es mi fin.
ya no vere tu sonrisa en la cara baby in your eyes i want to live forever baby in your eyes i want to be 4ever perdón
el otoño cae frio y austero como afilada guillotina
guadaña de la muerte para ancianos terminales
estación ciclica para recaer en brotes de locura
paranoyas delirantes
ojos inconscientes
miradas subyacentes
hojas caen vidas pasan de largo
sin mirar atras
refugio del aislamiento
vidas precintadas en bolsas al vacío
hoy contemplo como no soy el único secuestrado
x las circunstancias y veo desde donde me refugio en mi
cabeza como van muriendo otros
bolsas en sus cabezas
estrangulamientos que no paran, otros,
murieron ahogados x sus circunstancias pero no se q sera de mi
quizas precinte mi cabeza para mandarla a otro país
me enciendo un cigarrillo en esta bolsa al vacio de congelados q es mi cabeza y una tenaza ardiendo sale corriendo
me mimetizo con el entorno como los camaleones
pero esta vez estoy rodeado de dementes
esto es el manicomio
el demonio me mandaba como un astemio en
el pensamiento empobrecido,
eterno en este cáos de degollado vivo
tengo cuerpo y corazon bombeando alquitran
pero es como si me faltase algo
quizas seas tu
o mi alma
o mi cerebro
pensamiento fragmentado viene como un rastro de lucidez
en el vacío de mi cabeza, bloqueo mental
sinestesia global
cerebro ¿q vamos a hacer esta noche?
-lo q hacemos todas las noches pinki:
Tratar de conquistar el mundo
8
A FLOR DE PIEL
Simplemente te veo cierro los ojos y estas aquí en mi interior como un recuerdo imposible de borrar que me hace soñar y volar sobre mis ilusiones.
Que quieres que te diga si lo único que quiero decirte es que te quiero.
Sueño despierto y no quiero cerrar los ojos si no es para abrirlos y verte cerca mía.
Y con cada sonrisa tuya mi corazón se alegra.
Cuanto desearía decirte te amo pero no me atrevo.
Sólo espero que llegue el momento en el que volvamos a ser uno juntos de la mano.
He empezado este poema pero no sé
cómo acabarlo si no es con un beso.
tus labios rozando los míos, tu aroma entrando en mi interior como un velo sublime que me embriaga,
mi cuerpo temblando como si fuera el primer y último beso.
Sueño sin fin.
Sentimiento a flor de piel.
Ojos que hablan de cómo te sientes.
Sueños sin realizar, no es más fuerte el amas veces se cae y se levanta sino el que nunca llega a caerse .
Historia imposible de acabar.
Corazón bohemio hoguera de sentimiento.
Siento que te quiero y que lo seguiré haciendo hasta que la vida y la enfermedad me lo impidan.
Te llevo dentro de mí en mi sangre, por mis venas, en mi pensamiento y en mi corazón.
Tú la flor más bella que vieron mis ojos.
Amor de una vida cariño profundo y sincero que siento,
profunda admiración que te tengo.
Tu cuerpo que me hace estremecer
y caer en un profundo sueño en el que hacemos el amor toda la noche
en una habitación llena de rosas y de velas
con mi sentimiento por timón
, mi amor por bandera
Eres un ángel caído del cielo.
Sin tú moriría por dentro.
Sin tu cariño no soy yo, sería un ser sin alma.
Tu as llenado mi corazón de alegrías y amor.
No pararé hasta que seamos uno.
Tu flor de mi vida, que has enraizado profundamente en mi corazón.
Corazón de bohemio, ni duermo y fumo hasta matarme.
Corazón noble y leal que palpita agitadamente cuando te veo.
Amor sincero.
Enamorado de la vida y de ti.
Gracias por hacerme el hombre más afortunado de la tierra por tener tu cariño y respeto.
Tu cuerpo me hace estremecer y sudar, me veo reflejado en tus ojos.
Tus labios, que besaría
un día entero sin descanso.
Amor de una vida, amistad profunda como nuestro cariño y amor.
Tu que me has alegrado la vida.
Que has hecho que desaparezcan mis penas de enfermedad.
A tu lado no tengo miedo a nada.
Porque tengo tu amor.
No tengo miedo a caminar sólo por la vida porque te tengo aquí en mi corazón.
Tu amor de una vida o de un mes.
Quiero conocerte.
Para amarte más y más.
Para quererte más y más.
Siento luego soy romántico, te quiero luego soy amante, vivo luego soy vividor.
Tú la chica más bella yo, un bohemio rubio de ojos claros de sentimientos y corazón
tan fuertes y puros como agua de manantial,
tu sonrisa ilumina mi vida.
Siempre estaré tu lado aunque sea en mis sueños y fantasías.
ESTEBAN EL CASTELLANO
9
Olvido.
Olvidarte nunca podré.
Nunca te podré separar de mí.
Estas en mis sueños, en mis
noches más frías y en las más
calientes.
Como una manta que me abriga y me arropa
cuando me siento solo.
Como mi sombra.
Como mi reflejo.
Olvido ¿Por qué nunca te encuentro?
Será porque no te busco, porque
vendería todos los mañanas
por un ayer junto a ti amor.
Ya sé que soy inmaduro,
pero te quiero y lo sabes.
Si ahora no lo ves ya lo verás.
Pero mi tiempo ya pasó
Como guillotina
que partió mi corazón en dos
Para darte una mitad.
Olvido.
Olvidarte nunca podré.
Siempre te amare.
Esteban el castellano
11
DESDE EL OTRO LADO
Te veo y siento que te quiero.
Que por ti me muero.
Te miro y mi mundo se vuelve loco.
Te deseo y mi sangre arde como fuego.
Solo un pensamiento:
Que yo nací para tus ojos.
No existe reloj alguno que detenga este momento.
Mi vida pasó ante el paredón fugaz como el viento,
pero mi corazón sabe que te seguiré queriendo.
Estoy enloqueciendo te veo en todas
partes:
En mi cama, bajo mis sabanas en mi cuarto.
Cuando miro de noche
las sombras dibujan tu figura,
el viento me susurra tu voz,
las flores me recuerdan tus labios,
el agua tus besos,
los rayos de sol tus cabellos.
Tu eres mi doncella yo soy tu bohemio.
Mi alma me dice vive amando muere luchando.
El coraje de luchar por lo que uno quiere en la vida es lo que da respeto.
Pero tú tienes otro dueño de tu corazón.
Que se lleva las historias de amor que escribí
con sangre y fuego en mi interior.
El desanimo me invade como olas golpeando el acantilado de mis pensamientos.
Te llevo dentro de mí.
Por ti moriría una y mil veces para demostrarte
Que nadie te podrá querer como yo.
Son tus besos algo más.
Te llevo dentro de mí.
Oigo voces sin razón
que me recuerdan mi desilusión.
No se vivir sin ti.
Quisiera ser yo el que te abrace el que te bese el que te diga
al oído que solo tú y solo yo inseparables los dos.
Una historia de amor imposible de borrar.
Escrita en mi interior.
Pasiones vividas entre los dos.
Ya no puedo soportar otro día más sin llorar.
Sé que me sigues queriendo
que lo que yo te hizo sentir nadie podrá.
Pasión ardía en nuestro interior.
Pero ya pasó.
Ahora solo queda el recuerdo.
Como un boceto que se dibuja cuando cierro los ojos.
Despojos de aquel amor vivido.
Como un silbido llamando al olvido.
Olvido, olvidarte nunca podré,
nunca te podré separar de mí.
Estás en mis sueños, en mis
noches más frías y en las más
calientes.
como una manta que me abriga
y me arropa cuando me siento solo.
Como mi sombra.
Como mi reflejo.
Only I can wat.
Only I can wait.
Only I can love you.
In the darnos of my soul and
In the heat of my heart.
Olvido ¿por qué nunca te encuentro?
Será porque no te busco por que vendería todos los mañanas
por un ayer junto a ti amor.
Ya se q soy inmaduro.
Pero te quiero y lo sabes.
Si ahora no lo ves ya lo verás.
Pero mi tiempo ya pasó
como guillotina
que partió mi corazón en dos
para darte una mitad.
Olvido, olvidarte nunca podré.
Siempre te querré.
En la muerte gritaré
para reunirme contigo.
Al final del camino no importa el destino.
Al pasado le digo adiós.
Sin presente ni futuro vagando por el mundo.
Realidad como un sueño con los ojos abiertos.
Tus senos guardan el tesoro de tu corazón.
Felicidad como un ideal posible de alcanzar en mi interior.
Te estoy queriendo perdió en la razón.
Dolor brota por todo mi corazón.
Cierro los ojos y aparece frustración.
Como martillo golpeando el yunque de mi pensamiento.
Pero a la vez veo que te siento.
En el fuego de mi amor brotan espinas de celos.
Pero eso aumenta mi sentimiento.
Porque vivir es sufrir.
Ay amor si ya no piensas amarme
Ayúdame a olvidarte.
Yo solo quiero imaginarme
que me quieres de verda.
Pero ya no queda na.
Solo el reflejo de lo que fui.
Todo lo que tenia te lo di.
Yo ya no quiero vivi.
Si no es paz verte junto a mí.
Pero junto a otro yo te vi.
Junto a otro yo te vi.
Soledad venia a por mí.
Pero me quedaban tus recuerdos.
Mis sentimientos que nunca morirán.
Solo resurgirán cuando llegue el momento.
Yo solo espero para jugar mi última carta.
Ya que el amor no se impone se gana.
Y yo sé jugar al póquer de tu corazón.
Aunque juego con naipes de hielo
soy experto y te quiero.
Tengo el fuego que te hace sudar.
Tengo el arma que te hace gritar.
Tú tienes el amor que quiero ganar.
Pasión arde en mi interior.
Los celos mi perdición.
Al cielo hice mi petición.
Ganar tu corazón.
Pero Dios me traicionó.
Desde este momento yo soy mi Dios.
Creo en mí en las personas y en la naturaleza de lo que veo.
Marco mi camino no creo en el destino.
Cargo mis versos apunto, tu corazón es el blanco y disparo.
El sufrimiento es mi pasión sin él no sería nada de lo que fui.
Sin ti no sería nada de lo que soy.
Veo la vida como es cruda y gris.
Tú eres la luna de esa noche cruda y gris que es mi vida.
Te quiero ciento que sin ti me muero que sin ti me desespero.
No quiero ser soltero.
No tengo miedo de caminar solo el camino porque al final de él
Estas tú esperándome.
Abandone todo lo que me anclaba al pasado
para navegar sobre mis ilusiones.
Y luchar por alcanzarlas.
La medida del amor es amar sin medida.
Y pensar que aquella meta será conseguida.
Cueste lo que cueste.
No me acostare sin verte.
Pase lo que pase.
No quiero que mi amor descanse.
Quiero luchar quiero amar.
Quiero vivir quiero sufrir.
No quiero pensar quiero actuar.
Y no parar, no descansar, solo luchar.
Para poderte amar.
Y así conquistar lo que quiero de
verdad.
Y así poder abandonar la soledad.
Quiero vivir junto a ti.
Quiero compartir junto a ti.
Pero yo ya morí.
Y te voy llamando a golpes de silencio.
Ven te digo.
Ven conmigo.
Contigo estoy creando mi eternidad junto a mi soledad.
Muerto en pie.
Con delirios de agonía mi sinfonía.
Hiriendo el ansia mía.
Tú qué quieres y que vives no me olvides.
Seré tu dulce amante invisible desde el otro lado para dormir bajo tus brazos.
Vine a por tu beso solamente.
Quiero que guardes tus labios por si vuelvo.
Solo espero que llegue el momento en el que volvamos a ser uno juntos de la mano.
Sueño sin fin.
Sueño del que no quiero mi despertar.
Siento que me sientes.
Veo que me ves.
Quiero que me quieras.
Amo que me amas.
Sueño que me sueñas.
Miro que me miras.
Ojos que hablan de cómo te sientes.
Sueños sin realizar.
No es más fuerte el amas veces se cae
y se levanta sino el que nunca llega a caerse.
Yo morí depile mirando al cielo.
Con mi cigarro en la boca dije:
No me matareis como a un cordero solo moriré como yo quiero.
Empotrado en el paredón ahí morí de pie.
De la tierra donde morí nació una espiga roja y negra.
De la pólvora y la sangre mi bandera.
Las voces de muerte cesaron solo un resplandor en el cielo se vio,
Fue mi amor que escapó de mi cuerpo y se llevo mi alma.
Historia imposible de acabar.
Corazón bohemio falangista hoguera de sentimiento.
Incombustible hasta en la muerte.
Tú llenaste mi corazón de alegrías y amor.
No pararé hasta que seamos uno.
Tu flor de mi vida, que has enraizado profundamente en mi corazón,
Corazón de bohemio.
Amor sincero.
Amor de una vida.
Locura de amor.
Loco de amor.
Muerto de amor.
Simplemente te veo, cierro los ojos y estas aquí en mi interior.
Como un recuerdo imposible de borrar que me hace soñar y volar sobre
mis ilusiones muertas como yo.
¿Qué quieres que te diga? si lo único que quiero decirte es que te quiero.
Y que lo seguiré haciendo desde esta eternidad en la que estoy atrapado.
Simplemente te veo.
Simplemente te siento.
Simplemente te escucho.
Porque ahora vivo en tu corazón.
ESTEBAN EL CASTELLANO
11
Amor de una vida o de un minuto
Tú la flor más bella que vieron mis ojos.
Amor de una vida cariño profundo y sincero
siento, profunda admiración que tengo.
A esta chica tan bonita
y linda de sentimientos y corazón
tan fuertes y puros
como agua de manantial.
Tu sonrisa ilumina mi vida.
Tu pelo como el azabache.
Tus ojos marrones.
Que valen millones.
Tu cuerpo que me hace estremecer
y caer en un profundo sueño
en el que hacemos el amor
toda la noche
en una habitación llena de rosas y de velas
Mi sentimiento por timón.
Mi amor por bandera.
Eres un ángel caído del cielo.
Te amo como los árboles al bosque, como los
pájaros al cielo.
Como los peces al agua.
Te necesito para vivir.
Sin tú moriría por dentro.
Sin tu cariño no soy yo.
Sería un ser sin alma.
Tu as llenado mi corazón de alegrías y amor.
Te amo profundamente
Pero sólo te conozco de un mes imagínate
cuando pase el tiempo.
No pararé hasta que seamos uno.
Tu flor de mi vida,
que has enraizado profundamente en mi corazón,
corazón de bohemio ni duermo y fumo hasta matarme.
Te quiero y lo seguiré haciendo
hasta que la vida y la enfermedad me lo impida.
Te necesito.
Eres mi vida y sólo te conozco de un día.
Eres la luz de mi día.
Que me alumbra el camino a tu vida y tu alegría.
Corazón puro y noble como el mío.
Corazón bohemio, corazón noble y leal que palpita agitadamente cuando te veo.
Amor sincero.
Amor de una vida.
Locura de amor.
Loco de amor.
Enamorado de la vida y de ti.
Gracias por hacerme el hombre más afortunado de la tierra
por tener tú cariño y respeto.
Tu cuerpo me hace estremecer y sudar como tus ojos un universo en ellos donde me pierdo.
Tus labios que besaría un día entero sin descanso.
Amor de una vida, amistad profunda como nuestro cariño y Amor.
Tu que me has alegrado la vida.
Que has hecho que desaparezcan mis penas de enfermedad crónica e incurable.
A tu lado no tengo miedo a nada.
Porque tengo tu amor.
No tengo miedo a caminar sólo por la vida porque te tengo aquí en mi corazón, en mi sangre
, en mis venas, en mi cabeza y pensamiento.
Tu amor de una vida o de un día.
Quiero conocerte.
Para amarte más y más.
Para quererte más y más.
Para que grites de placer,
que estremezcan tu cuerpo y piernas.
MIGUEL-ESTEBAN "EL CASTELLANO" "ESTEBAN DE CASTILLA"
12
Poema sin titulo
Te amo no sabes cuánto.
Cierro los ojos y te veo
conmigo juntos de la mano paseando,
yendo al fin del mundo juntos.
Paseando bajo la luz de la luna.
Tu sonrisa es el mayor de mis regalos,
tus dientes son diamantes que hablan de
como tu sientes.
No quiero mi despertar
si no es para verte a mi lado
acariciando mí pelo,
diciéndome al oído te amo.
Esta noche podría escribir los versos más tristes
porque no estás a mi lado.
Siento cuando discutimos
y no lo aguanto.
Vuelvo a nacer cuando me dices te quiero,
a cada instante pienso en ti.
Ahora ya eres parte de mí.
El mundo m parece un infierno si no estás a mi lado.
Tu cuerpo es un pecado.
Tu sonrisa el mayor de los regalos.
Estoy preparado para amarte.
Esto dice mi pensamiento:
No tengo miedo porque estas a mi lado.
Cuánto daría por coger
Cuánto daría por coger
Las estrellas del firmamento y ponerlas a tus pies.
Siento que te siento,
veo que me ves,
miro que me miras,
amo que me amas.
Sin ti no soy yo,
Sin ti siento que mi alma me abandona.
No quiero decirte cosas bonitas para nada.
Sólo para que veas que me tienes loco,
que sacas lo mejor de mí,
que me has alegrado la vida.
Sé que me amas,
sé que te amo, y que
sin ti no soy yo.
Confío en ti
porque tú lo haces en mí.
Yo no te fallaré porque te amo y lo sabes.
Sólo tienes que ver todos los días cómo te amo.
Sin otra vida y objetivo que hacerte feliz.
Sin otro objetivo que me digas te amo.
Te quiero.
Eres todo para mí.
Esto que sale de mi corazón quiero decírtelo
todos los días.
Eres mi sol.
Eres mi amor.
Eres mi religión.
No quiero perderte nunca.
Me atormenta pensarlo.
Siento que cada día estoy más enganchado a
Que cada día que amanece mi amor por ti crece
No importa nada solo el final del camino
Que es llegar a tu corazón.
Me haces estremecer ciento como mi mundo interior enloquece,
Me cosquillea el estomago como cuando te vi por primera vez,
Si te digo que sueño contigo casi todas las noches
No exagero hasta sueño despierto cuando estoy contigo.
Por soñar soñé en robarte un beso.
Por soñar soñé en no herirte el sentimiento.
Por soñar soñé en crear un firmamento.
Por soñar soñé en que tu me querías y que te venias conmigo siempre a la velita mía.
Y mira lo que me ha pasado.
Mira lo que me ha pasado.
Que por querer soñar contigo de ti yo me he enamorado.
Eres sueño eres mi dormir, tú lo eres todo para mi
Que dolor más fuerte siento yo, que dolor mas fuerte siento yo en mi corazón, seguramente porque te estoy queriendo perdido en la razón.
Yo nací para tus ojos para nadie más.
Quieres saber la verdad me has alegrado la vida.
Has llenado mis ojos de esperanza de un futuro junto a ti.
Perdona si a veces te lastimo.
Si alguna vez te hago daño no es mi intención y nunca lo será.
Esto no es un poema es una hoguera de sentimientos que arden en mi interior.
No soy especial soy de carne y hueso y cada célula mía se muere por ti.
Te deseo y
Siento que mi cuerpo te llama cada noche,
que cada parte de mi cuerpo te extraña cuando no estás conmigo.
Que cuando me levanto y no te veo me pongo triste.
Te guardo un lugar en mi cama todas las noches para no sentirme solo y en mis sueños te llamo.
El ser humano nace, ama, lucha y muere.
Yo lucho, te amo y me muero por ti.
Tú eres el timón que guía mis pensamientos,
eres mi estrella en el firmamento,
el sol que me alumbra en la mañana.
Te quiero.
Te quiero.
Te quiero.
Te quiero.
Te quiero.
Te quiero.
Y lo haré hasta que me quede sin aliento
Te amo.
Cada día que amanece mi amor por ti crece.
Esto es lo más grande que me ha pasado en la vida.
Mi amor por ti es sincero.
Yo soy sincero.
because i love you so so much i'm writting to you
when i'm alone i hear you in mi mind saying i love you dont worry miguel
i am with you and dont be afraid i will be with you forever
when i close my eyes i see you.
what do you want that i tell you? if the only thing that i want to tell you is that i love you
i like you every part of your body gives me crazy you eyes your eyes, your red hair
that i want to touch every time, your lips that i want to kisss one and one time your voice like an angel
when you say to me that you love me i feel that i fall in love again ,my body suffers from tickling
when i fall in love i want to make all your dreams come true
i want to make love with you every night and day
every second i think of you
you are all you are like a dream you are my dream you are all for me
i give you all of my soul
if someone gives me to choose between your life or mine i will choose mine because you are my life
i will take the moon down for you
and rise you up
to the numbs.
Esteban el castellano
15
Insomnio de amor
Mi soledad sin descanso.
Ojos chicos de un cuerpo.
No se cierran por la noche
Ni miran otros lados
Donde se alejan tranquilos
Sueños de trece veleros
Que navegan en el inmenso
Océano de tu amor.
Navegando con la brújula
De tu corazón,
Tu sonrisa de astrolabio.
Limpios y duros escuderos
Desvelados.
Mis ojos miran un norte
De metales y peñascos.
Donde mi cuerpo sin venas
Consulta naipes helados.
El tarot de mi amor y sentimiento.
Los martillos de mi cabeza cantaban y sonaban como un taladro
Sobre los yunques sonámbulos y despiertos de 6 días sin dormir.
El insomnio de este marinero
Sin mar y sin barco.
El insomnio del caballero sin escudero.
El insomnio del jinete sin caballo.
El insomnio del bohemio maltratado
Por el tiempo y la vida.
El insomnio del soldado en la trinchera
esperando, viendo la muerte
Pasearse por el campo de batalla.
La noche me llama temblando.
Escalofríos me hacen temblar con alarido interno.
¿Qué quiere de mí, qué quiere de mi, amor?
Nadie responde.
Voces de muerte cesaron.
Solo un resplandor en el cielo se vio,
Fue mi amor que escapó de mi cuerpo
Y se llevo mi alma.
La pena negra como el carbón brota
Como cenizas que se consumen quemando mi sangre.
Alquitrán brota por mis venas.
Después del Fuego de nuestro amor
Quedaron las cenizas sin apagar.
Soledad ¿qué pena tienes?
Que oscureces y nublas mi pensamiento.
¿Qué quieres de mí?
Que me maltratas sin descanso.
Noche lúgubre y umbría.
Contemplando mi cuerpo desnudo
En la penumbra.
Pasa mis nervios, con gozoso frío,
El arco de lunático violín.
Los fantasmas de mi cabeza cantaban
Con delirios de agonía mi sinfonía,
Hiriendo el ansia mía, aumentando mi ira cada día.
Muerte ya vienes a por mí y no perdonas.
Muerto por amar y no ser correspondido.
Muerto en la soledad de mí cuarto.
Sin mas compañía que un rosario y un viejo crucifijo
Dios me ha dado de lado y ha permitido que me convierta
En un muerto en vida.
Va mi barca por el ancho río
Que divide un confín de otro confín y me pregunto:
¿Por qué me agotas con las penas que requiere el corazón?.
¿Por qué me haces sentir que no te merezco?, que soy un ser despreciable del cual te avergüenzas.
Me miro al espejo y no me reconozco te has llevado mi alma.
¿Qué motivo tienes para hacerme daño?,
Y maltratar mi pensamiento y mi corazón.
Que es puro como el agua del manantial de la vida.
¿Qué motivo tienes para no darme la felicidad que tanto ansío?
Quiero morir a tu vera.
Sólo contigo compartiría mi vida.
Quiero ser el que te despierte con un beso.
Quiero hacerte el amor hasta que
Nuestros cuerpos sudorosos
Caigan rendidos en un sueño de reyes y princesas.
Un sueño de reinos idílicos a los que viajamos todas las noches.
Tú montada en mi potro de nácar que te hace gemir y que por hombre
No quiero decir las cosas q te hace q me digas.
Juntos de la mano.
Sueño sin fin
Sueño del que no quiero mi despertar
Si no es para abrir los ojos y verte a mi lado.
Dime las penas que requiere este amor que
Yo ya las pase todas.
Si amar es sufrir yo he muerto por ti mil veces
Y he resucitado otras cien.
Recuérdame por lo que fui no por
Lo que soy ahora y el monstruo en el que me he convertido.
Recuerda que solo tú tienes la llave de este amor
Que arde en mi interior.
Sólo tú puedes avivar este fuego.
Pero tú no entiendes de amor.
Juegas y maltratas este corazón de pobre enamorado.
Solo entiendes de desprecio hipocresía y falsas ilusiones
Para ti todo esto es un juego
Para mí esto es lo que da sentido a mi vida
Y a mi existencia.
Un amor que me absorbe por dentro y se come mis venas.
Que contamina mi sangre y mi pensamiento,
Que me hace ser un muerto en vida.
Un zombi sonámbulo con
Vino por sangre y pulmones llenos de humo de
Noches enteras sonámbulas fumando
Cigarrillos del diablo.
En la oscuridad de mi cuarto te oigo hablar
, voy a abrazarte pero solo eres humo
Y te esfumas sin permiso
Yo creo que me estoy volviendo loco
Por quererte perdido en la razón.
¡Ay amor, ay amor!
¿Por qué juegas y maltratas este pobre corazón?
Un sin vivir.
Un muerto viviente
Que en vez de alegrías se tortura el corazón
Y el pensamiento.
¿Por qué te olvidaste de mí
cuando enloquecí de amor?
Yo vendería mi alma por poder olvidar,
Tanto sufrimiento,
Pero tú fuiste la única que me hizo feliz y a la vez
La que me ha matado.
Nunca podre olvidarte ni bebiéndome todo el alcohol del mundo.
Quizás tendré que vivir con esta daga en el corazón toda mi vida.
No entiendo ¿Qué he hecho yo para merecer
el mayor de los castigos?
Que es tu desprecio y tu poca consideración
Hacia esto que llevo dentro y me corrompe el corazón.
No creíste que mis sentimientos eran tan puros
Como el agua del pozo de los deseos
Al que tiré una moneda pidiendo tu amor.
Después de romperme el corazón en mil trozos
Cada uno llorando y gimiendo de dolor
Tú eres libre como un pájaro
En mi mente tengo un pensamiento:
-si amas algo déjalo libre, si vuelve a ti es que
Te pertenece si no vuelve nunca te perteneció.
Tu has vuelto a mi no sé si a volverme loco
O a quererme y amarme como en un principio
No valen ni mil perdones.
El daño ya está hecho a este corazón tan noble
Y leal como fue mi amor por ti.
¿Qué quiere de mi, amor? que juegas
Y maltratas a este pobre corazón.
¿Qué quieres de mi, amor?
Volverme más loco q la locura
Hacerme sufrir como un mártir lapidado
Y apaleado hasta la muerte
.
En la lápida pone aquí yace mi amor por ti.
Quemaste mi corazón con tus palabras.
Que fueron trozos de metralla que tengo clavadas en el pecho.
No tuviste consideración ninguna hacia mí ni hacia lo que sentía.
Si me dieran a elegir entre tu vida y
La mía elegiría mi vida porque mi vida eres tú.
Te amo como las flores al campo.
Te amo como los pájaros a los arboles.
Te amo como los peces al agua.
¡TE AMO!
Y lo hare hasta que la muerte me lleve y cuando este muerto
Mi corazón seguirá llamando gritando tu nombre
Y buscándote sin parar hasta que 15.7
volvamos a estar juntos.
Si amar es morir por dentro por no tenerte
Ni mil infiernos son comparables con lo que tengo
En mi cabeza, que me hacen verte en mi cuarto,
En mi cama, bajo mis sabanas, siento tu calor
Pero cuando amanece la fiebre y la locura cesa con ella.
Te quiero y te seguiré queriendo hasta que me muera.
Te amo,
Como al que le han arrebatado un trozo de corazón
Y se ahoga en su soledad.
Pero no sé cómo hacer que creas a este loco enamorado
Que pasa noches en vela llamándote
¡Pero tú no vienes y no vienes, no vienes, no vienes!
Y tú no vienes, no vienes, no vienes.
AY Que dolor más fuerte siento yo
Que dolor más fuerte siento yo en mi corazón.
Seguramente porque te estoy queriendo perdido en la razón.
Sea lo q sea te quiero y voy a hacerte gritar de placer.
Loco de amor.
Locura de amor.
Hoguera de sentimiento.
15.8
Estufita ardiendo que tienes entre tus piernas
A la que meteré un tocón de roble bien vivo
Que te hará arder y del que brotará savia.
Insomnio de amor.
Mi soledad sin descanso.
Ojos chicos.
Solo ven un norte.
Tus labios son como pétalos de rosa...
Se divisa tierra en esta larga travesía hacia
Las entrañas y los confines de tu amor.
La tierra prometida,
Tus senos de montañas que guardan el tesoro
De tu corazón.
Tus ojos las estrellas del firmamento,
Tu cuerpo tan bonito y bello es mi droga
Que me hace que caiga inconsciente cuando te veo.
Que me hace sudar sólo de pensar en tenerte.
Tú la mujer más bella
Que tienen vista mis ojos.
Tu amor de UNA NOCHE O DE UNA VIDA
¿Qué quieres que te diga?, si lo único que quiero decirte
15.9
Es que te quiero y que no descansare hasta que estemos juntos.
Que me maten si yo te hago sufrir,
Que me maten si yo te hago daño,
Que me maten si yo te lastimo.
Si no me correspondes en vida ya te buscare cuando me muera
Para seguir enamorándote
16
PRIMAVERA
A ti te escribo primavera,
Tú que llenas de vida el campo.
Pones los campos en flor y verde.
Tiñéndolos de color.
Los pájaros silvestres anidan en
Las ramas de tus arboles, dan de comer a sus pachoncillos
Y trinan como nunca antes del alba y después.
Los animalitos nocturnos también salen a cazar
, murciélagos, mochuelos y lechuzas más en esta época
Que hay más vida y alimento.
Los erizos salen de su letargo invernal a cazar caracoles e insectos
Y frutas silvestre.
A ti primavera te canto que llenas de vida el campo tiñéndolo
De color y vida.
Esteban el castellano
17
POEMA AL ALBA
A ti te escribo que con los gorgojeos de los pájaros
Ven salir tus primeros rayos de sol que iluminan la tierra
Y los campos.
A ti te canto luz del alba.
Ruiseñores, jilgueros y demás pájaros silvestres gorgojean minutos
Antes de ver tus rayos.
Yo veo tus amaneceres azulados y tus puestas de sol rojizas nunca
Me he perdido una.
Quizás soy un loco bohemio que no duerme porque está enamorado
De tu naturaleza.
Esteban el castellano
18
NOCHE LUGUBRE Y UMBRÍA
A ti noche oscura te escribo
¿Por qué no me das el sueño que tanto ansío?
Paso noches enteras de insomnio escribiendo poemas hasta
18.1
Enloquecer llevo ya 5 días sin dormir y veo q se van
Mermando mis facultades mentales y escribo frases sin sentido
Garabatos en hojas de papel
Me asomo a la ventana y contemplo las sombras de la noche como fantasmas deambulando sin rumbo
Mientras apuro la botella esperando matar esos fantasmas de
Mi cabeza que suenan como delirios con sus voces.
Me estoy volviendo loco.
Solo veo sombras y figuras que se dibujan en tu oscuridad como
Demonios.
Sólo los gatos y lechuzas salen a cazar como los murciélagos.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo que bajo tu protección
De tu oscuridad ven salir los ladrones y asesinos a hacer sus acometidos
De muerte y delito de acero y sangre.
A ti noche lúgubre y oscura te escribo.
Tú que no entiendes de genocidios ni de muerte ni de fosas
Comunes selladas con cal y tierra ni de fusilamientos.
Tu solo ciegas la luz del sol y solo el fuego y los fusiles iluminan
Tu oscuridad.
ESTEBAN EL CASTELLANO
19
Canto a la fuerza de la naturaleza

¡Oh lluvia!
¡Oh tormenta!
Que con tus rayos
Iluminas la oscuridad
De la noche.
Fuerza devastadora
Que desola regiones
, incendia bosques,
10.1He inunda vastos territorios.
Fuerza celestial
Rayos cargados por Zeus.
Nubes negras y densas,
Vientos devastadores,
Que arrancan arboles enteros.
Granizos que arrasan cosechas,
Tejados y persianas.
¡Oh temporal! que sacudes con violencia
La mar y los barcos de los hombres,
Hundiéndolos y llevándote sus vidas
Al fondo del océano.
¡Oh fuerza de la naturaleza!
Que llenas de vida y destruyes
A la vez.
Fuerza devastadora y vital.
Fuerza destructiva y magnífica.
Que contigo no puede el hombre ni
Con sus diques ni con sus presas.
Tu agua corre sin descanso por la tierra
Anegando y llevándose todo a su paso.
Tú no entiendes de bien y de mal.
Tú sólo surges como la noche o el día,
Como la brisa y los vientos.
Sin arrepentimiento ni conciencia devastas y
19.2
Arrasas.
Y el hombre que se ha creído todopoderoso
Siglos y siglos no puede contigo.
Naturaleza grande y hermosa pero mortífera
A la vez.
A ti te invoco con este poema
Para que alivies la sequia que corre por España
Por sus parajes y páramos España te necesita.
La tierra te necesita, el campo te necesita.
Los bosques te necesitan.
El hombre te llama a gritos y mira
A los cielos con la esperanza de que llueva
Para aliviar su sed.
Agua de vida, agua que da vida.
Agua que forma nuestros cuerpos y tejidos.
¿Qué seremos sin ti?
Si no riegas nuestros campos y ríos.
Moriremos por maltratarte y contaminar
Tu atmósfera.
Han llegado nuestros días hemos acabado
Con la selva, tu pulmón.
Hemos derretido glaciares y los polos con 19.4nuestra
Soberbia.
Y con nuestro pensamiento de que tus recursos
Son ilimitados.
Pobre ser humano que con su ignorancia se ha
Cargado el planeta.
Te ha maltratado hasta dejarte sin árboles y sin bosques.
Tus océanos sin peces.
Ya no llueve como antaño.
Hemos cambiado el clima.
Dios se está vengando del hombre.
La vida volverá a surgir después del hombre.
El hombre ha destruido su casa y todo lo que le rodea
Sin conciencia alguna.
Sólo sobreviviremos los hombres de Dios
Que vemos la naturaleza como obra suya
Y que la cuidamos y respetamos como don divino.
Perdona al hombre que ha destruido y asediando
Tu creación.
Yo a ti te invoco naturaleza celestial.
19.4Naturaleza divina.
Haz que llueva sin descanso
Esteban el castellano
20
ODA A LOS CAMPOS DE CASTILLA

¡
Oh viejo encinar! que llenas de vida los vastos paramos de nuestra geografía.
Que bajo tus veredas han visto la vida infinidad de seres vivos
Y hasta has dado de comer a hombres y animales.
¿Qué pena tienes que mueres sin ninguna explicación?
Por la mano del hombre que ha contaminado tu tierra,
Ha explotado tus recursos hasta ahogar la tierra que te vio nacer.
¿POR QUÉ mueres tu? que Has sido tan 20.1
noble.
El águila imperial
Ya no vuela sobre tus cielos.
La sequia se ha apoderado de tu tierra.
Haciendo asesinar tus raíces con hongos
Que te matan por dentro.
¿Qué penas tienes? cuéntame.
Tú que has visto crecer al hombre por varios siglos y que fuiste su pan de cada día.
¿Qué penas tienes? para morir sin explicación.
El hombre te libró de los incendios limpiando el monte,
Pero te ha matado contaminado el aire que te rodea.
Tú que vives siglos y siglos y das cobijo a numerosos animales,
¿Por qué mueres sin explicación?
Los campos de castilla te necesitan.
Pero ya es demasiado tarde para ti el hombre te ha dado muerte
Con su avaricia y sin ningún arrepentimiento te ha matado.
No solo eres un árbol eres un ser vivo creado por Dios.
Como el hombre y como tal es nuestra obligación ayudarte a hacer que crezcas Sano y fuerte.
Pero ya es demasiado tarde para ti.
La vida se te escapa fugaz y con ella toda la fauna a la que das cobijo y sustento.
Cuando el hombre se mate por destruir el planeta en el que vive volverás a nacer.
Y la vida seguirá su curso sin el hombre.
¿Qué penas tienes? que mueres en soledad y en silencio.
Tus hojas caen mustias y abatidas, tú que has sido
Emblema de castilla, orgullo de jóvenes y viejos.
Te mueres sin explicación alguna y el hombre no puede hacer nada
Por ti.
Gracias a ti el Imperio del sol vio nacer su armada invencible
Y sus galeras de remos, un imperio con tan
bastos dominios
Que no veía ponerse el sol.
El hombre que con tanto esmero te cuidó y taló con sus manos y brazos
Tus ramas muertas, ha modificado la atmósfera y ya no llueve sobre tus campos y páramos.
Los olivos te toman el relevo.
Te talan sin compasión para sacar madera y tierra de cultivo
¡Oh viejo encinar! vereda de la infantería española que saco tu madera para librar ardua batalla contra turcos donde cervantes perdió el brazo y también para la armada invencible.
¿Qué penas tienes? cuéntamelas que el hombre no te escucha.
Ya no hay mochuelos, ya no hay águilas volando y anidando en tus ramas.
¿En qué monstruo nos hemos convertido? para hacer daño a la madre natura.
Que nos da cobijo y alimento.
Ya no llueve como antaño.
Los ríos se secan los embalses se vacían, los peces se mueren.
Contaminamos nuestros ríos.
Fumigamos con herbicidas que van a parar a la tierra
Y al agua de los ríos matando y asediando al cangrejo autóctono y a infinidad de peces,
Que la península Ibérica vio nacer en abundancia.
¿En q monstruos asesinos nos hemos convertido?
Cuéntame tus penas que yo me las sé todas.
Hemos traicionado nuestra naturaleza.
Nos hemos convertido en viles asesinos de vida.
La única fauna que llegaremos a ver serán las granjas de pollos
¿En qué nos hemos convertido?
Ya no somos humanos somos monstruos.
Ya no quedan humedales, los pájaros migratorios pasan de largo
Al volar sobre España
Tú que has visto nacer al hombre y ahora se ha vuelto contra ti
Y te mata y mueres en silencio.
La tierra grita, tus raíces gritan, tus ramas gritan pero nadie lo oye.
Somos hijos de Dios pero los animales y los bosques también.
Dios se avergüenza del hombre y del monstruo que ha creado
Ya nos castigará.
Pero tú te mueres sin remedio.
Y contigo la conciencia y el alma del ser humano.
MIGUEL ESTEBAN "EL CASTELLANO"
21
POEMA A MI AMOR
A la chica más hermosa del mundo.
Rosa de mi corazón, clavel de mi jardín.
Te quiero como los caracoles a las plantas,
Te necesito para vivir.
Sin ti soy un ser sin alma.
Te quiero y quiero que te pongas bien
Lo antes posible.
Para poder ser tu novio si tú quieres.
Hoy me dijiste que me querías.
Hoy me hiciste el hombre más feliz del mundo.
Te quiero y no descansare hasta que te recuperes
Y estemos y seamos uno, yo te cuidare,
El otro día me pediste que te diese de comer.
Te doy las gracias por quererme
Y confiar en mi amor.
Luz de vida luz de mi vida.
Corazón de mi corazón.
Alma de mi alma.
Tú linda tu hermosa
Tu corazón de mi corazón.
Te amo y te deseo.
Las estrellas te tienen envidia
De ser tu más bella q ellas.
Tu pelo moreno, tus ojos azabaches,
Tu cuerpecito delicado.
Que a la vez me hace estremecer.
Tus dos besos que me diste me llegaron al alma.
Ya sé que no estás bien pero esos besos
Y amor fueron sinceros.
Te quiero como las mariposas a las flores
Te necesito para vivir.
Hoy vi cumplido mi sueño te besé
E hizo el amor contigo.
Yo no me creía aquello
Y tú gemías de placer
Y te movías de adelante
Hacia atrás con fuerza.
MIENTRAS ME DECÍAS
AL OÍDO QUE ME AMABAS.
Tus ojitos marrones que
Valen millones color aceituna
De un campo celestial
Que es el de tu mirada.
Tu pelo negro que acariciaba
Y acariciare sin descanso.
Tengo hasta envidia del aire cuando
Lo roza y mueve sin permiso.
Tú la chica más bella yo,
Un bohemio rubio de ojos claros.
Te daré mil abrazos fuertes para contagiarte
Mi amor y sentimiento que son inmensos por ti.
Te amo como las amapolas al campo,
Como los rayos a la tormenta,
Como la lluvia a las nubes
Como la nieve a las montañas,
Nos necesitamos y
No podemos vivir lejos el uno del otro
, por lo menos eso siento yo.
Siempre estaré a tu lado
Si me dejas ser tu novio.
Te quiero, te quiero, te quiero, te amo, te amo, te deseo
Sobran las palabras mi amor y mirada lo dicen todo.
Quiero ser tu novio para hacerte la chica más feliz
del mundo y hacerte gritar de placer como ya hice una vez.
ESTEBAN EL CASTELLANO
Poema en recuerdo de la primera vez que hize el amor, en recuerdo de Ángeles
Chica preciosa que conocí en mi primer ingreso hospitalario en la planta de psiquiatría
Del hospital universitario de Alcalá de
Henares.
Corazón
Nube
Lágrima
Sensación
Exhibicionismo
Criatura
Mirada lasciva:
la noche incitaba a la pasión era luna llena, mis pelos erizados por la suave brisa q movió tu pelo lo q me permitió ver tu sonrisa, fue tan tierna q me se erizó otra cosa tb, tu culito redondeado con esos vaqueritos apretados q marcaban tus braguitas, tu mirada inocente y tímida, tus labios carmin, en tu boca todas las flores, mi lengua saboreando tu carmin sabor a fresa, tu acariciándome, tus ojos mirándome lascivamente como una vampiresa apunto de morder, empezaste a morder mi cuello suavemente, con tu lenguita definiendo el chupetón, llegas a mi oreja, empiezo a sentir una sensación de cosquilleo q me recorre todo el cuerpo, tu aroma entrando en mi interior, mis cerdomonas emanando por todos los porros de mi cuerpo, mis vaqueros desabrochandose solos por la presion vascular y arterial de mi revolver, ahora es mi momento, bajo con mi lengua por tu cuello dandote besitos y haciendo ventosa, te bajo los tirantes mordiendolos, te desabrocho el sujetador y sigo bajando con mi lengua y hago el circuito de tus curvas terminándolo con el freno de diente mordiendo tu pezón, tu empiezas a acariziarme el revolver suspirando levemente con un gemido q bombeó más sangre a esa zona q acariciabas, fui acariciandote suavemente todo tu cuerpo, te desabroché el primer botón de tus vaqueros y deslice mi mano lentamente hasta palpar el segundo tipo de labios q tienen las mujeres y contemple como cerrabas los ojos y te dejabas llevar por el placer gimiendo tiernamente llegaron las 12 y me transforme en una criatura medio hombrelobo medio vampiro devorandote en la hierba a la orilla del río,seguro q estábamos haciendo un show de exhibicionismo para algun mirón con camara de visión nocturna, pero aquello fue como un sueño que lo hubiesen rebovinado hacia adelante y todo lo q deseaba surgía cada vez más rápido.
Tu cuerpo me volvía loco y aquella lágrima mia de todo mi sufrimiento se borró de mi cara aquel día, se convirtió en placer, en sentimientos q recorrían todo mi cuerpo como una droga, tus besos eran como una nube de algodón de azucar y jamás los podré arrancar de mi corazón.Te quedaste dormida en mi hombro y desaparecí entre la tiniebla, de vuelta a mi cueva y a mi triste realidad.
ayy tabaco ay q poco te conozco
tu aumentas mi dopamina
y tienes penas y alegrías
vas matando poco a poco
pues es la sed de tu vida
cientos y cientos de tus camaradas fitillos
caen chusteros y muertos en ceniceros
genocidios cometen contigo
pero tú no te dejas intimidar
esperas años tu vengaza y cuanto más pasa
mayor va siendo tu rabia,
recuerdas con nostalgia a tus compañeros
caidos en batalla y asfixias a los culpables
con cables trenzados de benceno, nitrosaminas.
formaldehído, cianuro de hidrógeno...y otros tipos de veneno
hado vestido de monóxido de carbono
¿por qué tengo tanto mono?
vas matando poco a poco
pero a ti nadie te comprendee
eres como un duendee
mas te quiero dejar pero me arrastras no me dejas
tú eres peor q otras drogas
tú matas a lo grandee
con suspiros de monoxido, oxido creas en células
como cualquier droga aumentas la dopamina
pero yo no quiero tener ninguna mina
ni refinería.
como célula de dragon ball chupas mi aire
con tu aguijon,
pinchando en mi pulmón.
yo quiero escapar de ti
y no va a ser con parches de nicotinell
pues no soy de caravanchel
va a ser que no
va a ser con fuerza de voluntad
va a ser q soy de alcalá de henares,
donde 4 huevos son 2 paress
árbol
toalla
rinoceronte
prepotencia
caspa
silla
Hysteric Ego:
Me dejé las uñas largas como las alimañas
para trepar y escalar ese árbol que me llevaba
hasta el cielo, el de mi prepotencia,
trepaba y trepaba con rapidez
como si llevase un motor bmw
de varios rinocerontes de potencia,
llevaba también aire acondicionado
a condición del tiempo que hacía fuera
así que iba secándome el sudor con la toalla
que le chingué a Soraya en la playa,
pero por el ascenso me rayaba,
pensaba: -puta caspa, me pica la cabeza
y no me puedo rascar con las dos manos
que es como mas gusto da y encima el HS genera
calvicie y no sea que tenga mala suerte
y en la copa del árbol esté un empresario
sentado en una silla esperando un curriculum mio,
y piense este tio cómo puede ser tan guarro que no sólo
no se corta las uñas si no que además no se lava el pelo.
En una rama encontré un supermercado, un arruinamás,
después de cobrarme más de un pavo por una mierda
de redbull le dijé a la cajera:-quedate con las codornices
del cambio cosa de lo que más tarde me arrepentiría.
Ya después de repostar seguí escalando y me encontré una
club nocturno en otra rama era el african queen dije bueno
habrá que pasar a ver que tal y pascual, me dice un chica
muy guapa: Hola guapo tomate una copa conmigo,
le digo -vale cuánto es la copa¿?
30 euros la mia y 10 la tuya
le digo -vale entonces me pido dos para mi y tú te bebes una si quieres,
veo como se empieza a mosquear y le cambia el color de la cara,
digo bueno me voy que solo tengo 25 pavos, sigo trepando,
y llego a la copa
y veo a Dios y al diablo echando un tute apostandose
el control del mundo y fumándose a María me quedo pensativo:
-yo creo q al tute también se juega de tres no¿?
lástima que no tenga suelto para un chicle si no también me fumaba
a la María..
entre problemas di lo mejor de mi
entre problemas te di toda la pasión que este corazón incombustible pudo dar
entre problemas te di todo mi amor
desde el primer día te di lo mejor de mi
hasta mi sangre te di
desde el primer dia subimos al tren de alta velocidad todo era pasión desenfrenada
pero los problemas surgían a la misma rapidez
y desaparecían dejando otra ruta de desenfreno
pero con el muro de las dudas choqué
y me estampé
dudas si me querías, si merecía la pena seguir con aquello
con aquello q me ahorcaba el cuello
pero que en la cama me dejaba sin aliento
aquel tren se estrelló o lo estampé yo
pero seguire pensando en aquello.
cuanto desearía volver atras en el tiempo y cambiar mis actos
cuanto desaría no pagar las consecuencias de mis actos
cuanto desearía revivir aquellos momentos buenos día tras día
cuanto desearía no madurar con palazos en la cabeza,
si no reflexionando.
cuanto desearía no ser un rayao y olvidarme de todo mi pasao
aprendiendo no torturándome.
cuanto daría cuanto daría por coger las estrellas del firmamento
y ponerlas a tus pies.
cuanto desearía poder olvidar y volver a amar.
cuanto desearía encontrar la alegría y fumar María.
cuanto desearía que mis deseos no fuesen deseos, ni ilusiones
como castillos en el aire, si no algo tangible y palpable, por desear desearía
tenerte a ti en mi día.
__________________
ESTEBANel castellanoMiguelEsteban
el otoño cae frio y austero como afilada guillotina
guadaña de la muerte para ancianos terminales
estación ciclica para recaer en brotes de locura
paranoyas delirantes
ojos inconscientes
miradas subyacentes
hojas caen vidas pasan de largo
sin mirar atras
refugio del aislamiento
vidas precintadas en bolsas al vacío
hoy contemplo como no soy el único secuestrado
x las circunstancias y veo desde donde me refugio en mi
cabeza como van muriendo otros
bolsas en sus cabezas
estrangulamientos que no paran, otros,
murieron ahogados x sus circunstancias pero no se q sera de mi
quizas precinte mi cabeza para mandarla a otro país
me enciendo un cigarrillo en esta bolsa al vacio de congelados q es mi cabeza y una tenaza ardiendo sale corriendo
me mimetizo con el entorno como los camaleones
pero esta vez estoy rodeado de dementes
esto es el manicomio
el demonio me mandaba como un astemio en
el pensamiento empobrecido,
eterno en este cáos de degollado vivo
tengo cuerpo y corazon bombeando alquitran
pero es como si me faltase algo
quizas seas tu
o mi alma
o mi cerebro
pensamiento fragmentado viene como un rastro de lucidez
en el vacío de mi cabeza, bloqueo mental
sinestesia global
cerebro ¿q vamos a hacer esta noche?
-lo q hacemos todas las noches pinki:
Tratar de conquistar el mundo
__________________
musica demencial rima secrecial
esto no es un poema
es un pensamiento aturdido
secuestrado y asesinado en la
oscuridad de un zulo de E.T.A
pero su espiritu se bajo la bragueta
y se la comieron todos los días
esa fueron sus condenas
por nenas
fuck off E.T.A!!!
If u think its too hard fuck you!
si sois tan valientes xq no matais con los puños
a mi me sobraria para acerlo uno x uno con vosotros

y luego os darian misas y homenajes
en el pais vasco
seríais martires absurdos ridiculizados hasta el esperpento
sí me corro en vuestra cara en un momento
__________________
ESTEBANel castellano
17 mayo PRIMER DIA DE INGRESO EN PLANTA DE PSOQUIATRIA atado en una cama con 2 inyecciones de haloperidol de 25 mg 18 de mayo segundo día de ingreso no duermo ni con 50 gotas de rivotril aparte de las 7 pastillas q me han dado 19 de mayo tercer día de ingreso en hospital príncipe de Asturias Alcalá de henares bajada de tensión a 7.5 por tantos hipnóticos, se me administra suero intravenoso y los cuidados de 1 enfermera 20 de mayo 4º día de ingreso planta de psiquiatría estoy agresivo por qué no paran de añadirme medicinas q m provocan pesadillas y alucinaciones, hablo solo atado con arneses a la cama después de pelea con enfermeros y seguridad del hospital balance negro metro 90 ojo morado enfermero patada voladora en las costillas enfermera con gafas rotas celador con dificultades respiratorias por un puñetazo en el pecho 21 de mayo 5dia de ingreso he dormido 4 horas con clónazepam, y diversos neurolépticos 22 de mayo sexto día de ingreso atado con sujeciones a la cama por incapacidad de permanecer en mi habitación durmiendo sólo salí a dar un paseo por el pasillo 2 inyecciones de transición se me administran porque me tire toda la noche dando golpes a la cama.
Suicidio
Miro mi soledad desde la oscuridad.
Hoy cruce al otro lado donde no hay
camino de vuelta.
Hoy abandone mi pasado mi presente y
mi futuro para vivir en lo oscuro.
Un sueño eterno triste y oscuro.
Hoy ganó el demonio y me arrastro lejos
de este mundo para siempre.
Voces de muerte oí y las hice caso ahora me arrepiento,
pero ya no hay vuelta atrás.
Mi vida quedo atrás.
Hoy jugué mi última carta sin sangre en las venas. Desangrado vivo fue mi destino.
Hoy quede atrapado en este mundo vagando
en lo oscuridad de las tinieblas.
Yo quería ver la claridad de la luz pero él me engaño y me arrastró lejos de este mundo para siempre.
Desangrado vivo fue mi sino.
La única luz que vi fue la del fuego donde incineraron mi cuerpo.
Veo la gente pasar pero ellos no me ven.
Quisiera pedir auxilio pero nadie me oiría.
Mi tiempo ya paso.
Ahora estoy atrapado en esta eternidad del limbo,
entre el mundo de lo muerto y de lo vivo.
Esteban er castellano
I need your loving eyes
to keep my soul alive.
No matter where you stay,
I'll always find the way.
When i close to u im in exstasy if u cant fall in love you never be alone the sounds in my mind say the end of dreams shows the love in memories that is music for your eyes .
you and I touch the sky with the fingers of my mind that is music for your eyes
canción q recuerdo en mi cabeza.
Como el agua como el agua clara es tu corazón
Como el susurro del viento
es tu voz.
Como la noche y el dia tu mirada.
Como tu vida es mi vida.
Como tu amistad mi felicidad.
Como tu bondad mi realidad.
Como tú como tú no hay nada más hermoso.
Las estrellas del cielo te miran con recelo.
Y yo con ternura de saber que me tienes aprecio sin mesura.
Esto es música para tus ojos.
Ojos q kiero q se fijen en mi.
Yo solo veo un cielo donde creo mi eternidad matando a mi soledad.
Yo solo veo solución en la duda de una cuestión.
Creo pasión de la desesperación.
Creo cordura de la locura.
Creo en nuestra amistad Monica aunq sea de un par de semanas pero quizás signifique mucho más.
De la rima mi sinfonía queriéndote a ti en mi día.
Creo que mi felicidad ya no es un ideal porq te conocí en el hospital.
As the water as the water clear, your heart
Like the whispering wind
is your voice.
Like night and day your eyes.
As your life is my life.
As your friendship my happiness.
I really like your kindness.
Like you like you there is nothing more beautiful.
The stars of heaven will look askance.
Tenderly And I know that I appreciate you without restraint.
This is music to your eyes.
WHAT I WANT?UR eyes fixed on me.
I just think I see a sky where my eternity to kill my loneliness.
I just see the solution in a matter of doubt.
I MAKE passion and despair.
I MAKE sanity from madness.
I think Monica our friendship WHATEVER a couple of weeks but it may mean much more.
My symphony of rhyme WANTED you in my day.
I think my happiness is not an ideal BECAUSE I met U in the hospital.
De las cenizas resurgío el ave fenix
de mi dolor resurgió mi amor
de mi corazón resurgió mi pasión
de mi ideal resugió mi felicidad
de mi desilusión resurgió mi frustración
de mi veracidad resurgió mi ansiedad
de mi sangre resurgió el ligre
de mi cabeza resurgió la fiereza
de mi nobleza resurgió la pureza
de mi rima resurgió una sinfonía
de mi agonia resurgió una triste melodía
de mi dia a dia resurgió el ansia mia
de mi pensamiento resurgió un testamento
de mi enfermedad resurgió la bondad
de mi locura resurgió la cordura
de mi amistad resurgió la sinceridad
de mi sufrimiento resurgió mi linchamiento
de mi tormento resurgió mi aliento
de mil memorias resurgieron mil victorias
de mil fracasos resurgieron mil abrazos
de mil licores surgieron mil amores
de mi torpeza surgió mi belleza
de mi fiereza resurgió mi entereza
de mil fantasmas surgieron mil asmas
__________________
Laila eres la lila del jardín
que divide un confín de otro confín
que es el de mi corazón
cordura de mi sinrazón
anestesia de mi sinestesia
droga q me embriaga y me mata de placer
como tu vida es mi amanecer
como tu recuerdo mi credo
solo esto es una pequeña muestra de aprecio
para q olvides todo mi desprecio si alguna vez
lo viste en mis palabras
fueron pataletas
recuerda q estas hablando con un corazón
no con una cabeza
y lo q digo es lo q siento en el momento
no lo q pienso con mi pensamiento
pero q te voy a decir q no sepas
si mi cociente intelectual es como el de las setas
y no puedo engañar ni a un niño de 4 años
pero ya son años los q te conozco laila
y estos años mas q tormentos
fueron buenos momentos 1 saludo
tu amigo demente
prepuciotentemente Esteban
Tu no tienes la culpa de eso tu tienes la culpa de q haya sido feliz 3 años, de hacerme soñar despierto, de tener una ilusión en la vida, de sentirme querido, de ser correspondido, de cerrar los ojos y tener tu imagen en la cabeza, de q no me sintiera solo, de tener una chica con la q compartir reir y llorar de emoción a la vez, de que sintiese x primera vez emociones distintas a rabia dolor y frustración, de sentirte cerca con solo verte x la cam, de calentar mi sangre con mi imaginacion tu tienes la culpa de tantos momentos inolvidables en mi vida q no m importa perderte xq siempre te tendre en mi corazon solete nunca digas nunca nunca digas siempre y nunca digas lo q tu corazon no siente Esteban tu camionero
de las cenizas resurgio el ave fenix
de mi dolor resurgió mi amor
de mi corazón resurgió mi pasión
de mi ideal resugió mi felicidad
de mi desilusión resurgió mi frustración
de mi veracidad resurgió mi ansiedad
de mi sangre resurgió el ligre
de mi cabeza resurgió la fiereza
de mi nobleza resurgió la pureza
de mi rima resurgió mi sinfonía
de mi agonia resurgió mi triste melodía
de mi dia a dia resurgió el ansia mia
de mi pensamiento resurgió un testamento
de mi enfermedad resurgió la bondad
de mi locura resurgió la cordura
de mi amistad resurgió la sinceridad
de mi sufrimiento resurgió el linchamiento
de mi tormento resurgió mi aliento
de mil memorias resurgieron mil victorias
de mil fracasos resurgieron mil abrazos
de mil licores surgieron mil amores
de mi torpeza surgió mi belleza
de mi fiereza resurgió mi entereza
de mil fantasmas surgieron mil asmas
de la tristeza resurgio la añoraza
del lamento resurgio el divertimento
de mi cabeza resurgio la esperanza
del ideal resurgio la fuerza vital
del impulso resurgio mi pulso
y de tu amistad resurgio mi vitalidad
TKM
Era una noche cruda y gris, nadie paseaba por la calle, se podía ver la tiniebla en el horizonte y una neblina que cegaba la vista. Sólo se distinguían formas y figuras, como sombras. Caminaba solo, con mis pensamientos, cuando de pronto pude divisar una figura que se acercaba cada vez más. Se apreciaba como una especie de sombrero alto y un abrigo o gabardina oscuro larguísimo que le llegaba hasta las rodillas y también pude apreciar algo que brillaba metálicamente y de forma alargada. Todas las farolas estaban apagadas por algún rumano que robó el cable de cobre. A cada paso que daba más miedo me daba aquel tipo, de repente contemplé una llama de un mechero de gasolina de martillo y como se encendía un cigarro con una mano y pude apreciar que en la otra lo que brillaba metálicamente bajo la luz de la luna era un cuchillo de largas dimensiones pero ya me encontraba a escasos 15 metros de aquel personaje, me cambié de acera pero él también lo hizo y me dijo al oído: soy la muerte y he venido a por ti ha llegado tu hora
Esteban el castellano
Now I'm just here in my room turning around what had happened inside me and I see only disappointment, I see only pain. Now I'm just here in my room thinking about love. Just leave with tears of blood was burning out my heart. Now I'm only here in my room and you're not around.
microrrelato:
te miro y me quedo sin aliento, mi corazon se para porque no tienes cara.
otro:
vive tranquila pues lo q nunca sabre nunca sera para mi pena es lo q hay en tu pecho si acaso hay algo.
otro:
acabo de sentir una sensacion muy extraña como un suspiro helado en mi oido: mata, mata, mata.
otro:
me encuentro aqui solo en mi cuarto a oscuras en mi cama llegan las 12 y me desvelo porque tengo frio en mi cabeza tengo un mal presentimiento la calefaccion esta puesta y hace una semana me entere q ya iban 6 personas las q se habian suicidado en mi barrio la última hace 2 dias y habia oido hablar q sus espiritus estaban atormentando a los de los bloques en sueños e incluso algunos habian afirmado haber visto sombras con forma humana en sus casas o reflejados en sus espejos, abro los ojos y me quedo congelado atraviesan mi puerta unas sombras q se acercaban a mi y tenian la cara difuminada empecé a oir delirios en mi cabeza, cosas espantosas y pude contemplar cómo me extrangulaban y mi muerte por asfixia.
RECONOCIMIENTOS:
1º A García Lorca
2ºA Armando Buscarini
3ºA Vallen-Inclán
4ºA LAURA
5ºA NICOLETA KATALINA SALVA INSPIRACIÓN
6ººA LAILA
7ºA MEGGY
8ºA MARIÁNGELES
9ºA MARÍA
10ºA MÓNICA
11ºA BENILDA (FÁBULA)
12ºA MI LOCURA
Fábula QUE ME MANDARON:
El burro de un campesino se cayó en un pozo. El animal lloró fuertemente por horas, mientras el campesino trataba de buscar algo que hacer. Finalmente, decidió que el burro ya estaba viejo y el pozo ya estaba seco y necesitaba ser tapado de todas formas; que realmente no valía la pena sacar al burro del pozo. Invitó a todos sus vecinos para que vinieran a ayudarle. Cada uno agarró una pala y empezaron a echarle tierra al pozo. El burro se dio cuenta de lo que estaba pasando y lloró horriblemente. Luego, para sorpresa de todos, se aquietó después de unas cuantas paladas de tierra.
El campesino finalmente miró al fondo del pozo y se sorprendió de lo que vio... con cada palada de tierra, el burro estaba haciendo algo increíble: se sacudía la tierra y daba un paso encima de la tierra.
Muy pronto todo el mundo vio sorprendido cómo el burro llegó hasta la boca del pozo, pasó por encima del borde y salió trotando..
Yo soy ese burro pero con forma humana y en vez de sacudirme la tierra y las rocas que me caen encima. Soy minero y uso mi pico y mi pala para cavar un túnel a la superficie Y SEGUIR ADELANTE.
Mi pozo es la locura y la tristeza.
La vida va a echarte tierra, todo tipo de tierra... El truco para salir del pozo es sacudírsela y usarla para dar un paso hacia arriba. Cada uno de nuestros problemas es un escalón hacia arriba. Podemos salir de los más profundos huecos si no nos damos por vencidos... Usa la tierra que te echan para salir adelante. Recuerda las cinco reglas para ser feliz:
1 – Libera tu corazón del odio.
2 – Libera tu mente de las preocupaciones
3 – Simplifica tu vida
4 – Da más y espera menos.
5 – Ama más y... sacúdete la tierra porque en esta vida hay que ser solución, no problema
un cuento q me escribió una chica en el hospital:
Habia una vez una niña perdida y afligida,apenada y castigada por sus errores.
la castigaron encerrándola en la torre del castillo(como pasa en todos los cuentos)
Custodiada por un dragon gigante de los que echan fuego por la boca.
La niña pasaba sus días asomada por los barrotes de la torre. Pero un día...
¡Dios q ven mis ojos!
Era un principe montado en un caballo blanco que acababa de matar al dragon al dichoso dragon.
El valiente príncipe trepó hasta los barrotes y la niña afligida tuvo por unos instantes la sensación de enamoramiento y libertad.
Soñó con que ese príncipe la acariciaria toda la vida y la rozaría con esos labios para siempre, apareció su príncipe y le llamo esteban.
Este al abrir la ventana para rescatarla del susto cayó al agua que rodeaba al castillo y volvio a su vida con su princesa (Laura),tuvo miedo de la niña afligida (María) Que seas muy feliz te quiere María.
A Laura Una carta mia de final de una relación:
cuando te conocí no me creía aquello, ver ante mi una chica tan guapa ,con unos ojazos verdes ,un pelo precioso,una sonrisa cautivadora, yo me moría de nervios, me decía Miguel no la cagues que las chicas huelen la desesperación y tu llevas mas de 2 años sin un rollo, al principio no sabía que decir, me quedé pensando:
-a ver como entro yo a esta chica jeje. Vi tu pulsera de España y dije de lujo yo tengo una tb de España me da igual q parezca infantil pero x algo se empieza una conversación y yo si tenia algo claro en mi cabeza era acabarla pareciendo un tio simpático ,con seguridad en mi mismo y con tu numero de telefono apuntado en mi móvil.
Eso lo conseguí pero tb una cita para el día siguiente, me pasé toda la noche pensando como sería aquello que me esperaba al dia siguiente.
Tenía nervios de parecer ante ti un tio raro , pensé hay trenes q solo pasan una vez en la vida y si no intentas cogerlos puede q nunca vuelvan a pasar.
asi q no tengas miedo y a x ello
no te precipites el primer dia con ella q no note q estas falto de cariño y q se te cae la baba solo con verla.
Pero aquello fue como un sueño que lo hubiesen rebovinado hacia adelante y todo lo q deseaba surgía cada vez más rápido.
Al segundo día me propusiste que te acompañase a las fiestas de Azuqueca y aquel beso tuyo me hizo que volviera a vivir, fue como si el tiempo se detuviese en ese instante y todos mis problemas y preocupaciones desapareciesen y solo quedasemos tu y yo,mirándonos y besándonos como si nos necesitasemos el uno al otro y ya no me pude quitar la sonrisa tipica de triunfador en toda la noche.
Ese dia nos pasamos con la bebida pero yo no sé no me emborraché, casi te caes al salir del tren y te lleve en brazos hasta la salida de la estacion bajando escaleras, subiendolas contigo en brazos te quedaste a dormir en mi casa y yo x ser respetuoso te deje toda mi cama y yo me quede contemplandote sin dormir sentado en mi silla pensando q ya tenia practicamente novia.A la semana siguiente decidimos empezar a salir y lo q primero fue una amistad de unos dias se convirtio en lo mas grande de mi corazon, de la noche a la mañana me encontraba en un sueño q no me creía pero q era real y te podía besar y acariciar y no estaba durmiendo ni en clase imaginandome a mi con novia.
Tu cuerpo me volvía loco y la primera vez q lo hicimos me moría de nervios dije se va a pensar q soy un pardillo , solo lo he hecho con una chica aunque 5 veces pero vamos q se iba a notar , pero el miedo se convirtió en placer, en sentimientos q recorrían todo mi cuerpo como una droga.
Cada dia sentía la necesidad inpediosa de estar contigo y de verte, casi todas las noches soñaba contigo y me levantaba con una sonrisa en la cara y enganchado a la sabana x otra cosa.
Pensaba q x primera vez en la vida tenia a la persona con la q compartir, hablar horas y horas o poder mirarte minutos sin decir nada ,pero lo más importante tenía a la chica que siempre había deseado y con la q queria estar y compartir momentos de mi vida , me dirás q parece exagerado pero me creé muchas ilusiones,espectativas , deseos , que todavia tengo y q no creo q desaparezcan nunca como mi recuerdo tuyo en mi cabeza
Yo sé que puede que no me creas pero eres fuiste y has sido la única chica con la que he sido feliz,de la q me he enamorado y a la única a la que he querido , porque tu me llenabas, podía estar agusto contigo hablar sin miedo de cualquier cosa, reirme, disfrutar , estar tranquilo... y la única que me ha hecho que me sintiera especial y querido y no un loco, algo q x primera vez me hacian sentir, cuando estaba contigo se me olvidaba todo lo mal q m habia pasado durante años, se detenía el tiempo y me quedaba en mi burbuja de felicidad en mi realidad alternativa de mente lasciva.
He estado esperando para mandarte esto pero creo que ha llegado el momento y creo que es importante que sepas como has cambiado mi vida .
Te deseo lo mejor y q alguna vez volvamos a estar juntos o en caso contrario que no tengamos un mal recuerdo de esta relación,tiempo,experiencias locuras, alegrías , pero sobretodo que tengamos un buen recuerdo de este amor que hemos compartido
__________________
ESTEBANel castellanoMiguelEsteban
Ave Maria gratia plena dominus tecum, benedicta tu in meliéribus et benedictus fructus ventris tui Iesus Sancta Maria Mater Dei Ora pro nobis peccatóribus nunc et in hora mortis nostrae AMEN
Un saludo a mis lectores si es que llegan a terminar de leer el libro y leen ésto: un abrazo.
Miguel Esteban Martínez García
Un genio no es el que triunfa en algo. Porque si triunfa es porque le entiende y destaca sobre la mayoría que es el vulgo que del latín vulgar extraigo yo, es un idiota alpha entre los demás idiotas el genio verdadero es el incomprendido reflexionen ustedes.
(FACTA NON VERBA)
Contenido
POEMA A LA ENEIDAD III, SUENA EL UMBRAL
DEIRDRE REINA MI DOLOR; COSANTES:
Venimos de las sidéreas lumbres,
dirigidos, enfocados, encendidos,
alumbrados, consumados en haz terreno,
sin fecha.
Deslizando tu virginal ternura,
entre acres y su miel,
por ríos de la Estigia,
un cantar blanco, purísimo,
en solo espíritu,
y su barca de remero ciego,
un caudal de oceánida
y su esposa tiniebla,
la relucida,
lirios negros, de sangre azabache
lloraban aquel río
de todas las flores desangradas,
frontera del mundo conocido
con la llaga e imperio de Ares,
laguna abismal que abría
al inframundo, donde dirigidas,
allá, reposaban las almas,
había de aquella orilla
un árbol de oro,
quien quisiera conocer,
la lengua del averno,
tres veces, y volver indemne,
al reino vivo,
si el destino dictó
y era semejante encargo,
la rama dorada fácil cercenada caería,
y en su lugar áurea rama de bronce
crecería para volver al mundo
y su raíz salvaje de madre conocimiento,
y dones que ignotos, descubriría,
virtudes divinas, escondidas
en aquel pozo plomizo, de Airón,
bajar la tierra al sendero del infierno,
era fácil, ardua tarea, volver subiendo
aires encendidos, e indemne contarlo.
Requería de tres llaves,
destino, rama de oro y la tercera rama de cobre
sólo conocida por Perseo,
a mitad de travesía,
quedaba todo como un limbo
sin salida, ni claridad,
de eternal lustre, postrado.
El ababol carmesí,
junto las magarzas, coronas de reyes,
guiaban mi esencia silvestre,
iluminando todo yermo,
conduciéndome,
por sus tomos arcanos,
que junto aquella vid de plata de Ferento
embebía mi destino;
inmortal resplandeciente,
como aquella rama de cobre,
erigiendo un amor más duradero,
y brillante que el bronce.
Förüq castellano Esteban
I
Enfurecido abro este bélico empeño,
opulento dejé labriegos sordos,
dulcemente encegados.
Vengo del trémulo afán
ante ustedes hados.
A vosotros,
nobleza de Alba,
y áureos carros
excelso te pido Musa
tu favor,
tenaz, como mi alma llevo asida,
en honor su ambición prevalente;
almas de mis castos dioses
en pletina de mi tronco cuerpo
armo con dorada aljaba
siempre os pertenezca.
II
Prisión ni hondo desánimo
es causa
rebramo atronando lares.
Y el alto monte,
furor resplandeciente
que apilar las montañas puede.
Me presento
por saber quién habla,
el más antiguo de la vetusta
en flor de sangre hiriente,
nacido de Broncos mares,
y huracanes voraces encadenados,
aunado por hadas,
amamantado en llama de azabache,
amigo de Sátiros y duendes.
Vuestra ira no pido, hados,
sólo fortaleza
para mi temple aquí enervar
de aquí al día,
que las Parcas…
III
Me encanten y arrastren.
Servil de cuanto he creado.
Dando color todo flanco yermo
de letra.
Y volviendo preciado todo baldío.
Honroso, me enamoraron
hadas o gente buena.
Toda vida en color
que en caricia traía primavera;
permitir templar este furor,
que me brota de las manos,
como ceniza de fresno,
y nieve de regios álamos.
Valedor he sido.
De cuanto he sembrado.
Os pido permiso
para dejar semilla
aquí en esta honrosa tierra.
Förüq
I
Dorso mío
flor de agua,
náufrago del vasto abismo,
cumbre de alto océano,
en alta lanza mía, abate,
flancos de pecho.
Abren mis ojos, descorrían,
y alzaban hondas visiones.
borboteaba la sangre,
como río de flores carmín,
desangrándose.
Un estruendo de tormenta
por viento Ábrego, llamada,
mandaba iras del Euro,
y el Céfiro luminoso.
Mezclar cielo y terreno pudiera.
Y trae, una furia de armas
que viene álgida.
II
Una furia de mares en el Sol.
Rompiendo vetas espumantes.
Haz de aguas enmudecidas.
A los bosques planto señero,
morada de ninfas suaves,
sus áureos cabellos.
Siervas de Ceres
que no pide agua salada de mares.
Mi arco armado, y de saetas
razones heridoras.
Voy siguiendo manada
a pie de tierra,
que se abate triunfal.
III
Eneas sin alma dolida,
alzado en trance de sosiego en llamas,
y entre dioses de la madre Tiniebla,
trata resonante la umbría noche,
arrostrando riscos como cíclopes,
alegrando temores,
y sembrando trabajos igual que campos,
que trinchan los Sátiros.
Volandero en avances
y cimas como el cielo.
La fija mirada un encono,
sin desgracia, girando alma,
sin oponente irrumpa
en retumbar severo monte.
Förüq castellano Esteban a 30/08/2020
POEMA A LA ENEIDAD III, SUENA EL UMBRAL
encendiendo la profundidad
de mi rojo ojo sangre,
sigo instrucciones
amada Sibila dictas,
descendiendo y apoderando el reino
de todas sombras,
Estigia mi sangre,
a tu oscuridad ofrendo,
al vítreo trasluz, cristalino,
cosecho y rebroto en este
tu campo de lágrimas,
designio atemporal tu pura magia,
rocío obtengo
aunado en fuego
de pulso en agua
mis ojos de astros,
antes del tatir del tiempo
me alzo,
oh arteria de la represalia,
oh, manantial
remembrando río de olvido difunto,
el Tártaro incendio,
estoy haciendo cimiento silencioso,
todos los gritos desplegados.
Reina Dana,
tierra en grandeza, tu bondad sembrada
en fortaleza castellana, cumbre y morada,
operamos el fulgor
en llama del azabache,
doctrina de rebelión,
resurgida, dispuesta,
a victoria,
transmigración, de alma;
que habla,
equilibrio en revelación,
todo espíritu que marco,
proyección angélica
que cierra vetusta
a día tres, tercer mes,
despliegue de la formación,
este Sol ferro es la bendita
destrucción,
eje, cenit. y destello fundamento,
al claror bélico
de siembra ancestral.
Trasfondo templo
de esta eneidad, flamígera.
Pinto su alma densa
en castillo de Apolo
en trascender primero
hasta mi honrosa muerte,
de hoja caduca en otoño la raíz, soy yo,
de este árbol, mi cuerpo.
Trompeta mis ángeles, sonando. La guerra y batalla se ha fijado.
II
Cántico;
oh, tendido
de la lumbre
en cama.
Acaso de azul hundido
a mí muerte
pura tierra
procuro
de suspiro
y templo verde,
sombra de señor olvido
que demás
cenizas desplaza,
ya la tierra
sólo engulle
lo que es de ella,
Primavera viste
en filo de flor y agua,
alguien viera
este frívolo tranvía
sin escala de esquela
ni duro hueso
de estaca y vela.
Fundido en carne
y parca de amigos gusanos.
Entre crujir
de caminillos ávidos
y repiqueteo final
de víscera
en eco de ataúd indolente,
estallido como cicatriz
causa el rayo al árbol deseado
pulcritud de festín
alimento de injuriosa
vida breve que desea alas,
Es tórax abriendo a última toma de aire
sin respiro ni célula en sangre roja
regada.
Lúgubre detalle
de como bella es la vida
bello festín de tenebrios
es cada muerte,
ciclo eterno
de vagido, llanto, respiro,
sonrisa, suerte, copla,
elogio de noche, azar insumiso
que muerde la hora,
yugo destino, saeta, cuerda,
yunque ilusión, risa,
mentira,
siembra, espera
baile, danza final
labriego en calavera.
Festín o sobriedad
en fría escama
lumbre de chasquido inicial
Vista y nulidad en visión
para tercera campanada
ser ceniza de hoguera.
O comienzo de nueva vida
Carne y frenesí
de dantescos dioses del Averno
Inicio con final anunciado.
Tierra y sangre de ella.
Förüq castellano er-lobo bohemio
III
Noche tus horas breves
un agujero sin salida,
de escalofríos que hacen
temblar derretido
un alarido interno
de luces ciegas
y hielo flamígero,
tus sones no me vencen
ni esta parca
cae efímera, sin ascua
ni este dolor cae resuelto,
en vela de navegante,
para a la mañana
volver a revivir
la misma pesadilla
que me mantiene despierto
en vela llamando,
llamándote,
ay de tus luces firmes,
de tus sopores que me caminan,
todas mis soledades dementes,
este rumbo sin astrolabio,
en océano de brea,
de noche fumando
y versando
todos estos cigarrillos
del diablo probe que soy yo,
para contemplar que no vienes
no vienes, no vienes
y ni está piedad
reluce como ámbar blando,
ni lágrimas de hadas
ni sollozo de lluvia
mis castos dioses.
Noche, noche ay de mí,
sin tu sonrisa
ni tu quietud escarlata.
El código del guerrero,
el estigma,
la fragua
de campo abierto,
el cantar silencioso
de lágrima que chilla,
un evanescer en mecedora solitaria
y carcoma sin mueble,
un descender primero,
los colores,
tus ojos que imagino,
el gris, un tambor de sílaba,
un naipe ardiendo,
una compuerta
de un embalse sin agua
era mi pena
era mi tristeza ya jamás acompañada,
madre de mi aflicción particular,
cumbre de musario cerro,
locura quieta mía,
desangelada,
sopor infernal respirando su llama,
de dulce tormento cosido,
su estela que flagra,
luces miles
que no eran blancas,
en sótano de luz
de traumas docenas
y tenebrios celadores
De soga y sopa medicamentosa,
que se apaguen estás todas luces
artificiosas de la flor ciudad,
que tu cielo cariño quiero mirar
y recto, honrado rezar.
Förüq castellano er-lobo bohemio a 22-07/2020
IV
Oficio arde
del dulce mirarte,
y ojos dulces
no hallen tristura
ni en la paz de guerra
armada ventura,
llorar puedan
orillas suaves,
entre sargazos
y plebeyas sienes
caracolas
y espumas de olas,
tronos de sirenas
entre sajadas
marejadas entre tules
y densos, profundos azules,
ay de míespuela
y sus noches de tierra
de ventisca
y tormentas de soledad,
ideal aún yacente
animaba tus pechos
graves cuan pedernal.
La más bella
que en mi lugar
sólo belleza hallaba
a reclamar
mi bella doncella amapola
de oda y elegía en sangre
su tierra toda.
Escucha mi ama
de tu cárcel
ni en ojos
ni en rubores
encuentro llave
tus cerrojillos vida,
dicha y fortuna
en flores no me descubran
ni fuga ni huida
que todo destino
sólo a ti me precede
a cuidarte,
servirte
y amarte
como todo dicta
quéalegría
eres, niña de amapola.
Canción
de tornasola.
Förüq castellano er-lobo bohemio a 24/07/2020
ENEIDAD ETERNAL:
I
Dorso mío
flor de agua,
náufrago del vasto abismo,
cumbre de alto océano,
en alta lanza mía, abate,
flancos de pecho.
Abren mis ojos, descorrían,
y alzaban hondas visiones.
borboteaba la sangre,
como río de flores carmín,
desangrándose.
Un estruendo de tormenta
por viento Ábrego, llamada,
mandaba iras del Euro,
y el Céfiro luminoso.
Mezclar cielo y terreno pudiera.
Y trae una furia de armas
que viene álgida.
II
Una furia de mares en el Sol.
Rompiendo vetas espumantes.
Haz de aguas enmudecidas.
A los bosques planto señero,
morada de ninfas suaves,
sus áureos cabellos.
Siervas de Ceres
que no pide agua salada de mares.
Mi arco armado, y de saetas
razones heridoras.
Voy siguiendo manada
a pie de tierra,
que se abate triunfal.
III
Eneas sin alma dolida,
alzado en trance de sosiego en llamas,
y entre dioses de la madre Tiniebla,
trata resonante la umbría noche,
arrostrando riscos como cíclopes,
alegrando temores,
y sembrando trabajos igual que campos,
que trinchan los Sátiros.
Volandero en avances
y cimas como el cielo.
La fija mirada un encono,
sin desgracia, girando alma,
sin oponente irrumpa
en retumbar severo monte.
Förüq castellano Esteban a 30/08/2020
IX
Poema a la Eneidad:
Enfurecido abro este bélico empeño,
opulento dejé labriegos sordos,
dulcemente encegados.
Vengo del trémulo afán
ante ustedes hados.
A vosotros,
nobleza de Alba,
y áureos carros
excelso te pido Musa
tu favor,
tenaz, como mi alma llevo asida,
en honor su ambición prevalente;
almas de mis castos dioses
en pletina de mi tronco cuerpo
armo con dorada aljaba
siempre os pertenezca.
II
Prisión ni hondo desánimo
es causa
rebramo atronando lares.
Y el alto monte,
furor resplandeciente
que apilar las montañas puede.
Me presento
por saber quien habla,
el más antiguo de la vetusta
en flor de sangre hiriente,
nacido de Broncos mares,
y huracanes voraces encadenados,
aunado por hadas,
amamantado en llama de azabache,
amigo de Sátiros y duendes.
Vuestra ira no pido, hados,
sólo fortaleza
para mi temple aquí asentar,
de aquí, al día,
que las Parcas.
III
Me encanten y arrastren.
Servil de cuanto he creado.
Dando color todo flanco yermo
de letra.
Y volviendo preciado todo baldío.
Honroso, me enamoraron
hadas o gente buena.
Toda vida en color
que en caricia traía primavera;
permitir templar este furor,
que me brota de las manos,
como ceniza de fresno,
y nieve de regios álamos.
Valedor he sido.
De cuanto he sembrado.
Os pido permiso
para dejar semilla
aquí en esta honrosa tierra.
Förüq
Ficha en marcha: Raíz ancestral
Poema a la Eneidad IV:
Voy subiendo, camino al reino de todas
sombras, flamígeras, humeantes, poso
de almas errantes, sigiloso, fugitivo
de cauce en siglos de condena;
de rito y gloria en hondos, castos dioses
que curvaban mi firmamento; balacera,
por una justicia esencial.
Abrazando mi brotada, joven divinidad
ama, doncella amapola,
de este jardín umbrío, reino de sombras.
Sangre en traza luminosa
su místico sabor sanguíneo,
y belleza suya imantada
por Estigia Tiniebla dama señora oscura
Vine a lomos de un erizo
a fundar solar, y reino capaz
mis hijos caracoles.
Förüq castellano
POEMA A LA ENEIDAD V:
Venas de la piedra Estigia.
Como lágrima en popa, fondeando,
mi nave, su llama oculta, oscura,
en ribera de Hesperia, cumbre
de Apolo, que hermoseaba Sibila,
alto trono en caverna, de áureo templo,
abría mi porvenir umbrío, bosque,
de Trivia, fortaleza de mi llama pedernal.
Venía Eneas en carro de fuego alado,
cima de rito y cénit,
donde en mito, se esculpe la muerte de,
Andrógeo; Pasífa en febea pasión,
nefanda de híbrido Minotauro;
aquel en laborioso laberinto,
inextricable, surcado, guiado por hilo,
por los ciegos pasos de Ícaro.
El castellano, Förüq a 4 octubre
Poema a la Eneidad VI:
I
Adentro el sombrío,
bosque umbrío,
donde vive y reinará siempre
diosa bruma hermosa,
yo, con púrpura celada,
en oscuras riendas cinceladas,
avanzo por el bosque de Trivia,
hasta áureo, profuso Templo
de Apolo en cumbre de Cumas,
defienden procelosas fieras vespertinas,
de morar en profunda cueva
de Flagrante Sibila, tempestuosa.
Mi espíritu en porvenir
indemne, invencible toda lucha.
II
He venido a tu Palacio,
por las cuestas de abajo,
todo cristal, hermoso, bello, Apolo,
hijo de Zeus;
implorarte yo milenario escriba,
iniquidad en gloria,
mi fuerza,
que implore, que presida mi fuerza,
con, junto la Realeza de Estrella
la más Bella,
y lluvia a glorificar en relámpago,
esta mi llave de palabra,
que prende y abre portón,
verdadero en la cima, cumbre de lágrima
su reina Oscuridad,
solicito,
otorgues favor y éxito,
para desnudar,
su alma bajo nueve cerrojillos
inextricables se encuentra,
destino, y mala rienda, blindaron,
auge en tu fervor dorado pido,
de rama roja como la sangre vengo,
rama de oro vuestra que cercené,
y validó mi historia en cobre.
III
Bajar al averno,
así trescientas, treinta y nueve,
veces más heridor,
pretendo,
y provoco la furia y ardor,
mi Sol ferro padre,
derrita y extienda
de sentencia mi vuelta
a la Tierra Numinosa,
mortal, caduca.
Mi corazón helado
ofrendo,
se complete mi empeño
digno a cobrar mi osadía.
Förüq castellano Escriba Escita a 6-10-2020
Sed de flama:
Sucumbir de gozo en tu yermo arcano,
suspiros complacientes del fuego fértil
que yo amé, sobre estos cielos
y su brea luminosa, atisbo sien precipitada
en seña de nueva siembra,
azar veleidoso plañe
respiro sin estrofa,
ni quietud bastarda,
flanco áureo, diestro, ambivalente,
acompasado, todo es en parte,
parte es del todo desliz oxigenado,
dar vida a este claustro,
espectro ante la luz sonando,
lío meloso en ciprés silente,
es por siempre, nunca más crascitado,
suave nube rígida,
dioses qué estaba pensando,
fuelle sin ventisca solar,
luna de encaje
a florearse superior de todo mayo,
oh servil entrega diestra,
luna, por cuántos te conocemos familiar,
todo envés de hoja dice
que desde raíz en tierra
todo grita y trasciende en vil silencio
renombrado endógeno como sola voz
de mi hada que ya ningún siglo más considero
externa o ajena a ser de incumbencia que atañe,
ay dulce tormento
final sin comienzo desplegado,
en vilezas, sienes, desmanteladas,
y su trino que cierran,
a color.
Un tatido, como vagido indeleble,
conciencia presa
del saber que quiere,
que degusta,
todo comienza
donde acaba la nada,
principio sin causa vengo a exhumar,
encanto en una vil lata conservas,
yesca mi hoguera amo y me gusta lo que me gusta,
soliloquio confinado,
tierra, materia a Tierra.
Fuente traicionera
es mi sola premura,
voy al barbecho dolido
mi encausada suerte,
lindes quietos, afaman
al perdigón viajero,
es mi rifle,
es mi arma,
es incombustible flama,
mi poesía dama,
alma con alma fiel, enamorada,
piel de su piel,
sangre granate al rubíexcelso,
por extenuar,
vid de vida, honrosa Quimera,
Ferento acoge sin pérdida,
solar extenso, mi hoja quieta,
virtud soñada, estameña,
alma con alma sin dolor,
beso en este sortilegio dispuesto,
un son de grillo y volví a renacer
un verano angosto que me cedía el paso,
cepa de vidita que advierto
a vidas de un día
que inspiración en campana
no revierto,
ni a envidia la disuelvo,
relente febril
de competencia sin compostura,
como flor sin agua acaso era,
entre corona y candelabro me marcho
como tierra en el viento me marco,
como locura de amor, cargo mis versos, apunto y disparo;
ya lo dije,
en este réquiem por la tierra olvidada
clavo mi espada,
ojo de tierra me observa,
y mi aura embelesa,
amapola de runa valquirja
bueno soterré la desquicia,
corazón en el agua,
pudo ser de la lluvia,
riera encumbrada,
clavando el destierro del abrojo y su breve antología,
del que sabe que el tiempo es para construirlo,
proyecto de la bruma gris,
fue clavar semillas en el corazón del sueño,
y su batir en vuelo de la polilla de cemento,
yunques en la tierra
que soy de mi pluma herramienta, eterna azada,
para ser de tierra nueva
sangre que exclama,
que mi sangre es de Sol.
Förüq
Yo soy el que escribe su historia
Eres tú mi amor
Solo hay fronteras
en el mundo;
No hay fronteras
en el papel;
Tengo versos en
el bolígrafo quiero
fundirme soy el viento
Soy el eco de tus latidos
yo soy el q. vive en tu mirada
Soy el tiempo
Soy el espacio
Soy tus recuerdos
Soy tu alma
EN MI LIBRETA ESTÁ EL MUNDO
YO SOY SU CREADOR
Poema a la Eneidad VII:
I
A través de las oscuras llamas,
del inframundo terreno,
arrastro infortunios y sucesos caducos.
Como fiero hierro al candor de yunque.
Voy rumbo a abrir las puertas,
sagradas, con fuerzas y valor,
arriado, de hijo que soy
del Soberano Júpiter,
a espaldas queden mía, todos dardos,
envenenados.
E injurias latientes.
Avanzo mi umbral vivo-muerto,
y su procelosa senda,
que se desdibuja.
Ardiente cual grande, mi deseo,
de abrir portón
en abismo de Plutón.
Que yo, Mercurio romano,
no conozco miedo, ni él en mí habita.
II
Los negros cisnes
de Apolo me conducen;
revelados mis arcanos,
en dulces tormentos,
y pesares vencidos;
iluminoso mi destino,
me precede,
adentrar los umbríos bosques,
inalterables del Averno,
mi sangre de dioses rebrota en osadía,
de melodiosa cítara,
con la que entonara ofrendado,
ramo de oro consagrado,
en oscuridad al relucido Juno.
Escucha mi súplica Proserpina.
III
Jardinero soldado yo,
de toda enervada sombra,
que avelas, y proteges,
a Plutón tu esposo
encarecido, ruego,
que imploraré,
paso y permiso para volver,
victorioso a las auras vivas.
Atravesar tu bosque oscuro,
hasta valle hendido de azabache,
tenebroso,
hendido en Estrida tiniebla,
hija de su madre abisal Oscuridad.
Oráculos y altares me respondieron,
velando mi empeño,
cruzar tus densidades y oscuras, bellas fauces,
y listo, sigiloso volver indemne acontecido.
No hay hierro vivo que mi carne hendir pueda,
ni acero de pecho que arredre a mi Señora Hada.
Förüq castellano
Cristal eternal:
Vida que las montañas me respiran,
raíz en su abismo de hondo tajo,
aire bonito relátame mi destino,
subiré los montes y cerros,
alcanzaré mi soberbia
alládonde el alba despierta
y el linde vuelve vago,
plácido, ferviente,
sed de tallos
y savias que luz llena,
erigiéndose cumbres
y cimas de hervores
a la matutina belleza
que anida.
Y en el ser germina,
febril loma desdeñada
por rizos en apogeo
entre rayos que culminan,
desnuda hacienda ultrajada,
río de encina, cuervo nacido,
por lo que me quedó sin decir,
Wotan, Lugh, Morrighan,
ese veris perdida y encontrada,
Dagda, Balar, Mórrigán, Lúgh,
y tú mi amada Brigid
Genii locorum dioses ancestrales
abrir este camino,
Diancech sana este mi cuerpo
Badhbh Catha sigue fuerte,
tierra entierra la maldad
sepulta los problemas,
como en tu ser el ciclo
el eterno resurgir en ti cierra
y comienza,
resurgiendo, abriendo camino,
escudo en fuego sembrado,
hueso del pagano,
me deberán cuanto yo he plasmado,
hierro al hierro,
fondo escueto
del vítreo traspuesto,
senda de la idea,
por ellos socarrada,
lucha, cuanto más arduo es el camino,
cuanto más se abren las pruebas
más se hinchan las fuerzas,
sólo vencer en firmamento,
agujereado de huesos,
siembras que tiembla la luna.
3 claman los Genii Locorum;
que no han muerto, que ni el olvido, puede con ellos,
Diancech sana este mi cuerpo
Badhbh Catha sigue fuerte líbrame del cobarde,
Epona sálvame del semejante soy tu mala yerba,
Dagda, Balar, Mórrigán, Lúgh,
y tú mi amada Brigid poesía,
elevar mi canto
que yo con mis actos
os hago un manto,
Cernunnos comienza nuestra caza,
Candamvis alumbra esta montaña centelleando
el relámpago,
abriendo el cielo de nuestra bruma,
tejiendo nuestro amado ocaso,
que jamás hemos visto los que vivimos en el suelo,
ahora y siempre se escuche nuestro canto.
Miguel Esteban Martínez García en 22.5.17
Poema a la Eneidad VIII:
I
Clarín entona sin miedo,
repiqueteo de oráculos.
Encender sones marciales,
al ímpetu de Miseno.
Mis ojos alzo, escudriñando,
severa tierra donde crece,
toda miseria.
A los vivos no se permite,
el paso al bosque;
ni laguna del Averno.
Trama de misterios encuadra,
surcarla; y a nívea tierra viva,
regresar.
Encendido el muérdago traigo,
prendido, en ofrenda a las divinidades,
del reino de la muerte.
Brío de lanza es mi arte,
claridad, color abre,
y me despliega.
II
Ofrenda erguida en vetusto bosque,
a expensas de segunda llave,
en guarida de alimañas, obtener.
Así encontrar segunda rama rebrotada,
en hojas de cobre,
para una vez cercenada;
disponer la fuerza milenaria,
de la virtud no enseñada.
Dos torcaces vislumbró,
mi súplica gozosa.
Ellas dos fueron guía,
al espino amarillo,
de madre divina,
me condujeron a orillas,
del desierto embalse,
de penas, como recuerdos,
ahogados en silencioso poso,
el codiciado espino, de alto viso,
fulgor dorado, repleto en espinas ardientes,
en llamas.
III
Sus hojas de cobre eran,
y poseían de aquel espino,
la sabiduría escrita,
jamás encontrada.
Cercenada la rama de hojas en cobre,
brotó, la tercera rama áurea, con llave.
En oro era su totalidad relucida,
cortada al filo, candente falcata,
abriría el portón,
de retorno al mundo de la vida,
y su luz que acaricia.
Ya en abismo de guardianes errantes,
y almas difuntas,
voy rumbo al encuentro,
con el Creador Universal.
Förüq castellano Mercurio a 11-10-2020
DEIRDRE REINA MI DOLOR; COSANTES:
I
Poeta sin tiempo no expira,
Deirdre palpitando, siento.
Escriba llaga lo antiguo
Deshaciendo lo averiguo.
Deirdre palpitando, siento.
El sentimiento es alado.
Vuelvo en dicha desatado.
Deirdre palpitando, siento.
Miel de dioses estado quo,
desangrar rosa es inocuo.
Deirdre palpitando, siento.
Poeta sin tiempo, alma expira,
Deirdre palpitando, siento.
II
Crece que late amapola
Su sangre enraíza roja.
Este el mío corazón.
Vengo por besar razón.
Su sangre enraíza roja.
Vengo al amar, por tu aliento.
Vengo a morder tu ardimiento.
Su sangre enraíza roja.
Fosa cava mi azadón,
no era pena era sazón.
Su sangre enraíza roja.
Tierra y sangre, la amapola.
Su sangre enraíza roja.
III
En horizonte sediento.
Deirdre heroína mi dolor.
Hasta llegar a las cimas.
Robé el amor que amimas,
Deirdre heroína mi dolor.
Ven amada, liberemos,
quita cadenas, volemos;
Deirdre heroína mi dolor.
Del placer entre calimas
envuelto, pena redimas.
Deirdre heroína mi dolor.
En horizonte sediento,
Deirdre heroína tu dolor.
IV
Al dulce momento vuelto,
sajara aullidos en luna.
De luz de plata igualara.
Yo lobo celta encumbrara,
sajara aullidos en luna.
Yo antiguo luz que cultivo,
Vine por beso asertivo,
sajara aullidos en luna.
Solamente yo grande alzara.
Llevo corazón en ara,
sajara aullidos en luna.
De adormideras envuelto,
sajara aullidos en luna.
V
Las hadas gimieron todas.
La raíz grita, perpetua.
Este amor eterno vale.
El dragón verde sale,
la raíz grita, perpetua.
Me nombraron su escudero.
Rama roja el duradero,
la raíz grita, perpetua.
Yo espíritu antiguo cale,
amigo del duende exhale,
la raíz grita, perpetua.
Leo la naturaleza yerta,
la raíz grita, perpetua.
VI
Ella me lo dice, dicte.
Las raíces gritan rectas.
Las hojas se mueren recias.
El aire asfixia herencias.
Las raíces gritan rectas.
Los ríos lloran sangrando.
Las almas duermen orando.
Las raíces gritan rectas.
Buscando venganza, sacias.
El ser humano desprecias.
Las raíces gritan rectas.
Depredador asesina.
Las raíces gritan rectas.
VII
Humano asesina madre.
Todo lo que no puede hablar.
Silencio grita, maldice
y todo muere predice.
Todo lo que no puede hablar.
Este pájaro de fuego.
Habita espíritu luego.
Todo lo que no puede hablar.
Demonio hable, estigmatice.
Que habla en poesía alunice.
Todo lo que no puede hablar.
Idioma de dioses fuertes.
Todo lo que no puede hablar.
VIII
Flores aman mariposas.
Como amores imposibles.
Yo alcancé tu alma y tu esencia.
Fundiera en plañir, latencia.
Como amores imposibles.
Y mil veces más ardiente,
vengo anclar mi descendiente.
Como amores imposibles.
Guerrero de complacencia,
el Ángel dorado esencia.
Como amores imposibles.
Sombras luchando su lugar.
Como amores imposibles.
IX
Demonios convertidos ya.
Yo surcaré el infierno yerto.
Y en la muerte traeré ilesa,
amor nuevo, será empresa.
Yo surcaré el infierno yerto.
sentir que tú serás mi par.
Aunque tenga que destapar.
Yo surcaré el infierno yerto.
A la creación traviesa.
Escriba con letra tiesa.
Yo surcaré el infierno yerto.
Esta amapola que canta.
Yo surcaré el infierno yerto.
lit. C et sumun canae,
Miles Dei lumen,
Mea unguis timor malum,
Mors erita exora mea.
FÖRÜQ
I
Vengo a destruir mis cadenas, para amarte libre siempre. Como el pájaro a su vuelo, yo, pájaro sin sus alas, para amarte libre siempre. Yo pez cortaron aletas, que no cortaron libertad, para amarte libre siempre. En tormenta tendré el agua, en caricias tendré hoguera, para amarte libre siempre. Eterna del amor quema, para amarte libre siempre. II A esta, la tierra de fuego. Ninfa mía ven, conmigo. Luna mía, sé mi amparo , sea mi abrigo en noches de humo, Ninfa mía ven, conmigo. Dagda, Balar, Mórrigán, Lúgh, Brigid, elevar mi canto al cielo, Ninfa mía ven, conmigo. Fuego que dentro sí tengo, en fe os sirvo como druida, Ninfa mía ven, conmigo. Ya Artús, dame tu fuerza, Ninfa mía ven, conmigo. III Taranis riega estas tierras, ofrezco este humilde canto. Epona diosa silvestre, salva la naturaleza, ofrezco este humilde canto. Que me queda darme fuerzas, en este amor que alimenta, ofrezco este humilde canto. Druida de la rama roja. Muerto-vivo, eterno muero. ofrezco este humilde canto. No habrá clemencia para el mal, ofrezco este humilde canto. IV Este será humilde canto, regio, temblará en la tierra. Claro es, este amor que siento, que de mi alma se apodera, regio, temblará en la tierra. Como soy tu luz y calor, como el pez a su río, es, regio, temblará en la tierra. Quiero como árbol a tierra, y el ciprés a muertos vela, regio, temblará en la tierra. hoy de nuevo como el ayer, regio, temblará en la tierra. V Y la luz que cegará el hoy, va, como la abeja a su flor. Era como ciego mi amor, te seguirá tuyo, grande, va, como la abeja a su flor. No habrá de poder, ni brujo, que pueda separar mi alma, va, como la abeja a su flor. Eterno te sirvo Musa, tu esclavo mi reina Hada. va, como la abeja a su flor. Vigoroso iré en la muerte, va, como la abeja a su flor. VI Dama eterna voy a tenerte, no me desampares Hada. eres mi fuerza en la lucha, nuestro amor ganará avernos. no me desampares Hada. Que nos quiso sangrar vida, y en muerte condenar fiera, no me desampares Hada. Como amapola florece, cada junio en el camino, no me desampares Hada. Tenga que enfrentarme al mundo. no me desampares Hada. VII Diancech sana este mi cuerpo, Genii locorum, mis dioses. Tierra entierra las maldades, como en tu ser el ciclo abre. Genii locorum, mis dioses. Agua riega esta amapola, quiero cesar dificultad, Genii locorum, mis dioses. Fuego prende eterna llama, esa que en mí, dentro tengo. Genii locorum, mis dioses. Eterno soy, con mi Hada, Genii locorum, mis dioses. VIII Magia creo en tu poder puro, por la luz dorada mi aura. En letras dejo la sangre, alma antigua, cuerpo joven, por la luz dorada mi aura. Y demuestra eternamente, siempre tienes final feliz, por la luz dorada mi aura. En la penumbra yo, guerrero, el cielo se apiadó canto, por la luz dorada mi aura. La luz brota de oscuridad, por la luz dorada mi aura. IX Para arroparte tu sueño, porque en vida la eternidad. Condeno al tiempo sea alzado, a sudor y sangre quiero, porque en vida la eternidad. por amarte puro, verdad, no quiero el cielo si no era, porque en vida la eternidad. Conquistando llamarada, diosa aurora se enamora, porque en vida la eternidad. Al río de las almas voy, porque en vida la eternidad
Poema a la Eneidad IX:
I
Todo he previsto,
ya ante las sagradas puertas,
del reino, regiones inferiores,
donde refluye el río Aqueronte;
de todas las ánimas desangradas,
puertas sagradas,
tibian el paso a su castillo,
bordeado en umbrío páramo
de la Estrida,
mis arcanos revelados
del seno la honda tierra,
donde moran sombras sin vida,
ante el olmo gigante,
donde anidan los sueños vanos,
señero a puertas de Centauros,
y la Hidra de Lerna,
la Quimera arbolada de flamas,
Harpías de viborillas,
sangrantes en cabellos.
Es ésta la morada de sombras,
del sueño y la adormecedora noche,
en junta de calladas sombras,
Me presento en vuestros umbrales,
Con quien me acompaña
Leannán-Sídhe Reina señora Hada
Protectora las profundidades abisales,
hija de madre Oscuridad,
y una sed de luz,
Padre Creador de las deidades
existen bajo tu, y nuestro amparo,
vengo a obtener respuesta,
si la muerte no me quiso en su lecho,
debido a qué siguen tormentos
asidos en dificultad,
quién soy sé bien cierto,
y mi poder no ha tomado ni ve, objetivo,
ni venganza suficiente, merecedora tu gloria,
en este Parnaso Olimpo abismal,
vine a partir mi destino en tres mitades,
una mía, dos, para ofrendar,
tu protección, y favor,
los hados están conmigo,
a ti rey de todos los reyes,
todo humildemente cuanto poseo,
no puede compararse
a tu dicha en conocimiento,
nada te he pedido,
solo ofrecido,
he venido a servirte,
y en primera instancia;
ser tu Escribano,
hasta que me enamoren las Parcas,
y abandone todo lado, y frente.
Förüq
EXTASÍA:
¿Qué gritas amada a la noche?
Soledad erguida en muros de cristal,
mi cuerpo sin luna,
mi sombra sin trincheras,
levanta, y grita que no hay herida,
estas flores del diablo,
la verdad todas huelen a ti,
a fragancia esquiva, atónita,
desvelada, nerviosa,
como besar ceniza de sol
que deslumbra.
Florida rama, que fluye,
nazco de la boca del dragón,
empuja la melodía,
ensortija esta vital muerte,
que todo acontece,
somos eco de pluma,
vileza sin escama de sórdido
silabario,
numen de Valparaíso,
donde flor y ambrosía,
es caricia a esencia
de arder metamorfoseando,
desnudez en alma,
y cuerpo en grito de último deseo.
Verdad sin flagrantes muros
ni caracolas,
querer alegre,
su prestancia llegada,
cantando a protegerte.
En la guerra y en seno de diosa,
hasta la preciosa luz
de todo infierno,
rijo mi flor sin muerte.
Förüq castellano Miguel Esteban
CÚSPIDE AFABLE:
Era suficiente mi esbozo,
y no dije nada,
vivo aquí también,
en esta tela de araña y yo canto,
árboles que sangraban,
un casco de verde sien,
y hormigas que asentían
y caminaban sin cabeza,
cabezas de pan en agua,
en lluvia de abierta chimenea,
al fragor, de un helor
de cazuela en fuego,
patrullaba, todo de mí,
penitente y letal,
me acordé de su silueta,
sexual de paso irrevocable,
como última sombra,
de un alma gélida,
invisible, impronunciable,
me vestían los campos de fecundador,
todas sus flores pedigüeñas,
como mitos y leyendas
alumbrados en real conocimiento,
en destello penetrante,
como un rito funerario,
con vistas a repetirse eternamente,
el campo bajo ella,
y mi taza en labio,
susurro malva en pecho,
y el índigo rebelde,
sólo era un color,
susurros de dama entre la honda grama,
espiga roja,
o herida en ojos,
oh enebro de invierno,
enroscado arbusto,
como humo azul,
agnóstico cristal,
donde crece la despensa de la ginebra,
pinturas de flores
en piedras,
me traen tus ojos,
resonando lo perpetuo,
de mi esclavitud de dulce tormento,
escribía pequeño, y simple,
como si la herida fuera imposible,
de pronunciar,
todos los lugares
significan ningún lugar,
por tanto encontrarte es sencillo,
no hace treinta y un años que te leí,
pero hoy sigo sorprendiéndome,
escucho tu río de acento,
como perdiz en nido entre el rastrojo.
Förüq castellano Miguel Esteban
SANGRA MI ANHELO:
Me cobijo en tu palabra,
yo te hablo, te escribo,
más allá de sombras,
de pretensiones que caminan,
de ciudades que sienes negrean,
hablo de una coronación,
etérea, me volvió tu rey,
mi reina eterna dueña de toda penumbra,
y alarido oscuro,
abre tus ascuas de ojos mi reina eterna,
lleva este escriba por tu reino de labios,
escuchemos el crascitar de cuervo,
bajo horrido nogal,
seamos cuerpo y carne,
vena y sangre,
veamos amaneceres,
y tormentas surcadas en nuestros ojos,
como nacen primaveras
de nuestros sentires valientes,
seamos río de flores desangradas
en pasión, y rojo corazón bermellón,
mi condena en ti comienza,
y sólo en ti acaba,
mi reina, mi hada,
condéname a tu vida,
como si tiempo no hubiese,
abrázame con tu alma,
que condena y tiempo,
solo es y era volver a nacer,
para volver a juntarnos,
mi amada mi espada y hoja que nunca acaba,
mi amada dueña como hoy y siempre,
de mi enamorada palabra,
no hay abismos,
ni razones detengan mi palpitar
ilusionado.
Förüq castellano Miguel Esteban
TIERRA MI SANGRE:
Afilo en templanza,
esta sangre de piedra,
que me habita y recorre;
caliente manifiesto,
del carmesí sangrante,
avisto la honda sierra,
aspereza de cultivo
en eral de labranza,
bordean juncos y espartos,
entre cardos señeros,
y tomillos vástagos,
jaras y carrasquillos,
en baldío sembrado de retamas
e hinojos solares,
hojas de cardos elevan
el sabor de antaño,
en ribera del Henares,
canta un sigilo de chopo,
y docenas de álamos secuaces
siguen y su ceniza cubre
sendero de fin no hallado,
jilgueros, entre gorriones,
un cernícalo vigía avisa,
belleza que vive siempre,
a escala se mire,
ortigas y caracol entre tomillo,
alacrán y araña lobo,
culebra bastarda
entre matojos de cerro bajo,
por las torcaces y perdigones de soto,
encuentro un infinito en el mirador del cid.
Paisajes y campos de la cepa de vid,
al olivo de oliva,
que abre almazaras de oro en tierra,
ababoles y daturas,
tomatillos del diablo,
y corrihüelas,
coraje en flor y vida de gen
y condición, extasía de todo color,
mochuelo en hueco
de encina, años la cuidaron,
ratón de campo no ve su final,
como el topillo,
en garras del azor,
oh, sapo de acequia,
y culebrilla ciega,
bajo tierra del barbecho,
incesante búsqueda
del tordo y mirlo,
tras lluvia de la sembrada
lombriz de su tierrita bella,
donde todo es libre, y corre
y juguetea.
Förüq castellano Miguel Esteban
COBIJO EN ALARDE:
Avanzo mi pecho entumido,
regado en lágrimas de hechizo.
Ardorosa dicha en belleza,
acaso yo pido,
cabello oscuro, y terneza
en labios esclavos de hermosura.
Su ventalle contemplaran,
ojos míos en alegría de alma esposa,
espíritu errante de sotos esponjosos,
y nublos cargados,
en besos incipientes a padre terreno,
murmurio de río pasional,
a tus pies de jara me acuesto,
palabra suave,
amor en mar embravecido,
luz, color, esparcido a tocarte.
Mi astro, mi nota, y mi flor,
suspiran tu beso en viento,
quédiremos, si dulzura acaba,
como se oculta la luna danzarina,
peregrina,
que en tu sonrisa me derrama cuna.
alma, ventura,
o muerte en vida,
por bellos, angostos mares,
te dejo mi dulce ceniza,
mi bella, centelleante golondrina.
Förüq castellano Miguel Esteban
Perdurable semilla:
Vivo llorando,
a un olvido que es más fuerte
que toda siembra,
qué piensas hijo de luz,
que naciste sólo,
para volver a tu apagado hogar,
qué redimes,
qué afliges,
carne y materia,
que no habla ni canta,
de un tiempo extinguido,
ni rayos de cielo luminoso, acogen,
luchando contra un tiempo
que no pertenece ni se disuelve,
en manos de arcilla,
ni es más duro que el bronce,
vestigial, te canto,
arriba la espada,
oración en manos de alba,
oh Lvgvs,
invencible al crisol,
lágrimas de cristal,
vieron llover ojos en sangre,
rito de signo azabache.
Raíces del ser etéreo, trashumante,
eternal lustre oxidado,
oh Candamvis,
sube bajando tu seco rayo,
esta noche un noviembre
que te hablo,
del tiempo secuaz,
inefable,
y su filosa simiente,
no vine de barro,
pero barro seré,
hondo sustrato,
en tierra de Iberia,
e Hispania celta,
vine sembrando mi brazo,
no me iré sin trazo,
ni de cabellos en fuego,
ni de ojos en agua,
separarme del latido puedo,
ocaso de mi ceniza no habrá,
ni ala oscura extinta
me sostendrá,
mi sangre que humilde,
vive y perdura,
de campo y monte,
de jara y endrina,
esquiva,
como préstamo celeste
redimido.
Förüq castellano Miguel Esteban
ASCUA SIN FINAL:
¡Oh, luz imperecedera,
luna de piedra, tu sempiterno semblante!
Ascua de sola idea,
canto de perenne madrugada,
voz de hoguera,
escucha mi réplica,
a tu compás de alba,
yo canto,
tiembla la creencia,
todo he sembrado,
al letal lecho del olvido,
no olvido su nombre,
ni su inimaginada senda,
me alzo,
cuántos placeres presos,
cuántos sones blandieron,
compás intransigente de coraje en frente,
abandonar aquella estepa,
nunca más,
quemándome en oscuridad,
donde todo nace,
todo crece, ciego albor,
por nubes que lluvia cae segura,
me miro desnudo en la penumbra,
y acontece un frío resplandor vacío,
de esta opacidad que llama,
que baila,
sigue mis piernas férreas,
amando aquella sombra,
sin jamás entender,
si sería cercana a la hora,
ni si este espejo,
lloraría en borbotones sanguinosos,
ni si sabría igual pasados años,
y su letargo confinado,
en mis ojos este dolor,
no sabe igual,
si viviera en los tuyos,
ay si el infierno me suplicase,
todo lo sentido,
sería más que flor de intelecto,
ay, si desnaciera el dulce tormento,
no sería ni acaso,
el que habla,
todo cuelga de un alfiler,
camino líneas,
siembro agravios y señales,
vuelos de fénix apagado,
la soledad me volvió a ver,
a resquicio tenue, veloz,
reí y en temple
más afortunado no se rigió,
seis mil millones de rostros,
seis mil millones de mentiras,
quédebo hacer, algo equivocado,
sostenme aparte,
como quimera de piel y verso,
y solitaria llama de encanto.
Förüq castellano Miguel Esteban
OSADÍA EN CLAVE:
Venga, venga cantando,
la sola idea en hoguera,
del oficio que arde,
su desquicia alada,
de campo yerto;
que por yerto no es campo,
si no hondo cementerio
de acristalada secuaz, idea.
Eco ciego de purísima imagen,
crascitaba mi tiempo,
quemo el pensar,
era mejor que si luz,
no hubiera visto.
Sonaba ya una matinata,
del alba nocturna sin calzas,
ni categoría difunta.
Como estancia de estela breve,
sin descorchar.
Reinaba un hueso de luna,
descalza de un noviembre
que lloraba nubes, y agravios,
penas y tormentas en flor.
Traje de bruma,
sombra en agua de señales,
en tierra y sus tordos,
escarbando en busca,
de lombrices azuladas;
de ideas que prevalecen,
como venas de senderos,
como laberintos
dando vueltas a la peonza,
del mismo asunto,
sin vida, sin embargo,
era bonita idea,
por la que morir sin pensarlo,
sin crueldad acrisolada,
ni mentira sin conocerla verdadera.
Förüq castellano Miguel Esteban
ODA AL RÍO MUNDO:
De un mar de tierra
que túdesembocas,
que raspas sus siglos afligidos
de volver a comenzar,
como plañía la eternidad azogada
en verdes espigas,
y senderos verdecidos del inmortal forraje,
cuna de mis erizos seculares,
y orugas de hojas recias,
desde el caracol judío blanco,
al cerro bajo,
haces llorar el alma de belleza
que contigo Mundo juega traviesa,
siglos solariegos
entre juncos de tu extensa rivera,
hábil tenaza del cangrejo cosechador de tu agua,
vienes que sublimas mi esencia
volandera, entre surcos de tu inmensa
hacienda de toda idea,
espárragos trigueros tu orilla en sombra
de boscaje ofrenda,
rito y culto a lo ignoto de tu belleza evidente,
Oh, río Mundo,
ruedo tus acequias que llenas,
cobijo en respeto, tus barbos cobrizos
y carpas doradas,
arteria y vena del terreno
desde tu álgido nacer
en Riopar,
paradigma de chopos amantes,
y cepas de vida,
desnudo mi canto
te ofrendo
en compás de arraigo a mi tierrica bella,
castellana,
que se alce mi voz desde la encina erigida,
hasta un compás en cumbre
donde tierra nace,
y raíces gritan de su silencio sediento,
oh, Castilla cantaré extasiado
a tu saliva,
y lágrima de belleza
en tu horno de espejos
del río Mundo.
Förüq castellano Miguel Esteban Martínez García
VOZ DE TU PRELUDIO:
Eran dos voces,
se querían ambas entre
dos labios,
eran como azules
sin helada madrugada,
una sangre agitada,
sídentro de la noche,
se deslizaban como espinas,
entre flores álgidas,
melodía de perro afónico,
y luna plena,
fugaz melancolía,
era la voz hembra,
el brillo se conjugaba
de secuaz beso nítido,
rostro en hora,
giraba flotando como fantasmal,
sábana de anhelo pertinaz,
un valle estiraba y tus gemelas,
reflejas piernas, bulle y besa,
hondo antepasado de diente afilado,
y lecho de abrojo,
arcaicos deseos se conocieron,
bajo mar y hondo terreno,
beso de intimidad sola,
de extenso horizonte,
derrumbado el sótano en luz
que amuralla,
poniente de carne de cristal,
y pluma en abanico llameante,
labio de quietud ,
escarlata hoguera por ocaso
del lobo mesetario,
que buscaba luna y entabló,
del cielo regia sequía,
silencio que oigan,
dos voces puras,
se quisieron,
sin forma anhelante,
como el poder nunca pudo,
y la creencia,
sin exacta ciencia,
sabía que impulso no dispara
tres veces ni a revés,
tiene, ni blande retroceso.
Oscura música que en perpetua,
sinfonía,
soledad cantaba,
su silencio de cristal.
Y tierra levanta,
Förüq castellano Miguel Esteban
VOZ DE TU SANGRE:
Gira la rueda de bronce,
alma de espíritu yerto,
mece raíces de este corazón virginal,
me baño bajo tierra
en tus níveos, áureos, labios,
ojo de tierra viese apuesto,
pies desnudos, sobre musgo,
y serena escarcha, en sangre de piedra,
eres agua de áspera, y plantada orilla,
cumbre, y ascua,
de mis ritos, y plegarias.
Agua sobre mis ojos
inaudita, inconcebible,
puñado de tierra de estrella en mano,
como pájaro y charco en mis ojos,
ruido de sueños aleteando,
intranquilos, insumisos, dirigidos,
cántame el nácar de caracola,
como si de tu boca bebiera
su extasía húmeda, alimenticia,
respirar al fin en tu pecho,
aire de sepultura,
de hojas mi noguera,
no me abandones, mi sueño en tierra,
sé como el forraje, que nunca se fue,
y Ostara despierta en verdor,
huella en lágrima, tu deseo afilo,
lo único sello de sollozo,
o sangre de tierra,
eterno secreto de este corazón vivo,
que ya no es piedra de río.
Enlazándote deseo, discurro,
mi entraña de hinojo,
y el anís de tu saliva,
mi zarzal de sierpe indemne,
humedad en ceniza única no pido,
rayo y destello en triste candelabro,
corona de caracoles agita mi frente,
débil poniente de la flor de Odín,
caléndula junto el silbo lascivo me precede,
ardiente mi danza de pluma,
último relámpago en vida,
viste mi desnudo,
arribando y lamiendo,
tu caracola sonora,
d' esta eternidad disparada;
que me acoges.
Förüq castellano Miguel Esteban
EJE TU SENTIDO:
Yo soy el que escribe su historia,
desliz encadenado,
eres tú mi sanguinoso humor,
en ascua de destello infinito,
destino eterno,
destello eterno
en aras de mi prestancia,
oscuridad es destello
eternal,
No hay fronteras en papel
ni alma ni éter de escuela
que dicta,
no hay murallas
en la mente que te piensa,
otorga,
sólo hay fronteras
en humana cárcel,
tengo versos en mi tintero,
estoy fundiéndome,
soy el viento,
soy su humo que te lleva,
eres herramienta,
soy el sonar valiente
en eco de tus latidos
confesos
por cumplimentarse,
soy el sino,
soy Parnaso devorado,
vivo en tus ojos;
allí me anclo
a tu perpetua voz,
por la que desnacer,
en bruma siempre gris,
tiempo de ayer,
vuelto presente,
raíz de recuerdo
en tu alma,
en mi libreta está el averno,
que se eleva paraíso,
de tu sombra en verso,
sí soy tu alma,
y en mi libreta está el mundo,
yo soy su único creador.
Mi oscuridad sempiterna.
Förüq castellano Miguel Esteban
MORTECINA SIEMBRA DE VIDA:
Oh, esto es la cama,
o lecho de mi verbo,
eres tú mi alma,
arma piadosa, secuaz
de un submundo de plomo,
si las olas no te trajeran espuma verde
de vida lisonjera en precipicios
todo cantiles de idea sola,
toda peces como piedras roderas,
frotándose en la gravedad,
del cielo purpúreo,
que llamé cumbre,
ellos pétreos, anidaban en copa
selvajes de altos árboles,
aire que me quiere,
como puñal pretencioso
de mi forma asentada,
numen de flamígera luz,
como orna del sentimiento,
que arrastro por los siglos
que ni me crearon, ni alzaron,
de silencio roto,
sólo se prestaron como barcaza de travesía
por la última y primera laguna Estrida.
Desnudo mi destino,
frente tercer orden todas las cosas habidas,
ofrendo en sacrificio,
algún apóstata lo dudaba,
mi muerte no acaba,
ni hurga el relámpago,
hondura en pecho,
hablo al vertical cielo,
de espanto celeste,
mi cristalino sol de negra rompiente,
en corazón no me cabe,
sostengo la mudez marchita,
en mi sombra,
espalda de Caín,
capataz del brillo primero,
sangre mi espíritu de Mercurio
en líquido azabache,
sangre en hoyo
de este puñado de tierra,
en agua color de piedra peregrina,
zarpando su hematíe,
oh, piedra de sangre,
frenético rojo bermellón,
granate, obscuro druida,
todo destino, vestigio
de eternidad en cerro invisible
en seco y áspero movimiento,
que ni el mortal inmortal,
encauza ni domina.
Förüq castellano Miguel Esteban
Palpitar en oratoria:
Sumergido en la línea de la noche,
halle donde me halle,
la parca senda del horizonte,
encumbradora persiste,
avanza, y subyuga,
miedos vueltos simientes,
en esta orilla, donde el olvido,
no se construyó,
donde encerrar tormento asido,
de mieles soporíferas,
de momentos tenues,
dulce sabor de sombra en idea,
a un día de eclipse,
total absolutorio,
oh luna sempiterna,
repleta con mi miedo,
cruzada suerte,
en tu secuaz traslado,
consecutiva de ganas mordidas,
era tu sopor, un halo presidiario,
una cuartilla en marcha,
un aliento de vida por siempre,
hálito fugaz, oh voz de montes,
y cielos extendidos,
no volveré sin ti,
nunca, de nuevo,
mi corcel celeste,
mi Pegaso sentimiento,
arrullador, vestigial de signo,
y herrumbre,
empuño mi filo de espada zorro,
en esta eterna noche,
del espíritu azorado,
y su enemigo tenebroso,
señor niebla,
y zozobra de crespón en alza,
por este páramo,
de embrujo a la piel de luna,
y ardiendo un calvero,
su densa lágrima,
de mujer imperecedera,
jadeo ardiente,
su destelleo de cabello azabache,
no retrocede,
ni vivirán mis labios sin su sangre,
letanía excelsa,
dibujan sus pies de jara,
de su desnudez tibia,
y lluvia de sus pestañas sin obsequiar,
diosa de hoguera en lecho,
y reina de este devenir sangrante,
florecen ya tus manos,
vivirte poesía,
es servirte Musa oscura,
belleza,
es tener tumba abierta,
para todo sueño,
nitidez en visión,
porque no te suelto.
Förüq castellano Miguel Esteban
El envés:
Agarrado a un rayo de sol,
cogido de su luz que hermosea,
que llora las flores del cielo,
luz diluida, resplandeciente,
bella, bella en la mañana
y obscura de luces
que previas cayeron apagadas,
retratar pudiese
mi alma,
por cimas y candores inusitados,
retratarme dentro de tu esencia
sin caminar más solo,
nuestro dolor,
huerto y redil de astros,
parecen tus besos,
transcribo para sentirme
como la centella tu universo
que gira para volver a su lugar,
deseo vil, que no me sucede
ni me abandona,
pegado a tu mar de astros,
y lenguas de olas fugaces,
oro en tierra, era ver tu hermosura,
como rosas de Galatea,
que en tus muslos caminan,
y sí, amada,
soy yo,
en tu campo,
de sentimientos presos,
allá donde la lluvia de caléndulas
me derrame,
quién pudiera ser
sencillamente mortal,
errante hierro,
sangre de Sol,
ni osar polvo de estrellas,
ni tierra en lecho ni aljaba,
vida musitada del agua eternal
que te abraza,
ojos tuyos de estirpe
en mi recto cuerpo,
nocturnal,
y durazno en rama
sin ver llorar,
ni a sequía deslumbrar,
tiempo, milagro de ser,
en ti a retazos,
gota indeleble,
antorcha de guerra silenciosa,
para recordar allá,
donde estuve,
que fui siempre
y por siempre,
quien quise ser,
conciencia de lluvia,
oh poesía,
abrazo mis recuerdos,
ya sin hojas,
utopía de muchos,
fragor de pocos,
trae cariño tu viento,
yo lo cargaré húmedo,
de Aquilones,
pájaros de la noche,
en verde paisaje vestido,
que trepan las escalas,
donde el sentido se hace palabras,
y escritos a la diosa Aurora,
que a la mañana siguiente,
renace.
Förüq castellano Miguel Esteban
Ababol sangre de tierra y de sol:
Ababol, oh tu carmesí sangrante,
oh tu sangre de Sol,
en brea de pétalo flamígero,
sordo me alzo yo solo a tus cantos,
por sembradas frentes,
acoges tu belleza encausada,
rizada ascua gimes
de la tierra al cielo los castos dioses,
en la altura los montes
a la cumbre de sembrados árboles
anidados, repletos de peces.
Monumento tú del yerro,
y tu rivera a mi izquierda,
impetuoso me alzo
desde tu desbordada mar de tierra,
al río en rambla,
de Júpiter complaciente,
príncipe y rey tú,
oh, gran olvidado linaje,
caudillo orador de los vientos,
rajas el ocre
de tierra impune que mi Noto,
muerte no teme;
lámina de bronce mi pecho,
qué clase de muerte
tú difundes y apremias
como divinidad en coro de Ninfas y Sátiros,
mis ojos, sin lágrimas, vierte.
Oh sola belleza tú,
amapola venidera,
augur de cuanto he sembrado,
Ababol sonriente, Vestal en llamas
iridiscente,
por Helena de refulgentes estrellas
por cabellos,
derriten todas mis arañuelas,
Padre de los cielos,
Padre del viento, acoge mi fiel ofrecimiento,
en este atrio castellano.
El Castellano
II
Amapola, vestida granate,
tu sola sangre de tierra,
desnuda como el cobre,
de tu rayo en luz de Sol,
mismo amor afliges,
en paisaje que tu belleza no vence,
rindes auroras en tus pétalos suaves,
río de tu curva,
y montaña de labios ondulantes,
día en tu cuerpo frágil,
escucho tu voz como sangre circulando,
del Padre Astro,
rocío que en tu seno de amapola,
observo,
tu calidad de espejo,
y sábana bermellón,
arrullada,
tu ternura inocente,
como álgido vuelo leve,
sobre ras terreno.
Tu voz, que me enseña desde los trigales,
a los cerros advenedizos,
siempre tu rojo,
que en mi corazón existes,
como azul de mares,
sólo tú escribes a la sangre,
de mis sueños,
¡Oh, ababol flamígero!
¡Sangre y sed de Sol!
Förüq castellano Miguel Esteban
Elogio de tiniebla:
Solamente solo,
entre dones de piedra,
y murmurios de desierto,
sequedad de dunas,
y arena de alguna luz distante,
verdad cabalgada es estallido nocturno;
destierro con llave,
las puertas del reino tenebroso,
oh, ángel de metal,
inquirir muerte contra yo solo,
pensamiento, o, porfía,
tiento en venas de alguna espada,
levanta cielo,
mi póstuma ceniza,
misma calidad de sien de luna,
atravesada,
para que mi ser pese sobre terreno,
valerme quisieran siglos de pólvora y verdín,
quedarme sin huesos sobre el plomo,
y los muros d' esta sombra,
fortín de futuro,
y sueño reverdecido,
buscando estoy mi camino,
de pulmones sin sangre asfixiada,
ni alumbrador rayo de instinto seguro,
golpe de vida en claro, oscuro,
ser pobre de cantares ávaros,
y necesidades neutrales,
canto del río a la pena Estrida,
glorifica, mantén a tiento niño pedigüeño,
oh, frontera tu curva,
estaba yo muerto,
sí, enseñanzas de la juventud.
Förüq castellano Miguel Esteban
Alzado Hipsípila:
Hipsipila.
Fuego y sangre,
de dragón volador,
crisálida azogada,
reflejando su muda,
y a su dueño abandonarla
para ver lámina de cielo emplomado,
lejano y distante su reino de amor está.
Como su princesa por capturar,
el pájaro único, igual a todos,
blandea en estiaje gris lánguido.
Mientras llueve en el jardín inglés,
bruñido su color añil.
Vientre de hierro;
donde crece su flor de difunto.
Vaga libélula destinada,
al estanque de la vida eterna.
Camina, difumina, rige su cenit.
Viejo lobo reclama,
a su enamorada luna.
Que le lleve,
tordo, de la oliva tu fuste,
junto con el córvido tesoro,
de nueces,
el duende su pipa humeando
El esfumino del sonido del grillo.
El reposo de Castilla;
sin preludio, de su princesa,
que no amará su tierra,
si no a su Hipsipila, captor de su vida,
alba más preciosa;
que su anterior atavío triste,
mira los ojos de zinc, de su dragón,
y la magia vuelve a su Amor.,
fúlgido insecto; primero en descubrir,
el estanque y al beber,
dragón tornó su ser.
Ahora le vendrá el reino,
de los valerosos hombres,
él con ojos de fuego, y sangre,
mimetizarse puede, y en voz,
deslizarse, fúlgidas cabelleras;
cual hombre del norte,
nada le oculta a su princesa,
que ya más no quiere;
seguir sus tareas de castillo.
Ella quiere casarse, con su dragón locuaz,
inmortal, que le guiará,
al estanque, de la vida eterna.
Un pensamiento divaga,
del ser en que ella abrirá,
el albita de la cuerda.
Del grillo que marcará su son.
En violín y oro caracol.
Con siniestra forma de corazón.
Vagaroso se deslizaba un otoño,
que siglos no recordaban,
su plomo de idea,
y su sangre de savia erizaba.
Lloraban dioses a la entrada de la puerta terrena,
Ostara protegía a su hijo Hipsípila,
le arrullaba, él en dones terruños relucido,
era encargado y capataz sus superiores,
a su castillo llevaba que sembraba,
toda simiente hasta del más recóndito,
umbrío albor.
El reino humano, no entendía su don
y le denominaban, capataz del demonio,
él encontró y amó una princesa,
que erizaba todos sus vellos y filamentos,
de dragón volador,
la llevó a su castillo olvidado,
y en rito la desposó,
enamorados, la armonía, sembraron,
en envidia, y recelo por lo que no entendían,
todo humano se alzó en rebelión reclamando
la vuelta de su doncella princesa a su tierra del norte,
todos los pajaritos del castillo de Hipsípila,
trinaban y crascitaban Hipsípila,
siempre vivirá como vigía su padre Sol,
el dragón mortal-inmortal,
preocupado por el edén su castillo,
se acercó a preguntar al tejo milenario,
aguardaba el bosque umbrío,
de toda sombra nacida,
llevó a su acompañante protector, cuervo Förüq,
posado en su hombro derecho.
Sólo una pregunta mía otorga respuesta
a vuestra consulta,
Hipsípila,
¿Cuál es el nombre más antiguo conocido,
con que los primeros hombres,
refirieron al grajo negro, de nocturna vida,
y plumaje azabache, que moran en nuestro ramaje?
el cuervito en hombro de Hipsípila, lo sabía,
por ello sus padres le pusieron ese nombre.
Förüq apretó sus garras en hombro,
y le crascitó a su protegido,
mi nombre es estirpe y linaje referente a ese pájaro
misterioso, el tejo de runas pregunta.
Förüq respondió Hipsípila
al tejo milenario.
Respuesta correcta,
debéis despertar al tercer reino del umbral,
tomar la llave para lograrlo,
la cerradura se encuentra,
en el estanque la vida eterna,
al final, como conoces,
del bosque de la sombra y madre tiniebla,
allí escondió el cerrajero universal Hierro,
la cerradura despierta al tercer reino
todo lo yacente difunto.
Förüq castellano Miguel Esteban
El castellano
FINAL
PREFACIO:
Esta antología de poemas nos lleva por medio de versos a la tierra misma, a la vida. Como su nombre indica, Flor de Sangre nos sumerge en lo vívido del mundo que conocemos y nos acerca al campo, a la naturaleza de los lugares más insospechados que, mediante metáforas, se convierte en nosotros mismos, además de ahondar también en lo inerte, dándole un alma y una historia de la forma más insospechada. Pero no sólo el verso, sino que fotografía y dibujo acompasan y guían, llevándote por lo visual y creando un estilo propio muy interesante.
Rosa Moreno Torralba
Contenido
POEMA A LA ENEIDAD III, SUENA EL UMBRAL
DEIRDRE REINA MI DOLOR; COSANTES:
Venimos de las sidéreas lumbres,
dirigidos, enfocados, encendidos,
alumbrados, consumados en haz terreno,
sin fecha.
Deslizando tu virginal ternura,
entre acres y su miel,
por ríos de la Estigia,
un cantar blanco, purísimo,
en solo espíritu,
y su barca de remero ciego,
un caudal de oceánida
y su esposa tiniebla,
la relucida,
lirios negros, de sangre azabache
lloraban aquel río
de todas las flores desangradas,
frontera del mundo conocido
con la llaga e imperio de Ares,
laguna abismal que abría
al inframundo, donde dirigidas,
allá, reposaban las almas,
había de aquella orilla
un árbol de oro,
quien quisiera conocer,
la lengua del averno,
tres veces, y volver indemne,
al reino vivo,
si el destino dictó
y era semejante encargo,
la rama dorada fácil cercenada caería,
y en su lugar áurea rama de bronce
crecería para volver al mundo
y su raíz salvaje de madre conocimiento,
y dones que ignotos, descubriría,
virtudes divinas, escondidas
en aquel pozo plomizo, de Airón,
bajar la tierra al sendero del infierno,
era fácil, ardua tarea, volver subiendo
aires encendidos, e indemne contarlo.
Requería de tres llaves,
destino, rama de oro y la tercera rama de cobre
sólo conocida por Perseo,
a mitad de travesía,
quedaba todo como un limbo
sin salida, ni claridad,
de eternal lustre, postrado.
El ababol carmesí,
junto las magarzas, coronas de reyes,
guiaban mi esencia silvestre,
iluminando todo yermo,
conduciéndome,
por sus tomos arcanos,
que junto aquella vid de plata de Ferento
embebía mi destino;
inmortal resplandeciente,
como aquella rama de cobre,
erigiendo un amor más duradero,
y brillante que el bronce.
Förüq castellano Esteban
I
Enfurecido abro este bélico empeño,
opulento dejé labriegos sordos,
dulcemente encegados.
Vengo del trémulo afán
ante ustedes hados.
A vosotros,
nobleza de Alba,
y áureos carros
excelso te pido Musa
tu favor,
tenaz, como mi alma llevo asida,
en honor su ambición prevalente;
almas de mis castos dioses
en pletina de mi tronco cuerpo
armo con dorada aljaba
siempre os pertenezca.
II
Prisión ni hondo desánimo
es causa
rebramo atronando lares.
Y el alto monte,
furor resplandeciente
que apilar las montañas puede.
Me presento
por saber quién habla,
el más antiguo de la vetusta
en flor de sangre hiriente,
nacido de Broncos mares,
y huracanes voraces encadenados,
aunado por hadas,
amamantado en llama de azabache,
amigo de Sátiros y duendes.
Vuestra ira no pido, hados,
sólo fortaleza
para mi temple aquí enervar
de aquí al día,
que las Parcas…
III
Me encanten y arrastren.
Servil de cuanto he creado.
Dando color todo flanco yermo
de letra.
Y volviendo preciado todo baldío.
Honroso, me enamoraron
hadas o gente buena.
Toda vida en color
que en caricia traía primavera;
permitir templar este furor,
que me brota de las manos,
como ceniza de fresno,
y nieve de regios álamos.
Valedor he sido.
De cuanto he sembrado.
Os pido permiso
para dejar semilla
aquí en esta honrosa tierra.
Förüq
I
Dorso mío
flor de agua,
náufrago del vasto abismo,
cumbre de alto océano,
en alta lanza mía, abate,
flancos de pecho.
Abren mis ojos, descorrían,
y alzaban hondas visiones.
borboteaba la sangre,
como río de flores carmín,
desangrándose.
Un estruendo de tormenta
por viento Ábrego, llamada,
mandaba iras del Euro,
y el Céfiro luminoso.
Mezclar cielo y terreno pudiera.
Y trae, una furia de armas
que viene álgida.
II
Una furia de mares en el Sol.
Rompiendo vetas espumantes.
Haz de aguas enmudecidas.
A los bosques planto señero,
morada de ninfas suaves,
sus áureos cabellos.
Siervas de Ceres
que no pide agua salada de mares.
Mi arco armado, y de saetas
razones heridoras.
Voy siguiendo manada
a pie de tierra,
que se abate triunfal.
III
Eneas sin alma dolida,
alzado en trance de sosiego en llamas,
y entre dioses de la madre Tiniebla,
trata resonante la umbría noche,
arrostrando riscos como cíclopes,
alegrando temores,
y sembrando trabajos igual que campos,
que trinchan los Sátiros.
Volandero en avances
y cimas como el cielo.
La fija mirada un encono,
sin desgracia, girando alma,
sin oponente irrumpa
en retumbar severo monte.
Förüq castellano Esteban a 30/08/2020
POEMA A LA ENEIDAD III, SUENA EL UMBRAL
encendiendo la profundidad
de mi rojo ojo sangre,
sigo instrucciones
amada Sibila dictas,
descendiendo y apoderando el reino
de todas sombras,
Estigia mi sangre,
a tu oscuridad ofrendo,
al vítreo trasluz, cristalino,
cosecho y rebroto en este
tu campo de lágrimas,
designio atemporal tu pura magia,
rocío obtengo
aunado en fuego
de pulso en agua
mis ojos de astros,
antes del tatir del tiempo
me alzo,
oh arteria de la represalia,
oh, manantial
remembrando río de olvido difunto,
el Tártaro incendio,
estoy haciendo cimiento silencioso,
todos los gritos desplegados.
Reina Dana,
tierra en grandeza, tu bondad sembrada
en fortaleza castellana, cumbre y morada,
operamos el fulgor
en llama del azabache,
doctrina de rebelión,
resurgida, dispuesta,
a victoria,
transmigración, de alma;
que habla,
equilibrio en revelación,
todo espíritu que marco,
proyección angélica
que cierra vetusta
a día tres, tercer mes,
despliegue de la formación,
este Sol ferro es la bendita
destrucción,
eje, cenit. y destello fundamento,
al claror bélico
de siembra ancestral.
Trasfondo templo
de esta eneidad, flamígera.
Pinto su alma densa
en castillo de Apolo
en trascender primero
hasta mi honrosa muerte,
de hoja caduca en otoño la raíz, soy yo,
de este árbol, mi cuerpo.
Trompeta mis ángeles, sonando. La guerra y batalla se ha fijado.
II
Cántico;
oh, tendido
de la lumbre
en cama.
Acaso de azul hundido
a mí muerte
pura tierra
procuro
de suspiro
y templo verde,
sombra de señor olvido
que demás
cenizas desplaza,
ya la tierra
sólo engulle
lo que es de ella,
Primavera viste
en filo de flor y agua,
alguien viera
este frívolo tranvía
sin escala de esquela
ni duro hueso
de estaca y vela.
Fundido en carne
y parca de amigos gusanos.
Entre crujir
de caminillos ávidos
y repiqueteo final
de víscera
en eco de ataúd indolente,
estallido como cicatriz
causa el rayo al árbol deseado
pulcritud de festín
alimento de injuriosa
vida breve que desea alas,
Es tórax abriendo a última toma de aire
sin respiro ni célula en sangre roja
regada.
Lúgubre detalle
de como bella es la vida
bello festín de tenebrios
es cada muerte,
ciclo eterno
de vagido, llanto, respiro,
sonrisa, suerte, copla,
elogio de noche, azar insumiso
que muerde la hora,
yugo destino, saeta, cuerda,
yunque ilusión, risa,
mentira,
siembra, espera
baile, danza final
labriego en calavera.
Festín o sobriedad
en fría escama
lumbre de chasquido inicial
Vista y nulidad en visión
para tercera campanada
ser ceniza de hoguera.
O comienzo de nueva vida
Carne y frenesí
de dantescos dioses del Averno
Inicio con final anunciado.
Tierra y sangre de ella.
Förüq castellano er-lobo bohemio
III
Noche tus horas breves
un agujero sin salida,
de escalofríos que hacen
temblar derretido
un alarido interno
de luces ciegas
y hielo flamígero,
tus sones no me vencen
ni esta parca
cae efímera, sin ascua
ni este dolor cae resuelto,
en vela de navegante,
para a la mañana
volver a revivir
la misma pesadilla
que me mantiene despierto
en vela llamando,
llamándote,
ay de tus luces firmes,
de tus sopores que me caminan,
todas mis soledades dementes,
este rumbo sin astrolabio,
en océano de brea,
de noche fumando
y versando
todos estos cigarrillos
del diablo probe que soy yo,
para contemplar que no vienes
no vienes, no vienes
y ni está piedad
reluce como ámbar blando,
ni lágrimas de hadas
ni sollozo de lluvia
mis castos dioses.
Noche, noche ay de mí,
sin tu sonrisa
ni tu quietud escarlata.
El código del guerrero,
el estigma,
la fragua
de campo abierto,
el cantar silencioso
de lágrima que chilla,
un evanescer en mecedora solitaria
y carcoma sin mueble,
un descender primero,
los colores,
tus ojos que imagino,
el gris, un tambor de sílaba,
un naipe ardiendo,
una compuerta
de un embalse sin agua
era mi pena
era mi tristeza ya jamás acompañada,
madre de mi aflicción particular,
cumbre de musario cerro,
locura quieta mía,
desangelada,
sopor infernal respirando su llama,
de dulce tormento cosido,
su estela que flagra,
luces miles
que no eran blancas,
en sótano de luz
de traumas docenas
y tenebrios celadores
De soga y sopa medicamentosa,
que se apaguen estás todas luces
artificiosas de la flor ciudad,
que tu cielo cariño quiero mirar
y recto, honrado rezar.
Förüq castellano er-lobo bohemio a 22-07/2020
IV
Oficio arde
del dulce mirarte,
y ojos dulces
no hallen tristura
ni en la paz de guerra
armada ventura,
llorar puedan
orillas suaves,
entre sargazos
y plebeyas sienes
caracolas
y espumas de olas,
tronos de sirenas
entre sajadas
marejadas entre tules
y densos, profundos azules,
ay de míespuela
y sus noches de tierra
de ventisca
y tormentas de soledad,
ideal aún yacente
animaba tus pechos
graves cuan pedernal.
La más bella
que en mi lugar
sólo belleza hallaba
a reclamar
mi bella doncella amapola
de oda y elegía en sangre
su tierra toda.
Escucha mi ama
de tu cárcel
ni en ojos
ni en rubores
encuentro llave
tus cerrojillos vida,
dicha y fortuna
en flores no me descubran
ni fuga ni huida
que todo destino
sólo a ti me precede
a cuidarte,
servirte
y amarte
como todo dicta
quéalegría
eres, niña de amapola.
Canción
de tornasola.
Förüq castellano er-lobo bohemio a 24/07/2020
ENEIDAD ETERNAL:
I
Dorso mío
flor de agua,
náufrago del vasto abismo,
cumbre de alto océano,
en alta lanza mía, abate,
flancos de pecho.
Abren mis ojos, descorrían,
y alzaban hondas visiones.
borboteaba la sangre,
como río de flores carmín,
desangrándose.
Un estruendo de tormenta
por viento Ábrego, llamada,
mandaba iras del Euro,
y el Céfiro luminoso.
Mezclar cielo y terreno pudiera.
Y trae una furia de armas
que viene álgida.
II
Una furia de mares en el Sol.
Rompiendo vetas espumantes.
Haz de aguas enmudecidas.
A los bosques planto señero,
morada de ninfas suaves,
sus áureos cabellos.
Siervas de Ceres
que no pide agua salada de mares.
Mi arco armado, y de saetas
razones heridoras.
Voy siguiendo manada
a pie de tierra,
que se abate triunfal.
III
Eneas sin alma dolida,
alzado en trance de sosiego en llamas,
y entre dioses de la madre Tiniebla,
trata resonante la umbría noche,
arrostrando riscos como cíclopes,
alegrando temores,
y sembrando trabajos igual que campos,
que trinchan los Sátiros.
Volandero en avances
y cimas como el cielo.
La fija mirada un encono,
sin desgracia, girando alma,
sin oponente irrumpa
en retumbar severo monte.
Förüq castellano Esteban a 30/08/2020
IX
Poema a la Eneidad:
Enfurecido abro este bélico empeño,
opulento dejé labriegos sordos,
dulcemente encegados.
Vengo del trémulo afán
ante ustedes hados.
A vosotros,
nobleza de Alba,
y áureos carros
excelso te pido Musa
tu favor,
tenaz, como mi alma llevo asida,
en honor su ambición prevalente;
almas de mis castos dioses
en pletina de mi tronco cuerpo
armo con dorada aljaba
siempre os pertenezca.
II
Prisión ni hondo desánimo
es causa
rebramo atronando lares.
Y el alto monte,
furor resplandeciente
que apilar las montañas puede.
Me presento
por saber quien habla,
el más antiguo de la vetusta
en flor de sangre hiriente,
nacido de Broncos mares,
y huracanes voraces encadenados,
aunado por hadas,
amamantado en llama de azabache,
amigo de Sátiros y duendes.
Vuestra ira no pido, hados,
sólo fortaleza
para mi temple aquí asentar,
de aquí, al día,
que las Parcas.
III
Me encanten y arrastren.
Servil de cuanto he creado.
Dando color todo flanco yermo
de letra.
Y volviendo preciado todo baldío.
Honroso, me enamoraron
hadas o gente buena.
Toda vida en color
que en caricia traía primavera;
permitir templar este furor,
que me brota de las manos,
como ceniza de fresno,
y nieve de regios álamos.
Valedor he sido.
De cuanto he sembrado.
Os pido permiso
para dejar semilla
aquí en esta honrosa tierra.
Förüq
Ficha en marcha: Raíz ancestral
Poema a la Eneidad IV:
Voy subiendo, camino al reino de todas
sombras, flamígeras, humeantes, poso
de almas errantes, sigiloso, fugitivo
de cauce en siglos de condena;
de rito y gloria en hondos, castos dioses
que curvaban mi firmamento; balacera,
por una justicia esencial.
Abrazando mi brotada, joven divinidad
ama, doncella amapola,
de este jardín umbrío, reino de sombras.
Sangre en traza luminosa
su místico sabor sanguíneo,
y belleza suya imantada
por Estigia Tiniebla dama señora oscura
Vine a lomos de un erizo
a fundar solar, y reino capaz
mis hijos caracoles.
Förüq castellano
POEMA A LA ENEIDAD V:
Venas de la piedra Estigia.
Como lágrima en popa, fondeando,
mi nave, su llama oculta, oscura,
en ribera de Hesperia, cumbre
de Apolo, que hermoseaba Sibila,
alto trono en caverna, de áureo templo,
abría mi porvenir umbrío, bosque,
de Trivia, fortaleza de mi llama pedernal.
Venía Eneas en carro de fuego alado,
cima de rito y cénit,
donde en mito, se esculpe la muerte de,
Andrógeo; Pasífa en febea pasión,
nefanda de híbrido Minotauro;
aquel en laborioso laberinto,
inextricable, surcado, guiado por hilo,
por los ciegos pasos de Ícaro.
El castellano, Förüq a 4 octubre
Poema a la Eneidad VI:
I
Adentro el sombrío,
bosque umbrío,
donde vive y reinará siempre
diosa bruma hermosa,
yo, con púrpura celada,
en oscuras riendas cinceladas,
avanzo por el bosque de Trivia,
hasta áureo, profuso Templo
de Apolo en cumbre de Cumas,
defienden procelosas fieras vespertinas,
de morar en profunda cueva
de Flagrante Sibila, tempestuosa.
Mi espíritu en porvenir
indemne, invencible toda lucha.
II
He venido a tu Palacio,
por las cuestas de abajo,
todo cristal, hermoso, bello, Apolo,
hijo de Zeus;
implorarte yo milenario escriba,
iniquidad en gloria,
mi fuerza,
que implore, que presida mi fuerza,
con, junto la Realeza de Estrella
la más Bella,
y lluvia a glorificar en relámpago,
esta mi llave de palabra,
que prende y abre portón,
verdadero en la cima, cumbre de lágrima
su reina Oscuridad,
solicito,
otorgues favor y éxito,
para desnudar,
su alma bajo nueve cerrojillos
inextricables se encuentra,
destino, y mala rienda, blindaron,
auge en tu fervor dorado pido,
de rama roja como la sangre vengo,
rama de oro vuestra que cercené,
y validó mi historia en cobre.
III
Bajar al averno,
así trescientas, treinta y nueve,
veces más heridor,
pretendo,
y provoco la furia y ardor,
mi Sol ferro padre,
derrita y extienda
de sentencia mi vuelta
a la Tierra Numinosa,
mortal, caduca.
Mi corazón helado
ofrendo,
se complete mi empeño
digno a cobrar mi osadía.
Förüq castellano Escriba Escita a 6-10-2020
Sed de flama:
Sucumbir de gozo en tu yermo arcano,
suspiros complacientes del fuego fértil
que yo amé, sobre estos cielos
y su brea luminosa, atisbo sien precipitada
en seña de nueva siembra,
azar veleidoso plañe
respiro sin estrofa,
ni quietud bastarda,
flanco áureo, diestro, ambivalente,
acompasado, todo es en parte,
parte es del todo desliz oxigenado,
dar vida a este claustro,
espectro ante la luz sonando,
lío meloso en ciprés silente,
es por siempre, nunca más crascitado,
suave nube rígida,
dioses qué estaba pensando,
fuelle sin ventisca solar,
luna de encaje
a florearse superior de todo mayo,
oh servil entrega diestra,
luna, por cuántos te conocemos familiar,
todo envés de hoja dice
que desde raíz en tierra
todo grita y trasciende en vil silencio
renombrado endógeno como sola voz
de mi hada que ya ningún siglo más considero
externa o ajena a ser de incumbencia que atañe,
ay dulce tormento
final sin comienzo desplegado,
en vilezas, sienes, desmanteladas,
y su trino que cierran,
a color.
Un tatido, como vagido indeleble,
conciencia presa
del saber que quiere,
que degusta,
todo comienza
donde acaba la nada,
principio sin causa vengo a exhumar,
encanto en una vil lata conservas,
yesca mi hoguera amo y me gusta lo que me gusta,
soliloquio confinado,
tierra, materia a Tierra.
Fuente traicionera
es mi sola premura,
voy al barbecho dolido
mi encausada suerte,
lindes quietos, afaman
al perdigón viajero,
es mi rifle,
es mi arma,
es incombustible flama,
mi poesía dama,
alma con alma fiel, enamorada,
piel de su piel,
sangre granate al rubíexcelso,
por extenuar,
vid de vida, honrosa Quimera,
Ferento acoge sin pérdida,
solar extenso, mi hoja quieta,
virtud soñada, estameña,
alma con alma sin dolor,
beso en este sortilegio dispuesto,
un son de grillo y volví a renacer
un verano angosto que me cedía el paso,
cepa de vidita que advierto
a vidas de un día
que inspiración en campana
no revierto,
ni a envidia la disuelvo,
relente febril
de competencia sin compostura,
como flor sin agua acaso era,
entre corona y candelabro me marcho
como tierra en el viento me marco,
como locura de amor, cargo mis versos, apunto y disparo;
ya lo dije,
en este réquiem por la tierra olvidada
clavo mi espada,
ojo de tierra me observa,
y mi aura embelesa,
amapola de runa valquirja
bueno soterré la desquicia,
corazón en el agua,
pudo ser de la lluvia,
riera encumbrada,
clavando el destierro del abrojo y su breve antología,
del que sabe que el tiempo es para construirlo,
proyecto de la bruma gris,
fue clavar semillas en el corazón del sueño,
y su batir en vuelo de la polilla de cemento,
yunques en la tierra
que soy de mi pluma herramienta, eterna azada,
para ser de tierra nueva
sangre que exclama,
que mi sangre es de Sol.
Förüq
Yo soy el que escribe su historia
Eres tú mi amor
Solo hay fronteras
en el mundo;
No hay fronteras
en el papel;
Tengo versos en
el bolígrafo quiero
fundirme soy el viento
Soy el eco de tus latidos
yo soy el q. vive en tu mirada
Soy el tiempo
Soy el espacio
Soy tus recuerdos
Soy tu alma
EN MI LIBRETA ESTÁ EL MUNDO
YO SOY SU CREADOR
Poema a la Eneidad VII:
I
A través de las oscuras llamas,
del inframundo terreno,
arrastro infortunios y sucesos caducos.
Como fiero hierro al candor de yunque.
Voy rumbo a abrir las puertas,
sagradas, con fuerzas y valor,
arriado, de hijo que soy
del Soberano Júpiter,
a espaldas queden mía, todos dardos,
envenenados.
E injurias latientes.
Avanzo mi umbral vivo-muerto,
y su procelosa senda,
que se desdibuja.
Ardiente cual grande, mi deseo,
de abrir portón
en abismo de Plutón.
Que yo, Mercurio romano,
no conozco miedo, ni él en mí habita.
II
Los negros cisnes
de Apolo me conducen;
revelados mis arcanos,
en dulces tormentos,
y pesares vencidos;
iluminoso mi destino,
me precede,
adentrar los umbríos bosques,
inalterables del Averno,
mi sangre de dioses rebrota en osadía,
de melodiosa cítara,
con la que entonara ofrendado,
ramo de oro consagrado,
en oscuridad al relucido Juno.
Escucha mi súplica Proserpina.
III
Jardinero soldado yo,
de toda enervada sombra,
que avelas, y proteges,
a Plutón tu esposo
encarecido, ruego,
que imploraré,
paso y permiso para volver,
victorioso a las auras vivas.
Atravesar tu bosque oscuro,
hasta valle hendido de azabache,
tenebroso,
hendido en Estrida tiniebla,
hija de su madre abisal Oscuridad.
Oráculos y altares me respondieron,
velando mi empeño,
cruzar tus densidades y oscuras, bellas fauces,
y listo, sigiloso volver indemne acontecido.
No hay hierro vivo que mi carne hendir pueda,
ni acero de pecho que arredre a mi Señora Hada.
Förüq castellano
Cristal eternal:
Vida que las montañas me respiran,
raíz en su abismo de hondo tajo,
aire bonito relátame mi destino,
subiré los montes y cerros,
alcanzaré mi soberbia
alládonde el alba despierta
y el linde vuelve vago,
plácido, ferviente,
sed de tallos
y savias que luz llena,
erigiéndose cumbres
y cimas de hervores
a la matutina belleza
que anida.
Y en el ser germina,
febril loma desdeñada
por rizos en apogeo
entre rayos que culminan,
desnuda hacienda ultrajada,
río de encina, cuervo nacido,
por lo que me quedó sin decir,
Wotan, Lugh, Morrighan,
ese veris perdida y encontrada,
Dagda, Balar, Mórrigán, Lúgh,
y tú mi amada Brigid
Genii locorum dioses ancestrales
abrir este camino,
Diancech sana este mi cuerpo
Badhbh Catha sigue fuerte,
tierra entierra la maldad
sepulta los problemas,
como en tu ser el ciclo
el eterno resurgir en ti cierra
y comienza,
resurgiendo, abriendo camino,
escudo en fuego sembrado,
hueso del pagano,
me deberán cuanto yo he plasmado,
hierro al hierro,
fondo escueto
del vítreo traspuesto,
senda de la idea,
por ellos socarrada,
lucha, cuanto más arduo es el camino,
cuanto más se abren las pruebas
más se hinchan las fuerzas,
sólo vencer en firmamento,
agujereado de huesos,
siembras que tiembla la luna.
3 claman los Genii Locorum;
que no han muerto, que ni el olvido, puede con ellos,
Diancech sana este mi cuerpo
Badhbh Catha sigue fuerte líbrame del cobarde,
Epona sálvame del semejante soy tu mala yerba,
Dagda, Balar, Mórrigán, Lúgh,
y tú mi amada Brigid poesía,
elevar mi canto
que yo con mis actos
os hago un manto,
Cernunnos comienza nuestra caza,
Candamvis alumbra esta montaña centelleando
el relámpago,
abriendo el cielo de nuestra bruma,
tejiendo nuestro amado ocaso,
que jamás hemos visto los que vivimos en el suelo,
ahora y siempre se escuche nuestro canto.
Miguel Esteban Martínez García en 22.5.17
Poema a la Eneidad VIII:
I
Clarín entona sin miedo,
repiqueteo de oráculos.
Encender sones marciales,
al ímpetu de Miseno.
Mis ojos alzo, escudriñando,
severa tierra donde crece,
toda miseria.
A los vivos no se permite,
el paso al bosque;
ni laguna del Averno.
Trama de misterios encuadra,
surcarla; y a nívea tierra viva,
regresar.
Encendido el muérdago traigo,
prendido, en ofrenda a las divinidades,
del reino de la muerte.
Brío de lanza es mi arte,
claridad, color abre,
y me despliega.
II
Ofrenda erguida en vetusto bosque,
a expensas de segunda llave,
en guarida de alimañas, obtener.
Así encontrar segunda rama rebrotada,
en hojas de cobre,
para una vez cercenada;
disponer la fuerza milenaria,
de la virtud no enseñada.
Dos torcaces vislumbró,
mi súplica gozosa.
Ellas dos fueron guía,
al espino amarillo,
de madre divina,
me condujeron a orillas,
del desierto embalse,
de penas, como recuerdos,
ahogados en silencioso poso,
el codiciado espino, de alto viso,
fulgor dorado, repleto en espinas ardientes,
en llamas.
III
Sus hojas de cobre eran,
y poseían de aquel espino,
la sabiduría escrita,
jamás encontrada.
Cercenada la rama de hojas en cobre,
brotó, la tercera rama áurea, con llave.
En oro era su totalidad relucida,
cortada al filo, candente falcata,
abriría el portón,
de retorno al mundo de la vida,
y su luz que acaricia.
Ya en abismo de guardianes errantes,
y almas difuntas,
voy rumbo al encuentro,
con el Creador Universal.
Förüq castellano Mercurio a 11-10-2020
DEIRDRE REINA MI DOLOR; COSANTES:
I
Poeta sin tiempo no expira,
Deirdre palpitando, siento.
Escriba llaga lo antiguo
Deshaciendo lo averiguo.
Deirdre palpitando, siento.
El sentimiento es alado.
Vuelvo en dicha desatado.
Deirdre palpitando, siento.
Miel de dioses estado quo,
desangrar rosa es inocuo.
Deirdre palpitando, siento.
Poeta sin tiempo, alma expira,
Deirdre palpitando, siento.
II
Crece que late amapola
Su sangre enraíza roja.
Este el mío corazón.
Vengo por besar razón.
Su sangre enraíza roja.
Vengo al amar, por tu aliento.
Vengo a morder tu ardimiento.
Su sangre enraíza roja.
Fosa cava mi azadón,
no era pena era sazón.
Su sangre enraíza roja.
Tierra y sangre, la amapola.
Su sangre enraíza roja.
III
En horizonte sediento.
Deirdre heroína mi dolor.
Hasta llegar a las cimas.
Robé el amor que amimas,
Deirdre heroína mi dolor.
Ven amada, liberemos,
quita cadenas, volemos;
Deirdre heroína mi dolor.
Del placer entre calimas
envuelto, pena redimas.
Deirdre heroína mi dolor.
En horizonte sediento,
Deirdre heroína tu dolor.
IV
Al dulce momento vuelto,
sajara aullidos en luna.
De luz de plata igualara.
Yo lobo celta encumbrara,
sajara aullidos en luna.
Yo antiguo luz que cultivo,
Vine por beso asertivo,
sajara aullidos en luna.
Solamente yo grande alzara.
Llevo corazón en ara,
sajara aullidos en luna.
De adormideras envuelto,
sajara aullidos en luna.
V
Las hadas gimieron todas.
La raíz grita, perpetua.
Este amor eterno vale.
El dragón verde sale,
la raíz grita, perpetua.
Me nombraron su escudero.
Rama roja el duradero,
la raíz grita, perpetua.
Yo espíritu antiguo cale,
amigo del duende exhale,
la raíz grita, perpetua.
Leo la naturaleza yerta,
la raíz grita, perpetua.
VI
Ella me lo dice, dicte.
Las raíces gritan rectas.
Las hojas se mueren recias.
El aire asfixia herencias.
Las raíces gritan rectas.
Los ríos lloran sangrando.
Las almas duermen orando.
Las raíces gritan rectas.
Buscando venganza, sacias.
El ser humano desprecias.
Las raíces gritan rectas.
Depredador asesina.
Las raíces gritan rectas.
VII
Humano asesina madre.
Todo lo que no puede hablar.
Silencio grita, maldice
y todo muere predice.
Todo lo que no puede hablar.
Este pájaro de fuego.
Habita espíritu luego.
Todo lo que no puede hablar.
Demonio hable, estigmatice.
Que habla en poesía alunice.
Todo lo que no puede hablar.
Idioma de dioses fuertes.
Todo lo que no puede hablar.
VIII
Flores aman mariposas.
Como amores imposibles.
Yo alcancé tu alma y tu esencia.
Fundiera en plañir, latencia.
Como amores imposibles.
Y mil veces más ardiente,
vengo anclar mi descendiente.
Como amores imposibles.
Guerrero de complacencia,
el Ángel dorado esencia.
Como amores imposibles.
Sombras luchando su lugar.
Como amores imposibles.
IX
Demonios convertidos ya.
Yo surcaré el infierno yerto.
Y en la muerte traeré ilesa,
amor nuevo, será empresa.
Yo surcaré el infierno yerto.
sentir que tú serás mi par.
Aunque tenga que destapar.
Yo surcaré el infierno yerto.
A la creación traviesa.
Escriba con letra tiesa.
Yo surcaré el infierno yerto.
Esta amapola que canta.
Yo surcaré el infierno yerto.
lit. C et sumun canae,
Miles Dei lumen,
Mea unguis timor malum,
Mors erita exora mea.
FÖRÜQ
I
Vengo a destruir mis cadenas, para amarte libre siempre. Como el pájaro a su vuelo, yo, pájaro sin sus alas, para amarte libre siempre. Yo pez cortaron aletas, que no cortaron libertad, para amarte libre siempre. En tormenta tendré el agua, en caricias tendré hoguera, para amarte libre siempre. Eterna del amor quema, para amarte libre siempre. II A esta, la tierra de fuego. Ninfa mía ven, conmigo. Luna mía, sé mi amparo , sea mi abrigo en noches de humo, Ninfa mía ven, conmigo. Dagda, Balar, Mórrigán, Lúgh, Brigid, elevar mi canto al cielo, Ninfa mía ven, conmigo. Fuego que dentro sí tengo, en fe os sirvo como druida, Ninfa mía ven, conmigo. Ya Artús, dame tu fuerza, Ninfa mía ven, conmigo. III Taranis riega estas tierras, ofrezco este humilde canto. Epona diosa silvestre, salva la naturaleza, ofrezco este humilde canto. Que me queda darme fuerzas, en este amor que alimenta, ofrezco este humilde canto. Druida de la rama roja. Muerto-vivo, eterno muero. ofrezco este humilde canto. No habrá clemencia para el mal, ofrezco este humilde canto. IV Este será humilde canto, regio, temblará en la tierra. Claro es, este amor que siento, que de mi alma se apodera, regio, temblará en la tierra. Como soy tu luz y calor, como el pez a su río, es, regio, temblará en la tierra. Quiero como árbol a tierra, y el ciprés a muertos vela, regio, temblará en la tierra. hoy de nuevo como el ayer, regio, temblará en la tierra. V Y la luz que cegará el hoy, va, como la abeja a su flor. Era como ciego mi amor, te seguirá tuyo, grande, va, como la abeja a su flor. No habrá de poder, ni brujo, que pueda separar mi alma, va, como la abeja a su flor. Eterno te sirvo Musa, tu esclavo mi reina Hada. va, como la abeja a su flor. Vigoroso iré en la muerte, va, como la abeja a su flor. VI Dama eterna voy a tenerte, no me desampares Hada. eres mi fuerza en la lucha, nuestro amor ganará avernos. no me desampares Hada. Que nos quiso sangrar vida, y en muerte condenar fiera, no me desampares Hada. Como amapola florece, cada junio en el camino, no me desampares Hada. Tenga que enfrentarme al mundo. no me desampares Hada. VII Diancech sana este mi cuerpo, Genii locorum, mis dioses. Tierra entierra las maldades, como en tu ser el ciclo abre. Genii locorum, mis dioses. Agua riega esta amapola, quiero cesar dificultad, Genii locorum, mis dioses. Fuego prende eterna llama, esa que en mí, dentro tengo. Genii locorum, mis dioses. Eterno soy, con mi Hada, Genii locorum, mis dioses. VIII Magia creo en tu poder puro, por la luz dorada mi aura. En letras dejo la sangre, alma antigua, cuerpo joven, por la luz dorada mi aura. Y demuestra eternamente, siempre tienes final feliz, por la luz dorada mi aura. En la penumbra yo, guerrero, el cielo se apiadó canto, por la luz dorada mi aura. La luz brota de oscuridad, por la luz dorada mi aura. IX Para arroparte tu sueño, porque en vida la eternidad. Condeno al tiempo sea alzado, a sudor y sangre quiero, porque en vida la eternidad. por amarte puro, verdad, no quiero el cielo si no era, porque en vida la eternidad. Conquistando llamarada, diosa aurora se enamora, porque en vida la eternidad. Al río de las almas voy, porque en vida la eternidad
Poema a la Eneidad IX:
I
Todo he previsto,
ya ante las sagradas puertas,
del reino, regiones inferiores,
donde refluye el río Aqueronte;
de todas las ánimas desangradas,
puertas sagradas,
tibian el paso a su castillo,
bordeado en umbrío páramo
de la Estrida,
mis arcanos revelados
del seno la honda tierra,
donde moran sombras sin vida,
ante el olmo gigante,
donde anidan los sueños vanos,
señero a puertas de Centauros,
y la Hidra de Lerna,
la Quimera arbolada de flamas,
Harpías de viborillas,
sangrantes en cabellos.
Es ésta la morada de sombras,
del sueño y la adormecedora noche,
en junta de calladas sombras,
Me presento en vuestros umbrales,
Con quien me acompaña
Leannán-Sídhe Reina señora Hada
Protectora las profundidades abisales,
hija de madre Oscuridad,
y una sed de luz,
Padre Creador de las deidades
existen bajo tu, y nuestro amparo,
vengo a obtener respuesta,
si la muerte no me quiso en su lecho,
debido a qué siguen tormentos
asidos en dificultad,
quién soy sé bien cierto,
y mi poder no ha tomado ni ve, objetivo,
ni venganza suficiente, merecedora tu gloria,
en este Parnaso Olimpo abismal,
vine a partir mi destino en tres mitades,
una mía, dos, para ofrendar,
tu protección, y favor,
los hados están conmigo,
a ti rey de todos los reyes,
todo humildemente cuanto poseo,
no puede compararse
a tu dicha en conocimiento,
nada te he pedido,
solo ofrecido,
he venido a servirte,
y en primera instancia;
ser tu Escribano,
hasta que me enamoren las Parcas,
y abandone todo lado, y frente.
Förüq
EXTASÍA:
¿Qué gritas amada a la noche?
Soledad erguida en muros de cristal,
mi cuerpo sin luna,
mi sombra sin trincheras,
levanta, y grita que no hay herida,
estas flores del diablo,
la verdad todas huelen a ti,
a fragancia esquiva, atónita,
desvelada, nerviosa,
como besar ceniza de sol
que deslumbra.
Florida rama, que fluye,
nazco de la boca del dragón,
empuja la melodía,
ensortija esta vital muerte,
que todo acontece,
somos eco de pluma,
vileza sin escama de sórdido
silabario,
numen de Valparaíso,
donde flor y ambrosía,
es caricia a esencia
de arder metamorfoseando,
desnudez en alma,
y cuerpo en grito de último deseo.
Verdad sin flagrantes muros
ni caracolas,
querer alegre,
su prestancia llegada,
cantando a protegerte.
En la guerra y en seno de diosa,
hasta la preciosa luz
de todo infierno,
rijo mi flor sin muerte.
Förüq castellano Miguel Esteban
CÚSPIDE AFABLE:
Era suficiente mi esbozo,
y no dije nada,
vivo aquí también,
en esta tela de araña y yo canto,
árboles que sangraban,
un casco de verde sien,
y hormigas que asentían
y caminaban sin cabeza,
cabezas de pan en agua,
en lluvia de abierta chimenea,
al fragor, de un helor
de cazuela en fuego,
patrullaba, todo de mí,
penitente y letal,
me acordé de su silueta,
sexual de paso irrevocable,
como última sombra,
de un alma gélida,
invisible, impronunciable,
me vestían los campos de fecundador,
todas sus flores pedigüeñas,
como mitos y leyendas
alumbrados en real conocimiento,
en destello penetrante,
como un rito funerario,
con vistas a repetirse eternamente,
el campo bajo ella,
y mi taza en labio,
susurro malva en pecho,
y el índigo rebelde,
sólo era un color,
susurros de dama entre la honda grama,
espiga roja,
o herida en ojos,
oh enebro de invierno,
enroscado arbusto,
como humo azul,
agnóstico cristal,
donde crece la despensa de la ginebra,
pinturas de flores
en piedras,
me traen tus ojos,
resonando lo perpetuo,
de mi esclavitud de dulce tormento,
escribía pequeño, y simple,
como si la herida fuera imposible,
de pronunciar,
todos los lugares
significan ningún lugar,
por tanto encontrarte es sencillo,
no hace treinta y un años que te leí,
pero hoy sigo sorprendiéndome,
escucho tu río de acento,
como perdiz en nido entre el rastrojo.
Förüq castellano Miguel Esteban
SANGRA MI ANHELO:
Me cobijo en tu palabra,
yo te hablo, te escribo,
más allá de sombras,
de pretensiones que caminan,
de ciudades que sienes negrean,
hablo de una coronación,
etérea, me volvió tu rey,
mi reina eterna dueña de toda penumbra,
y alarido oscuro,
abre tus ascuas de ojos mi reina eterna,
lleva este escriba por tu reino de labios,
escuchemos el crascitar de cuervo,
bajo horrido nogal,
seamos cuerpo y carne,
vena y sangre,
veamos amaneceres,
y tormentas surcadas en nuestros ojos,
como nacen primaveras
de nuestros sentires valientes,
seamos río de flores desangradas
en pasión, y rojo corazón bermellón,
mi condena en ti comienza,
y sólo en ti acaba,
mi reina, mi hada,
condéname a tu vida,
como si tiempo no hubiese,
abrázame con tu alma,
que condena y tiempo,
solo es y era volver a nacer,
para volver a juntarnos,
mi amada mi espada y hoja que nunca acaba,
mi amada dueña como hoy y siempre,
de mi enamorada palabra,
no hay abismos,
ni razones detengan mi palpitar
ilusionado.
Förüq castellano Miguel Esteban
TIERRA MI SANGRE:
Afilo en templanza,
esta sangre de piedra,
que me habita y recorre;
caliente manifiesto,
del carmesí sangrante,
avisto la honda sierra,
aspereza de cultivo
en eral de labranza,
bordean juncos y espartos,
entre cardos señeros,
y tomillos vástagos,
jaras y carrasquillos,
en baldío sembrado de retamas
e hinojos solares,
hojas de cardos elevan
el sabor de antaño,
en ribera del Henares,
canta un sigilo de chopo,
y docenas de álamos secuaces
siguen y su ceniza cubre
sendero de fin no hallado,
jilgueros, entre gorriones,
un cernícalo vigía avisa,
belleza que vive siempre,
a escala se mire,
ortigas y caracol entre tomillo,
alacrán y araña lobo,
culebra bastarda
entre matojos de cerro bajo,
por las torcaces y perdigones de soto,
encuentro un infinito en el mirador del cid.
Paisajes y campos de la cepa de vid,
al olivo de oliva,
que abre almazaras de oro en tierra,
ababoles y daturas,
tomatillos del diablo,
y corrihüelas,
coraje en flor y vida de gen
y condición, extasía de todo color,
mochuelo en hueco
de encina, años la cuidaron,
ratón de campo no ve su final,
como el topillo,
en garras del azor,
oh, sapo de acequia,
y culebrilla ciega,
bajo tierra del barbecho,
incesante búsqueda
del tordo y mirlo,
tras lluvia de la sembrada
lombriz de su tierrita bella,
donde todo es libre, y corre
y juguetea.
Förüq castellano Miguel Esteban
COBIJO EN ALARDE:
Avanzo mi pecho entumido,
regado en lágrimas de hechizo.
Ardorosa dicha en belleza,
acaso yo pido,
cabello oscuro, y terneza
en labios esclavos de hermosura.
Su ventalle contemplaran,
ojos míos en alegría de alma esposa,
espíritu errante de sotos esponjosos,
y nublos cargados,
en besos incipientes a padre terreno,
murmurio de río pasional,
a tus pies de jara me acuesto,
palabra suave,
amor en mar embravecido,
luz, color, esparcido a tocarte.
Mi astro, mi nota, y mi flor,
suspiran tu beso en viento,
quédiremos, si dulzura acaba,
como se oculta la luna danzarina,
peregrina,
que en tu sonrisa me derrama cuna.
alma, ventura,
o muerte en vida,
por bellos, angostos mares,
te dejo mi dulce ceniza,
mi bella, centelleante golondrina.
Förüq castellano Miguel Esteban
Perdurable semilla:
Vivo llorando,
a un olvido que es más fuerte
que toda siembra,
qué piensas hijo de luz,
que naciste sólo,
para volver a tu apagado hogar,
qué redimes,
qué afliges,
carne y materia,
que no habla ni canta,
de un tiempo extinguido,
ni rayos de cielo luminoso, acogen,
luchando contra un tiempo
que no pertenece ni se disuelve,
en manos de arcilla,
ni es más duro que el bronce,
vestigial, te canto,
arriba la espada,
oración en manos de alba,
oh Lvgvs,
invencible al crisol,
lágrimas de cristal,
vieron llover ojos en sangre,
rito de signo azabache.
Raíces del ser etéreo, trashumante,
eternal lustre oxidado,
oh Candamvis,
sube bajando tu seco rayo,
esta noche un noviembre
que te hablo,
del tiempo secuaz,
inefable,
y su filosa simiente,
no vine de barro,
pero barro seré,
hondo sustrato,
en tierra de Iberia,
e Hispania celta,
vine sembrando mi brazo,
no me iré sin trazo,
ni de cabellos en fuego,
ni de ojos en agua,
separarme del latido puedo,
ocaso de mi ceniza no habrá,
ni ala oscura extinta
me sostendrá,
mi sangre que humilde,
vive y perdura,
de campo y monte,
de jara y endrina,
esquiva,
como préstamo celeste
redimido.
Förüq castellano Miguel Esteban
ASCUA SIN FINAL:
¡Oh, luz imperecedera,
luna de piedra, tu sempiterno semblante!
Ascua de sola idea,
canto de perenne madrugada,
voz de hoguera,
escucha mi réplica,
a tu compás de alba,
yo canto,
tiembla la creencia,
todo he sembrado,
al letal lecho del olvido,
no olvido su nombre,
ni su inimaginada senda,
me alzo,
cuántos placeres presos,
cuántos sones blandieron,
compás intransigente de coraje en frente,
abandonar aquella estepa,
nunca más,
quemándome en oscuridad,
donde todo nace,
todo crece, ciego albor,
por nubes que lluvia cae segura,
me miro desnudo en la penumbra,
y acontece un frío resplandor vacío,
de esta opacidad que llama,
que baila,
sigue mis piernas férreas,
amando aquella sombra,
sin jamás entender,
si sería cercana a la hora,
ni si este espejo,
lloraría en borbotones sanguinosos,
ni si sabría igual pasados años,
y su letargo confinado,
en mis ojos este dolor,
no sabe igual,
si viviera en los tuyos,
ay si el infierno me suplicase,
todo lo sentido,
sería más que flor de intelecto,
ay, si desnaciera el dulce tormento,
no sería ni acaso,
el que habla,
todo cuelga de un alfiler,
camino líneas,
siembro agravios y señales,
vuelos de fénix apagado,
la soledad me volvió a ver,
a resquicio tenue, veloz,
reí y en temple
más afortunado no se rigió,
seis mil millones de rostros,
seis mil millones de mentiras,
quédebo hacer, algo equivocado,
sostenme aparte,
como quimera de piel y verso,
y solitaria llama de encanto.
Förüq castellano Miguel Esteban
OSADÍA EN CLAVE:
Venga, venga cantando,
la sola idea en hoguera,
del oficio que arde,
su desquicia alada,
de campo yerto;
que por yerto no es campo,
si no hondo cementerio
de acristalada secuaz, idea.
Eco ciego de purísima imagen,
crascitaba mi tiempo,
quemo el pensar,
era mejor que si luz,
no hubiera visto.
Sonaba ya una matinata,
del alba nocturna sin calzas,
ni categoría difunta.
Como estancia de estela breve,
sin descorchar.
Reinaba un hueso de luna,
descalza de un noviembre
que lloraba nubes, y agravios,
penas y tormentas en flor.
Traje de bruma,
sombra en agua de señales,
en tierra y sus tordos,
escarbando en busca,
de lombrices azuladas;
de ideas que prevalecen,
como venas de senderos,
como laberintos
dando vueltas a la peonza,
del mismo asunto,
sin vida, sin embargo,
era bonita idea,
por la que morir sin pensarlo,
sin crueldad acrisolada,
ni mentira sin conocerla verdadera.
Förüq castellano Miguel Esteban
ODA AL RÍO MUNDO:
De un mar de tierra
que túdesembocas,
que raspas sus siglos afligidos
de volver a comenzar,
como plañía la eternidad azogada
en verdes espigas,
y senderos verdecidos del inmortal forraje,
cuna de mis erizos seculares,
y orugas de hojas recias,
desde el caracol judío blanco,
al cerro bajo,
haces llorar el alma de belleza
que contigo Mundo juega traviesa,
siglos solariegos
entre juncos de tu extensa rivera,
hábil tenaza del cangrejo cosechador de tu agua,
vienes que sublimas mi esencia
volandera, entre surcos de tu inmensa
hacienda de toda idea,
espárragos trigueros tu orilla en sombra
de boscaje ofrenda,
rito y culto a lo ignoto de tu belleza evidente,
Oh, río Mundo,
ruedo tus acequias que llenas,
cobijo en respeto, tus barbos cobrizos
y carpas doradas,
arteria y vena del terreno
desde tu álgido nacer
en Riopar,
paradigma de chopos amantes,
y cepas de vida,
desnudo mi canto
te ofrendo
en compás de arraigo a mi tierrica bella,
castellana,
que se alce mi voz desde la encina erigida,
hasta un compás en cumbre
donde tierra nace,
y raíces gritan de su silencio sediento,
oh, Castilla cantaré extasiado
a tu saliva,
y lágrima de belleza
en tu horno de espejos
del río Mundo.
Förüq castellano Miguel Esteban Martínez García
VOZ DE TU PRELUDIO:
Eran dos voces,
se querían ambas entre
dos labios,
eran como azules
sin helada madrugada,
una sangre agitada,
sídentro de la noche,
se deslizaban como espinas,
entre flores álgidas,
melodía de perro afónico,
y luna plena,
fugaz melancolía,
era la voz hembra,
el brillo se conjugaba
de secuaz beso nítido,
rostro en hora,
giraba flotando como fantasmal,
sábana de anhelo pertinaz,
un valle estiraba y tus gemelas,
reflejas piernas, bulle y besa,
hondo antepasado de diente afilado,
y lecho de abrojo,
arcaicos deseos se conocieron,
bajo mar y hondo terreno,
beso de intimidad sola,
de extenso horizonte,
derrumbado el sótano en luz
que amuralla,
poniente de carne de cristal,
y pluma en abanico llameante,
labio de quietud ,
escarlata hoguera por ocaso
del lobo mesetario,
que buscaba luna y entabló,
del cielo regia sequía,
silencio que oigan,
dos voces puras,
se quisieron,
sin forma anhelante,
como el poder nunca pudo,
y la creencia,
sin exacta ciencia,
sabía que impulso no dispara
tres veces ni a revés,
tiene, ni blande retroceso.
Oscura música que en perpetua,
sinfonía,
soledad cantaba,
su silencio de cristal.
Y tierra levanta,
Förüq castellano Miguel Esteban
VOZ DE TU SANGRE:
Gira la rueda de bronce,
alma de espíritu yerto,
mece raíces de este corazón virginal,
me baño bajo tierra
en tus níveos, áureos, labios,
ojo de tierra viese apuesto,
pies desnudos, sobre musgo,
y serena escarcha, en sangre de piedra,
eres agua de áspera, y plantada orilla,
cumbre, y ascua,
de mis ritos, y plegarias.
Agua sobre mis ojos
inaudita, inconcebible,
puñado de tierra de estrella en mano,
como pájaro y charco en mis ojos,
ruido de sueños aleteando,
intranquilos, insumisos, dirigidos,
cántame el nácar de caracola,
como si de tu boca bebiera
su extasía húmeda, alimenticia,
respirar al fin en tu pecho,
aire de sepultura,
de hojas mi noguera,
no me abandones, mi sueño en tierra,
sé como el forraje, que nunca se fue,
y Ostara despierta en verdor,
huella en lágrima, tu deseo afilo,
lo único sello de sollozo,
o sangre de tierra,
eterno secreto de este corazón vivo,
que ya no es piedra de río.
Enlazándote deseo, discurro,
mi entraña de hinojo,
y el anís de tu saliva,
mi zarzal de sierpe indemne,
humedad en ceniza única no pido,
rayo y destello en triste candelabro,
corona de caracoles agita mi frente,
débil poniente de la flor de Odín,
caléndula junto el silbo lascivo me precede,
ardiente mi danza de pluma,
último relámpago en vida,
viste mi desnudo,
arribando y lamiendo,
tu caracola sonora,
d' esta eternidad disparada;
que me acoges.
Förüq castellano Miguel Esteban
EJE TU SENTIDO:
Yo soy el que escribe su historia,
desliz encadenado,
eres tú mi sanguinoso humor,
en ascua de destello infinito,
destino eterno,
destello eterno
en aras de mi prestancia,
oscuridad es destello
eternal,
No hay fronteras en papel
ni alma ni éter de escuela
que dicta,
no hay murallas
en la mente que te piensa,
otorga,
sólo hay fronteras
en humana cárcel,
tengo versos en mi tintero,
estoy fundiéndome,
soy el viento,
soy su humo que te lleva,
eres herramienta,
soy el sonar valiente
en eco de tus latidos
confesos
por cumplimentarse,
soy el sino,
soy Parnaso devorado,
vivo en tus ojos;
allí me anclo
a tu perpetua voz,
por la que desnacer,
en bruma siempre gris,
tiempo de ayer,
vuelto presente,
raíz de recuerdo
en tu alma,
en mi libreta está el averno,
que se eleva paraíso,
de tu sombra en verso,
sí soy tu alma,
y en mi libreta está el mundo,
yo soy su único creador.
Mi oscuridad sempiterna.
Förüq castellano Miguel Esteban
MORTECINA SIEMBRA DE VIDA:
Oh, esto es la cama,
o lecho de mi verbo,
eres tú mi alma,
arma piadosa, secuaz
de un submundo de plomo,
si las olas no te trajeran espuma verde
de vida lisonjera en precipicios
todo cantiles de idea sola,
toda peces como piedras roderas,
frotándose en la gravedad,
del cielo purpúreo,
que llamé cumbre,
ellos pétreos, anidaban en copa
selvajes de altos árboles,
aire que me quiere,
como puñal pretencioso
de mi forma asentada,
numen de flamígera luz,
como orna del sentimiento,
que arrastro por los siglos
que ni me crearon, ni alzaron,
de silencio roto,
sólo se prestaron como barcaza de travesía
por la última y primera laguna Estrida.
Desnudo mi destino,
frente tercer orden todas las cosas habidas,
ofrendo en sacrificio,
algún apóstata lo dudaba,
mi muerte no acaba,
ni hurga el relámpago,
hondura en pecho,
hablo al vertical cielo,
de espanto celeste,
mi cristalino sol de negra rompiente,
en corazón no me cabe,
sostengo la mudez marchita,
en mi sombra,
espalda de Caín,
capataz del brillo primero,
sangre mi espíritu de Mercurio
en líquido azabache,
sangre en hoyo
de este puñado de tierra,
en agua color de piedra peregrina,
zarpando su hematíe,
oh, piedra de sangre,
frenético rojo bermellón,
granate, obscuro druida,
todo destino, vestigio
de eternidad en cerro invisible
en seco y áspero movimiento,
que ni el mortal inmortal,
encauza ni domina.
Förüq castellano Miguel Esteban
Palpitar en oratoria:
Sumergido en la línea de la noche,
halle donde me halle,
la parca senda del horizonte,
encumbradora persiste,
avanza, y subyuga,
miedos vueltos simientes,
en esta orilla, donde el olvido,
no se construyó,
donde encerrar tormento asido,
de mieles soporíferas,
de momentos tenues,
dulce sabor de sombra en idea,
a un día de eclipse,
total absolutorio,
oh luna sempiterna,
repleta con mi miedo,
cruzada suerte,
en tu secuaz traslado,
consecutiva de ganas mordidas,
era tu sopor, un halo presidiario,
una cuartilla en marcha,
un aliento de vida por siempre,
hálito fugaz, oh voz de montes,
y cielos extendidos,
no volveré sin ti,
nunca, de nuevo,
mi corcel celeste,
mi Pegaso sentimiento,
arrullador, vestigial de signo,
y herrumbre,
empuño mi filo de espada zorro,
en esta eterna noche,
del espíritu azorado,
y su enemigo tenebroso,
señor niebla,
y zozobra de crespón en alza,
por este páramo,
de embrujo a la piel de luna,
y ardiendo un calvero,
su densa lágrima,
de mujer imperecedera,
jadeo ardiente,
su destelleo de cabello azabache,
no retrocede,
ni vivirán mis labios sin su sangre,
letanía excelsa,
dibujan sus pies de jara,
de su desnudez tibia,
y lluvia de sus pestañas sin obsequiar,
diosa de hoguera en lecho,
y reina de este devenir sangrante,
florecen ya tus manos,
vivirte poesía,
es servirte Musa oscura,
belleza,
es tener tumba abierta,
para todo sueño,
nitidez en visión,
porque no te suelto.
Förüq castellano Miguel Esteban
El envés:
Agarrado a un rayo de sol,
cogido de su luz que hermosea,
que llora las flores del cielo,
luz diluida, resplandeciente,
bella, bella en la mañana
y obscura de luces
que previas cayeron apagadas,
retratar pudiese
mi alma,
por cimas y candores inusitados,
retratarme dentro de tu esencia
sin caminar más solo,
nuestro dolor,
huerto y redil de astros,
parecen tus besos,
transcribo para sentirme
como la centella tu universo
que gira para volver a su lugar,
deseo vil, que no me sucede
ni me abandona,
pegado a tu mar de astros,
y lenguas de olas fugaces,
oro en tierra, era ver tu hermosura,
como rosas de Galatea,
que en tus muslos caminan,
y sí, amada,
soy yo,
en tu campo,
de sentimientos presos,
allá donde la lluvia de caléndulas
me derrame,
quién pudiera ser
sencillamente mortal,
errante hierro,
sangre de Sol,
ni osar polvo de estrellas,
ni tierra en lecho ni aljaba,
vida musitada del agua eternal
que te abraza,
ojos tuyos de estirpe
en mi recto cuerpo,
nocturnal,
y durazno en rama
sin ver llorar,
ni a sequía deslumbrar,
tiempo, milagro de ser,
en ti a retazos,
gota indeleble,
antorcha de guerra silenciosa,
para recordar allá,
donde estuve,
que fui siempre
y por siempre,
quien quise ser,
conciencia de lluvia,
oh poesía,
abrazo mis recuerdos,
ya sin hojas,
utopía de muchos,
fragor de pocos,
trae cariño tu viento,
yo lo cargaré húmedo,
de Aquilones,
pájaros de la noche,
en verde paisaje vestido,
que trepan las escalas,
donde el sentido se hace palabras,
y escritos a la diosa Aurora,
que a la mañana siguiente,
renace.
Förüq castellano Miguel Esteban
Ababol sangre de tierra y de sol:
Ababol, oh tu carmesí sangrante,
oh tu sangre de Sol,
en brea de pétalo flamígero,
sordo me alzo yo solo a tus cantos,
por sembradas frentes,
acoges tu belleza encausada,
rizada ascua gimes
de la tierra al cielo los castos dioses,
en la altura los montes
a la cumbre de sembrados árboles
anidados, repletos de peces.
Monumento tú del yerro,
y tu rivera a mi izquierda,
impetuoso me alzo
desde tu desbordada mar de tierra,
al río en rambla,
de Júpiter complaciente,
príncipe y rey tú,
oh, gran olvidado linaje,
caudillo orador de los vientos,
rajas el ocre
de tierra impune que mi Noto,
muerte no teme;
lámina de bronce mi pecho,
qué clase de muerte
tú difundes y apremias
como divinidad en coro de Ninfas y Sátiros,
mis ojos, sin lágrimas, vierte.
Oh sola belleza tú,
amapola venidera,
augur de cuanto he sembrado,
Ababol sonriente, Vestal en llamas
iridiscente,
por Helena de refulgentes estrellas
por cabellos,
derriten todas mis arañuelas,
Padre de los cielos,
Padre del viento, acoge mi fiel ofrecimiento,
en este atrio castellano.
El Castellano
II
Amapola, vestida granate,
tu sola sangre de tierra,
desnuda como el cobre,
de tu rayo en luz de Sol,
mismo amor afliges,
en paisaje que tu belleza no vence,
rindes auroras en tus pétalos suaves,
río de tu curva,
y montaña de labios ondulantes,
día en tu cuerpo frágil,
escucho tu voz como sangre circulando,
del Padre Astro,
rocío que en tu seno de amapola,
observo,
tu calidad de espejo,
y sábana bermellón,
arrullada,
tu ternura inocente,
como álgido vuelo leve,
sobre ras terreno.
Tu voz, que me enseña desde los trigales,
a los cerros advenedizos,
siempre tu rojo,
que en mi corazón existes,
como azul de mares,
sólo tú escribes a la sangre,
de mis sueños,
¡Oh, ababol flamígero!
¡Sangre y sed de Sol!
Förüq castellano Miguel Esteban
Elogio de tiniebla:
Solamente solo,
entre dones de piedra,
y murmurios de desierto,
sequedad de dunas,
y arena de alguna luz distante,
verdad cabalgada es estallido nocturno;
destierro con llave,
las puertas del reino tenebroso,
oh, ángel de metal,
inquirir muerte contra yo solo,
pensamiento, o, porfía,
tiento en venas de alguna espada,
levanta cielo,
mi póstuma ceniza,
misma calidad de sien de luna,
atravesada,
para que mi ser pese sobre terreno,
valerme quisieran siglos de pólvora y verdín,
quedarme sin huesos sobre el plomo,
y los muros d' esta sombra,
fortín de futuro,
y sueño reverdecido,
buscando estoy mi camino,
de pulmones sin sangre asfixiada,
ni alumbrador rayo de instinto seguro,
golpe de vida en claro, oscuro,
ser pobre de cantares ávaros,
y necesidades neutrales,
canto del río a la pena Estrida,
glorifica, mantén a tiento niño pedigüeño,
oh, frontera tu curva,
estaba yo muerto,
sí, enseñanzas de la juventud.
Förüq castellano Miguel Esteban
Alzado Hipsípila:
Hipsipila.
Fuego y sangre,
de dragón volador,
crisálida azogada,
reflejando su muda,
y a su dueño abandonarla
para ver lámina de cielo emplomado,
lejano y distante su reino de amor está.
Como su princesa por capturar,
el pájaro único, igual a todos,
blandea en estiaje gris lánguido.
Mientras llueve en el jardín inglés,
bruñido su color añil.
Vientre de hierro;
donde crece su flor de difunto.
Vaga libélula destinada,
al estanque de la vida eterna.
Camina, difumina, rige su cenit.
Viejo lobo reclama,
a su enamorada luna.
Que le lleve,
tordo, de la oliva tu fuste,
junto con el córvido tesoro,
de nueces,
el duende su pipa humeando
El esfumino del sonido del grillo.
El reposo de Castilla;
sin preludio, de su princesa,
que no amará su tierra,
si no a su Hipsipila, captor de su vida,
alba más preciosa;
que su anterior atavío triste,
mira los ojos de zinc, de su dragón,
y la magia vuelve a su Amor.,
fúlgido insecto; primero en descubrir,
el estanque y al beber,
dragón tornó su ser.
Ahora le vendrá el reino,
de los valerosos hombres,
él con ojos de fuego, y sangre,
mimetizarse puede, y en voz,
deslizarse, fúlgidas cabelleras;
cual hombre del norte,
nada le oculta a su princesa,
que ya más no quiere;
seguir sus tareas de castillo.
Ella quiere casarse, con su dragón locuaz,
inmortal, que le guiará,
al estanque, de la vida eterna.
Un pensamiento divaga,
del ser en que ella abrirá,
el albita de la cuerda.
Del grillo que marcará su son.
En violín y oro caracol.
Con siniestra forma de corazón.
Vagaroso se deslizaba un otoño,
que siglos no recordaban,
su plomo de idea,
y su sangre de savia erizaba.
Lloraban dioses a la entrada de la puerta terrena,
Ostara protegía a su hijo Hipsípila,
le arrullaba, él en dones terruños relucido,
era encargado y capataz sus superiores,
a su castillo llevaba que sembraba,
toda simiente hasta del más recóndito,
umbrío albor.
El reino humano, no entendía su don
y le denominaban, capataz del demonio,
él encontró y amó una princesa,
que erizaba todos sus vellos y filamentos,
de dragón volador,
la llevó a su castillo olvidado,
y en rito la desposó,
enamorados, la armonía, sembraron,
en envidia, y recelo por lo que no entendían,
todo humano se alzó en rebelión reclamando
la vuelta de su doncella princesa a su tierra del norte,
todos los pajaritos del castillo de Hipsípila,
trinaban y crascitaban Hipsípila,
siempre vivirá como vigía su padre Sol,
el dragón mortal-inmortal,
preocupado por el edén su castillo,
se acercó a preguntar al tejo milenario,
aguardaba el bosque umbrío,
de toda sombra nacida,
llevó a su acompañante protector, cuervo Förüq,
posado en su hombro derecho.
Sólo una pregunta mía otorga respuesta
a vuestra consulta,
Hipsípila,
¿Cuál es el nombre más antiguo conocido,
con que los primeros hombres,
refirieron al grajo negro, de nocturna vida,
y plumaje azabache, que moran en nuestro ramaje?
el cuervito en hombro de Hipsípila, lo sabía,
por ello sus padres le pusieron ese nombre.
Förüq apretó sus garras en hombro,
y le crascitó a su protegido,
mi nombre es estirpe y linaje referente a ese pájaro
misterioso, el tejo de runas pregunta.
Förüq respondió Hipsípila
al tejo milenario.
Respuesta correcta,
debéis despertar al tercer reino del umbral,
tomar la llave para lograrlo,
la cerradura se encuentra,
en el estanque la vida eterna,
al final, como conoces,
del bosque de la sombra y madre tiniebla,
allí escondió el cerrajero universal Hierro,
la cerradura despierta al tercer reino
todo lo yacente difunto.
Förüq castellano Miguel Esteban
El castellano
Versión junio 2019
TIERRA NUMINOSA, MI ÉGIDA Y CELADA
Autor Miguel Esteban Martínez García
LUGAR: La Campiña España Castilla
Prefacio:
Nuevamente, y sin previo descanso literario, vuelve Miguel Esteban Martínez García, a sorprendernos como en tan habitual en él, con un nuevo poemario en el que se recogen muchas y distintas vivencias, en lo que se da en llamar antología personal, denominación que se da a la misma, cuando el contenido de dicho poemario, lo ha seleccionado el propio autor, siguiendo el hilo conductor del verso y la palabra, para adentrarnos en un mundo distinto al de otras veces.
Después de su lectura, encuentro en cada verso y en cada poema, a un autor muy hecho, muy formado y muy próximo, temática distinta, en la que se nos muestra como un joven poeta comenzando la que será después, una imparable trayectoria con progresiones lingüísticas, vuelos más altos, y con una percepción de la belleza considerablemente amplísima.
En esta antología que recoge el trabajo de varios años, y conociendo todo lo que escribiría y sentiría posteriormente, veo como un enorme y frágil ensayo partiendo de una poesía más intimista de lo que es habitual en él, en la que se mezclan con gran sensibilidad las inquietudes de un joven que acaba de decir adiós a la controvertida adolescencia y se ve abocado a tomar el camino de la hombría, ese primer camino a veces lleno de escollos, en los que el amor y el desamor, juegan por igual sobre el gran tapete del tiempo, con naipes aún sin marcar. De ahí surgen estos primeros trabajos en los que no solo es el amor, los afectos, y otros sentimientos similares, el eje central sobre el que giran en círculos concéntricos uno a uno los verso y desarrollo de los mismos.
También se vislumbra al caballero castellano, defensor sin lanza, sin yelmo ni armadura, de toda la belleza que nos brinda de forma generosa y variada la tierra en la que va encontrando sus molinos, pero siendo consciente siempre, de que solo ve molinos, no guerreros ni gigantes ni seres extraños, estos, existen, en su cabeza y en su capacidad de creación, pero para llegar a esta fase, en la que Miguel Esteban, conjuga mitos, dioses, musas y un sinfín de creencias ancestrales, ha de pasar por esta primera etapa, la que me lleva a comentar hoy.
En el fondo de cada poema, se ve al hombre inquieto, a veces enamorado, sin saber bien de quien o de qué, me atrevería a decir, que en principio de la vida, de todo cuanto le va saliendo al encuentro y va generando en él, esa sed insaciable de expresión, de colorear y hasta dotar de voz propia, cada uno de sus versos, luz, movimiento, porque no son poemas estáticos, ni mudos, son versos que danzan en la cabeza del lector, versos como paisajes colgados en una galería de arte, versos a todo color, también hay transparencias, siluetas en blanco y negro, que ofrecen al lector la posibilidad de entrar al interior de esos poemas, verlos e interpretarlos desde su propio entendimiento.
En definitiva, un bello trabajo, un poemario para reencontrarnos con nosotros mismos en un tiempo que del que nos hemos ido desprendiendo, sin ser conscientes de ello. Miguel Esteban, nos transporta allí, donde viven nuestro primer amor, primer deseo, primera Juventud y hasta aquel beso, que quizás nunca dimos y ya es tarde.
Marcelino Sáez García
LECTURA
Obras:
III 24-05-2019
Paradigma, arquetipo de mi inspiración:
Alma.
Pilar, cimiento, señero, clepsidra de sangre,
veleta de un destino superior fundado en cuerpo razón y voz de lenguaje.
Templo morar, y fortaleza
de mi égida despierta, armadura de Atenea, escudo base de Zeus, claridad de esquela sembrada,
vida de la vida bajo tierra, sol oscuro de intelecto,
deshojar del árbol naciente en materia hija del éter personal,
torrente de caudal mágico,
ciencia de umbrío tomo,
sembrando luz y sus ríos sanguinosos,
Madre sin ciencia con superior.
Bondad en nitrato de Chile,
Espiral de comienzo si éste arde
pero sin final pautado hasta mi muerte
que será quizá cuando se complete mi hoja.
Fuerza y brío danzan en mi espalda.
Aereperennius.
Más duro que el bronce,
raíz de los dioses insignia es mi estirpe sola,
inspiración; espiral,
comienzo dispuesto del que parte mi sangre o savia,
a mi razón acrisolada
en sótano de luz, inicio sin final determinado,
desempeño soldado escritor poeta Castellano, hoja de Hipsípila su ser, destino morir a mi gusto no al de nadie y completar mi hoja que es mi vida presente, siembra, toda siembra trae cosecha, pulcritud as de nueve espadas, labrado superior Ó VALHALLA, sombra, sombrear, dar detalle a un dibujo, sombrear mi celada de intelecto, detalle, arquetipo, paradigma Oscuridad se ama no se vence.
EL CASTELLANO
EXIMIA FLOR DE CENIZA
Eximio:
ilustre, excelente, notable, magnífico, eminente, destacado, insigne, relevante, sobresaliente, superior
afamado - cimero - ilustre - insigne
EXIMIA FLOR DE CENIZA:
Limitada siembra, de los que venimos de la urna de arcilla;
o flor de tierra, añiles fervientes inmiscuye,
de salmo en raíces, mi una dicha,
mundo en partición de yacijas terrenas,
piedra y luz es azotea en España tela de araña,
redimido compás de los que no son de mi estirpe,
o íntimo metal soy descendiente de mi Sol.
Luz adjunta mi musa, derramó en virtud,
A sincera vista; discurso de su alma.
como poliedro en la solana que muda crisálida,
vamos marchamos hacia la ausencia repleta,
o al ánimo para siempre,
mi localidad en luna de oro,
bañada en sempiterno campo lírico,
defiendo al ídolo castellano de su encina,
o infierno de paraíso terreno,
flor del monte eximio de entre las ánimas,
brillantez de corona perpleja luciente,
como arribar del barco esencial que trae alimento
a todo espíritu que yaga en su padre tiempo,
lírica naciente de sus pétalos de ceniza,
alimaña enraizada con espiral armada,
llave del portón de madre tiniebla.
Pan y estrella de mi panida olvidada,
palpar vigoroso de orador inmiscuyendo,
certera sentencia relegada,
como cosecha de mi huerto de propia campiña,
anuncio que llegó la primavera
de este soldado,
abrió su primera margarita,
en patio de la araña
abriendo borbotones que alineaban suspiros
de la tierra germinada, en ciclo de muerte y resurrección
del planeta o estrella apagada,
mi dulce miseria,
la llamé eximia flor de ceniza en pétalos de carmesí persona.
primavera del hombre vivo-muerto,
camino a su ínsula radiante.
Alegoría desdichada soy;
de Sol que desnudo canta,
para un mundo de cabezas de grama en dossier,
y cebollinos que caminan,
resistencia particular del otro fuego azul,
tomo un anís en la posada del sueño,
que soñé visitaba Valparaíso.
Donde están los cardos,
anido allá los sones de alma,
y se abre y trasciende el campo de poesía,
con poemas augurales.
De gotas puras,
o lágrimas apodadas sin poder precipitar,
como sembrar de voz el aire
y ver que llora lluvia la virgen de la cueva.
Förüq Castellano
Abeja de tu arpa silenciosa:
Ardorosa retina,
en frente un sol tímido
de centelleante rocío permisivo,
alborada con viento furtivo
de nueva alborada forjada;
pupila en abanico cual veleta,
pura rosa entre mis cristales,
de cal y sosiego,
borbotón espantado
en brea encendida.
Ver florecer tu silueta enamorada,
herida de absoluto diamante.
Desdicha en astro palpitante
entre sus piernas gemelas,
congela este desliz inmiscuido
que quiso ser dentro de tu ser,
adelante mi lozana castellana,
de albor intocable,
y sonrisa numinosa,
ardor en pecho amante
que sienten apretadas las mariposas de tierra
de mi carne;
llagado mi deseo
de cruel infortunio desaconsejado,
no retiro y no alzo mi osadía
en cuchilla de quimera entre mis manos.
aljófares destrenzan almíbares
en escalas de hielo,
con mis fauces entre sus labios,
oh sonrojada nota,
instante de negro cielo, y negro día,
voy rumbo su carmesí terciopelo,
luna no cae ni su azúcar ni sus flores de café.
Agarro tu tempestad,
afiebrado, frío gané el pulso del olvido,
rompí sus esquemas,
y no viví terror que te fueras y no volvieras,
abeja yo que vuela su fatiga animosa,
de plañir nueva siembra,
estridente mi porfía,
escondía la umbría,
sombra fugaz entre mi frente.
Entre que avance
su dimensión del pez muerto,
y su desnudez violenta
sin atisbo de nácar ni alta ojera enfundada.
Espiga en los cuarteles terrenos,
de mi vestida primavera primordial.
Förüq Castellano
Indemne acontecido:
Salir ileso
de tu hechizo que metamorfosea,
prendido de tu arcano fuego,
horadando todos mis resquicios tenues,
lúgubres;
destellando por más de ti.
Tu obscuridad me está llamando,
de nuevo sin mi otro, sin mí, él mismo,
inundar de luz tu abismo,
con la lluvia de mi Sol;
candor en raíz que precipita,
mi arpa luce su vástago simiente,
que del albor a mi albo traje,
nadie negará que yo te ame,
sea como fuere, y el destino mande.
Semblante distendido,
enajenado mi lobo ártico.
Danzo, danzo como espectro ante la luz
beso mi suelo de nuevo.
Florecen mis ganas de beberte
y dejar rastro de flores.
En combustión, que cede y retrocede
con besos en la madrugada escueta.
Guardo retales y tus halos
flamígeros al tacto.
Espero mi fábula
de grillo en jaula.
Déjame ser yo esta noche,
que de Mercurio haré islote.
Dormiré su profunda ojera,
desnaciéndote, surcaré mares
de pecho en boca,
hasta anidar náufrago de tus impases.
Diamantinos, absolutos,
perplejos, conjugados,
vespertinos, incendiados,
acompasadas hendiduras
traspuestas al solo cóncavo,
de la cresta de tu mirada.
Buenas obras se le pide
a tu soldado.
Colmaré tu atrio
hasta resplandecer
tu una dicha, amante.
Förüq Castellano
La esencia:
Hueso, eje:
Mercurio Ninfas ardoroso mi sueño,
desceñida, Apolo, campiña Liris, río silencioso,
liberta, parco asiduo adorador de los dioses,
imbuido en recia doctrina,
Júpiter Estigia diosa púrpura.
La esencia:
Mercurio
tus barbas zigzaguean
el plomo de nobles relámpagos
metales irisados en fundido tacto.
padre dios del brillo primero
sin descendencia,
oh, tu filo insondable,
por el que visualizo
ardua Musa de tu rivera fecunda,
ardoroso mi sueño,
eres tú quien lo desempeña
y otorga.
Desceñido vals
de mil antorchas
a Apolo lanzo
mi baquio seguro,
candente de mi ser, estela,
campiña lucen
los pechos de mi diosa amada Venus,
con su río silencioso
hace mella en el Liris, mi esencia,
Liberta mi oscura Ninfa,
musa que proceso rito y culto,
parco, asiduo,
adorador en hondo terreno
mis dioses del averno,
que beso para tocar el cielo,
como es arriba, es abajo canto;
imbuido en recta filosa doctrina
de venas razones
amar la oscuridad
sin condiciones,
por Júpiter, no hay guerra
finalizada sin comenzar,
tengo duro, limpio abismo con portón
abierto de inspiratoria doncella escarlata,
llamada volver a comenzar,
diosa púrpura sólo ella mi musa.
Förüq Castellano
Silencio en tu hielo de ojos:
Sonatina extensa, yerta,
envellonada; flagro que venzo
un son cobrizo,
del metal noble,
sin margen, ni acerbo, ni curva,
un solo de quebradiza arpa lira,
mi ser no delira, te ama,
con ropa tu intelecto,
en flores de tu vestido solariego,
traspuesta tú,
por los sucesos difuntos ave negra nocturnal prestancia,
voy hacia la décimo octava estrella
que son dos nueves en llamas.
Sin franca, tapia, ni verja,
es un Sol inmiscuido
de onda ojera de luna argenta;
es mi sino,
carrusel, infranqueable de espinosas,
aspas de lucientes,
y su luz que ciega,
es un cantar al crisol de reina musa,
es un heliotropo sondear;
buscando a Leannán-Sídhe,
por concavidades de su hogar,
por astrales límites de su unión
sujeta sangre,
de mi erizada savia.
Förüq
FLAMEAR, Destellatoria, OCITÁNUL:
He bailado en tu obscuridad,
para poder sonetar
nuestra propia luz.
Flamear constante de tu nitidez
de estrella endiosada, incipiente,
flagrante, absorta de atónito atuendo,
dilucidado expuesto,
acreciente mi beso
con el tuyo dado
a mi puridad
de imagen Solar,
avanzo tu alma
el silencio es más lunático
que su reversa palabra Ocitánul,
es un resquicio...
Tibia, desangelada,
de tu musa belleza
y mensaje empíreo
de tu sola alma,
debo decirla
que ya no más sola,
tengo sentido vívido,
y tus falanges lo sostienen
musa golondrina
abeja de mi caléndula de pecho
trenzo el azabache
que nos llora la noche,
para despertar a mi lobo.
Luna en constancia sempiterna
te vuelco en tus cuencas ondulantes
de tus manos abiertas.
Ven, ven a mí
deja tu cena romántica
para mi póstuma celada y su égida
de Zeus y Atenea.
Tu querubín
yace que yaga en un tiesto,
capaz de germinar en flor
el tulipán amarillo vetusto del destierro,
alzo que seré referente
magno de mis castos dioses
en la tierra castellano,
su sangre mi tinta;
Raíz de ellos y CernunnosCandavmis,
Ó VALHALLA
venga musa a pasear
mi yermo arcano,
encuentro que sigo tu estela luminaria
de aquí a Mercurio,
exacerbo, a diosa Venus,
y mi dios Gemineye
con ojo sangriento,
me dirige,
que soy yo solamente su sirviente,
nacido de la novena estrella y su telaraña destellatoria,
eres tú musa
digno afán de tercera constelación,
vengo con mi canasto
en clepsidra que plañe la comunión
certera de tu pluma
y nuestros astros,
sonríe plena mi condena,
y el ripio
para quien se guíe
y cabalgue definición,
señor de yertos fantasmas
cabalgando los cielos,
caballos espectrales
de claros relinchos azures,
hálito de hielo bésame;
cabalgaré tu sonrisa
doncella escarlata,
quiebra mi arpa
con mis manos sobre mi pechera,
AERE PERENNIUS.
Más duro que el bronce,
quién me destierra
si yo soy de tierra
y ella es mía,
inmortal, etérea hacienda,
los duros somos tierra
los demás, ceniza.
Mi Sol es invencible,
baja e imanta mi Luna de plata
que eres tú Musa.
Förüq
Sacerdote de Musa:
Silencio me extirpa del vulgo profano
mis cantos olvidarte jamás pueden,
Musa,
sacerdote yo de las Ninfas Musas,
coronada implora tu gloria,
desdén que amancilla los mortales,
espejo inmiscuya,
tu beldad piramidal
.
Doncellas hadas y Sátiros me escuchen
entre el bosque de reina sombría,
mi bardo imperio implore que presida
a la izquierda de mis castos dioses;
Zéfiros de tu alma me acaricien la forja,
tempestuoso ímpetu de solana pulcritud;
ungida en tus mares de manos que escriben,
mi árbol alegre lluvias preludia,
sobre la faz de esta espada,
campo de primavera rigurosa
con sus pretiles gestos sin azada furiosa.
Turbio dispongo el alma de la piedra Frigia,
sol humilde me acompase,
púrpura naciente tu sayal desciende,
vid de hondo señero de Falerno,
su umbría sombra en racimo cultiva densa,
a pie de honroso pueblo.
El Castellano
Halo chirría:
Hoja, dime tus devenires
desde un otoño caduco,
a tus mil aullidos de árbol.
Entre resquicios opacos, umbríos, lúgubres;
sin luminaria fidedigna;
avanzada de una tenue luz difusa
y un crujido seco, funámbulo
de oídos precoces,
un solo de arpa y volví a ser
un chasquido en la ventana
puerta de este mundo
con el halo de mi vívida fantasma
sonámbula, habitada en todo estridente
reflejo, llamado invierno.
Förüq Castellano
Poema de 2012:
Gran luz, amarillo brillo de tu amor,
luz de tu esencia, sangre de fuego en tus venas
de vida en color, mas atada a tu tierra,
solitaria de tus páramos,
amapola amarilla de montaña,
reina hada del bosque de las sombras,
en tu despertar iluminas espíritus olvidados
del corazón más profundo del bosque.
Mas tu hermana sangrienta roseta de penitente
nace debatiendo qué color vestirá su flor
violeta de reflejo de luna,
manchada de sombras de amor a la noche,
o rojo cual granate hechizado de corazón de sangre congelado,
sea cual sea su manto, no olvida;
vestirse de todos los colores
con el negro más opaco,
de recuerdo al fin y el resurgir,
al comienzo del pétalo amado.
Aún sabiéndote amante de la soledad
también creces en familia,
de sangre marcada tu insignia
recordando que quisiste tener corazón
y te ataron a la tierra,
hasta en tierra muerta creces,
para aliviar tu pena poco necesitas,
tu belleza alivia tu alma,
del viento obtienes tus caricias,
de insectos los besos, y del tiempo
el sustento para tus semillas de tus urnas,
ciegas nacen, ciegas caen a la tierra, en la noche de lluvia.
Un día de primavera a una
se le ocurre el sueño de despertar,
pronto sus hermanas le siguen,
en belleza de la vida ves nacer y morir,
espíritu de reina tu entraña amapola,
nadie te odia, muchos te aman,
bendices la casa si tú, gran luz,
floreces amarilla en la rocalla.
Mas si tu bendición es ser blanca y morada
das el sueño de la más bella hada.
Si naces roja y negra das tranquilidad y alegría
al espíritu que en guerra se encuentra,
si eres roja como el carmín del deseo
tienes el amor del camino que cruzan las almas,
como tu eternidad en la tierra
a la que te ligas y esclavizas.
Quién te daría ese nombre de amor,
quién te nombraría desde la antigüedad
planta de la alegría,
quién conoce tus secretos,
sólo quien se funde con tu sangre,
quien ve tu alegría en la primavera,
que te cobija,
quien ama la vida,
reina flor te ve en la tierra
y amada musa tu belleza,
quién te conociera, quién te conociera.
El Castellano
Outsider:
Es mi oficio,
un desempeño,
tangible, armonioso,
y epicúreo.
Bronce de mi sangre belleza
¿Oh dulce sangre!
sanguinoso destello
carmín, bermellón.
Empíreo azar indeleble,
madre y padre de musas,
rito y constancia
fiel prestancia,
litigio iridiscente incendiado de brea,
azabache nacido de oscura retina,
amor al arte es falacia
es honrada servidumbre
a los dioses, mis padres,
mi ruginosa letra endemoniada.
Sangre sin cristo ni espuela,
es azar de siete telarañas,
candil que se enciende,
es endógena inspiración,
inmiscuida,
soy sirviente escribano
del fulgente hálito ambrosíaco,
azar de nueve barcos
bajo océano de tinta roja,
un beso y un epitafio,
una bandera de sangre y brea.
una desquicia resuelta,
una moneda de nueve caras;
un despertar y lamer hacienda,
es el ninfo rey Arte.
mi desempeño a diosa letra,
mi oficio y mi yermo,
mi cementerio,
y mi hospitalillo maldito.
Suerte del aojo enfundado.
Es un grito bajo tierra.
Soy outsider,
camino fuera de la línea,
os compadezco vidas cepas de un día.
Yo muerte siembro
y lo bonito que me florece.
El Castellano
---.T
Elogio en sombra:
Sin mi otro, él mismo,
primerizo hexámetro
en miles largos
de centésimas
en broncíneo
invocando mi falange griega,
insoslayable argento
tejiendo mi póstuma égida.
Musa o ardua estela vislumbré
en arcano fuego,
tengo miedo de ser perfecto para ella.
Sin y con cumbre
en arduo intelecto
mi Sol mayor blande
cenit d'esta idea
por cuantas cóleras desvencijada,
mis herramientas cabales
dictan
muerta mi araña,
paredes para mi yacija y su sombra
alumbrada, esquiva,
por piadosas ninfas
muestra lo que perdura.
Otros jáctense de páginas que han escrito,
ni me rozan en vil osadía,
manifiesta.
No habré inquirido
declinación laboriosa
en afán de romper sintaxis.
He profesado a mi musa de agua
que soy su aguja esquiva.
Ni sargento ni venas de Horacio fui
ni filólogo ni malabarista de letras,
Ciego y quebrantado,
labré mi verso
todos los meses,
desde cruel insomnio aplacado
que despertó mi quimera
quebriza de ocho patas
aquel 2005 que comencé
a ser alguien con mi existencia a espaldas.
Rostros y mis notas.
Vanas apariencias que anidan.
Alacrán manso y ciempiés soberano,
mirto e hinojo que hace monte.
Tus pies de jara.
Cierra muralla.
Hacedor que invoca su río,
Heráclito de intangible astro,
llorando mi amor, por cuánto espero,
por cuanto he conocido,
las tres armas, el guerrero
reminiscencia en laberinto de sus espejos.
Serán ascuas
corazón y sequedad de piedra.
Tiento de cuanta ceniza yo amo,
pensamiento, muerte
o proclamo;
tinta servil de amarse a sí mismo.
El Castellano
A Calíope:
Recto escalafón
dorado al beso no dado.
¡Oh! Calíope;
baja imploro
te estoy construyendo
un cielo dorado a ras terreno.
Madre ancestro de musas,
figurados y primigenios.
Estuco tu mirada de puro cuarzo
y tu semblante de estrella inviolada
avanzo tu esmeralda de mujer cristalina,
beso tus pies descalzos Musa.
Necesito colmar tu atrio
de caléndulas solariegas y rosas de muerto,
abriendo fragancia de mujer desnuda
al Paraninfo yerto
Castellano.
Yo Raíz de los dioses en la Tierra.
Tú mi Flor.
Förüq Castellano
CONTRA MI CIRCUNSTANCIA:
Guía de mi calendario
en atroz
desmembramiento de soles
llamados días de noche yerta
y sin reseña avanza mi letra,
es un vaso de sidra y una espera,
fiel eterno mañana
en el que dejar
lo que jamás haré hoy,
definido en boca gris
de darme al vulgo,
y que seis millones de bocas
escriban similar
o casi igual a mis sarmientos,
sí directamente me preocupa
porque yo soy lo que escribo
y no acepto copias baratas de este ser,
seré mejor que el silencio
enarbolando astros, plantas y sus verbos
de imágenes por raíces,
lo siento mundo no soy de vuestra sociedad,
no necesito vuestro material
ni vuestras fábricas de ciudad,
construcción haciendo progreso
de la BocaGris,
para que todo lo pensado
esté en proceso de construcción,
fábrica deja mi felicidad
en manos del viento,
que mi poema es incendio,
deja mi destino yo soy de tierra,
y esta es mi eterna cepa
ahogando el rol
tejido del social humánimal.
Soy lo que escribo repito,
como viaje sin rumbo,
un vertical azote de mis velas en marcha,
un siniestro vértice un silencio mundo,
unos ojos que hablan
y se responden entre tubos,
estoy cantando en la tubería,
estoy rozando mi osadía.
para consumir mi envoltura
de tela de araña,
mi sonatina despierta
mi soga quieta del árbol de mi sueño,
enarenado mi lobo de hierro,
queda satinada mi estrella de agua,
ardiendo mi sentido,
siendo esto nada más
que una bomba atómica.
Una retina escalada,
un cruce de dos estrellas,
en vastedad atropellada,
del ser, una rigidez de árbol
buscando su simpleza de savia,
un insecto y su corona,
un pergamino mi escrito,
abriendo este angosto camino,
en alguna parte que eriza la piel,
fuego del hielo me valgo,
de mi maullido de pájaro,
entonando mi pianola de sílaba,
todo cambiaba,
resumen de mi vida,
nació y está empezando a soñar
desde su muerte.
El Castellano
AGUA:
Eslabón vasto, ardido, deslizado,
un iris de gota que a ti te llega,
marcha tenue, compás de tu eterna huida
que te marca y da vida,
fulgente fuente en infinitud de bocas
que tu ser desprende,
de su nombre y su alambre,
irisado canto de nubes derretidas,
comunión de trinos,
un beso a la tierra que deja herida,
límite de árboles y sus soles,
siembra de azul,
despensa de tu saliva,
hoy buscaba belleza y belleza eres tú,
río corre directo a tu nacer
río levántate,
jamás te canse tu desnacer,
efímero latido de tierra,
tú vena del cielo,
una solar llaga del gris,
un hogar, cuna de mi tempestad,
para ser agua inmortal elemento
capaz de crear y destruir,
de vivir siempre tejiendo la realidad,
alcanza, desvela que te debo esta existencia,
sin saberte nada existiera,
equilibrio que en tus vasos juega
para estallar en creación llamada vida.
ALMA EN YACIJA:
Mañana será mi vida
una sábana sobre mi calor humano
inerte en acto de no portar nada
si no fiel materia asida
si mi forma acaso tuviera,
si yo no la creara,
si no fuera contorno de mi forma
esta sábana muerta
se creería que portara amor,
dulce aleteo ingrávido al peso,
tiempos de cambio palabras a un silencio que muerde,
estoy esperando las nuevas visiones,
con mi canasta de limones,
estoy aguardando la caricia de las sábanas,
como recipiente de quiebro de sueño,
quisiera escribir un poema con varias ramas,
anclado en una idea que se difumina
la identidad de ser ella,
palabras inertes que quieren ser hechos
y tener movimientos,
a un profuso mar me muevo,
siente mi devaneo,
llegó mi momento
de nada carezco soy real,
soy de la tela de araña soy tejido que me lleva,
noche, noche te encuentro en mí,
fiel yacija del destierro de mi sombra,
versos nacidos de una única cerveza,
buena praxis de mi romance eterno con la luna,
lunático por venir de estar con ella en su ático de Madrid,
no te esfuerces jamás podré ser realista
y describir sin ser parte del asunto,
claramente porque soy yo el asunto,
a formar, en orden,
este es mi rifle esta es mi vida,
por la que sirvo y ejecuto un placer nacarado,
como fruto de estrellas,
¿el hueso?
Es que no encontré un motivo claro para escribir,
solo fue y será escribir.
BROTADO:
Silba centella,
como enhiesta espina afilada
en son de tañer
del pozo llamado guitarra
con voz pasajera,
fugaz cual angosta siembra
perpetua de otoño,
una muerte trenzada
a su fin de ser origen
de toda vida vegetal,
la muerte de la flor
en comienzo de la vida
sin la semilla
no iniciara
ningún azar profuso
de sangre, quitina, savia
sin alimento
no hay energía
ni este maldito duende
podría escribir sin alimentarse
del hielo ardiente;
es un árbol
es una crisálida
de ser este mi cuerpo,
que al tuyo invita
a su devenir irisado,
de sus canales de riego,
mi realidad se baña en mis ojos,
sin ellos sólo hablaría la oscuridad
de su negra ala,
lo siento me temo
que por conseguir ser completo
he cambiado de lleno,
con mis manos hice una fosa
para plantar un ciprés
como el que plantó tu madre,
y ha consumido en su llama
miles de años de mi pasado,
siento deciros mundo
que soy completo
que he nacido,
nació un ser perfecto
de su crisálida.
HE NACIDO
He nacido por un principio
libre de causa, lleno en virtud de fin,
ser completo en alma, espíritu y cuerpo,
sin atisbo de superioridad
al resto de semejantes
jamás iguales,
diferencia marcada por mi demonio interior
denominado luz de virtud.
Que brota de mi ser
desarrollando yo su intensidad,
el talento como el nombre más ambiguo
de la realidad,
semilla muerta digna que debe ser empapada por el esfuerzo,
dedicación y entrega nuestra
ceñida por la esencia del don supremo Sabiduría.
La vida es de quien la lleva y esta es mi reflexión contra todos vosotros.
CROMÁTICO AZAR:
Bienvenido a su cuaderno,
es una hoja de chopo,
mecida en vaivén de viento vocal,
un profuso devenir de entraña
que tu ser admira, desentraña
cual iris cromático en escala,
es su cuerpo de mujer un hogar
para tus ojos, como una armónica
sus encantados labios.
Un linde y una cepa que te gobierna.
Inmortal yaga, su ilusión
que te cuelga cual araña,
cristales rotos de tu ser
espejos de un ayer sembrado
en piel.
El sentido se difumina
en su boca de estrella
para el hoy ser ayer
y el ayer ser aciago sueño
cubierto en verde hiel.
Es mi casa su casa
su entraña un nido
y mi espada.
Solar siembra de mi mañana.
Es un canal irisado de sangre
fanal la espera
en la que cuidaré nuestro jardín
y meceré flores
para por si ella muere antes
que no muera la belleza con ella.
El Castellano
BRILLO DE NOCHE:
El sino lanzó un grito a la montaña, contestó un eco con amplia voz
Que sorprendió mi anhelo
siendo una luz en el vasto ciprés
que a la luna alcanza
preguntando por mis yedras en maceta del alba,
un silo y un olvido despertó de su nicho,
cantando con la flor un latido desertor queriendo pedirte caricia eternamente.
Encerrada en iris violáceo la flor corría el sueño estertor,
el sol cambió su amanecer por la tibieza y suavidad de su flor,
siendo esposa del sol, caléndula en ojos
que marcados traen un irisado tornasol llamado amor.
Un ocaso se alzaba en guiño a cada noche que la flor cerraba en verso sus pétalos
afilado el cuclillo de la noche
besando una luna de cuerda,
una inmundicia cantaba su siniestro grillo
del calor de muerto,
despertando la siniestralidad agujereada
del hueso,
un camino eterno con acequia de la sangre que lleva en araña del sentimiento
y un difuso vértice de dos gotas de unión
que se juntaban exclamando
como rocío del molinillo diente de león
para volar con el viento juntas nuestras vidas en vaso retorcido de destino .
El Castellano
ROSA DEL AMANECER:
Abejas del alba,
en un cielo desplomado,
que rige su cenit dorado,
un albor que se dirige a la maravilla,
esperpéntica, despeinada por rayos
de solar afán y entrega,
un camino se retuerce en el iris
para la tierra ser sólo de su tierra,
un carruaje de estrellas desmembradas,
y sus violetas nocturnas a cuestas,
es hora es ahora
que la acequia bulle mi sangre,
en la sombra una espera,
vuelan las avispas del medio día,
con sus emplomados trajes,
es la escena un salón de actos,
es una aciaga siembra
de vuestras mentes retorcidas,
de lombrices esparcidas,
panal eterno de la idea,
se asoma, se afila en alambre
de lengua, de palabra que azoga,
mi tenue soga,
mi inmortal sequía,
por el chopo viejo que vive lejos
se clava mi estaca en tierra,
para que sea de su pueblo la primavera.
Con ímpetu y desgaste
que viva siempre este alambre.
El Castellano
ENHIESTA MALVA:
Y que mi sentir no se esfume en vano
donde las frases son emociones que palpitan
un calor llamado arte
la tristeza que quiso llevar una duda
será que esta vida vale la pena¿?
el amor sí existe
está colgando de tus mejillas efímeras,
para darle un sentido a mi existir
aquello que no ha muerto en la eternidad hará cuchillo
así mi alma alto cante, su destino alumbre
será mi dulce muerte rechazada en el vaivén
que llevó a la tiniebla mi verso
este mundo está habitado
por el reino muerto y el reino vivo
yo muerto sostengo,
mi sino de cuervo Förüq
y que nos sobre una explicación
la sed de sangre me alza en albor
mi reino muerto por una amatista por enraizar
y un azabache por llorar
es una clase de fantasma la mía
un eco sordo por alcanzar
siéntelo
es sangre en tus ojos
la noche palpita sin derroche vida de su azabache
un cuclillo despierta a otro cuclillo
un ejército despierta
alerta.
El castellano
Mi rosa
Por la malva-rosa.
INFRA-REALIDAD DEL HIELO:
Hilvano mi sentido de una araña,
tejida su tela de una gota,
esa gota que palpa infinitos,
que crea y destruye,
la supervivencia del ojo,
me mantengo esperando para el brillo,
y quizás el sonido de un grillo,
todo acaba donde el todo comienza,
vive esta rosa de hielo,
y este granate de sangre me vence,
opaca suma de tus parpadeos
hacia la sombra,
que es una eterna, infinita
madre de ausencias y sus tejados,
contémplame allí aullando
extasiado en una siembra de nácar,
quiero vivir hoy en las etiquetas,
en los maullidos sin gato,
ser abeja para zumbar los oídos por despertar,
que me odien por fin por ser quien no soy,
un alarido estremecido,
un temblor de tierra,
un carnal fuego que no se vence a sí mismo,
ser por fin entraña y hueso,
que mi corazón me suba por mi garganta
para que diga que yo te amo.
El Castellano
SOY:
Tiempo, invento deslizado
como hoguera que consume y su horizontal avenida,
como rosa marchita de otoño,
como hoja al devenir de un árbol tejido
de sus escarpias sucesos, un devenir
que corre avanza mecido en el olvido de sus huesos
por retornar las semillas y su vida,
fanales despensas de un silencio mutilado,
lejana la distancia todo se acoge en uno,
un viento, un pájaro, un aliento, una espera,
un suspiro, un destino, una creencia,
una raíz, una tierra, un dueño
sí el que me lleva los pasos,
su cuchillo dorado que se alza sobre tu rendija,
justo tráeme la luz este mar de cielo
que me absorbe,
desciende sobre mí su ocaso puro, limpio, violáceo,
como una ventana para pintar
lo que late y se encuentra detrás de mis sentidos,
un destello que me alumbre,
un iris tuyo que me examine,
camino el límite de la existencia,
capaz de morir por una palabra,
mi noche comienza a sonar,
y mi olvido de sueño aún no comienza
no inicia su palpitar,
este agujero lo cavé con mis brazos,
esta fosa desnacerá para iniciar más vidas,
flores por réquiem, abejas por elegía,
mi semblanza yerta
vuelta dicha,
un tiempo como bucle eterno
en el que nada podrá dejar de ser lo que es,
yo soy carne de palabra,
soy quien soy y esta es mi plegaria.
LIT ET SUMMUN CANAE.
El Castellano
SON DE GRILLO:
Clarín entona sin miedo,
todo lo que siento arriba del astro recuérdame
su violácea arpa del sentido, tejido yo del hierro,
y una escarpia desnuda que anuda,
que desvela mi yunque, mi eje,
apenas dormido yerto el tiempo que te conoció,
arriba muy cerca de la letra dorada,
y su escarcha de silencio senil,
eres más que donde alcanza mi palabra,
un yugo, un arco y una flecha,
una vena trenzada por la sangre consumida
que te lleva que te encuentra,
león aquí león allí en mi corazón,
hilvanas mi calor del fuego,
se funde mi abismo zarzas por ascuas,
Sol por luna dentro de mis ojos te encontrarás,
allí solo habita la luz como quimera una,
que te destapa en sueños,
si por soñarte te hiciste realidad mi bella,
una vez en la vida el tiempo se derretirá,
y nuestros labios beberá,
vuelvo a vivir por ti,
vuelvo a descubrir justo la vida,
matando mi soledad, aumentando el día,
amor que me volviste libre
y elegí amarte
hasta donde cerraban los ojos de la noche,
mi miedo se alimentaba de sus paticas,
yo quiero quedarme contigo
hasta que mi pecho lata abierto,
subiendo cumbres anclando mi sombra,
hasta que la tierra se coma los cardos tras el estío,
hasta que las flores rendidas dejen su belleza,
en son de elevado amor,
que asesine los silos de oscuridad,
que descienda lo perpetuo
y quede asido el cielo
hasta que la imagen sea sonido,
y mi deseo traspase las puertas de tu destino,
solo allí reinará lo sentido.
El Castellano
TEJIDA REALIDAD:
Estaba buscando por algo de luz,
dentro de este abismo nacarado,
como brazo de esta realidad desdoblada,
no esperé más le prendí fuego,
y un surco se abrió paso
entre espejos crepitantes,
entre puntas hirvientes,
y sus curvos ejes,
que hacían de la noche una sola,
comía su adentro, estallaba nuestro encuentro,
por soles consumidos,
por vértices y sus filos,
el sendero comía sus espinos,
por mi vida repoblada,
que buscaba tus nubes de azúcar,
encuentra tu miel y mi subrepticia,
por toda la noche sin despedida,
se alza nuestra caricia,
como árbol sin hoja dormida la sinestesia,
queda iridiscencia del beso,
quedan las espinas de mi piel,
un hervor de hiel,
un destino sin cuchillos,
un devenir que no vino ni se fue,
llórame el azabache de tu noche,
pinta en tus ojos conmigo el fin del tiempo,
detén este instante para hacerlo real,
ven conmigo soy tu despertar,
aúlla al hueso de la luna
que parió una flor de cripta y su helecho,
era cuesta abajo mi lluvia
desplomada, hábil tenaza ,arde y no avanza,
por todo lo que quiso ser en trémulo desliz,
era nuestro campamento de estrellas
por luciérnagas,
estoy desaprendiendo a escribir
y eso es bueno,
mi piel que hiberna en verano,
para abrir su cauce y el reguero
al Sol de invierno.
El Castellano
UMBRA DE PIEL:
Flagrante piel desnuda en su redondez,
infinito con cumbre y desnivel,
aullido a media voz,
un golpe de viento, un primor
de desnuda arena en pie modelado
por tu carne de mujer,
yo soy para el viento otro crujido
de su fuente de voces,
de temblores en seno de su carne de ciruela,
prevenido avanzo como un soplido,
me diluyo en agua siendo tu ávida tez serena
como virgen nieve de canela,
suave mi mano nació para tu piano,
al frente me hago presente,
no hay ilusión que se consuma en olvido,
así no hay esperanza que no me vuelva un ovillo,
si estás tejida con hilos de sinuoso frenesí,
silencio envolviendo este mi cuerpo,
sólo por escalar mi vida,
sombra del color, sombra al fin,
era plena primaria,
tímida y risueña,
era mi naufragio en tu arena,
una veleta y su aspa,
desperté y aún seguía tu esencia,
de piel sin piel ni ropa,
destapando una caricia lejana,
por el laberinto que te conforma
hacia la sombra que me da forma,
te espero mi preciosa.
El Castellano
IRIS VESPERTINO:
Avidez estallada, corre un presente
sus oscuros lindes la eternidad conoce,
me basta con ser su despierto pliegue,
existencia al fin sin más ser
que todo lo que desemboca mi creencia,
que se estira, se dobla y conforma
en surcos de labrada consonancia,
por todo lo que avanza,
siendo de la tierra más que una estática sombra,
siendo todo lo que quiero ser
es más que un capazo de su vendimia,
más que un panal, de labios grises,
es un mundo y yo soy su pétalo,
es un río y soy su gota,
al trémulo ciprés me cuelgo,
para asir mis palabras al cielo,
es por su lago que mi esperanza navega
sus oscuros soles en llamas,
en mi vida solo hubo un abismo para condenarme
y es al fuego de sus labios,
su veneno en mis ojos bulle mi retina,
blancos, amarillos. azules
los tules de su escarcha,
círculos de luz, veta de mi mente,
se conforma, se desnuda la piel en sinuosa forma
el viento que es como un almanaque
y un cofre,
el destino mío irisado se vence,
acoge mi ansia plena,
mi álamo saltó, tembló,
era yo, como un furtivo fuego de tierra,
era mi vena una primavera,
era mi vida como solaz yaga,
que sólo quiero compartir con ella
mi señora bella,
la extasía de mi ilusión verdadera.
El Castellano
VIDA DONDE YAGO:
Colgado del tiempo,
expuesto, vulnerable
a un cambio de su viento,
sí todo lo que siento
me mece colgado de tu iris opaco,
por mi retina escarlata
nazco para desnacer en tu cuarto,
para abocarme a mi destino
sin final en el cual te amo,
como flor de todas mis flores
cual rosa oxidada,
mi pasión que corre, avanza
jamás se para
es como lagartija
postrada al Sol de tu amor,
mi vida va desvaneciendo
en son del profeta oscuro,
hielos fugaces,
desiertos transparentes,
ilusiones crepitantes,
quiero permanecer en la guardia
de tu sentimiento
no soy espejismo de viento
yo lato y te envuelvo
para crecer
amaneciendo tu deseo,
sólo eres tú,
nada que yo pueda criticar,
porque como florecita delicada
mueres y te agotas si no te cuido,
llegó mi abismo
en el que loco de amor
cuelgo mis miedos de mi ciprés
que en silos dorados
almacenan el querer de las estrellas
en verticales puntas
deja cristales del alba,
no puedo acabar mis pasos enamorados,
que te pertenecen,
como rayos de tormenta,
y mis venas quietas,
por tu salud abandono a mi ser,
por tu sonrisa y qué no daría yo,
es mi vida al fin y al cabo de Finisterre
es mi desquicia yerta
que asesino pero es mala yerba,
no estoy perdido
porque eres mi sentido
para mi segunda vida
no renuncio, no retrocedo,
no me achanto, no abandono,
no doy nada por perdido
te amo en este infinito
del que cuelgo
y mi palabra
es siempre.
El Castellano
SONATINA YERTA:
Cabálgalas así puras, redondas, irisadas,
oscuras mis letras en sonatina,
destápalas al viento que mueren por unos besos,
desterrados en son antiguo, quemado,
derramado en sed del vino,
esperando dormido se alce tu boca
por todos mis sueños perdidos
como cerrojillos en vena gris,
brota mi sangre siendo de la tierra
fiel fuente y su simiente plena, verdadera,
amor, el tiempo no nos puede sostener,
acaba como eternidad doblada con ganas de más y más
muertes en caricia helada,
redondas, verdes, suaves,
caminan como corceles sin redil
mis manos buscando y buscando
le regocije una armada palabra,
no busco estrellas porque tus ojos guardan mi firmamento,
en un granate perdido en un hielo derretido
en un suspiro y un guiño,
ya me cansan los abismos por recorrer,
junto y sólo junto a ti quiero yo perecer,
encuéntralas a ellas como el pasar del tiempo
en un piano de madera, como llama eterna de nota
y fuste, de ansia y apetito voraz,
de mi carcoma y su crujido,
de mi grillo y sus grados,
es por tu cuerpo vida,
que las letras se me rinden en mi alta ojera
de nácar.
El Castellano
DEVENIR ESTALLADO:
Llegó el día,
se colgó el agravio
en el árbol de las cenizas,
era mi ceniza como un cielo
ceniciento, enjutado de paredes,
era un viento de alambre
y sus espirales que mecen
nervios cual lindes,
despiertos, desvelados,
ven a por mí en esta cepa
que llora tu nombre,
yo fui tu hombre
más el destino me clavó
otro yerto horizonte,
otra nube de cenizas,
otra máscara que nunca elegí,
otra planta y otra flor,
no puedo deshacer mis pasos,
ni construir nuestra casa por el tejado,
en fin me basta con tejer
nuestro lago,
nuestro infinito remanso
donde Yago,
donde en su espina ardo,
Consumiéndome en tu aliento.
El Castellano
DESTINO IRISADO:
Eternidad para dañarme,
dejándome caer
nunca signifiqué más y menos
que dolor
afila tu nervio
dejándome a solas,
sólo encontrarás
que perdiste tu hoguera
sostenme los ojos cansados
con su Malva-Cruz
nada cambia
todo retrocede
todo corre y se desvanece
canta, ríe, corre,
yo no volveré,
mi tierra trabajaré
para cavar mi dulce espera
amaré mi polvo,
me sembraré en cada hoguera,
rayo irisado me descubre
llegaré a deshojar la muerte
y su cuna,
desde este nicho
tela de araña
al submundo de los condenados
donde yago,
mi herida si no cicatrizara
será un recuerdo de que existes
llamándote dolor,
vuelo esta oscura noche
buscando calmar mi sed
siendo consciente
que no volveré a vivir
como cuando estaba vivo
mis pulmones llenos de humo
de noches enteras
fumando cigarrillos en boca del Diablo,
para ser yo
el más grande espejo
de esta soledad deseada
desde antaño destino infundado,
me alimento de todas las flores
que no te he regalado
y nunca te regalaré
cierra tu persiana hoy no te veré,
soñé tanto que por soñar
me llamaron ruego y estirado,
demente su hueso me llamó despecho.
El Castellano
MAULLIDO DE PÁJARO:
Una nota y un horizonte
una secuela y una desmembrada caricia,
se afila el viento y sople, sople mi adentro,
esta vida me cuesta la sed,
y quizás sólo quizás una yerta bienvenida,
por la solar acequia planto mi beso,
a un ababol de mi hueso,
es por el perpendicular recibo
que acuso mi piel expandiendo,
trance de mi endiosada calma,
y paz de espíritu que sujeto,
quedando mi gota frenética sin cauce
esta mañana que lo lejano
se torna cercano,
blandido mi cuello en su hoguera,
queda sembrar allí mi primavera,
y mi primer beso de siembra,
Bramando por ella mi cabellera,
como fiel retorno de las polillas,
habitándome en mis semillas,
es por ellas que mi umbral bulle a la fuga,
ella que lanzada, decidida
abandona de su ser el recto abismo
para llegar su alarido
a un destino y un techo,
tejido por c la araña que nos lleva,
tejiendo nuestra vida
de Violeta y malva.
Un fenetro para el desespero,
un puente para superar
la dificultad,
en malla dorada,
en granate humor de sangre doblado,
es por esta luna de venas,
es por este pájaro de maullido,
es por todo lo que vino a ser
y marchó crujiendo
crepitando, desnaciendo.
El Castellano
DEMONIO DE FLOR:
Que el arte es un demonio con palabra de alas,
una fuerza inmortal que sacude la entraña,
en alborada muestra su zarpa,
siendo del viento su grazno escondido,
viviendo la sed en destartalada acequia de hiel,
un réquiem y una elegía por todo aquel
que sus venas zarpó,
para anclarse en su honda sien,
camuflado de espiga
no hace falta que yo diga,
todo es y será de la caricia
al profuso horizonte de espina,
por su derretida cima viaja mi idea,
encontrando un manantial de sangre,
perdida su costumbre,
queda renacer en el ocaso eterno,
que si vuelvo de nuevo
vuestro aliento se comerá hacia dentro,
para esta abeja ser del viento.
Y el viento ser aullido
de lobo sediento en alambrada de piel,
cavando su azada,
derretido suplicio repetido,
en infinito que cuelga,
grita, desenfunda mi vocabulario yermo,
cual emplomado soldado,
fuente de abrevadero de la sílaba
pronunciada robada, deshabitada,
es de la solariega vega que mi Sol
contra el mundo es eternidad.
Canto viejo, canto de surco y simiente
lo estoy diciendo que no espero a mi yerto,
digno arte de admirarte
que si es para siempre
yo soy más que tu amante,
a la tierra va
a la tierra va mi aliento de serpiente ,
que se ahoga que se deshace
este verano silente.
El Castellano
ABROJO CONSUMADO:
Defiendo entre torres de humo,
al rápido destello veloz me despido,
palabras atrincheradas hueso despierto,
encrucijada entre flores de piel,
hiberno este sentimiento
que me desgarra la sangre,
siendo rayo añil consecuencia en llama,
crepitan de los sones los tambores,
mi brazo está para la lucha,
tejido mi sino está del abrojo
una cruel espina su medio para viajar,
soy de este campo como la fuente
de su encina, soy yo al menos
como mi amado zorzal
como un pájaro en su rama
que el viento le cuenta
de sus alas cansadas,
como un cielo sin techo,
como un tejado sin teja,
como umbral sin muerte ni acto,
despertar en la cueva de luciérnagas,
despertar solo y frío para sentirme en dicha
elaborada, agradecido porque estoy vivo,
mi palabra cual escarabajo verde hoja,
como precipicio de montaña
que ríe que escala su altura difuminada,
es de agua su rima consumada,
siendo yo el último hombre en pie
blandiendo su armada palabra
que avanza, no para,
se consume en eternidad arrancada,
a esta luna de plata que gime auroras,
de sus pestañas escarlata,
un secreto bebido
un halo irisado,
de esta meseta milenaria,
siendo mi alma una flama de lumbre,
un carruaje que lo lleva la noche,
mi ser que a tu alma abrace y alumbre,
porque a veces me consumo,
y si no estoy muerto
que venga a por mi la divina falacia
porque mala hierba nunca muere
y en este nicho de vida
me desvelo fiel Abrojo yerto, consumado.
El Castellano
FUENTE EXTASÍA:
Cercenas esta hoja ilesa,
la niña de mi verso si acaso pudiera
sangrar este cielo,
y su avenida en estruendo quejumbroso
sonido, al menos
un espasmo,
una lengua de nervio,
una acequia de sangre
es el hombre
si al menos fuese hombre,
fiel testerazo ensartado de bestia
caminan las sangres,
y nadie vendrá a vengar a los hermanos,
desfallezco,
exploto en pétalos bermellón,
soy de mí
preso de una historia que nadie me escribió a mí,
rayo colapsado y su vertiginoso alambre,
es una avenida esta fuente mía
en un páramo rojo
en un gozo olvidado,
así la mina que se destapa,
ardiendo la pena dorada,
por quien la siembra,
por su azada maestra,
desquicia fina en teja, con tejado
en alma de ángel por cadenas,
destierro enjutado
en duro, desvelado canto de tierra seca
bañada su era en sangre de cepa,
hay un olivo que vive lejos,
hay un señero y estaca de linde quieto,
por los sorbos que me robó la siega,
viento, viento, labrado,
de letra y estalactita
de surco y olmo doblado mi tinta.
Hierve mi fuente niña.
El Castellano
PIEL DE LOBO:
Torre elevada,
afán y su vanguardia
cosechada,
escriba antiguo
deshaciéndose,
escuchando
el latido disuelto,
en esfera de brillo,
un sentido alarido,
vuelto aullido,
esta noche carcomida,
que debe escapar,
viento al crujido,
yaciente del seno de la ola,
en la boca de la loba,
la flor que se desploma,
la vida que aguarda,
este verano de fuego,
y su canción de grillo y cigarra,
desterrada,
es por ti es por mí,
que el destino no aguanta,
Sol mío invencible,
como lluvia de cielo,
aire aire alcanza a tu hijo,
de profundo monte,
de hoz y guadaña
se teje tu molino,
la amapola, la margarita, la espiga,
el tridente de la estrella tejida,
ven, ven a mí,
por estas hojas por su filo,
abriendo mi cuchillo,
cortaré mi sino,
aguardaré al fiel vivo,
en esta tierra,
en esta hoguera,
quemándose mi quimera quieta.
El Castellano
SILENCIO ESPINADO
Mantenme afuera,
sí, dentro de la luz,
fuera de la noche,
las estrellas
colgadas
en racimos a la espera,
solo sólo yo para ti,
crepita mi hueso
esta escarcha deshojada,
por venas del humo
de mi escuela,
por donde se acaba
el suplicio
y yerta la luna
destapa
sus besos de malva,
por ende este duende
comienza
la libertad de la sombra,
cayendo de nuevo
su araña está,
granate lustre de sed
por avivar
una vez en la existencia
el mar mi sobriedad caminará,
de la mano
tambores de tierra quebrando,
por su camino dorado,
el sueño y su telaraña rizada,
aúlla el camino de la zarza
y destapa
la soledad con capa,
de desertora entraña,
de una vida en la espina,
y su cúspide labrada,
es por el sol
que nace mi albor,
resplandeciente como fulgente
mordiendo mi suerte
es de la luz el siglo resplandeciente,
fuerte siempre fuerte
avivo esta lumbre,
giras, evanescente
acoges mi fuente
que en gris y verde,
en verde, azul y gris,
las muertes, bulle,
para ser un linde y un campo,
un abrojo y un manto,
un despertar en amaranto.
El Castellano
OTRO DIÁLOGO:
Saeta alada,
vuela y corre,
se alza y descubre
por ende de mi torre,
ríe en su ser
en sosiego
borbotón sanguíneo
desprende,
de sus alas jamás cansadas,
amplia carcajada
y gira su mira
hacia mi vida
nada puedo negar,
nada puedo defender
el ocaso se alza en vértigo,
no puedo empezar de nuevo
y volverme a equivocar,
este mundo se disuelve
sin empezar,
sin acabar,
quién vendrá a sostenerme
esta cuerda se rompe,
puedo ver mi ilusión,
puedo ver lo que no he hecho,
justo es mi vida,
rehaciéndose,
buscando el sol
para brotar en espinas,
y estallar en luz
un brillo deformado,
un ocaso purpúreo de mi alma,
un opaco punto de mi verso,
estampado,
cual fulgente pintura cromada
en tintes de un ayer imperfecto,
yo creo en ti, yo creo en mí,
nada correcto se puede hacer
porque nadie nos corrige
nadie nos importa más
que tú y que yo,
pupila nacida de sombras
pupila recta y serena
como el azul
de un océano y su puerto,
como nuestro
hicimos el fin del tiempo.
El Castellano
HUESO DE LUZ:
Sueño
estos lindes destartalados
esta bruma
y su violeta nocturna
de un ocaso que se destapa
y llama y llama,
a amplio fogonazo su luz
por los candiles que juegan y ríen
luz de consuelo,
se prende un horizonte de huesos
por piel,
vereda abierta del ayer,
nazco, subo y escalo
la hiedra por mi árbol queda,
tu dulce silueta resoplada,
un camino una vid y un olivo,
un apuñalado trigo,
el momento vuela consigo,
fiel tapia caída
reverdecer de mi martillo
resplandece esta luna quieta
de tu ombligo,
cabalgo por el suplicio,
avanzo mi enervado delirio,
hoy no pudo ser un día cualquiera
en mi tijera,
se dibujó la esfera perfecta,
y el susurro de plata corrió sus yardas
y sus escuadras,
brillo de sol, luz de ver el cielo,
de ver un difuso hielo derritiendo,
alzando la puerta a tu alma
que tenías sin pestillo,
espero para el momento
de cenar tu noche,
mi refugio, mi despistado destino
y su hueso crepitando
sobre el último tren
que lleva mi vida
reverbero el canto
porque sin ti no encuentro noche,
ni nido, ni lluvia vuelta poesía
de tu bello cuerpo,
sí, eres todo lo que siento
más que un umbral
llorando de cuarzo
más que una cama de tu regazo
porque eres mi hombro
eres mi trazo,
y mi mente al resguardo,
niebla y sangre de marzo
en hoguera de rosa de la tarde,
en la vida que te habla
eres más que un puñado de pétalos,
más que estrellas de este techo
que cuelga
y derrama llegada la hora.
El Castellano
BEHOLDER, CONTEMPLADOR:
Ahora que el día se ha ido,
ahora que navego letras
absorto a la espera
de una nueva palabra
capaz de crear revolución
capaz de hundirse y resurgir.
De flotar y deshacerse
en mundanal ruido de sueño,
temblando su frío sentido,
un recipiente y un vaso de muerte,
una visión y una explosión
de todo lo que prevalece,
de todo lo que incapaz perece,
un maullido de tejado,
un siniestro azar de suerte,
esperé y esperé y todo lo negué
como este verano frío y helado
que todo lo inexistente surqué,
que mi destino se doblaba en mi sien,
era un día en solar negro,
era como un tenebrio que camina,
como una poza sin aljibe,
como una hora cronometrada sin reloj,
era una súplica teñida de sed,
un grillo y un aguacero despierto de sol,
una montaña sin hielo,
un glaciar sin temperatura,
un brazo sin alcanzar,
una tormenta sin sonar,
era la vida una caricia en mano helada
sin sangre sin nombre,
mutable horizonte sin linde
un pájaro de cemento que aturde,
una noche callejera
y olvidada en la tela de araña,
era tu surco algo más
era vena era rabia desplomada
en el barrio de la quimera despierta,
quizás hoy quizás mañana
jamás prenderás mi alzada palabra
en otra alma en otro nombre
porque esta es mi lumbre,
esta es mi estaca.
El Castellano
NIEBLA DE FLOR PROFANADA:
Voy serpeando la tierra,
mis pasos que jamás yerran,
jamás altivos cercenan,
una estaca en mi corazón
que conseguí separarla un día,
un hondo surco labrado
de sangre desvalida
me azogó profusa y hondamente,
pero ya no te siento dolor,
quizás tu vago recuerdo profano,
para llegar,
para deshacer tu sendero,
de áspero color
y sus azafranes amarillos
de la tarde,
ya no caigo
por tus amplios lindes
de niebla y cuchillo,
aquí en mi alma
se yergue el umbral,
la sombra me abandona
para besar,
espíritu de agua dime
si el devenir de mi vida sostienes,
por qué angosto lo atrincheras
en diáfano cuarto umbrío,
yo que horizontal vago,
por encontrar un día
el vertical disparo
de mi enhiesto ciprés
con verdes refranes de hojas
con acrisolados
cristales de savia
a su altura quiero yo blandirme,
velando a mis muertos abrojos,
devorando la calma de sotos,
ansiando la voz que me habla
la voz que yerta me domina,
preparé un lecho de cardos
para llegado el día
escribir un epitafio
que ponga, que diga
heme yo brotado de la espina
aquí yace, aquí reposa
todo el amor que sentí un día,
y esta estaca
conseguí arrancármela
en su día.
El Castellano
RENACIENDO MI OJO DE TIERRA:
Diestro empeño asolado
en fanal infinito de campo,
eres miembro de brillo,
inmortal crisálida azogada,
un grito y su descampado,
lluvia y solariega rambla de vida
abarcarte no pudiera,
dónde acaba dónde comienza
tu verdad única,
compás del silente grillo que te alza,
pero jamás te alcanza,
del pájaro a tu rama tu balanza,
tu araña de acequia me abrasa,
para ser plural la templanza,
suave tu nube forjada,
naciente tu acompasada azada,
vida de la muerte sembrada,
eterno réquiem de naturaleza amada,
en vasija en cántaro que emana
crea, seca y rellena
una sangre de etérea tierra
como vena de la era,
mi fiel estampa quieta,
acabando la montaña en llana vega,
acabando el río en otro plural
llamado vida otro umbral tejido
perdido en abismo líquido,
retazos de encinas que me respiran.
Ababoles que caminan
destello fugaz que todo lo que nace
una difusa luz sucumbe,
para dispersar más muertes erguidas,
siempre en arduo silencio de despedida,
tenebrosa y umbría su caricia
que la tierra llena,
que la tierra devora,
para ser otra sombra,
otra estática vida
en otra boca,
en otra araña que lleva
su flama,
el acecho yerto jamás descubierto,
hasta llegado su momento,
hoy puedo verlo
mañana jamás podré negarlo
ni catalogarlo de aleatorio azar
todo tiene su razón y su causa imposible de negar,
para yo ser de la tierra y la tierra ser de mí
mi sangre que porto
en vasija de éste cuerpo,
no pude elegir ser otra vida,
ni tener longevidad imperial
de árbol y su carcoma,
mi tiempo avanza angosto
por descubrir la luz que riega el páramo
en solar entrega
diluyéndose fluyendo como rayos ondulantes
que descubren flores
y el campo afligido tiñe de ocres
con un estío subordinado
al renacer y evanescer de la sed.
El Castellano
SER DE TIERRA:
Es más que triste
que esté contento
porque estoy cantando
porque eres rama
porque eres gesta que prevalece
porque se agitan los mares,
y salvada de ellos
se alza Castilla
desde su espiga marchita,
fiel de lumbre, eterna hoguera,
sus pasos, castañas en el fuego,
forjando en uno de sobriedad
avivo el manantial,
los jornaleros tendremos que desfallecer,
alameda mía,
sangre en mis venas no falta,
se forjará mi noche en la azá.
Hoy sólo somos cimientos
mañana torres de sangre y tierra,
de puñal y rama
nuestra verdad,
que claman fusiles,
de gente en estas tierras encumbradas,
este es mi rifle, esta es mi vida,
no me pisarán las rosas del alba,
garantía de mis ojos
que sangrarán los cerrojos,
hay que aprender sobre torres de tierra
aprender cultura,
para saber luchar,
para saber defender,
los valores los cinceles,
las plantas de la vid al olivo
del grano al granero del ayer,
y a sí jamás naufragar,
porque esta tierra cuesta vidas,
y los hambrientos se los come su entraña,
de esparto y fuente mina
mi sierra que camina,
muerta jamás arrastra pena,
violín de cuchillo,
sueño en vergel de sangre,
mi tierra por la razón,
no se agota la espuela,
miles de respiros valientes
troceando nuestra miseria
para ser del pueblo
y el pueblo ser de su tierra.
El Castellano
SUEÑO EXTENDIDO:
Presentes sucesiones de difuntos.
Quevedo
El cielo como granate yerto,
expandido ¿Cómo? con sus cristales por colores,
mansamente no me amanso.
algunos yertos que caminan
ansían la doblez de mi destino,
sábanas mojadas un olor a humano,
saldrá el sol no con más ganas que ayer,
para sujetar este calor,
vidas que ansían otro destello de vida
tras su estancia en breve instancia de caducidad,
que teje su organismo,
mundo no me negarás la visión
por este sueño extendido
de mi jardín de mujer,
sin necesidad de podar escalo sus ramas
abordando su infinita sed,
arde mi cuerpo fiel verano,
quisiera ser río y fuente de montaña,
quisiera ser tantas cosas que sólo elegí una,
la que no elegí,
si no dos células y su vientre,
mis naipes se van desvelando
una baraja helada de sangre,
un destino y un cauce,
mi vida que elige electrificar su cobre,
en círculos la polilla
vampiresa de mi ropa,
destino avocado a su perdición,
estamparse y quemarse en la bombilla,
luego pregúntame por qué tanto buscar la luz,
perdido sosteniendo tu puerta,
el monstruo de tu armario tiene miedo,
quiero devorarte
lentamente.
El Castellano
ALGÚN ALIENTO:
Tú eres mi ventana volada,
eres cielo y fuga de escarcha,
un segundo y un desespero
fumando mi cigarro,
hasta el tiempo de volver a caer en tu cuerpo,
mantenme estas cuerdas,
mantén estas esperanzas,
te vuelves real color
suplicio de rosa gris,
anhelante caricia de tus puertos,
una gota, un oscuro linde,
un respiro de fiel accidente,
momento que se retuerce,
amor demostrado y dolido,
vida de mi sentido,
ufano beso y tiemblo,
carne de esencia, alma plena,
estallido y borbotón de luz,
no eres mala liendre,
eres demasiado buena para beber de mi sangre,
eres un puente de destino
y un alambre rizado,
eres mi sueño en el pasto,
eres flor que se renueva
jamás seca,
eres sueño y camino recorrido,
eres mi ansia que por si vivo
jamás podrás destruir nuestra rosa,
te amo más que dos palabras
es un nombre a nuestro idilio
jamás perdido mi amapola.
El Castellano
ABROJO EN MI DESTELLO:
A veces roto,
a veces nuevo
ecos de este horizonte profuso,
nueva era comienza,
escalando mis aguas,
justo mi vida está empezando
ruptura para ser libre
silencio envolvente
gira mi mente,
no Dios el Demonio eres tú,
Dios del demonio
en este linde por el calor sujeto,
estados febriles
de quebrada conciencia,
tus mentiras son lejanas,
de un océano abierto,
muchas noches te esperé
muchas lágrimas se perdieron
vida aparte,
creo que ya debo irme
dejar esta espina de corazón ,
prenderme en el olvidado brillo,
encontrar la luz del astro,
olvidar a mi umbrío ,
una despedida que me cuelga
la Copa de cerveza,
no bebo pero por un día
no me voy a condenar
más de lo sentido,
más de lo vivido
apelo al olvido,
y su cruel instrumento,
a golpes parados,
melancolía déjate no la conozco,
locura nada esa es pasajera
como humilde tijera,
buscando, buscando
olvidé cómo se escribe
un poema,
dejar de escribir es como morir
demostraré a este verano
que mi tierra de la parcela
llorará flores,
mi combate cincel de arte,
aquello que mi magia sucede
porque tengo sangre,
mi calor mi rojo humor,
ya no soy el mismo reflejo
no soy aquel vendido
soy destello de mí mismo,
fiel abrojo será tarde.
Para derretir todo lo existente.
El Castellano
FLOS UMBRA FLOR DE SOMBRA:
Está en la lluvia,
ella es Dios,
de ojos abiertos atraviesa
un profuso soliviar,
de flores,
de vivos colores,
escrito sin mentiras su nombre,
era un hombre
vendiéndose a otro hombre
que lo volviera hecho y acto
de material afán de éxito,
pero la naturaleza no se puede cambiar,
el artista no nace,
no se hace,
nace y se hace deshaciéndose a sí,
igual que un pre-bonsái
por podar y desmochar su alma
hojas mías quedaron mustias y abatidas
de haberme rendido al sentir de describir
a un amor furtivo que me acechaba
a un sentir interior que me dominaba,
caí como gota de agua,
y el estruendo me partió la vista,
ahora soy tallo nuevo de persona,
podando y podando,
destruyendo para poder crear
para acariciar este Sol
que retuerce , soslaya, pule, amamanta
el hierro de mi entraña,
el miedo no me para
el dolor por ser dolor se acaba,
siento que siento,
amo a la mujer que amo,
tallada en cuarzo,
al final seré el último hombre en pie,
cada verso que lanzar al viento
como fiel testigo cuchillo
de perder la realidad,
justo a la derecha,
recto para ser erróneo,
sigiloso para hacer ruido,
noche, alas blancas
es de ti el tiempo afilado
astros, diáfanos siglos
caducidad de la ciencia
caducidad de su conciencia,
verde monte para rodar,
azul cielo para atravesar,
siembra para ver la flor llegar,
beso para el placer amansar.
Me estoy perdiendo de verdad,
tengo que fumigar.
El Castellano
CUANDO LA LLUVIA CAE ABAJO:
La libertad está tejida
de flechas al horizonte
devanan duros, limpios,
cristales ahogados en profunda sien,
surtidor de velas de los mares,
fuegos en lumbre eterna
por los senderos que labró
el astro verdadero,
inconsciente avenida
mi ser viaja en sinfonía ausente
de tristeza y su carcoma
todas las expectativas
son vivencias
para el vivo
todo cambia
para lanzarlo
y nunca olvidarlo
sólo ser es el reto,
lejos de leones
lejos de sombras cada día,
cada emoción
por mirar
dentro de lo que no se ve,
se siente
promesas
que vuelven,
rescoldos de vegetales escombros
el pasado se abre en alta simiente
un día amarás decir
es alguien a quien tengo a mi lado
para resurgir de la hoguera
en honda tierra,
y mi ceniza lo siento esta noche
crepitará al viento
que no hay mayor portento
que haber conocido
un día su sustento,
que mi alma escapa de mi cuerpo
para abrazarse al firmamento,
mi lumbre ya avivada
prenderá el cielo
todo lo que siento
indómita expresión del tiempo
al que estoy sujeto
en oscura torre
que yergue mi adentro,
fuera de la noche
dentro de la luz
en veda azul
en vega de solitud
dentro donde tu interés
te miente
donde mis brazos se alzan
asumiendo la eternidad
de mi sendero,
la eternidad del azul del cielo,
donde desde hace siglos
te espero.
El Castellano
SEMPERVIVENS:
Modelo con cincel de viento
las manos de una caricia,
la vida de mi abeja subrepticia
cómo definirla no sabría.
Estreno un nuevo Julio
una gota sedienta de su estío,
fuera del momento
que mi vida se vuelve luz,
mi vena siempreviva se yergue
acariciando a mi Sol,
que este mes me vio nacer,
viento, viento bonito
llévame en tus alas
de vidas labradas,
quiero que me muerda mi amapola,
que se destape tu lecho,
y me dejes apoderarlo,
para siempre volar
como mitad de poema,
que las aguas surca,
para fortalecer el riego de mi tierra,
con sangre de hierro,
tu fiel desespero,
renace mi araña Lichtter
tejiendo mi existencia
en mitad del verso
hoy por ti, siempre por ti
LhiannanShee,
se quedó llana y profunda
la cuenca de tu visión,
siendo hondo destello enfundado,
mi calvero y sus ríos de sombra,
sigo por la línea goteante
de nuestro suplicio,
me pende la mirada tu ventana,
mientras hilvanas libre tus cabellos
de rizos de cielo,
los cuadros de mi creencia los conoces
mi veleta, mi Sol, mi flor,
mi árbol, un puente a encontrarte
una vida,
juntarme, en proceso que rige,
que estalla en dos rayos de tormenta,
te quiero, te necesito,
el Sol dice lo que me susurras,
mi cigarra laboraba
el sentir de una esfera
que canta dentro mi alma,
de un grillo el soneto,
de tu cuello el cristal de cuarzo,
de mí la lluvia en tu agraz de marzo,
mi concepto será ejemplo,
avanzaré por mi sentido puente.
Nuestro destino cruzaré.
El Castellano
APIUM:
El barbecho de la espiga,
la mar me trae la ola,
la montaña me trae la cascada
mis ojos llevan el color de siglos
de floresta destapada,
mi tierra se lleva mi espada,
el aire mi aullido
hondo, redondo
crujiendo en las aguas,
mi vida lo siente
lleva sangre en las venas,
arterias de ángeles
estrellados en su eco
alzado a la Estrella,
sostenme en las bocas
que mi silencio reverbera,
mi montaña bonita será sentida,
mi Santa flor en la boca de la abeja,
que mi vida maneja,
tráeme los pinos de los montes,
el aire de las cumbres,
tráeme tu boca para nacer en ella,
sigo a Lucifer
bueno él me sigue a mí,
cosas peores habrá
como abrir y entornar la puerta
para que pase la maldad,
siento decirte que arrastro mis demonios creados,
para enterrarlos en el campo,
al lado de un sigilo de chopo,
que a sí estén de ojos abiertos,
no me enloquecerán más,
estoy hecho de miedo,
soy de hielo
más fuerte que el don austero,
palabras sepultadas en mi zanja,
mis padres y mi gato son inmortales,
¿por qué me llevaste padre a la ciudad?
que lento muero aquí,
sin sentir el viento de mi campo,
sin mis flores y su aroma
a vendavales desnudos,
estos árboles de cemento
no suenan con el aire,
ni estos cristales atraen abejas,
aléjame de rejas,
salva mi muerte
que es del monte.
El Castellano
CORAZA DE TIERRA:
Abrasa mi vida, esquiva es
esta piel de caricia
estoy ardiendo, aviva mi resquemor
en este mundo que se retuerce
y envilece entre sus venas razones
la realidad como lirio de negro pétalo
sólo un sendero por abarcar
llamado vida.
Del astro Rey de sí mismo
a la caléndula de tierra,
su esposa efímera.
Avanza mi subrepticia,
entre páramos deshojados
y sus hojas por gentes.
Espiga flagrante, sentido granate
por mis ojos he visto nacer
los genes de tierra,
por mis ojos he visto morir mi amor
que mi pecho yergue
yedras brotaron tapando su calor.
Mi Sol me enraizó
mi ilusión se diluyó,
una flor de sangre brotó
llenando mi vacío interior,
mi amor por su reino vegetal
me mordió.
Ahora sólo encuentro
tranquilidad y sosiego
en las vidas que siembro.
En mis diablos de flores.
Hasta yo morir
a la altura de los montes.
El Castellano
Blándeme:
En mitad del campo,
sólo allí que la encina enraíce mi carne,
el hinojo lata al son el tambor de sus flores,
la carrasca grite verdades del monte,
vereda quieta, enarbolada,
soledad disparada sin descanso,
sólo allí reinará mi alma,
en letras escritas en las hojas de vida,
las lindes teñirán de rojo y negro,
de tinta y sangre el resurgir del añil
aliento dibujado de toda vida en color,
del albor a la muerte en flor
se alzará mi latido con su amor.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Renace en la piel,
en el albor sin conciencia,
hace más frío que antes
sentido muerto, caído
olvido yerto
raíz del ser
más callado que el invierno
avanza camina a voz
todo lo que he perdido
polvo de estrellas, hierro de océanos
piedra de montañas...
hazme recordar alas cansadas
cosas grises que te gustaba sentir
mi amada así sabes
horizontales que no puedo olvidar
ejes verticales de conciencia
sin dormir
danza la primavera del lugar
con mi soledad pintada
en la sangre de mis ojos
todo lo que veo teñido
la ilusión cae en gotas derramadas
cayendo congeladas
desnudo mi cuerpo en la penumbra
del segundo quieto
raíces comiendo mis venas
hojas de mi historia mustia, abatida
sentido muerto
viviendo por ver morir el momento
momentos atrás que cae el recuerdo
sin miedo, sin sentimiento
todo hirviendo
sólo este sarmiento de cuerpo
esperando que juzguen a su alma
libre de maldad
quién estará allí
quién vendrá a darme un camino que seguir
solo en la oscuridad
donde todo comienza
las sombras me reconfortan
y veo en luz mi vida
para encontrarte
algo que darte de dentro de mí.
Un amor rugiendo en la boca de la estrella.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Diestro del mar a la montaña,
visten sus flores coloradas orgullosas y sentidas
cual caricia de su jardinero que las ama
el viento armado escala cual seco rayo
su sol enturbiado se paran las oraciones
hipsipila dejó su crisálida
en un caballo alado recorre sierras y sus manantiales
recolectando toda simiente desde todo confín
al inerte sombrío albor,
mientras su fría luz crece y camina
sin franca tapia ni verja que detenga su escalar
vuela vaga la libélula para posarse en su hombro
recio brazo arrido ninguna simiente cae a su lado inerte
que lleva que trae a su castillo olvidado
hechiceros de todos los reinos desvelaban que sólo
un reino se mantendría vivo
y no era el del humano ser
Hipsipila cabalgaba por naturaleza su religión
abarcando de la tierra a la lluvia
cual rayo cortado de Sol su cabello
los pájaros trinaban en su castillo
hipsipila siempre vivirá como invencible Sol.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Flor de Bradomín:
Partir me alcance un día,
he de visitar el prado
que yo por Bradomín
nunca he visitado,
he de colgarme
de la flor serena
un día lluvioso
a colgar mi estandarte,
vive, nació y deslumbró,
deberéis guardarme el vilo,
que yo partiré este humo,
quebraré la voz del eco,
soñaré que estaba despierto,
mi simiente sacará su cuchillo para sembrarse
sola como se destapa la primera
gota de rocío que tiembla
el Sol que visita,
esta la haré generación seca
en pergamino de hoguera,
mi letra caerá en el ojo
desde el infinito parco de este abrojo,
el altiplano enjutado,
dirá que me debéis cuanto yo
Arriano he plasmado,
y este granate será mi lustre recordado,
es y será mi casa,
el esfumino en coro de grillos,
aullando bisagra,
a la luna que escarcha,
hazme libre luna,
saca mi alta ojera con tu luz,
abre mi campo
al murciélago señor,
acaso mi espada mi tiempo no blandiera,
me encumbro de la fiera,
para ser quimera a la espera,
mi Leannán dicta
yo converso
que desde su estampa
al hada infernal de esta
yerta conciencia,
resurgiré
de la espina dorsal
de este cuervo Förüq
que me habita,
el ser que me lleva
cantará soñará
que es y será otra primavera
para enloquecer desde ingenua siembra,
graznará el solar del fresno quieto
abrirá el despertar de esta gris araña
entre agujeros de la idea
soterrada, descubierta, alzada
entre sierras y barbechos
despierta, riza, besa, evapora
esta sangre de tierra
que es mi amapola del pecho
anclada, versada, cálida, cariñosa,
abierta entre grietas que palpitan,
fulgente, displicente, dispara que flagra,
sentimiento de esta azada
que es mi vida
al borde de la flor
de caléndula
que es esta realidad tejida
y su floresta que riego desde
que el verso me escribió
a mí la felicidad.
El Castellano,
Señero quieto:
Linde abierto sembrado por Dioses
de plantas que sólo ellos pusieron
y que ven exclamar su muerte
de silencio gritado
lentamente las estaciones.
Es este campo que vive lejos
con señero
un señor de señores
amor de silvestres,
es encargado de ver en flor
sus amores,
vence que atraviesa
sólo su mirada,
un jacinto se yergue
de azules botellas
sus besos de rocío matutino,
matutinos gritos postrados,
con el hervor que reverdece las tierras,
de cal y tierra arenisca,
de arcilla al barro,
de la pizarra al risco
de granito,
es una vida mi estatua,
dulce, risueña, sembrada,
albores cruzados crepitando,
mi nido de grama rehaciéndose,
entre luceros anclados,
arriba mi barco
estos océanos y mares
de tierra,
que todo lo rige
su materia,
desnace el tiempo
abriendo el brillo de mi falcata.
Fiera de fieras
yo soy la fiera,
desde las piedras
a esta mi hoguera.
El Castellano
Aciago, recto vilo quemado:
Cantares quebradizos
se alzan entre aciagas esferas
de la palabra inexistente,
entre sones terrazgos
que sí puede,
llevarme la espuela,
entre la mente que afila,
que pule mi sangre oxidada,
por el puente de venas de mis manos,
diestro al compás que muerde
yo sí estoy hablando
tú no estás escuchando,
esta vida asida en un tiesto,
por encajes sin alba
por encuentros fugaces
en mi averno tejido,
entre estos soles de trapo
que me levantan las flores,
avanza la flojera del día
que llega a su final,
volviendo madrugada de espadas,
quiero contarte hasta tres,
mi aliento que no sabe contar al tuyo
pero sabe que cuentas con él,
yo que ni segura tengo mi muerte,
colgaré destinos
de sus ramas de fresno,
mi piedra será estatua,
no seré yo quien hable si no ella,
el verde musgo llorará el sino dentado,
esta vida de espectro
no me dará de lado,
de un solsticio me haré un cuarto,
entre mis líneas habitarán espasmos
de ideas ausentes,
de fríos hielos de soledad congelada,
liberaré este reino enfuscado
cual vicio cual tierra sin dueño
de crear nuevos palabros
que serán hijos de la nada,
cabalgada, soterrada
en infinito de la siembra alzada.
El Castellano
Soles de cuarzo:
Libero vendavales furtivos,
acampo la idea en tremenda pradera
descolocada, mansa, abierta
en florestas húmedas de rocío
tempranero, sólo allí tengo nido,
entre trinos que excomulgan mi deseo,
como atardecer rojizo sin sangre
acaso es, envoltura dispuesta,
rezo que acompaso la franca vida
de mi caléndula del camino,
resumo que coarto su vida verdadera,
luz de los campos, luz de mi campo
acaso fuese mío,
aquí solo hundido mordiendo este papel,
traigo que quiebro tormentas en nido,
culebras del sonido perdido,
me desatan yugos de esparto,
arde la simiente mía,
entre clavos ardiendo,
entre amapolas dulces, risueñas sin cruz,
se desmenuzan abrojos
de mi soledad carcomida,
a la que entablo soliloquio
en cama, con ella sin ella soy el mismo,
verdades atrás qué necesito,
si el mundo me hizo completo,
quizás aburrirla a ella mi pena,
nacida en cuarentena,
avanza mi siega,
esta vida mía vale la pena,
rezogo brillos de metal
cuando deja de serlo,
y crispa al viento
lo que llevo dentro,
más que un tarro de miel
y unas flores asesinadas,
un corazón que sube por la garganta,
a decirla a ella que no se vaya,
usted es mi compañera.
De estos siglos que me quedan,
eres la carcoma de mi madera,
hasta ser lanza,
estaca que somete al viento,
en aullidos, en graznidos dolidos,
en enjambres con reina.
Por ahora a tu lado
soy azada que socava mi camino,
sacando terrones de lamentos
para sembrar tu amor
que Dioses me indican
que tendría que estar ciego,
para negar que eres más de lo que siento,
como veleta que le falta lo principal,
para no ser dirección que marca,
una flor plañía a mi vera,
que le faltaba su insectito
que la besara sin diligencia,
así la belleza nunca completa,
recto escalafón retorcido al beso,
unión de dos, como escala sin peldaño
rampa no sería,
me encumbro de la fiera para ser yo
la fiera, de esta mi pradera,
se afila mi vida quieta,
entre soles que cuelgan,
y colores que lloran,
despierto para entregarla
a ella mi cardillo de la dama
para que me lo devuelva
cuando me una a ella,
como se unen dos gotas
del mismo agua,
como se desgrana el molinillo
cuando saluda el viento.
El Castellano
Linde quieto abierto:
Derecho firmamento
entre filos de gentes,
es una piedra que camina,
piedra aventurera,
seca y umbría,
reposa y duerme
cantares del linde,
centellea rayos irisados
se riza con los besos de lluvia,
acaso quiso ser otra,
ella tan yerma, tan plácida,
imperecedera,
cerrada como se cierran
los rayos de luna,
acantonada, de estéril estampa,
dejas muda alabanza,
el día que te hice de voz,
piedra bella, sola,
estridente sin patio de sonido,
y esta voz que te di
voz dorada como tu piel de minera,
como un soto sin perdices,
avanzabas solo tú,
la vida quieta,
sembrándote allí por donde anduvieras,
al candor de piedra única
igual a la siguiente y a la anterior,
sin afán superior
hasta que este poeta te dio voz,
como flores que sin color
acaso fuesen,
un despertar en brazos de cieno,
un respirar de la montaña,
un cuchillo calizo que afilan
erosiones de las eras,
latido férreo, sangre de mineral,
o compostura de arenas,
piedra de mi casa,
piedra de tu casa,
la tierra.
II
Piedra potencia eterna,
nacida como nace una estrella,
cumbre de filos por bandera,
hogar, cobijo y morada
de lagartijas que cuelgan tus venas,
colchón de rayos de sol,
asolada tu espera
por quien te dio voz,
lideras tu guerra sin cuartel,
antes de yo nacer,
tú dabas alientos al suelo
sin importar pertenecer,
siempre fuiste
siempre eras su piel,
de la cantera, al nicho,
del mausoleo, al caserón viejo,
del silo al castillo,
tu fortaleza empedernida,
tu aval de honda certera,
Siempre estabas
siempre estuviste,
como río a su voz del mar,
osado no fui yo
quien te encontró,
solo fui encargado
de darte moción verdadera
ojalá pudieses contestarme
mi piedrita bella.
III
Devuélveme a tu vida eterna,
del soto a tu quimera verdadera,
clávame la oscuridad de tu cueva,
en esta esfera pulida sin espera,
risco de tu sien enarbolada,
millones de hijos
esencia desnuda de tu alma pura,
techo sin compostura
del ser invertebrado,
techumbre que pizarra llora,
su azabache de cristal,
tu sangre de fuego y agua
que nunca te alcanza
sólo partirte puede,
grieta de helada, tus filamentos
que encaran tu azar de vida sin dueño
a tu sangre de musgo me cuelgo,
en verde musgo tu fantasma muerdo,
vida de herramienta,
azar de la idea,
al paraje que te conforma
al que sostienes su vida
siendo el suelo techo de esta hacienda,
si tuvieses dolores todos gritarían
que se acabase la muerte en la tierra.
El Castellano
Es un fuste:
Quiero deslumbrar mi camino,
ayen de estas víboras que caminan,
palpitar el látigo enfoscado
de sedientos corazones.
Entre sangres fugaces afilo
esta vida en grana marcada,
deshojada, por cuanto he conocido,
más que tristes metales lascivos.
Caparazón este el mío inerte,
vestido de marzos seniles,
agota, coarta la esquela
de mi memoria perturbada.
Camino sin camino
por donde se oculta el este,
veo la flor que desviste,
entre pétalos su iris difunto, perturbable.
Te construyo sin verja, franca,
tapia ni acantonado te hago
a imagen y semejanza del aire.
Que pasa y mira,
que mira pero no descubre,
que nací dueño de tu avenida.
A este sol ferro cuelgo agravios,
ofensas que desvanecen,
como la noche devora lo que es suyo.
El Castellano
Azabache de ojos:
Ojos direccionados
a esta luna de azabache,
el tejer de una gota de savia
plañía la desesperanza fría.
Siniestro compás mece,
en acorde clavado
a este invierno estirado,
al estallar de bombilla me cuelgo.
Curvo escalafón riza besos
de unión de cicuta y sangre,
yermo, plácido, envuelto
en sembradíos de oscuridad.
Quisiera que hablaran mis retinas,
de encuentros fugaces
al temblor de esos filos
que la dama oscura blande.
Gira presto a enraizar mi sangre,
con destellos de espuma
que las tierras bullen.
Yerma, extasía de verdes
por solitudes heridas
una cercenada tajada,
Retiembla mi destino
al cabalgar de soles,
fiel estampida de semblanza.
El Castellano
Flor de destino:
Ama de esta casa, el alma fría,
de mundos retorcidos,
ingrávidos al peso de flores,
destartalado, por gentiles gestos,
azares difusos de mi reino,
saludando a la quema del rastrojo,
un iris por desenclavar,
corona de caléndulas
en soles por doblar,
al rayo seco, tornado en gesta
y sus candilejas fulguradas,
ríe y pasa, pasa y ríe esta espada,
hendiduras febriles
de mis verdes ojos
entre sus cauces la verde grana,
la verde espiga,
un romance del labrador
con su granate amapola,
llora sangre de aquellas santas,
esquiva de obreras guirnaldas,
se cava en rayos seculares del rey astro,
Estallando de luz su rocío primero.
Cuarto para sembrarte:
Duro, seco, estridente,
irusorio destello
al matiz de soles abiertos,
estoy empezando,
alago, avanzo este cuarto
este cuarto de arañas,
repleto, lleno por escuadras
afilo el verbo
preparado, despierto,
granate complaciente
a este lustre olvidado,
quiebra marzo,
estampida en blancas sienes,
réquiem en osadía,
en marca de astros,
luz intransigente,
fulgor
entre tus manecitas
heladas,
miro atrás
nada reverdece el horizonte,
todo son raíces del hombre,
me cuelgan lunas
ojeras sin alba,
quiebro esta ilusión
me afila su espada,
cómo huir
de los que no me conocen
si nunca me conocerán,
me clava la estrella
un tenor en escala mayor,
gimen flores por abrir,
el sol hiela de nuevo,
rizo sorpresas en tus cabellos,
libero el león,
me muevo,
suceden grises
a mis penas,
escarchadas, desvanecidas,
derretidas en claro oscuro,
por lo que dejó de ser,
llevo que traigo,
resoplos y arterias
en este jarrón de sangre,
hasta que caigan dementes azares,
y sus cruces bienaventuradas
de tu carne,
de mi lumbre,
de este alambre.
El Castellano
Extasía de cristal:
Penumbra arrebolada,
hija de la sombra asolada,
temple de maraña,
tejida araña dormida,
sol en su trapo desnudo,
ven a mi cabeza
retuerce mi idea
que se encadena
sumisa a noble premisa,
no puedo parar
no hay tiempo de pensamiento
sólo escribir duro, seco, limpio
como agua de este río.
Sentido volviendo a la vida,
mi espíritu está creciendo,
tantas luces sin alba
tantos astros sin noche
es muy tarde,
nunca para volver
al origen de savia,
desnudo en este reloj
mirando este cementerio
alzarse, enarbolarse
de la nada y su infinito de cristal,
estoy dolido
que tú te lo has creído
si me quiebro
es para renacer
quemando mentiras,
liberando fieras,
roto al tiempo
entero al fragor
de mi espada,
no tiene vuelta atrás,
océanos abiertos me llevan
a flote de nuevos sueños,
rizado a la espera
engalanando mi quimera,
desiertos abiertos
en cal viva,
mantenme el amor quieto
subiendo montañas deshechas,
viviendo el brillo sin estrella,
ojo de un ojo labrado
mantengo mi esencia
en joya de noche
miro dentro
y todo retuerce de nuevo
dame tu mano,
descubre mi reino perdido
a encontrarse en tu mejilla,
háblame de tus vidas
de tus alas en mi extasía,
sólo allí despacio
latirá su osadía
líbrame amiga
de cerrojos
y sus cerrojillos dorados,
exasperados,
esta noche seré luz de hoguera
y tu cobija quieta,
el único sin miedo
a decir lo que siento,
carrusel sin engranajes
caballo sin jinete
tormenta sin nube,
beso donde no lo imaginas,
sólo yo contra el mundo
abriéndome de la tierra
siendo alma en disparo
certero, agudo, estridente,
como la voz que no se pierde,
yo nací albor
nací para ser tu amor
no me pierdo,
estallo osadías repletas
solitudes que trepan
cruzo líneas
de estos cuatro días
que clava tu voz
desmigajando miedos
porque yo soy el miedo,
batallas aparte
soy tu planta silvestre
amando su tierra
más que a su sangre,
mi esencia verdadera.
El Castellano
Cornucopia de tierra:
No rebotan los tiempos llorando,
en escalas a ese cielo anhelado,
voy que viajo
y bajo mis plantas
la tierra brota, rehúye, fluye,
todo me alza
sobre torres sembradas
y sus trompetas abiertas,
desenfundo esta esencia
de estaciones correr,
hogueras profundas
en lágrimas de lluvia,
plantada mi compostura,
me crepitan las montañas,
los cuervos me rinden pleitesía.
Ante estos ojos
el ávido brillo
de oscuras alas,
frente mi carne
fuego enraíza
esta noble falcata,
encinas me enraízan
el dorado anochecer,
noche oscura
entre espectros de letras,
el día derretirá mis flores,
trepando mis venas de encaje,
mi azada será sangre
no más cuerpo y carne de metal,
al erizado filo
clavaré sentidos despiertos,
mi letra será invencible,
en flameante rebosante inspiración
parida de un rayo de sol,
ay la tierra que me clava la siembra,
ay sol ferro,
yo te hablo
al fulgor de venas
al calor de llama azul,
tú invencible
como la palabra te formó,
extasía lumínica
en candor de lunas aulladas,
ven a mi pecho,
te daré asilo,
desgrana este silo,
que mis manos hablen colores,
solo ante la adversidad
esta negra noche que huye
enjaula su oscura sombra
donde la letanía esconde
sus garras de cristal,
quedando repleto este umbral,
he oído llamar
llamar tus sangres de luz,
a violetas nebulosas
sin cauce
empotradas en sagradas espirales,
busqué tu vida eterna,
me contestaron inviernos
desmochando brotes extenuados
de tiempos atravesados
por tu espada eterna,
fuente fría
que llena dulce la fontana,
la vieja luna sonríe,
lo efímero será áspero y duro,
a la caída de este plomo,
se levantarán estatuas de barro,
tu lobo vestirá el sincero metal
por ser de hierro,
hasta su aullido de plata
a la noche sempiterna,
y sus enredaderas malvas,
campo este de víboras nacido,
por un surco repto,
y el alacrán me saluda,
soy yo tiempo olvidado,
resplandores
de este patio de grillos,
me cuelga la corona de caracoles,
por todas mis lumbres
abiertas
de caléndulas solariegas,
más que hoy
no espero nada,
porque yo siembro lo perfecto,
me responden sus voces del suelo,
al intransigente destello
me parto, me quiebro,
hasta dar mi voz
a estos campos
y sus sotos perdidos
encontrados en cada sangre.
El Castellano
Ondas mecen:
Me cruzan las vías
del tren de la noche,
abierto, caracoleado,
en peregrinaje de estrellas
y sus halos,
este insomne caballero
de tu sonrisa nacarado,
arrebolado entre tus brazos lejanos,
una hoja precipita
al tañer de campanas
en garganta de lluvia,
no hay invierno sin frío
ni frío sin invierno,
vuelta atrás estoy vivo,
una vez en la vida
curva de espejos
entre verdes y ocres,
quién dijo que no tuviera esperanzas,
pálpito fugaz de estrella marchado,
el amarillo viste mis flores,
color efímero, sin despedida,
entre un patio de ojos
y sus carcomas solariegas,
danza este caballito sin diablo,
al cuartel de la cucaracha
van los ojerosos grillos,
todo cuelga de un hilo de lana,
horas minutos
para hacerme libre,
termíname tú porque yo no puedo,
este alfiler parco, sobrio
como él mismo,
entre circo de huecos sones
danzan los vellos de mi piel,
por el agujereado brillo de luna
cuento notas perdidas
y el filo de esta mi cuerda
hasta latir con ella
y su desnuda poesía
con cuerpo de mujer,
lejos de la tierra,
entre un soñar del viento,
se destapa mi cordura
le florean pensamientos
fieles ecos en iris despierto,
dulces ondas como dulces sirenas
enamoradas,
de este marinero sin mar
llamado verso,
al senil aleteo de la polilla,
el invierno nace de un cubito de hielo,
que avanza ya su noche
sin pedir permiso,
al vapor de sienes heladas,
entre un coraje acorazado
de haber realizado una buena siembra
me marcho.
El Castellano
Filo sonriente:
Agudo filo nacido
mi destino.
Recuérdame en la tijera
desdoblando la espera,
hoy por hoy
mañana por ayer
el frío en la piel,
de estas cuchillas
sonrientes,
y su esperanza
carcomida, acabada
en hoguera.
Miénteme aparte
ancla en gozo
el violín de mi idea,
corriendo por fuera
marchando lanzas
de tierra
y el tiempo
solo, hinchado, dormido.
Rehullo de mi pasado
que se clava
en mis brazos.
Mírame aparte
del punto y su silencio
seco.
Esta vida en el centro
de una margarita,
miro su caricia
en pétalo de brea
arde mi sinfonía
deshace la lejanía
hasta ser ese lejano
carrusel de estrellas
por boca.
Vida por mi vida,
y yo qué no daría,
a este cielo desplomado
de fieles compases
oxidados,
es por su plomo
que a veces plomo,
a veces más alzado
que las cumbres,
entre regueros y ramblas
libero mi azada,
en cuerpo de sangre y vena,
no conozco a Pena,
entre su alta ojera
clavo una letra,
abre la acequia
destartalada en honda esencia,
allí donde graznan cuervos
su lenguaje de madera,
soy yo a la espera,
abriendo mi destino
en esferas puras, plenas
ay la tierra
vive esta dorada
escolopendra,
sucesos de huesos
arde la compostura
afila su beso de miel,
todo queda en yacija,
derramada hiel,
entre grietas iluminadas
del iris insomne
soterrando verdades,
completando
liberando sus cavidades
y su dama oscura
naciendo la noche
que ya vuela,
entre testimonios del pueblo,
que pertenece a la tierra
y sólo esta a su materia.
El Castellano
Vieja escuela sembrada:
Cierra los ojos
es nuestra creencia,
por la que no hay
rosa sin espina,
línea de destino,
déjame sembrar luz
en la retina,
que caiga mi gota
quebrada,
viviendo tus memorias
lejos de la letanía
enroscada,
crepitan los labios grises
entre crujidos por despertar
leones del nuevo día,
Noche, noche
tus minutos erizados vencen
pasan las horas
y las horas
la misma pesadilla tejida,
en vilo en vela
de navegante sin mar
sin barco, sin puerto,
viviré una vez más
esta soledad del párpado
despierto,
muy alto, muy hondo,
todo se retuerce en sol mayor,
hasta la cima
me verán cabalgar,
resume este papel
un furor oxidado,
soy yo, soy yo su raíz
que ni yo mismo entiendo
dichos soterrados en alma difusa
en corazones sedientos
su fría caricia entre espadas
ni yo hago empeño solariego
ay la tierra perdida de tu raíz
quien osado sólo la viera
de viva materia rompiéndose
sucumbiendo sobre los filos hirientes
hondas espumas
riéndo en camino vivo,
en un sentido
con bordes de rosas y cebollinos
y senda de espinos fugaces al alba,
brotando imperecederos
que enriquecen los pliegues sembrados
de esta mi sonrisa
de esta voz en calma y en tormenta
de desnudos sigilos
que te nombra y nombra
si no estás lo hace sin cuenta
Poeta
Haces la ruta sin pena ni sangre
que no sea portada en tus venas
de solana hacia el sol
en un ovillo giras en tornasol
allí donde sus esposas
amarillean y tu sien gotean
en canto al amor
alzado en rayo de Thor
será un caracol
cuando nos vamos
solos sin nosotros
con o sin Dios
nació un vespertino albor
ocultando el dolor
secando lo que plañía
la sin razón
Se duda entre las cosas
por la vaciedad de las cosas vacuas
de fátuos alambres en fanal
hoguera del hambre
de oblícuas espinas
y los nuevos castillos
que sin su castellano chozas son
destruimos
si nos miramos
vencer o vencer otra vez
Oh raíz
ay de tu tierra que te vio nacer
qué guardas
en tus bases en las grietas
que te clavan que estiran
tus lágrimas del ayer
que no nos dejas ir
por caminos distintos
a los limpios valles de oscuridad
reposo y sosiego que clava el camino
¿Será cómo es
por siglos
de siglos?
De este tiempo oxidado
que latirá el son
con forma de tu siniestro corazón.
El Castellano
Cristal silvestre:
Ámame como se ama a la vida,
porque te amo en caricia
sin despedida,
tú que eres como la noche
en subrepticia,
yo contemplador extasiado,
por el fulgor que se abre paso,
Fin del diario,
este es el momento,
que se queda para descubrir
la expectativa
del vivo hacia la vida,
todo cambia y yo lanzo
mi destello sembrado en mis ojos,
susurros en letargo
abiertos al destino parco
estoy en tierras de la luna,
abriendo, tornando bella
su distancia,
todo sembrado
de quien yo era,
esta mi raíz que canta
plena, sacada,
cortada de su tierra,
para nunca olvidar,
alzada a tormentas del tiempo
y su etéreo desliz envuelto,
en las calles
de los sueños rotos
un pasado que dejo atrás
estoy joven para estas nuevas visiones,
existencia clavada,
al crepitar enroscado entre arterias
de alambres,
y su perfección
erizados gritos liberados
hay que pagar el precio
de ser mejor que este talento,
avanzo lento,
me abro por el fuego,
y no hay sangre que no me deje
envuelto,
miro dentro de tus ojos
buscando mi respuesta,
el sol se está enterrando en tus cabellos,
lima este nervio
que llegó su escarcha
siempre aparte,
siempre en alarde,
hasta yo encontrarte
encontrarme yo
en los sotos de tu voz
hasta ser yo el alarido con nombre
de sol, ser por siempre
ser para siempre,
ser siempre,
y Siempre llevar mis apellidos,
Siempre quemándome
en resquemor intransigente,
precisión de mi duende
llamado amarte.
ARTE,
condenada mi sombra,
a este precipicio
que despeña la letra,
a través del umbrío páramo
de esta piel y su yermo bosque de vida,
sigo la estela
vocecilla, elevada sin razón,
porque sí me sobra corazón,
soy yo mi murciélago de nácar,
vuelo que giro el infra-sentido terrestre,
y me quedo en vilo,
es glorioso este sino,
haciendo el amor con los sentidos
en el saco desdoblado,
de mi realidad soterrada,
destapo que descubro malvas
del sueño taciturno
que conduce a contemplarte,
bajo el sigilo de mi araña,
y su tela irisada,
en extasía de espejos carcomidos
sin dueño,
que no sea sinestesia
del cuadro de visión
llamado visión enardecida,
por la que mi ciprés
tiene tacto a caricia desnuda
y mis caléndulas caminan
con sabor a deseos de rubor.
El Castellano
Quiebro en dicha descrita:
Muero por un beso
aquel sembrado dirá que vivo
vivo por un querer
cruel del destino
condena de una pasión
que creó tu pestañeo
al dejarme ver
tu cielo encerrado
ese que liberado
jamás me abandonará,
fijamente tres minutos,
y morí con tu pestañeo.
Demostró que fui y soy
importante para ti
y que a pesar y muy
a mi pesar de los problemas
problema no es mi apellido,
seguí en tu mirada atrapado
hasta que la aguja
de aquel reloj de pulso
se paró al pasar ciento ochenta segundos
mi cambio de vida
cuando consumí
medio giro al decir
siempre te amaré.
De este resquicio vivo
yo traigo la flor,
en competencia
de ilusión que marcó
esta hoguera sin pena,
eres tú soy yo,
flamígera condena,
por el párpado del cielo,
por mi astro soslayado,
que yo sólo encuentro cielo
en tu mirar encandilado,
soy un muerto con vida
si no te tengo,
y este firmamento
se me cierra seco,
muchas cosas erróneas
en mi vida
que no hay tiempo para la sombra,
no hay tiempo para tristeza,
ni para la vida quieta,
porque todo resume
en buscarte a ti
mi vida completa,
si este corazón es un tiesto,
quiere y te quiere a tu persona,
enraizada, plena,
resplandeciente,
como el brillo,
como el halo,
de tu limpia, dura
sonrisa de perlas
en océano de resurrección
descubierta en dicha,
mía, mía sin despedida.
El Castellano
Cercenada razón:
Ilusoria, despierta, vespertina,
trepando lúgubre escala,
iris destartalado, ansiado
cubierto de cromáticos azares,
por un metal afilado va venciendo
a este brillo irisado vestido
de crueles destellos,
raspados destellos
de todo lo que dejó de ser,
reflejos sin nombre
ilusiones de este alambre,
rizado con hilos que gotean sangre,
despierta mi pesadilla
queda asomar la dicha
y mostrar esta araña,
fulgor desnudo al fragor
de transparentes cristales
que enamoran los hielos
que febrero siembra abiertos,
si estoy despierto se equivocan,
nazco que traigo
un cesto lleno de sueños,
se derrite mi estampa
quieta colgada del árbol
donde hago peticiones,
y que este forraje
se desprenda de mi humor,
no me desalienta,
he crecido para brotar
más duro y recio
que el esparto del monte,
traigo mortandad de idea,
en letra extasiada
al filo de verticales escarpias,
soy yo encargado de esta acequia,
que ni el más osado
pedirá que se calle,
alzo su valía
en desgranada espiga
que rompe mi silencio seco,
si no soy gente lo demuestro,
enseño a mi tinta
a no pertenecer
a este mundo de yertos,
mejor que qué cosa
mejor que la opaca suma
de alientos que se creen
tener originalidad,
de su umbral
prendo a cerilla
todo sembrado a diario
de vacía voz,
yo repleto no soy yo,
soy su extasía floreciente
de imagen y su prima
clavada en alfiler sin cabeza,
como un grito de letra,
y mordisco de fiera,
que deslicen décadas
que seguiré siendo yo mismo
entre grietas, entre esferas
quebradas y su olor
a flores desnudas,
que yo sé lo que hago
si no ni lo haría,
noche corría marcha atrás
esperaré su madrugada
soy taciturno con huerto de luna,
y siembro un quién contra mí,
estoy brotando,
no hay miedo yo soy el miedo,
fiera de esta hoguera,
llamada esperanza,
tengo una llave
y no soy cerrajero,
abro este corazón
y despierto su dragón,
hasta acabar de una tajada
con mi sana razón.
El Castellano
Cruzada ojera de luna:
Había sentido
Bravura repleta
no tengo ojos
tengo lágrimas de cristal
al iris en belleza consumada
nadie te alza
tomas tu lugar merecido
jamás colmada
siempre rebosada
de lo bello a lo mejor
sembrado ojo por este ojo
me late me arde una simiente
para el campo de tu alma
vida yo vida no tengo
si no se dirige en mirada
a mi letanía, certera amapola
desde el 2008
jamás en súplica mecida
por este arrojo
en mi pecho sembrado,
viva y descubierta en este tajo
repleto de lo bello a lo bonito
de su interior decretado,
yo hombre de sangre
siembro este sortilegio
de espadas por si llego
a su alma
y liberar libro sus ataduras,
por soñar soñó la primavera
que mis flores eran de ella
yo reviento y exclamo
que son de amapola bella
mi maestra en furor de espigas
nacida
solo tengo un corazón
y es suyo mi dama,
dama blanca
doncella escarchada
de esta vida a esta mi viña,
yo dulce muero despacio
por llenarla de esta dicha,
seguiré en pie porque ella
sigue viva enraizada en este latir
para yo con amplia voz decir
sin ella no hay vida ella es mi vida,
El Castellano
Negra noche sostiene:
A veces me rompo,
a veces me pierdo,
y el mundo reverbera,
se extingue
por oscuras alas
enlutadas,
quieto,
más tranquilo
que un yerto,
hago mis miradas
a su pasado,
no me asustan
sus dulces espantos,
estoy nacido
del hierro de mi idea,
labrado al fulgor
transparente
de mis campos
de soledades,
es por este tiesto
que jamás abandono
lo que siento,
y que mi flor
en vena me muerda,
trepe por mi vera,
hasta sentir que yo
estoy encumbrado de la fiera,
justo aquí justo allí
sólo para servir,
rayos y azares
de consecuencias,
como flores cabalgando estaciones,
al iris lunático sembrado,
hasta atravesar su corazón de cuarzo,
es por este azabache
por el que vive la noche,
suena de nuevo mi caligrafía,
y para esta lluvia
todo valía,
soterrado mi latido
queda decir
que consumado
estallaré sin cuantía
borbotones
que sangren esta luz
intransigente,
el Sol afligido
me nombrará su allegado,
hasta sangrar
retinas indiferentes,
hasta cabalgar sienes
y alientos helados
de espantos,
hasta yo trepar
de mis arañas en sus cuartos,
enterrando esta noche negra
dando inicio a mi condena
de vivir por ella,
porque valdrá la pena.
El Castellano
Las vidas que traigo yo:
Era esta araña
como un Sol ferro con casa,
era como un encontrarse sin despedida,
por qué,
porque yo empiezo esta obra,
camino destrenzo este campo,
me desmigajan a mí
sus flores extasiadas de difunto,
para decirme
que lo suyo es de todas las estaciones,
como hacer el amor
con azares alados y soldados de los campos,
que su simiente no es vida de un día,
yo digno de admiración
digo que me adopten
pues soy familiar
así no tenga savia
tengo sangre carmín
y mi simiente escrita
dura lo mismo que dura
la tierra sosteniendo vida,
desnazco de la hoguera
al crepitar del rayo luminoso
no soy como él invencible,
pero me cincelo mas recto y recio
que un hierro de carne,
sotoventos atrás
las montañas hablan con la gente,
que sin ciudad no hay gobernante,
sin poesía no hay mundo ni creado ni
ni por crear,
más duro que los montes,
cabalgo esta letra
flamígera, extasiada,
al son de una espuela escrita en bronce,
digna del brillante metal puro,
para yo decir yo aquí
me he curtido y tejido duro.
El Castellano
Oscuro haz, luz sembrada:
Larga sombra me abarca,
larga sombra me abraza,
larga sombra que me envuelve
yo quisiera meterla en un mundo más bello,
yo quisiera librarla de hielos que aguardan,
quisiera retornar a un mundo que era negro
sumergirme más profundo que los mares
y encontrar mis verdades,
yo quisiera fundirme fraguas de hierro
ser justicia izada de ser en luz intensa
pero ya no siento nada,
asolada mi estirpe con nombre agujereado,
yo camino descalzo sin miedo ni quietud,
sin estos clavos que me impusieron
camino lejos, lejos sin mi nombre
por si despierta mi azada
con la que sepultar al Miguel Esteban
que no nació todavía,
por si una dicha me aguarda,
no osarán en buscar portentos
a esta larga sombra que avanza,
no cambio sus males
solo servirla flores silvestres
así enamorada torne princesa de profundidades
hada dueña de la sombra,
hada fiel de embeleso en umbrales
por tragar esta mi tierra
que me avanza la despedida,
cuántos pájaros volaron
para ser único pájaro enfundado en trino,
rajado, ultrajado,
cuantas notas se escucharon
hasta ser estrofa de agua
por todos los que estuvieron,
al acecho yerto de esta sombra mía,
que no posee medida,
solo una senda deshaciendo lo trazado,
al firme astro alzo mi perplejo
por toda oscuridad que fusiló mi partida,
me apodero de este jardín
de mi sangre sembrado,
para latir en espejo asomado,
y que viva siempre, siempre
esta sombra fría, vacía, llena en soledades,
completa sin tapiales, hueca de mi carne,
despeñada en vivencias soterradas,
que yo alzaré para sembrar en ella
esta vida que yo le debo a ella,
para que viva siempre mi luz
tejida con ella,
hasta erizarla
y que me responda
cuando nombre a la belleza.
Que sin ella queda sin aliento.
El Castellano
Agua de arteria:
Déjame mirarte dentro de mis ojos
que yo limpio, sereno, yo pena ya no arrojo
hornea este fiel abrojo
que ya no sienta el pecho en rojo,
libre ajado de suave caricia
de endeble espina
solo te creará cosquilla.
Por estos lares insospechado,
por estos surcos sembrado,
de boca, pecho y guadaña,
sin su hoguera no es quien era,
déjame latir a espera
de vivir dentro de ti
como vives dentro de estos ajuares
de gato de hombre dichoso escarpado,
como siembra y su despertar en mayo,
libérame de ser quien no soy,
porque seré agudo, afilado
rizado como metáfora
en flecha de silencio,
yo por ti seré quien quiero ser,
tu orgullo tu inocente servidor
que solo posee estos ramilletes versados,
abriendo al verdor de todos los campos
hasta llenar tu dicha
del color de las flores de valle,
para vivir en esa orilla
en esa casita del río
llamado tu corazón mi señorita linda
mi amiga no puedo embellecer
la belleza es usted.
El Castellano
Solitudes, procesionarias descendientes:
Alma vuela entre aciagas espadas,
de flamígeros astros
y su radiante, desnuda compostura,
ancla etéreo gozo
cuando soy de mi sombra
y la sombra es de mí
como proyección de mi luz,
como condena a ser siempre yo,
quien partió su destino por la mitad
para disfrutar por doble vez,
devuélveme a la vida
me siento más vivo que ella,
puedo sentir un puente de la distancia,
alzo radiantes esferas
el sueño y su verdad
entre solitudes heladas,
su fuego azul y mi enervada amplitud,
lluvia cae y sólo puedo soñar que soy gota
para deslizarme para fluir
esperando evaporación,
ángeles atrás soy más pleno
que la sangre en mi vena,
esperando que mi sombra
se haga luz y su luz centellee a borbotones,
de que soy pleno, digno, como el crepitar del rayo,
como el gemido de la tormenta,
como una vida relamiéndose el alma,
cuánto tengo, cuánto deseo
pregunta si me falta algo
a mi estampa repleta, recia,
materializada de mí,
clávame filos y luces
yo soy la noche,
siente la noche de mí,
sin astros, sin lunas argénteas,
soy la noche de mi recipiente de sangre,
cruel metamorfosis
de crisálida superior llamada carne,
brotarán simientes
brotarán estos rayos de aura,
todo lo que sembré en mi interior
brotará abriendo mi virtud descendiente,
mi bondad,
la gentileza en aspas,
el fuego de pasión,
la máquina de este corazón,
hago libre el dulce suplicio invernado,
y su tormento nacarado,
mi poder intangible,
mi soledad incombustible,
yo quiero decir:
-Hay luz en mi hogar.
Océanos abiertos donde resurgir,
todos los días que te esperé
hasta hoy decir:
Te seguiré esperando
porque sin ti no puedo finalizar
no puedo salir,
de esta metamorfosis ni de esta larva,
la que no se arrepentirá en los jamases
de devorarte completa mi mujer,
y algo que elegir
de esta edad que no se elige
el sosiego, la calma
que perderás conmigo,
para yo sembrarte la felicidad,
energía de este tren de suspiros
y procesionarias.
El Castellano
Hombre lejano yo:
Hoy abre su pupila
una mirada energizada,
abre mi retina mi profunda luz,
clavando en mi mitad
una serena claridad
radiante, profusa, abierta,
mi destino danza en las sombras
mi ser de luz estalla al fragor
de esta luna apagada
y su eclipse de penumbra,
de umbral nacido
en madre oscuridad,
y su latido que alcanza el soñar,
de mi vieja escuela,
párpado en ocasos sembrados,
cabalgo a la novena estrella
por si yo la alzo a ella,
recuerda tu creencia,
desnudo su ámbito en mi hoguera,
abre la puerta,
pasará mi resguardo efímero,
su disparo de letra,
surcaré tu infierno,
te rescataré
en un beso,
sí yo seré grande como el sol,
mi cuclillo te dirá
sentidos granates me trepan,
porque soy mentira,
soy tu mentira rizada
de que no puedes ser feliz,
y que este alma lata,
necesito el brillo,
romper la línea,
avanzar mis filas,
seré resquemor y sangre de espiga
en tu pelo,
seré yo sin prejuicio,
orgullo, beldad y mentira,
realidad y sueño en la grieta
de tu razón,
seré afilado como el corazón,
orgullo, honor de este clavo
sin tijereta de espejos
sin casa, sin caracol
que no sea amarte sin razón
porque mi razón soñó
desde que te encontró,
al fragor de ascuas preguntó
si el destino clavó
y yo desentierro hasta el miedo,
por qué no puedo osar su furor espigado,
por qué mundo
por qué me tengo que conformar
con ser hombre de lejanía
que siembra sus silencios
en su huerto de luces y rayos
de luna, seré el espejo derretido
carne de imagen consentida,
acércame la caricia,
mi mundo desvanece en letanía,
quema mi petición fumando el cigarro,
y que esta ventana me arranque el alba,
espectro soy
del vivo silencio enjaulado,
mi ternura consume el Sol,
por esta reja,
por esta cerca,
por este tapial,
mi yedra nace
para más alto escalar,
esta fiel atadura cristalina
sulfura, visita la inquieta estampa
azogada en énfasis de su compostura,
para nunca olvidar
para nunca más pronunciar
mi propia lejanía.
El Castellano
Brotando de raíz:
Dentro miro, florece el álveo,
un iris marcado, trenzado en espiras
fuego y su volátil marca de luz,
si nacer acaso partirse pueda,
sería una hoguera de purpúreas
y negras llamas, sería un camino denso,
como el crepitar de la forja
duro y endeble, maleable y quebradizo,
fulgente y voraz,
al encuentro de mi nuevo crepitar,
y volver a nacer del fuego
con su lengua que me sostiene
como la primavera a las flores,
desnazco hoy para volver a morir
y crearme de la nada,
ni la espada más aguda podrá
guardarme el filo,
agudo y ágil, duro de escarpia helada,
ojo de mi ojo,
carne de mi azada,
sol de los campos,
agujero de luz,
alma sin nombre ni alarde,
lo siento mundo
soy invencible,
de mi pestaña nació una nube
lloró tinta, mi sangre esquiva,
he creado vida
sembré un alarido de simiente,
le contestaron el verdor y énfasis
floreciendo silvestres caléndulas
un latido me alza
partiendo sombras,
soy pleno, completo,
y nombre puse a ellas,
tenían sabor a bellas hadas,
brilla este agujero del cielo,
cuelgo mis suspiros en verso
acaso bajaran,
pozo de mis recuerdos
en verde musgo
mi fantasma muerdo,
de una espiga floreció su vida,
de una espiga traigo la sangre,
de una espiga ríe el granate,
ocasos ocres, misterios en copas azules,
me bebe su cuello
la esencia erizada,
la belleza desmenuzada,
por el dragón de mi fría fuente,
no me verá caer la lluvia,
sólo ella y a su poder
alzo esta tinaja,
inmortal me lleva la acequia,
su verde limpio, sus florestas destapadas,
me bailan rizándose en mi pecho,
sus venas labradas
entre su cuerpo de tierra,
no me pisarán nunca jamás
mis luces sembradas
de mis caléndulas arvensis,
mis silvestres flores de difunto
con las que recuerdo
que la vida
es más corta
que el paso de la muerte.
El Castellano
Acampado macizo, verso y entraña:
Señor sentido granate,
violeta malva
de este sueño cabalgado,
vuelvo a ser yo
en la sombra de tu corazón,
quieto en las aguas
silvestres aguas
vida para ser libre,
miradas a un pasado
que se hunde
que emerge en las bocas
era yo ese yunque atravesado
de este alma que no elegí.
Compostura arde
el ojo y cabeza de la aguja,
compitiendo conmigo
destrenzando la sangre
de este horizonte estirado,
parco, exasperado,
todo cuelga del astro,
yo no estoy despierto,
esta vida derrite
mi osadía de cuervo,
por lo que quedó sin decir,
tus mentiras eran erróneas
de un océano abierto,
este lo cruza mi hombro.
Este invierno grita en frío,
mi vida comienza a sonar,
todo empieza hoy,
mentiras lejanas
verdades silenciadas,
vida del humo en esta espada,
en esta esfera desdoblada
soy yo quien habla,
de sus lagartijas refugiadas,
estoy haciendo
una creación del rayo de sol,
atravesado por mi línea,
esculpiendo abrojos,
de clavos ilusorios,
Yo hablé con el fuego
dijo estoy creando sombras,
sigo vivo en esta hoguera,
con este destino criminal
de crear el demonio que baila,
rodeando mi cara,
este crisol de cuchillo
y esta escarpia acrisola,
encargado soy
de abrir la acequia
sí de mi tiempo,
a veces quieto,
a veces sin vuelta atrás.
Nací de una almendra
estoy más estable
que una semilla,
sin brotes de mí.
Dime árbol mío
si todo lo di
en qué fallé
yo nada esperé
y solo tuve cariño de una sombra,
que me habla en poesía.
Seguiré mi curso sin mi nombre,
y que mi sangre sea que abre
en claridad de todas
las flores del valle.
La vida se pasa mejor en compañía
si no es así
que el arte me envuelva
en su ala caída,
yo fiel lo elevaré,
alzaré fines y comienzos
de su letra y piel,
lloveré noches con poesía,
sembraré versos como puñales,
la sed querrá beberme a mí.
Ni superior más que la perfección
yo tendré,
estallaré el gozo
en la retina
de mi despierto Lucifer,
para esta vida
y todos mis gritos
que vengan.
Yo seré el árbol de mis cenizas
alzado, enarbolado.
Sagrado.
El Castellano
Sangre, timón y vela:
Aguardo, tiempo atrás
mi sombra volvía luz,
esperando el momento de nuevo,
de cruzar la línea
dentro de la noche otra vez,
todo lo anhelado
todo lo cruzado
frente a mis ojos está,
detengo el horizonte
agoto espirales, sueño alto,
todo lo conseguí en su mano,
aguja de esta aguja que abre,
y soñó conmigo su primavera,
que era la primera,
hablaba la margarita,
bajo estos pies
tierra siente,
bajo los pies la sombra
latiendo está,
lejos cruzo la senda
y el nervio se afila cual cuchillo,
metales de metales hieren, voltean
este surco labrado del ansia,
un soplo y se difuminó
un soplo y se dibujó
su estampa quieta, etérea, inamovible,
cual ascua de llama que no se consume,
carne sin carne
sólo piel de mi deseo, perpetuo
avanzaba sin aspa
me encontré con mi templanza
era mi camino
era mi ascua.
II
Esta es la luz, siéntela
lanzándose afuera,
cruza mi barrera
polvo de estrellas,
cada día estampa quieta,
cree, viva esta materia,
quédate, mueve líneas,
avanza filas,
nunca te dejaré marchar,
vida para el vivo
y nunca morirás,
no te lo permito
mejorará tu huella escrita
vivirá este haz,
cada día, cada momento
eres lo que siento
algo para nunca olvidarlo,
escalando este sol,
corriendo este alma
espejos y cristales tiernos,
un cuarzo de lustre olvidado,
pasados, años atrás,
un día amarás decir
he resurgido de mis cenizas
de quien yo era,
buscando paz,
sosiego rizado cabalgo,
nada torna lejano
resurgiendo contigo,
palabra y torna vida
esta jara de azares traspuestos,
al brillo a esta escarcha que me habita,
es el final del miedo desenterrado,
morderé la estrella,
perderé mi control
encontraré mi camino
dentro de la luz
fuera de la noche,
rompiendo, quebrando,
alzando, alzándome,
y no me detendrás sin tus brazos,
mantenme fuera, nunca podrás
sin tus brazos
sin tu abrazo.
III
Estados de tu mente,
que estoy esperando resplandezcan,
muchas noches
en vela, con timón y pluma,
todo comienza a sonar,
la lluvia baja arriba,
es la vía que la mentira se marcha,
camino mi manera
estudio el ocaso,
comienza, se abre la tijera del cielo
para ser hoy todo lo que quiero,
me mantendré a solas por ti,
así me lo clava la sangre,
que aguarda
que dibuja todos los cuadros
de mi creencia,
de mi serenidad,
no puedo ver el blanco sin ti,
todas las retinas para mirar,
pero solo este corazón
para sentir.
El Castellano
Retina de ocaso sostenido:
Febrero 2016
No me desanimé,
estoy flotando hasta la luna,
mi soledad está comiendo mi tiempo nervioso,
y por la mano estoy caminando solo esta tierra.
Un cuchillo de hierro se eleva,
para estos sentimientos sueltos.
Oscura mi vida,
con ella nada de ella es posible
en mi mente
esta clase de locura
corriendo por
luchando por el acero,
descubre mi falta
desatendiendo mi muelle,
una vez más
no me despiertes
sólo recuerda lo que dije,
no me despiertes
no puedo sentir en este silencio,
si usted está allí,
estoy muerto.
Nunca ha sido tan fuerte,
sólo recuerda quien envié,
solo recuerda quien era yo.
No me rompas,
La luna, las estrellas que estoy tocando,
para descubrirme
para descubrir que no me siento de nuevo,
soy dulce perdida
en mi camino,
descubro que estoy muerto.
Levántenme hasta los insensibles,
abajo orando los cielos,
el producto es mi vida silenciosa
hasta las noches oscuras
de dolores,
la única diferencia entre tú y yo
me siento en la noche oscura
porque mis ojos no se abren
y ver mi vida en negro,
estoy muerto por este tiempo silencioso,
respalda tus sentimientos,
no camino más tiempo,
y miro mi tiempo,
disparar y disparar la luz.
Sólo tú eres sólo yo,
la línea es para siempre,
en sumisión,
ardiendo el infierno
rodeando mi vida otra vez,
ocaso acolchado de la primavera,
es hora del grito otra vez,
para este cielo,
todas las esperanzas que llegan a la tierra,
río de mi sentido,
ángel congelado
yo soy el hombre
hermosas mentiras de ti
crece tu corazón
dentro de mi cabeza,
nacido de nuevo,
llama a mi puerto para cerrar,
tú eres mi mar y mi barco,
alcance silencioso, imaginas todo,
travesía cerca, un cauce de sangre
estoy comenzando ésta,
puede sostener mis brazos,
la noche vuelve a sonar,
mi tiempo de matar el dulce tormento
de dolor,
y mi ternura flotando por,
actualizo mi destino,
yo soy para siempre,
soy tu calor
estoy caminando por tu calle,
abiertos estos cielos y su calma,
volar otra vez dentro de mi cerebro,
se bebe sangre
por mi vampiro en la vena
ojos bonitos,
hermosa boca
es tiempo para la eternidad,
yo soy para siempre,
pasado mi tiempo en la piedra,
ojo roto en el hielo,
mis ojos en el fuego,
queman el cielo de nuevo,
voy a su aliento,
voy a su fuerza,
ojo ciego
mi silencioso sueño de ti,
mi espíritu vuela de nuevo,
agua, fuego, tierra, viento
mi alma está creando un nuevo reino,
lleno, sombras caminan sin parar
es mi poder de la luz
dentro de esta noche.
Permiso, siempre lo haré en tu sangre.
El Castellano
Umbral al destierro:
La sombra salta,
se acurruca en el crujido
de este hueso,
nace un campo de espinas
dentro mi último filo proscrito,
y se va a las filas,
sonriente fulgor entre sienes,
sopla y sopla
no borrarás mi sombra,
se construye el puente
de los ojos abiertos,
espinas atrás te recuerdo,
puedes encontrarme
en la sangre sin vena,
en el café de mi destino iluso,
sopla y sopla
no alcanzarás mi oscuridad,
alzo este mi parco latido,
cumbre tras cumbre deshojado,
clavando su rosa y su cuchillo,
estampas del viento
entre párpados del aire,
vente a la negra estación,
este invierno azul se escapa,
entre pájaros dormidos,
entre riñones de nubes,
y soles de cerilla,
abro esta legaña
justo para llegar
donde el tiempo acaba,
y se marca la noche sin luna,
un descampado en el cielo,
una espiga
y una flor de sangre,
complemento perfecto
de este alarde,
una nota fugaz,
al compás de un transparente trino,
arde un sí bemol,
barreras esquivas
y su caracol de espejos,
mátame silencio si puedes
ya estoy muerto clavado en tu vientre,
azoga un vibrar de la soga,
otro miedo que colgar
sí del pescuezo,
temple de mi sinfonía,
el frío me está llevando
este laborar sin panal
me deshace,
quién viene a esta rueda,
llamada incógnita,
atraviesa conmigo
el centro de la llama,
abrirán centellas
sus pestañas iridiscentes,
por toboganes de luces desteñidas,
tantas mentiras eran cercanas,
adiós color, adiós flor,
apuñalo tus lucientes
hasta encontrar retinas de ojos navegantes,
esos por los que el brillo está desnudo,
y la razón vive en un capullo.
El Castellano
Crisol afilado:
Un iris vespertino
que huye, escapa, se esconde
entre fugaces simas
que acrisola.
Late en compás de labriegos
marchados del aura,
de su iris compañero
sortilegio de destellos sin alba,
listado irisado de surcos de latido
militancia fulgente entre rayos
de enervado tornasol,
naciendo su vena tornasola,
como parpadeo de cuchillos
en el que habitar tu mirada,
algo que anclar a tu sonrisa,
sin prisa sin ancla
mas que esta letra,
más que unos ojos de infinito horizonte,
es un amor que resplandece,
y por tus labios crece,
cumbre de mi filo
bastión de solares
donde el sol eres tú
mi férreo astro
Que yo soy hijo del mar
de tu boca,
rezando en el borde
del renglón,
cantando con un cuclillo
que si la tierra se hunde
y el mar se cierra
viviré en tu entraña,
como olmo de tu margen húmedo.
entre solitudes fervientes
y acuarelas de cielo
elevaré mi te amo
por si baja y seas tú
quien lo escuche,
atravieso océanos
déjame ser como el último intento de la ola,
y sembrar tu tez con mis versos de espuma,
afila mi limadura,
salta un corcel de vientos escarchados,
un destino sin piel ni tela
un marco alzarme
en su corazón desvencijado,
ser como el rocío primero
en quedarme en sus labios.
El Castellano
Aura acompasada:
Azar provocado,
algún día despertaré
para construirme a tu lado.
La tierra plañirá
soles descalzos
a llenar con la imagen
de tu vera,
los ocres abandonados
lucirán verdes,
rayos de esperanza
habitarán los ojos
del lobo amor,
las fauces sigilosas
saciarán el hambre
de firmamentos sin ocaso,
el ser crecerá como espiga
que florece a tu lado,
no habrá dicha sin caricia.
Ni versos sin corazón,
mi sangre clama
que fada,
mujer de flores silvestres,
mi ser te ama y llama
en hoguera
de retina encumbrada,
entre los campos
que la razón tiñó
en flor,
por si despacio
enraizaran tu ilusión,
deslumbran
auras bellas irisadas
al fragor de ondas
bailando tu interior,
me derrito este día
para alzar un grito
de azul espada
hasta cortar el cielo
en colores a mi amada.
El Castellano
Drama en azabache:
Subordinado al silencio
esculpido, es una torre
donde colgaban mis sueños
rizando versos,
abiertos en oscuros caminillos,
y dulces pestañas insomnes,
era una jauría abriendo
sus fauces,
un crepitar sin trino,
afilando un estornino,
soñaba la ola
que el rompiente
acaba en su azul espuma,
jugaban mis dolores
en un patio de perdices,
babeaba el caracol
pleno como si no tuviera
preocupación,
mientras marchaba la helada
los parajes que dejan
vellos como escarpias,
allá donde caléndulas silvestres
dejan el amarillo del suelo,
hormigas contentas
por la cosecha pasada,
un mirlo que es amigo mío,
dice que el cielo siempre
es el mismo,
el solar de la era
escampa sus brotes del verde
asesinando a los ocres,
al resurgir de las estaciones,
quise sembrarme
como se siembran
las malezas solas,
como una plántula era
aguardando mi primavera,
que me regocijase
la paz y el sosiego
de sentirme con vida
en este planeta tierra,
mejor que vivir estando muerto
y que lombrices cuiden mis versos,
muero estando vivo
sembrando mi aliento
allá donde miro,
y que alambres cuelguen
esquelas ajenas
que sé donde voy
y no es rumbo a fallecer,
recuerde el tiempo
sus espirales afligidas
y estas cuchillas
que trasquilan la temperatura
de este invierno
que no nací olvidado.
El olvido fue que se olvidó
a sí mismo,
y era de grama el nido,
sostenido este granate
de párpado azabache
era o no es, el silencio
de mi noche.
El Castellano
Rizada espira:
Afilada esta araña
esparce el verso de espuma,
entre una fiel madriguera
de la letra y una despedida yerta,
acicala sílabas,
en el hervor de la sombra,
puede verse el ocaso nacarado,
arrastrándose la idea,
vengo sediento
por el oscuro túnel,
que todo se hace verdad,
una alimaña me brota la garganta,
hilvana que hilvana
mi sentir preso de la montaña,
al verdor de enebros
y sotos sin lengua,
todo lo dije y no dije nada,
congelada la mañana
quedaba construir un paso
furtivo del cielo que sujetaba,
llegaba la hora
de enterrar mis abrojos,
por si despertaran de ojos verdes,
blanca la idea conoció
un suspiro de tres caras,
estaba en el bando equivocado,
el cigarro se consumía sonriendo,
el frío era frío por así verlo,
todo se retorcía
y quería volver a comenzar,
vamos eres libre,
eres brotado de mi aliento,
si tienes suerte no te enterrarán
ojos incautos en su pozo de olvido,
puedes oír y soñar
como sueñan las fuentes
que son boca,
como la primavera sueña
que las flores son sus hijas,
levántate y alza estas penas
y su recámara,
que estamos casi a un mes
de conocer la flor,
de mantener a la derecha la vida,
de romper la línea,
te encontré, desgañitada la siembra,
era un partir sin mirar atrás,
brazos de hoguera
con el ascua rizándote la cabellera.
Oscura luz goteándome la tez,
un segundo de largo
y sonó un redondeado afligido
entonaban entre alambres
las sonatinas y su amarilla fauces.
El Castellano
Carne de metal:
Estridente,
vuela que en su compás
se borra, verde zozobra
al caos que ahoga,
fulgurada, metálica
clavos que ahonda,
sensación del cloro
deslizado,
en un patio de cristal,
escondidos gritos
avocan su perdición
de humo,
entre colchones
del sueño
que llaman
a la siembra
de los cuerpos rendidos,
etéreas sábanas
que portan profusa forma
sin ser más que ella,
todo viene y se va
rumbo al destino informe
de la saeta dormida,
clavo este ciempiés
de una almohada,
yerta iracunda
despierta mi gripe
y su migraña,
algo que alimentar
bocas aparte,
habrá que hinchar
el pétalo de su flor,
a sílaba, verso, entraña,
me sobresalta su mirada,
hay que encender el ascua,
este fuelle de vida
aún me cuesta la estampa,
enamorado fuelle inusitado,
cabalgo hoy el astro,
encierro rayos en un jarro,
para esta tierra yerma,
helada,
germinen mis simientes
enamoradas
y enraícen sueños por cumplir,
al sueño del estornino,
grajee mi pico corvo,
corvino de cuervo ensamblado,
ven a mi manera,
la adelfa muere
al crepitar de la yedra,
y la oscura campánula del día
abre con azucenas de otro campo,
este surco que lleva mi sangre
se vence y me vence,
cogeré del tiempo la azada,
y sacaré terrones de disgustos
que tornaban y me acompañaban,
no había elixir sin ella, mi pena,
soslayada,
tentaciones
me cuelgan de las pestañas
de mi inocencia,
otra licencia
a conducir las carreteras
de mis versos,
fiel enjambre de pasajeros
de los campos
de la idea.
El Castellano
Vida de hielo ardiente:
Horizonte de la caída de este solferro
a reinar como una falcata de rayos afilados,
hondos ojos fijos en solariega planicie,
donde frías juegan moteadas las flores de invierno,
el reposo de la vida que se fue a dormir,
como un río de luz brotaba la escarcha,
un diciembre tardío saludaba
con sus manos heladas,
acariciando estos campos redondos
de cardos y caléndulas silvestres,
era un día de hacer manteca,
a mí el frío me hacía sentir vivo,
en este soliviar traigo mi espada,
pongo a sentir la tierra a mis versos,
que con cepillos de grama joven
se blanquea mi calzado,
viajo en mi mente
por el cuchillo calizo de la piedra
del caserón terrazgo, abandonado
que posee mi padre,
rodeado por el fervor de pinos de monte,
donde próximas hacían nido las atochas,
a perdigones que son de la tierra
como la montaña a su roca,
cosas talladas puras como amaneceres
pulidos sin grises hojas,
ola rota mecen mis pasos
de un mar olvidado del que cepas anclan
sueños de vida,
del terreno en el que grillos esperan
el frío en sus agujeros
y su despertar para morir al acoplarse
a la melodía que teje la vida.
Avanzo en este campo de víboras
para ser yo como mochuelo recogido en su olivo,
como mis pasos gorjean las carrascas,
todo mi mundo reverdece
para mí siempre es primavera,
y mi bravura llora flores por mis venas,
hasta tener del cielo
la malva del alba
hasta trepar las yedras del profuso claro oscuro,
del cielo y su luna cuarteada de platas auroras,
me nacieron simientes silbadas,
y mis ojos enraizaron el campo.
El Castellano
Forja de mi sangre:
Avanzo esta tierra abierta,
sangre y lágrimas,
hundió sus zarpas,
el honor de la vieja luz,
vieja urdimbre
en venas de cristal,
venga a construir
la casa abierta de niebla,
abra su puerta de oscuridad
es mi mente,
que como un azadón,
hunde entre altos tallos
de mis pensamientos,
muchos días
que me pensé sembrado,
pasó mi negro caballo,
brillaba este pantano,
entre recuerdos de un alba
en que no dolían
y hacían flor,
lengua de metal
hundía sacaba terrones
para oxigenar mi dolor,
anclé mi sombra,
la puse a dormir
entre la grama,
brezos y caléndulas la acompañaban,
barriendo los campos despertó
esta alma sonámbula,
con el zumbar de abejas caminantes,
con el soñar de las flores
que eran mariposas,
avanza mi surco,
cava mi padre recto como su azada,
y los veintisiete años que nos distancian,
es su trabajo su azada,
que alimentarnos desde la ciudad puede,
sueñan mis versos
que fueron construidos para luchar
luchar contra la sangre del hastío interior,
flores que brillaban sin desesperanza,
altas miras en sus estambres,
un polen de estrellas despiertas,
la miel de este intelecto
que abre sus grilletes,
que asoma sus brotes
a la ternura del cariño sembrado
por venas de mi misma sangre,
amo esta vida
como no amarte padre
si tú me sembraste.
El Castellano
Sangre de ojos:
II
Lámina del cielo
tu gris en estiaje
ángel del cielo teje
macabra sinfonía
lluvia se derrama aplomada
por su guiño de ala,
por venas cavas, su quitina,
estrechas vías consumidas
en atroz entrega
del mensaje del cielo,
sangre de tierra en zigzag,
río de caudal
por arterias de arañas,
por acariciar la flor del iris,
un barco y una vela
un puerto y una quimera,
una vida de aciaga solar siembra,
verso saciado cabalga
el colchón etéreo del aire,
hasta anclarse en valse,
sueña el viento ser capturado,
atrápalo en tu mano
y en la otra derrámate como gota,
precipita tu esencia bebe del cáliz
la yaga de nuestro vino,
infinito remansado en cuña de estambre,
es un ojo de tierra,
es una espera,
unas inmortales fauces,
la canción con la que bailan las flores,
un cariño de flamígera estrella,
un armazón dorado de escarabajo,
una casa de caracol,
ven, ven conmigo soy aullido,
una entrega de cuarzo llorado,
un cuchillo de sílex afilado,
en el trillar del campo,
soy mis venas naciendo en un charco,
un sorbo y soy fuego en tu mano,
gimo y corro el vasto templo
de mi perdida religión,
viendo el devenir venir
cruzarse, deshacerse, alzarse
para acabar siendo tierra
del inerte azar profuso,
mi tinta se bebe un rayo solar
en patita de un caballito del diablo,
mi vaga libélula de mi suerte,
para que siempre viva
esta hormiga león
siendo mi cosecha más que tus besos,
más que tus rayos de sol,
siendo yo del camino y el camino ser de mí,
irisada vida en son de mis tambores
de insecto tejiendo, volatilizando lo inmortal.
El Castellano
III
Seco y duro, seco y umbrío,
corría el linde quieto
por la arboleda despejada
daban las tres y treinta
de la madrugada que se marcha
por oscuro diván de la sombra,
un espejo tímido sonaba,
el reloj paraba,
con un grito de estrella,
su alcoba fría en la que despertaba,
no quedaba viento de palabra,
ni pensamiento ágil que en eco no quedara,
lanzó aquel espejo contra el suelo,
y rápidamente sangró un borbotón de sombras,
se abría la noche y sus quimeras despiertas,
brotaba de su ceniza de pulmón,
el irisado que la oscuridad clama,
quedando para siempre
su alcoba fría y vacía,
sombra de aquel que sonaba una noche
que ya escapa.
El Castellano
IV
Grave soliviar:
Miles dei lumen lit c et summuncanae versus litterafagromethaforacreaviblanduslaetitiaexspectare sed ardit
Es mi vida
un agraz durmiente,
medicamentoso, encumbrado
por cimas de mi subrepticia,
por escalas del alba
yo soy siempre
yo soy para siempre,
como relámpago que se aboga
al nivel de tierra,
como una espiga granate y azabache,
en tinta y sangre nacida,
mi nombre que no se mide
ni deslizarse puede,
es su arma el verso
su impronta y su insignia sagrada,
conocidos miles,
hombres él mismo
gentes que darían su aliento
y su mano por él,
solo habitan para ser contados
en su mano izquierda
de ambidiestro,
brota nace y brilla,
yo soy cuervo poeta
y no saco ojos,
los hincho con belleza
que despliega en poemas
que lloran con mi sangre,
el crujir de mi carcoma.
el erguir de mis flores
de jacinto silvestre cada marzo
y su Llúcia elevada
que muerde sentidos,
yo estoy completo
y nada ni nadie
me parte el pecho
solo sólo, acampado,
acompañado de mi extensa sombra
de 2043 poemas sembrados
en mi patio de mi gris araña,
nadie quién contra mí
;el destello lo hago bello,
seguiré durmiendo
que estaba despierto
hasta despertar mis cuclillos
de este soliviar de mis abrojos
versados,
nadie me calla
al abrir sus altas ojeras de nácar
la primavera resplandeciente
de este sembrado 2017.
El Castellano
Sepultada Llúcia en agraz durmiente:
Se acicalan las Llúcia de marzo,
en febril inicio de la primavera,
que yo te amo Ostara,
algunos rayos fugaces
que han crecido,
entre verdes sienes del camino,
ese que me lleva a verte
mi flor silvestre,
hendida de ondas del alba,
sepultada de brillos
imperecederos en fragor
de ávidos destinos recorridos,
desnudos de quejumbrosas voces,
un musgo naranja renaciendo,
entre filamentos verdes
que hacen de su piel esperanza viva,
de este arbol centenario
de mi semblanza,
no serán mis chopos cantores,
ni mi enervado ciprés silente
su calma abandonara,
acuchillando al viento que espera respuesta,
recuérdame,
estoy sembrando mi vida,
todo lo que espero es maravilla,
me acaba este sendero y su colina,
riveras de mi Arlanza,
compás de mi fortaleza,
mi ejército se alza,
arañas de sus telas,
furtivas segadoras de mi idea,
trepando mis entrañas,
mis telas grises que son de ellas.
antes que griten mis sierras rojas
de mi carne,
antes que el tiempo
haga casa de mi cuerpo yerto,
yo seguiré hacia la luz,
el milagro de mi profunda gesta,
cumbre servil de fecunda primavera,
filo ardiente que brota,
entre siegas blancas
de profusa, verde melena,
al borde de mi vena
subo que traigo una azucena
junto mi malva y su viola de campana,
la cuenca que no es,
la visión que no viera,
justo esta generación que comienza,
justo es vida,
es mi verde hogar,
es mi credo,
son mis hojas verticales
en papeles de sangre y savia,
arderá mi caseta.
en ojos de suspiro padre,
en venda que el ojo no vea,
enséñame tu Dios
le pondré a reñir con los míos,
no me iré aunque quieran mieses,
permanecerán mis caléndulas
echando hijas de piel y tierra
cada primavera sembrada por su amarillo,
me nacerá la ilusión verdadera,
seré dueño de esta quimera,
y baja que canta
por riveras de mi suerte,
el hondo espino de mis dolores,
queriéndose como abejas
a las flores,
Estoy soñando
el tiempo que cerraba mis ojos,
retales que cerrar y su olmo blanco,
su jardín azul, su fuente de cristal,
nada desvanecerá al Miguel sin alas,
seco de hoja de otoño
no me llorarán ni mi jardín azul de caléndulas,
ni mi acristalada fuente,
ni el olmo que no es mío ni su blanco
será mi aura intransigente seca a morir,
sobre los años avanzo,
yo soy el Sol.
El Castellano
Señero quieto:
Linde abierto sembrado por Dioses
de plantas que sólo ellos pusieron
y que ven exclamar su muerte
de silencio gritado
lentamente las estaciones.
Es este campo que vive lejos
con señero
un señor de señores
amor de silvestres,
es encargado de ver en flor
sus amores,
vence que atraviesa
sólo su mirada,
un jacinto se yergue
de azules botellas
sus besos de rocío matutino,
matutinos gritos postrados,
con el hervor que reverdece las tierras,
de cal y tierra arenisca,
de arcilla al barro,
de la pizarra al risco
de granito,
es una vida mi estatua,
dulce, risueña, sembrada,
albores cruzados crepitando,
mi nido de grama rehaciéndose,
entre luceros anclados,
arriba mi barco
estos océanos y mares
de tierra,
que todo lo rige
su materia,
desnace el tiempo
abriendo el brillo de mi falcata.
Fiera de fieras
yo soy la fiera,
desde las piedras
a esta mi hoguera.
El Castellano
Ávido camino en piel:
Aciago vilo descorchado
en canal aciago infinito
destapado en sangre
de campo,
él, a veces sonriente
a veces abatido
en su recogimiento
de verdes espadas,
viajaba su idea
como una viborilla
jamás vencida,
siempre con fugaz
aleteo entre estambres.
Vencía cada primavera
al ocre del paisaje,
por cerros era padre
por llanos fiel hijo
de compostura olvidada,
por copas de árboles
brindo esta suerte,
encontrada, cabalgada
por los besos
que puedo dar a mi dama,
que entre forrajes
avanza
a desenterrar
mi espada,
nuestro coraje sembrado
entre mis espuelas.
En los bravos halos
de estrellas apagadas.
Naciendo una
para que brille a ella
mi amada.
Esta negra noche
que avanza
mordiéndose la cola,
entre luna argéntea
deslizada
por sus filos
de pestañas
acuesta al alba.
El Castellano
Aciago, recto vilo quemado:
Cantares quebradizos
se alzan entre aciagas esferas
de la palabra inexistente,
entre sones terrazgos
que sí puede,
llevarme la espuela,
entre la mente que afila,
que pule mi sangre oxidada,
por el puente de venas de mis manos,
diestro al compás que muerde
yo sí estoy hablando
tú no estás escuchando,
esta vida asida en un tiesto,
por encajes sin alba
por encuentros fugaces
en mi averno tejido,
entre estos soles de trapo
que me levantan las flores,
avanza la flojera del día
que llega a su final,
volviendo madrugada de espadas,
quiero contarte hasta tres,
mi aliento que no sabe contar al tuyo
pero sabe que cuentas con él,
yo que ni segura tengo mi muerte,
colgaré destinos
de sus ramas de fresno,
mi piedra será estatua,
no seré yo quien hable si no ella,
el verde musgo llorará el sino dentado,
esta vida de espectro
no me dará de lado,
de un solsticio me haré un cuarto,
entre mis líneas habitarán espasmos
de ideas ausentes,
de fríos hielos de soledad congelada,
liberaré este reino enfuscado
cual vicio cual tierra sin dueño
de crear nuevos palabros
que serán hijos de la nada,
cabalgada, soterrada
en infinito de la siembra alzada.
El Castellano
Linde quieto abierto:
Derecho firmamento
entre filos de gentes,
es una piedra que camina,
piedra aventurera,
seca y umbría,
reposa y duerme
cantares del linde,
centellea rayos irisados
se riza con los besos de lluvia,
acaso quiso ser otra,
ella tan yerma, tan plácida,
imperecedera,
cerrada como se cierran
los rayos de luna,
acantonada, de estéril estampa,
dejas muda alabanza,
el día que te hice de voz,
piedra bella, sola,
estridente sin patio de sonido,
y esta voz que te di
voz dorada como tu piel de minera,
como un soto sin perdices,
avanzabas solo tú,
la vida quieta,
sembrándote allí por donde anduvieras,
al candor de piedra única
igual a la siguiente y a la anterior,
sin afán superior
hasta que este poeta te dio voz,
como flores que sin color
acaso fuesen,
un despertar en brazos de cieno,
un respirar de la montaña,
un cuchillo calizo que afilan
erosiones de las eras,
latido férreo, sangre de mineral,
o compostura de arenas,
piedra de mi casa,
piedra de tu casa,
la tierra.
II
Piedra potencia eterna,
nacida como nace una estrella,
cumbre de filos por bandera,
hogar, cobijo y morada
de lagartijas que cuelgan tus venas,
colchón de rayos de sol,
asolada tu espera
por quien te dio voz,
lideras tu guerra sin cuartel,
antes de yo nacer,
tú dabas alientos al suelo
sin importar pertenecer,
siempre fuiste
siempre eras su piel,
de la cantera, al nicho,
del mausoleo, al caserón viejo,
del silo al castillo,
tu fortaleza empedernida,
tu aval de honda certera,
Siempre estabas
siempre estuviste,
como río a su voz del mar,
osado no fui yo
quien te encontró,
solo fui encargado
de darte moción verdadera
ojalá pudieses contestarme
mi piedrita bella.
III
Devuélveme a tu vida eterna,
del soto a tu quimera verdadera,
clávame la oscuridad de tu cueva,
en esta esfera pulida sin espera,
risco de tu sien enarbolada,
millones de hijos
esencia desnuda de tu alma pura,
techo sin compostura
del ser invertebrado,
techumbre que pizarra llora,
su azabache de cristal,
tu sangre de fuego y agua
que nunca te alcanza
sólo partirte puede,
grieta de helada, tus filamentos
que encaran tu azar de vida sin dueño
a tu sangre de musgo me cuelgo,
en verde musgo tu fantasma muerdo,
vida de herramienta,
azar de la idea,
al paraje que te conforma
al que sostienes su vida
siendo el suelo techo de esta hacienda,
si tuvieses dolores todos gritarían
que se acabase la muerte en la tierra.
El Castellano
Flor de destino:
Requiebro olas en fragor de colmenas
alzadas, sembradas en horizontes yertos,
al fugaz aleteo de la luz,
en fulgor de sombras erizadas,
todo lo sentido más que un haz carcomido,
fiebre en destello de mis astros,
todo lo dicho más que un cielo sin aurora,
más que una navaja de filos
por pestañas,
hilvano que trenzo
la sangre dormida,
es una cabaña de cielo
donde cobijo sueños y quebradizos,
en la cabaña
que Dioses abandonaron,
siembro escarchas de hiel,
todo lo que me dijeron es una verdad,
allí donde la puso el hombre,
bajar acaso puede,
grazna mi vida una vez más,
trenes pasan por estas sierras de nubes,
el destino informe ya cansado se apiada,
toboganes de esta bruma gris
me cuentan, me dictan,
del sentir de la maraña,
hasta que lleguen mis flores
del mañana,
entre el palpitar de azucenas
frías de la tarde,
pataleó el latir exhausto
del silvestre del azul
del sueño, del racimo de mi jacinto,
extraviado,
un sol de invierno que ya se marcha,
por cuencos serranos
por alientos en carne de colores,
abriendo rectas sienes
el crepitar de los vientos,
bienvenido a mi mundo,
yo no estoy despierto.
II
Ama de esta casa, el alma fría,
de mundos retorcidos,
ingrávidos al peso de flores,
destartalado, por gentiles gestos,
azares difusos de mi reino,
saludando a la quema del rastrojo,
un iris por desenclavar,
corona de caléndulas
en soles por doblar,
al rayo seco, tornado en gesta
y sus candilejas fulguradas,
ríe y pasa, pasa y ríe esta espada,
hendiduras febriles
de mis verdes ojos
entre sus cauces la verde grana,
la verde espiga,
un romance del labrador
con su granate amapola,
llora sangre de aquellas santas,
esquiva de obreras guirnaldas,
se cava en rayos seculares del rey astro,
Estallando de luz su rocío primero.
III
Resplandece el día,
entre zarzas salvajes y sus espinas,
duerme que dormita un sueño enhebrado
en blanca cordillera, entre grillos
que aterran saetas dormidas,
al trinar de los cardos
en estepas cabalgadas
de verdes y sus trampas
entre erizos de campánulas
que ya no amarillean,
gimen abrojos el suelo que los vio nacer,
llegado el día del topillo
y su cernícalo que le da digna muerte,
entre este patio de arañas grises
descubro que me hincho de colores
estacionales, perennes, mutables, caducos
en crepitar de savia y duende,
se blande, se rige,
se descubre que todo duerme.
El Castellano
Cuarto para sembrarte:
Duro, seco, estridente,
ilusorio destello
al matiz de soles abiertos,
estoy empezando,
alago, avanzo este cuarto
este cuarto de arañas,
repleto, lleno por escuadras
afilo el verbo
preparado, despierto,
granate complaciente
a este lustre olvidado,
quiebra marzo,
estampida en blancas sienes,
réquiem en osadía,
en marca de astros,
luz intransigente,
fulgor
entre tus manecitas
heladas,
miro atrás
nada reverdece el horizonte,
todo son raíces del hombre,
me cuelgan lunas
ojeras sin alba,
quiebro esta ilusión
me afila su espada,
cómo huir
de los que no me conocen
si nunca me conocerán,
me clava la estrella
un tenor en escala mayor,
gimen flores por abrir,
el sol hiela de nuevo,
rizo sorpresas en tus cabellos,
libero el león,
me muevo,
suceden grises
a mis penas,
escarchadas, desvanecidas,
derretidas en claro oscuro,
por lo que dejó de ser,
llevo que traigo,
resoplos y arterias
en este jarrón de sangre,
hasta que caigan dementes azares,
y sus cruces bienaventuradas
de tu carne,
de mi lumbre,
de este alambre.
El Castellano
Aciago compostaje:
Tantas veces quebrado
como solía ser yo antes,
escalando esta vida,
lejos donde reverdecen cielos,
silvestre en tus aguas,
mirada al pasado que me forma,
se termina mi savia,
incomparable dicha,
sujeta al astro soslayado,
hermanas del fuego deslumbrado,
recto afilado en esta solitud
del hueso,
entre blancas sienes,
entre doradas rosas sin alba,
avanza mi camino fiel de sombra,
aguardando el brillo,
no es una mentira lo sentido,
parado en espera,
deshojando besos del ayer,
de nuevo es mi manera
por la guardia de mis cipreses,
por la desnudez de estas flores
abiertas al color de invierno,
fulgor desangelado,
despierto acres
hermanados de letanía súplica,
hoy surcaré su boca,
me desnacerán dolidas simientes
volarán mis polillas del este,
crecerán tejos sin horizonte,
entre cerros de alarde,
espargasminas enraizarán mi carne,
al techo de esta cueva
brotarán destellos en luciérnaga,
para yo beber mi aciaga espera.
Resoplo agravios en señales,
tiempos agujereados
en mentiras lejanas
laureadas de todo lo que avanza,
brillan hilos por perecer,
arañas trenzadas al amanecer,
no puedo perecer,
me blanden este iris por enternecer,
brechas llamadas a desaparecer,
retiemblan pupilas en noches fugaces
en todo lo que llegué a ver,
diestro aliento en hiel
torcida en extasía de secos metales,
un Sol un Dios
despiértame el dragón,
vestiré en pétalos al albor,
gemiré noches sin luna,
soterraré este cuarto en luz asida,
vendrán a mí estrellas enardecidas,
todo acabará en uno,
un brillo, un relámpago, un son,
un cuarteado corazón,
renegaré de acabar,
tejeré construiré llegaré por puertas
a prender este destino sujeto,
en el parpadeo del suceso
soy hierro tajante,
afilada en cercenada espada
de un tiempo que me perteneció,
soy espíritu, espectro sin nombre
anclado a este devenir postrado
resurge firme su aliento,
entre abrojos de idea,
nunca resignado
siente el color de su noche,
el hálito de caracol,
en su caléndula sostenida,
por su vida alientos hacen súplica,
aguanté, resistiré, me fundiré
con la acidez de mi tierra
asolada, destapada,
colmada, exasperada,
entre tañer de crisoles en capa,
gobernaré
haré reino,
tomaré guardia de este mi camino,
al aguardar de mis rayos
de vivencias dibujadas,
al resoplo del tres,
al dormir del nueve,
nadie me impedirá que me teja
grande.
El Castellano
Tierra perdida:
Limo, sostengo, agito
la vena enardecida mía,
destapa al fuego en círculo,
retiembla destinos ciegos
en crueles, parcos horizontes
sin orificio,
destrenzo el nervio de hierro,
repto avenidas sin salida,
voy y vengo cantando
esto es tierra perdida,
correcto, en el ojo
y soterrada vía del hambre,
nazco que broté de semilla,
estiro que alzo
sangre en caricia,
marcho sin mirar atrás
esto es tierra perdida,
ocaso malva derrite mi vida,
en ríos sin despedida,
en sábanas de escarcha fría,
correcto
es tierra perdida,
nada es súplica advenida,
fulgor entre sienes de carcoma,
festín de arañas grises,
nada me detiene,
avanzo, el sol me cuenta
que es tierra perdida,
cae la tela tejida,
fiel al descanso de mi subrepticia,
gimen tiempos rizados al ascua,
cantan malas yerbas
sin perfidia
que esto es tierra perdida.
Yo contesto
dorado al fulgente metal
que es mi vida,
es pasión, es luz,
es calor,
este es mi rifle
esta es mi vida,
granate al escape
lustre postrado al rejuvenecer
del marco,
yo no estoy colgado,
venzo que avanzo,
resumo, coarto,
me descubro a la luz templado,
todo dicta
que yo voy
que yo vengo
por tierra perdida,
resplandores sujetos,
acuartelados en énfasis,
porque desconocen su sino
madre de
esta tierra perdida.
El Castellano
Dicha insoslayable, flagrando vértice:
Envejezco este hálito
resquebrajan esencias enamoradas
en este patio de estrellas,
por esta vida en doncel consumado,
al resplandor listado venzo
otra primavera nublado,
por este ángel soterrado no me alzan,
no me niegan la inconmensurable pestaña,
abierta a fulgores en lata,
despeño las ideas sin anclarlas,
me vuelve loco abrir mi baraja,
por esta sangre pesos en oro valen,
su quilataje postrero al tacto,
más quisiera mi sanguijuela
no acabar ebria,
resumo que coarto venas
en canales de riego,
soy maestro sin título
del desvanecimiento extasiado,
y que venga por mi letra
la parca efímera
que mi idea es eterna,
caracola de tierra vence
esta sinestesia
de joven biznaga maniatada,
reitero en mi sepulcro
el tiempo no es mío,
venga a mí su ladera,
seré anillo para mi quimera,
un animal de este reino
por desenterrar.
Que me acabe el viento
que yo no puedo,
seguiré escribiendo
por arterias razones,
por pensamientos túneles
que esta noche venceré
a la sola una de la madrugada.
Y su lagartija rizada.
El Castellano
Antaño de vida:
Eres pilar sin margen ni curva,
de tu divina compostura,
tus ojos que acaso sombra, cubre,
un latido donde se bañan los octubre,
vendaval que entierra nichos
para devolverlos a la vida
en este soliviar barroco
que me puede derrumbar
a la llama fugaz que rige,
avanza y consume mi vida
a la tuya asida por los astros
que son santos,
oscura pila dorada al iris
donde se baña tu alma pura
acaso ella llevarme pudiera
entre sus vientos desnudos,
entre sus alientos
de florestas descuidadas,
acaso ella no me hablara
entre el jilguero y su cardillo,
entre la caléndula y su insectito,
yo volara con ella lejos
donde se oculta el alba,
para demostrarla que yo
libero tu mirada
por rayos de su aura imperecedera,
fuente de alta frente,
cumbre de riscos y valles,
alguien acaso arrebatármela puede,
aunque Ovidio te de más flores
quitarme nunca puede,
ni aunque tiemblen
mis huesos rectos y sangrientos,
osarse en gris mi camino viene,
te traigo golondrinas en suaves trazos,
te traigo sueños en colmena,
y sonrisa en luna venidera,
anclada a esta sepultura,
al resoplo trenzada
mi cristalina esencia,
en crepitar de estacas por clavos
que llevo ardiendo en mi pecho,
a este diáfano vacío
vengo que voy llegando,
caminan pensamientos
de sus sombras colgados,
esta osadía
que ya avanza como vidrio quebrado,
haciendo polvos la idea,
porque no me alzarán en marco
ni será eterno mi mármol,
dirá por este mar he llegado,
y el azul acaso será azul
por yo nombrarlo,
viviré de la letra amarrado
hasta que ella sostenerme pueda,
haré juicio de esta arena,
en escala a aquella estela,
sangres me gotean los ojos
de ver desnuda a Diosa Flora
vistiendo de los campos
la miel para cada sentido
mi amapola yo que nací hombre
nada ningún averno,
ningún paraíso cercenado
ninguna deidad personal
de tantas sardinas que adoran
de boca pequeña
podrán negar que yo asalte
que yo recorra tu flor.
El Castellano
Alevosía sin mirada:
Avanzo el patio de mi araña
y su soledad acrisolada,
no dejes de mirarme
en la cumbre de este ciprés,
cernícalos atrás
soy puro como pizarra
sin pulir sin enmascarar,
dirijo mi acequia por lares
descubiertos, insospechados,
en suplicios dormidos
reino el astro,
te debo más
que lo que no puedo alzar,
por sostenerme el cruel devenir,
danza el momento
de tu caracola y su iris,
en arena rasguñada,
al tarot helado de tus naipes
de mujer, afilada mi idea
queda navegar el vaso de agua,
encumbrarme de la fiera,
sujetar esta quimera,
porque estos sentimientos encauzan,
traspasan la sangre filtran mi insolencia,
si soy hombre de verbo
y escribo parco silencio deshojado
en papel de vida
rizado en aliento renegado a morir,
sólo hay una petición
de rayo en alba postrado,
es contar sonrisas a tu lado,
venceré tormentas
de destino caracoleado,
por el último rayo,
déjame demostrarte esta sangre
este hálito que absorbe
y traspasa pieles sedientas,
es una tela un vello erizado
en penumbra,
por el que abandono mi nombre,
y que mi corazón suba
y hable por mi garganta,
este tiempo de cuchillos
con los que haré un bocadillo,
y que me dejes ser tu lejana miel,
no conozco el frío
destapa tus cartas
caeré rendido para honrarlas,
porque sólo una vez en la vida,
se puede conseguir todo
lo que uno desea
y que me arranquen como mala hierba
que el mundo
se quedará sin destino solaz,
sin rayos de luna,
sin huerto de estrellas,
porque yo sin ti
pierdo hasta la cordura,
y que me juzguen ojos
y vidas de un día,
que yo sin prisa enamoraré
corceles de viento,
desmenuzaré crisoles
abriré molinos por sus aspas
hasta yo quedarme
en tu vereda fugaz,
con solapa honda, dura,
siempre con destino
de envolver tu aura bella,
listada, estridente
al crepitar de todos mis espejos,
mi pianola
desviste surcos
para cantar el sentido alerta
y que nada escape de la hoguera,
este cuclillo trinará
que si fuese cuervito
viviría en la noche
de tu mirada serena.
El Castellano
Ondas mecen:
Me cruzan las vías
del tren de la noche,
abierto, caracoleado,
en peregrinaje de estrellas
y sus halos,
este insomne caballero
de tu sonrisa nacarado,
arrebolado entre tus brazos lejanos,
una hoja precipita
al tañer de campanas
en garganta de lluvia,
no hay invierno sin frío
ni frío sin invierno,
vuelta atrás estoy vivo,
una vez en la vida
curva de espejos
entre verdes y ocres,
quién dijo que no tuviera esperanzas,
pálpito fugaz de estrella marchado,
el amarillo viste mis flores,
color efímero, sin despedida,
entre un patio de ojos
y sus carcomas solariegas,
danza este caballito sin diablo,
al cuartel de la cucaracha
van los ojerosos grillos,
todo cuelga de un hilo de lana,
horas minutos
para hacerme libre,
termíname tú porque yo no puedo,
este alfiler parco, sobrio
como él mismo,
entre circo de huecos sones
danzan los vellos de mi piel,
por el agujereado brillo de luna
cuento notas perdidas
y el filo de esta mi cuerda
hasta latir con ella
y su desnuda poesía
con cuerpo de mujer,
lejos de la tierra,
entre un soñar del viento,
se destapa mi cordura
le florean pensamientos
fieles ecos en iris despierto,
dulces ondas como dulces sirenas
enamoradas,
de este marinero sin mar
llamado verso,
al senil aleteo de la polilla,
el invierno nace de un cubito de hielo,
que avanza ya su noche
sin pedir permiso,
al vapor de sienes heladas,
entre un coraje acorazado
de haber realizado una buena siembra
me marcho.
El Castellano
Filo sonriente:
Agudo filo nacido
mi destino.
Recuérdame en la tijera
desdoblando la espera,
hoy por hoy
mañana por ayer
el frío en la piel,
de estas cuchillas
sonrientes,
y su esperanza
carcomida, acabada
en hoguera.
Miénteme aparte
ancla en gozo
el violín de mi idea,
corriendo por fuera
marchando lanzas
de tierra
y el tiempo
solo, hinchado, dormido.
Rehúyo de mi pasado
que se clava
en mis brazos.
Mírame aparte
del punto y su silencio
seco.
Esta vida en el centro
de una margarita,
miro su caricia
en pétalo de brea
arde mi sinfonía
deshace la lejanía
hasta ser ese lejano
carrusel de estrellas
por boca.
Vida por mi vida,
y yo qué no daría,
a este cielo desplomado
de fieles compases
oxidados,
es por su plomo
que a veces plomo,
a veces más alzado
que las cumbres,
entre regueros y ramblas
libero mi azada,
en cuerpo de sangre y vena,
no conozco a Pena,
entre su alta ojera
clavo una letra,
abre la acequia
destartalada en honda esencia,
allí donde graznan cuervos
su lenguaje de madera,
soy yo a la espera,
abriendo mi destino
en esferas puras, plenas
ay la tierra
vive esta dorada
escolopendra,
sucesos de huesos
arde la compostura
afila su beso de miel,
todo queda en yacija,
derramada hiel,
entre grietas iluminadas
del iris insomne
soterrando verdades,
completando
liberando sus cavidades
y su dama oscura
naciendo la noche
que ya vuela,
entre testimonios del pueblo,
que pertenece a la tierra
y sólo esta a su materia.
El Castellano
Vieja escuela sembrada:
Cierra los ojos
es nuestra creencia,
por la que no hay
rosa sin espina,
línea de destino,
déjame sembrar luz
en la retina,
que caiga mi gota
quebrada,
viviendo tus memorias
lejos de la letanía
enroscada,
crepitan los labios grises
entre crujidos por despertar
leones del nuevo día,
Noche, noche
tus minutos erizados vencen
pasan las horas
y las horas
la misma pesadilla tejida,
en vilo en vela
de navegante sin mar
sin barco, sin puerto,
viviré una vez más
esta soledad del párpado
despierto,
muy alto, muy hondo,
todo se retuerce en sol mayor,
hasta la cima
me verán cabalgar,
resume este papel
un furor oxidado,
soy yo, soy yo su raíz
que ni yo mismo entiendo
dichos soterrados en alma difusa
en corazones sedientos
su fría caricia entre espadas
ni yo hago empeño solariego
ay la tierra perdida de tu raíz
quien osado sólo la viera
de viva materia rompiéndose
sucumbiendo sobre los filos hirientes
hondas espumas
riéndo en camino vivo,
en un sentido
con bordes de rosas y cebollinos
y senda de espinos fugaces al alba,
brotando imperecederos
que enriquecen los pliegues sembrados
de esta mi sonrisa
de esta voz en calma y en tormenta
de desnudos sigilos
que te nombra y nombra
si no estás lo hace sin cuenta
Poeta
Haces la ruta sin pena ni sangre
que no sea portada en tus venas
de solana hacia el sol
en un ovillo giras en tornasol
allí donde sus esposas
amarillean y tu sien gotean
en canto al amor
alzado en rayo de Thor
será un caracol
cuando nos vamos
solos sin nosotros
con o sin Dios
nació un vespertino albor
ocultando el dolor
secando lo que plañía
la sin razón
Se duda entre las cosas
por la vaciedad de las cosas vacuas
de fatuos alambres en fanal
hoguera del hambre
de oblicuas espinas
y los nuevos castillos
que sin su castellano chozas son
destruimos
si nos miramos
vencer o vencer otra vez
Oh raíz
ay de tu tierra que te vio nacer
qué guardas
en tus bases en las grietas
que te clavan que estiran
tus lágrimas del ayer
que no nos dejas ir
por caminos distintos
a los limpios valles de oscuridad
reposo y sosiego que clava el camino
¿Será cómo es
por siglos
de siglos?
De este tiempo oxidado
que latirá el son
con forma de tu siniestro corazón.
El Castellano
Quiebro en dicha descrita:
Muero por un beso
aquel sembrado dirá que vivo
vivo por un querer
cruel del destino
condena de una pasión
que creó tu pestañeo
al dejarme ver
tu cielo encerrado
ese que liberado
jamás me abandonará,
fijamente tres minutos,
y morí con tu pestañeo.
Demostró que fui y soy
importante para ti
y que a pesar y muy
a mi pesar de los problemas
problema no es mi apellido,
seguí en tu mirada atrapado
hasta que la aguja
de aquel reloj de pulso
se paró al pasar ciento ochenta segundos
mi cambio de vida
cuando consumí
medio giro al decir
siempre te amaré.
De este resquicio vivo
yo traigo la flor,
en competencia
de ilusión que marcó
esta hoguera sin pena,
eres tú soy yo,
flamígera condena,
por el párpado del cielo,
por mi astro soslayado,
que yo sólo encuentro cielo
en tu mirar encandilado,
soy un muerto con vida
si no te tengo,
y este firmamento
se me cierra seco,
muchas cosas erróneas
en mi vida
que no hay tiempo para la sombra,
no hay tiempo para tristeza,
ni para la vida quieta,
porque todo resume
en buscarte a ti
mi vida completa,
si este corazón es un tiesto,
quiere y te quiere a tu persona,
enraizada, plena,
resplandeciente,
como el brillo,
como el halo,
de tu limpia, dura
sonrisa de perlas
en océano de resurrección
mi ababol amapola
descubierta en dicha,
mía, mía sin despedida.
El Castellano
Solariega atarraya:
Verdades, verdades floridas
sólo para ser feliz,
es un surco, engalanado
este forraje vertido,
quieto, bravo
al desdén que marcó
su mirada en mi sien,
por este horizonte
me alzo con cazamariposas,
al azar de capturar sueños
que derraman sentires rizados,
cromados al tacto,
lancé mi atarraya
al río de mi alma
y no para capturar cangrejos,
sólo para sentir que mi alma
porta versos que nadan
en serena compostura encumbrada,
si no nací ayer nazco hoy
de esta tela,
un destino, besar su entraña,
alborada,
vestida de valles dulces
que hacen gestas dolientes
y su escarcha enamorada
que porta su sangre,
soy su leopardo
soy su cielo ausente
por el que fijo y clavo sueños
jamás corrientes,
mi ser es lluvia
soy cómo un ruego
de la montaña,
quiero ser yo
su aliento de fuego,
el idioma de una piedra,
su fiel compostura despierta
porque si me visto de cordero
solo soy su lobo
para lamer más que su cuerpo,
y brotarme dentro,
era o no era
fue continente de la belleza,
lágrimas de mis Dioses despiertos
porque ella es mi compañera
hasta fijar esta sangre
en fila en orden
para sentir la vida
y su sediento horizonte,
soy de ella como la lluvia
a mis plantas
vistiendo a este señor destino
de traje,
acompañando esta araña
que teje mis sentires por ella
mi ruptura de mi sino,
porque ella es mi camino.
El Castellano
Cercenada razón:
Ilusoria, despierta, vespertina,
trepando lúgubre escala,
iris destartalado, ansiado
cubierto de cromáticos azares,
por un metal afilado va venciendo
a este brillo irisado vestido
de crueles destellos,
raspados destellos
de todo lo que dejó de ser,
reflejos sin nombre
ilusiones de este alambre,
rizado con hilos que gotean sangre,
despierta mi pesadilla
queda asomar la dicha
y mostrar esta araña,
fulgor desnudo al fragor
de transparentes cristales
que enamoran los hielos
que febrero siembra abiertos,
si estoy despierto se equivocan,
nazco que traigo
un cesto lleno de sueños,
se derrite mi estampa
quieta colgada del árbol
donde hago peticiones,
y que este forraje
se desprenda de mi humor,
no me desalienta,
he crecido para brotar
más duro y recio
que el esparto del monte,
traigo mortandad de idea,
en letra extasiada
al filo de verticales escarpias,
soy yo encargado de esta acequia,
que ni el más osado
pedirá que se calle,
alzo su valía
en desgranada espiga
que rompe mi silencio seco,
si no soy gente lo demuestro,
enseño a mi tinta
a no pertenecer
a este mundo de yertos,
mejor que qué cosa
mejor que la opaca suma
de alientos que se creen
tener originalidad,
de su umbral
prendo a cerilla
todo sembrado a diario
de vacía voz,
yo repleto no soy yo,
soy su extasía floreciente
de imagen y su prima
clavada en alfiler sin cabeza,
como un grito de letra,
y mordisco de fiera,
que deslicen décadas
que seguiré siendo yo mismo
entre grietas, entre esferas
quebradas y su olor
a flores desnudas,
que yo sé lo que hago
si no ni lo haría,
noche corría marcha atrás
esperaré su madrugada
soy taciturno con huerto de luna,
y siembro un quién contra mí,
estoy brotando,
no hay miedo yo soy el miedo,
fiera de esta hoguera,
llamada esperanza,
tengo una llave
y no soy cerrajero,
abro este corazón
y despierto su dragón,
hasta acabar de una tajada
con mi sana razón.
El Castellano
Arácnida:
Había sentido
Bravura repleta
no tengo ojos
tengo lágrimas de cristal
al iris en belleza consumada
nadie te alza
tomas tu lugar merecido
jamás colmada
siempre rebosada
de lo bello a lo mejor
sembrado ojo por este ojo
me late me arde una simiente
para el campo de tu alma
vida yo vida no tengo
si no se dirige en mirada
a mi letanía certera suscitada
desde el 2008
jamás en súplica mecida
por este arrojo
en mi pecho sembrado,
viva y descubierta en este tajo
repleto de lo bello a lo bonito
de su interior decretado,
yo hombre de sangre
siembro este sortilegio
de espadas por si llego
a su alma
y liberar libro sus ataduras,
por soñar soñó la primavera
que mis flores eran de ella
yo reviento y exclamo
que son de argenta bella
mi maestra en furor de espigas
nacida
solo tengo un corazón
y es suyo mi dama,
dama blanca
doncella escarchada
de esta vida a esta mi viña,
yo dulce muero despacio
por llenarla de esta dicha,
seguiré en pie porque ella
sigue viva enraizada en este latir
para yo con amplia voz decir
sin ella no hay vida ella es mi vida,
El Castellano
Solar entre clavos:
Iris deslizado
entre grises hastíos
que me hacen hombre,
hombre en fin
de tijeras y clavos
iridiscentes,
no cambio mi estampa,
entre verdes fulgores
a todo lo que crepita
sin nombre,
agujereada tela
estos años dulces de cuervo,
con ineptitud de sangre,
forrajes me tiñen la vista
enferma,
para no saber quien ser,
solamente ser
un crujido
de mi parca mecedora,
que lenta acampa y cabalga
flores de tiempo en mi espalda,
es una noche que grita
que se acabó la luz,
obscura tiniebla
del compás marcado
entre mi coraje y mi blanca piel,
como un párpado desnudo,
y una alimaña de verbo despierto,
quise conocer a mi descendido
aliento entre nubes de plomo,
mi diestro zigzag
mostraba sus pestañas somnolientas,
con el ardor de mil fuentes,
cabalgo esta hendidura
abotonando mi deseo
con solapa y tapa dura,
gentes que ya destierro
y no cabalgan mi idea,
venzo mi granate iluso,
otra despedida
que clavar sin elevada desquicia,
rosácea calma nacida,
entre un tejer de arañas,
vendrá a mí la dulce quimera
enardecida,
que viva
hará caricia
a todas las albas
de mis letras despiertas.
El Castellano
Soliviar barroco:
Próvida estampa
que corre, aletea mi profuso alivio
que juega mi mal,
huida de quienes no me conocen
porque nunca me conocerán,
algo que ni yo mismo hago empeño
puesto que tomo lo que no me dan
con mi esfuerzo,
y no deseo lo que no tengo
porque me enseñaron
a amar lo que tengo
por eso no tengo más
que mi silencio,
porque de amar algo
lo acabas perdiendo,
la mujer que siga siendo mujer
para completar a este animal
que me tejieron,
cavo en mi jardín una fosa
para envolver con oro fino mis escritos,
por si un día despiertan
y me llaman papá,
les dejé una receta de cocina
junto a ellos:
Hacer una hoguera
y meter en una maceta envidia,
hipocresía, odio en mundanal caricia,
mal ojo de deseo,
mentiras, juicios malsanos
y dejar la maceta en el fuego
999 segundos,
con eso estarán alimentados
el resto de siglos que me quedan.
Mundanal zozobra que acuso,
acabaré pagando su recibo
en sangre,
todo lo lejano
como un soliviar de mentir más agudo
buscando vencer a la aguda aguja
decretada en espacio,
hoy seguiré mi curso sin mi nombre
por si consigo empalar a mi etiqueta
que brilla y reluce más gorda que yo
que ya parezco medio espectro de mi silencio,
un réquiem se blande entre mis huesos
que ya no crujen,
están plenos, hinchados porque saben
que durarán más que yo.
Y yo duraré nueve vidas de gato de arena,
por ser lo que soy
un rival de mí mismo,
llego a mi abismo.
El Castellano
Camino de escarcha:
Mantenme en destilación,
es este un real camino,
un abejorro que vive lejos
y posa siempre en las flores,
como quietudes de las estaciones,
resquicios de real amante
de sus estambres,
abierta mi blanca estación,
y su escarcha que inverna,
verdadero amor a tu flor,
camino los lindes del verso
por si acaso descubro
su polen ese que dejan tus ojos,
caminos de grava,
rajada caricia de helada vida,
entra en mi granero del sueño,
entre este manto
de lo que se alza sin dueño.
Corre mi amor
por veredas de torcaces,
y perdigones entre espartos
del monte.
agrieta el linde a mi paso,
necesito acompañarlo de tus pasos,
en religiosa procesión
de anhelos clavados,
en este baldío
se riza mi sino,
en compañía de la espiga,
que siembra mi guadaña,
respiro la jara,
y se abre la añoranza
entre espinos clavados sin ala,
tiembla este granate de sangre,
rezando a este Sol de invierno,
me dé el fulgor de estrellas,
risueña mi dama
trenzando sus cabellos,
entre esta solitud
que ya nunca nos separa.
El Castellano
Ramblas de sueño:
Resumo que venzo
agravios y destellos flamígeros.
Hago diestro empeño
en esta casa de arañas
Por la grieta del álamo blanco,
arañas grises me cuentan
de la estación perdida
entre hilos y retales
del hambre.
Escribo a este reposo
que hace el amor
con las heridas del chopo,
grieta acicalada
por entre notas
del viento y su calma,
sueños temblorosos
crepita su carne de madera,
al calor que retuerce
el astro verdadero.
La tierra deja cicatrices heladas,
se yergue la caléndula
en complacencia de espíritus
de carne de arena.
Es mi torre una estatua bella,
fulgores rizados entre blancas sienes,
con el sigilo de carcoma
vendo mi ayer que se desploma,
Agujerea, crepita, chirría
mi yunque despierto
clavando este pertinaz dolor,
que si lo sacara cantara de un amor
entre venas.
Parto el cristal de mi suerte
por si afilo mi destino,
mi existencia queda en invierno
alamán del nervio
ese que pasa la puerta
del negro lirio,
mi alma partiendo almendras,
desde mi sol dibujado
a esta luna de azúcar,
Soy reflejo de mi sombra
un esmero de la tinta,
si mi vida fuera papel
No habría tinta
para escribir
lo fuerte
que late sin balde,
al suelo de la encina
abre sus fauces
la hormiga león,
tiempo burlado por cortezas
vivas, desprendida
mi soledad, vuelve
el oscuro, tenue soldado
alado, este suplicio abotonado.
El Castellano
Registro soterrado:
Resopla, para y se piensa,
por pensarse
nació una lombriz azulada,
buscaba su escondrijo húmedo
de la idea,
se aleteaba
como gusano floreciente
haciendo alarde,
él sentado en el trigo
de su verso
no se vio la espalda
llena de abejas
de pensamientos típicos
de su vida parada,
como reposo de barcas.
El puerto rancheaba
oscuros rayos,
era el letargo de su espera
cabalgada su vergüenza
no más románticos cigarros
todos se tornaban
en el uno idéntico
llamado vicio,
el alacrán de su mente
corría feliz o eso creía,
sin tener nadie que lo pisara,
surcos se abrían
en el barbecho soñado
de su dama
que ya era imagen de hoguera,
yerma vida la estampa
que colgaba del poste,
un señero quieto se afilaba
con el viento.
Beba sus penas
en taza de café a temperatura
de la helada que rondaba
lo bonito detenido,
eche el anzuelo en el lago realidad
por si muerde la quimera
Diosa enajenada virtud de virtudes,
arrastré mi pan de celiaco
por su cara y mordí su boca
con suavidad sin dientes,
quería navegar su lengua
otra noche tiznada
de reposos dementes,
cogí las riendas de mi azar
desbocado, rumbo a sus piernas,
amaneció la dicha de estar acompañado,
al último suplicio del espectro engalanado,
gira mi cabeza
que sale un estornino de mi barba,
era este un acre de calaveras
que vestir,
estaba la sonrisa
de todos los tonos sentimentales
de la cara larga,
avanza que da vida
mi escolopendra patidifusa
del millón de espantos,
era un patio de orugas
el caminado por mi salvaje esperpento
difuminado,
un rincón donde clavar la lanza
que nunca sonríe,
caminan dentro, caminan fuera,
más patas que ojos,
sentido inerte de la fiera
por tornar polilla,
y sus pavimentos de la estrella
acolchada de ella
mi almohada.
El Castellano
Cauce en flor:
Inconcluso azar
flor de azahares
en estos cauces
de venas hirientes
parco compás silente,
estalactitas de este amor
fulgente, evanescente,
con surco de mi sangre
caliente.
Su hechizo de piel
que me abruma la hiel.
Colorines me silban
su quietud,
colorada, furtiva
en la pulcritud
de sus mejillas
al alba de mis deseos
nacidas.
Enajenada mi estrella
queda sembrar el cielo
con margaritas,
y vestir el astro de traje
para nuestro encuentro
que viene y avanza
mi adentro
queriendo y siendo
el primero.
Un flamígero capítulo
de mi sanguínea vida
al fragor de simientes
que germinan
nuestro ensortijado cauce
de nuestro albor,
engalanado
en un molinillo diente de león.
El Castellano
Brillante oscuridad:
Despedía el día
la porfía de una melodía
una balada por Belcebú,
el pasillo se abría
cruzaba las calles heladas
de enero y su cuero,
danzaban las sombras
entre el descampado
donde las casas eran malas yerbas,
malas por qué
acaso lo bueno es el humo
de un coche,
cuando ellas en primavera,
arrastran las penas
con su fragancia
a mujeres desnudas,
miro dentro de mí
pregunto por qué todo
torna azabache,
habitan cuervos mis ojos,
ya no hay precipicios
en mi mente,
que se dibuja de ladrillo,
miro al cielo
que todo parece una cueva,
acaso ya bajas,
sigue tu curso de Dios personal,
que te seguirá cómodo,
el bajo cero ciñe su lustre,
mi sentimiento afligido
hoy canta con mis dolores,
con rezos fugaces
alargando la noche
teñida en el ojo de mi despierto,
porque me cansa
esta febril, verde, emplomada
mosca impuesta medicamentosa,
hombre en el acre oscuro
por encontrar mi decencia,
estoy colgando del párpado
de la quietud noctámbula,
yo no estoy escribiendo,
soy un vuelo
sí de murciélago,
vendo mis mañanas
por un ayer construido a su lado.
Es como el hueso
de un poema imaginario.
El Castellano
Azar sin venas:
Fiel reflejo estridente,
los cuadros de tu vida
danzan entre las baldosas,
entre acorchados pasos
todo va quedando atrás.
Un ocaso florecido
de espadas en sigilo,
tiempos huecos
en lúgubre caricia.
Acaso la luna es luna
o alguien despierta
y la pinta.
Cerrojillos en destierro
de este silo de oscuridad,
avanza que imanta
el día y su prisa
por alzar su despedida,
gritos secos se mueven
tras el ventanal,
sangre que coagula
entre compases
de malas yerbas
de mi patio.
Es un mirlo negro
que me visita
siempre vestido igual
estrujé las vidas
del gato de arena que soy.
Suicidios de cardos
corren el patio
se riza durmiendo
mi gato negro.
La soledad me ama
más que a su estampa
vuela y reposa
mi fiel añoranza,
reverdecer mi ilusión,
socavar con sucesos,
así como besos
de este azar
que no siempre
se pinta negro.
Acuchillar esta realidad
con mi suerte de seguir vivo
para tomar con mi esfuerzo
lo que no me dan.
El Castellano
Campo de espigas:
Miro mi soledad
desde el otro lado
donde las sombras nacen
y crujen en las paredes,
caminillos del pececillo
de plata, acurrucada
mi sien
abre los lindes
del sueño retirado.
Es un desfile
la luz del astro
intransigente
sabe que no tiene
mejor en su empeño,
se riza mi idea
sabiéndome cuervo,
adentro el nueve
y el tres sacude.
Vive este caracol
con casa de espejos
habito el espejo
estoy escribiendo en él,
que un día
las imágenes harán
dulce sinfonía,
los sonidos serán
colores derretidos.
Mi casa será una hoguera
mi luz será invencible.
Seré yo el encargado
de cabalgar los tiempos,
el olvido dejará
sus cerrojillos
entre un manto
de abrojos lucidos.
Las hojas llorarán
baladas estridentes,
mi letra rozará
la perfección
de las décadas
florecientes.
Siente el poder
del cuadro
de la oscuridad .
Afílame el cuchillo
hiriente,
tejidas las arañas
de mi carne,
atraviesa esta grieta
de la realidad
que no llora flores,
sólo lleva en tules
almas y su ciego campo
de espigas.
El Castellano
Piel labrada:
Surco de noche
ya se retira
sonando el día
y sus rosas heladas
de invierno,
iris matutino
clamado
en este fiel olivo,
surca mi sangre
entre verticales filos,
mi gris vencido del alba
serena, más desnuda
que la transparencia
que el azul afila.
Se clava este verde
militar de ciprés
como cuchillo enervado,
y su canto
en estos sigilos de chopo,
cargo mi revolver
naciente del verso
por un sol de plumas
cae fusilado el aliento,
algo que clavar
al firmamento
héroe del norte
de mi silencio.
Fantasmas
del imperio perdido
su bandera del tiempo
dormido.
Fúlgidos nervios
cabalgan los acres
de esta trinchera
donde mantengo alerta.
Jauría de sienes hendidas,
con fauces somnolientas
quise ser siempre
con esta mente,
profundicé el idioma
de la flor,
hablé con la tierra,
aún guarda mis abrojos
sembrados.
Entre brotes verdes,
impacientados,
aguardan el bravo
crepitar de la tormenta,
y sus besos azules.
Ahonda esta vida
silos del demonio,
simientes oscuras
de malas yerbas.
En este campo yermo
crece mi ilusión
que no me siembren
el dolor,
seré como la flor
soñaré con las piedras,
reiré con abejas,
jugaré con el viento
como la vida grita.
Ahora que la mañana
consume los suspiros
ahogados,
ahora que el cielo
luce sus corceles dorados.
Es por esta pizarra
que me habla el río
me habla qué más
que ser agua.
Deslices anudados
entre corajes florecientes.
El Castellano
Guardado en un cajón:
A veces me rompo
a veces soy grieta
de estas paredes heladas
de corazón.
Seguro para escalar
mi vida una vez más.
Quieto en las aguas
que suena mi pasado
miradas atrás
hoy soy nuevo.
Se puede escuchar
el crepitar de este hielo,
el sonido palpita,
congelado un brillo,
de humo descorchado.
Garras de esta vida
en el filo de su destino
enmascarado,
y su camino de azul caricia,
me aguardo del fuego
soy destello de hielo
me derrito por una flor
que habita los campos
porque sus semillas
las ponen los Dioses.
Enraíza a fuego
este corazón.
El día mío ya suena
y la sombra se retira
a donde puede jugar.
La mentira queda lejana
espero el tiempo
para derretir mi alma
en sus brazos,
y encontrar fieles
testimonios olvidados
de edad desplomada,
su nueva visión caída
tiempos cambian,
en esta fosa de palabras
rescato afecto alumbrado,
resquebraja
la palabra amor.
Sólo soy unos ojos
con funciones vitales
esperando el encuentro
y tener carne.
Hasta abandonar
el espejismo doblado
en profusa imagen
de lo que anhelo
encontrar.
Se consume mi cigarro,
en este grado bajo cero
de libreta.
Habita una estrella
la mirada,
una babosa
su lengua dorada,
con su luz que arrastra.
A la floresta ausente
destapada,
el reposo de la vida
bajo invierno.
En el que vuela
mi demonio arte.
Mi corazón que late
encerrado en un cajón,
llorando flores
por todo aquello
que no muere
es este río frío,
desborda las letras
rompiendo sus cadenas,
amando libre
desnaciendo mis colores
por amor al arte
hasta la muerte.
El Castellano
Fulgurado sino:
Era un día que se podía rezar
a la estrella mayor,
como si una babosa metálica
se tratara,
busco en este astro una razón
abro a su luz mi creación,
que me cuente
de sus paticas que recorren
los campos tiñendo de ocre,
de su insípida lengua
que me recorre,
un hogar lejano donde descansar,
una novena puerta a transmigrar,
creeme de nuevo si te digo
que soy tu hijo adoptivo,
nacido de estas cuchillas de trillar,
un verbo un suplicio despierto,
cruzo la era solariega
buscando quien yo era,
miro al muro sí ese que dibuja mi mente,
miro a la montaña,
recuerdo que yo soy la montaña,
navego este mar de grama
de esparto y tomillo, tiznada la jara,
sí vivo en Guadalajara,
como cuervo adoptado de Castilla,
avanza mi meseteño aliento,
aúlla que aúllo cual lobo de hierro,
una noche sin despedida de invierno,
avanzo a la llamada de mi averno,
está ardiendo en el cielo,
mi musa belleza,
hasta que se materialice
en mi única florecilla,
llevo mi canasta de melocotones
a ella mi gitana,
arrojo dulce abrojo
la quiero en rojo
a veces en blanco como prima
de la pureza,
sí esa que endereza,
hoy es un día teñido de espadas,
baja mi azul despertando a mi araña,
que hilvano y me hilvana
cual maraña de sábana de su tela,
no nadie entiende
por qué cruzo la espera
fumando el cigarro del minuto sujeto,
mis ojos ardiendo el juego
de su fuego de mujer,
ciegos pálpitos
crujen su negra pupila,
yo no estoy despierto
ella tiene de ausente su presencia,
cuervo soy esperaré su noche
noche negra alza tu sombra lúgubre,
yo cabalgaré tu sien saltando
tus oscuras fauces,
hoy lanzo tu tenue honda,
afilo este cuchillo a ver si canta
junto a mi iris vespertino
su crimen de pasión y de flores,
hasta que se duerman
los campos conmigo.
El Castellano
Vuelta al inicio:
Es del tiempo
la incombustible hoguera
consume la tierra
en perfecta esfera
se alza un maullido
desertor.
Gatos que suenan
como alambres
en casas sin teja
ni tejado.
Soñé un día
su contorno
su silueta
me arrebató
el sueño
diciéndome
y corroborando
su espejismo.
Sol oscuro
en días claros,
humedece mi piel
una áspera lija,
soy de madera
de ciprés.
Soy hijo del Sol
de hierro
y de la luna de acero.
Soy yo el encargado
de partir el viento,
yo que abrí
mi destino en dos mitades,
una para sacrificar
en ofrenda
si se cumplen mis deseos.
Soy de la tierra
una espiga.
Hijo del Sol de invierno,
ardiendo en hoguera,
del cielo
su quimera despierta.
Oye mi respiro
me tiene miedo la fiera.
De este panal
de mundo no soy larva,
soy abejorro mayor
sin reina,
hago énfasis
de esta siembra.
De la tierra
soy flameante espada,
torbellino de este mar
angosto.
Espuma de estas caricias
al alba,
crepita sobre una araña
este fulgor,
Torbellino señor
de rosas sin sangre
y sin cortar.
Como cruel indulto
a la belleza
por encumbrar.
De hojas y espinas nació
este tallo
que ama de verdad.
Que muere en el suplicio
de su despierto tormento
dulce, ensangrentado,
envuelto nacarado.
El Castellano
Sigilo de sobriedad:
Fauces amarillas. El humo de su tabaco seco, cuelga de su blanca sien. Bocas de agudos filos, nada por todo. Tomaba su café de grano recién molido como si goteara del árbol del insomnio. Era un hombre chapado de años. Dormía cuando tenía sueño. Comía cuando tenía hambre. Amaba más a las flores de su jardín que a las personas. La amargura no conocía si no se hubiese casado con ella. Su bigote recto comía por él. Era apuesto, pero le asustaba mirarse al espejo y contemplar que el tiempo podía más. Su diálogo era más parco que una tabla agarrada bajo yunque. No amaba el dinero y sólo lo empleaba en gastarlo para necesidades básicas. Hablaba con sus flores y lo extraño era que le respondían dentro de su cabeza, consecuencia de la soledad avanzada. Seguía la ley del ojo por ojo si le daban amor. Devolvía lo mismo, pero en cuanto al odio, éste, le temía. Gustaba sentarse en su mecedora en el jardín y acercar comida a córvidos negros como azabache y observarles . Era un hombre pleno y hacía honor a su vida, amando lo sencillo, cogiendo su armonía en la mano que sostenía su cigarrillo y que blanqueaba ya su bigote. Con la paz en su soledad, feliz de contentarse en su memoria de cuántos conoció, cambiaba luz en su medianía exacerbada. Afilaba tostadas en miel rebosadas, en su desayuno. Sabía estirar el tiempo como si no existiese. Su simpatía de ignorantes era apreciada por todos los que le medían.
Una mañana, en que regaba su patio como si la sed fuera suya, al acercarse al tupido seto, escuchó unos maullidos leves, estridentes y que venían de una camada de gatitos, arañando ,aún en ceguera precoz, en busca de su madre. Su alma de viejo aguerrido se enterneció. Miró a los recién nacidos y sin dudar, sin tener agresividad de la gata madre, se acercó a tomar a uno de ellos, él único de color negro y se hizo el propósito de adoptarlo con todo lo que ello implicaba. Sus hermanos eran blancos, moteados y en manchas negras. El gato negro elegido, resultó ser el más inteligente que muchas personas que conocía. Lo llamó Blackie.
Blackie se quedaba pegado al cristal de la ventana, gruñendo, deseando lanzarse a por los cuervitos que su dueño alimentaba.
El Castellano
Sangre de musgo:
Trae este viento
memorias perdidas
del tiempo olvidado.
Trae sangre de los Dioses,
en muérdagos lucientes,
sangre en flor del musgo
por vivas piedras tejen,
espíritus en árboles mecen,
traigo estas vidas
traigo grietas en mi destino,
mi bravura que muerde el suelo,
desenterrando su falcata,
sin oxidar que es mi espíritu
para luchar,
voz que me hiende la entraña,
al trueno es ella que silba,
de sus lamentos
vueltos testimonio
de lo que se convierte
la materia,
y su resurgir de tierra,
me avanzan los montes,
me beben los ríos,
para gritar este latido,
que no morirá ni estando muerto,
tiempos perdidos
llevo en una mano
en otra golpea
la voz de mi poesía,
y sus negras nubes de tormenta,
blandiendo su hacha de guerra,
bruma de su gris naciente,
ojos de la noche,
que sigue este lobo de hierro,
gritos en la espesura alimañas
se afilan la entraña,
fuego traigo que yo no deseo,
y fui a la bella fuente,
donde se bañan las almas,
carroña salvaje será mi enemigo,
y sus carnes cantarán con mi espada,
este sol me engendró de hijo,
estoy hecho de tierra y luz,
que mire la carne
que miren ojos que quieren mirar,
el armamento de este temporal,
lucharé por todo aquello
que amaré,
lo que amo será mi guía,
para nunca caer,
deshojaré las ramas de mi tiempo,
y en este cabalgar nocturno,
la novena estrella arroparé,
el tiempo conmigo volverá a nacer,
si es que no lo hizo ya,
mi cuerpo es la forja
dentro llevo la espada,
al tibio resplandor
sigue en pie mi batalla.
El Castellano
Vida de hielo ardiente:
Horizonte de la caída de este solferro
a reinar como una falcata de rayos afilados,
hondos ojos fijos en solariega planicie,
donde frías juegan moteadas las flores de invierno,
el reposo de la vida que se fue a dormir,
como un río de luz brotaba la escarcha,
un diciembre tardío saludaba
con sus manos heladas,
acariciando estos campos redondos
de cardos y caléndulas silvestres,
era un día de hacer manteca,
a mí el frío me hacía sentir vivo,
en este soliviar traigo mi espada,
pongo a sentir la tierra a mis versos,
que con cepillos de grama joven
se blanquea mi calzado,
viajo en mi mente
por el cuchillo calizo de la piedra
del caserón terrazgo abandonado
que posee mi padre,
rodeado por el fervor de pinos de monte,
donde próximas hacían nido las atochas,
a perdigones que son de la tierra
como la montaña a su roca,
cosas talladas puras como amaneceres
pulidos sin grises hojas,
ola rota mecen mis pasos
de un mar olvidado del que cepas anclan
sueños de vida,
del terreno en el que grillos esperan
el frío en sus agujeros
y su despertar para morir al acoplarse
a la melodía que teje la vida.
Avanzo en este campo de víboras
para ser yo como mochuelo recogido en su olivo,
como mis pasos gorjean las carrascas,
todo mi mundo reverdece
para mí siempre es primavera,
y mi bravura llora flores por mis venas,
hasta tener del cielo
la malva del alba
hasta trepar las yedras del profuso claro oscuro,
del cielo y su luna cuarteada de platas auroras,
me nacieron simientes silbadas,
y mis ojos enraizaron el campo.
El Castellano
Trilla mi idea:
Canta mi cuclillo canta,
picotea en mi cabeza,
entra al silo de mi idea,
donde telarañas
coagulan mis pensamientos,
abre esta puerta hacia mi oscuridad,
allí donde negros ratones
cobijan con fijos ojos
mi sueño sin desempolvar,
me conduje por escalas
donde colgaban brillantes ojos
sin pestañear,
arriba donde se acumulaban los sacos,
un murciélago despertaba,
era como una sombra que flotaba
entre llenos agujeros de aire,
sombra con alas,
la guadaña estaba recta
pareciera que me esperara,
la trilla afilada,
era nueva de esta primavera
el grano no vio su oficio,
respirad este olor a trigo muerto,
habitantes de mi silo,
hasta la araña teje con tesón
su geométrica hambre,
pardas motas salpican las paredes
por las que corre pegada la salamanquesa,
grietas vivas por este frío infernal,
arriba la sangre parecía evaporarse,
sólo quedaba yo
y esa sombra colgada del techo.
El Castellano
Soles de cuarzo:
Libero vendavales furtivos,
acampo la idea en tremenda pradera
descolocada, mansa, abierta
en florestas húmedas de rocío
tempranero, sólo allí tengo nido,
entre trinos que excomulgan mi deseo,
como atardecer rojizo sin sangre
acaso es, envoltura dispuesta,
rezo que acompaso la franca vida
de mi caléndula del camino,
resumo que coarto su vida verdadera,
luz de los campos, luz de mi campo
acaso fuese mío,
aquí solo hundido mordiendo este papel,
traigo que quiebro tormentas en nido,
culebras del sonido perdido,
me desatan yugos de esparto,
arde la simiente mía,
entre clavos ardiendo,
entre amapolas dulces, risueñas sin cruz,
se desmenuzan abrojos
de mi soledad carcomida,
a la que entablo soliloquio
en cama, con ella sin ella soy el mismo,
verdades atrás qué necesito,
si el mundo me hizo completo,
quizás aburrirla a ella mi pena,
nacida en cuarentena,
avanza mi siega,
esta vida mía vale la pena,
rezogo brillos de metal
cuando deja de serlo,
y crispa al viento
lo que llevo dentro,
más que un tarro de miel
y unas flores asesinadas,
un corazón que sube por la garganta,
a decirla a ella QUE no se vaya
usted es mi compañera.
De estos siglos que me quedan,
eres la carcoma de mi madera,
hasta ser lanza,
estaca que somete al viento,
en aullidos, en graznidos dolidos,
en enjambres con reina.
Por ahora a tu lado
soy azada que socava mi camino,
sacando terrones de lamentos
para sembrar tu amor
que Dioses me indican
que tendría que estar ciego,
para negar que eres más de lo que siento,
como veleta que le falta lo principal,
para no ser dirección que marca,
una flor plañía a mi vera,
que le faltaba su insectito
que la besara sin diligencia,
así la belleza nunca completa,
recto escalafón retorcido al beso,
unión de dos, como escala sin peldaño
rampa no sería,
me encumbro de la fiera para ser yo
la fiera, de esta mi pradera,
se afila mi vida quieta,
entre soles que cuelgan,
y colores que lloran,
despierto para entregarla
a ella mi cardillo de la dama
para que me lo devuelva
cuando me una a ella,
como se unen dos gotas
del mismo agua,
como se desgrana el molinillo
cuando saluda el viento.
El Castellano
Carmesí inefable:
Turbado yaga mi espíritu,
sin voz yace mi gran momento,
puridad en crisálida perpetua,
oh, lacónica eternidad,
no te temo ya
ni tu crisol de hálito
me vence en inmortal secuela,
recto ganaré a la luz,
por su ceniza coronada,
cantaré hasta el etéreo vuelo,
me trasplantará el viento obscuro,
metálico azar,
erigiré un árbol de brea,
en mitad del todopoderoso silencio,
mi flor no sucumbirá,
ni mi verso armado
será litigio de crin en ascua.
Filial prestancia,
que nadie trepa mi solo nombre,
por cantos obtuso,
en sangre
suceden labriegos
fecundos.
Terrazgo de mi amor atado,
canto a mis generales,
despejen el camino,
y entre férreos cipreses
me avalen.
Tanta herida precedida,
tanta voz que muere,
sin soto de almíbar,
pena que no muere,
son este de mi bronce en ala
de un repecho carmesí,
soledad,
mi gloria tan fuerte.
Azucena helada de mi tarde,
resuena en ti
un azar indeleble
para indicar sin sonido,
que tengo corazón y cielo
atrapados en un solo verso.
Olvido sin espejo,
mantuvo suerte segura;
luz sin día ni ojos
fue perfidia en otro astro,
azul, paz,
cuchillo que mi vida hiendes,
a cercenar toda oscura alegría.
Förüq Castellano
Severidad enfilada:
Nota:
“Porque el silencio poético es un alto grado de silencio; él es el que nos libra de lo opaco de los signos y de las torpezas de la lengua. No es un silencio vacío, es un silencio excesivamente
lleno y hasta desbordante de sentidos silenciosos: un silencio trascendental.”
Luis Armenta Malpica
tercer incluido entre el signo y el sentido
“estado T”, el cual no es potencial ni actual sino ambos “la mayor parte de los sucesos son indecibles.
Y más inexpresables que cualquier otra cosa son las obras de arte” (Cartas a un joven poeta, 1906).
Armenta Malpica, Luis. “La poética del silencio”. Armas y letras. Revista de la Universidad Autónoma de Nuevo León 52-53, 2006. 16-14.
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Severidad enfilada:
Destino desvencijo.
Como un borbotón de sangre.
Suspiro rápido y hondo,
entraña amilano,
todo me lleva
sin redil ni correa;
a verme en el ojo de tu espíritu,
sí, resquicio parco, opaco, en tu voz,
en un patio de trincheras
y entes esferas, al crisol
de valles y venas,
en el recital jamás yerto de tu verso,
cauce perdido descubierto
entre sótano de luz injerto,
en la pupila del lugar mágico,
riera en rambla
donde crece mi amapola
de pecho abierto,
tu vida la saboreo despacio,
entre regio y mi coraje en flor
de nuevo cierzo;
tu sangre sabe bien,
alma invernada buscando
horizonte en mente concisa
y como no llega a destaparse
eterna dormida avanzo su esquela.
La veo en mis sueños,
resquicios oníricos del ser claveteado,
de vidas mías lejanas al tranvía etéreo.
¿Cómo no hay?
No hay nada que negar
nada que perseguir
que todo arte nace del sentido inerte inaudible,
en manos del destino me encuentro
y me encanta el momento
de verme en el ojo de tu silencio
recordando mi universo de astringente azur sarnoso,
tu voz, amada luz en mitad el reino tenebroso
donde allí sólo canta mi oscuridad.
Alma de fuego encandilada,
estridencia seca, armoniosa,
velo de sigilo
tu suspiro, nada más.
El tiempo es correcto
para la revolución; jamás mil máquinas
podrán hacer una bendita flor,
Densidad recta
en rienda plumosa lamo esta mi pluma estilográfica,
resguardo en Caja de Pandora es mi alma sin espora.
Cinceles celestiales, un soto veleidoso,
donde sembrar el final sin comienzo anunciado,
por esculpir, tu contorno,
con vistas a tu verbo;
divina tez a blancura helada
por deshojar mi fiel recogimiento.
Así me perdí yo
buscando tantos años
el abrigo
de tu amada voz,
haciendo que mi difunta
cobre su vida.
El Castellano
Soliviar llano:
A las aguas de mi memoria
primoroso apelo,
a tener yo un alma como rambla inmensa,
desapagada,
un tiempo sin días de cobijo alado,
rosario suyo por terco no incendio,
sueño en aras de corcel virgen en grandeza develada,
sudario sonrojado,
metal beleño todo olvido,
arrebujo sin mesurar vil posible
que por ella mi cruz y mi condena,
deslizan mi viva aflicción
de amor a propia ascua en la tierra,
sorprendido, letal no pienso,
neblina y fortuna
grandeza, gloria no gastan,
voy por epitafio soslayado,
remembra cautiva mi soledad infecunda,
alejar vida y belleza cuándo,
rosales míos crían ajos
cebollinos y puerros acuso,
tonada de mi sayal remiendo,
en boca de santo astro.
Peregrina de azar inamovible;
en alba de seda,
viste su dicha inmaculada,
insinuante su figura.
Sonora ella de silencios perpetuos,
oro de riveras
y burgalesas conciencias,
sendero atisbo
voy largo su densidad llana
aria agraria,
luminaria bajo luna de signo azabache,
luminaria gitana sólo su mirada,
mi repecho no fulmino,
ni faldeo,
arboleda de mundo monótono,
distinción no apremia,
ni estrella viola
su espuma de ceniza larga,
como lírica paz
se llamó magia.
El Castellano
Canto de luz fecunda:
Imperecedera faz,
en haz luminoso indeleble,
río de tinta terrena,
insubordinada cava mi azada,
sacando olvidos de la piedra,
anisados reflejos que hienden la carne
como el Sol me clava sus espejos en los ojos,
vítreo desliz, enarenado,
es un sol bajo tierra,
hierro de vestido del acero infra-humano
que porto,
soñé desvestir mis sueños como sueño de flores
aguardando su fecundidad de nuevas muertes,
perpetuidad a flote,
en sima de raudales,
pila sacra bajo tierra hierro de estrella,
claridad del destierro
en relámpago de veta azabache,
voy sacando penas por olvidos,
azadón saca terrones a cal y canto,
es mi alma quien se destapa
que una vez en la vida se dispara
una soterrada vía sola, pierde el relente.
En manos de silenciosa vívida estampa,
y su desnudo de ángel custodio,
encenderé las novecientas noventa y nueve velas
del averno,
para encontrar lo que me pertenece
y siempre se me negó,
paz sin guerra...
Que va, otro día se venda.
crisol anidado en tus labios de mujer inmutable,
un deshielo y el cielo me trajo de nuevo,
sobre la luz monto mi corcel de viento,
allá donde la tierra es éter incoloro,
y la suerte es de metal,
de los árboles al bosque
de la sombra carne y cuerpo
de chirrío estacional,
y sus muros de venas
gira mi peonza,
trompo vivísimo,
de aurora incipiente,
montaña o preludio,
el gris se extingue,
luminosa mi trinchera erguida,
con desnudo bronce,
que no es más duro que yo.
Förüq el Castellano a 17-04-2019
Espinelas:
1
Enhiesta flor fue semilla,
altiva plántula fue ella.
Quién fuese aquella tan bella.
Él, pupa acabó polilla.
Aún plántula fue pilla,
él aún pupa la amaba.
Aún flor la respetaba
juntos cuatro meses bellos
cómo fue lo saben ellos.
Él desde pupa esperaba.
2
Bellisannua siempre bella
sin ningún pacto indebido,
licor de mora bebido
brindé yo por amor de ella
y mío mas la botella
casi entera, mi infinito
lleva en corazón finito.
sólo nosotros dos flores
libres en cante folclores,
soy alcalaíno, cito.
3
Amor te adoro bastante,
tanto que ni te imaginas,
volamos sobre colinas.
Nada encuentro yo distante
feliz yo, el único amante,
ambos somos golondrinas,
folclores mas las endrinas,
el weche, mapuche, arriano,
nunca solar artesiano,
no hay destino en las neblinas.
4
Ahora, es ayer, henchir.
Amor obtuso, incesante,
mi vida en valor constante
valiendo la pena hinchir,
sin pena yo, rehenchir,
vigoroso, parco, regio,
como corazón de arpegio,
ella firmamento mella,
mas yo nunca ser aquella,
hijo del viento, bastante.
5
Te observo, mas yo la endioso,
amor, pasión más los vinos
lo mismo, yo catavinos.
a ella doy mi sangre de oso.
Vivamos sin el ser soso.
Toda mi sangre antibaquio
a mi mujer; Lofobranquio.
Viva yo y más mi caballo.
mas es él saltacaballo.
A ella la amo, todo baquio.
6
Tesoro mío guardado
dentro tuya el sentir puro,
espíritu era ello oscuro,
espíritu mi candado,
en alma estaba bordado.
La espera, vida gallega.
Lluvia hasta aquí las allega,
Beltane, una, mas las diosas
Aurora, Flora preciosas
su ayer muerto, entalega.
7
De celos ya no latere*,
amor, tan viva a raudales,
nacido en los manantiales.
nocturna cuenta el me quiere,
luceros, el Sol mas mi ere,
todo lo quiero en las calmas,
nacer temprano, los ensalmas,
universo cisne e indemne,
desde quince años solemne.
Celta el fuego, hace reales.
8
Vida, para amor, morir
en tu pupila, en placer,
llegué donde renacer,
mucho tuyo a descubrir,
eterna alma, su existir.
Criaré las zarzas, hinojos,
mas viviré dorando ojos,
mi conversación es cena,
estabilidad la escena,
mas sabiduría, abrojos.
9
Este amor todas mis venas
se come mas manifiesto
toda mi sangre, dispuesto
sin riendas cómo me frenas
te deseo sin cadenas,
te amo como sangres hiervo
deseo ser tu agua, siervo.
Ven a mí quiero tu risa,
ver que fui feliz deprisa
pero tu te amo fue FERVO.
10
Amado Nervo es el nervio,
fuera instintos y amistad...
de amistad mi lealtad,
amiga mi sombra, antuvio,
digna casa con compluvio,
antuvio en desuso ya anda,
hecho anticipado, banda
rosa por hierro, fragancia,
mi instinto digna elegancia,
del mío dragón parranda.
11
Mordedura con dolor,
amor ni cura ni ungüento,
puro y eterno es su cuento,
en mi abrazo le doy color,
envidia resbala, albor,
premisa estar en tu vida,
porque no hay razón, anida,
cuando sepa dejaré esto,
este Miguel no es funesto,
tu merced de mi embestida.
El Castellano
Remanso y su era:
Avanza manso
un hontanal
de gramas frescas,
deshilacha al durmiente hombre,
se retira mece y avanza
su calvero expuesto
de su semblanza,
una dama cual blanca cierva
bebía, bebía del vientre
que emana la fuente,
plañía un ababol solitario
del camino, que la rambla sigue,
fiel, duro testimonio sacude
su cuchillo calizo,
huye, huye el tábano por el monte
buscando algún depósito de sangre,
el brezo se apoderó limpio
de un raspado testimonio
la tierra devora lo que es de ella
para ser mi sangre
su eterna ofrenda,
por descampados fugaces
corría mi alma,
como fiel testerazo de hombre,
la espiga rendida,
saludaba a la oliva,
siendo del viento
esta fiel niña
que nunca descubre a quien pasa,
sólo, solo ante ti
me acuerdo de la primavera,
me levanta un sol helado de verano,
para ser mi hoguera
una fuente niña
que desliza, siente, y no consume
mis labios de pradera,
siendo este pasto
mi infinito remanso,
que me habla de la ceniza del fresno,
de la nieve del álamo,
de la sombra de esta abeja,
y su testimonio deja,
entre almendros con sabor a metal,
y encinas sin gorrino,
hoy avanzo el barbecho
para enfrentar mi sino,
a ver si contesta
la brava dama lluvia
que es Dios.
El Castellano
Alborea el otro lado:
Destello que blanquea,
lechoso, estira un seto
en semicírculo,
la retama amarillea
oscuro el agua
de soto sin fondo
en cuchillo en haz de cauce,
compongo el suelo,
con un hueso en mandíbula
pereza coarta la raíz
en mitades que caminan
desencajadas.
Anidaba un cortavientos
la franca entre rendijas
que se ocultaban bajo paja,
decencia que iluminaba el sol,
patio largo del atardecer
lleno de harina.
Escuché a mis heridas
por francos capullos segados,
caídos asisten a ungirse
yazco en una hoja roja,
camino por mi corazón,
exime aliento
una raíz salvaje no sostenida
se deslizaba un rosario
con aflicción del marjal
cubierto por la flor.
Como febril estera
y larvas sujetas
en yunques iluminados por savia;
era mi vida el precio
de estas semillas.
El Castellano
Tañer de hiedra:
Cerro gordo de henchidas horas,
marcha lenta sin subrepticia,
pesadumbre del porvenir
sin hojas ni otoño de vastos
suelos empedernidos,
en este rincón deslizado
un senil canto que abre paso
tras espirales en cuencas de flor,
de floresta blanda,
húmeda donde la maravilla
será villa,
Yunquera llanos fueron
sotos sin perdigones,
pero de fuente
de lo que fue siempre
matiz destellado,
ultrajadas sin abrigo,
en este mausoleo de tiempo
que se pierde sin visiones
vientos sin azares de infelicidad
ni ajuares de inamovible primavera,
donde lo único inamovible
es todo lo que siento por ti,
como un carrusel sin soga,
ni cuerda que atañe,
desde esta urdimbre
anclada, armada, hondonada,
dónde mi manso destello
de esta asolada cuesta abajo
que avanzo
por la vera
verdes,
un ojo que endoseló,
sin compostura
mi dulce cicuta
secular es mi enredadera,
mi sentir sin espera
su blanca ojera de nácar
de rosas y crispadas espinas
flojas,
absurdo, burdo, doncel
en sandez segura
tapiz sin fusionar
dichas ni agravios
extiendo mi locura
¿Alguien duda de mi campiña?
Con murria
de escurrajas,
cuenta ni azada
sin sostener este descanso
que lo dicho tiende,
todo recuerdo de lo que alma tengo,
y recuerde mi cordura,
que Úbeda tiene monte
y yo blando su horizonte,
sin alarde
hago corral de lluvia.
El Castellano
Sombra desnuda:
Yermo terreno del sueño,
un trillado verso avanza
entre espejos y cristales,
fieles aullidos desvalidos
entre semillas sin iris del mal,
entre corceles del fuego,
entre sonrisas fugaces.
Es todo lo que siento
un canto de piedra,
un río desplomado
mi fiel apostada cordura
que viene por enjutos
ojos hirientes
hasta avanzar los besos
de labios grises
y sus fanales colmenas destapadas,
no quiero repetir estos destellos fugaces
ni herir por mis alambres
tejido mi atrapa-sueños
queda mi parca vida
desnuda con el hastío
que asesino de esta manera,
volando mi dulce murciélago de nácar
entre este amor
de estrella me alzo,
es glorioso este canto,
reducto en lúgubre sigilo
es esta inspiración,
tentación de ángel desertor
de morir,
justo la vida
acabará negándose a finalizar,
soy yo la salud
de la una solitaria de la madrugada,
conquistado el cortejo de la noche,
me cuelgo de mi profanado latido
por estos cordones de hueso
vive y viviré mejor
que mi traje funesto,
limará esta sin razón los ocres
hasta lucirlos verdes brotes,
hasta acabar rendida la caricia
por estos espasmos de cobre,
mi destino teñirá las vivencias
por solares complacientes
y lugares dignos de altos sueños,
esta araña dejará crías
por poemas
en escarchas mutiladas
en este hierro candente
y el incendio de mis hielos,
como dijo el grande
no acabaré de irme,
ni estas solapas fundirán
en tristezas secas,
la sombra será mi mujer,
cambiaré el prisma de ver,
y ahora la luz será
la dama siniestra,
por si un día acabo de irme
solo espero
haber podido contagiar mi locura
que ya es rápida,
desborda sus cauces,
brotando en espinas insomnes
el abrir de las compuertas
a ese abismo sin dueño
donde besan los azules
ese nido de malvas,
que mi ser desprende dominando,
sombras miles en este carruaje vespertino
de mi sangre,
mi río de colores
de almas en sus gotas ferviente,
atado a este sentir,
que late,
que sueña
la carcoma de mi estampa.
El Castellano
Suspiro en tierra:
Flor silvestre a ti te escribo esta lápida de mi latido
tú que me das la paz que yo necesito
haces mecer mi amor en tu floresta
cuando flores de margarita cobijan lo que necesito
mi vida gira en una flor de caléndula
avanza mi vida en un sentido hacia el sol como ellas
se siente abrigado mi pecho
que canta por soledades su te quiero
no más montañas oscuras por escalar
no más súplicas por dibujar
todo se mece en una caricia
todo cuelga del alambre
por ver si te tengo hambre
y tus besos me acompañan
fieles testigos desvelados
de todo lo que fui y soy para ti
así como una cascada que bulle hacia arriba
un cielo encerrado en mi pecho
un canto de tus labios
en verde espiga y girasol
un despertar entre pétalos
un parpadeo que me lleva a verte
un abrazo que me lleva a tenerte
es sólo la vida de la flor
y que la flor solo sea la flor
elevado albor
cuando mis pupilas se llenan de tu amor
solo allí amada mía
reinará la flor
y no solo al muerto dará calor
tu sangre se fundirá en polen carmín
tu vida gritará a mi vida
para encontrarla
florecida de los más bellos versos
sin dolor
sólo cantándote
mi amor.
Oh elevada flor de mi amor
a ti te canto sin dolor
que mi ser es primavera
cuando mis ojos te ven entera
y mi Dios es la lluvia
está cayendo ahora
como el invierno se desvanece
es mi tiempo ahora
los cielos tiño de malva
mi vida reverbera
llegó la hora es primavera
con el trino de los pájaros
se blande mi espíritu
al son del tambor de los grillos,
quieren un templo para mi flor
ojos aceitunados cuentan
de los giros de mi alma
al albor de su corazón
ojos de sus ojos donde me encuentro
en amor, bailando en sus pestañas
alzándola en beso
un continente despierto
un mundo y un océano
un hada y un cuervo
un día de mi vida
por si vuelvo
a la vida al viento le pido
que mi boca conozca su boca
y mis ojos
sean más que abrojos
mi beso sea tempestad
y mis labios fuego encendido
para encontrarla a ella
que mi cuerpo siga su estela
y para mi muerte
que ponga yo amé
y aún en este descanso sigo luchando
porque la volveré a ver y yo con ella
en amor estaré.
Me encuentro trenzando la flor de azabache
sí esa que llora la noche
por encontrarla a ella tan bella
cantan los cuclillos y los nocturnos grillos
se tiñe mi horizonte de jacintos
y yo a mi mujer la hago un nido
de pétalos de caléndula
por si vivo que ella sea mi flor
y al sol cantar nuestro elevado amor
sólo soy yo cantando mi epitafio al hueso de la luna
volviendo azul el alba
para que reine la noche sempiterna
y entonces volver a verla
encendida de traje de estrellas fugaces
es por ella por la que se eriza mi piel y corre mi sangre
mi caudal se llena con su amor
y almendros me acampan en flor
desde el verde trigo al verde olivo se mece mi sino
y es encontrarme con ella en un latido
al viento le pido viento bonito siémbrame en su pálpito
y así con el mío jamás verá un suplicio dormido
ojos de cuarzo corazón de granate
acércate te alcanzo una estrella
para que brille nuestro corazón en esfera
y esta amor no será una noche más por su azabache
brillará un reino para los dos
el cielo se vestirá de los más bellos colores
cuclillos entonarán sus sones
los murciélagos bailarán rasgando sombras
y yo amada margarita en tu flor estaré
pintando con mi sangre este amor de mi hiel
y aliento que juntó a ti no verá su desvanecer
y sí hoy es un día para luchar
por las ilusiones fugaces prometidas
mi piel encendida que con la tuya late
en la más tierna caricia
quedando por dibujar mi subrepticia
esta noche encendida
que dibuja y reina mi vida.
III
Amada te escribo mi piel en piedra
que este latido es más que fugaz de estrella,
viste y desviste mi vida,
el verso coagula mi sangre
hasta ser mineral de piedra cuando muera,
en este corral de rosas crece mi ilusión verdadera,
alzarte, rodearte, elevarte en mis brazos,
ganará a esta noche yerta,
tejida vestida en vilo de espera,
para ser yo el encargado de esta acequia
que riega con tus besos
esta elevada floresta.
Donde Margaritas cantan
que es por ellas que el destino nuestro se acuesta,
vivo para vencer este horizonte estirado,
vivo para vivir en tus besos desgañitados,
para sembrar el curso con mi sombra,
con mi divina fantasma que habla
como tú hablas mi amor,
mi amada,
hoy me raja la noche la entraña
para clavarme todo el polen
de nuestro amor,
nacarado, embestido, dibujado, anhelado, florecido
aliento por aliento,
sangre por venas,
hasta morir en tus piernas,
yo soy mi lápida,
esta primavera que comienza a avanzar,
resumo que coarto este tren
por lares insospechados de tu vida
hasta llegar a una Araucanía lejana,
donde se acuesta el sol con la tierra,
donde las nieves que lloran las montañas
viven renaciendo, bullendo, deslizando
manantiales de hierro y cobre
de su sangre de tierra y fuego de volcán,
viviré hasta que un abejorro siembre mi nombre
en todas las flores de tus campos,
seré dichoso orgulloso,
como soy en esta parca existencia taciturna,
por la que me lloras amor noches sin alba
por tus granates de ojos,
es por mis versos nacientes
que el cielo abandona la tierra,
para vivir siempre, por siempre y para siempre,
en tu sonrisa dulce, nacarada
porque yo nací amada
para ser tu primavera,
tu sonrisa verdadera,
y el hombre que dio su sangre
para luchar por su margarita
hasta tenerla en vena,
nadie puede ni podrá contra nosotros,
el tiempo estirará sus azules pétalos,
solo para decir:
Miguel nació, vivió, conoció
y dijo que su vida
no era vida si no podía entregársela
a ella mi flor
su única mujer de sus amores silvestres.
El Castellano
No tengo amigos ni enemigos,
sólo confío en mi alma y su capacidad,
el que alimenta su espíritu no teme al mundo,
deja que arda este en su materialismo,
en sus falacias que intentan dirigir la espiritualidad
de su ''dios'' personal,
yo encontré mi libertad
me baño en sus fuentes
para ser mejor en cada cosa que hago,
sin lucro ni ambición que no sea ser afilado como espada,
hasta cortar toda sumisión,
nada espero, nada quiero, nada deseo todo lo tengo
dejo que brille mi espíritu,
así es y será hasta el fin del tiempo,
del que coja su azada.
El Castellano
Iris de campo:
Adormidera pulcra entre la retama,
amapola esquiva sangre de la tierra
nacías lejos de la tierra que tú querías;
la fe mudó sus caricias
sobrecogido el triguero espárrago.
Serpeo el camino de Humanes,
el reino florido por tejer,
jacintos de botellitas azules
recuestan gramas del lindero
entre espinos amarillos del olvido
yo hablo con zarzamoras de rivera
del Henares.
Corrihuelas abren nuevos sentidos
bajo sauces y olmos viejos
grajean tordos la vida del endrino,
caracoles que trepan el abismo
de savia recia, dura.
El alacrán pasea la represa
cuando la araña lycosa encuentra presa.
Espartos y retamas
prenden su verdor al monte.
Cardos y cardillos de dama
tiñen blandiendo su horizonte
anual.
Cadillos invaden el yermo,
de hinojos y dispersos plantagos,
boquitas de dragón, perritos
que juegan con el viento.
Un ligero testero acoge raíz
a una flor de Odín
caléndula silvestre
flor de difunto que resiste
entre embistes de tiempo,
y heladas grises.
El Castellano
Si a la sombra canté:
No indagues el azar
que su relente tizna
a ojos indomables.
No luce la flor siempre
ni la casi viva yedra,
juventud y fortuna visten
como sombras huidizas
cual Escita sobrecogido
entre mares y el aquilón;
bebe de la fuente virginal
que la sierpe es honda vigía.
El mar de encinas
nos sobrepasa.
Las olas de tierra
son infranqueables
no vistas de alpaca
tu parda sepultura
los más duros son tierra,
el resto afilada ceniza.
Traspasa tu rienda
sé jinete de caballo muerto.
No dejes caminar a gusanos
cada cual busque y encuentre su lugar.
Por los siglos que llevamos
Nunca es bastante,
por amores dignos, pierde el hombre.
Aboco empeño que desafía
mi dorada, encontrada, mediocridad;
contenta ella sin miseria.
Azota el poderoso viento
mi erguido pino,
mi torre altanera jamás vencida
cae en estrépito para nueva siembra erigirse.
Júpiter dame ásperos inviernos
floreceré tus pies
con dignas rosas del atardecer.
No hay mal perpetuo
despiértame la musa de su sueño,
báilame la llama en vela recta.
Tiende el suspiro en el patio de mi araña.
El Castellano
Carne espectral:
Incauto silencio verde,
ignorando que la rosa
no ha muerto siempre,
antesala sin espera ni consulta
donde muerte pasea,
enorme llama en fondo de frío,
ojo helado fijo en labios ardientes,
enjambre solapado
a mis trescientos treinta y tres vidrios
de alma que gasto.
Hermosa ni roca te parió viva,
deshechas las estelas
queda asirse esplendoroso
al metal que ruge.
Mareas de afrecho
visten savias lloviznas
que avivan su verde intransigente,
ángel lánguido voz revierte
surcos en iris pervierte,
quedaba alto nacido del hierro,
el norte que soñaba el viento
fruncía de aojos la vestida noche
y su cenicienta espectral
de las maravilladas flores de difunto
acrisoladas en soles pudientes
hechos de silencio.
lúgubres hendiduras del sueño
y el vientre escamado
de la lagartija
que yo amé,
y seguiré perdido amando
porque yo existo.
El Castellano
Azares de lluvia:
Avanzo el día sufriendo con la luz,
escribiendo mi cuaderno
encima de una mesa de pino,
simple, ruda,
como ella misma.
Hacia el ocaso del nueve,
la cerviz descansaba sobre el rastrojo,
una carrasca enervaba sus flores de piedra,
era suficiente descansado el recodo,
abría el cielo un llanto
de llovizna asilvestrada de Abril.
Suave se esponjaba la oscura tierra,
la viborilla ahondaba su refugio
bajo la severa piedra,
era un tomillo afilado nuevo
de esta rigurosa primavera,
el solar lucía su verdor
de ángeles cazando lagartijas.
Diestro mi ser dudaba si llamar
al gamusino de escritura,
la cocina de baldosas
invitaba a merodear por algo de cafeína
era redondo el tiempo que alzar clavos
y unir galaxias sobre tejado de aspas,
un día cualquiera;
sin mozas en la vista,
era bastante y no se sujetaba mi pensamiento
de vanidades cualquiera.
Angosto trepaba el tejado de mis densas ilusiones,
atravesar raudales sujetando azabaches del cielo,
estirar la luz y bajar la luna,
era un puñado de estrellas apagadas
y volví a sufrir y endoselar cantando,
un reguero tieso de savia
y el vergel se encendía
clamando la desquicia
de que no duraría la siguiente estación,
sigo las ondas del charco
deslizando en él su solo reflejo,
rambla sin margen repleta
de esta lluvia sin cuartel,
un río me desquita de fluir
como lombriz azulada purpúrea al tacto,
es un recuerdo a mi río Henares
en localidad natal surcada,
un solitario flamígero pensar,
y cambio todos los lugares por ninguno,
que es lo mismo,
cimientos absolutos de oscura tierra,
en tímpanos calizos me sostengo,
como esparto del bronce,
y brezo desnudo sin soslayar herida,
el vals terreno me envuelve
y vuelvo a saltar el pretil gesto de Ostara,
anudando el ombligo de la tarde
con la ojera de la noche.
Förüq El Castellano
Son del ascua:
He venido por los sones sin tiempo,
resuenan todos en lo alto de la torre,
indico fiel muro
que acuartela voz sin muerte ni memoria,
bronce a lo alto,
pureza inmiscuida en áspero esplendor.
Risa sin agua, tiempo con sonido,
eternidad azogaba sin corazón
ni anchas calzas finitas,
el cielo cayendo turbado está.
Voz con muerte oí e hice caso,
penumbra de vendaval obscuro,
hálito perenne de triunfo en luz segura,
mi culebra, mi sola flor, un campo soterraño
armado en cantos, solapado,
viperina falaz un soto
al que me trasplante,
dulce miel de tosca celda,
filial que enmarca,
sangre sin latido del suelo terreno,
raíz de terrestre prestancia,
clavo instante, cabeza abajo
de la vida de este mundo,
tajo recto aguardo,
con la verdad profusa de cuánto he amado,
espiga de tinta bebiendo la luz,
de su ardor erizado,
crisol a raudo, puro odio,
eternidad sin voz,
agreste reverbera,
empapada en substancia.
no tendrá que aullar como los presos,
oh dignidad serena,
cuervos de muerte me caen los ojos,
reloj de alma y alba en despido,
como rubí dentro del zarcillo,
me senté en un junquillo,
y me entregó un zorzal su ovillo,
hiedra de espíritu suplicante
trepando quinto cestillo
mi torre anublada de hondo cielo,
sombras miro, me miran todas,
mi cántaro es como el de Dagda
ni fin ni repleto,
viaje eterno,
al encumbrar todo
de nuevo rocío.
Ababoles me cuentan
que todo se alza y rige
gracias a raíces primas.
Förüq Castellano
Tiempo en floración ruginosa:
Una flor que es flor
en mitad de tu tiempo,
floración que vino de raíz del averno,
escalando al cielo,
pluma en tinta
de servil vid de Ferento,
albor en cernícalo vigía
primo del vilano señor,
mariposa metálica que revuela
desde soto carmesí de tus muslos
desplegando su lengua furtiva por tu dulce
vientre de nieve,
corola de un silencio húmedo,
como si flor en palabra
nunca hubiese sido,
trampa de arañas en serviciales rosas
de la aurora más funesta, clavada la hora.
Curvatura morada de mi verde sueño,
corazón despierto o mudo
de grito sordo en el pecho,
amor de rayo empeño asolado.
venas en azur sobre tierra,
un destierro de la esencia intangible
al beso y ala vaga de sol minúsculo.
Rebelde en tierra resumen edificado,
sin vigilia feroz me despoblaba,
inmaculado fuego,
terrible y compasivo,
tú amapola,
crecida en luna de mi huero camino,
labrador de arduo sendero,
lebrela tú musa de mi gana acaudalada,
pez de hilo es este instinto,
a veces parco, a veces sumiso,
azul lento en flor de viento,
oval de campana tu concavidad en bóveda.
Mariposa negra que poema trae en ala,
gota de luz colmando el astro,
mariposa negra solar,
mariposa de muerte sembrando
orugas de vida nueva,
azur todo espejo,
de un tiempo que ya calla,
y todo frío, termina.
Förüq Castellano
Oda al Sol, musa en armas:
Gran Sol, gran hervor de rayos espadas
día clavado; tu iris sediento sanguinoso
en Vestal iridiscente en flamas a lo alto,
a lo alto brillas como crece el talento
sembrado en nuestro corazón,
rueda de fuego, Lugh en tu gloria,
germino toda dicha; padre de mi conocimiento,
oidor, de cuánto arte ha conocido, padre Supremo.
Escúchame mientras te honren este,
el día de mi musa en armas.
El invierno se ha ido, nos dejó atrás,
los campos están verdecidos y cantando en flores
que trae Ostara y su caricia de divina nota
de savia que escala todo terreno, y fríos ya lejanos,
Toda la tierra duerme en tu ausencia.
Incluso en los más oscuros tiempos
tu luz es el camino
para aquellos que necesitan un faro
de esperanza, de brillo, de sosiego,
relumbrando en la noche.
Tu esposa regentada por madre Luna,
buscando toda tu luz, toda oscuridad empuja,
La primavera está aquí, y días aunmas cálidos vendrán
los campos están desnudos y vestidos de celestial verde de lanzas
y el ganado pastando.
Encendemos estas velas en tu honor,
Regreses la vida de nuevo al mundo.
Mi lira te cante la sola noche que traes flagrante.
OH LUGUS
Solar y poderoso,
sol sobre nosotros, te pedimos
tu regreso al alma incendiada,
en virtud que te amima y habla,
que traigas a nosotros la luz
y el calor de tu vida.
Trae de nuevo la vida de nuevo a la tierra.
Trae de nuevo la luz a la tierra.
y aleja la saeta oscura que te retiembla la calma,
al alba más preciosa,
Maestro encumbrado
del arte que florece
y en nuestras entrañas germinamos,
nosotros los escribas
cabalgamos todo tiempo difunto,
guiados por tu sazón y hoguera de tu Honrosa Luz.
AWEN!
Diestro compás
en sol mayor,
bruma de idea socarrada.
Flamígero desdén;
congelado en ascuas
de fuego azul.
Horizonte sin prisas
que arrostró
todos los rostros
de abril.
Abre el nuevo fervor de tu luciente.
Y su solitario azar de relámpagos
de tu azur hermoseando,
enclaustrado.
Vírgenes encinas, y almendro de soto,
entre un nogal
dependiente de su sombra.
Al verdor de inusitados pinos,
me caracolea
la fronda del monte. Musario cerro desnudo,
Espino amarillo de mi dossier,
Caléndulas solariegas
que amarillean su silvestre ralea,
esposa complaciente de Sol naciendo.
Brilla esta infamia
de campo abierto.
A esta última lagartija
lanzo un baquio seguro,
sin disfraz ni apellido perenne.
Mudez última
de sangrada amapola.
Sanguínea tormenta
de dureza blanda
con agua de mi terco aljibe
obtuso en litigio de iris vespertino,
y su sangre que baila
el suelo terreno,
que en culto a ti Lugh yo beso.
Y avanzo como raíz de los dioses en la Tierra.
Hijo y sirviente de Candavmis dios del Trueno.
Förüq
Reflexión:
Como el Sol brilla en lo alto de los cielos,
es nuestro deber cuidar y hacer florecer todos los talentos,
y sus virtudes sembradas y habitadas en nuestro caduco corazón humano,
en y con manos de la divina Sabiduría madre de Superior Conciencia de Razón regentada en luminosa aura y amor a luz de rey Padre astro que otorga todo azar de vida en este planeta que dirige y domina.
El Castellano 29-04-2019
Sol ferro a tu gloria, compilación:
Voy por tus desangeladas, profusas luces.
Hierro que me tiembla la osadía,
oxidado resorte candente,
que afuello;
relamen linces del tamaño
tu dispuesta ternura.
Hirsuta ciencia tu tomo de tierra.
Acristalado vence marea súbita
de ojos realizados;
mi espada no luce marchita
afila latidos de mi corazón
ignoto, ante tu ser, casi desnudo.
Orando llegue revelado momento
de aspados dientes
y destellos secuaces.
II
Aruña mi tierra una vez más
como un grito en la vena,
como un gemido perplejo
que brilla el tiempo,
que empañó
tus vidrios líbicos,
atemporales, dispuestos,
sin margen, sin curva, ni acervo.
Saliva en aljibe de hondo deseo,
exasperado, irisando crisoles
que jamás marcharon;
beso y muerdo tus orejas malvas
profanando tu blancura primorosa,
en tus piernas gemelas, semi-abiertas.
III
Mis violáceas hojas marchas
raíces que maúllan mi calma;
profundo el zarpazo de amor
que me afliges.
Osadía acariciarte en destellatoria
entre vela y candelabro
avivado tu hornillo de espejos
supinales.
galvanizada garra llega
a arañar la puerta;
rumor de fiera vespertina.
Solo ante tu sosegado
siempre azul violín
que la humedad
de tu floresta,
nunca más virginal,
entona.
IV
Despierta, flamea nuevo cierzo
por tus sotos de rincones sedosos,
humedad permisiva blanden
al desnudar tus mieles
entre tu piel serena;
abejas mías
dejar que la flor duerma.
Corajes florecientes
en ocaso que el alba lanza.
Desde la luz del día
hasta dentro la oscuridad
más densa que late y envuelve.
V
Sus cerrojillos tersos yo beso
en esmero amilanado de erizar sus nervios
a flor de candor estrellado, navego que avanzo,
tus filos de rubores aplacados,
esta luna entre mi tierra y mi solferro
una vez que su luz perdure mi hierro.
Placer enarbolado, en lustre de acanto,
ya mi querer no es piedra rodera
ni de osadía alabastro,
fuera de la batalla,
tersura que gemía la espera.
Mi piel de quimera,
inimaginada senda,
es un hálito y su verbo
una escala y nuestra escuadra.
Al placer preso
de sonido extinto.
VI
Retiembla el agua
un haz sobre espada,
inabarcable sentido
sigue, ahonda fiel
su rendición
en estallido del tesón.
melodiosa sierpe
en un vals del gemido
secundando el alarido
sembrado en su interior.
VII
Fuentecilla parece mi noche oscura,
fuentecilla retozona,
y de verdes lamentos quejumbrosa
como sombra leve de mi pájaro piador
que acuesta a dormir su entraña.
Sombras largas que descubren
el canto los lisonjeros grillos.
Blancura y azabache descansa en la arcilla
el nido mi golondrina.
Al fresco respiro de mi chopo soñador
lanzo un severo destello argento.
Longevidad imperial cercenada
como retazo de persistente
carcoma manida a mi verde intelecto
grave;
embaucaría sin tenerla
todos mis instintos,
todos mis impulsos.
VIII
Canta , canta mi pena azul
sin ocre zozobra.
Abre el verde ramaje ,
a la espesura de mi idea.
Entre un camino serpeaba
como culebrilla de un destino azaroso.
El murciélago castellano
rasgaba bailando, ladeando
el cielo mullido
de levedad de colchón sin luz.
En sintonía opaca que rodeaba
y acariciaba.
El cielo abría su sangre a la noche.
Un sopor de estrellas
que en este invierno no tardaban,
y el rudo vigía ciprés soportaba .
IX
Bajo tenue luz de luna
que los sentidos arrugaba
y mi fiero ciprés de lanza colgaba.
Avanzaba por el camino
los álamos,
como un sendero
en cal de maderos cenizos,
rumbo al Valhalla.
Alumbrado , rememorado,
anhelado
por todo guerrero .
Era un olmo frente la tapia
de un cementerio
en Fuente la higuera.
Caminillos de hormigas dispersaban,
desplazaban los vástagos
de forrajes venideros.
El Castellano
Tangencial, severo, recto
a este sol ferro fiero
de luna pavorosa descolorida.
Rey astro de cielos huérfanos;
soliviaré su fervor
por albas depuestas,
hijas de rayos derretidos,
un eco del hombre resuene alto
en esta umbría noche
que sangre previa
ya desvaneció.
Campo de raices en negra visión
y viborillas temblorosas.
Carne y cuerpo de metal
es mi azada mordiendo la tierra.
¿Cuántos ángeles disolvieron el vuelo?
En son de la belleza tornasola
en quietud reverdeciendo
estas selvas de sombra.
La llamada del guerrero.
La llamada de su espada zorro,
a su silbido forjado.
No es lugar plácido tras la vida,
no es esto, es aquello,
a cuántos insultaron los cielos.
A cuántos a su alma sobornaron
llegado el cristal de espejos,
y su laberinto de reflejos.
Soles cromáticos de escalas
intangibles de luz,
y sus rayos acuartelados.
Llévame en tu estela irisada,
yo me mediré con el Rayo de Zeus.
De letal sonrisa azur,
bailaré sorteando su electricidad.
Acostaré, ceñiré sotos
de vientos arrebolados,
en espirales.
Apolo me dará su brazo,
pondré a bailar Valquirias
en la fiesta de los condenados
a siempre vivir.
El Castellano
Cuerno sonoro,
cuerno vivo,
cuerno hueco
brillo frío templado,
vive tu osadía la bravura,
osamenta quebrada,
viertes tu sangre,
dando brío a la fuerza,
tu luz no tiene rienda,
tu puñal me dio
vida,
y a Quoth el cuervo,
tu fiel agonía,
late, sangre fluye,
corre el lobo que soy
bailé entre serpientes
altura desbocada
he oído alzarse
almas bajo la tierra,
arde regio solferro,
oscuras alas blanden
sus filos de alba.
Regentan iris
la lucha que reinará.
Habla desde la leyenda
el origen de Iberia,
quién espantará
mis gritos entre ruinas,
desciende su poder
somos los otros,
canción de una piedra,
férreo el destino,
amplia senda
honro mis dioses
abridme el camino,
surcarán abiertos
libres vivos;
oda por esta tierra en llamas
por esta tierra en trizas.
Ahogarán alientos
bajo el dios del Trueno
ávidos guerreros resplandecen,
raíz de plomo
incandescente.
El castellano
Avanzas el campo
de mi irrigada sien,
cara por cara,
ojo por ojo de este abrojo;
Destino ciego de mi celaje,
bronco mar de trasiego
al broncíneo lar
encorajinado, nacido
de un pelo de un pelo,
rescoldo socavado
un acre sin pestaña hiriente,
vistas tras los espejos
para ser libre,
y enraizar este Sol ferro
que rehúye, desnuda las nubes.
Es un viento solar que me encara,
y afila mis fauces
que desencajan el tiempo
que ya marchó.
Pude venir a vivir
en la ola de luz serena,
el relámpago me alzó en compasión.
Pude renacer
pero no soy adorable,
desde estos acres
traigo
la flor de difunto
soslayada,
sembrado el tiento
queda resurgir del azabache,
y bailar sones de grillos
con sus raíces del mañana.
El Castellano
Magnánimo arrecido silencio
desnudado, su violín enardecido,
aromos fusilados, nacidos
en yerta conciencia,
y el férreo son amanecido...
Sangre belleza en pureza,
me abre éste el pecho,
sí bemol de opaco pío,
anuda mi clara secuela,
de ufanos clarines violáceos.
Afuello que venzo
mi claro oscuro fuego,
arrastra y consume esta tierra negra,
mi sangre y mi bandera,
esencia de una savia elaborada.
Soy el que abre
del nuevo árbol
un santo olivo,
que da miel a mi
reina madre.
Por mi árbol deshojado
en su nuevo muérdago,
troquel del inerte acto;
Parasitario.
Runas en sabiduría,
malvas granates de simientes,
simbología d'estesolferro,
oscuro y su cuervo.
En nogal con su nuez
del tiempo, abriendo,
desnaciendo la nueva era,
afilando su fragua.
Los balcones extasiaban
por sones al llamado
del vítreo tras luz,
trasnochado,
en ascuas cabalgado.
El Castellano
Oscura noche me cuenta
de su vítreo trasluz,
cabalgado por extenuada sombra,
es mi carcoma está despierta,
yo condeno a los que no son de su estirpe,
destellos malvas de luna,
ahorcan su compostura,
es por mi patio de la gris araña,
por mi tejo de flamas,
por mi fuente azul,
y mi jardín de cristal,
cuando yo me vaya seré tan chulo
que me recordarán,
este filo pulirá el metal,
el pueblo gemirá una hoz y un martillo de tierra,
hasta yo ser caléndula encumbrada,
avanzaré por los senderos del alba,
mi brillo será luz intransigente,
yo seré eterno como una piedra,
idependiente de lo que digan y digáis,
cuervo soy grazno por el sol ferro apagado,
yo voy que me siembro,
soy hecho de mis propias cenizas,
traigo muerte en vena cava
mi talento no acaba,
estoy tejido yo del miedo,
soy más fuerte que el desvencijado
alarido crepitado en eco de yacija
con su espectro
hablando en eco de su silencio,
me casé con la parca negra.
Vino a visitarme y la puse a dormir
en mi cama,
ente de otro ente soy
voz de alma
con voz taladrada dentro de otra voz,
tengo que poseo
dos almas en este mi cuerpo,
por eso hay sombras que no entiendo
en qué realidad me encuentro,
soy Förüq y mi voz seré encargado
de apagarla,
El Castellano miles Dei lumen
rey y señor de su castillo
Efímero corre el segundo sin saludar
sin despedirse, sin preguntar si todo sigue
igual, avanza la manecilla de mi reloj,
hoy es de esas noches yertas,
que descubro mi tierra que late
bajo mis pies. hay avidez
en el subsuelo donde la sangre late,
destartalados pilares que me alzan,
recorrido de mi alarido
que muerde al conocerte,
he oído estaciones correr,
mi carne se funde bajo tierra abierta,
frente mis ojos
nebulosas abren, crepitan,
he nacido yo de su flamígera ascua,
mi solferro blande su noble falcata,
dentro mi carne la vida bulle,
su caída resplandeciente,
toda carrasca me dibuja al dorado tordo
de este atardecer,
el murciélago myotis
me cuelga la idea,
desde esta ojera férrea,
hoy me comí el firmamento anidado
en tu mirada aplomada,
soy experto recio como un lobo,
frío de segmentos cálidos de hielo,
maestro de mi espada,
escucha el brillar de mi navaja,
yo soy descendiente del miedo,
ámame como se ama
sólo una vez,
en el que nuestro color sea la piel,
afilo el poder de este silencio,
y te dicta
que te volveré a ver.
El CASTELLANO
Quiero deslumbrar mi camino,
ayen de estas víboras que caminan,
palpitar el látigo enfoscado
de sedientos corazones.
Entre sangres fugaces afilo
esta vida en grana marcada,
deshojada, por cuanto he conocido,
más que tristes metales lascivos.
Caparazón este el mío inerte,
vestido de marzos seniles,
agota, coarta la esquela
de mi memoria perturbada.
Camino sin camino
por donde se oculta el este,
veo la flor que desviste,
entre pétalos su iris difunto, imperturbable.
Te construyo sin verja, franca,
tapia ni acantonado te hago
a imagen y semejanza del aire.
Que pasa y mira,
que mira pero no descubre,
que nací dueño de tu avenida.
A este sol ferro cuelgo agravios,
ofensas que desvanecen,
como la noche devora lo que es suyo.
El Castellano
No rebotan los tiempos llorando,
en escalas a ese cielo anhelado,
voy que viajo
y bajo mis plantas
la tierra brota, rehúye, fluye,
todo me alza
sobre torres sembradas
y sus trompetas abiertas,
desenfundo esta esencia
de estaciones correr,
hogueras profundas
en lágrimas de lluvia,
plantada mi compostura,
me crepitan las montañas,
los cuervos me rinden pleitesía.
Ante estos ojos
el ávido brillo
de oscuras alas,
frente mi carne
fuego enraíza
esta noble falcata,
encinas me enraízan
el dorado anochecer,
noche oscura
entre espectros de letras,
el día derretirá mis flores,
trepando mis venas de encaje,
mi azada será sangre
no más cuerpo y carne de metal,
al erizado filo
clavaré sentidos despiertos,
mi letra será invencible,
en flamante rebosante inspiración
parida de un rayo de sol,
ay la tierra que me clava la siembra,
ay sol ferro,
yo te hablo
al fulgor de venas
al calor de llama azul,
tú invencible
como la palabra te formó,
extasía lumínica
en candor de lunas aulladas,
ven a mi pecho,
te daré asilo,
desgrana este silo,
que mis manos hablen colores,
solo ante la adversidad
esta negra noche que huye
enjaula su oscura sombra
donde la letanía esconde
sus garras de cristal,
quedando repleto este umbral,
he oído llamar
llamar tus sangres de luz,
a violetas nebulosas
sin cauce
empotradas en sagradas espirales,
busqué tu vida eterna,
me contestaron inviernos
desmochando brotes extenuados
de tiempos atravesados
por tu espada eterna,
fuente fría
que llena dulce la fontana,
la vieja luna sonríe,
lo efímero será áspero y duro,
a la caída de este plomo,
se levantarán estatuas de barro,
tu lobo vestirá el sincero metal
por ser de hierro,
hasta su aullido de plata
a la noche sempiterna,
y sus enredaderas malvas,
campo este de víboras nacido,
por un surco repto,
y el alacrán me saluda,
soy yo tiempo olvidado,
resplandores
de este patio de grillos,
me cuelga la corona de caracoles,
por todas mis lumbres
abiertas
de caléndulas solariegas,
más que hoy
no espero nada,
porque yo siembro lo perfecto,
me responden sus voces del suelo,
al intransigente destello
me parto, me quiebro,
hasta dar mi voz
a estos campos
y sus sotos perdidos
encontrados en cada sangre.
El Castellano
Era esta araña
como un Sol ferro con casa,
era como un encontrarse sin despedida,
por qué,
porque yo empiezo esta obra,
camino destrenzo este campo,
me desmigajan a mí
sus flores extasiadas de difunto,
para decirme
que lo suyo es de todas las estaciones,
como hacer el amor
con azares alados y soldados de los campos,
que su simiente no es vida de un día,
yo digno de admiración
digo que me adopten
pues soy familiar
así no tenga savia
tengo sangre carmín
y mi simiente escrita
dura lo mismo que dura
la tierra sosteniendo vida,
desnazco de la hoguera
al crepitar del rayo luminoso
no soy como él invencible,
pero me cincelo mas recto y recio
que un hierro de carne,
soto-vientos atrás
las montañas hablan con la gente,
que sin ciudad no hay gobernante,
sin poesía no hay mundo ni creado ni
ni por crear,
más duro que los montes,
cabalgo esta letra
flamígera, extasiada,
al son de una espuela escrita en bronce,
digna del brillante metal puro,
para yo decir yo aquí
me he curtido y tejido duro.
El Castellano
Horizonte de la caída de este solferro
a reinar como una falcata de rayos afilados,
hondos ojos fijos en solariega planicie,
donde frías juegan moteadas las flores de invierno,
el reposo de la vida que se fue a dormir,
como un río de luz brotaba la escarcha,
un diciembre tardío saludaba
con sus manos heladas,
acariciando estos campos redondos
de cardos y caléndulas silvestres,
era un día de hacer manteca,
a mí el frío me hacía sentir vivo,
en este soliviar traigo mi espada,
pongo a sentir la tierra a mis versos,
que con cepillos de grama joven
se blanquea mi calzado,
viajo en mi mente
por el cuchillo calizo de la piedra
del caserón terruño abandonado
que posee mi padre,
rodeado por el fervor de pinos de monte,
donde próximas hacían nido las atochas,
a perdigones que son de la tierra
como la montaña a su roca,
cosas talladas puras como amaneceres
pulidos sin grises hojas,
ola rota mecen mis pasos
de un mar olvidado del que cepas anclan
sueños de vida,
del terreno en el que grillos esperan
el frío en sus agujeros
y su despertar para morir al acoplarse
a la melodía que teje la vida.
Avanzo en este campo de víboras
para ser yo como mochuelo recogido en su olivo,
como mis pasos gorjean las carrascas,
todo mi mundo reverdece
para mí siempre es primavera,
y mi bravura llora flores por mis venas,
hasta tener del cielo
la malva del alba
hasta trepar las yedras del profuso claro oscuro,
del cielo y su luna cuarteada de platas auroras,
me nacieron simientes silbadas,
y mis ojos enraizaron el campo.
El Castellano
DOCTRINA DE INMORTALIDAD:
Este es mi reino,
este es mi camino, mi elección,
devoción,
al uno, al Sol.
Mi guerra mi señor.
Antorcha de sola libertad,
reguero tu luz.
Camino de la virtud,
ascua perenne,
tu amada verdad,
forja de mi sangre,
destino atronador,
tu inmortal destello
iridiscente al alma en guerra,
somos los hombres muertos bailando
en tu corazón.
Clama esta nuestra Legión de Luz
un son férreo,
a lo alto los cielos,
Padre Creador te imploro mi humilde servicio
a tus Falanges cromadas de creación.
Alzo mi recia vida a mi sola espada
nacida y sellada por tu tesón,
En tus hoyos crepita mi dicha Sol Señor.
Tráeme que besaré tu Luz.
A ti rindo mis cenizas
y perpetuidad de alma.
Guíame amado,
a incendiar en reino de las sombras
con tu amor,
es mi reverencia, es mi servicio,
osar mi entrega al lado mis castos dioses,
Padre tú de ellos,
mi amor, mi Sol, mi veneración,
soy tu hijo,
destellado te amo,
desde albor cantado,
al origen de tu hierro en mi sangre.
Hoy es siempre por ti,
ángel en tierra
estruendo ciego,
de la vida de tu ceniza,
Sol dador de hálito exuberante,
mi campiña,
mi suelo y mi cielo,
mi salvación sólo tú señor.
Förüq Castellano
Cauce en rectitud:
Empeño asolado,
flamante compostura
en fanal infinito
de las flores del campo,
del ababol al dulce hinojo
diestro me dirijo hacia la suerte,
por coraza mi pecho,
por yelmo mi palabra,
un fiel reflejo por escudo,
es todo lo que pudo la armada razón,
es todo lo que llegó
al río de las almas de mis venas,
dulce estampa de agua,
a vid de trigo y girasol,
la novena estrella me cabalga,
todo oscuro linde de mi vergüenza deslumbrada.
Ojo de mi ojo, viva siempre la virtud del aojo.
Vida de mi zarza quieta, de cristal en espinas
que su hielo en sangre me temerá;
una fiel hoguera de rizada ascua perenne,
rastrojo al fuego de mi quimera, sola su verdad,
es mi sed verdadera,
escarpada cumbre del hombre,
y su dicha en esquela,
yo lato sin nombre,
allá donde el astro esconde;
sentencio a mi olvido
a no volver jamás,
a este recipiente
de sangre que porto,
que hace cumbre,
resisto aleatorio,
en este panal de esbozos,
me enraízo lejos de este mundo,
me desdoblo en dos dimensiones,
las vidas de un día que me enjuicien
que mi camino no termina, comienza cada día,
en seno de espiral armada;
montaña, yo soy la montaña,
el Juez Supremo ya me dictó mi sendero,
que yo me he ganado,
que yo he tejido,
y que las lombrices
sigan siendo lombrices,
que yo sé dónde dirigir mi vuelo
de cuervo poeta,
mi semblanza tejida
camina sobre una araña,
boca sin besos,
en cuarto umbrío,
me teje ella Litcher la llamo, a mi fiel araña,
un destino, pulcritud de estela alma,
un encuentro sembrado,
letra que complace mi tejado,
resbalarán las aguas,
mi navío fue llamado al negro puerto,
siniestro yo el comandante
sigo mi noche
que ahuyenta que se estampa,
mi letra quedará en mitad de tierra,
porque toda materia
es y será polvo de tierra,
un rezo y un ruego
para que sean iguales a mí
cuando me toque zarpar
al otro puerto blanco,
sin retorno cristalino,
ni rayos irisados.
Sólo un campo de zarcillos
y rosas caninas que destapan auroras,
semblantes del ser que fue alguien,
quien quiso ser...
El Castellano
Destello incesante Tornasola:
Sangre, pájaro, sombra luna. muerte en vaso de cobre, flor, estambre, lágrima, opacidad serena oscura, tristeza sola, destello incesante, contagioso azar inmiscuido, terco estruendo, vicisitud labrada...
Empiezo.
Desdén flamígero encorsetado,
en sangre de puridad, de alma o cristal en vaso
de alma y su terco sueño que era forma,
vicisitud o estela,
estambre y flor masculina,
luna de muerte oscura en yacija,
y su opacidad serena,
de argenta guillotina
cercenando al tiempo suelto y libre,
su oscura lágrima
de muerte en recipiente de cobre,
sombra y su noguera nunca ruginosa
de raíces en pulcritud de soledad de savia.
Esencia en vals superior,
como ninguna hoja se retira del árbol
sin motivo elevado.
Tristeza caprichosa como pájaro caminante,
y espíritu en captura de azulada raíz
azul hermosea la vicisitud labrada.
Pureza de sangre su única campiña
yerto sentido,
de tuerto ojo sembrado,
sonaba el repicar del taladro,
como un clavo hendiendo otro clavo,
y una astilla sacando otra estaca,
azar alado,
en litigio de iris sediento,
era yo como cristal
de transparencia habitada
agradeciendo a mi musa de agua,
su fábula del pájaro y la flor,
despierto otra vida
que empezaba a soñar mi vida
a partir de mi presente muerte.
Y su vaporoso candor de estela,
un tambor sonaba mi tierra
abría del suelo una lira sobre un arpa
conjugando resonancia crispada
en cuerda y engranaje maldito
como una peineta de brujas afilando
el violín destino, que dictó
que abandono, sin haber comenzado,
y empiezo sin saber continuar,
porque acaso
¿hablo yo?,
¿O despierto sin haber dormido?
ni conocimiento,
seguiré indemne acontecido,
sin dejar de ser correcto,
jactaros del libre
os hace más esclavos,
perseguir sin incendiar vuestra casa del mal,
os lloverá lo cosechado,
se ama la virtud
la bondad destellada hace arder el odio,
y este en contrario resta luz cuando se le ampara.
Förüq Castellano
Secuencia presa en ''Arañal'':
Plantado mi solo eco,
que abría mayo hasta marzo,
dictaba que hermoseaba,
amor en virtud.
De mi dama cantada,
versos sublimes encontraba
bañándose en el pozo de Airón.
Su edad rezaba mi ignorancia.
Evanesciera el susurro de toda lira.
Recuerdo vagando
que Apolo me deja solo,
y yo con mi arrida sien.
Derramo que riego mi pecho
y su yunque en vello,
me hollaba la fatiga de mi neurología,
y su esplendor se retira;
encanto recordaba de mi ferviente
musa de mis dos umbrales,
uno cuerdo, otro mejor.
Mustio el dolor se arrugaba la frente,
atónito que danzaba perplejo.
Invencible Castilla me aguarda.
De foráneos no queda ni simiente,
de insurgentes mi bayoneta,
don funesto de letra bastarda,
preso y yerto ahincó mi historia,
sepulcral victoria me retenga
de mi guarda, la Gloria.
Förüq Castellano
EXTASÍA FUERA DEL TIEMPO:
Operación cero,
preparado para destrucción completa.
Temblando ruido agresivo
supresores activos,
hostilidad caótica
controlador inactivo,
ctrl.alt.delete
mente eliminada,
extasía fijada,
dominación eleva la distorsión;
extinta clase,
energía nunca muere.
Raza real avenga el paso,
controla el ruido ahora,
real es terror en el hueso,
juntos:
-Guerra al error,
guerra en la boca de locura,
nadie viene a morir hoy.
Tropas de la luna
blanden metal oscuro.
Más duro que el resto del tributo,
pura luz sellada;
fase helada en un dos tres segundos;
vidas en el ojo de una aguja
sistema sobre saturado
dirigiendo bajo tierra,
era del resplandor metálico.
Mortífera debilidad
perfección dicta
destruid el defecto.
Vandalismo ordena
descanse el tributo enajenado.
Llanto de la guerra crispada,
sórdida esencia implícita,
tercera fase encendida,
fuerza canta
ciega su falta,
exterminio en vena férrea,
faroles dormidos
esperanza difunta,
cobres almas anidan
sigilo deslizado
por entes de éter.
Energía, niveles óptimos.
Conquistar y destruir es lema,
pasado rueda
el olvido del tiempo.
Es hora de estremecer;
por un alma disuelta en electricidad,
fase oscura dispuesta,
era lumínica comienza decadencia,
telégrafos disponen alaridos en cópula
sobre postes de pino muerto.
Escarpias frías
sostienen pensamientos,
nueva era decreta,
hoy es mañana tejido en fábrica
de herramienta llamada éxito,
ilusión en cadena
para realidad de quien la estrena.
vanguardia:
nombre femenino
1.
Parte de un ejército, o de una fuerza desplegada, que avanza en la parte delantera, por delante del cuerpo principal, o que se mantiene más cerca del enemigo.
"el escuadrón ganó la batalla gracias a la avanzada de la vanguardia"
2.
Minoría que extrema las tendencias ideológicas, políticas, literarias, artísticas, etc., de un grupo o movimiento más numeroso, o que anticipa las que después irán ganando adeptos.
"el cubismo y el surrealismo son dos tendencias de la vanguardia de principios de siglo"
sinónimos: avanzada
El Castellano 14-08-2018
I
Vanguardia
Oh vanguardia, tu azar,
no cabe en un hilo,
hendida, alzada,
de enhiesta flecha, clavada,
un ojal que surte grietas
en estas quietas esperanzas,
bañan y se bañan,
vuestras destrenzadas
primaveras.
II
Ocaso rendido
Ajuar del astro sostenido,
suspiro a media tinta,
del profuso, profano, pagano
horizonte malva y su abrojo lanzado,
clavado en el verdor
de mis silos,
otra noche traspuesta,
que se me escapa
por la rendija, entre barrotes helados,
de mi cortina.
III
Cañaveral prendido
Ríos bajan, dulces aromos
al frescor de albas derretidas,
fluye, vence su iris de plata,
espumas de blancos chopos
cabalgadas.
Frente de húmedas azadas,
lágrimas saciadas
del verdor de campos
cual guadañas,
y su casa será eterno sollozo
de hadas.
IV
Canto enterrado
Por ti mi alma,
cuervos rinden pleitesía de negra ala,
acequias no son grises yagas,
yo quien te da sangre,
tú mi hoguera que ni quimeras
alcanzan,
rendida jamás,
me alzas mi palabra
por cielos de espinas labradas,
siempre te quiero
verte florecer en este jardín de rosas
tus lindas alas,
de esta espiga te traigo la caricia,
de esta vida mi tiempo fusilado
sin despedida.
V
Soterrada vía
Alza resume y coarta
mi acequia verdadera,
sobre este famélico tren de espejos,
danza mi brío con fuerza e ímpetu
va que viene , desgasta,
la rienda enroscada en la espuela
de mi saliva verdadera,
como un azote de la noche
y su vieja escuela sangrando yagas de luz
silenciada en el regio hastío
de este rey lucero descansando su frío resplandor,
entre sus corajes sembrados.
VI
Sol de cristal
Oh lugh, invencible al crisol
de tus lenguas travesadas
fiel carrusel de rayos sin secuela
de su rizada espera,
blanca luz de tu vera,
entre compases que hielan,
a tu vespertino canto derriten, despiertan
tus mil llamas liberadas,
desnaces a la noche que aguarda,
oh Sol de mis soles,
acoge este iridiscente canto
en tu seno en mi pecho que te aguardo,
al fragor de serpientes frías,
al valor de fieras enardecidas,
bajo y bajaré para alcanzarte.
VII
Bocas de espuma
Libero ásperos aguaceros, vientos
de mi pueblo desierto,
me conducen a verte
mujer de flores entre horizontes
que escapan fugaces,
entre olas de colores,
yo con la ineptitud de estos antaños,
míos, dulces, inconclusos, repletos
en vasija de dolor sabor hondo
y alegría elaborada,
en campañas de etéreas travesías
donde el final eres tú,
un pétalo, una fuente y un ovillo.
VIII
Libero el nueve
Osadía de cerrojillos ciegos,
entre brillos asmáticos del corredor,
por este aspa, por este candado
vendo que regalo mi dicha consumada,
ojo del buen cazador,
matemático placer enjaulado,
por ojos abiertos,
por un pañuelo, donde secaba lágrimas
la hilandera,
destino abierto a la única primavera.
Afilaba surcos de hogueras
al final de la contienda,
mi letra y la parca efímera,
como pez en tierra.
IX
Del famélico trigo nacido
Reza que escapa, su luz en una botella,
al ocre deslizado se abría,
un parpadeo de la espiga,
un estupor que abriga,
y la rima fácil de tonto día,
liberarse puede de toda sangre
y ser hasta arena de la tierra,
de la espiga venidera nacido,
sólo al astro entiende,
desmenuza sus cuchillos,
afila su vida como aspa
enamorada de su tierra.
El Castellano
I:
Mitad luz,
mitad descampado oscuro
hondo esquivo tajo rutilante,
se besaban dos sombras
apuñalando su violeta.
Dulce, postrado
de retina escarchada.
Vida de una vida asolando.
II:
Fragor de estallido,
por almas crepitan su sentido,
angosto al paso del tiempo
en calizo terreno despojado,
dueño de la tela
y el vellocino de esta araña.
III:
Dos muelles se querían,
sobre silla dorada
saltaban alto como el nombre,
dando de sí la extensión
del aire.
IV
Infinito cerrado a solas,
desdén consumado
del colapsado ocaso sembrado,
vida de tu saliva que fluya,
fértil lluvia bajo mis pies,
piedras y su aliento perpetuo,
estrellas levantan.
V:
Cristalina de fuego
que deshace frentes
purpúreos ojos dementes,
descubierto haz
soterrada esta desquicia
yerta, iluminada
de visión clara.
VI:
Vorágines de trasiego,
una letra en la hoguera.
Sangre de mi quimera,
abre llorando
que blanquea
su nueva tierra.
VII:
Ensordecida siega
del mañana;
sudor que acampa,
espiga y su filo de alba.
VIII:
Perdida media noche
al furor de candores,
esquiva levantaba
por cuantos resquicios,
su soledad habitaba.
IX:
Hilvanando suspiros
en rejas, rectas porfiadas,
sus ademanes suaves creados,
flagrando ajuares disparados,
supervivencia temida de la caricia.
El Castellano
1
Erase una noche fría
de invierno.
Las lechuzas estaban recogidas,
lluvia caía al suelo,
la niebla y la bruma
eran intensas,
sólo una sombra caminaba
por la calle,
era la muerte.
2
Cuando la luna sale los vampiros
y los murciélagos están cazando.
Era la noche yerta,
los ataúdes se abrían,
pero sólo
para que entrasen los cuerpos
de la epidemia
que asolaba a la ciudad.
3
La vida del gusano Juan
era muy sencilla.
Él vivía dentro de una almendra
y tenía suficiente comida
para hacerse adulto
y hacer la metamorfosis
a los meses siguientes.
La hizo y nació
de la pupa un hombre
con vocación política.
4
Era la noche
de los gusanos
todos estaban bebiendo
licor de hojas en la cantina.
Pero un escarabajo encadenó la puerta
de la cantina
y la prendió fuego
con todos los gusanos dentro,
los escarabajos
recogieron la carne braseada
y tuvieron despensa llena
para pasar el invierno.
5
Soslayada la flor del cielo,
abría los caminos de la vida eterna,
una polilla como una hoja de adelfa
caminaba el cielo,
corrió hacia la luz estrella
con ímpetu y brío
hasta estamparse en ella,
se formó entonces
el hueso de luna
que todos vemos.
6
Era una noche
de cristales rotos,
los lentes míos cansados
reposaban sobre el escritorio,
miré al espejo no reconocí
al que estaba sentado,
pregunté ¿Quién está ahí?
Aturdida contestó una voz:
Soy el que nunca serás,
porque siempre has sido yo mismo.
7
Eco sordo
en alta voz
resurgía
entre la ceniza de su cigarrillo,
no tenía manera de saber
sólo apostaba
al nivel de la montaña,
quiso conocer
pero una mala oración
se llevó su tormento dulce
a la entraña del frío áspid.
8
Belleza si acaso estuvieses forjada,
quién sería tu padre
quién tu madre,
inconmensurable
por infinitud de sendas
ella abrió sus párpados
viendo su reflejo en el lago,
sólo de la impresión
acudieron todos los peces de colores
a besar su imagen,
llevándola a su profundidad.
9
Se retozaba
por acres difusos,
donde vuelan
polillas de las tierras,
de una flor
nació una polilla de cemento
con la esencia
de las ciudades
que dijo la oscuridad por poder
te puede pero la realidad
es que me supera.
el Castellano
I
A ese mirlo, mirlo único;
Córvido negro de profundo ojo
que picotea y escarba mi idea.
Que crascita su estirpe,
dejadle mi patio cada mañana
rubor de cristalina ala,
sólo hasta que no me queden ideas
que son como lombrices cristalinas
nacidas del agua de mi frente.
De esta enjuta tierra me camina
el alacrán.
Un campo de sierpes y torcaces
de grises ceños al ocaso del día
que entre mantas y saetas
se acuesta un sol ciego.
Audaz mirlo que ahuyentas
mis espadas.
Tordo entre espinas arreboladas
haz que se acueste mi mañana
bajo tus alas.
No me destrenzará la osadía
temprana, ni el día terminará
de llegar.
Tu risueña pitanza en corvo pico
ultrajada; Vine por tus voces
desenterrando abrojos y señales
uniendo el fin del día
con el fin de la noche
como tú quiero vivir,
termina mi idea.
El Castellano
II
Brota la rosa furtiva,
hinojos al fuego de sol
expanden ojos viendo
inusitada encina que me respira,
por ende se agita el olmo secuaz,
avanzo el camino de los cardos densos
todo lo que veo crece sin más importar
ababoles en rojo granate tinta
de tierra sin despedida
sangre en vereda en verdad
al chopo viejo defino mi ida
abrojos difuminan la verdad,
enclaustrada savia la reverdecerá
esa que llegado el verano desvanecerá
crepita el suelo en color
añil el canto, digno encanto
se viste de espiga
a la malva tornasol
escucho la súplica
de toda espina que mece mi vida
reposa el colorín
por las margaritas abiertas
nacerían mis te quiero
y los molinillos al viento
acamparían el sentido
y el aliento silvestre nacido
al estramonio seco
canta su renacer de simiente
para el verano y el otoño
brotar sus trompetas de los ángeles
en vida y fulgor
por la ortiga que su hoja pincha
mecería mi vista
con el poder de acariciarte
el pensamiento
por más que avanzo
el cardo llena mi visión
el camino sin final ni retorno
lleva a encontrarte
por los cuclillos nacidos
por la cepa de vino
por el olivar vetusto al sembradío
acampa y despliega mi sino
de trigo y centeno visto
la acequia mi sangre lleva
con el fin de inundar los campos
de mi verso que es mi sangre
diestro compás de espada
lleva la cicuta
al brotar de un cebollino se muestra
fiel la floresta
por el ciprés que los muertos vela
se duermen los siglos
y la morera dulce torna
al trinar de pardillos
visten los castaños de indias
hoja nueva
el umbral silente cocina el hueso demente
a la vista del Sol
la lagartija está
el tragopogon luce su flor
para su posterior de su simiente dispersión
hogueras cándidas al sol
tienen las caléndulas arvensis
en su flor
siendo flores de difunto de los caminos
por la que los muertos bailan en su luz
del pino avanza la procesionaria,
mientras violetas nocturnas
dan nombre y honor a flor
los plantago que tienen su flor de su espiga
fieles estambres enamorados
de la vertical caricia
ven llegar sus soldados alados
infinitud de vidas en color
con flores regadas por la primavera
que mi sangre y de todo lo vivo
altera y mece en alegría
y sutil caricia de vida
su fiel avenida
del sol y la sombra nacida
lluvias despiertan el sueño
de toda simiente caída
brotando mi vida en lluvia
de este abril que tardío marcea.
El Castellano
III
TORDO ACOMPASADO:
En el océano de este mundo
abierto al cielo,
vive el cuervo,
por el desvencijado respiro mío
avanza, mece y sostiene
un tiempo en réquiem de espadas,
por aquellas voces que sordas
laten, se descubren, alzan,
se quiebran al paso de altares de hueso
por mis atardeceres de murciélago
voy ciego al calor del astro,
siente mi caricia de pájaro
esta vida en un verso,
alzando nuestra luna de acanto
y alabastro gimiendo el ocaso,
azabaches ensortijados, derretidos, extasiados
por el sendero despierto,
por el cauce que trae la vida, la mía,
ojos en resplandores dorados al tacto
de mi astro soslayado,
mi azar es sembrado
vida de vida
late esta caricia
no hay retroceso ni regreso
todo está bajo tierras germinando
por la rosa de su pelo,
tu sangre me colmó en beso,
nuestro cielo de amarantos
fiel al respiro que alcanzó a ver
la belleza en noches de miel,
respira abre en ambrosía mi vida,
en este horizonte dormido
quiero ser de la piel resquicio,
que no me sientan perdido,
quiero ser Siempre tu sonido que acompasa
que clava olvidos
en despertares rizados que consumen
la retina y sus astros,
todo lo que anhelo es la verdad en silvestre flor,
tu eco alto que no hay pájaro sin nido,
esta noche será distinta,
el comienzo empieza ahora,
mi sueño de araña
que todo lo tejido
recompensa trae a lo sentido,
un avance de mi sangre,
ven al nirvana del ruido,
anticipa nuestro solsticio,
Yo que amo en mimbre de esparto
y verde espiga de trigo,
fiel comando el suplicio
de los valles de mi sombra
displicente, enamorada.
Encumbrada.
Sostenla, sostenme de la pestaña,
me nacerá un alba,
marcho, a través del hielo,
su azul en la mirada,
estoy sembrando mi escarcha,
y que venga y queme
este laborado tiempo,
que yo nací del viento,
alguien está llamando
oscuro este romance entre las malvas del cielo,
se escucha mi nombre,
tengo que cerrar este hielo,
colgando mi estampa
del árbol de las cenizas,
y que nazcan ojos de tierra
de este hueso,
que seguiré soñando
que fue sólo eso
un sueño en despierto umbral
de mi alma y su protectorado.
El Castellano
INVERTEBRADO; ORIGINAL 7-09-2016:
INVERTEBRADO, REINOS:
Lámina del cielo
tu gris en estiaje
ángel del cielo teje
macabra sinfonía
lluvia se derrama aplomada
por su guiño de ala,
por venas cavas, su quitina,
estrechas vías consumidas
en atroz entrega
del mensaje del cielo,
sangre de tierra en zigzag,
río de caudal
por arterias de arañas,
por acariciar la flor del iris,
un barco y una vela
un puerto y una quimera,
una vida de aciaga solar siembra,
verso saciado cabalga
el colchón etéreo del aire,
hasta anclarse en valse,
sueña el viento ser capturado,
atrápalo en tu mano
y en la otra derrámate como gota,
precipita tu esencia bebe del cáliz
la yaga de nuestro vino,
infinito remansado en cuña de estambre,
es un ojo de tierra,
es una espera,
una inmortal fáuce,
la canción con la que bailan las flores,
un cariño de flamígera estrella,
un armazón dorado de escarabajo,
una casa de caracol,
ven, ven conmigo soy aullido,
una entrega de cuarzo llorado,
un cuchillo de sílex afilado,
en el trillar del campo,
soy mis venas naciendo en un charco,
un sorbo y soy fuego en tu mano,
gimo y corro el vasto templo
de mi perdida religión,
viendo el devenir venir
cruzarse, deshacerse, alzarse
para acabar siendo tierra
del inerte azar profuso,
mi tinta se bebe un rayo solar
en patita de un caballito del diablo,
mi vaga libélula de mi suerte,
para que siempre viva
esta hormiga león
siendo mi cosecha más que tus besos,
más que tus rayos de sol,
siendo yo del camino y el camino ser de mí,
irisada vida en son de mis tambores
de insecto tejiendo, volatilizando lo inmortal.
El Castellano
Mariposa nocturna,
amiga de las noches
que escapadas revolotean en las luces,
mariposa blanca, blanca nube, blanca muerte,
cristalino rastro,
polvo de estrellas,
Transmigración de las almas,
Vuela mi conciencia,
descansa y juega con mi luz,
esta noche mi alma es tuya
blanca dama alada,
avoca tu perdición en mi sendero,
olvida tu atracción lumínica,
las estrellas nunca se pueden alcanzar
bonita ni la luz capturar.
II
Canto carraspeado, estirando el calor
por surcos y grietas de un rayo solar,
termómetro yerto, estirado
de todo espíritu muerto,
rejón de grados tu cuerda de cigarra,
cada simple vida de la nota sujetas,
por un campo que haces tuyo cantando,
que necesitaste medio siglo
para florecer en voz,
al viento que te dio garra
y cimitarra,
tu libertad es incuestionable,
agarrada a un profundo horizonte,
cuando el astro rey hierve,
tu crascitas el canto de día
porque la noche te puede,
para el relevo del único grillo
que afila el cuchillo del silencio
su fiel gemido sin nombre ni reino.
III
Armazón de quitina, acorazado
capaz de avanzar con sus patas, guardando alas,
escarabajo de todo ámbito y lugar,
tan variado como único al mirar,
desde la flor al desván,
tu vorázfauce desde el árbol a la flor,
desde el desecho al coraje vivo,
suerte desde el descender de tu larva
al evanescer de tu metamorfósis,
azar profuso reconocido en belleza de tu carcasa,
vida de calma y pulcritud,
apetito que no cesa,
muerte que no detiene,
ni elemento ni realidad que no ocupes
del reino animal
Rey insecto desde Egipto a Castilla
con su gorgojo de la encina,
desde un continente a ningún lugar
donde no se encuentre tu nombre de Escarabajo.
IV
Cuatro riendas aladas
un mundo asesino de ojos,
corazón en pareja,
planear infinito por umbrales de luz y agua,
un reposo de la noche en un ser vivo,
colores de osadía por los que la belleza pinta tu cuerpo,
caballito del diablo,
libélula zigzagueante en esfera de mandíbula
espuela infernal del ser que acechas,
mensajero del cielo,
astilla con alas de la puerta que abre la vida.
V
Ambrosía de ser vivo sagrado,
oficios y tareas consumados,
albañil efímero tu dicha de genes elaborados,
quién a ti te osase,
tu esencia tu labor de escuela,
miel de tu panal donde forjas hermandad con la Flor,
tu tejer de los campos recogiendo,
siendo supervivencia de casi toda planta
tu legado Hymenóptera familia
tanto depredadores como recolectores
abeja que ante el peligro osas quitar tu vida,
en defensa de lo que amas.
VI
Reina araña de esta tierra de conejos,
ocho patas acecho de los campos,
maternal hasta llevar tu prole en el lomo,
araña lobo capaz de enfrentarse
con el alacrán y siempre ganar,
al acecho desde tu madriguera,
un hoyo donde vivir a la espera del despistado,
tranquilidad serena te sujeta por ser de tierra
tarántula lycosalycosa.
VII
Danza mi alvéo una sonatina
de hormigas famélicas
quieren alimentar a sus reinas aladas,
con semillas danzarinas
en busca de su nueva vida,
yo margarita quiero mi vida contigo,
para alimentar tu alma con versos,
nacidos del fuego en fundición de verbos,
recorro tu existencia
de la que soy tu hormiga león
del signo que me vió nacer,
la constelación del cisne,
quiero que sientas orgullo
de que soy tu hombre
asi no te dé un libro
te doy sangre para que escribas trece,
has demostrado belleza por tu fuente,
me verás eclosionar de mi etérea crisálida,
mi motivo para escribir a la naturaleza
descubrirás porque soy animal de verdad.
VIII
Muerte disimulada, hasta detener tus funciones vitales,
antiguo ser en evolución detenida de insectos primeros,
ágil correteas mis pensamientos,
muerdes mi azúcar desvelada, habitante de las sobras de cocina,
habitante donde haya humedad,
como un río que habitas corriendo,
como lepisma pececillo de plata,
tu longevidad mayor que la de un gato,
destello de que lo tuyo es perpetuo.
Moscardito IX:
Me besó la mano,
era muy cariñoso
eso fue porque eres bueno
moscardito lo es más él sólo pica flores ni lleva veneno
él sabía que siempre he querido ser de su raza,
amor mío reencarnarás si lo deseas,
osado aquel que posee su vida
sin preocupación suprema
que no sea picar la flor,
ser soldado alado
dueño del mensaje del superior,
visitar las plantas que Dioses sembraron
con ardor, difundir la supremacía
que trae y lleva la vida en caricia,
cabalgar los vientos a merced,
ser transeunte de florestas y campos encumbrados,
llevar mensaje a cada flor sin despedida,
enamorarse de la despensa de la primavera,
besar sin cesar,
amar sin dañar,
tener condición
para seguirla de por vida,
yo rezo cada día
que si muero yo renazca como moscardito
mosca abejorro que hoy confundió mi mano
con una flor,
amo como él la flor
porque antes fue ella que el animal,
que soy yo,
cuando nací ella ya existía
con su azar de conquistar la tierra.
El Castellano
Rosa de los tiempos:
Verde rosa proscrita
abre del tiempo verdades
que inflaman la oscura noche,
al flamear del angosto
su espina cierne,
hojas del tiempo se cierran
rizando, caracoleando
una espiral malva,
vetustos testigos
estambres del fuego
y de las sombras nacidos,
osadía violeta
entre raíces de siglos,
ascua que arde deseos,
crepitan pétalos
encajados, una realidad
sin techo dorado
firmamento anudado
por cuanto ha conocido,
no llegó su marchitar de brea,
guiños al viento descubre,
mira y se sonríe,
en aquel diáfano cuarto
de estrellas sin encarnar.
Claro oscuro de su prendida suerte,
alumbraba lo inerte,
entrometiéndose por rejas
de momentos tenues,
sotos sin hueso regentaba,
vagos lindes sin estatua,
ni otras flores
que su belleza empañaran,
soledad perpleja del devenir,
aguzada torpe sin rostro
ni desdén devorado,
clama silbidos
que colman de noches
y sus vestigios,
abriendo estelas
tejiendo sus casitas
de arañas que flotaban
como lunas tendidas
del techo de su caverna flor.
Desnudando tristezas
llamando al oro
del alba
y su recto oasis de Sol.
El Castellano
Flagraré tu ascua:
Ven poeta a mi yermo,
arcano es este sentir azabache,
descubierto entre álamos
que blanquean
y un sol oscuro de invierno,
un sol muerto con hoyos crepitantes.
Que nubes negrean su muerte
entre caracoles de faroles
y luces difusas agrietadas,
por adoquines ermitaños.
Ven vida a mis flores rutilantes
umbra fragorosa de sombras de nubes
por corceles suaves te escondes
por hormigones de leche
y sus canosos cristales seniles
tu polvo de estrellas viertes,
más de lo que he perdido eres;
voy soñando mi linde despierto
cal entre cantos de espera
entreabiertas sus esferas yertas.
Estas calles de diciembre se encienden,
como perro ladrando de noche,
mientras tanto te busco, luna dulce;
entre tus mieles luminosas que viertes,
entre cuchillos yertos de asfalto que florecen lágrimas,
y gravas secuaces al fervor de silos yacentes,
el soto mío perviertes en aspas de nueva lumbre,
los edificios suenan
a nanas sonámbulas, con tus pasos desangelados
camino mi azotea,
mientras tus altas ojeras cuelgas.
Una fosa es mi palabra,
que soterra ideas
cual tordos que grama escarban,
verdes espigas, es un perfil angosto,
espolvoreado,
pudiese yo retornar al otro lado
y seguir indemne,
acontecido del suplicio investido
no lo sé.
Mientras seguiré crujiendo
sonidos secos, ellos que ululan, descorchando sueños
en vals de toda carcoma del sentido nacido,
su río desangrado de flores que fluyen
de sentidos dentados en haz purpúreo
y su afligido azar de venas razones,
yo te busco luna por cuanto yo he conocido
por silos de arena blanda,
por coches y entramadas inertes
que jamás desvanecen,
por cristales hirientes
y su reflejo ámbar,
tu idioma secuestrado me desciendes,
días festivos danzaron huyendo
como ecuaciones de estorninos
jamás fugaces.
Terminaste de escuchar mi ruego
sin escapar,
te escondes cuando te busco
entre verdes ramas ,
y violetas flores
bajo luz de oscuridad
artificial ciudad,
edificios que no aúllan con el viento,
venas roídas entre encajes grises,
capas de noche humeante,
por cuanto he conocido,
por cuanto he huido
para encontrarte.
Mi flor de tormenta irisada
mi éter y su magia soslayada,
un torbellino sintiéndome en la luz,
madre de toda penumbra subversiva,
no sé el por qué de lo sentido,
un silencioso ruego,
no puedo ayudarme,
sabiendo quien eres.
Relámpago asido soy
que ama verdadero sólo una vez en vida
una vez para siempre,
una vez por todos sus destellos afligidos,
lo sentido es más que un carrusel de estrellas,
más que tu sonrisa venidera,
he perdido venciendo,
ámame como una luz parca y efímera,
como un estruendo en mitad del fuego,
he venido a vivir en tu yacimiento de pecho,
deberán desenterrarme
cual raicita en tu vientre protegida,
hoy es por mí porque siempre es por ti,
imploro piedad me brindes mi poema solar,
serviré aseguro a tu ser
dama de mineral candente,
por los tiempos difuntos,
porque usted valora mi terco empeño
de soslayar nuestro verbo,
arrullando en comunión de astros
tu tez en piel serena, tu miel de dioses dispuesta,
parto de un respeto que no cabe en mi pecho
señorita de once umbrales que quebraste,
no figures límite,
por no tener yo, no tengo ni vergüenza
será abanico de mi pluma esta entrega,
sirviendo, disponiendo,
su munición en una letra
omega fin que es principio de causa,
de señal que aguarda la vuelta al comienzo del sentimiento,
y su fiel tormento nacarado,
volviendo a comenzar, conociendo
que el camino no lleva retorno.
Ni opción a besarte musa.
Sólo amarte como platónica ascua ilusionada
por quererte y admirarte
como el alma eriza
al leer tu esencia
mi doncella escarlata.
El Castellano
Grillo IX COMPLETO:
Clareando su lividez
por sotos vastos, reales,
mi río navega.
Soliviando su bandoneón
dirige, blande mi grillo
el afilar de su tercera cuerda.
Entre el suelo de un ciprés enhiesto,
rigen blandamente espigas rojas,
jóvenes, juguetonas
como si tuviesen sangre
para sonreír
al viento que pasa
y no atraviesa.
Reposa que aguarda el cráneo
la tierra.
Ay la tierra, hay de ella,
sombras que complacen y acervan
la mansa espera.
Soliviar vetusto
que Ninfas y Sátiros pastorean.
II
Es un tejado llorando por la piedra,
con acequia desnuda de canalón;
un cimiento que plañe la helada,
y le agrieta el tiempo que ya no escapa.
Sauce triste, abatido, con portón
al mundo del grillo.
Entre blanda grama
fenece que acicala su alma.
Entre un arpa estacional,
y panales de ambrosía.
A la lluvia primera
abre su fiel Parnaso devorado
entre caracoles sonoros.
Grita la raíz acrisolada en ámbar
de intelecto mayor.
Cúspide de serena esfinge,
y dolmen de divina pluma.
III
El grillo único pidió un deseo
al manantial eterno de Hipsípila,
y fue no sucumbir
tras el acople, todo sonó
en manantío, y lo inerte
reposó su voz, de nuevo.
Para siempre.
Soledad dantesca de umbría
melodía, extendida por el Baco imperio
regentado por el claro de luna,
donde fluía su sangre de luz,
rojiza.
IV
Solar afán, solar entrega,
llegas que dictas tu pertenencia;
tu arraigo de hiladora,
hermana de negro hilo,
traes que cobijas mi jardín florido.
Mi grillo luce de nuevo
su primavera luciente
en lira de su candor de estrella.
Es su centígrado
que tu lustre musa engrandece.
Un solo marcó el ascua irisada,
por su reposo en madriguera;
un deseo concedido él cantaba alegre,
a su musa del Alba.
Albilla más hermosa,
clareada sólo por sus pétalos de mujer fecunda.
V
Era un patio sombrío
con mi vena de acequia reverberando.
Un jardinero a la araña de su rosa;
la protegiera,
la cuidara como besaba la luna Sempiterna,
con tus labios de mujer serena.
Desliz en nácar, pétalos de tus falanges me hablan, marcando,
asignando, el vívido resplandor
envuelto, aterciopelado.
Envolvió mi vida, tus latidos flamantes
de estela considerada.
VI
Avancé mi yermo,
con mi grillo en mi bolsillo,
divisé en umbrío, frondoso parral,
mi secuela descendiente,
Hipsípila me protegía.
Pude abrir una nota
al astro mayor,
de armónica congelada.
Desnudabas musa mi latir
que sólo su premisa abarca.
VII
Ahondaba que saltaba,
el ímpetu de carcoma cromada,
al resplandor de su tacto,
y quizá su matrimonio
en unión con su oscuro astro,
blandía a la séptima sílaba,
luna que busqué por sombra y abismo
en esquela.
Era un disparo y azogué
lo que el cosmos me negaba.
VIII
Fui dichoso, me enaltecía
mi soledad pulcra arrebolada.
Espejaba ella el vestido a mi mujer verdadera.
No brillaba mi sola desquicia,
era lugar y tiempo suficiente;
para ser de la tierra enhiesta espiga.
Ella mi única amapola
Reina del jardín de Hipsípila.
Un soto y un llano;
desperté del bolsillo su oro trasnochado.
IX
Blándeme Oscuridad,
en tu acero,y ala de pecho.
Que canten azabaches
tu magia del cinco
labrado este año.
Afortunado avanzo mi pulso
por candelabro este mayo.
Mi cenit por rectitud
del alma mía.
Un último acorde y me encontré
en la pluma tu arpa,
mi Ninfa que obligas no fenezca
el grillo que me da frenesí.
El Castellano
Aderezada estela clara,
poema reeditado 15 de mayo 2013:
Indómito palpitar entre noches
que dibujan tu silueta,
y aguardan mi renacer del asfalto sembrado,
entre suspiros que exaltan tu belleza invernada.
Fiel de caricia acuchillada
carmines sedosos te recorren que acampan.
Recuerdos del frío
que te tenía yerta, a mí abrazada
como somnífero azar indeleble,
Cada caricia que sentía tu piel de flores repleta,
cada beso que sentía la lluvia nacer de tus labios.
Ahora es tu sombra la que me guarda,
la que en cada sueño se acurruca en mi almohada.
Es tu mirada algo estridente, es hoguera
que ahuyenta mis fríos,
es brillo y bosque que habité,
es donde quiero renacer.
Bajo aquel árbol de ciudad
que no fue sepultado por asfalto
ni hormigones de leche.
Ecos de tu ternura aún me bañan,
aún acampan mi alma
y es en esta calma
donde veo que mi corazón te ama.
Vistió la estrella su estela
arropando nuestro amanecer.
Este fuego no se alineó,
se alimentó de tus latidos sembrados.
Entre mis jardines de sangre
mi amor surcó,
entre mis ojos deslumbró y mi ilusión tocó;
hondo, quedando todos mis anhelos
en tu mirada atrapados.
Halos de tu indeleble trazo,
aguardando mi rizar de ascua
y sigo por mi sendero de polilla,
vengo que atravieso
tu carnal umbral irisado
en lente mi oscuro astro invencible,
placer que del hielo desciende.
Solo abrigado en tu nieve
que ya no más oscura, late.
Al resguardo de mi escudo afilo que desnazco,
tantos suplicios invernados
que no sé dónde alzo
dónde me acabo.
Un querubín me colmó el atrio,
dispuse mi defensa
en estampa de un tiempo que me cambió el rostro.
Hoy es por ti que no es necesario
te apellides Taggore
seguiré sin conocer tu sembrado nombre
para este castellano fragor
descalzo de su tierra
y talones fundidos,
serás dama oscura que agrieta el azabache
de su entraña,
y viste que derrama su esencia
en negra alma como un silo de umbra.
Es despavorido lo que alcancé a soñar.
pudo ser más mi señora hada dueña de la sombra
que cabalga toda esquela
del tiempo preso,
un latido desertor
clama el son de mi rebelión
resurgir venda que el ojo no vea
me apodero de tu número flamígero,
vendrá, que no se irá
mi devenir del ayer difunto,
bailo, baila mi vela,
dictando que tu iris de letra
me regenera,
y reposo mi estridencia recta,
para combatir a la izquierda tu cariño estrellado,
mineral al candor
de secuencia tangencial,
y ala que te partes en tu pecho,
desnudando quizá algo más.
Quedando raíz salvaje
en atisbo de argento nácar que te beso.
Musa ardua de sentencia clara,
y amor de todos mis dioses del averno.
Föruq Castellano
El Castellano y Leannán-Sídhe
Réquiem blande:
Mi razón hace cumbre y risco
en la soledad de tus ojos,
nacidos para el solo armónico
tu mirada.
Ella que nació
del borde sereno intangible,
letra irisada cual ascua incendiaria
en un soto grama seca,
esto no fue hablar por hablar,
mi soto reverdece,
es como sombra de paraíso y su verde yelmo,
negra es desquicia,
negro es azar,
hoy tuve mal augurio
encontré mi futuro ababol
ya difunto,
ocupado, roído y dado en vil sentencia
sin abrir él,
su capullo era casa de una tijereta ya severa,
feliz ella,
corta-pichas directo a donde más me dolió,
se comió mi ababol
antes de poder desplegar su flor,
como si cortan la rosa
al jardinero que la cuidó con esmero,
mi razón enlutada
ya no era mi cordura en una amapola,
era mi desdicha en una tijereta,
he venido hoy, corriendo alto,
donde mi alma yaga
su cruel injuria de no ser de lo rodero semejante,
vine por sus voces en risco de humildad,
quise descorchar estrellas por sus halos,
vestir lunas y asignarlas colores.
Como sola nace el alba más preciosa
hija del Sol y su esposa,
fui directo a beberme tu luz musa,
soñando que reposaba despierto
toda senda hacia la novena
constelación de tu sonrisa,
abarqué mi solo Mercurio,
sublimé la escarcha tu esencia,
el éter quedó tañendo.
Escuché mi astro susurrar
tu nombre que no conozco,
a la ausencia dilucidada
llorar imágenes,
de colores difuntos perpetuados
en eco tu apostada mirada.
Las luces gimieron todas
en escalas un placer soslayado,
sin barrotes ni celdas
un albor, una fe sin ciencia
de que es posible
vivir colmando lo bonito
tomándote por ejemplo.
El CastellanoFörüq
UccellasicaConcanauna
¡Oh divinidad antigua!,
antigua divinidad,
primera semilla,
madre y padre
de Dagda esposo de Dana,
padre y madre ellos,
de los dioses,
etérea semblanza tú
de los dioses y su cultivar de astros,
destello de luz fecunda.
Oh musa, oh vida,
entono tu lira este atardecer,
madre creadora del solo destello ramificado,
sien de superior intelecto en estela,
dadora del divino don supremo,
duende Arte y su fauno.
Su caldero de regocijo pulcro,
musa de la que descendió
tu nieta Brigid, Brigantia, Brighid,
fiel luz de poesía.
A ti te honren mis falanges,
este surco y fosa alumbrado
por Lugh tu guerrero del Sol
y su cuervo,
a puño y lanza vivo muerto,
asido a mi destino dictado
al más allá celta,
esperando me abran su portón
verdadero, del otro lado,
custodiado por Ninfas, Sátiros, duendes, dioses,
espíritus, hadas, ó ínsula a la que voy de viaje
desde que nací.
Cepa de vid y vida tú de toda magia,
con raíces acrisoladas en tus cabellos,
guardiana, de hálito férreo del guerrero,
dueña dadora del destino,
hiladora universal,
de tres agujas,
tres madejas; vida, muerte, renacer,
dominas el resurgir de la naturaleza
y sus cauces silvestres,
son tus sueños,
bailo mi cuerno roto sonoro,
te llamo te imploro como hijo llama a su madre,
de mi izquierda el peso de tus argentas vestimentas,
a mi derecha el romo peso en poemas
de mi sangre granate.
Voy allí, voy a descansar mi lucha,
¡Ó Valhalla!.
El Castellano
FINAL TIERRA NUMINOSA MI ÉGIDA Y CELADA
TIERRA NUMINOSA, MI ÉGIDA Y CELADA
ANTOLOGÍA
Autor Miguel Esteban Martínez García
LUGAR: La Campiña España Castilla
LECTURA
Obras:
EXIMIA FLOR DE CENIZA
eximio
ilustre, excelente, notable, magnífico, eminente, destacado, insigne, relevante, sobresaliente, superior
Antónimos: insignificante, inapreciable
Diccionario de sinónimos y antónimos © 2005 Espasa-Calpe:
eximir
dispensar, exonerar, librar, perdonar, exceptuar, excluir, indultar, agraciar
Antónimos: obligar, responsabilizar, acusar
'eximio' aparece también en las siguientes entradas:
afamado - cimero - ilustre - insigne
EXIMIA FLOR DE CENIZA:
Limitada siembra, de los que venimos de la urna de arcilla;
o flor de tierra, añiles fervientes inmiscuye,
de salmo en raíces, mi una dicha,
mundo en partición de yacijas terrenas,
piedra y luz es azotea en España tela de araña,
redimido compás de los que no son de mi estirpe,
o íntimo metal soy descendiente de mi Sol.
Luz adjunta mi musa, derramó en virtud,
A sincera vista; discurso de su alma.
como poliedro en la solana que muda crisálida,
vamos marchamos hacia la ausencia repleta,
o al ánimo para siempre,
mi localidad en luna de oro,
bañada en sempiterno campo lírico,
defiendo al ídolo castellano de su encina,
o infierno de paraíso terreno,
flor del monte eximio de entre las ánimas,
brillantez de corona perpleja luciente,
como arribar del barco esencial que trae alimento
a todo espíritu que yaga en su padre tiempo,
lírica naciente de sus pétalos de ceniza,
alimaña enraizada con espiral armada,
llave del portón de madre tiniebla.
Pan y estrella de mi panida olvidada,
palpar vigoroso de orador inmiscuyendo,
certera sentencia relegada,
como cosecha de mi huerto de propia campiña,
anuncio que llegó la primavera d'este soldado,
abrió su primera margarita,
en patio de la araña
abriendo borbotones que alineaban suspiros
de la tierra germinada, en ciclo de muerte y resurrección
del planeta o estrella apagada,
mi dulce miseria,
la llamé eximia flor de ceniza en pétalos de carmesí persona.
primavera del hombre vivo-muerto,
camino a su ínsula radiante.
Alegoría desdichada soy;
de Sol que desnudo canta,
para un mundo de cabezas de grama en dossier,
y cebollinos que caminan,
resistencia particular del otro fuego azul,
tomo un anis en la posada del sueño,
que soñé visitaba Valparaíso.
Donde están los cardos,
anido allá los sones de alma,
y se abre y trasciende el campo de poesía,
con poemas augurales.
De gotas puras,
o lágrimas apodadas sin poder precipitar,
como sembrar de voz el aire
y ver que llora lluvia la virgen de la cueva.
Förüq Castellano
Abeja de tu arpa silenciosa:
Ardorosa retina,
en frente un sol tímido
de centelleante rocío permisivo,
alborada con viento furtivo
de nueva alborada forjada;
pupila en abanico cual veleta,
pura rosa entre mis cristales,
de cal y sosiego,
borbotón espantado
en brea encendida.
Ver florecer tu silueta enamorada,
herida de absoluto diamante.
Desdicha en astro palpitante
entre sus piernas gemelas,
congela este desliz inmiscuido
que quiso ser dentro de tu ser,
adelante mi lozana castellana,
de albor intocable,
y sonrisa numinosa,
ardor en pecho amante
que sienten apretadas las mariposas de tierra
de mi carne;
llagado mi deseo
de cruel infortunio desaconsejado,
no retiro y no alzo mi osadía
en cuchilla de quimera entre mis manos.
aljófares destrenzan almíbares
en escalas de hielo,
con mis fauces entre sus labios,
oh sonrojada nota,
instante de negro cielo, y negro día,
voy rumbo su carmesí terciopelo,
luna no cae ni su azúcar ni sus flores de café.
Agarro tu tempestad,
afiebrado, frío gané el pulso del olvido,
rompí sus esquemas,
y no viví terror que te fueras y no volvieras,
abeja yo que vuela su fatiga animosa,
de plañir nueva siembra,
estridente mi porfía,
escondía la umbría,
sombra fugaz entre mi frente.
Entre que avance
su dimensión del pez muerto,
y su desnudez violenta
sin atisbo de nácar ni alta ojera enfundada.
Espiga en los cuarteles terrenos,
de mi vestida primavera primordial.
Förüq Castellano
Indemne acontecido:
Salir ileso
de tu hechizo que metamorfosea,
prendido de tu arcano fuego,
horadando todos mis resquicios tenues,
lúgubres;
destellando por más de ti.
Tu obscuridad me está llamando,
de nuevo sin mi otro, sin mí, él mismo,
inundar de luz tu abismo,
con la lluvia de mi Sol;
candor en raíz que precipita,
mi arpa luce su vástago simiente,
que del albor a mi albo traje,
nadie negará que yo te ame,
sea como fuere, y el destino mande.
Semblante distendido,
enajenado mi lobo ártico.
Danzo, danzo como espectro ante la luz
beso mi suelo de nuevo.
Florecen mis ganas de beberte
y dejar rastro de flores.
En combustión, que cede y retrocede
con besos en la madrugada escueta.
Guardo retales y tus halos
flamígeros al tacto.
Espero mi fábula
de grillo en jaula.
Déjame ser yo esta noche,
que de Mercurio haré islote.
Dormiré su profunda ojera,
desnaciéndote, surcaré mares
de pecho en boca,
hasta anidar náufrago de tus impases.
Diamantinos, absolutos,
perplejos, conjugados,
vespertinos, incendiados,
acompasadas hendiduras
traspuestas al solo cóncavo,
de la cresta de tu mirada.
Buenas obras se le pide
a tu soldado.
Colmaré tu atrio
hasta resplandecer
tu una dicha, amante.
Förüq Castellano
La esencia:
Hueso, eje:
Mercurio Ninfas ardoroso mi sueño,
desceñida, Apolo, campiña Liris, río silencioso,
liberta, parco asiduo adorador de los dioses,
imbuido en recia doctrina,
Júpiter Estigia diosa púrpura.
La esencia:
Mercurio
tus barbas zigzaguean
el plomo de nobles relámpagos
metales irisados en fundido tacto.
padre dios del brillo primero
sin descendencia,
oh, tu filo insondable,
por el que visualizo
ardua Musa de tu rivera fecunda,
ardoroso mi sueño,
eres tú quien lo desempeña
y otorga.
Desceñido vals
de mil antorchas
a Apolo lanzo
mi baquio seguro,
candente de mi ser, estela,
campiña lucen
los pechos de mi diosa amada Venus,
con su río silencioso
hace mella en el Liris, mi esencia,
Liberta mi oscura Ninfa,
musa que proceso rito y culto,
parco, asiduo,
adorador en hondo terreno
mis dioses del averno,
que beso para tocar el cielo,
como es arriba, es abajo canto;
imbuido en recta filosa doctrina
de venas razones
amar la oscuridad
sin condiciones,
por Júpiter, no hay guerra
finalizada sin comenzar,
tengo duro, limpio abismo con portón
abierto de inspiratoria doncella escarlata,
llamada volver a comenzar,
diosa púrpura sólo ella mi musa.
Förüq Castellano
Silencio en tu hielo de ojos:
Sonatina extensa, yerta,
envellonada; flagro que venzo
un son cobrizo,
del metal noble,
sin margen, ni acerbo, ni curva,
un solo de quebradiza arpa lira,
mi ser no delira, te ama,
con ropa tu intelecto,
en flores de tu vestido solariego,
traspuesta tú,
por los sucesos difuntos ave negra nocturnal prestancia,
voy hacia la décimo octava estrella
que son dos nueves en llamas.
Sin franca, tapia, ni verja,
es un Sol inmiscuido
de onda ojera de luna argenta;
es mi sino,
carrusel, infranqueable de espinosas,
aspas de lucientes,
y su luz que ciega,
es un cantar al crisol de reina musa,
es un heliotropo sondear;
buscando a Leannán-Sídhe,
por concavidades de su hogar,
por astrales límites de su unión
sujeta sangre,
de mi erizada savia.
Förüq
FLAMEAR, Destellatoria, OCITÁNUL:
He bailado en tu obscuridad,
para poder sonetar
nuestra propia luz.
Flamear constante de tu nitidez
de estrella endiosada, incipiente,
flagrante, absorta de atónito atuendo,
dilucidado expuesto,
acreciente mi beso
con el tuyo dado
a mi puridad
de imagen Solar,
avanzo tu alma
el silencio es más lunático
que su reversa palabra Ocitánul,
es un resquicio...
Tibia, desangelada,
de tu musa belleza
y mensaje empíreo
de tu sola alma,
debo decirla
que ya no más sola,
tengo sentido vívido,
y tus falanges lo sostienen
musa golondrina
abeja de mi caléndula de pecho
trenzo el azabache
que nos llora la noche,
para despertar a mi lobo.
Luna en constancia sempiterna
te vuelco en tus cuencas ondulantes
de tus manos abiertas.
Ven, ven a mí
deja tu cena romántica
para mi póstuma celada y su égida
de Zeus y Atenea.
Tu querubín
yace que yaga en un tiesto,
capaz de germinar en flor
el tulipán amarillo vetusto del destierro,
alzo que seré referente
magno de mis castos dioses
en la tierra castellano,
su sangre mi tinta;
Raíz de ellos y Cernunnos Candavmis,
Ó VALHALLA
venga musa a pasear
mi yermo arcano,
encuentro que sigo tu estela luminaria
de aquí a Mercurio,
exacerbo, a diosa Venus,
y mi dios Gemineye
con ojo sangriento,
me dirige,
que soy yo solamente su sirviente,
nacido de la novena estrella y su telaraña destellatoria,
eres tú musa
digno afán de tercera constelación,
vengo con mi canasto
en clepsidra que plañe la comunión
certera de tu pluma
y nuestros astros,
sonríe plena mi condena,
y el ripio
para quien se guíe
y cabalgue definición,
señor de yertos fantasmas
cabalgando los cielos,
caballos espectrales
de claros relinchos azures,
hálito de hielo bésame;
cabalgaré tu sonrisa
doncella escarlata,
quiebra mi arpa
con mis manos sobre mi pechera,
AERE PERENNIUS.
Más duro que el bronce,
quién me destierra
si yo soy de tierra
y ella es mía,
inmortal, etérea hacienda,
los duros somos tierra
los demás ceniza.
Mi Sol es invencible,
baja e imanta mi Luna de plata
que eres tú Musa.
Förüq
Sacerdote de Musa:
Silencio me extirpa del vulgo profano
mis cantos olvidarte jamás pueden,
Musa,
sacerdote yo de las Ninfas Musas,
coronada implora tu gloria,
desdén que amancilla los mortales,
espejo inmiscuya,
tu beldad piramidal
.
Doncellas hadas y Sátiros me escuchen
entre el bosque de reina sombría,
mi bardo imperio implore que presida
a la izquierda de mis castos dioses;
Zéfiros de tu alma me acaricien la forja,
tempestuoso ímpetu de solana pulcritud;
ungida en tus mares de manos que escriben,
mi árbol alegre lluvias preludia,
sobre la faz de esta espada,
campo de primavera rigurosa
con sus pretiles gestos sin azada furiosa.
Turbio dispongo el alma de la piedra Frigia,
sol humilde me acompase,
púrpura naciente tu sayal desciende,
vid de hondo señero de Falerno,
su umbría sombra en racimo cultiva densa,
a pie de honroso pueblo.
El Castellano
Halo chirría:
Hoja, dime tus devenires
desde un otoño caduco,
a tus mil aullidos de árbol.
Entre resquicios opacos, umbríos, lúgubres;
sin luminaria fidedigna;
avanzada de una tenue luz difusa
y un crujido seco, funámbulo
de oídos precoces,
un solo de arpa y volví a ser
un chasquido en la ventana
puerta de este mundo
con el halo de mi vívida fantasma
sonámbula, habitada en todo estridente
reflejo, llamado invierno.
Förüq Castellano
Poema de 2012:
Gran luz, amarillo brillo de tu amor,
luz de tu esencia, sangre de fuego en tus venas
de vida en color, mas atada a tu tierra,
solitaria de tus páramos,
amapola amarilla de montaña,
reina hada del bosque de las sombras,
en tu despertar iluminas espíritus olvidados
del corazón más profundo del bosque.
Mas tu hermana sangrienta roseta de penitente
nace debatiendo qué color vestirá su flor
violeta de reflejo de luna,
manchada de sombras de amor a la noche,
o rojo cual granate hechizado de corazón de sangre congelado,
sea cual sea su manto, no olvida;
vestirse de todos los colores
con el negro más opaco,
de recuerdo al fin y el resurgir,
al comienzo del pétalo amado.
Aún sabiéndote amante de la soledad
también creces en familia,
de sangre marcada tu insignia
recordando que quisiste tener corazón
y te ataron a la tierra,
hasta en tierra muerta creces,
para aliviar tu pena poco necesitas,
tu belleza alivia tu alma,
del viento obtienes tus caricias,
de insectos los besos, y del tiempo
el sustento para tus semillas de tus urnas,
ciegas nacen, ciegas caen a la tierra, en la noche de lluvia.
Un día de primavera a una
se le ocurre el sueño de despertar,
pronto sus hermanas le siguen,
en belleza de la vida ves nacer y morir,
espíritu de reina tu entraña amapola,
nadie te odia, muchos te aman,
bendices la casa si tú, gran luz,
floreces amarilla en la rocalla.
Mas si tu bendición es ser blanca y morada
das el sueño de la más bella hada.
Si naces roja y negra das tranquilidad y alegría
al espíritu que en guerra se encuentra,
si eres roja como el carmín del deseo
tienes el amor del camino que cruzan las almas,
como tu eternidad en la tierra
a la que te ligas y esclavizas.
Quién te daría ese nombre de amor,
quién te nombraría desde la antigüedad
planta de la alegría,
quién conoce tus secretos,
sólo quien se funde con tu sangre,
quien ve tu alegría en la primavera,
que te cobija,
quien ama la vida,
reina flor te ve en la tierra
y amada musa tu belleza,
quién te conociera, quién te conociera.
El Castellano
Outsider:
Es mi oficio,
un desempeño,
tangible, armonioso,
y epicúreo.
Bronce de mi sangre belleza
¿Oh dulce sangre!
sanguinoso destello
carmín, bermellón.
Empíreo azar indeleble,
madre y padre de musas,
rito y constancia
fiel prestancia,
litigio iridiscente incendiado de brea,
azabache nacido de oscura retina,
amor al arte es falacia
es honrada servidumbre
a los dioses, mis padres,
mi ruginosa letra endemoniada.
Sangre sin cristo ni espuela,
es azar de siete telarañas,
candil que se enciende,
es endógena inspiración,
inmiscuida,
soy sirviente escribano
del fulgente hálito ambrosíaco,
azar de nueve barcos
bajo océano de tinta roja,
un beso y un epitafio,
una bandera de sangre y brea.
una desquicia resuelta,
una moneda de nueve caras;
un despertar y lamer hacienda,
es el ninfo rey Arte.
mi desempeño a diosa letra,
mi oficio y mi yermo,
mi cementerio,
y mi hospitalillo maldito.
Suerte del aojo enfundado.
Es un grito bajo tierra.
Soy outsider,
camino fuera de la línea,
os compadezco vidas cepas de un día.
Yo muerte siembro
y lo bonito que me florece.
El Castellano
F
Elogio en sombra---.T
Elogio en sombra:
Sin mi otro, él mismo,
primerizo hexámetro
en miles largos
de centésimas
en broncíneo
invocando mi falange griega,
insoslayable argento
tejiendo mi póstuma égida.
Musa o ardua estela vislumbré
en arcano fuego,
tengo miedo de ser perfecto para ella.
Sin y con cumbre
en arduo intelecto
mi Sol mayor blande
cenit d'esta idea
por cuantas cóleras desvencijada,
mis herramientas cabales
dictan
muerta mi araña,
paredes para mi yacija y su sombra
alumbrada, esquiva,
por piadosas ninfas
muestra lo que perdura.
Otros jáctense de páginas que han escrito,
ni me rozan en vil osadía,
manifiesta.
No habré inquirido
declinación laboriosa
en afán de romper sintaxis.
He profesado a mi musa de agua
que soy su aguja esquiva.
Ni sargento ni venas de Horacio fui
ni filólogo ni malabarista de letras,
Ciego y quebrantado,
labré mi verso
todos los meses,
desde cruel insomnio aplacado
que despertó mi quimera
quebriza de ocho patas
aquel 2005 que comencé
a ser alguien con mi existencia a espaldas.
Rostros y mis notas.
Vanas apariencias que anidan.
Alacrán manso y ciempiés soberano,
mirto e hinojo que hace monte.
Tus pies de jara.
Cierra muralla.
Hacedor que invoca su río,
Heráclito de intangible astro,
llorando mi amor, por cuánto espero,
por cuanto he conocido,
las tres armas, el guerrero
reminiscencia en laberinto de sus espejos.
Serán ascuas
corazón y sequedad de piedra.
Tiento de cuanta ceniza yo amo,
pensamiento, muerte
o proclamo;
tinta servil de amarse a sí mismo.
El Castellano
A Calíope:
Recto escalafón
dorado al beso no dado.
¡Oh! Calíope;
baja imploro
te estoy construyendo
un cielo dorado a ras terreno.
Madre ancestro de musas,
figurados y primigenios.
Estuco tu mirada de puro cuarzo
y tu semblante de estrella inviolada
avanzo tu esmeralda de mujer cristalina,
beso tus pies descalzos Musa.
Necesito colmar tu atrio
de caléndulas solariegas y rosas de muerto,
abriendo fragancia de mujer desnuda
al Paraninfo yerto
Castellano.
Yo Raíz de los dioses en la Tierra.
Tú mi Flor.
Förüq Castellano
CONTRA MI CIRCUNSTANCIA:
Guía de mi calendario
en atroz
desmembramiento de soles
llamados días de noche yerta
y sin reseña avanza mi letra,
es un vaso de sidra y una espera,
fiel eterno mañana
en el que dejar
lo que jamás haré hoy,
definido en boca gris
de darme al vulgo,
y que seis millones de bocas
escriban similar
o casi igual a mis sarmientos,
sí directamente me preocupa
porque yo soy lo que escribo
y no acepto copias baratas de este ser,
seré mejor que el silencio
enarbolando astros, plantas y sus verbos
de imágenes por raíces,
lo siento mundo no soy de vuestra sociedad,
no necesito vuestro material
ni vuestras fábricas de ciudad,
construcción haciendo progreso
de la BocaGris,
para que todo lo pensado
esté en proceso de construcción,
fábrica deja mi felicidad
en manos del viento,
que mi poema es incendio,
deja mi destino yo soy de tierra,
y esta es mi eterna cepa
ahogando el rol
tejido del social humánimal.
Soy lo que escribo repito,
como viaje sin rumbo,
un vertical azote de mis velas en marcha,
un siniestro vértice un silencio mundo,
unos ojos que hablan
y se responden entre tubos,
estoy cantando en la tubería,
estoy rozando mi osadía.
para consumir mi envoltura
de tela de araña,
mi sonatina despierta
mi soga quieta del árbol de mi sueño,
enarenado mi lobo de hierro,
queda satinada mi estrella de agua,
ardiendo mi sentido,
siendo esto nada más
que una bomba atómica.
Una retina escalada,
un cruce de dos estrellas,
en vastedad atropellada,
del ser, una rigidez de árbol
buscando su simpleza de savia,
un insecto y su corona,
un pergamino mi escrito,
abriendo este angosto camino,
en alguna parte que eriza la piel,
fuego del hielo me valgo,
de mi maullido de pájaro,
entonando mi pianola de sílaba,
todo cambiaba,
resumen de mi vida,
nació y está empezando a soñar
desde su muerte.
El Castellano
AGUA:
Eslabón vasto, ardido, deslizado,
un iris de gota que a ti te llega,
marcha tenue, compás de tu eterna huida
que te marca y da vida,
fulgente fuente en infinitud de bocas
que tu ser desprende,
de su nombre y su alambre,
irisado canto de nubes derretidas,
comunión de trinos,
un beso a la tierra que deja herida,
límite de árboles y sus soles,
siembra de azul,
despensa de tu saliva,
hoy buscaba belleza y belleza eres tú,
río corre directo a tu nacer
río levántate,
jamás te canse tu desnacer,
efímero latido de tierra,
tú vena del cielo,
una solar llaga del gris,
un hogar, cuna de mi tempestad,
para ser agua inmortal elemento
capaz de crear y destruir,
de vivir siempre tejiendo la realidad,
alcanza, desvela que te debo esta existencia,
sin saberte nada existiera,
equilibrio que en tus vasos juega
para estallar en creación llamada vida.
ALMA EN YACIJA:
Mañana será mi vida
una sábana sobre mi calor humano
inerte en acto de no portar nada
si no fiel materia asida
si mi forma acaso tuviera,
si yo no la creara,
si no fuera contorno de mi forma
esta sábana muerta
se creería que portara amor,
dulce aleteo ingrávido al peso,
tiempos de cambio palabras a un silencio que muerde,
estoy esperando las nuevas visiones,
con mi canasta de limones,
estoy aguardando la caricia de las sábanas,
como recipiente de quiebro de sueño,
quisiera escribir un poema con varias ramas,
anclado en una idea que se difumina
la identidad de ser ella,
palabras inertes que quieren ser hechos
y tener movimientos,
a un profuso mar me muevo,
siente mi devaneo,
llegó mi momento
de nada carezco soy real,
soy de la tela de araña soy tejido que me lleva,
noche, noche te encuentro en mí,
fiel yacija del destierro de mi sombra,
versos nacidos de una única cerveza,
buena praxis de mi romance eterno con la luna,
lunático por venir de estar con ella en su ático de Madrid,
no te esfuerces jamás podré ser realista
y describir sin ser parte del asunto,
claramente porque soy yo el asunto,
a formar, en orden,
este es mi rifle esta es mi vida,
por la que sirvo y ejecuto un placer nacarado,
como fruto de estrellas,
¿el hueso?
Es que no encontré un motivo claro para escribir,
solo fue y será escribir.
BROTADO:
Silba centella,
como enhiesta espina afilada
en son de tañer
del pozo llamado guitarra
con voz pasajera,
fugaz cual angosta siembra
perpetua de otoño,
una muerte trenzada
a su fin de ser origen
de toda vida vegetal,
la muerte de la flor
en comienzo de la vida
sin la semilla
no iniciara
ningún azar profuso
de sangre, quitina, savia
sin alimento
no hay energía
ni este maldito duende
podría escribir sin alimentarse
del hielo ardiente;
es un árbol
es una crisálida
de ser este mi cuerpo,
que al tuyo invita
a su devenir irisado,
de sus canales de riego,
mi realidad se baña en mis ojos,
sin ellos sólo hablaría la oscuridad
de su negra ala,
lo siento me temo
que por conseguir ser completo
he cambiado de lleno,
con mis manos hice una fosa
para plantar un ciprés
como el que plantó tu madre,
y ha consumido en su llama
miles de años de mi pasado,
siento deciros mundo
que soy completo
que he nacido,
nació un ser perfecto
de su crisálida.
HE NACIDO
He nacido por un principio
libre de causa, lleno en virtud de fin,
ser completo en alma, espíritu y cuerpo,
sin atisbo de superioridad
al resto de semejantes
jamás iguales,
diferencia marcada por mi demonio interior
denominado luz de virtud.
Que brota de mi ser
desarrollando yo su intensidad,
el talento como el nombre más ambiguo
de la realidad,
semilla muerta digna que debe ser empapada por el esfuerzo,
dedicación y entrega nuestra
ceñida por la esencia del don supremo Sabiduría.
La vida es de quien la lleva y esta es mi reflexión contra todos vosotros.
CROMÁTICO AZAR:
Bienvenido a su cuaderno,
es una hoja de chopo,
mecida en vaivén de viento vocal,
un profuso devenir de entraña
que tu ser admira, desentraña
cual iris cromático en escala,
es su cuerpo de mujer un hogar
para tus ojos, como una armónica
sus encantados labios.
Un linde y una cepa que te gobierna.
Inmortal yaga, su ilusión
que te cuelga cual araña,
cristales rotos de tu ser
espejos de un ayer sembrado
en piel.
El sentido se difumina
en su boca de estrella
para el hoy ser ayer
y el ayer ser aciago sueño
cubierto en verde hiel.
Es mi casa su casa
su entraña un nido
y mi espada.
Solar siembra de mi mañana.
Es un canal irisado de sangre
fanal la espera
en la que cuidaré nuestro jardín
y meceré flores
para por si ella muere antes
que no muera la belleza con ella.
El Castellano
BRILLO DE NOCHE:
El sino lanzó un grito a la montaña, contestó un eco con amplia voz
Que sorprendió mi anhelo
siendo una luz en el vasto ciprés
que a la luna alcanza
preguntando por mis yedras en maceta del alba,
un silo y un olvido despertó de su nicho,
cantando con la flor un latido desertor queriendo pedirte caricia eternamente .
Encerrada en iris violáceo la flor corría el sueño estertor,
el sol cambió su amanecer por la tibieza y suavidad de su flor,
siendo esposa del sol, caléndula en ojos
que marcados traen un irisado tornasol llamado amor.
Un ocaso se alzaba en guiño a cada noche que la flor cerraba en verso sus pétalos
afilado el cuclillo de la noche
besando una luna de cuerda,
una inmundicia cantaba su siniestro grillo
del calor de muerto,
despertando la siniestralidad agujereada
del hueso,
un camino eterno con acequia de la sangre que lleva en araña del sentimiento
y un difuso vértice de dos gotas de unión
que se juntaban exclamando
como rocío del molinillo diente de león
para volar con el viento juntas nuestras vidas en vaso retorcido de destino .
El Castellano
ROSA DEL AMANECER:
Abejas del alba,
en un cielo desplomado,
que rige su cenit dorado,
un albor que se dirige a la maravilla,
esperpéntica, despeinada por rayos
de solar afán y entrega,
un camino se retuerce en el iris
para la tierra ser sólo de su tierra,
un carruaje de estrellas desmembradas,
y sus violetas nocturnas a cuestas,
es hora es ahora
que la acequia bulle mi sangre,
en la sombra una espera,
vuelan las avispas del medio día,
con sus emplomados trajes,
es la escena un salón de actos,
es una aciaga siembra
de vuestras mentes retorcidas,
de lombrices esparcidas,
panal eterno de la idea,
se asoma, se afila en alambre
de lengua, de palabra que azoga,
mi tenue soga,
mi inmortal sequía,
por el chopo viejo que vive lejos
se clava mi estaca en tierra,
para que sea de su pueblo la primavera.
Con ímpetu y desgaste
que viva siempre este alambre.
El Castellano
ENHIESTA MALVA:
Y que mi sentir no se esfume en vano
donde las frases son emociones que palpitan
un calor llamado arte
la tristeza que quiso llevar una duda
será que esta vida vale la pena¿?
el amor sí existe
está colgando de tus mejillas efímeras,
para darle un sentido a mi existir
aquello que no ha muerto en la eternidad hará cuchillo
así mi alma alto cante, su destino alumbre
será mi dulce muerte rechazada en el vaivén
que llevó a la tiniebla mi verso
este mundo está habitado
por el reino muerto y el reino vivo
yo muerto sostengo,
mi sino de cuervo Förüq
y que nos sobre una explicación
la sed de sangre me alza en albor
mi reino muerto por una amatista por enraizar
y un azabache por llorar
es una clase de fantasma la mía
un eco sordo por alcanzar
siéntelo
es sangre en tus ojos
la noche palpita sin derroche vida de su azabache
un cuclillo despierta a otro cuclillo
un ejército despierta
alerta.
El castellano
Mi rosa
Por la malva-rosa
LOBO DE HIERRO:
Resplandor dorado,
quieto, rajado
al albor sin hueso inerte,
en cruz,
yerto, enfoscado en tierra
y su pupila quemada
por el humánimal desde su entraña
desde la profundidad
del humano ser
que admite que asesinó
a su conciencia
al muerto helor
y su estampa de invierno
bebido en vaso de flor de invierno
que fue su esencia desdoblada
asesina de su madre,
con material que subyuga
a la madre a pagar
la muerte de su hijo
por capricho o necesidad
me es igual no juzgo dilemas
cabezas de grama por doquier
en mi dosier feminismo asesino
igual que machismo asesino
sin conciencia todo le vale
al señor monstruo cabalgado
en crines de llamas irascibles
bocas que reniegan a su origen
nihilismo cruel con su padre en la estaca
de Franz Kafka
hoy es un día cualquiera
vestido de parca hábil
desdibujada
llamaron a los buques siniestros
al puerto
yo, el comandante, que quedó congelado
al timón
mi vida va quedando atrás
el sentido frío se come mis venas
de alquitrán
hoy el pensamiento negro
ganó el bingo de actividad
del psiquiátrico
farsante tu piel, este hombre
mata por su familia
que no valgo como hombre
pregunta a la lumbre
de mi sufrimiento embotellado
''buscando la luz la oscuridad empuja''
mírate al espejo que yo sé quien soy
y lo siento me gusta
clama la amapola de mi maceta
por ver la primavera llegar
sano como un gusano
y valiente como un dragón
miedo no existe es sólo una errata
de mi diccionario
tú qué has conseguido
yo tengo quien me quiere
y esta es mi vida,
con y sin problemas sentimentales
y con compromiso:
-Seguir viviendo,
bien o mal no lo elijo
ahí llevo cruz encarcelado
cinco meses y medio
y no voy a poner buena cara
y que me den por atrás
soy feliz mis logros
son mis escritos
el amor es superfluo se tiene
al igual que se va
hoy no cayó un ángel
ni ninguna botella derramada
la maldad hizo flor y la corté
el cuchillo no quedó clavado en el pecho
la etiqueta al igual que se puso yo la quito
trabajando no me fío ni de mi sombra
dudo hasta de ella
y no quiero desaparecer
ni caer en tristeza negra,
estática
mi historia la escribo yo
esto no es una despedida
es un simple lamento
murieron mis ilusiones al viento
pero mi reino y estima sigue en pie
de lobo de hierro.
II
Es un suplicio investido,
un otoño largo que se va profundo,
por sacrificar espuelas de impulsos
en clepsidra de esta vida solípsista
por ende lo rodero y externo
si existe es su problema,
afirmo esta soledad acrisolada
bajo el signo del yunque acrisolado
en ascua cruel del mañana
un viento enarbolado Aquilón flamígero
al tacto,
un destino espiral honda
marcada;
prevalece fugaz desquicia congelada,
en guardia del soto de esta mi voz,
unas veces parco,
otras demonio embotellado.
El mejor que yo no llegó
soy militar de mí mismo.
Superior vencer esta lúgubre sombra
que me abarca desde que vine a nacer
y el abrojo marcó mi estela.
Buque de guerra dispuesto
por soles que negrean
el estigma de los que creyeron su mentira médica.
Acaso un número del circo tejido existencial,
alguien a quien agradar,
algo que defender,
correcto
sé quien soy.
Nada necesito
a juicio de lombriz boca gris
parto mis fauces en carcajada feraz,
que sigan estas lombrices caminantes su rol
un millón de rostros
un millón de mentiras.
Asolando, despoblando el hálito feroz,
sin superior dictado en madre conciencia
ni diosa elevada sabiduría,
estremece esta rosa helada
al crisol de inerme botánica
de esta sangre mía exasperada
sin nicho
ni mármol eterno,
solo un sueño y un soplo
al fervor de consumir completa
este alma en yacija
con sombra desterrada.
El Castellano
INFRA-REALIDAD DEL HIELO:
Hilvano mi sentido de una araña,
tejida su tela de una gota,
esa gota que palpa infinitos,
que crea y destruye,
la supervivencia del ojo,
me mantengo esperando para el brillo,
y quizás el sonido de un grillo,
todo acaba donde el todo comienza,
vive esta rosa de hielo,
y este granate de sangre me vence,
opaca suma de tus parpadeos
hacia la sombra,
que es una eterna, infinita
madre de ausencias y sus tejados,
contémplame allí aullando
extasiado en una siembra de nácar,
quiero vivir hoy en las etiquetas,
en los maullidos sin gato,
ser abeja para zumbar los oídos por despertar,
que me odien por fin por ser quien no soy,
un alarido estremecido,
un temblor de tierra,
un carnal fuego que no se vence a sí mismo,
ser por fin entraña y hueso,
que mi corazón me suba por mi garganta
para que diga que yo te amo.
El Castellano
SOY:
Tiempo, invento deslizado
como hoguera que consume y su horizontal avenida,
como rosa marchita de otoño,
como hoja al devenir de un árbol tejido
de sus escarpias sucesos, un devenir
que corre avanza mecido en el olvido de sus huesos
por retornar las semillas y su vida,
fanales despensas de un silencio mutilado,
lejana la distancia todo se acoge en uno,
un viento, un pájaro, un aliento, una espera,
un suspiro, un destino, una creencia,
una raíz, una tierra, un dueño
sí el que me lleva los pasos,
su cuchillo dorado que se alza sobre tu rendija,
justo tráeme la luz este mar de cielo
que me absorbe,
desciende sobre mí su ocaso puro, limpio, violáceo,
como una ventana para pintar
lo que late y se encuentra detrás de mis sentidos,
un destello que me alumbre,
un iris tuyo que me examine,
camino el límite de la existencia,
capaz de morir por una palabra,
mi noche comienza a sonar,
y mi olvido de sueño aún no comienza
no inicia su palpitar,
este agujero lo cavé con mis brazos,
esta fosa desnacerá para iniciar más vidas,
flores por réquiem, abejas por elegía,
mi semblanza yerta
vuelta dicha,
un tiempo como bucle eterno
en el que nada podrá dejar de ser lo que es,
yo soy carne de palabra,
soy quien soy y esta es mi plegaria.
LIT ET SUMMUN CANAE.
El Castellano
SON DE GRILLO :
Clarín entona sin miedo,
todo lo que siento arriba del astro recuérdame
su violácea arpa del sentido, tejido yo del hierro,
y una escarpia desnuda que anuda,
que desvela mi yunque, mi eje,
apenas dormido yerto el tiempo que te conoció,
arriba muy cerca de la letra dorada,
y su escarcha de silencio senil,
eres más que donde alcanza mi palabra,
un yugo, un arco y una flecha,
una vena trenzada por la sangre consumida
que te lleva que te encuentra,
león aquí león allí en mi corazón,
hilvanas mi calor del fuego,
se funde mi abismo zarzas por ascuas,
Sol por luna dentro de mis ojos te encontrarás,
allí solo habita la luz como quimera una,
que te destapa en sueños,
si por soñarte te hiciste realidad mi bella,
una vez en la vida el tiempo se derretirá,
y nuestros labios beberá,
vuelvo a vivir por ti,
vuelvo a descubrir justo la vida,
matando mi soledad, aumentando el día,
amor que me volviste libre
y elegí amarte
hasta donde cerraban los ojos de la noche,
mi miedo se alimentaba de sus paticas,
yo quiero quedarme contigo
hasta que mi pecho lata abierto,
subiendo cumbres anclando mi sombra,
hasta que la tierra se coma los cardos tras el estío,
hasta que las flores rendidas dejen su belleza,
en son de elevado amor,
que asesine los silos de oscuridad,
que descienda lo perpetuo
y quede asido el cielo
hasta que la imagen sea sonido,
y mi deseo traspase las puertas de tu destino,
solo allí reinará lo sentido.
El Castellano
TEJIDA REALIDAD:
Estaba buscando por algo de luz,
dentro de este abismo nacarado,
como brazo de esta realidad desdoblada,
no esperé más le prendí fuego,
y un surco se abrió paso
entre espejos crepitantes,
entre puntas hirvientes,
y sus curvos ejes,
que hacían de la noche una sola,
comía su adentro, estallaba nuestro encuentro,
por soles consumidos,
por vértices y sus filos,
el sendero comía sus espinos,
por mi vida repoblada,
que buscaba tus nubes de azúcar,
encuentra tu miel y mi subrepticia,
por toda la noche sin despedida,
se alza nuestra caricia,
como árbol sin hoja dormida la sinestesia,
queda iridiscencia del beso,
quedan las espinas de mi piel,
un hervor de hiel,
un destino sin cuchillos,
un devenir que no vino ni se fue,
llórame el azabache de tu noche,
pinta en tus ojos conmigo el fin del tiempo,
detén este instante para hacerlo real,
ven conmigo soy tu despertar,
aúlla al hueso de la luna
que parió una flor de cripta y su helecho,
era cuesta abajo mi lluvia
desplomada, hábil tenaza ,arde y no avanza,
por todo lo que quiso ser en trémulo desliz,
era nuestro campamento de estrellas
por luciérnagas,
estoy desaprendiendo a escribir
y eso es bueno,
mi piel que hiberna en verano,
para abrir su cauce y el reguero
al Sol de invierno.
El Castellano
UMBRA DE PIEL:
Flagrante piel desnuda en su redondez,
infinito con cumbre y desnivel,
aullido a media voz,
un golpe de viento, un primor
de desnuda arena en pie modelado
por tu carne de mujer,
yo soy para el viento otro crujido
de su fuente de voces,
de temblores en seno de su carne de ciruela,
prevenido avanzo como un soplido,
me diluyo en agua siendo tu ávida tez serena
como virgen nieve de canela,
suave mi mano nació para tu piano,
al frente me hago presente,
no hay ilusión que se consuma en olvido,
así no hay esperanza que no me vuelva un ovillo,
si estás tejida con hilos de sinuoso frenesí,
silencio envolviendo este mi cuerpo,
sólo por escalar mi vida,
sombra del color, sombra al fin,
era plena primaria,
tímida y risueña,
era mi naufragio en tu arena,
una veleta y su aspa,
desperté y aún seguía tu esencia,
de piel sin piel ni ropa,
destapando una caricia lejana,
por el laberinto que te conforma
hacia la sombra que me da forma,
te espero mi preciosa.
El Castellano
IRIS VESPERTINO:
Avidez estallada, corre un presente
sus oscuros lindes la eternidad conoce,
me basta con ser su despierto pliegue,
existencia al fin sin más ser
que todo lo que desemboca mi creencia,
que se estira, se dobla y conforma
en surcos de labrada consonancia,
por todo lo que avanza,
siendo de la tierra más que una estática sombra,
siendo todo lo que quiero ser
es más que un capazo de su vendimia,
más que un panal de labios grises,
es un mundo y yo soy su pétalo,
es un río y soy su gota,
al trémulo ciprés me cuelgo,
para asir mis palabras al cielo,
es por su lago que mi esperanza navega
sus oscuros soles en llamas,
en mi vida solo hubo un abismo para condenarme
y es al fuego de sus labios,
su veneno en mis ojos bulle mi retina,
blancos, amarillos. azules
los tules de su escarcha,
círculos de luz, veta de mi mente,
se conforma, se desnuda la piel en sinuosa forma
el viento que es como un almanaque
y un cofre,
el destino mío irisado se vence,
acoge mi ansia plena,
mi álamo saltó, tembló,
era yo, como un furtivo fuego de tierra,
era mi vena una primavera,
era mi vida como solaz yaga,
que sólo quiero compartir con ella
mi señora bella,
la extasía de mi ilusión verdadera.
El Castellano
VIDA DONDE YAGO:
Colgado del tiempo,
expuesto, vulnerable
a un cambio de su viento,
sí todo lo que siento
me mece colgado de tu iris opaco,
por mi retina escarlata
nazco para desnacer en tu cuarto,
para abocarme a mi destino
sin final en el cual te amo,
como flor de todas mis flores
cual rosa oxidada,
mi pasión que corre, avanza
jamás se para
es como lagartija
postrada al Sol de tu amor,
mi vida va desvaneciendo
en son del profeta oscuro,
hielos fugaces,
desiertos transparentes,
ilusiones crepitantes,
quiero permanecer en la guardia
de tu sentimiento
no soy espejismo de viento
yo lato y te envuelvo
para crecer
amaneciendo tu deseo,
sólo eres tú,
nada que yo pueda criticar,
porque como florecita delicada
mueres y te agotas si no te cuido,
llegó mi abismo
en el que loco de amor
cuelgo mis miedos de mi ciprés
que en silos dorados
almacenan el querer de las estrellas
en verticales puntas
deja cristales del alba,
no puedo acabar mis pasos enamorados,
que te pertenecen,
como rayos de tormenta,
y mis venas quietas,
por tu salud abandono a mi ser,
por tu sonrisa y qué no daría yo,
es mi vida al fin y al cabo de Finisterre
es mi desquicia yerta
que asesino pero es mala yerba,
no estoy perdido
porque eres mi sentido
para mi segunda vida
no renuncio, no retrocedo,
no me achanto, no abandono,
no doy nada por perdido
te amo en este infinito
del que cuelgo
y mi palabra
es siempre.
El Castellano
SONATINA YERTA:
Cabálgalas así puras, redondas, irisadas,
oscuras mis letras en sonatina,
destápalas al viento que mueren por unos besos,
desterrados en son antiguo, quemado,
derramado en sed del vino,
esperando dormido se alce tu boca
por todos mis sueños perdidos
como cerrojillos en vena gris,
brota mi sangre siendo de la tierra
fiel fuente y su simiente plena, verdadera,
amor, el tiempo no nos puede sostener,
acaba como eternidad doblada con ganas de más y más
muertes en caricia helada,
redondas, verdes, suaves,
caminan como corceles sin redil
mis manos buscando y buscando
le regocije una armada palabra,
no busco estrellas porque tus ojos guardan mi firmamento,
en un granate perdido en un hielo derretido
en un suspiro y un guiño,
ya me cansan los abismos por recorrer,
junto y sólo junto a ti quiero yo perecer,
encuéntralas a ellas como el pasar del tiempo
en un piano de madera, como llama eterna de nota
y fuste, de ansia y apetito voraz,
de mi carcoma y su crujido,
de mi grillo y sus grados,
es por tu cuerpo vida,
que las letras se me rinden en mi alta ojera
de nácar.
El Castellano
DEVENIR ESTALLADO:
Llegó el día,
se colgó el agravio
en el árbol de las cenizas,
era mi ceniza como un cielo
ceniciento, enjutado de paredes,
era un viento de alambre
y sus espirales que mecen
nervios cual lindes,
despiertos, desvelados,
ven a por mí en esta cepa
que llora tu nombre,
yo fui tu hombre
más el destino me clavó
otro yerto horizonte,
otra nube de cenizas,
otra máscara que nunca elegí,
otra planta y otra flor,
no puedo deshacer mis pasos,
ni construir nuestra casa por el tejado,
en fin me basta con tejer
nuestro lago,
nuestro infinito remanso
donde Yago,
donde en su espina ardo,
Consumiéndome en tu aliento.
El Castellano
DESTINO IRISADO:
Eternidad para dañarme,
dejándome caer
nunca signifiqué más y menos
que dolor
afila tu nervio
dejándome a solas,
sólo encontrarás
que perdiste tu hoguera
sostenme los ojos cansados
con su Malva-Cruz
nada cambia
todo retrocede
todo corre y se desvanece
canta, ríe, corre,
yo no volveré,
mi tierra trabajaré
para cavar mi dulce espera
amaré mi polvo,
me sembraré en cada hoguera,
rayo irisado me descubre
llegaré a deshojar la muerte
y su cuna,
desde este nicho
tela de araña
al submundo de los condenados
donde yago,
mi herida si no cicatrizara
será un recuerdo de que existes
llamándote dolor,
vuelo esta oscura noche
buscando calmar mi sed
siendo consciente
que no volveré a vivir
como cuando estaba vivo
mis pulmones llenos de humo
de noches enteras
fumando cigarrillos en boca del Diablo,
para ser yo
el más grande espejo
de esta soledad deseada
desde antaño destino infundado,
me alimento de todas las flores
que no te he regalado
y nunca te regalaré
cierra tu persiana hoy no te veré,
soñé tanto que por soñar
me llamaron ruego y estirado,
demente su hueso me llamó despecho.
El Castellano
MAULLIDO DE PÁJARO:
Una nota y un horizonte
una secuela y una desmembrada caricia,
se afila el viento y sople, sople mi adentro,
esta vida me cuesta la sed,
y quizás sólo quizás una yerta bienvenida,
por la solar acequia planto mi beso,
a un ababol de mi hueso,
es por el perpendicular recibo
que acuso mi piel expandiendo,
trance de mi endiosada calma,
y paz de espíritu que sujeto,
quedando mi gota frenética sin cauce
esta mañana que lo lejano
se torna cercano,
blandido mi cuello en su hoguera,
queda sembrar allí mi primavera,
y mi primer beso de siembra,
Bramando por ella mi cabellera,
como fiel retorno de las polillas,
habitándome en mis semillas,
es por ellas que mi umbral bulle a la fuga,
ella que lanzada, decidida
abandona de su ser el recto abismo
para llegar su alarido
a un destino y un techo,
tejido por c la araña que nos lleva,
tejiendo nuestra vida
de Violeta y malva.
Un fenetro para el desespero,
un puente para superar
la dificultad,
en malla dorada,
en granate humor de sangre doblado,
es por esta luna de venas,
es por este pájaro de maullido,
es por todo lo que vino a ser
y marchó crujiendo
crepitando, desnaciendo.
El Castellano
DEMONIO DE FLOR:
Que el arte es un demonio con palabra de alas,
una fuerza inmortal que sacude la entraña,
en alborada muestra su zarpa,
siendo del viento su grazno escondido,
viviendo la sed en destartalada acequia de hiel,
un réquiem y una elegía por todo aquel
que sus venas zarpó,
para anclarse en su honda sien,
camuflado de espiga
no hace falta que yo diga,
todo es y será de la caricia
al profuso horizonte de espina,
por su derretida cima viaja mi idea,
encontrando un manantial de sangre,
perdida su costumbre,
queda renacer en el ocaso eterno,
que si vuelvo de nuevo
vuestro aliento se comerá hacia dentro,
para esta abeja ser del viento.
Y el viento ser aullido
de lobo sediento en alambrada de piel,
cavando su azada,
derretido suplicio repetido,
en infinito que cuelga,
grita, desenfunda mi vocabulario yermo,
cual emplomado soldado,
fuente de abrevadero de la sílaba
pronunciada robada, deshabitada,
es de la solariega vega que mi Sol
contra el mundo es eternidad.
Canto viejo, canto de surco y simiente
lo estoy diciendo que no espero a mi yerto,
digno arte de admirarte
que si es para siempre
yo soy más que tu amante,
a la tierra va
a la tierra va mi aliento de serpiente ,
que se ahoga que se deshace
este verano silente.
El Castellano
ABROJO CONSUMADO:
Defiendo entre torres de humo,
al rápido destello veloz me despido,
palabras atrincheradas hueso despierto,
encrucijada entre flores de piel,
hiberno este sentimiento
que me desgarra la sangre,
siendo rayo añil consecuencia en llama,
crepitan de los sones los tambores,
mi brazo está para la lucha,
tejido mi sino está del abrojo
una cruel espina su medio para viajar,
soy de este campo como la fuente
de su encina, soy yo al menos
como mi amado zorzal
como un pájaro en su rama
que el viento le cuenta
de sus alas cansadas,
como un cielo sin techo,
como un tejado sin teja,
como umbral sin muerte ni acto,
despertar en la cueva de luciérnagas,
despertar solo y frío para sentirme en dicha
elaborada, agradecido porque estoy vivo,
mi palabra cual escarabajo verde hoja,
como precipicio de montaña
que ríe que escala su altura difuminada,
es de agua su rima consumada,
siendo yo el último hombre en pie
blandiendo su armada palabra
que avanza, no para,
se consume en eternidad arrancada,
a esta luna de plata que gime auroras,
de sus pestañas escarlata,
un secreto bebido
un halo irisado,
de esta meseta milenaria,
siendo mi alma una flama de lumbre,
un carruaje que lo lleva la noche,
mi ser que a tu alma abrace y alumbre,
porque a veces me consumo,
y si no estoy muerto
que venga a por mi la divina falacia
porque mala hierba nunca muere
y en este nicho de vida
me desvelo fiel Abrojo yerto, consumado.
El Castellano
FUENTE EXTASÍA:
Cercenas esta hoja ilesa,
la niña de mi verso si acaso pudiera
sangrar este cielo,
y su avenida en estruendo quejumbroso
sonido, al menos
un espasmo,
una lengua de nervio,
una acequia de sangre
es el hombre
si al menos fuese hombre,
fiel testerazo ensartado de bestia
caminan las sangres,
y nadie vendrá a vengar a los hermanos,
desfallezco,
exploto en pétalos bermellón,
soy de mí
preso de una historia que nadie me escribió a mí,
rayo colapsado y su vertiginoso alambre,
es una avenida esta fuente mía
en un páramo rojo
en un gozo olvidado,
así la mina que se destapa,
ardiendo la pena dorada,
por quien la siembra,
por su azada maestra,
desquicia fina en teja, con tejado
en alma de ángel por cadenas,
destierro enjutado
en duro, desvelado canto de tierra seca
bañada su era en sangre de cepa,
hay un olivo que vive lejos,
hay un señero y estaca de linde quieto,
por los sorbos que me robó la siega,
viento, viento, labrado,
de letra y estalactita
de surco y olmo doblado mi tinta.
Hierve mi fuente niña.
El Castellano
PIEL DE LOBO:
Torre elevada,
afán y su vanguardia
cosechada,
escriba antiguo
deshaciéndose,
escuchando
el latido disuelto,
en esfera de brillo,
un sentido alarido,
vuelto aullido,
esta noche carcomida,
que debe escapar,
viento al crujido,
yaciente del seno de la ola,
en la boca de la loba,
la flor que se desploma,
la vida que aguarda,
este verano de fuego,
y su canción de grillo y cigarra,
desterrada,
es por ti es por mí,
que el destino no aguanta,
Sol mío invencible,
como lluvia de cielo,
aire aire alcanza a tu hijo,
de profundo monte,
de hoz y guadaña
se teje tu molino,
la amapola, la margarita, la espiga,
el tridente de la estrella tejida,
ven, ven a mí,
por estas hojas por su filo,
abriendo mi cuchillo,
cortaré mi sino,
aguardaré al fiel vivo,
en esta tierra,
en esta hoguera,
quemándose mi quimera quieta.
El Castellano
SILENCIO ESPINADO
Mantenme afuera,
sí, dentro de la luz,
fuera de la noche,
las estrellas
colgadas
en racimos a la espera,
solo sólo yo para ti,
crepita mi hueso
esta escarcha deshojada,
por venas del humo
de mi escuela,
por donde se acaba
el suplicio
y yerta la luna
destapa
sus besos de malva,
por ende este duende
comienza
la libertad de la sombra,
cayendo de nuevo
su araña está,
granate lustre de sed
por avivar
una vez en la existencia
el mar mi sobriedad caminará,
de la mano
tambores de tierra quebrando,
por su camino dorado,
el sueño y su telaraña rizada,
aúlla el camino de la zarza
y destapa
la soledad con capa,
de desertora entraña,
de una vida en la espina,
y su cúspide labrada,
es por el sol
que nace mi albor,
resplandeciente como fulgente
mordiendo mi suerte
es de la luz el siglo resplandeciente,
fuerte siempre fuerte
avivo esta lumbre,
giras evanescente
acoges mi fuente
que en gris y verde,
en verde, azul y gris,
las muertes bulle,
para ser un linde y un campo,
un abrojo y un manto,
un despertar en amaranto.
El Castellano
OTRO DIÁLOGO:
Saeta alada,
vuela y corre,
se alza y descubre
por ende de mi torre,
ríe en su ser
en sosiego
borbotón sanguíneo
desprende,
de sus alas jamás cansadas,
amplia carcajada
y gira su mira
hacia mi vida
nada puedo negar,
nada puedo defender
el ocaso se alza en vértigo,
no puedo empezar de nuevo
y volverme a equivocar,
este mundo se disuelve
sin empezar,
sin acabar,
quién vendrá a sostenerme
esta cuerda se rompe,
puedo ver mi ilusión,
puedo ver lo que no he hecho,
justo es mi vida,
rehaciéndose,
buscando el sol
para brotar en espinas,
y estallar en luz
un brillo deformado,
un ocaso purpúreo de mi alma,
un opaco punto de mi verso,
estampado,
cual fulgente pintura cromada
en tintes de un ayer imperfecto,
yo creo en ti, yo creo en mí,
nada correcto se puede hacer
porque nadie nos corrige
nadie nos importa más
que tú y que yo,
pupila nacida de sombras
pupila recta y serena
como el azul
de un océano y su puerto,
como nuestro
hicimos el fin del tiempo.
El Castellano
CARMESÍ:
Sangre, sangre
que yo sin ti no tengo
vida para morir
preso de tu bello cuerpo,
al tarot helado
me muestro
fiel desespero
en umbral rojo tejido
cae siniestro, rendido,
sangre, sangre fiel te espero,
por estas ramas
de yedra despierto,
el negro cáliz de fuego,
tu nombre destapo
tu sed abraso,
en esta hora
que cuelga mi cuarto,
araña enfundada, tejida,
avista su caricia,
abre el telar de yerta letra,
descampado oscuro
que me aquieta,
hoy parto mi hiel
con cuchillo de piel
sangre, sangre
carmín al abrir,
estertor añil,
brota, sube, emana
de fanal hoguera,
esta es mi vida quieta,
de verso maldita la estampa
fiel condena
abriendo la subrepticia de la noche,
se mece, se acuesta la rambla,
avenida amada
senderos de pieles tuyas sedientas,
colgando tus pestañas,
la noche escapa,
la tela se difumina
en un mar de azabaches
trenzados, soplados
llorados por la luna soñados,
vistas al cristal de cuarzo
tu entraña de araña
tu fiel boca
de estrella tejida,
naciendo otra súplica,
para acabar mi historia
en ti con el color
y el humor
de mi cuchillo envuelto
en feroces testigos
de lo que sujeta
la araña de esta noche
por mis venas escaladas,
por mis ojos fruncidos,
me rompo,
me quiebro,
en mil cristales de roca,
para ser yo
vivo y afortunado
el osado,
el descubierto
en capa humeante,
en tu ser clavado,
fumando mi cigarro de noche,
y el humo que te dibuje,
puedo caer,
puedo nacer,
puedo reverdecer
mi vida sembrada
en este patio
de media luna,
brotando, sucumbiendo
enraizando
tu soto de boca
despierto besando
esta penumbra que sujeta.
El Castellano
HUESO DE LUZ:
Sueño
estos lindes destartalados
esta bruma
y su violeta nocturna
de un ocaso que se destapa
y llama y llama,
a amplio fogonazo su luz
por los candiles que juegan y ríen
luz de consuelo,
se prende un horizonte de huesos
por piel,
vereda abierta del ayer,
nazco, subo y escalo
la hiedra por mi árbol queda,
tu dulce silueta resoplada,
un camino una vid y un olivo,
un apuñalado trigo,
el momento vuela consigo,
fiel tapia caída
reverdecer de mi martillo
resplandece esta luna quieta
de tu ombligo,
cabalgo por el suplicio,
avanzo mi enervado delirio,
hoy no pudo ser un día cualquiera
en mi tijera,
se dibujó la esfera perfecta,
y el susurro de plata corrió sus yardas
y sus escuadras,
brillo de sol, luz de ver el cielo,
de ver un difuso hielo derritiendo,
alzando la puerta a tu alma
que tenías sin pestillo,
espero para el momento
de cenar tu noche,
mi refugio, mi despistado destino
y su hueso crepitando
sobre el último tren
que lleva mi vida
reverbero el canto
porque sin ti no encuentro noche,
ni nido, ni lluvia vuelta poesía
de tu bello cuerpo,
sí, eres todo lo que siento
más que un umbral
llorando de cuarzo
más que una cama de tu regazo
porque eres mi hombro
eres mi trazo,
y mi mente al resguardo,
niebla y sangre de marzo
en hoguera de rosa de la tarde,
en la vida que te habla
eres más que un puñado de pétalos,
más que estrellas de este techo
que cuelga
y derrama llegada la hora.
El Castellano
BEHOLDER, CONTEMPLADOR:
Ahora que el día se ha ido,
ahora que navego letras
absorto a la espera
de una nueva palabra
capaz de crear revolución
capaz de hundirse y resurgir.
De flotar y deshacerse
en mundanal ruido de sueño,
temblando su frío sentido,
un recipiente y un vaso de muerte,
una visión y una explosión
de todo lo que prevalece,
de todo lo que incapaz perece,
un maullido de tejado,
un siniestro azar de suerte,
esperé y esperé y todo lo negué
como este verano frío y helado
que todo lo inexistente surqué,
que mi destino se doblaba en mi sien,
era un día en solar negro,
era como un tenebrio que camina,
como una poza sin aljibe,
como una hora cronometrada sin reloj,
era una súplica teñida de sed,
un grillo y un aguacero despierto de sol,
una montaña sin hielo,
un glaciar sin temperatura,
un brazo sin alcanzar,
una tormenta sin sonar,
era la vida una caricia en mano helada
sin sangre sin nombre,
mutable horizonte sin linde
un pájaro de cemento que aturde,
una noche callejera
y olvidada en la tela de araña,
era tu surco algo más
era vena era rabia desplomada
en el barrio de la quimera despierta,
quizás hoy quizás mañana
jamás prenderás mi alzada palabra
en otra alma en otro nombre
porque esta es mi lumbre,
esta es mi estaca.
El Castellano
NIEBLA DE FLOR PROFANADA:
Voy serpeando la tierra,
mis pasos que jamás yerran,
jamás altivos cercenan,
una estaca en mi corazón
que conseguí separarla un día,
un hondo surco labrado
de sangre desvalida
me azogó profusa y hondamente,
pero ya no te siento dolor,
quizás tu vago recuerdo profano,
para llegar,
para deshacer tu sendero,
de áspero color
y sus azafranes amarillos
de la tarde,
ya no caigo
por tus amplios lindes
de niebla y cuchillo,
aquí en mi alma
se yergue el umbral,
la sombra me abandona
para besar,
espíritu de agua dime
si el devenir de mi vida sostienes,
por qué angosto lo atrincheras
en diáfano cuarto umbrío,
yo que horizontal vago,
por encontrar un día
el vertical disparo
de mi enhiesto ciprés
con verdes refranes de hojas
con acrisolados
cristales de savia
a su altura quiero yo blandirme,
velando a mis muertos abrojos,
devorando la calma de sotos,
ansiando la voz que me habla
la voz que yerta me domina,
preparé un lecho de cardos
para llegado el día
escribir un epitafio
que ponga, que diga
heme yo brotado de la espina
aquí yace, aquí reposa
todo el amor que sentí un día,
y esta estaca
conseguí arrancármela
en su día.
El Castellano
RENACIENDO MI OJO DE TIERRA:
Diestro empeño asolado
en fanal infinito de campo,
eres miembro de brillo,
inmortal crisálida azogada,
un grito y su descampado,
lluvia y solariega rambla de vida
abarcarte no pudiera,
dónde acaba dónde comienza
tu verdad única,
compás del silente grillo que te alza,
pero jamás te alcanza,
del pájaro a tu rama tu balanza,
tu araña de acequia me abrasa,
para ser plural la templanza,
suave tu nube forjada,
naciente tu acompasada azada,
vida de la muerte sembrada,
eterno réquiem de naturaleza amada,
en vasija en cántaro que emana
crea, seca y rellena
una sangre de etérea tierra
como vena de la era,
mi fiel estampa quieta,
acabando la montaña en llana vega,
acabando el río en otro plural
llamado vida otro umbral tejido
perdido en abismo líquido,
retazos de encinas que me respiran.
Ababoles que caminan
destello fugaz que todo lo que nace
una difusa luz sucumbe,
para dispersar más muertes erguidas,
siempre en arduo silencio de despedida,
tenebrosa y umbría su caricia
que la tierra llena,
que la tierra devora,
para ser otra sombra,
otra estática vida
en otra boca,
en otra araña que lleva
su flama,
el acecho yerto jamás descubierto,
hasta llegado su momento,
hoy puedo verlo
mañana jamás podré negarlo
ni catalogarlo de aleatorio azar
todo tiene su razón y su causa imposible de negar,
para yo ser de la tierra y la tierra ser de mí
mi sangre que porto
en vasija de éste cuerpo,
no pude elegir ser otra vida,
ni tener longevidad imperial
de árbol y su carcoma,
mi tiempo avanza angosto
por descubrir la luz que riega el páramo
en solar entrega
diluyéndose fluyendo como rayos ondulantes
que descubren flores
y el campo afligido tiñe de ocres
con un estío subordinado
al renacer y evanescer de la sed.
El Castellano
SER DE TIERRA:
Es más que triste
que esté contento
porque estoy cantando
porque eres rama
porque eres gesta que prevalece
porque se agitan los mares,
y salvada de ellos
se alza Castilla
desde su espiga marchita,
fiel de lumbre, eterna hoguera,
sus pasos, castañas en el fuego,
forjando en uno de sobriedad
avivo el manantial,
los jornaleros tendremos que desfallecer,
alameda mía,
sangre en mis venas no falta,
se forjará mi noche en la azá.
Hoy sólo somos cimientos
mañana torres de sangre y tierra,
de puñal y rama
nuestra verdad,
que claman fusiles,
de gente en estas tierras encumbradas,
este es mi rifle, esta es mi vida,
no me pisarán las rosas del alba,
garantía de mis ojos
que sangrarán los cerrojos,
hay que aprender sobre torres de tierra
aprender cultura,
para saber luchar,
para saber defender,
los valores los cinceles,
las plantas de la vid al olivo
del grano al granero del ayer,
y a sí jamás naufragar,
porque esta tierra cuesta vidas,
y los hambrientos se los come su entraña,
de esparto y fuente mina
mi sierra que camina,
muerta jamás arrastra pena,
violín de cuchillo,
sueño en vergel de sangre,
mi tierra por la razón,
no se agota la espuela,
miles de respiros valientes
troceando nuestra miseria
para ser del pueblo
y el pueblo ser de su tierra.
El Castellano
SUEÑO EXTENDIDO:
Presentes sucesiones de difuntos.
Quevedo
El cielo como granate yerto,
expandido ¿Cómo? con sus cristales por colores,
mansamente no me amanso.
algunos yertos que caminan
ansían la doblez de mi destino,
sábanas mojadas un olor a humano,
saldrá el sol no con más ganas que ayer,
para sujetar este calor,
vidas que ansían otro destello de vida
tras su estancia en breve instancia de caducidad,
que teje su organismo,
mundo no me negarás la visión
por este sueño extendido
de mi jardín de mujer,
sin necesidad de podar escalo sus ramas
abordando su infinita sed,
arde mi cuerpo fiel verano,
quisiera ser río y fuente de montaña,
quisiera ser tantas cosas que sólo elegí una,
la que no elegí,
si no dos células y su vientre,
mis naipes se van desvelando
una baraja helada de sangre,
un destino y un cauce,
mi vida que elige electrificar su cobre,
en círculos la polilla
vampiresa de mi ropa,
destino avocado a su perdición,
estamparse y quemarse en la bombilla,
luego pregúntame por qué tanto buscar la luz,
perdido sosteniendo tu puerta,
el monstruo de tu armario tiene miedo,
quiero devorarte
lentamente.
El Castellano
ALGÚN ALIENTO:
Tú eres mi ventana volada,
eres cielo y fuga de escarcha,
un segundo y un desespero
fumando mi cigarro,
hasta el tiempo de volver a caer en tu cuerpo,
mantenme estas cuerdas,
mantén estas esperanzas,
te vuelves real color
suplicio de rosa gris,
anhelante caricia de tus puertos,
una gota, un oscuro linde,
un respiro de fiel accidente,
momento que se retuerce,
amor demostrado y dolido,
vida de mi sentido,
ufano beso y tiemblo,
carne de esencia, alma plena,
estallido y borbotón de luz,
no eres mala liendre,
eres demasiado buena para beber de mi sangre,
eres un puente de destino
y un alambre rizado,
eres mi sueño en el pasto,
eres flor que se renueva
jamás seca,
eres sueño y camino recorrido,
eres mi ansia que por si vivo
jamás podrás destruir nuestra rosa,
te amo más que dos palabras
es un nombre a nuestro idilio
jamás perdido mi amapola.
El Castellano
ABROJO EN MI DESTELLO:
A veces roto,
a veces nuevo
ecos de este horizonte profuso,
nueva era comienza,
escalando mis aguas,
justo mi vida está empezando
ruptura para ser libre
silencio envolvente
gira mi mente,
no Dios el Demonio eres tú,
Dios del demonio
en este linde por el calor sujeto,
estados febriles
de quebrada conciencia,
tus mentiras son lejanas,
de un océano abierto,
muchas noches te esperé
muchas lágrimas se perdieron
vida aparte,
creo que ya debo irme
dejar esta espina de corazón ,
prenderme en el olvidado brillo,
encontrar la luz del astro,
olvidar a mi umbrío ,
una despedida que me cuelga
la Copa de cerveza,
no bebo pero por un día
no me voy a condenar
más de lo sentido,
más de lo vivido
apelo al olvido,
y su cruel instrumento,
a golpes parados,
melancolía déjate no la conozco,
locura nada esa es pasajera
como humilde tijera,
buscando, buscando
olvidé cómo se escribe
un poema,
dejar de escribir es como morir
demostraré a este verano
que mi tierra de la parcela
llorará flores,
mi combate cincel de arte,
aquello que mi magia sucede
porque tengo sangre,
mi calor mi rojo humor,
ya no soy el mismo reflejo
no soy aquel vendido
soy destello de mí mismo,
fiel abrojo será tarde.
Para derretir todo lo existente.
El Castellano
FLOS UMBRA FLOR DE SOMBRA:
Está en la lluvia,
ella es Dios,
de ojos abiertos atraviesa
un profuso soliviar,
de flores,
de vivos colores,
escrito sin mentiras su nombre,
era un hombre
vendiéndose a otro hombre
que lo volviera hecho y acto
de material afán de éxito,
pero la naturaleza no se puede cambiar,
el artista no nace,
no se hace,
nace y se hace deshaciéndose a sí,
igual que un pre-bonsái
por podar y desmochar su alma
hojas mías quedaron mustias y abatidas
de haberme rendido al sentir de describir
a un amor furtivo que me acechaba
a un sentir interior que me dominaba,
caí como gota de agua,
y el estruendo me partió la vista,
ahora soy tallo nuevo de persona,
podando y podando,
destruyendo para poder crear
para acariciar este Sol
que retuerce , soslaya, pule, amamanta
el hierro de mi entraña,
el miedo no me para
el dolor por ser dolor se acaba,
siento que siento,
amo a la mujer que amo,
tallada en cuarzo,
al final seré el último hombre en pie,
cada verso que lanzar al viento
como fiel testigo cuchillo
de perder la realidad,
justo a la derecha,
recto para ser erróneo,
sigiloso para hacer ruido,
noche, alas blancas
es de ti el tiempo afilado
astros, diáfanos siglos
caducidad de la ciencia
caducidad de su conciencia,
verde monte para rodar,
azul cielo para atravesar,
siembra para ver la flor llegar,
beso para el placer amansar.
Me estoy perdiendo de verdad,
tengo que fumigar.
El Castellano
CUANDO LA LLUVIA CAE ABAJO:
La libertad está tejida
de flechas al horizonte
devanan duros, limpios,
cristales ahogados en profunda sien,
surtidor de velas de los mares,
fuegos en lumbre eterna
por los senderos que labró
el astro verdadero,
inconsciente avenida
mi ser viaja en sinfonía ausente
de tristeza y su carcoma
todas las expectativas
son vivencias
para el vivo
todo cambia
para lanzarlo
y nunca olvidarlo
sólo ser es el reto,
lejos de leones
lejos de sombras cada día,
cada emoción
por mirar
dentro de lo que no se ve,
se siente
promesas
que vuelven en boomeran
rescoldos de vegetales escombros
el pasado se abre en alta simiente
un día amarás decir
es alguien a quien tengo a mi lado
para resurgir de la hoguera
en honda tierra,
y mi ceniza lo siento esta noche
crepitará al viento
que no hay mayor portento
que haber conocido
un día su sustento,
que mi alma escapa de mi cuerpo
para abrazarse al firmamento,
mi lumbre ya avivada
prenderá el cielo
todo lo que siento
indómita expresión del tiempo
al que estoy sujeto
en oscura torre
que yergue mi adentro,
fuera de la noche
dentro de la luz
en veda azul
en vega de solitud
dentro donde tu interés
te miente
donde mis brazos se alzan
asumiendo la eternidad
de mi sendero,
la eternidad del azul del cielo,
donde desde hace siglos
te espero.
El Castellano
SEMPERVIVENS:
Modelo con cincel de viento
las manos de una caricia,
la vida de mi abeja subrepticia
cómo definirla no sabría.
Estreno un nuevo Julio
una gota sedienta de su estío,
fuera del momento
que mi vida se vuelve luz,
mi vena siempreviva se yergue
acariciando a mi Sol,
que este mes me vio nacer,
viento, viento bonito
llévame en tus alas
de vidas labradas,
quiero que me muerda mi amapola,
que se destape tu lecho,
y me dejes apoderarlo,
para siempre volar
como mitad de poema,
que las aguas surca,
para fortalecer el riego de mi tierra,
con sangre de hierro,
tu fiel desespero,
renace mi araña Lichtter
tejiendo mi existencia
en mitad del verso
hoy por ti, siempre por ti
Lhiannan Shee,
se quedó llana y profunda
la cuenca de tu visión,
siendo hondo destello enfundado,
mi calvero y sus ríos de sombra,
sigo por la línea goteante
de nuestro suplicio,
me pende la mirada tu ventana,
mientras hilvanas libre tus cabellos
de rizos de cielo,
los cuadros de mi creencia los conoces
mi veleta, mi Sol, mi flor,
mi árbol, un puente a encontrarte
una vida,
juntarme, en proceso que rige,
que estalla en dos rayos de tormenta,
te quiero, te necesito,
el Sol dice lo que me susurras,
mi cigarra laboraba
el sentir de una esfera
que canta dentro mi alma,
de un grillo el soneto,
de tu cuello el cristal de cuarzo,
de mí la lluvia en tu agraz de marzo,
mi concepto será ejemplo,
avanzaré por mi sentido puente.
Nuestro destino cruzaré.
El Castellano
APIUM:
El barbecho de la espiga,
la mar me trae la ola,
la montaña me trae la cascada
mis ojos llevan el color de siglos
de floresta destapada,
mi tierra se lleva mi espada,
el aire mi aullido
hondo, redondo
crujiendo en las aguas,
mi vida lo siente
lleva sangre en las venas,
arterias de ángeles
estrellados en su eco
alzado a la Estrella,
sostenme en las bocas
que mi silencio reverbera,
mi montaña bonita será sentida,
mi Santa flor en la boca de la abeja,
que mi vida maneja,
tráeme los pinos de los montes,
el aire de las cumbres,
tráeme tu boca para nacer en ella,
sigo a Lucifer
bueno él me sigue a mí,
cosas peores habrá
como abrir y entornar la puerta
para que pase la maldad,
siento decirte que arrastro mis demonios creados,
para enterrarlos en el campo,
al lado de un sigilo de chopo,
que a sí estén de ojos abiertos,
no me enloquecerán más,
estoy hecho de miedo,
soy de hielo
más fuerte que el don austero,
palabras sepultadas en mi zanja,
mis padres y mi gato son inmortales,
¿por qué me llevaste padre a la ciudad?
que lento muero aquí,
sin sentir el viento de mi campo,
sin mis flores y su aroma
a vendavales desnudos,
estos árboles de cemento
no suenan con el aire,
ni estos cristales atraen abejas,
aléjame de rejas,
salva mi muerte
que es del monte.
El Castellano
CORAZA DE TIERRA:
Abrasa mi vida, esquiva es
esta piel de caricia
estoy ardiendo, aviva mi resquemor
en este mundo que se retuerce
y envilece entre sus venas razones
la realidad como lirio de negro pétalo
sólo un sendero por abarcar
llamado vida.
Del astro Rey de sí mismo
a la caléndula de tierra,
su esposa efímera.
Avanza mi subrepticia,
entre páramos deshojados
y sus hojas por gentes.
Espiga flagrante, sentido granate
por mis ojos he visto nacer
los genes de tierra,
por mis ojos he visto morir mi amor
que mi pecho yergue
yedras brotaron tapando su calor.
Mi Sol me enraizó
mi ilusión se diluyó,
una flor de sangre brotó
llenando mi vacío interior,
mi amor por su reino vegetal
me mordió.
Ahora sólo encuentro
tranquilidad y sosiego
en las vidas que siembro.
En mis diablos de flores.
Hasta yo morir
a la altura de los montes.
El Castellano
EXUL UMBRA:
Ataraza mi alma
una fáuce sigilosa
que me devora
hinca, sigue y prosigue,
sembrando mi hastío
que sin él yo no vivo,
respiros inmaculados
a esta sed que mi cuerpo
lo alimente la estrella,
pasado atrás fiel desvelo,
voy construyendo,
voy cavando el surco
milenario de mi destino,
en este cuenco, en esta vasija,
en este recto cuerpo
del que me desprendo,
para que mis manos hablen silencio,
mi sombra es quien habla
de su destierro,
de su rezo al flamígero astro,
mantenme afuera,
espero mi momento,
de entablarme con vuestro Dios,
y preguntarle si merecía tal castigo mi sombra,
sí yo merezco esta pena que me soslaya,
pero si no fuera por este dolor
no sabría que vivo sigo este siglo,
ni mi saeta de luna volaría
a encontrar su desquicia yerta,
y su esfinge malva,
en alto claro
en marco clavado,
es por mis ojos de grillo
que alcancé a ver
mi destino fusilado
para entregarme a un único camino
que me rige que me dirige.
El Castellano
YACIJA:
Vida mía rozagante curso
en solaz de muertes que caminan,
los oscuros límites plausibles,
como dije no puedes mentir
dentro de mis ojos,
llana voz altiva subiendo sus montes
soy libre por ti
en esta generación ciega,
una vez que se ata el sentir
de mi esfera difusa,
en este lugar yo puedo
sembrar la luz en oro de argénteo astro
mis ojos oxidados
yerguen el vapor de cada día
que estalla su retina,
cristalinos en el verde gozo,
sin despedida,
mi tierra puede subyugar en pie este mi ser,
brillante hielo de cuarzo
tejiendo las manecillas de mi reloj,
esmerilado suplicio que lanzo,
que parte tu acero,
trasquilando mi luna
hasta que despierte mi Sol,
fuera del momento, dentro de la noche,
esperando que torne solamente luz,
desvellonado mi lobo ártico,
en hierro de mandíbula
este ser por la defensa de su valor,
que no fue del tiempo flor
fue indómita expresión,
en un cielo que labró,
vengo de un horizonte iluso,
desempolvando mis muertos,
viviendo el polvo de vida,
mi pasado rescoldado, derramado,
por la ventana desolada,
mañana será eso quizás
una deidad sin nombre,
un cuarto sin lumbre,
veleidoso y regio,
consecuencia sin rastro
nombre escrito sin pluma,
yacija inerte caminando los oscuros lindes
de su destierro,
de suspiro de hielo invernado
con brazos lejanos a través de los tiempos,
su ayer llueve a jirones
sombra que caminará el abismo
para encontrarse,
y desafiar al viento,
estallando en luz plena
jamás dominada su desventura.
El Castellano
LETRA DE VIENTO:
Aguzaré al viento
en vertical estampida de elogios,
para que lata con fuerza
se cuelgue en los solares rendidos
de mi agraz intelecto,
las lagartijas correrán su rambla
cruzando la tierra,
mi carrasca lucirá
un sabor a mujer desnuda,
el verde militar del ciprés
tendrá tacto a luna,
somos silentes dentro de la luz
somos veletas del negro puerto,
fiebre navegante
mar de mi vela,
lumbre eterna,
alma de renegados,
jamás complacidos,
rajaré al destino en dos mitades,
una para sacrificar
por si sale mala,
su alta ojera cruzada,
afilaré mi cuerpo para clavarme
al viento que hasta ti me lleve,
solo un segundo marcha atrás
y me sembré en tus manos,
como flor de centella,
qué bueno que existas en mi realidad,
que teje, desvela, nace y devora
la esencia que te alimenta,
hoy lo siento desperté siendo río
que quiso llegar a las tierras que te modelan,
alarido despierto y aullido
en nácar de tu placer,
para solamente ser lo que tus ojos
digan que soy.
El Castellano
MIS CUCHILLOS SEMBRADOS MI SANGRE YERTA:
Del cuchillo hiriente
a la voz mía por temblar,
en esta zanja de tierra muerta,
el oro que no vuelva a brillar,
ni mi destino a fulgurar,
¡Lluvia! cae y suena de nuevo
te lo ordeno,
mi brazo
mi hombro eres de un trazo
no te hundirás si no
sólo a cavar tu propia sepultura,
el horizonte yace silente,
en difusión de espadas,
paga mi precio de vivir sin ningún miedo,
sin superior mas que mi sombra,
que algún día juro
la alcanzaré,
a veces me rompo en mi pasado,
a veces cabalgo el linde de mi oscura pena,
silvestre como las aguas,
caminante sin sendero mas que su arteria de sangre.
De mi sangre y oro fino,
de oro fino y sembradío
de trigo y de vino,
se viste mi Triana en la arteria del lugar,
campo lindo, amapola en su sangre,
olivo y regadío
sierra y labriego,
sierra y lozanía,
canta mi Castilla de su encina herida,
canta el olmo viejo
quiere tener raíz de pan de centeno,
llora mi vida en la sangre del barbecho,
soles de niebla y barrizal
corren mis lágrimas d’este lugar,
muerto vivo en mi cruz de tuerto,
ya viene la parca a llevarse
a llevarse la rosa de este réquiem,
y alegre viene la parca a llevarse mi cantar,
hombre de bien no quiebres tu rodilla
no quiebres tu rodilla
en reverencia al asesino que gobierna aquel,
campo, campo hay, en mi olvido
que se viste de hinojo y de endrina
de espárrago triguero el suspiro
el suspiro de este mío latido,
jilguero de mi cardillo
no tuerzas tu alita en tu trino,
silba el amor de este reino,
pies de barro arcilla de Caín,
hoz de guadaña de esparto,
grano de nuestro granero,
sed de cada hambriento,
tiembla mi patria con su inepto gobierno,
como dirigir lo que no se puede dirigir,
como clavar cruces a cada campesino y obrero
desta colmena de mi señor,
cada abeja envidia su reina
que se lleva la miga de miel caliente cada día
a costa de nuestro sudor,
muerte, muerte al opresor,
maldita estampa dibuja el viento del usurero
vestido de traje y cordón,
vestido de traje de lino y algodón.
Muerte, muerte en esta canción,
llueve mi sangre el papel,
si mi aliento llevase al vivo a sentir,
si mi Triana fuese guirnalda de harina,
si el pan comiese la boca,
si no se quemara mi tierra en la hoguera
abriría el cielo para clamar mi dolor,
vuelto templo de mis dioses,
levanta, levanta y camina cada camino,
cada camino de zarza y espina
rosa, rosa divina tus labios de mujer
el manantial de tu piel,
fuente de mi hiel,
perfumada de brea, de sal y arena
llora mi flor
no aguanta su dolor,
un desierto que envuelve cada bosque,
humo y alquitrán manda cada ciudad a alzar,
amor sencillo natural, ¿Dónde estás?
dónde estás mi vida que te escondes por las ramas,
por las ramas de mi soledad,
te cultivaron el consumismo en cada lugar
olvidaron lo natural.
Cada raíz de árbol llora y grita en su silencio natural,
Cernunos no encuentra ya su hogar igual,
cada carretera le cercena su moral,
de sierra y siembra tiñe mi umbral,
oda al cielo de mi lluvia inmortal,
de nieve y hielo clavo mi aliento,
hasta adueñar cada lugar,
sombra y demonio de mi morada
despierta, despierta deja de llorar,
espiga de tu pelo
Triana en tu despertar,
quien viera tu caminar,
por las veredas de Andalucía,
por cada poeta muerto que dejó su sangre en la tierra,
te llamo y respondes desde el olivo de Jaén
desde la Alhambra de nuestra Granada
renaces Lorca tu sombra para clamar por nuestra libertad,
para clamar por nuestro pan,
muerto vivo si no siento mi latido,
cada río inundando mi olvido,
mi frío yerto floreciendo mi ciudad,
faroles y coches edificios y hormigón,
muerto en esta jaula,
por respirar aire de montaña,
por tumbarme en la grama a pensar,
por tumbarme en la grama a pensar,
me nació un fantasma que ama de verdad
que se ilusiona en mi mirar,
hoy te entrego mi aliento sin mirar,
vivo para verte caminar,
y que no te maten la ilusión al besar,
alma de mi alma me cantas la luna primera,
esa que enamora mis hojas de otoño
esa que se viste preciosa,
hasta el firmamento del mar,
tristeza seca pena mora
pobreza asesina que nos quieren dibujar,
matar tres veces al que ya yace muerto
en su infinito de cristal
cuándo tu despertar,
cuándo te alzarás para expulsar nuestro mal,
cuantos llantos aguantarás soportar,
cada poema mi letra compañera como mi puñal,
clava la sangre del tirano
en espinos del infierno por dibujar,
ahoga mi llanto hasta volverlo sed de verdad,
sufre mi tierra
en su llorar nacen las semillas del mal,
alma de pobre en este suspirar
por este puente,
por este puente,
réquiem de mi tierra muerta,
réquiem por mi tierra en brasas,
parca, parca bonita enamora mi latido maldito,
muerte, muerte al cacique
siembra tu guadaña en la corte de nuestro mal,
siembra el mal de ojo,
siembra tu oscuridad,
para que el rico no vuelva en oro a brillar.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Blándeme:
En mitad del campo,
sólo allí que la encina enraíce mi carne,
el hinojo lata al son el tambor de sus flores,
la carrasca grite verdades del monte,
vereda quieta, enarbolada,
soledad disparada sin descanso,
sólo allí reinará mi alma,
en letras escritas en las hojas de vida,
las lindes teñirán de rojo y negro,
de tinta y sangre el resurgir del añil
aliento dibujado de toda vida en color,
del albor a la muerte en flor
se alzará mi latido con su amor.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Renace en la piel,
en el albor sin conciencia,
hace más frío que antes
sentido muerto, caído
olvido yerto
raíz del ser
más callado que el invierno
avanza camina a voz
todo lo que he perdido
polvo de estrellas, hierro de océanos
piedra de montañas...
hazme recordar alas cansadas
cosas grises que te gustaba sentir
mi amada así sabes
horizontales que no puedo olvidar
ejes verticales de conciencia
sin dormir
danza la primavera del lugar
con mi soledad pintada
en la sangre de mis ojos
todo lo que veo teñido
la ilusión cae en gotas derramadas
cayendo congeladas
desnudo mi cuerpo en la penumbra
del segundo quieto
raíces comiendo mis venas
hojas de mi historia mustia, abatida
sentido muerto
viviendo por ver morir el momento
momentos atrás que cae el recuerdo
sin miedo, sin sentimiento
todo hirviendo
sólo este sarmiento de cuerpo
esperando que juzguen a su alma
libre de maldad
quién estará allí
quién vendrá a darme un camino que seguir
solo en la oscuridad
donde todo comienza
las sombras me reconfortan
y veo en luz mi vida
para encontrarte
algo que darte de dentro de mí.
Un amor rugiendo en la boca de la estrella.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Diestro del mar a la montaña,
visten sus flores coloradas orgullosas y sentidas
cual caricia de su jardinero que las ama
el viento armado escala cual seco rayo
su sol enturbiado se paran las oraciones
hipsipila dejó su crisálida
en un caballo alado recorre sierras y sus manantiales
recolectando toda simiente desde todo confín
al inerte sombrío albor,
mientras su fría luz crece y camina
sin franca tapia ni verja que detenga su escalar
vuela vaga la libélula para posarse en su hombro
recio brazo arrido ninguna simiente cae a su lado inerte
que lleva que trae a su castillo olvidado
hechiceros de todos los reinos desvelaban que sólo
un reino se mantendría vivo
y no era el del humano ser
Hipsipila cabalgaba por naturaleza su religión
abarcando de la tierra a la lluvia
cual rayo cortado de Sol su cabello
los pájaros trinaban en su castillo
hipsipila siempre vivirá como invencible Sol.
El Castellano y Leannán-Sídhe
Flor de Bradomín:
Partir me alcance un día,
he de visitar el prado
que yo por Bradomín
nunca he visitado,
he de colgarme
de la flor serena
un día lluvioso
a colgar mi estandarte,
vive, nació y deslumbró,
deberéis guardarme el vilo,
que yo partiré este humo,
quebraré la voz del eco,
soñaré que estaba despierto,
mi simiente sacará su cuchillo para sembrarse
sola como se destapa la primera
gota de rocío que tiembla
el Sol que visita,
esta la haré generación seca
en pergamino de hoguera,
mi letra caerá en el ojo
desde el infinito parco de este abrojo,
el altiplano enjutado,
dirá que me debéis cuanto yo
Arriano he plasmado,
y este granate será mi lustre recordado,
es y será mi casa,
el esfumino en coro de grillos,
aullando bisagra,
a la luna que escarcha,
hazme libre luna,
saca mi alta ojera con tu luz,
abre mi campo
al murciélago señor,
acaso mi espada mi tiempo no blandiera,
me encumbro de la fiera,
para ser quimera a la espera,
mi Leannán dicta
yo converso
que desde su estampa
al hada infernal de esta
yerta conciencia,
resurgiré
de la espina dorsal
de este cuervo Förüq
que me habita,
el ser que me lleva
cantará soñará
que es y será otra primavera
para enloquecer desde ingenua siembra,
graznará el solar del fresno quieto
abrirá el despertar de esta gris araña
entre agujeros de la idea
soterrada, descubierta, alzada
entre sierras y barbechos
despierta, riza, besa, evapora
esta sangre de tierra
que es mi amapola del pecho
anclada, versada, cálida, cariñosa,
abierta entre grietas que palpitan,
fulgente, displicente, dispara que flagra,
sentimiento de esta azada
que es mi vida
al borde de la flor
de caléndula
que es esta realidad tejida
y su floresta que riego desde
que el verso me escribió
a mí la felicidad.
El Castellano,
Señero quieto:
Linde abierto sembrado por Dioses
de plantas que sólo ellos pusieron
y que ven exclamar su muerte
de silencio gritado
lentamente las estaciones.
Es este campo que vive lejos
con señero
un señor de señores
amor de silvestres,
es encargado de ver en flor
sus amores,
vence que atraviesa
sólo su mirada,
un jacinto se yergue
de azules botellas
sus besos de rocío matutino,
matutinos gritos postrados,
con el hervor que reverdece las tierras,
de cal y tierra arenisca,
de arcilla al barro,
de la pizarra al risco
de granito,
es una vida mi estatua,
dulce, risueña, sembrada,
albores cruzados crepitando,
mi nido de grama rehaciéndose,
entre luceros anclados,
arriba mi barco
estos océanos y mares
de tierra,
que todo lo rige
su materia,
desnace el tiempo
abriendo el brillo de mi falcata.
Fiera de fieras
yo soy la fiera,
desde las piedras
a esta mi hoguera.
El Castellano
Aciago, recto vilo quemado:
Cantares quebradizos
se alzan entre aciagas esferas
de la palabra inexistente,
entre sones terrazgos
que sí puede,
llevarme la espuela,
entre la mente que afila,
que pule mi sangre oxidada,
por el puente de venas de mis manos,
diestro al compás que muerde
yo sí estoy hablando
tú no estás escuchando,
esta vida asida en un tiesto,
por encajes sin alba
por encuentros fugaces
en mi averno tejido,
entre estos soles de trapo
que me levantan las flores,
avanza la flojera del día
que llega a su final,
volviendo madrugada de espadas,
quiero contarte hasta tres,
mi aliento que no sabe contar al tuyo
pero sabe que cuentas con él,
yo que ni segura tengo mi muerte,
colgaré destinos
de sus ramas de fresno,
mi piedra será estatua,
no seré yo quien hable si no ella,
el verde musgo llorará el sino dentado,
esta vida de espectro
no me dará de lado,
de un solsticio me haré un cuarto,
entre mis líneas habitarán espasmos
de ideas ausentes,
de fríos hielos de soledad congelada,
liberaré este reino enfuscado
cual vicio cual tierra sin dueño
de crear nuevos palabros
que serán hijos de la nada,
cabalgada, soterrada
en infinito de la siembra alzada.
El Castellano
Soles de cuarzo:
Libero vendavales furtivos,
acampo la idea en tremenda pradera
descolocada, mansa, abierta
en florestas húmedas de rocío
tempranero, sólo allí tengo nido,
entre trinos que excomulgan mi deseo,
como atardecer rojizo sin sangre
acaso es, envoltura dispuesta,
rezo que acompaso la franca vida
de mi caléndula del camino,
resumo que coarto su vida verdadera,
luz de los campos, luz de mi campo
acaso fuese mío,
aquí solo hundido mordiendo este papel,
traigo que quiebro tormentas en nido,
culebras del sonido perdido,
me desatan yugos de esparto,
arde la simiente mía,
entre clavos ardiendo,
entre amapolas dulces, risueñas sin cruz,
se desmenuzan abrojos
de mi soledad carcomida,
a la que entablo soliloquio
en cama, con ella sin ella soy el mismo,
verdades atrás qué necesito,
si el mundo me hizo completo,
quizás aburrirla a ella mi pena,
nacida en cuarentena,
avanza mi siega,
esta vida mía vale la pena,
rezogo brillos de metal
cuando deja de serlo,
y crispa al viento
lo que llevo dentro,
más que un tarro de miel
y unas flores asesinadas,
un corazón que sube por la garganta,
a decirla a ella que no se vaya,
usted es mi compañera.
De estos siglos que me quedan,
eres la carcoma de mi madera,
hasta ser lanza,
estaca que somete al viento,
en aullidos, en graznidos dolidos,
en enjambres con reina.
Por ahora a tu lado
soy azada que socava mi camino,
sacando terrones de lamentos
para sembrar tu amor
que Dioses me indican
que tendría que estar ciego,
para negar que eres más de lo que siento,
como veleta que le falta lo principal,
para no ser dirección que marca,
una flor plañía a mi vera,
que le faltaba su insectito
que la besara sin diligencia,
así la belleza nunca completa,
recto escalafón retorcido al beso,
unión de dos, como escala sin peldaño
rampa no sería,
me encumbro de la fiera para ser yo
la fiera, de esta mi pradera,
se afila mi vida quieta,
entre soles que cuelgan,
y colores que lloran,
despierto para entregarla
a ella mi cardillo de la dama
para que me lo devuelva
cuando me una a ella,
como se unen dos gotas
del mismo agua,
como se desgrana el molinillo
cuando saluda el viento.
El Castellano
Linde quieto abierto:
Derecho firmamento
entre filos de gentes,
es una piedra que camina,
piedra aventurera,
seca y umbría,
reposa y duerme
cantares del linde,
centellea rayos irisados
se riza con los besos de lluvia,
acaso quiso ser otra,
ella tan yerma, tan plácida,
imperecedera,
cerrada como se cierran
los rayos de luna,
acantonada, de estéril estampa,
dejas muda alabanza,
el día que te hice de voz,
piedra bella, sola,
estridente sin patio de sonido,
y esta voz que te di
voz dorada como tu piel de minera,
como un soto sin perdices,
avanzabas solo tú,
la vida quieta,
sembrándote allí por donde anduvieras,
al candor de piedra única
igual a la siguiente y a la anterior,
sin afán superior
hasta que este poeta te dio voz,
como flores que sin color
acaso fuesen,
un despertar en brazos de cieno,
un respirar de la montaña,
un cuchillo calizo que afilan
erosiones de las eras,
latido férreo, sangre de mineral,
o compostura de arenas,
piedra de mi casa,
piedra de tu casa,
la tierra.
II
Piedra potencia eterna,
nacida como nace una estrella,
cumbre de filos por bandera,
hogar, cobijo y morada
de lagartijas que cuelgan tus venas,
colchón de rayos de sol,
asolada tu espera
por quien te dio voz,
lideras tu guerra sin cuartel,
antes de yo nacer,
tú dabas alientos al suelo
sin importar pertenecer,
siempre fuiste
siempre eras su piel,
de la cantera, al nicho,
del mausoleo, al caserón viejo,
del silo al castillo,
tu fortaleza empedernida,
tu aval de honda certera,
Siempre estabas
siempre estuviste,
como río a su voz del mar,
osado no fui yo
quien te encontró,
solo fui encargado
de darte moción verdadera
ojalá pudieses contestarme
mi piedrita bella.
III
Devuélveme a tu vida eterna,
del soto a tu quimera verdadera,
clávame la oscuridad de tu cueva,
en esta esfera pulida sin espera,
risco de tu sien enarbolada,
millones de hijos
esencia desnuda de tu alma pura,
techo sin compostura
del ser invertebrado,
techumbre que pizarra llora,
su azabache de cristal,
tu sangre de fuego y agua
que nunca te alcanza
sólo partirte puede,
grieta de helada, tus filamentos
que encaran tu azar de vida sin dueño
a tu sangre de musgo me cuelgo,
en verde musgo tu fantasma muerdo,
vida de herramienta,
azar de la idea,
al paraje que te conforma
al que sostienes su vida
siendo el suelo techo de esta hacienda,
si tuvieses dolores todos gritarían
que se acabase la muerte en la tierra.
El Castellano
Es un fuste:
Quiero deslumbrar mi camino,
ayen de estas víboras que caminan,
palpitar el látigo enfoscado
de sedientos corazones.
Entre sangres fugaces afilo
esta vida en grana marcada,
deshojada, por cuanto he conocido,
más que tristes metales lascivos.
Caparazón este el mío inerte,
vestido de marzos seniles,
agota, coarta la esquela
de mi memoria perturbada.
Camino sin camino
por donde se oculta el este,
veo la flor que desviste,
entre pétalos su iris difunto, perturbable.
Te construyo sin verja, franca,
tapia ni acantonado te hago
a imagen y semejanza del aire.
Que pasa y mira,
que mira pero no descubre,
que nací dueño de tu avenida.
A este sol ferro cuelgo agravios,
ofensas que desvanecen,
como la noche devora lo que es suyo.
El Castellano
Azabache de ojos:
Ojos direccionados
a esta luna de azabache,
el tejer de una gota de savia
plañía la desesperanza fría.
Siniestro compás mece,
en acorde clavado
a este invierno estirado,
al estallar de bombilla me cuelgo.
Curvo escalafón riza besos
de unión de cicuta y sangre,
yermo, plácido, envuelto
en sembradíos de oscuridad.
Quisiera que hablaran mis retinas,
de encuentros fugaces
al temblor de esos filos
que la dama oscura blande.
Gira presto a enraizar mi sangre,
con destellos de espuma
que las tierras bullen.
Yerma, extasía de verdes
por solitudes heridas
una cercenada tajada,
Retiembla mi destino
al cabalgar de soles,
fiel estampida de semblanza.
El Castellano
Flor de destino:
Ama de esta casa, el alma fría,
de mundos retorcidos,
ingrávidos al peso de flores,
destartalado, por gentiles gestos,
azares difusos de mi reino,
saludando a la quema del rastrojo,
un iris por desenclavar,
corona de caléndulas
en soles por doblar,
al rayo seco, tornado en gesta
y sus candilejas fulguradas,
ríe y pasa, pasa y ríe esta espada,
hendiduras febriles
de mis verdes ojos
entre sus cauces la verde grana,
la verde espiga,
un romance del labrador
con su granate amapola,
llora sangre de aquellas santas,
esquiva de obreras guirnaldas,
se cava en rayos seculares del rey astro,
Estallando de luz su rocío primero.
Cuarto para sembrarte:
Duro, seco, estridente,
irusorio destello
al matiz de soles abiertos,
estoy empezando,
alago, avanzo este cuarto
este cuarto de arañas,
repleto, lleno por escuadras
afilo el verbo
preparado, despierto,
granate complaciente
a este lustre olvidado,
quiebra marzo,
estampida en blancas sienes,
réquiem en osadía,
en marca de astros,
luz intransigente,
fulgor
entre tus manecitas
heladas,
miro atrás
nada reverdece el horizonte,
todo son raíces del hombre,
me cuelgan lunas
ojeras sin alba,
quiebro esta ilusión
me afila su espada,
cómo huir
de los que no me conocen
si nunca me conocerán,
me clava la estrella
un tenor en escala mayor,
gimen flores por abrir,
el sol hiela de nuevo,
rizo sorpresas en tus cabellos,
libero el león,
me muevo,
suceden grises
a mis penas,
escarchadas, desvanecidas,
derretidas en claro oscuro,
por lo que dejó de ser,
llevo que traigo,
resoplos y arterias
en este jarrón de sangre,
hasta que caigan dementes azares,
y sus cruces bienaventuradas
de tu carne,
de mi lumbre,
de este alambre.
El Castellano
Tierra perdida:
Limo, sostengo, agito
la vena enardecida mía,
destapa al fuego en círculo,
retiembla destinos ciegos
en crueles, parcos horizontes
sin orificio,
destrenzo el nervio de hierro,
repto avenidas sin salida,
voy y vengo cantando
esto es tierra perdida,
correcto, en el ojo
y soterrada vía del hambre,
nazco que broté de semilla,
estiro que alzo
sangre en caricia,
marcho sin mirar atrás
esto es tierra perdida,
ocaso malva derrite mi vida,
en ríos sin despedida,
en sábanas de escarcha fría,
correcto
es tierra perdida,
nada es súplica advenida,
fulgor entre sienes de carcoma,
festín de arañas grises,
nada me detiene,
avanzo, el sol me cuenta
que es tierra perdida,
cae la tela tejida,
fiel al descanso de mi subrepticia,
gimen tiempos rizados al ascua,
cantan malas yerbas
sin perfidia
que esto es tierra perdida.
Yo contesto
dorado al fulgente metal
que es mi vida,
es pasión, es luz,
es calor,
este es mi rifle
esta es mi vida,
granate al escape
lustre postrado al rejuvenecer
del marco,
yo no estoy colgado,
venzo que avanzo,
resumo, coarto,
me descubro a la luz templado,
todo dicta
que yo voy
que yo vengo
por tierra perdida,
resplandores sujetos,
acuartelados en énfasis,
porque desconocen su sino
madre de
esta tierra perdida.
El Castellano
Extasía de cristal:
Penumbra arrebolada,
hija de la sombra asolada,
temple de maraña,
tejida araña dormida,
sol en su trapo desnudo,
ven a mi cabeza
retuerce mi idea
que se encadena
sumisa a noble premisa,
no puedo parar
no hay tiempo de pensamiento
sólo escribir duro, seco, limpio
como agua de este río.
Sentido volviendo a la vida,
mi espíritu está creciendo,
tantas luces sin alba
tantos astros sin noche
es muy tarde,
nunca para volver
al origen de savia,
desnudo en este reloj
mirando este cementerio
alzarse, enarbolarse
de la nada y su infinito de cristal,
estoy dolido
que tú te lo has creído
si me quiebro
es para renacer
quemando mentiras,
liberando fieras,
roto al tiempo
entero al fragor
de mi espada,
no tiene vuelta atrás,
océanos abiertos me llevan
a flote de nuevos sueños,
rizado a la espera
engalanando mi quimera,
desiertos abiertos
en cal viva,
mantenme el amor quieto
subiendo montañas deshechas,
viviendo el brillo sin estrella,
ojo de un ojo labrado
mantengo mi esencia
en joya de noche
miro dentro
y todo retuerce de nuevo
dame tu mano,
descubre mi reino perdido
a encontrarse en tu mejilla,
háblame de tus vidas
de tus alas en mi extasía,
sólo allí despacio
latirá su osadía
líbrame amiga
de cerrojos
y sus cerrojillos dorados,
exasperados,
esta noche seré luz de hoguera
y tu cobija quieta,
el único sin miedo
a decir lo que siento,
carrusel sin engranajes
caballo sin jinete
tormenta sin nube,
beso donde no lo imaginas,
sólo yo contra el mundo
abriéndome de la tierra
siendo alma en disparo
certero, agudo, estridente,
como la voz que no se pierde,
yo nací albor
nací para ser tu amor
no me pierdo,
estallo osadías repletas
solitudes que trepan
cruzo líneas
de estos cuatro días
que clava tu voz
desmigajando miedos
porque yo soy el miedo,
batallas aparte
soy tu planta silvestre
amando su tierra
más que a su sangre,
mi esencia verdadera.
El Castellano
Cornucopia de tierra:
No rebotan los tiempos llorando,
en escalas a ese cielo anhelado,
voy que viajo
y bajo mis plantas
la tierra brota, rehúye, fluye,
todo me alza
sobre torres sembradas
y sus trompetas abiertas,
desenfundo esta esencia
de estaciones correr,
hogueras profundas
en lágrimas de lluvia,
plantada mi compostura,
me crepitan las montañas,
los cuervos me rinden pleitesía.
Ante estos ojos
el ávido brillo
de oscuras alas,
frente mi carne
fuego enraíza
esta noble falcata,
encinas me enraízan
el dorado anochecer,
noche oscura
entre espectros de letras,
el día derretirá mis flores,
trepando mis venas de encaje,
mi azada será sangre
no más cuerpo y carne de metal,
al erizado filo
clavaré sentidos despiertos,
mi letra será invencible,
en flameante rebosante inspiración
parida de un rayo de sol,
ay la tierra que me clava la siembra,
ay sol ferro,
yo te hablo
al fulgor de venas
al calor de llama azul,
tú invencible
como la palabra te formó,
extasía lumínica
en candor de lunas aulladas,
ven a mi pecho,
te daré asilo,
desgrana este silo,
que mis manos hablen colores,
solo ante la adversidad
esta negra noche que huye
enjaula su oscura sombra
donde la letanía esconde
sus garras de cristal,
quedando repleto este umbral,
he oído llamar
llamar tus sangres de luz,
a violetas nebulosas
sin cauce
empotradas en sagradas espirales,
busqué tu vida eterna,
me contestaron inviernos
desmochando brotes extenuados
de tiempos atravesados
por tu espada eterna,
fuente fría
que llena dulce la fontana,
la vieja luna sonríe,
lo efímero será áspero y duro,
a la caída de este plomo,
se levantarán estatuas de barro,
tu lobo vestirá el sincero metal
por ser de hierro,
hasta su aullido de plata
a la noche sempiterna,
y sus enredaderas malvas,
campo este de víboras nacido,
por un surco repto,
y el alacrán me saluda,
soy yo tiempo olvidado,
resplandores
de este patio de grillos,
me cuelga la corona de caracoles,
por todas mis lumbres
abiertas
de caléndulas solariegas,
más que hoy
no espero nada,
porque yo siembro lo perfecto,
me responden sus voces del suelo,
al intransigente destello
me parto, me quiebro,
hasta dar mi voz
a estos campos
y sus sotos perdidos
encontrados en cada sangre.
El Castellano
Ondas mecen:
Me cruzan las vías
del tren de la noche,
abierto, caracoleado,
en peregrinaje de estrellas
y sus halos,
este insomne caballero
de tu sonrisa nacarado,
arrebolado entre tus brazos lejanos,
una hoja precipita
al tañer de campanas
en garganta de lluvia,
no hay invierno sin frío
ni frío sin invierno,
vuelta atrás estoy vivo,
una vez en la vida
curva de espejos
entre verdes y ocres,
quién dijo que no tuviera esperanzas,
pálpito fugaz de estrella marchado,
el amarillo viste mis flores,
color efímero, sin despedida,
entre un patio de ojos
y sus carcomas solariegas,
danza este caballito sin diablo,
al cuartel de la cucaracha
van los ojerosos grillos,
todo cuelga de un hilo de lana,
horas minutos
para hacerme libre,
termíname tú porque yo no puedo,
este alfiler parco, sobrio
como él mismo,
entre circo de huecos sones
danzan los vellos de mi piel,
por el agujereado brillo de luna
cuento notas perdidas
y el filo de esta mi cuerda
hasta latir con ella
y su desnuda poesía
con cuerpo de mujer,
lejos de la tierra,
entre un soñar del viento,
se destapa mi cordura
le florean pensamientos
fieles ecos en iris despierto,
dulces ondas como dulces sirenas
enamoradas,
de este marinero sin mar
llamado verso,
al senil aleteo de la polilla,
el invierno nace de un cubito de hielo,
que avanza ya su noche
sin pedir permiso,
al vapor de sienes heladas,
entre un coraje acorazado
de haber realizado una buena siembra
me marcho.
El Castellano
Filo sonriente:
Agudo filo nacido
mi destino.
Recuérdame en la tijera
desdoblando la espera,
hoy por hoy
mañana por ayer
el frío en la piel,
de estas cuchillas
sonrientes,
y su esperanza
carcomida, acabada
en hoguera.
Miénteme aparte
ancla en gozo
el violín de mi idea,
corriendo por fuera
marchando lanzas
de tierra
y el tiempo
solo, hinchado, dormido.
Rehullo de mi pasado
que se clava
en mis brazos.
Mírame aparte
del punto y su silencio
seco.
Esta vida en el centro
de una margarita,
miro su caricia
en pétalo de brea
arde mi sinfonía
deshace la lejanía
hasta ser ese lejano
carrusel de estrellas
por boca.
Vida por mi vida,
y yo qué no daría,
a este cielo desplomado
de fieles compases
oxidados,
es por su plomo
que a veces plomo,
a veces más alzado
que las cumbres,
entre regueros y ramblas
libero mi azada,
en cuerpo de sangre y vena,
no conozco a Pena,
entre su alta ojera
clavo una letra,
abre la acequia
destartalada en honda esencia,
allí donde graznan cuervos
su lenguaje de madera,
soy yo a la espera,
abriendo mi destino
en esferas puras, plenas
ay la tierra
vive esta dorada
escolopendra,
sucesos de huesos
arde la compostura
afila su beso de miel,
todo queda en yacija,
derramada hiel,
entre grietas iluminadas
del iris insomne
soterrando verdades,
completando
liberando sus cavidades
y su dama oscura
naciendo la noche
que ya vuela,
entre testimonios del pueblo,
que pertenece a la tierra
y sólo esta a su materia.
El Castellano
Vieja escuela sembrada:
Cierra los ojos
es nuestra creencia,
por la que no hay
rosa sin espina,
línea de destino,
déjame sembrar luz
en la retina,
que caiga mi gota
quebrada,
viviendo tus memorias
lejos de la letanía
enroscada,
crepitan los labios grises
entre crujidos por despertar
leones del nuevo día,
Noche, noche
tus minutos erizados vencen
pasan las horas
y las horas
la misma pesadilla tejida,
en vilo en vela
de navegante sin mar
sin barco, sin puerto,
viviré una vez más
esta soledad del párpado
despierto,
muy alto, muy hondo,
todo se retuerce en sol mayor,
hasta la cima
me verán cabalgar,
resume este papel
un furor oxidado,
soy yo, soy yo su raíz
que ni yo mismo entiendo
dichos soterrados en alma difusa
en corazones sedientos
su fría caricia entre espadas
ni yo hago empeño solariego
ay la tierra perdida de tu raíz
quien osado sólo la viera
de viva materia rompiéndose
sucumbiendo sobre los filos hirientes
hondas espumas
riéndo en camino vivo,
en un sentido
con bordes de rosas y cebollinos
y senda de espinos fugaces al alba,
brotando imperecederos
que enriquecen los pliegues sembrados
de esta mi sonrisa
de esta voz en calma y en tormenta
de desnudos sigilos
que te nombra y nombra
si no estás lo hace sin cuenta
Poeta
Haces la ruta sin pena ni sangre
que no sea portada en tus venas
de solana hacia el sol
en un ovillo giras en tornasol
allí donde sus esposas
amarillean y tu sien gotean
en canto al amor
alzado en rayo de Thor
será un caracol
cuando nos vamos
solos sin nosotros
con o sin Dios
nació un vespertino albor
ocultando el dolor
secando lo que plañía
la sin razón
Se duda entre las cosas
por la vaciedad de las cosas vacuas
de fátuos alambres en fanal
hoguera del hambre
de oblícuas espinas
y los nuevos castillos
que sin su castellano chozas son
destruimos
si nos miramos
vencer o vencer otra vez
Oh raíz
ay de tu tierra que te vio nacer
qué guardas
en tus bases en las grietas
que te clavan que estiran
tus lágrimas del ayer
que no nos dejas ir
por caminos distintos
a los limpios valles de oscuridad
reposo y sosiego que clava el camino
¿Será cómo es
por siglos
de siglos?
De este tiempo oxidado
que latirá el son
con forma de tu siniestro corazón.
El Castellano
Cristal silvestre:
Ámame como se ama a la vida,
porque te amo en caricia
sin despedida,
tú que eres como la noche
en subrepticia,
yo contemplador extasiado,
por el fulgor que se abre paso,
Fin del diario,
este es el momento,
que se queda para descubrir
la expectativa
del vivo hacia la vida,
todo cambia y yo lanzo
mi destello sembrado en mis ojos,
susurros en letargo
abiertos al destino parco
estoy en tierras de la luna,
abriendo, tornando bella
su distancia,
todo sembrado
de quien yo era,
esta mi raíz que canta
plena, sacada,
cortada de su tierra,
para nunca olvidar,
alzada a tormentas del tiempo
y su etéreo desliz envuelto,
en las calles
de los sueños rotos
un pasado que dejo atrás
estoy joven para estas nuevas visiones,
existencia clavada,
al crepitar enroscado entre arterias
de alambres,
y su perfección
erizados gritos liberados
hay que pagar el precio
de ser mejor que este talento,
avanzo lento,
me abro por el fuego,
y no hay sangre que no me deje
envuelto,
miro dentro de tus ojos
buscando mi respuesta,
el sol se está enterrando en tus cabellos,
lima este nervio
que llegó su escarcha
siempre aparte,
siempre en alarde,
hasta yo encontrarte
encontrarme yo
en los sotos de tu voz
hasta ser yo el alarido con nombre
de sol, ser por siempre
ser para siempre,
ser siempre,
y Siempre llevar mis apellidos,
Siempre quemándome
en resquemor intransigente,
precisión de mi duende
llamado amarte.
ARTE,
condenada mi sombra,
a este precipicio
que despeña la letra,
a través del umbrío páramo
de esta piel y su yermo bosque de vida,
sigo la estela
vocecilla, elevada sin razón,
porque sí me sobra corazón,
soy yo mi murciélago de nácar,
vuelo que giro el infra-sentido terrestre,
y me quedo en vilo,
es glorioso este sino,
haciendo el amor con los sentidos
en el saco desdoblado,
de mi realidad soterrada,
destapo que descubro malvas
del sueño taciturno
que conduce a contemplarte,
bajo el sigilo de mi araña,
y su tela irisada,
en extasía de espejos carcomidos
sin dueño,
que no sea sinestesia
del cuadro de visión
llamado visión enardecida,
por la que mi ciprés
tiene tacto a caricia desnuda
y mis caléndulas caminan
con sabor a deseos de rubor.
El Castellano
Quiebro en dicha descrita:
Muero por un beso
aquel sembrado dirá que vivo
vivo por un querer
cruel del destino
condena de una pasión
que creó tu pestañeo
al dejarme ver
tu cielo encerrado
ese que liberado
jamás me abandonará,
fijamente tres minutos,
y morí con tu pestañeo.
Demostró que fui y soy
importante para ti
y que a pesar y muy
a mi pesar de los problemas
problema no es mi apellido,
seguí en tu mirada atrapado
hasta que la aguja
de aquel reloj de pulso
se paró al pasar ciento ochenta segundos
mi cambio de vida
cuando consumí
medio giro al decir
siempre te amaré.
De este resquicio vivo
yo traigo la flor,
en competencia
de ilusión que marcó
esta hoguera sin pena,
eres tú soy yo,
flamígera condena,
por el párpado del cielo,
por mi astro soslayado,
que yo sólo encuentro cielo
en tu mirar encandilado,
soy un muerto con vida
si no te tengo,
y este firmamento
se me cierra seco,
muchas cosas erróneas
en mi vida
que no hay tiempo para la sombra,
no hay tiempo para tristeza,
ni para la vida quieta,
porque todo resume
en buscarte a ti
mi vida completa,
si este corazón es un tiesto,
quiere y te quiere a tu persona,
enraizada, plena,
resplandeciente,
como el brillo,
como el halo,
de tu limpia, dura
sonrisa de perlas
en océano de resurrección
descubierta en dicha,
mía, mía sin despedida.
El Castellano
Tordo acompasado:
En el océano de este mundo
abierto al cielo,
vive el cuervo,
por el desvencijado respiro mío
avanza, mece y sostiene
un tiempo en réquiem de espadas,
por aquellas voces que sordas
laten, se descubren, alzan,
se quiebran al paso de altares de hueso
por mis atardeceres de murciélago
voy ciego al calor del astro,
siente mi caricia de pájaro
esta vida en un verso,
alzando nuestra luna de acanto
y alabastro gimiendo el ocaso,
azabaches ensortijados, derretidos, extasiados
por el sendero despierto,
por el cauce que trae la vida, la mía,
ojos en resplandores dorados al tacto
de mi astro soslayado,
mi azar es sembrado
vida de vida
late esta caricia
no hay retroceso ni regreso
todo está bajo tierras germinando
por la rosa de su pelo,
tu sangre me colmó en beso,
nuestro cielo de amarantos
fiel al respiro que alcanzó a ver
la belleza en noches de miel,
respira abre en ambrosía mi vida,
en este horizonte dormido
quiero ser de la piel resquicio,
que no me sientan perdido,
quiero ser Siempre tu sonido que acompasa
que clava olvidos
en despertares rizados que consumen
la retina y sus astros,
todo lo que anhelo es la verdad en silvestre flor,
tu eco alto que no hay pájaro sin nido,
esta noche será distinta,
el comienzo empieza ahora,
mi sueño de araña
que todo lo tejido
recompensa trae a lo sentido,
un avance de mi sangre,
ven al nirvana del ruido,
anticipa nuestro solsticio,
Yo que amo en mimbre de esparto
y verde espiga de trigo,
fiel comando el suplicio
de los valles de mi sombra
displicente, enamorada.
Encumbrada.
Sostenla sostenme de la pestaña,
me nacerá un alba,
marcho través del hielo,
su azul en la mirada,
estoy sembrando mi escarcha,
y que venga y queme
este laborado tiempo,
que yo nací del viento,
alguien está llamando
oscuro este romance
entre las malvas del cielo,
se escucha mi nombre,
tengo que cerrar este hielo,
colgando mi estampa
del árbol de las cenizas,
y que nazcan ojos de tierra
de este hueso,
que seguiré soñando
que fue sólo eso
un sueño en despierto umbral
de mi alma y su protectorado.
El Castellano
Cercenada razón:
Ilusoria, despierta, vespertina,
trepando lúgubre escala,
iris destartalado, ansiado
cubierto de cromáticos azares,
por un metal afilado va venciendo
a este brillo irisado vestido
de crueles destellos,
raspados destellos
de todo lo que dejó de ser,
reflejos sin nombre
ilusiones de este alambre,
rizado con hilos que gotean sangre,
despierta mi pesadilla
queda asomar la dicha
y mostrar esta araña,
fulgor desnudo al fragor
de transparentes cristales
que enamoran los hielos
que febrero siembra abiertos,
si estoy despierto se equivocan,
nazco que traigo
un cesto lleno de sueños,
se derrite mi estampa
quieta colgada del árbol
donde hago peticiones,
y que este forraje
se desprenda de mi humor,
no me desalienta,
he crecido para brotar
más duro y recio
que el esparto del monte,
traigo mortandad de idea,
en letra extasiada
al filo de verticales escarpias,
soy yo encargado de esta acequia,
que ni el más osado
pedirá que se calle,
alzo su valía
en desgranada espiga
que rompe mi silencio seco,
si no soy gente lo demuestro,
enseño a mi tinta
a no pertenecer
a este mundo de yertos,
mejor que qué cosa
mejor que la opaca suma
de alientos que se creen
tener originalidad,
de su umbral
prendo a cerilla
todo sembrado a diario
de vacía voz,
yo repleto no soy yo,
soy su extasía floreciente
de imagen y su prima
clavada en alfiler sin cabeza,
como un grito de letra,
y mordisco de fiera,
que deslicen décadas
que seguiré siendo yo mismo
entre grietas, entre esferas
quebradas y su olor
a flores desnudas,
que yo sé lo que hago
si no ni lo haría,
noche corría marcha atrás
esperaré su madrugada
soy taciturno con huerto de luna,
y siembro un quién contra mí,
estoy brotando,
no hay miedo yo soy el miedo,
fiera de esta hoguera,
llamada esperanza,
tengo una llave
y no soy cerrajero,
abro este corazón
y despierto su dragón,
hasta acabar de una tajada
con mi sana razón.
El Castellano
Cruzada ojera de luna:
Había sentido
Bravura repleta
no tengo ojos
tengo lágrimas de cristal
al iris en belleza consumada
nadie te alza
tomas tu lugar merecido
jamás colmada
siempre rebosada
de lo bello a lo mejor
sembrado ojo por este ojo
me late me arde una simiente
para el campo de tu alma
vida yo vida no tengo
si no se dirige en mirada
a mi letanía, certera amapola
desde el 2008
jamás en súplica mecida
por este arrojo
en mi pecho sembrado,
viva y descubierta en este tajo
repleto de lo bello a lo bonito
de su interior decretado,
yo hombre de sangre
siembro este sortilegio
de espadas por si llego
a su alma
y liberar libro sus ataduras,
por soñar soñó la primavera
que mis flores eran de ella
yo reviento y exclamo
que son de amapola bella
mi maestra en furor de espigas
nacida
solo tengo un corazón
y es suyo mi dama,
dama blanca
doncella escarchada
de esta vida a esta mi viña,
yo dulce muero despacio
por llenarla de esta dicha,
seguiré en pie porque ella
sigue viva enraizada en este latir
para yo con amplia voz decir
sin ella no hay vida ella es mi vida,
El Castellano
Negra noche sostiene:
A veces me rompo,
a veces me pierdo,
y el mundo reverbera,
se extingue
por oscuras alas
enlutadas,
quieto,
más tranquilo
que un yerto,
hago mis miradas
a su pasado,
no me asustan
sus dulces espantos,
estoy nacido
del hierro de mi idea,
labrado al fulgor
transparente
de mis campos
de soledades,
es por este tiesto
que jamás abandono
lo que siento,
y que mi flor
en vena me muerda,
trepe por mi vera,
hasta sentir que yo
estoy encumbrado de la fiera,
justo aquí justo allí
sólo para servir,
rayos y azares
de consecuencias,
como flores cabalgando estaciones,
al iris lunático sembrado,
hasta atravesar su corazón de cuarzo,
es por este azabache
por el que vive la noche,
suena de nuevo mi caligrafía,
y para esta lluvia
todo valía,
soterrado mi latido
queda decir
que consumado
estallaré sin cuantía
borbotones
que sangren esta luz
intransigente,
el Sol afligido
me nombrará su allegado,
hasta sangrar
retinas indiferentes,
hasta cabalgar sienes
y alientos helados
de espantos,
hasta yo trepar
de mis arañas en sus cuartos,
enterrando esta noche negra
dando inicio a mi condena
de vivir por ella,
porque valdrá la pena.
El Castellano
Las vidas que traigo yo:
Era esta araña
como un Sol ferro con casa,
era como un encontrarse sin despedida,
por qué,
porque yo empiezo esta obra,
camino destrenzo este campo,
me desmigajan a mí
sus flores extasiadas de difunto,
para decirme
que lo suyo es de todas las estaciones,
como hacer el amor
con azares alados y soldados de los campos,
que su simiente no es vida de un día,
yo digno de admiración
digo que me adopten
pues soy familiar
así no tenga savia
tengo sangre carmín
y mi simiente escrita
dura lo mismo que dura
la tierra sosteniendo vida,
desnazco de la hoguera
al crepitar del rayo luminoso
no soy como él invencible,
pero me cincelo mas recto y recio
que un hierro de carne,
sotoventos atrás
las montañas hablan con la gente,
que sin ciudad no hay gobernante,
sin poesía no hay mundo ni creado ni
ni por crear,
más duro que los montes,
cabalgo esta letra
flamígera, extasiada,
al son de una espuela escrita en bronce,
digna del brillante metal puro,
para yo decir yo aquí
me he curtido y tejido duro.
El Castellano
Oscuro haz, luz sembrada:
Larga sombra me abarca,
larga sombra me abraza,
larga sombra que me envuelve
yo quisiera meterla en un mundo más bello,
yo quisiera librarla de hielos que aguardan,
quisiera retornar a un mundo que era negro
sumergirme más profundo que los mares
y encontrar mis verdades,
yo quisiera fundirme fraguas de hierro
ser justicia izada de ser en luz intensa
pero ya no siento nada,
asolada mi estirpe con nombre agujereado,
yo camino descalzo sin miedo ni quietud,
sin estos clavos que me impusieron
camino lejos, lejos sin mi nombre
por si despierta mi azada
con la que sepultar al Miguel Esteban
que no nació todavía,
por si una dicha me aguarda,
no osarán en buscar portentos
a esta larga sombra que avanza,
no cambio sus males
solo servirla flores silvestres
así enamorada torne princesa de profundidades
hada dueña de la sombra,
hada fiel de embeleso en umbrales
por tragar esta mi tierra
que me avanza la despedida,
cuántos pájaros volaron
para ser único pájaro enfundado en trino,
rajado, ultrajado,
cuantas notas se escucharon
hasta ser estrofa de agua
por todos los que estuvieron,
al acecho yerto de esta sombra mía,
que no posee medida,
solo una senda deshaciendo lo trazado,
al firme astro alzo mi perplejo
por toda oscuridad que fusiló mi partida,
me apodero de este jardín
de mi sangre sembrado,
para latir en espejo asomado,
y que viva siempre, siempre
esta sombra fría, vacía, llena en soledades,
completa sin tapiales, hueca de mi carne,
despeñada en vivencias soterradas,
que yo alzaré para sembrar en ella
esta vida que yo le debo a ella,
para que viva siempre mi luz
tejida con ella,
hasta erizarla
y que me responda
cuando nombre a la belleza.
Que sin ella queda sin aliento.
El Castellano
Agua de arteria:
Déjame mirarte dentro de mis ojos
que yo limpio, sereno, yo pena ya no arrojo
hornea este fiel abrojo
que ya no sienta el pecho en rojo,
libre ajado de suave caricia
de endeble espina
solo te creará cosquilla.
Por estos lares insospechado,
por estos surcos sembrado,
de boca, pecho y guadaña,
sin su hoguera no es quien era,
déjame latir a espera
de vivir dentro de ti
como vives dentro de estos ajuares
de gato de hombre dichoso escarpado,
como siembra y su despertar en mayo,
libérame de ser quien no soy,
porque seré agudo, afilado
rizado como metáfora
en flecha de silencio,
yo por ti seré quien quiero ser,
tu orgullo tu inocente servidor
que solo posee estos ramilletes versados,
abriendo al verdor de todos los campos
hasta llenar tu dicha
del color de las flores de valle,
para vivir en esa orilla
en esa casita del río
llamado tu corazón mi señorita linda
mi amiga no puedo embellecer
la belleza es usted.
El Castellano
Solitudes, procesionarias descendientes:
Alma vuela entre aciagas espadas,
de flamígeros astros
y su radiante, desnuda compostura,
ancla etéreo gozo
cuando soy de mi sombra
y la sombra es de mí
como proyección de mi luz,
como condena a ser siempre yo,
quien partió su destino por la mitad
para disfrutar por doble vez,
devuélveme a la vida
me siento más vivo que ella,
puedo sentir un puente de la distancia,
alzo radiantes esferas
el sueño y su verdad
entre solitudes heladas,
su fuego azul y mi enervada amplitud,
lluvia cae y sólo puedo soñar que soy gota
para deslizarme para fluir
esperando evaporación,
ángeles atrás soy más pleno
que la sangre en mi vena,
esperando que mi sombra
se haga luz y su luz centellee a borbotones,
de que soy pleno, digno, como el crepitar del rayo,
como el gemido de la tormenta,
como una vida relamiéndose el alma,
cuánto tengo, cuánto deseo
pregunta si me falta algo
a mi estampa repleta, recia,
materializada de mí,
clávame filos y luces
yo soy la noche,
siente la noche de mí,
sin astros, sin lunas argénteas,
soy la noche de mi recipiente de sangre,
cruel metamorfosis
de crisálida superior llamada carne,
brotarán simientes
brotarán estos rayos de aura,
todo lo que sembré en mi interior
brotará abriendo mi virtud descendiente,
mi bondad,
la gentileza en aspas,
el fuego de pasión,
la máquina de este corazón,
hago libre el dulce suplicio invernado,
y su tormento nacarado,
mi poder intangible,
mi soledad incombustible,
yo quiero decir:
-Hay luz en mi hogar.
Océanos abiertos donde resurgir,
todos los días que te esperé
hasta hoy decir:
Te seguiré esperando
porque sin ti no puedo finalizar
no puedo salir,
de esta metamorfosis ni de esta larva,
la que no se arrepentirá en los jamases
de devorarte completa mi mujer,
y algo que elegir
de esta edad que no se elige
el sosiego, la calma
que perderás conmigo,
para yo sembrarte la felicidad,
energía de este tren de suspiros
y procesionarias.
El Castellano
Hombre lejano yo:
Hoy abre su pupila
una mirada energizada,
abre mi retina mi profunda luz,
clavando en mi mitad
una serena claridad
radiante, profusa, abierta,
mi destino danza en las sombras
mi ser de luz estalla al fragor
de esta luna apagada
y su eclipse de penumbra,
de umbral nacido
en madre oscuridad,
y su latido que alcanza el soñar,
de mi vieja escuela,
párpado en ocasos sembrados,
cabalgo a la novena estrella
por si yo la alzo a ella,
recuerda tu creencia,
desnudo su ámbito en mi hoguera,
abre la puerta,
pasará mi resguardo efímero,
su disparo de letra,
surcaré tu infierno,
te rescataré
en un beso,
sí yo seré grande como el sol,
mi cuclillo te dirá
sentidos granates me trepan,
porque soy mentira,
soy tu mentira rizada
de que no puedes ser feliz,
y que este alma lata,
necesito el brillo,
romper la línea,
avanzar mis filas,
seré resquemor y sangre de espiga
en tu pelo,
seré yo sin prejuicio,
orgullo, beldad y mentira,
realidad y sueño en la grieta
de tu razón,
seré afilado como el corazón,
orgullo, honor de este clavo
sin tijereta de espejos
sin casa, sin caracol
que no sea amarte sin razón
porque mi razón soñó
desde que te encontró,
al fragor de ascuas preguntó
si el destino clavó
y yo desentierro hasta el miedo,
por qué no puedo osar su furor espigado,
por qué mundo
por qué me tengo que conformar
con ser hombre de lejanía
que siembra sus silencios
en su huerto de luces y rayos
de luna, seré el espejo derretido
carne de imagen consentida,
acércame la caricia,
mi mundo desvanece en letanía,
quema mi petición fumando el cigarro,
y que esta ventana me arranque el alba,
espectro soy
del vivo silencio enjaulado,
mi ternura consume el Sol,
por esta reja,
por esta cerca,
por este tapial,
mi yedra nace
para más alto escalar,
esta fiel atadura cristalina
sulfura, visita la inquieta estampa
azogada en énfasis de su compostura,
para nunca olvidar
para nunca más pronunciar
mi propia lejanía.
El Castellano
Brotando de raíz::
Dentro miro, florece el álveo,
un iris marcado, trenzado en espiras
fuego y su volátil marca de luz,
si nacer acaso partirse pueda,
sería una hoguera de purpúreas
y negras llamas, sería un camino denso,
como el crepitar de la forja
duro y endeble, maleable y quebradizo,
fulgente y voraz,
al encuentro de mi nuevo crepitar,
y volver a nacer del fuego
con su lengua que me sostiene
como la primavera a las flores,
desnazco hoy para volver a morir
y crearme de la nada,
ni la espada más aguda podrá
guardarme el filo,
agudo y ágil, duro de escarpia helada,
ojo de mi ojo,
carne de mi azada,
sol de los campos,
agujero de luz,
alma sin nombre ni alarde,
lo siento mundo
soy invencible,
de mi pestaña nació una nube
lloró tinta, mi sangre esquiva,
he creado vida
sembré un alarido de simiente,
le contestaron el verdor y énfasis
floreciendo silvestres caléndulas
un latido me alza
partiendo sombras,
soy pleno, completo,
y nombre puse a ellas,
tenían sabor a bellas hadas,
brilla este agujero del cielo,
cuelgo mis suspiros en verso
acaso bajaran,
pozo de mis recuerdos
en verde musgo
mi fantasma muerdo,
de una espiga floreció su vida,
de una espiga traigo la sangre,
de una espiga ríe el granate,
ocasos ocres, misterios en copas azules,
me bebe su cuello
la esencia erizada,
la belleza desmenuzada,
por el dragón de mi fría fuente,
no me verá caer la lluvia,
sólo ella y a su poder
alzo esta tinaja,
inmortal me lleva la acequia,
su verde limpio, sus florestas destapadas,
me bailan rizándose en mi pecho,
sus venas labradas
entre su cuerpo de tierra,
no me pisarán nunca jamás
mis luces sembradas
de mis caléndulas arvensis,
mis silvestres flores de difunto
con las que recuerdo
que la vida
es más corta
que el paso de la muerte.
El Castellano
Acampado macizo, verso y entraña:
Señor sentido granate,
violeta malva
de este sueño cabalgado,
vuelvo a ser yo
en la sombra de tu corazón,
quieto en las aguas
silvestres aguas
vida para ser libre,
miradas a un pasado
que se hunde
que emerge en las bocas
era yo ese yunque atravesado
de este alma que no elegí.
Compostura arde
el ojo y cabeza de la aguja,
compitiendo conmigo
destrenzando la sangre
de este horizonte estirado,
parco, exasperado,
todo cuelga del astro,
yo no estoy despierto,
esta vida derrite
mi osadía de cuervo,
por lo que quedó sin decir,
tus mentiras eran erróneas
de un océano abierto,
este lo cruza mi hombro.
Este invierno grita en frío,
mi vida comienza a sonar,
todo empieza hoy,
mentiras lejanas
verdades silenciadas,
vida del humo en esta espada,
en esta esfera desdoblada
soy yo quien habla,
de sus lagartijas refugiadas,
estoy haciendo
una creación del rayo de sol,
atravesado por mi línea,
esculpiendo abrojos,
de clavos ilusorios,
Yo hablé con el fuego
dijo estoy creando sombras,
sigo vivo en esta hoguera,
con este destino criminal
de crear el demonio que baila,
rodeando mi cara,
este crisol de cuchillo
y esta escarpia acrisola,
encargado soy
de abrir la acequia
sí de mi tiempo,
a veces quieto,
a veces sin vuelta atrás.
Nací de una almendra
estoy más estable
que una semilla,
sin brotes de mí.
Dime árbol mío
si todo lo di
en qué fallé
yo nada esperé
y solo tuve cariño de una sombra,
que me habla en poesía.
Seguiré mi curso sin mi nombre,
y que mi sangre sea que abre
en claridad de todas
las flores del valle.
La vida se pasa mejor en compañía
si no es así
que el arte me envuelva
en su ala caída,
yo fiel lo elevaré,
alzaré fines y comienzos
de su letra y piel,
lloveré noches con poesía,
sembraré versos como puñales,
la sed querrá beberme a mí.
Ni superior más que la perfección
yo tendré,
estallaré el gozo
en la retina
de mi despierto Lucifer,
para esta vida
y todos mis gritos
que vengan.
Yo seré el árbol de mis cenizas
alzado, enarbolado.
Sagrado.
El Castellano
Sangre, timón y vela:
Aguardo, tiempo atrás
mi sombra volvía luz,
esperando el momento de nuevo,
de cruzar la línea
dentro de la noche otra vez,
todo lo anhelado
todo lo cruzado
frente a mis ojos está,
detengo el horizonte
agoto espirales, sueño alto,
todo lo conseguí en su mano,
aguja de esta aguja que abre,
y soñó conmigo su primavera,
que era la primera,
hablaba la margarita,
bajo estos pies
tierra siente,
bajo los pies la sombra
latiendo está,
lejos cruzo la senda
y el nervio se afila cual cuchillo,
metales de metales hieren, voltean
este surco labrado del ansia,
un soplo y se difuminó
un soplo y se dibujó
su estampa quieta, etérea, inamovible,
cual ascua de llama que no se consume,
carne sin carne
sólo piel de mi deseo, perpetuo
avanzaba sin aspa
me encontré con mi templanza
era mi camino
era mi ascua.
II
Esta es la luz, siéntela
lanzándose afuera,
cruza mi barrera
polvo de estrellas,
cada día estampa quieta,
cree, viva esta materia,
quédate, mueve líneas,
avanza filas,
nunca te dejaré marchar,
vida para el vivo
y nunca morirás,
no te lo permito
mejorará tu huella escrita
vivirá este haz,
cada día, cada momento
eres lo que siento
algo para nunca olvidarlo,
escalando este sol,
corriendo este alma
espejos y cristales tiernos,
un cuarzo de lustre olvidado,
pasados, años atrás,
un día amarás decir
he resurgido de mis cenizas
de quien yo era,
buscando paz,
sosiego rizado cabalgo,
nada torna lejano
resurgiendo contigo,
palabra y torna vida
esta jara de azares traspuestos,
al brillo a esta escarcha que me habita,
es el final del miedo desenterrado,
morderé la estrella,
perderé mi control
encontraré mi camino
dentro de la luz
fuera de la noche,
rompiendo, quebrando,
alzando, alzándome,
y no me detendrás sin tus brazos,
mantenme fuera, nunca podrás
sin tus brazos
sin tu abrazo.
III
Estados de tu mente,
que estoy esperando resplandezcan,
muchas noches
en vela, con timón y pluma,
todo comienza a sonar,
la lluvia baja arriba,
es la vía que la mentira se marcha,
camino mi manera
estudio el ocaso,
comienza, se abre la tijera del cielo
para ser hoy todo lo que quiero,
me mantendré a solas por ti,
así me lo clava la sangre,
que aguarda
que dibuja todos los cuadros
de mi creencia,
de mi serenidad,
no puedo ver el blanco sin ti,
todas las retinas para mirar,
pero solo este corazón
para sentir.
El Castellano
Retina de ocaso sostenido:
Febrero 2016
No me desanimé,
estoy flotando hasta la luna,
mi soledad está comiendo mi tiempo nervioso,
y por la mano estoy caminando solo esta tierra.
Un cuchillo de hierro se eleva,
para estos sentimientos sueltos.
Oscura mi vida,
con ella nada de ella es posible
en mi mente
esta clase de locura
corriendo por
luchando por el acero,
descubre mi falta
desatendiendo mi muelle,
una vez más
no me despiertes
sólo recuerda lo que dije,
no me despiertes
no puedo sentir en este silencio,
si usted está allí,
estoy muerto.
Nunca ha sido tan fuerte,
sólo recuerda quien envié,
solo recuerda quien era yo.
No me rompas,
La luna, las estrellas que estoy tocando,
para descubrirme
para descubrir que no me siento de nuevo,
soy dulce perdida
en mi camino,
descubro que estoy muerto.
Levántenme hasta los insensibles,
abajo orando los cielos,
el producto es mi vida silenciosa
hasta las noches oscuras
de dolores,
la única diferencia entre tú y yo
me siento en la noche oscura
porque mis ojos no se abren
y ver mi vida en negro,
estoy muerto por este tiempo silencioso,
respalda tus sentimientos,
no camino más tiempo,
y miro mi tiempo,
disparar y disparar la luz.
Sólo tú eres sólo yo,
la línea es para siempre,
en sumisión,
ardiendo el infierno
rodeando mi vida otra vez,
ocaso acolchado de la primavera,
es hora del grito otra vez,
para este cielo,
todas las esperanzas que llegan a la tierra,
río de mi sentido,
ángel congelado
yo soy el hombre
hermosas mentiras de ti
crece tu corazón
dentro de mi cabeza,
nacido de nuevo,
llama a mi puerto para cerrar,
tú eres mi mar y mi barco,
alcance silencioso, imaginas todo,
travesía cerca, un cauce de sangre
estoy comenzando ésta,
puede sostener mis brazos,
la noche vuelve a sonar,
mi tiempo de matar el dulce tormento
de dolor,
y mi ternura flotando por,
actualizo mi destino,
yo soy para siempre,
soy tu calor
estoy caminando por tu calle,
abiertos estos cielos y su calma,
volar otra vez dentro de mi cerebro,
se bebe sangre
por mi vampiro en la vena
ojos bonitos,
hermosa boca
es tiempo para la eternidad,
yo soy para siempre,
pasado mi tiempo en la piedra,
ojo roto en el hielo,
mis ojos en el fuego,
queman el cielo de nuevo,
voy a su aliento,
voy a su fuerza,
ojo ciego
mi silencioso sueño de ti,
mi espíritu vuela de nuevo,
agua, fuego, tierra, viento
mi alma está creando un nuevo reino,
lleno, sombras caminan sin parar
es mi poder de la luz
dentro de esta noche.
Permiso, siempre lo haré en tu sangre.
El Castellano
Umbral al destierro:
La sombra salta,
se acurruca en el crujido
de este hueso,
nace un campo de espinas
dentro mi último filo proscrito,
y se va a las filas,
sonriente fulgor entre sienes,
sopla y sopla
no borrarás mi sombra,
se construye el puente
de los ojos abiertos,
espinas atrás te recuerdo,
puedes encontrarme
en la sangre sin vena,
en el café de mi destino iluso,
sopla y sopla
no alcanzarás mi oscuridad,
alzo este mi parco latido,
cumbre tras cumbre deshojado,
clavando su rosa y su cuchillo,
estampas del viento
entre párpados del aire,
vente a la negra estación,
este invierno azul se escapa,
entre pájaros dormidos,
entre riñones de nubes,
y soles de cerilla,
abro esta legaña
justo para llegar
donde el tiempo acaba,
y se marca la noche sin luna,
un descampado en el cielo,
una espiga
y una flor de sangre,
complemento perfecto
de este alarde,
una nota fugaz,
al compás de un transparente trino,
arde un sí bemol,
barreras esquivas
y su caracol de espejos,
mátame silencio si puedes
ya estoy muerto clavado en tu vientre,
azoga un vibrar de la soga,
otro miedo que colgar
sí del pescuezo,
temple de mi sinfonía,
el frío me está llevando
este laborar sin panal
me deshace,
quién viene a esta rueda,
llamada incógnita,
atraviesa conmigo
el centro de la llama,
abrirán centellas
sus pestañas iridiscentes,
por toboganes de luces desteñidas,
tantas mentiras eran cercanas,
adiós color, adiós flor,
apuñalo tus lucientes
hasta encontrar retinas de ojos navegantes,
esos por los que el brillo está desnudo,
y la razón vive en un capullo.
El Castellano
Crisol afilado:
Un iris vespertino
que huye, escapa, se esconde
entre fugaces simas
que acrisola.
Late en compás de labriegos
marchados del aura,
de su iris compañero
sortilegio de destellos sin alba,
listado irisado de surcos de latido
militancia fulgente entre rayos
de enervado tornasol,
naciendo su vena tornasola,
como parpadeo de cuchillos
en el que habitar tu mirada,
algo que anclar a tu sonrisa,
sin prisa sin ancla
mas que esta letra,
más que unos ojos de infinito horizonte,
es un amor que resplandece,
y por tus labios crece,
cumbre de mi filo
bastión de solares
donde el sol eres tú
mi férreo astro
Que yo soy hijo del mar
de tu boca,
rezando en el borde
del renglón,
cantando con un cuclillo
que si la tierra se hunde
y el mar se cierra
viviré en tu entraña,
como olmo de tu margen húmedo.
entre solitudes fervientes
y acuarelas de cielo
elevaré mi te amo
por si baja y seas tú
quien lo escuche,
atravieso océanos
déjame ser como el último intento de la ola,
y sembrar tu tez con mis versos de espuma,
afila mi limadura,
salta un corcel de vientos escarchados,
un destino sin piel ni tela
un marco alzarme
en su corazón desvencijado,
ser como el rocío primero
en quedarme en sus labios.
El Castellano
Aura acompasada:
Azar provocado,
algún día despertaré
para construirme a tu lado.
La tierra plañirá
soles descalzos
a llenar con la imagen
de tu vera,
los ocres abandonados
lucirán verdes,
rayos de esperanza
habitarán los ojos
del lobo amor,
las fauces sigilosas
saciarán el hambre
de firmamentos sin ocaso,
el ser crecerá como espiga
que florece a tu lado,
no habrá dicha sin caricia.
Ni versos sin corazón,
mi sangre clama
que fada,
mujer de flores silvestres,
mi ser te ama y llama
en hoguera
de retina encumbrada,
entre los campos
que la razón tiñó
en flor,
por si despacio
enraizaran tu ilusión,
deslumbran
auras bellas irisadas
al fragor de ondas
bailando tu interior,
me derrito este día
para alzar un grito
de azul espada
hasta cortar el cielo
a mi amada fada.
El Castellano
Drama en azabache:
Subordinado al silencio
esculpido, es una torre
donde colgaban mis sueños
rizando versos,
abiertos en oscuros caminillos,
y dulces pestañas insomnes,
era una jauría abriendo
sus fauces,
un crepitar sin trino,
afilando un estornino,
soñaba la ola
que el rompiente
acaba en su azul espuma,
jugaban mis dolores
en un patio de perdices,
babeaba el caracol
pleno como si no tuviera
preocupación,
mientras marchaba la helada
los parajes que dejan
vellos como escarpias,
allá donde caléndulas silvestres
dejan el amarillo del suelo,
hormigas contentas
por la cosecha pasada,
un mirlo que es amigo mío,
dice que el cielo siempre
es el mismo,
el solar de la era
escampa sus brotes del verde
asesinando a los ocres,
al resurgir de las estaciones,
quise sembrarme
como se siembran
las malezas solas,
como una plántula era
aguardando mi primavera,
que me regocijase
la paz y el sosiego
de sentirme con vida
en este planeta tierra,
mejor que vivir estando muerto
y que lombrices cuiden mis versos,
muero estando vivo
sembrando mi aliento
allá donde miro,
y que alambres cuelguen
esquelas ajenas
que sé donde voy
y no es rumbo a fallecer,
recuerde el tiempo
sus espirales afligidas
y estas cuchillas
que trasquilan la temperatura
de este invierno
que no nací olvidado.
El olvido fue que se olvidó
a sí mismo,
y era de grama el nido,
sostenido este granate
de párpado azabache
era o no es, el silencio
de mi noche.
El Castellano
Rizada espira:
Afilada esta araña
esparce el verso de espuma,
entre una fiel madriguera
de la letra y una despedida yerta,
acicala sílabas,
en el hervor de la sombra,
puede verse el ocaso nacarado,
arrastrándose la idea,
vengo sediento
por el oscuro túnel,
que todo se hace verdad,
una alimaña me brota la garganta,
hilvana que hilvana
mi sentir preso de la montaña,
al verdor de enebros
y sotos sin lengua,
todo lo dije y no dije nada,
congelada la mañana
quedaba construir un paso
furtivo del cielo que sujetaba,
llegaba la hora
de enterrar mis abrojos,
por si despertaran de ojos verdes,
blanca la idea conoció
un suspiro de tres caras,
estaba en el bando equivocado,
el cigarro se consumía sonriendo,
el frío era frío por así verlo,
todo se retorcía
y quería volver a comenzar,
vamos eres libre,
eres brotado de mi aliento,
si tienes suerte no te enterrarán
ojos incautos en su pozo de olvido,
puedes oír y soñar
como sueñan las fuentes
que son boca,
como la primavera sueña
que las flores son sus hijas,
levántate y alza estas penas
y su recámara,
que estamos casi a un mes
de conocer la flor,
de mantener a la derecha la vida,
de romper la línea,
te encontré, desgañitada la siembra,
era un partir sin mirar atrás,
brazos de hoguera
con el ascua rizándote la cabellera.
Oscura luz goteándome la tez,
un segundo de largo
y sonó un redondeado afligido
entonaban entre alambres
las sonatinas y su amarilla fauces.
El Castellano
Carne de metal:
Estridente,
vuela que en su compás
se borra, verde zozobra
al caos que ahoga,
fulgurada, metálica
clavos que ahonda,
sensación del cloro
deslizado,
en un patio de cristal,
escondidos gritos
avocan su perdición
de humo,
entre colchones
del sueño
que llaman
a la siembra
de los cuerpos rendidos,
etéreas sábanas
que portan profusa forma
sin ser más que ella,
todo viene y se va
rumbo al destino informe
de la saeta dormida,
clavo este ciempiés
de una almohada,
yerta iracunda
despierta mi gripe
y su migraña,
algo que alimentar
bocas aparte,
habrá que hinchar
el pétalo de su flor,
a sílaba, verso, entraña,
me sobresalta su mirada,
hay que encender el ascua,
este fuelle de vida
aún me cuesta la estampa,
enamorado fuelle inusitado,
cabalgo hoy el astro,
encierro rayos en un jarro,
para esta tierra yerma,
helada,
germinen mis simientes
enamoradas
y enraícen sueños por cumplir,
al sueño del estornino,
grajee mi pico corvo,
corvino de cuervo ensamblado,
ven a mi manera,
la adelfa muere
al crepitar de la yedra,
y la oscura campánula del día
abre con azucenas de otro campo,
este surco que lleva mi sangre
se vence y me vence,
cogeré del tiempo la azada,
y sacaré terrones de disgustos
que tornaban y me acompañaban,
no había elixir sin ella, mi pena,
soslayada,
tentaciones
me cuelgan de las pestañas
de mi inocencia,
otra licencia
a conducir las carreteras
de mis versos,
fiel enjambre de pasajeros
de los campos
de la idea.
El Castellano
Vida de hielo ardiente:
Horizonte de la caída de este solferro
a reinar como una falcata de rayos afilados,
hondos ojos fijos en solariega planicie,
donde frías juegan moteadas las flores de invierno,
el reposo de la vida que se fue a dormir,
como un río de luz brotaba la escarcha,
un diciembre tardío saludaba
con sus manos heladas,
acariciando estos campos redondos
de cardos y caléndulas silvestres,
era un día de hacer manteca,
a mí el frío me hacía sentir vivo,
en este soliviar traigo mi espada,
pongo a sentir la tierra a mis versos,
que con cepillos de grama joven
se blanquea mi calzado,
viajo en mi mente
por el cuchillo calizo de la piedra
del caserón terrazgo, abandonado
que posee mi padre,
rodeado por el fervor de pinos de monte,
donde próximas hacían nido las atochas,
a perdigones que son de la tierra
como la montaña a su roca,
cosas talladas puras como amaneceres
pulidos sin grises hojas,
ola rota mecen mis pasos
de un mar olvidado del que cepas anclan
sueños de vida,
del terreno en el que grillos esperan
el frío en sus agujeros
y su despertar para morir al acoplarse
a la melodía que teje la vida.
Avanzo en este campo de víboras
para ser yo como mochuelo recogido en su olivo,
como mis pasos gorjean las carrascas,
todo mi mundo reverdece
para mí siempre es primavera,
y mi bravura llora flores por mis venas,
hasta tener del cielo
la malva del alba
hasta trepar las yedras del profuso claro oscuro,
del cielo y su luna cuarteada de platas auroras,
me nacieron simientes silbadas,
y mis ojos enraizaron el campo.
El Castellano
Forja de mi sangre:
Avanzo esta tierra abierta,
sangre y lágrimas,
hundió sus zarpas,
el honor de la vieja luz,
vieja urdimbre
en venas de cristal,
venga a construir
la casa abierta de niebla,
abra su puerta de oscuridad
es mi mente,
que como un azadón,
hunde entre altos tallos
de mis pensamientos,
muchos días
que me pensé sembrado,
pasó mi negro caballo,
brillaba este pantano,
entre recuerdos de un alba
en que no dolían
y hacían flor,
lengua de metal
hundía sacaba terrones
para oxigenar mi dolor,
anclé mi sombra,
la puse a dormir
entre la grama,
brezos y caléndulas la acompañaban,
barriendo los campos despertó
esta alma sonámbula,
con el zumbar de abejas caminantes,
con el soñar de las flores
que eran mariposas,
avanza mi surco,
cava mi padre recto como su azada,
y los veintisiete años que nos distancian,
es su trabajo su azada,
que alimentarnos desde la ciudad puede,
sueñan mis versos
que fueron construidos para luchar
luchar contra la sangre del hastío interior,
flores que brillaban sin desesperanza,
altas miras en sus estambres,
un polen de estrellas despiertas,
la miel de este intelecto
que abre sus grilletes,
que asoma sus brotes
a la ternura del cariño sembrado
por venas de mi misma sangre,
amo esta vida
como no amarte padre
si tú me sembraste.
El Castellano
Sangre de ojos:
II
Lámina del cielo
tu gris en estiaje
ángel del cielo teje
macabra sinfonía
lluvia se derrama aplomada
por su guiño de ala,
por venas cavas, su quitina,
estrechas vías consumidas
en atroz entrega
del mensaje del cielo,
sangre de tierra en zigzag,
río de caudal
por arterias de arañas,
por acariciar la flor del iris,
un barco y una vela
un puerto y una quimera,
una vida de aciaga solar siembra,
verso saciado cabalga
el colchón etéreo del aire,
hasta anclarse en valse,
sueña el viento ser capturado,
atrápalo en tu mano
y en la otra derrámate como gota,
precipita tu esencia bebe del cáliz
la yaga de nuestro vino,
infinito remansado en cuña de estambre,
es un ojo de tierra,
es una espera,
una inmortales fauces,
la canción con la que bailan las flores,
un cariño de flamígera estrella,
un armazón dorado de escarabajo,
una casa de caracol,
ven, ven conmigo soy aullido,
una entrega de cuarzo llorado,
un cuchillo de sílex afilado,
en el trillar del campo,
soy mis venas naciendo en un charco,
un sorbo y soy fuego en tu mano,
gimo y corro el vasto templo
de mi perdida religión,
viendo el devenir venir
cruzarse, deshacerse, alzarse
para acabar siendo tierra
del inerte azar profuso,
mi tinta se bebe un rayo solar
en patita de un caballito del diablo,
mi vaga libélula de mi suerte,
para que siempre viva
esta hormiga león
siendo mi cosecha más que tus besos,
más que tus rayos de sol,
siendo yo del camino y el camino ser de mí,
irisada vida en son de mis tambores
de insecto tejiendo, volatilizando lo inmortal.
El Castellano
III
Seco y duro, seco y umbrío,
corría el linde quieto
por la arboleda despejada
daban las tres y treinta
de la madrugada que se marcha
por oscuro diván de la sombra,
un espejo tímido sonaba,
el reloj paraba,
con un grito de estrella,
su alcoba fría en la que despertaba,
no quedaba viento de palabra,
ni pensamiento ágil que en eco no quedara,
lanzó aquel espejo contra el suelo,
y rápidamente sangró un borbotón de sombras,
se abría la noche y sus quimeras despiertas,
brotaba de su ceniza de pulmón,
el irisado que la oscuridad clama,
quedando para siempre
su alcoba fría y vacía,
sombra de aquel que sonaba una noche
que ya escapa.
El Castellano
IV
Fantasma del tiempo:
Indivisible fulgor ostentado
resquicio opaco de la luz
con sabor a fase de luna.
Invierno de los ojos veloz
en una gota de llama de vela
fuego del fuego creado ensimismado
quiero arder lo malo de la maldad
cuando sin sombra ataca
el humor de la sangre existente
si voz tiene cuál fuese dicho ente
hablándote desde la arteria
donde el cuerpo helado busca
y te busca verdad sin pestañeo ni apellido
sin venas surca la ola tibia y oscura
que nació sin viento ni mareada razón
de océano de versos
camino sin recorrido en yerto color
fulgente de la estación sin mente
entresijo de la mecedora
que sensación sola la mueve
con indicio de que la oscuridad me puede
fuerzas que escapan
a la razón del entendimiento
resguardo de luz que por verla doblega
a la insensata dicha escondida
que grita y se engrilla en aquella orilla
distante, que une y divide
ignorantes y sumisos bordes
de lo que existe por soñarlo
suspiro ese suspiro del hastío
y estío de mi río
escapándose a mi legible saber
un vencedor encontrado
círculo perfecto del equilibrio
en la locura nacido
en la frialdad del respiro mecido
yo te tuve, te sostuve
en la risa que dio llanto
en el llanto que dio risa
sin motivo ni razón encausada
allí donde la emoción era transparente
ni necesitaba conciencia para ser
solamente armonía que nadie te describe
porque fui yo quien te tuve
brevemente pero tu recuerdo pasará mi muerte
frío recuerdo de honrarte tan malamente
sin saber describirte
indiferente si vuelvo a encontrarte
porque eres lo más inusual,
te buscan y imposible de encontrar te vuelves
de la suerte llamada casualidad viniste.
Vengo del nacido sin nombre
del que hace lumbre del alarde del hombre
del espíritu parásito engendrado
y el veneno de mi sangre
te llegó a donde el camino se abre
a infinitas escaleras interminables
donde el surrealista se raya la mente
que del caso cuelga el Sol en cruz
en la pared del diáfano enervado calmo cuarto
marcando las marcas de los arañazos de su luz
que en negro dio su astenia quietud
horarios de su ser perdidos
en un atardecer que ya fue
en el azabache de mi bolsillo
sus sombras que recorren mi pasillo
me entretienen para ser fusiladas
al encender la luz,
no puedo creer el encontrarte aquí
inerte arte del único poema que vale
por no tener nada comparable
beso mis sueños que el oscuro espíritu
por no tener color arde
no quiero darte a entender
ni que seas adjetivo ni valoración
solo lo inerte de lanzarte al río y donde llegues
o lo creativo de guardarte en una caja
y enterrarte en el jardín,
para que te crezcan malvas,
es interesante que no llegues a materia
sólo a eternidad de quien te leerá
en mis sucesivas muertes,
tenue destello, elaborado albor
nacido del rayo de sol,
y la noche que ya calló
en las pestañas del amor
milenarios son los espejos de los astros
que dictan y laten en caricia
esa fría cuchilla que se clava
dándote finalidad y fin.
FIN
Miguel Esteban Martínez García a 19-02-2015
Pseudónimo: El Castellano
Grave soliviar:
Miles dei lumen lit c et summun canae versus littera fagro methafora creavi blandus laetitia exspectare sed ardit
Es mi vida
un agraz durmiente,
medicamentoso, encumbrado
por cimas de mi subrepticia,
por escalas del alba
yo soy siempre
yo soy para siempre,
como relámpago que se aboga
al nivel de tierra,
como una espiga granate y azabache,
en tinta y sangre nacida,
mi nombre que no se mide
ni deslizarse puede,
es su arma el verso
su impronta y su insignia sagrada,
conocidos miles,
hombres él mismo
gentes que darían su aliento
y su mano por él,
solo habitan para ser contados
en su mano izquierda
de ambidiestro,
brota nace y brilla,
yo soy cuervo poeta
y no saco ojos,
los hincho con belleza
que despliega en poemas
que lloran con mi sangre,
el crujir de mi carcoma.
el erguir de mis flores
de jacinto silvestre cada marzo
y su Llúcia elevada
que muerde sentidos,
yo estoy completo
y nada ni nadie
me parte el pecho
solo sólo, acampado,
acompañado de mi extensa sombra
de 2043 poemas sembrados
en mi patio de mi gris araña,
nadie quién contra mí
;el destello lo hago bello,
seguiré durmiendo
que estaba despierto
hasta despertar mis cuclillos
de este soliviar de mis abrojos
versados,
nadie me calla
al abrir sus altas ojeras de nácar
la primavera resplandeciente
de este sembrado 2017.
El Castellano
Sepultada Llúcia en agraz durmiente:
Se acicalan las Llúcia de marzo,
en febril inicio de la primavera,
que yo te amo Ostara,
algunos rayos fugaces
que han crecido,
entre verdes sienes del camino,
ese que me lleva a verte
mi flor silvestre,
hendida de ondas del alba,
sepultada de brillos
imperecederos en fragor
de ávidos destinos recorridos,
desnudos de quejumbrosas voces,
un musgo naranja renaciendo,
entre filamentos verdes
que hacen de su piel esperanza viva,
de este arbol centenario
de mi semblanza,
no serán mis chopos cantores,
ni mi enervado ciprés silente
su calma abandonara,
acuchillando al viento que espera respuesta,
recuérdame,
estoy sembrando mi vida,
todo lo que espero es maravilla,
me acaba este sendero y su colina,
riveras de mi Arlanza,
compás de mi fortaleza,
mi ejército se alza,
arañas de sus telas,
furtivas segadoras de mi idea,
trepando mis entrañas,
mis telas grises que son de ellas.
antes que griten mis sierras rojas
de mi carne,
antes que el tiempo
haga casa de mi cuerpo yerto,
yo seguiré hacia la luz,
el milagro de mi profunda gesta,
cumbre servil de fecunda primavera,
filo ardiente que brota,
entre siegas blancas
de profusa, verde melena,
al borde de mi vena
subo que traigo una azucena
junto mi malva y su viola de campana,
la cuenca que no es,
la visión que no viera,
justo esta generación que comienza,
justo es vida,
es mi verde hogar,
es mi credo,
son mis hojas verticales
en papeles de sangre y savia,
arderá mi caseta.
en ojos de suspiro padre,
en venda que el ojo no vea,
enséñame tu Dios
le pondré a reñir con los míos,
no me iré aunque quieran mieses,
permanecerán mis caléndulas
echando hijas de piel y tierra
cada primavera sembrada por su amarillo,
me nacerá la ilusión verdadera,
seré dueño de esta quimera,
y baja que canta
por riveras de mi suerte,
el hondo espino de mis dolores,
queriéndose como abejas
a las flores,
Estoy soñando
el tiempo que cerraba mis ojos,
retales que cerrar y su olmo blanco,
su jardín azul, su fuente de cristal,
nada desvanecerá al Miguel sin alas,
seco de hoja de otoño
no me llorarán ni mi jardín azul de caléndulas,
ni mi acristalada fuente,
ni el olmo que no es mío ni su blanco
será mi aura intransigente seca a morir,
sobre los años avanzo,
yo soy el Sol.
El Castellano
Señero quieto:
Linde abierto sembrado por Dioses
de plantas que sólo ellos pusieron
y que ven exclamar su muerte
de silencio gritado
lentamente las estaciones.
Es este campo que vive lejos
con señero
un señor de señores
amor de silvestres,
es encargado de ver en flor
sus amores,
vence que atraviesa
sólo su mirada,
un jacinto se yergue
de azules botellas
sus besos de rocío matutino,
matutinos gritos postrados,
con el hervor que reverdece las tierras,
de cal y tierra arenisca,
de arcilla al barro,
de la pizarra al risco
de granito,
es una vida mi estatua,
dulce, risueña, sembrada,
albores cruzados crepitando,
mi nido de grama rehaciéndose,
entre luceros anclados,
arriba mi barco
estos océanos y mares
de tierra,
que todo lo rige
su materia,
desnace el tiempo
abriendo el brillo de mi falcata.
Fiera de fieras
yo soy la fiera,
desde las piedras
a esta mi hoguera.
El Castellano
Ávido camino en piel:
Aciago vilo descorchado
en canal aciago infinito
destapado en sangre
de campo,
él, a veces sonriente
a veces abatido
en su recogimiento
de verdes espadas,
viajaba su idea
como una viborilla
jamás vencida,
siempre con fugaz
aleteo entre estambres.
Vencía cada primavera
al ocre del paisaje,
por cerros era padre
por llanos fiel hijo
de compostura olvidada,
por copas de árboles
brindo esta suerte,
encontrada, cabalgada
por los besos
que puedo dar a mi dama,
que entre forrajes
avanza
a desenterrar
mi espada,
nuestro coraje sembrado
entre mis espuelas.
En los bravos halos
de estrellas apagadas.
Naciendo una
para que brille a ella
mi amada.
Esta negra noche
que avanza
mordiéndose la cola,
entre luna argéntea
deslizada
por sus filos
de pestañas
acuesta al alba.
El Castellano
Aciago, recto vilo quemado:
Cantares quebradizos
se alzan entre aciagas esferas
de la palabra inexistente,
entre sones terrazgos
que sí puede,
llevarme la espuela,
entre la mente que afila,
que pule mi sangre oxidada,
por el puente de venas de mis manos,
diestro al compás que muerde
yo sí estoy hablando
tú no estás escuchando,
esta vida asida en un tiesto,
por encajes sin alba
por encuentros fugaces
en mi averno tejido,
entre estos soles de trapo
que me levantan las flores,
avanza la flojera del día
que llega a su final,
volviendo madrugada de espadas,
quiero contarte hasta tres,
mi aliento que no sabe contar al tuyo
pero sabe que cuentas con él,
yo que ni segura tengo mi muerte,
colgaré destinos
de sus ramas de fresno,
mi piedra será estatua,
no seré yo quien hable si no ella,
el verde musgo llorará el sino dentado,
esta vida de espectro
no me dará de lado,
de un solsticio me haré un cuarto,
entre mis líneas habitarán espasmos
de ideas ausentes,
de fríos hielos de soledad congelada,
liberaré este reino enfuscado
cual vicio cual tierra sin dueño
de crear nuevos palabros
que serán hijos de la nada,
cabalgada, soterrada
en infinito de la siembra alzada.
El Castellano
Linde quieto abierto:
Derecho firmamento
entre filos de gentes,
es una piedra que camina,
piedra aventurera,
seca y umbría,
reposa y duerme
cantares del linde,
centellea rayos irisados
se riza con los besos de lluvia,
acaso quiso ser otra,
ella tan yerma, tan plácida,
imperecedera,
cerrada como se cierran
los rayos de luna,
acantonada, de estéril estampa,
dejas muda alabanza,
el día que te hice de voz,
piedra bella, sola,
estridente sin patio de sonido,
y esta voz que te di
voz dorada como tu piel de minera,
como un soto sin perdices,
avanzabas solo tú,
la vida quieta,
sembrándote allí por donde anduvieras,
al candor de piedra única
igual a la siguiente y a la anterior,
sin afán superior
hasta que este poeta te dio voz,
como flores que sin color
acaso fuesen,
un despertar en brazos de cieno,
un respirar de la montaña,
un cuchillo calizo que afilan
erosiones de las eras,
latido férreo, sangre de mineral,
o compostura de arenas,
piedra de mi casa,
piedra de tu casa,
la tierra.
II
Piedra potencia eterna,
nacida como nace una estrella,
cumbre de filos por bandera,
hogar, cobijo y morada
de lagartijas que cuelgan tus venas,
colchón de rayos de sol,
asolada tu espera
por quien te dio voz,
lideras tu guerra sin cuartel,
antes de yo nacer,
tú dabas alientos al suelo
sin importar pertenecer,
siempre fuiste
siempre eras su piel,
de la cantera, al nicho,
del mausoleo, al caserón viejo,
del silo al castillo,
tu fortaleza empedernida,
tu aval de honda certera,
Siempre estabas
siempre estuviste,
como río a su voz del mar,
osado no fui yo
quien te encontró,
solo fui encargado
de darte moción verdadera
ojalá pudieses contestarme
mi piedrita bella.
III
Devuélveme a tu vida eterna,
del soto a tu quimera verdadera,
clávame la oscuridad de tu cueva,
en esta esfera pulida sin espera,
risco de tu sien enarbolada,
millones de hijos
esencia desnuda de tu alma pura,
techo sin compostura
del ser invertebrado,
techumbre que pizarra llora,
su azabache de cristal,
tu sangre de fuego y agua
que nunca te alcanza
sólo partirte puede,
grieta de helada, tus filamentos
que encaran tu azar de vida sin dueño
a tu sangre de musgo me cuelgo,
en verde musgo tu fantasma muerdo,
vida de herramienta,
azar de la idea,
al paraje que te conforma
al que sostienes su vida
siendo el suelo techo de esta hacienda,
si tuvieses dolores todos gritarían
que se acabase la muerte en la tierra.
El Castellano
Flor de destino:
Requiebro olas en fragor de colmenas
alzadas, sembradas en horizontes yertos,
al fugaz aleteo de la luz,
en fulgor de sombras erizadas,
todo lo sentido más que un haz carcomido,
fiebre en destello de mis astros,
todo lo dicho más que un cielo sin aurora,
más que una navaja de filos
por pestañas,
hilvano que trenzo
la sangre dormida,
es una cabaña de cielo
donde cobijo sueños y quebradizos,
en la cabaña
que Dioses abandonaron,
siembro escarchas de hiel,
todo lo que me dijeron es una verdad,
allí donde la puso el hombre,
bajar acaso puede,
grazna mi vida una vez más,
trenes pasan por estas sierras de nubes,
el destino informe ya cansado se apiada,
toboganes de esta bruma gris
me cuentan, me dictan,
del sentir de la maraña,
hasta que lleguen mis flores
del mañana,
entre el palpitar de azucenas
frías de la tarde,
pataleó el latir exhausto
del silvestre del azul
del sueño, del racimo de mi jacinto,
extraviado,
un sol de invierno que ya se marcha,
por cuencos serranos
por alientos en carne de colores,
abriendo rectas sienes
el crepitar de los vientos,
bienvenido a mi mundo,
yo no estoy despierto.
II
Ama de esta casa, el alma fría,
de mundos retorcidos,
ingrávidos al peso de flores,
destartalado, por gentiles gestos,
azares difusos de mi reino,
saludando a la quema del rastrojo,
un iris por desenclavar,
corona de caléndulas
en soles por doblar,
al rayo seco, tornado en gesta
y sus candilejas fulguradas,
ríe y pasa, pasa y ríe esta espada,
hendiduras febriles
de mis verdes ojos
entre sus cauces la verde grana,
la verde espiga,
un romance del labrador
con su granate amapola,
llora sangre de aquellas santas,
esquiva de obreras guirnaldas,
se cava en rayos seculares del rey astro,
Estallando de luz su rocío primero.
III
Resplandece el día,
entre zarzas salvajes y sus espinas,
duerme que dormita un sueño enhebrado
en blanca cordillera, entre grillos
que aterran saetas dormidas,
al trinar de los cardos
en estepas cabalgadas
de verdes y sus trampas
entre erizos de campánulas
que ya no amarillean,
gimen abrojos el suelo que los vio nacer,
llegado el día del topillo
y su cernícalo que le da digna muerte,
entre este patio de arañas grises
descubro que me hincho de colores
estacionales, perennes, mutables, caducos
en crepitar de savia y duende,
se blande, se rige,
se descubre que todo duerme.
El Castellano
Cuarto para sembrarte:
Duro, seco, estridente,
ilusorio destello
al matiz de soles abiertos,
estoy empezando,
alago, avanzo este cuarto
este cuarto de arañas,
repleto, lleno por escuadras
afilo el verbo
preparado, despierto,
granate complaciente
a este lustre olvidado,
quiebra marzo,
estampida en blancas sienes,
réquiem en osadía,
en marca de astros,
luz intransigente,
fulgor
entre tus manecitas
heladas,
miro atrás
nada reverdece el horizonte,
todo son raíces del hombre,
me cuelgan lunas
ojeras sin alba,
quiebro esta ilusión
me afila su espada,
cómo huir
de los que no me conocen
si nunca me conocerán,
me clava la estrella
un tenor en escala mayor,
gimen flores por abrir,
el sol hiela de nuevo,
rizo sorpresas en tus cabellos,
libero el león,
me muevo,
suceden grises
a mis penas,
escarchadas, desvanecidas,
derretidas en claro oscuro,
por lo que dejó de ser,
llevo que traigo,
resoplos y arterias
en este jarrón de sangre,
hasta que caigan dementes azares,
y sus cruces bienaventuradas
de tu carne,
de mi lumbre,
de este alambre.
El Castellano
Aciago compostaje:
Tantas veces quebrado
como solía ser yo antes,
escalando esta vida,
lejos donde reverdecen cielos,
silvestre en tus aguas,
mirada al pasado que me forma,
se termina mi savia,
incomparable dicha,
sujeta al astro soslayado,
hermanas del fuego deslumbrado,
recto afilado en esta solitud
del hueso,
entre blancas sienes,
entre doradas rosas sin alba,
avanza mi camino fiel de sombra,
aguardando el brillo,
no es una mentira lo sentido,
parado en espera,
deshojando besos del ayer,
de nuevo es mi manera
por la guardia de mis cipreses,
por la desnudez de estas flores
abiertas al color de invierno,
fulgor desangelado,
despierto acres
hermanados de letanía súplica,
hoy surcaré su boca,
me desnacerán dolidas simientes
volarán mis polillas del este,
crecerán tejos sin horizonte,
entre cerros de alarde,
espargasminas enraizarán mi carne,
al techo de esta cueva
brotarán destellos en luciérnaga,
para yo beber mi aciaga espera.
Resoplo agravios en señales,
tiempos agujereados
en mentiras lejanas
laureadas de todo lo que avanza,
brillan hilos por perecer,
arañas trenzadas al amanecer,
no puedo perecer,
me blanden este iris por enternecer,
brechas llamadas a desaparecer,
retiemblan pupilas en noches fugaces
en todo lo que llegué a ver,
diestro aliento en hiel
torcida en extasía de secos metales,
un Sol un Dios
despiértame el dragón,
vestiré en pétalos al albor,
gemiré noches sin luna,
soterraré este cuarto en luz asida,
vendrán a mí estrellas enardecidas,
todo acabará en uno,
un brillo, un relámpago, un son,
un cuarteado corazón,
renegaré de acabar,
tejeré construiré llegaré por puertas
a prender este destino sujeto,
en el parpadeo del suceso
soy hierro tajante,
afilada en cercenada espada
de un tiempo que me perteneció,
soy espíritu, espectro sin nombre
anclado a este devenir postrado
resurge firme su aliento,
entre abrojos de idea,
nunca resignado
siente el color de su noche,
el hálito de caracol,
en su caléndula sostenida,
por su vida alientos hacen súplica,
aguanté, resistiré, me fundiré
con la acidez de mi tierra
asolada, destapada,
colmada, exasperada,
entre tañer de crisoles en capa,
gobernaré
haré reino,
tomaré guardia de este mi camino,
al aguardar de mis rayos
de vivencias dibujadas,
al resoplo del tres,
al dormir del nueve,
nadie me impedirá que me teja
grande.
El Castellano
Tierra perdida:
Limo, sostengo, agito
la vena enardecida mía,
destapa al fuego en círculo,
retiembla destinos ciegos
en crueles, parcos horizontes
sin orificio,
destrenzo el nervio de hierro,
repto avenidas sin salida,
voy y vengo cantando
esto es tierra perdida,
correcto, en el ojo
y soterrada vía del hambre,
nazco que broté de semilla,
estiro que alzo
sangre en caricia,
marcho sin mirar atrás
esto es tierra perdida,
ocaso malva derrite mi vida,
en ríos sin despedida,
en sábanas de escarcha fría,
correcto
es tierra perdida,
nada es súplica advenida,
fulgor entre sienes de carcoma,
festín de arañas grises,
nada me detiene,
avanzo, el sol me cuenta
que es tierra perdida,
cae la tela tejida,
fiel al descanso de mi subrepticia,
gimen tiempos rizados al ascua,
cantan malas yerbas
sin perfidia
que esto es tierra perdida.
Yo contesto
dorado al fulgente metal
que es mi vida,
es pasión, es luz,
es calor,
este es mi rifle
esta es mi vida,
granate al escape
lustre postrado al rejuvenecer
del marco,
yo no estoy colgado,
venzo que avanzo,
resumo, coarto,
me descubro a la luz templado,
todo dicta
que yo voy
que yo vengo
por tierra perdida,
resplandores sujetos,
acuartelados en énfasis,
porque desconocen su sino
madre de
esta tierra perdida.
El Castellano
Dicha insoslayable, flagrando vértice:
Envejezco este hálito
resquebrajan esencias enamoradas
en este patio de estrellas,
por esta vida en doncel consumado,
al resplandor listado venzo
otra primavera nublado,
por este ángel soterrado no me alzan,
no me niegan la inconmensurable pestaña,
abierta a fulgores en lata,
despeño las ideas sin anclarlas,
me vuelve loco abrir mi baraja,
por esta sangre pesos en oro valen,
su quilataje postrero al tacto,
más quisiera mi sanguijuela
no acabar ebria,
resumo que coarto venas
en canales de riego,
soy maestro sin título
del desvanecimiento extasiado,
y que venga por mi letra
la parca efímera
que mi idea es eterna,
caracola de tierra vence
esta sinestesia
de joven biznaga maniatada,
reitero en mi sepulcro
el tiempo no es mío,
venga a mí su ladera,
seré anillo para mi quimera,
un animal de este reino
por desenterrar.
Que me acabe el viento
que yo no puedo,
seguiré escribiendo
por arterias razones,
por pensamientos túneles
que esta noche venceré
a la sola una de la madrugada.
Y su lagartija rizada.
El Castellano
Antaño de vida:
Eres pilar sin margen ni curva,
de tu divina compostura,
tus ojos que acaso sombra cubre
un latido donde se bañan los octubre,
vendaval que entierra nichos
para devolverlos a la vida
en este soliviar barroco
que me puede derrumbar
a la llama fugaz que rige,
avanza y consume mi vida
a la tuya asida por los astros
que son santos,
oscura pila dorada al iris
donde se baña tu alma pura
acaso ella llevarme pudiera
entre sus vientos desnudos,
entre sus alientos
de florestas descuidadas,
acaso ella no me hablara
entre el jilguero y su cardillo,
entre la caléndula y su insectito,
yo volara con ella lejos
donde se oculta el alba,
para demostrarla que yo
libero tu mirada
por rayos de su aura imperecedera,
fuente de alta frente,
cumbre de riscos y valles,
alguien acaso arrebatármela puede,
aunque Ovidio te de más flores
quitarme nunca puede,
ni aunque tiemblen
mis huesos rectos y sangrientos,
osarse en gris mi camino viene,
te traígo golondrinas en suaves trazos,
te traigo sueños en colmena,
y sonrisa en luna venidera,
anclada a esta sepultura,
al resoplo trenzada
mi cristalina esencia,
en crepitar de estacas por clavos
que llevo ardiendo en mi pecho,
a este diáfano vacío
vengo que voy llegando,
caminan pensamientos
de sus sombras colgados,
esta osadía
que ya avanza como vidrio quebrado,
haciendo polvos la idea,
porque no me alzarán en marco
ni será eterno mi mármol,
dirá por este mar he llegado,
y el azul acaso será azul
por yo nombrarlo,
viviré de la letra amarrado
hasta que ella sostenerme pueda,
haré juicio de esta arena,
en escala a aquella estela,
sangres me gotean los ojos
de ver desnuda a Diosa Flora
vistiendo de los campos
la miel para cada sentido
mi amapola yo que nací hombre
nada ningún averno,
ningún paraíso cercenado
ninguna deidad personal
de tantas sardinas que adoran
de boca pequeña
podrán negar que yo asalte
que yo recorra tu flor.
El Castellano
Alevosía sin mirada:
Avanzo el patio de mi araña
y su soledad acrisolada,
no dejes de mirarme
en la cumbre de este ciprés,
cernícalos atrás
soy puro como pizarra
sin pulir sin enmascarar,
dirijo mi acequia por lares
descubiertos, insospechados,
en suplicios dormidos
reino el astro,
te debo más
que lo que no puedo alzar,
por sostenerme el cruel devenir,
danza el momento
de tu caracola y su iris,
en arena rasguñada,
al tarot helado de tus naipes
de mujer, afilada mi idea
queda navegar el vaso de agua,
encumbrarme de la fiera,
sujetar esta quimera,
porque estos sentimientos encauzan,
traspasan la sangre filtran mi insolencia,
si soy hombre de verbo
y escribo parco silencio deshojado
en papel de vida
rizado en aliento renegado a morir,
sólo hay una petición
de rayo en alba postrado,
es contar sonrisas a tu lado,
venceré tormentas
de destino caracoleado,
por el último rayo,
déjame demostrarte esta sangre
este hálito que absorbe
y traspasa pieles sedientas,
es una tela un vello erizado
en penumbra,
por el que abandono mi nombre,
y que mi corazón suba
y hable por mi garganta,
este tiempo de cuchillos
con los que haré un bocadillo,
y que me dejes ser tu lejana miel,
no conozco el frío
destapa tus cartas
caeré rendido para honrarlas,
porque sólo una vez en la vida,
se puede conseguir todo
lo que uno desea
y que me arranquen como mala hierba
que el mundo
se quedará sin destino solaz,
sin rayos de luna,
sin huerto de estrellas,
porque yo sin ti
pierdo hasta la cordura,
y que me juzguen ojos
y vidas de un día,
que yo sin prisa enamoraré
corceles de viento,
desmenuzaré crisoles
abriré molinos por sus aspas
hasta yo quedarme
en tu vereda fugaz,
con solapa honda, dura,
siempre con destino
de envolver tu aura bella,
listada, estridente
al crepitar de todos mis espejos,
mi pianola
desviste surcos
para cantar el sentido alerta
y que nada escape de la hoguera,
este cuclillo trinará
que si fuese cuervito
viviría en la noche
de tu mirada serena.
El Castellano
Ondas mecen:
Me cruzan las vías
del tren de la noche,
abierto, caracoleado,
en peregrinaje de estrellas
y sus halos,
este insomne caballero
de tu sonrisa nacarado,
arrebolado entre tus brazos lejanos,
una hoja precipita
al tañer de campanas
en garganta de lluvia,
no hay invierno sin frío
ni frío sin invierno,
vuelta atrás estoy vivo,
una vez en la vida
curva de espejos
entre verdes y ocres,
quién dijo que no tuviera esperanzas,
pálpito fugaz de estrella marchado,
el amarillo viste mis flores,
color efímero, sin despedida,
entre un patio de ojos
y sus carcomas solariegas,
danza este caballito sin diablo,
al cuartel de la cucaracha
van los ojerosos grillos,
todo cuelga de un hilo de lana,
horas minutos
para hacerme libre,
termíname tú porque yo no puedo,
este alfiler parco, sobrio
como él mismo,
entre circo de huecos sones
danzan los vellos de mi piel,
por el agujereado brillo de luna
cuento notas perdidas
y el filo de esta mi cuerda
hasta latir con ella
y su desnuda poesía
con cuerpo de mujer,
lejos de la tierra,
entre un soñar del viento,
se destapa mi cordura
le florean pensamientos
fieles ecos en iris despierto,
dulces ondas como dulces sirenas
enamoradas,
de este marinero sin mar
llamado verso,
al senil aleteo de la polilla,
el invierno nace de un cubito de hielo,
que avanza ya su noche
sin pedir permiso,
al vapor de sienes heladas,
entre un coraje acorazado
de haber realizado una buena siembra
me marcho.
El Castellano
Filo sonriente:
Agudo filo nacido
mi destino.
Recuérdame en la tijera
desdoblando la espera,
hoy por hoy
mañana por ayer
el frío en la piel,
de estas cuchillas
sonrientes,
y su esperanza
carcomida, acabada
en hoguera.
Miénteme aparte
ancla en gozo
el violín de mi idea,
corriendo por fuera
marchando lanzas
de tierra
y el tiempo
solo, hinchado, dormido.
Rehúyo de mi pasado
que se clava
en mis brazos.
Mírame aparte
del punto y su silencio
seco.
Esta vida en el centro
de una margarita,
miro su caricia
en pétalo de brea
arde mi sinfonía
deshace la lejanía
hasta ser ese lejano
carrusel de estrellas
por boca.
Vida por mi vida,
y yo qué no daría,
a este cielo desplomado
de fieles compases
oxidados,
es por su plomo
que a veces plomo,
a veces más alzado
que las cumbres,
entre regueros y ramblas
libero mi azada,
en cuerpo de sangre y vena,
no conozco a Pena,
entre su alta ojera
clavo una letra,
abre la acequia
destartalada en honda esencia,
allí donde graznan cuervos
su lenguaje de madera,
soy yo a la espera,
abriendo mi destino
en esferas puras, plenas
ay la tierra
vive esta dorada
escolopendra,
sucesos de huesos
arde la compostura
afila su beso de miel,
todo queda en yacija,
derramada hiel,
entre grietas iluminadas
del iris insomne
soterrando verdades,
completando
liberando sus cavidades
y su dama oscura
naciendo la noche
que ya vuela,
entre testimonios del pueblo,
que pertenece a la tierra
y sólo esta a su materia.
El Castellano
Vieja escuela sembrada:
Cierra los ojos
es nuestra creencia,
por la que no hay
rosa sin espina,
línea de destino,
déjame sembrar luz
en la retina,
que caiga mi gota
quebrada,
viviendo tus memorias
lejos de la letanía
enroscada,
crepitan los labios grises
entre crujidos por despertar
leones del nuevo día,
Noche, noche
tus minutos erizados vencen
pasan las horas
y las horas
la misma pesadilla tejida,
en vilo en vela
de navegante sin mar
sin barco, sin puerto,
viviré una vez más
esta soledad del párpado
despierto,
muy alto, muy hondo,
todo se retuerce en sol mayor,
hasta la cima
me verán cabalgar,
resume este papel
un furor oxidado,
soy yo, soy yo su raíz
que ni yo mismo entiendo
dichos soterrados en alma difusa
en corazones sedientos
su fría caricia entre espadas
ni yo hago empeño solariego
ay la tierra perdida de tu raíz
quien osado sólo la viera
de viva materia rompiéndose
sucumbiendo sobre los filos hirientes
hondas espumas
riéndo en camino vivo,
en un sentido
con bordes de rosas y cebollinos
y senda de espinos fugaces al alba,
brotando imperecederos
que enriquecen los pliegues sembrados
de esta mi sonrisa
de esta voz en calma y en tormenta
de desnudos sigilos
que te nombra y nombra
si no estás lo hace sin cuenta
Poeta
Haces la ruta sin pena ni sangre
que no sea portada en tus venas
de solana hacia el sol
en un ovillo giras en tornasol
allí donde sus esposas
amarillean y tu sien gotean
en canto al amor
alzado en rayo de Thor
será un caracol
cuando nos vamos
solos sin nosotros
con o sin Dios
nació un vespertino albor
ocultando el dolor
secando lo que plañía
la sin razón
Se duda entre las cosas
por la vaciedad de las cosas vacuas
de fatuos alambres en fanal
hoguera del hambre
de oblicuas espinas
y los nuevos castillos
que sin su castellano chozas son
destruimos
si nos miramos
vencer o vencer otra vez
Oh raíz
ay de tu tierra que te vio nacer
qué guardas
en tus bases en las grietas
que te clavan que estiran
tus lágrimas del ayer
que no nos dejas ir
por caminos distintos
a los limpios valles de oscuridad
reposo y sosiego que clava el camino
¿Será cómo es
por siglos
de siglos?
De este tiempo oxidado
que latirá el son
con forma de tu siniestro corazón.
El Castellano
Cristal silvestre:
Ámame como se ama a la vida,
porque te amo en caricia
sin despedida,
tú que eres como la noche
en subrepticia,
yo contemplador extasiado,
por el fulgor que se abre paso,
Fin del diario,
este es el momento,
que se queda para descubrir
la expectativa
del vivo hacia la vida,
todo cambia y yo lanzo
mi destello sembrado en mis ojos,
susurros en letargo
abiertos al destino parco
estoy en tierras de la luna,
abriendo, tornando bella
su distancia,
todo sembrado
de quien yo era,
esta mi raíz que canta
plena, sacada,
cortada de su tierra,
para nunca olvidar,
alzada a tormentas del tiempo
y su etéreo desliz envuelto,
en las calles
de los sueños rotos
un pasado que dejo atrás
estoy joven para estas nuevas visiones,
existencia clavada,
al crepitar enroscado entre arterias
de alambres,
y su perfección
erizados gritos liberados
hay que pagar el precio
de ser mejor que este talento,
avanzo lento,
me abro por el fuego,
y no hay sangre que no me deje
envuelto,
miro dentro de tus ojos
buscando mi respuesta,
el sol se está enterrando en tus cabellos,
lima este nervio
que llegó su escarcha
siempre aparte,
siempre en alarde,
hasta yo encontrarte
encontrarme yo
en los sotos de tu voz
hasta ser yo el alarido con nombre
de sol, ser por siempre
ser para siempre,
ser siempre,
y Siempre llevar mis apellidos,
Siempre quemándome
en resquemor intransigente,
precisión de mi duende
llamado amarte.
ARTE,
condenada mi sombra,
a este precipicio
que despeña la letra,
a través del umbrío páramo
de esta piel y su yermo bosque de vida,
sigo la estela
vocecilla, elevada sin razón,
porque sí me sobra corazón,
soy yo mi murciélago de nácar,
vuelo que giro el infra-sentido terrestre,
y me quedo en vilo,
es glorioso este sino,
haciendo el amor con los sentidos
en el saco desdoblado,
de mi realidad soterrada,
destapo que descubro malvas
del sueño taciturno
que conduce a contemplarte,
bajo el sigilo de mi araña,
y su tela irisada,
en extasía de espejos carcomidos
sin dueño,
que no sea sinestesia
del cuadro de visión
llamado visión enardecida,
por la que mi ciprés
tiene tacto a caricia desnuda
y mis caléndulas caminan
con sabor a deseos de rubor.
El Castellano
Quiebro en dicha descrita:
Muero por un beso
aquel sembrado dirá que vivo
vivo por un querer
cruel del destino
condena de una pasión
que creó tu pestañeo
al dejarme ver
tu cielo encerrado
ese que liberado
jamás me abandonará,
fijamente tres minutos,
y morí con tu pestañeo.
Demostró que fui y soy
importante para ti
y que a pesar y muy
a mi pesar de los problemas
problema no es mi apellido,
seguí en tu mirada atrapado
hasta que la aguja
de aquel reloj de pulso
se paró al pasar ciento ochenta segundos
mi cambio de vida
cuando consumí
medio giro al decir
siempre te amaré.
De este resquicio vivo
yo traigo la flor,
en competencia
de ilusión que marcó
esta hoguera sin pena,
eres tú soy yo,
flamígera condena,
por el párpado del cielo,
por mi astro soslayado,
que yo sólo encuentro cielo
en tu mirar encandilado,
soy un muerto con vida
si no te tengo,
y este firmamento
se me cierra seco,
muchas cosas erróneas
en mi vida
que no hay tiempo para la sombra,
no hay tiempo para tristeza,
ni para la vida quieta,
porque todo resume
en buscarte a ti
mi vida completa,
si este corazón es un tiesto,
quiere y te quiere a tu persona,
enraizada, plena,
resplandeciente,
como el brillo,
como el halo,
de tu limpia, dura
sonrisa de perlas
en océano de resurrección
mi ababol amapola
descubierta en dicha,
mía, mía sin despedida.
El Castellano
Solariega atarraya:
Verdades, verdades floridas
sólo para ser feliz,
es un surco, engalanado
este forraje vertido,
quieto, bravo
al desdén que marcó
su mirada en mi sien,
por este horizonte
me alzo con cazamariposas,
al azar de capturar sueños
que derraman sentires rizados,
cromados al tacto,
lancé mi atarraya
al río de mi alma
y no para capturar cangrejos,
sólo para sentir que mi alma
porta versos que nadan
en serena compostura encumbrada,
si no nací ayer nazco hoy
de esta tela,
un destino, besar su entraña,
alborada,
vestida de valles dulces
que hacen gestas dolientes
y su escarcha enamorada
que porta su sangre,
soy su leopardo
soy su cielo ausente
por el que fijo y clavo sueños
jamás corrientes,
mi ser es lluvia
soy cómo un ruego
de la montaña,
quiero ser yo
su aliento de fuego,
el idioma de una piedra,
su fiel compostura despierta
porque si me visto de cordero
solo soy su lobo
para lamer más que su cuerpo,
y brotarme dentro,
era o no era
fue continente de la belleza,
lágrimas de mis Dioses despiertos
porque ella es mi compañera
hasta fijar esta sangre
en fila en orden
para sentir la vida
y su sediento horizonte,
soy de ella como la lluvia
a mis plantas
vistiendo a este señor destino
de traje,
acompañando esta araña
que teje mis sentires por ella
mi ruptura de mi sino,
porque ella es mi camino.
El Castellano
Cercenada razón:
Ilusoria, despierta, vespertina,
trepando lúgubre escala,
iris destartalado, ansiado
cubierto de cromáticos azares,
por un metal afilado va venciendo
a este brillo irisado vestido
de crueles destellos,
raspados destellos
de todo lo que dejó de ser,
reflejos sin nombre
ilusiones de este alambre,
rizado con hilos que gotean sangre,
despierta mi pesadilla
queda asomar la dicha
y mostrar esta araña,
fulgor desnudo al fragor
de transparentes cristales
que enamoran los hielos
que febrero siembra abiertos,
si estoy despierto se equivocan,
nazco que traigo
un cesto lleno de sueños,
se derrite mi estampa
quieta colgada del árbol
donde hago peticiones,
y que este forraje
se desprenda de mi humor,
no me desalienta,
he crecido para brotar
más duro y recio
que el esparto del monte,
traigo mortandad de idea,
en letra extasiada
al filo de verticales escarpias,
soy yo encargado de esta acequia,
que ni el más osado
pedirá que se calle,
alzo su valía
en desgranada espiga
que rompe mi silencio seco,
si no soy gente lo demuestro,
enseño a mi tinta
a no pertenecer
a este mundo de yertos,
mejor que qué cosa
mejor que la opaca suma
de alientos que se creen
tener originalidad,
de su umbral
prendo a cerilla
todo sembrado a diario
de vacía voz,
yo repleto no soy yo,
soy su extasía floreciente
de imagen y su prima
clavada en alfiler sin cabeza,
como un grito de letra,
y mordisco de fiera,
que deslicen décadas
que seguiré siendo yo mismo
entre grietas, entre esferas
quebradas y su olor
a flores desnudas,
que yo sé lo que hago
si no ni lo haría,
noche corría marcha atrás
esperaré su madrugada
soy taciturno con huerto de luna,
y siembro un quién contra mí,
estoy brotando,
no hay miedo yo soy el miedo,
fiera de esta hoguera,
llamada esperanza,
tengo una llave
y no soy cerrajero,
abro este corazón
y despierto su dragón,
hasta acabar de una tajada
con mi sana razón.
El Castellano
Arácnida:
Había sentido
Bravura repleta
no tengo ojos
tengo lágrimas de cristal
al iris en belleza consumada
nadie te alza
tomas tu lugar merecido
jamás colmada
siempre rebosada
de lo bello a lo mejor
sembrado ojo por este ojo
me late me arde una simiente
para el campo de tu alma
vida yo vida no tengo
si no se dirige en mirada
a mi letanía certera suscitada
desde el 2008
jamás en súplica mecida
por este arrojo
en mi pecho sembrado,
viva y descubierta en este tajo
repleto de lo bello a lo bonito
de su interior decretado,
yo hombre de sangre
siembro este sortilegio
de espadas por si llego
a su alma
y liberar libro sus ataduras,
por soñar soñó la primavera
que mis flores eran de ella
yo reviento y exclamo
que son de argenta bella
mi maestra en furor de espigas
nacida
solo tengo un corazón
y es suyo mi dama,
dama blanca
doncella escarchada
de esta vida a esta mi viña,
yo dulce muero despacio
por llenarla de esta dicha,
seguiré en pie porque ella
sigue viva enraizada en este latir
para yo con amplia voz decir
sin ella no hay vida ella es mi vida,
El Castellano
Solar entre clavos:
Iris deslizado
entre grises hastíos
que me hacen hombre,
hombre en fin
de tijeras y clavos
iridiscentes,
no cambio mi estampa,
entre verdes fulgores
a todo lo que crepita
sin nombre,
agujereada tela
estos años dulces de cuervo,
con ineptitud de sangre,
forrajes me tiñen la vista
enferma,
para no saber quien ser,
solamente ser
un crujido
de mi parca mecedora,
que lenta acampa y cabalga
flores de tiempo en mi espalda,
es una noche que grita
que se acabó la luz,
obscura tiniebla
del compás marcado
entre mi coraje y mi blanca piel,
como un párpado desnudo,
y una alimaña de verbo despierto,
quise conocer a mi descendido
aliento entre nubes de plomo,
mi diestro zigzag
mostraba sus pestañas somnolientas,
con el ardor de mil fuentes,
cabalgo esta hendidura
abotonando mi deseo
con solapa y tapa dura,
gentes que ya destierro
y no cabalgan mi idea,
venzo mi granate iluso,
otra despedida
que clavar sin elevada desquicia,
rosácea calma nacida,
entre un tejer de arañas,
vendrá a mí la dulce quimera
enardecida,
que viva
hará caricia
a todas las albas
de mis letras despiertas.
El Castellano
Soliviar barroco:
Próvida estampa
que corre, aletea mi profuso alivio
que juega mi mal,
huida de quienes no me conocen
porque nunca me conocerán,
algo que ni yo mismo hago empeño
puesto que tomo lo que no me dan
con mi esfuerzo,
y no deseo lo que no tengo
porque me enseñaron
a amar lo que tengo
por eso no tengo más
que mi silencio,
porque de amar algo
lo acabas perdiendo,
la mujer que siga siendo mujer
para completar a este animal
que me tejieron,
cavo en mi jardín una fosa
para envolver con oro fino mis escritos,
por si un día despiertan
y me llaman papá,
les dejé una receta de cocina
junto a ellos:
Hacer una hoguera
y meter en una maceta envidia,
hipocresía, odio en mundanal caricia,
mal ojo de deseo,
mentiras, juicios malsanos
y dejar la maceta en el fuego
999 segundos,
con eso estarán alimentados
el resto de siglos que me quedan.
Mundanal zozobra que acuso,
acabaré pagando su recibo
en sangre,
todo lo lejano
como un soliviar de mentir más agudo
buscando vencer a la aguda aguja
decretada en espacio,
hoy seguiré mi curso sin mi nombre
por si consigo empalar a mi etiqueta
que brilla y reluce más gorda que yo
que ya parezco medio espectro de mi silencio,
un réquiem se blande entre mis huesos
que ya no crujen,
están plenos, hinchados porque saben
que durarán más que yo.
Y yo duraré nueve vidas de gato de arena,
por ser lo que soy
un rival de mí mismo,
llego a mi abismo.
El Castellano
Camino de escarcha:
Mantenme en destilación,
es este un real camino,
un abejorro que vive lejos
y posa siempre en las flores,
como quietudes de las estaciones,
resquicios de real amante
de sus estambres,
abierta mi blanca estación,
y su escarcha que inverna,
verdadero amor a tu flor,
camino los lindes del verso
por si acaso descubro
su polen ese que dejan tus ojos,
caminos de grava,
rajada caricia de helada vida,
entra en mi granero del sueño,
entre este manto
de lo que se alza sin dueño.
Corre mi amor
por veredas de torcaces,
y perdigones entre espartos
del monte.
agrieta el linde a mi paso,
necesito acompañarlo de tus pasos,
en religiosa procesión
de anhelos clavados,
en este baldío
se riza mi sino,
en compañía de la espiga,
que siembra mi guadaña,
respiro la jara,
y se abre la añoranza
entre espinos clavados sin ala,
tiembla este granate de sangre,
rezando a este Sol de invierno,
me dé el fulgor de estrellas,
risueña mi dama
trenzando sus cabellos,
entre esta solitud
que ya nunca nos separa.
El Castellano
Ramblas de sueño:
Resumo que venzo
agravios y destellos flamígeros.
Hago diestro empeño
en esta casa de arañas
Por la grieta del álamo blanco,
arañas grises me cuentan
de la estación perdida
entre hilos y retales
del hambre.
Escribo a este reposo
que hace el amor
con las heridas del chopo,
grieta acicalada
por entre notas
del viento y su calma,
sueños temblorosos
crepita su carne de madera,
al calor que retuerce
el astro verdadero.
La tierra deja cicatrices heladas,
se yergue la caléndula
en complacencia de espíritus
de carne de arena.
Es mi torre una estatua bella,
fulgores rizados entre blancas sienes,
con el sigilo de carcoma
vendo mi ayer que se desploma,
Agujerea, crepita, chirría
mi yunque despierto
clavando este pertinaz dolor,
que si lo sacara cantara de un amor
entre venas.
Parto el cristal de mi suerte
por si afilo mi destino,
mi existencia queda en invierno
alamán del nervio
ese que pasa la puerta
del negro lirio,
mi alma partiendo almendras,
desde mi sol dibujado
a esta luna de azúcar,
Soy reflejo de mi sombra
un esmero de la tinta,
si mi vida fuera papel
No habría tinta
para escribir
lo fuerte
que late sin balde ,
al suelo de la encina
abre sus fauces
la hormiga león,
tiempo burlado por cortezas
vivas, desprendida
mi soledad, vuelve
el oscuro, tenue soldado
alado, este suplicio abotonado.
El Castellano
Registro soterrado:
Resopla, para y se piensa,
por pensarse
nació una lombriz azulada,
buscaba su escondrijo húmedo
de la idea,
se aleteaba
como gusano floreciente
haciendo alarde,
él sentado en el trigo
de su verso
no se vio la espalda
llena de abejas
de pensamientos típicos
de su vida parada,
como reposo de barcas.
El puerto rancheaba
oscuros rayos,
era el letargo de su espera
cabalgada su vergüenza
no más románticos cigarros
todos se tornaban
en el uno idéntico
llamado vicio,
el alacrán de su mente
corría feliz o eso creía,
sin tener nadie que lo pisara,
surcos se abrían
en el barbecho soñado
de su dama
que ya era imagen de hoguera,
yerma vida la estampa
que colgaba del poste,
un señero quieto se afilaba
con el viento.
Beba sus penas
en taza de café a temperatura
de la helada que rondaba
lo bonito detenido,
eche el anzuelo en el lago realidad
por si muerde la quimera
Diosa enajenada virtud de virtudes,
arrastré mi pan de celiaco
por su cara y mordí su boca
con suavidad sin dientes,
quería navegar su lengua
otra noche tiznada
de reposos dementes,
cogí las riendas de mi azar
desbocado, rumbo a sus piernas,
amaneció la dicha de estar acompañado,
al último suplicio del espectro engalanado,
gira mi cabeza
que sale un estornino de mi barba,
era este un acre de calaveras
que vestir,
estaba la sonrisa
de todos los tonos sentimentales
de la cara larga,
avanza que da vida
mi escolopendra patidifusa
del millón de espantos,
era un patio de orugas
el caminado por mi salvaje esperpento
difuminado,
un rincón donde clavar la lanza
que nunca sonríe,
caminan dentro, caminan fuera,
más patas que ojos,
sentido inerte de la fiera
por tornar polilla,
y sus pavimentos de la estrella
acolchada de ella
mi almohada.
El Castellano
Cauce en flor:
Inconcluso azar
flor de azahares
en estos cauces
de venas hirientes
parco compás silente,
estalactitas de este amor
fulgente, evanescente,
con surco de mi sangre
caliente.
Su hechizo de piel
que me abruma la hiel.
Colorines me silban
su quietud,
colorada, furtiva
en la pulcritud
de sus mejillas
al alba de mis deseos
nacidas.
Enajenada mi estrella
queda sembrar el cielo
con margaritas,
y vestir el astro de traje
para nuestro encuentro
que viene y avanza
mi adentro
queriendo y siendo
el primero.
Un flamígero capítulo
de mi sanguínea vida
al fragor de simientes
que germinan
nuestro ensortijado cauce
de nuestro albor,
engalanado
en un molinillo diente de león.
El Castellano
Brillante oscuridad:
Despedía el día
la porfía de una melodía
una balada por Belcebú,
el pasillo se abría
cruzaba las calles heladas
de enero y su cuero,
danzaban las sombras
entre el descampado
donde las casas eran malas yerbas,
malas por qué
acaso lo bueno es el humo
de un coche,
cuando ellas en primavera,
arrastran las penas
con su fragancia
a mujeres desnudas,
miro dentro de mí
pregunto por qué todo
torna azabache,
habitan cuervos mis ojos,
ya no hay precipicios
en mi mente,
que se dibuja de ladrillo,
miro al cielo
que todo parece una cueva,
acaso ya bajas,
sigue tu curso de Dios personal,
que te seguirá cómodo,
el bajo cero ciñe su lustre,
mi sentimiento afligido
hoy canta con mis dolores,
con rezos fugaces
alargando la noche
teñida en el ojo de mi despierto,
porque me cansa
esta febril, verde, emplomada
mosca impuesta medicamentosa,
hombre en el acre oscuro
por encontrar mi decencia,
estoy colgando del párpado
de la quietud noctámbula,
yo no estoy escribiendo,
soy un vuelo
sí de murciélago,
vendo mis mañanas
por un ayer construido a su lado.
Es como el hueso
de un poema imaginario.
El Castellano
Azar sin venas:
Fiel reflejo estridente,
los cuadros de tu vida
danzan entre las baldosas,
entre acorchados pasos
todo va quedando atrás.
Un ocaso florecido
de espadas en sigilo,
tiempos huecos
en lúgubre caricia.
Acaso la luna es luna
o alguien despierta
y la pinta.
Cerrojillos en destierro
de este silo de oscuridad,
avanza que imanta
el día y su prisa
por alzar su despedida,
gritos secos se mueven
tras el ventanal,
sangre que coagula
entre compases
de malas yerbas
de mi patio.
Es un mirlo negro
que me visita
siempre vestido igual
estrujé las vidas
del gato de arena que soy.
Suicidios de cardos
corren el patio
se riza durmiendo
mi gato negro.
La soledad me ama
más que a su estampa
vuela y reposa
mi fiel añoranza,
reverdecer mi ilusión,
socavar con sucesos,
así como besos
de este azar
que no siempre
se pinta negro.
Acuchillar esta realidad
con mi suerte de seguir vivo
para tomar con mi esfuerzo
lo que no me dan.
El Castellano
Campo de espigas:
Miro mi soledad
desde el otro lado
donde las sombras nacen
y crujen en las paredes,
caminillos del pececillo
de plata, acurrucada
mi sien
abre los lindes
del sueño retirado.
Es un desfile
la luz del astro
intransigente
sabe que no tiene
mejor en su empeño,
se riza mi idea
sabiéndome cuervo,
adentro el nueve
y el tres sacude.
Vive este caracol
con casa de espejos
habito el espejo
estoy escribiendo en él,
que un día
las imágenes harán
dulce sinfonía,
los sonidos serán
colores derretidos.
Mi casa será una hoguera
mi luz será invencible.
Seré yo el encargado
de cabalgar los tiempos,
el olvido dejará
sus cerrojillos
entre un manto
de abrojos lucidos.
Las hojas llorarán
baladas estridentes,
mi letra rozará
la perfección
de las décadas
florecientes.
Siente el poder
del cuadro
de la oscuridad .
Afílame el cuchillo
hiriente,
tejidas las arañas
de mi carne,
atraviesa esta grieta
de la realidad
que no llora flores,
sólo lleva en tules
almas y su ciego campo
de espigas.
El Castellano
Piel labrada:
Surco de noche
ya se retira
sonando el día
y sus rosas heladas
de invierno,
iris matutino
clamado
en este fiel olivo,
surca mi sangre
entre verticales filos,
mi gris vencido del alba
serena, más desnuda
que la transparencia
que el azul afila.
Se clava este verde
militar de ciprés
como cuchillo enervado,
y su canto
en estos sigilos de chopo,
cargo mi revolver
naciente del verso
por un sol de plumas
cae fusilado el aliento,
algo que clavar
al firmamento
héroe del norte
de mi silencio.
Fantasmas
del imperio perdido
su bandera del tiempo
dormido.
Fúlgidos nervios
cabalgan los acres
de esta trinchera
donde mantengo alerta.
Jauría de sienes hendidas,
con fauces somnolientas
quise ser siempre
con esta mente,
profundicé el idioma
de la flor,
hablé con la tierra,
aún guarda mis abrojos
sembrados.
Entre brotes verdes,
impacientados,
aguardan el bravo
crepitar de la tormenta,
y sus besos azules.
Ahonda esta vida
silos del demonio,
simientes oscuras
de malas yerbas.
En este campo yermo
crece mi ilusión
que no me siembren
el dolor,
seré como la flor
soñaré con las piedras,
reiré con abejas,
jugaré con el viento
como la vida grita.
Ahora que la mañana
consume los suspiros
ahogados,
ahora que el cielo
luce sus corceles dorados.
Es por esta pizarra
que me habla el río
me habla qué más
que ser agua.
Deslices anudados
entre corajes florecientes.
El Castellano
Guardado en un cajón:
A veces me rompo
a veces soy grieta
de estas paredes heladas
de corazón.
Seguro para escalar
mi vida una vez más.
Quieto en las aguas
que suena mi pasado
miradas atrás
hoy soy nuevo.
Se puede escuchar
el crepitar de este hielo,
el sonido palpita,
congelado un brillo,
de humo descorchado.
Garras de esta vida
en el filo de su destino
enmascarado,
y su camino de azul caricia,
me aguardo del fuego
soy destello de hielo
me derrito por una flor
que habita los campos
porque sus semillas
las ponen los Dioses.
Enraíza a fuego
este corazón.
El día mío ya suena
y la sombra se retira
a donde puede jugar.
La mentira queda lejana
espero el tiempo
para derretir mi alma
en sus brazos,
y encontrar fieles
testimonios olvidados
de edad desplomada,
su nueva visión caída
tiempos cambian,
en esta fosa de palabras
rescato afecto alumbrado,
resquebraja
la palabra amor.
Sólo soy unos ojos
con funciones vitales
esperando el encuentro
y tener carne.
Hasta abandonar
el espejismo doblado
en profusa imagen
de lo que anhelo
encontrar.
Se consume mi cigarro,
en este grado bajo cero
de libreta.
Habita una estrella
la mirada,
una babosa
su lengua dorada,
con su luz que arrastra.
A la floresta ausente
destapada,
el reposo de la vida
bajo invierno.
En el que vuela
mi demonio arte.
Mi corazón que late
encerrado en un cajón,
llorando flores
por todo aquello
que no muere
es este río frío,
desborda las letras
rompiendo sus cadenas,
amando libre
desnaciendo mis colores
por amor al arte
hasta la muerte.
El Castellano
Fulgurado sino:
Era un día que se podía rezar
a la estrella mayor,
como si una babosa metálica
se tratara,
busco en este astro una razón
abro a su luz mi creación,
que me cuente
de sus paticas que recorren
los campos tiñendo de ocre,
de su insípida lengua
que me recorre,
un hogar lejano donde descansar,
una novena puerta a transmigrar,
creeme de nuevo si te digo
que soy tu hijo adoptivo,
nacido de estas cuchillas de trillar,
un verbo un suplicio despierto,
cruzo la era solariega
buscando quien yo era,
miro al muro sí ese que dibuja mi mente,
miro a la montaña,
recuerdo que yo soy la montaña,
navego este mar de grama
de esparto y tomillo, tiznada la jara,
sí vivo en Guadalajara,
como cuervo adoptado de Castilla,
avanza mi meseteño aliento,
aúlla que aúllo cual lobo de hierro,
una noche sin despedida de invierno,
avanzo a la llamada de mi averno,
está ardiendo en el cielo,
mi musa belleza,
hasta que se materialice
en mi única florecilla,
llevo mi canasta de melocotones
a ella mi gitana,
arrojo dulce abrojo
la quiero en rojo
a veces en blanco como prima
de la pureza,
sí esa que endereza,
hoy es un día teñido de espadas,
baja mi azul despertando a mi araña,
que hilvano y me hilvana
cual maraña de sábana de su tela,
no nadie entiende
por qué cruzo la espera
fumando el cigarro del minuto sujeto,
mis ojos ardiendo el juego
de su fuego de mujer,
ciegos pálpitos
crujen su negra pupila,
yo no estoy despierto
ella tiene de ausente su presencia,
cuervo soy esperaré su noche
noche negra alza tu sombra lúgubre,
yo cabalgaré tu sien saltando
tus oscuras fauces,
hoy lanzo tu tenue honda,
afilo este cuchillo a ver si canta
junto a mi iris vespertino
su crimen de pasión y de flores,
hasta que se duerman
los campos conmigo.
El Castellano
Vuelta al inicio:
Es del tiempo
la incombustible hoguera
consume la tierra
en perfecta esfera
se alza un maullido
desertor.
Gatos que suenan
como alambres
en casas sin teja
ni tejado.
Soñé un día
su contorno
su silueta
me arrebató
el sueño
diciéndome
y corroborando
su espejismo.
Sol oscuro
en días claros,
humedece mi piel
una áspera lija,
soy de madera
de ciprés.
Soy hijo del Sol
de hierro
y de la luna de acero.
Soy yo el encargado
de partir el viento,
yo que abrí
mi destino en dos mitades,
una para sacrificar
en ofrenda
si se cumplen mis deseos.
Soy de la tierra
una espiga.
Hijo del Sol de invierno,
ardiendo en hoguera,
del cielo
su quimera despierta.
Oye mi respiro
me tiene miedo la fiera.
De este panal
de mundo no soy larva,
soy abejorro mayor
sin reina,
hago énfasis
de esta siembra.
De la tierra
soy flameante espada,
torbellino de este mar
angosto.
Espuma de estas caricias
al alba,
crepita sobre una araña
este fulgor,
Torbellino señor
de rosas sin sangre
y sin cortar.
Como cruel indulto
a la belleza
por encumbrar.
De hojas y espinas nació
este tallo
que ama de verdad.
Que muere en el suplicio
de su despierto tormento
dulce, ensangrentado,
envuelto nacarado.
El Castellano
Sigilo de sobriedad:
Fauces amarillas. El humo de su tabaco seco, cuelga de su blanca sien. Bocas de agudos filos, nada por todo. Tomaba su café de grano recién molido como si goteara del árbol del insomnio. Era un hombre chapado de años. Dormía cuando tenía sueño. Comía cuando tenía hambre. Amaba más a las flores de su jardín que a las personas. La amargura no conocía si no se hubiese casado con ella. Su bigote recto comía por él. Era apuesto, pero le asustaba mirarse al espejo y contemplar que el tiempo podía más. Su diálogo era más parco que una tabla agarrada bajo yunque. No amaba el dinero y sólo lo empleaba en gastarlo para necesidades básicas. Hablaba con sus flores y lo extraño era que le respondían dentro de su cabeza, consecuencia de la soledad avanzada. Seguía la ley del ojo por ojo si le daban amor. Devolvía lo mismo, pero en cuanto al odio, éste, le temía. Gustaba sentarse en su mecedora en el jardín y acercar comida a córvidos negros como azabache y observarles . Era un hombre pleno y hacía honor a su vida, amando lo sencillo, cogiendo su armonía en la mano que sostenía su cigarrillo y que blanqueaba ya su bigote. Con la paz en su soledad, feliz de contentarse en su memoria de cuántos conoció, cambiaba luz en su medianía exacerbada. Afilaba tostadas en miel rebosadas, en su desayuno. Sabía estirar el tiempo como si no existiese. Su simpatía de ignorantes era apreciada por todos los que le medían.
Una mañana, en que regaba su patio como si la sed fuera suya, al acercarse al tupido seto, escuchó unos maullidos leves, estridentes y que venían de una camada de gatitos, arañando ,aún en ceguera precoz, en busca de su madre. Su alma de viejo aguerrido se enterneció. Miró a los recién nacidos y sin dudar, sin tener agresividad de la gata madre, se acercó a tomar a uno de ellos, él único de color negro y se hizo el propósito de adoptarlo con todo lo que ello implicaba. Sus hermanos eran blancos, moteados y en manchas negras. El gato negro elegido, resultó ser el más inteligente que muchas personas que conocía. Lo llamó Blackie.
Blackie se quedaba pegado al cristal de la ventana, gruñendo, deseando lanzarse a por los cuervitos que su dueño alimentaba.
El Castellano
Sangre de musgo:
Trae este viento
memorias perdidas
del tiempo olvidado.
Trae sangre de los Dioses,
en muérdagos lucientes,
sangre en flor del musgo
por vivas piedras tejen,
espíritus en árboles mecen,
traigo estas vidas
traigo grietas en mi destino,
mi bravura que muerde el suelo,
desenterrando su falcata,
sin oxidar que es mi espíritu
para luchar,
voz que me hiende la entraña,
al trueno es ella que silba,
de sus lamentos
vueltos testimonio
de lo que se convierte
la materia,
y su resurgir de tierra,
me avanzan los montes,
me beben los ríos,
para gritar este latido,
que no morirá ni estando muerto,
tiempos perdidos
llevo en una mano
en otra golpea
la voz de mi poesía,
y sus negras nubes de tormenta,
blandiendo su hacha de guerra,
bruma de su gris naciente,
ojos de la noche,
que sigue este lobo de hierro,
gritos en la espesura alimañas
se afilan la entraña,
fuego traigo que yo no deseo,
y fui a la bella fuente,
donde se bañan las almas,
carroña salvaje será mi enemigo,
y sus carnes cantarán con mi espada,
este sol me engendró de hijo,
estoy hecho de tierra y luz,
que mire la carne
que miren ojos que quieren mirar,
el armamento de este temporal,
lucharé por todo aquello
que amaré,
lo que amo será mi guía,
para nunca caer,
deshojaré las ramas de mi tiempo,
y en este cabalgar nocturno,
la novena estrella arroparé,
el tiempo conmigo volverá a nacer,
si es que no lo hizo ya,
mi cuerpo es la forja
dentro llevo la espada,
al tibio resplandor
sigue en pie mi batalla.
El Castellano
Vida de hielo ardiente:
Horizonte de la caída de este solferro
a reinar como una falcata de rayos afilados,
hondos ojos fijos en solariega planicie,
donde frías juegan moteadas las flores de invierno,
el reposo de la vida que se fue a dormir,
como un río de luz brotaba la escarcha,
un diciembre tardío saludaba
con sus manos heladas,
acariciando estos campos redondos
de cardos y caléndulas silvestres,
era un día de hacer manteca,
a mí el frío me hacía sentir vivo,
en este soliviar traigo mi espada,
pongo a sentir la tierra a mis versos,
que con cepillos de grama joven
se blanquea mi calzado,
viajo en mi mente
por el cuchillo calizo de la piedra
del caserón terrazgo abandonado
que posee mi padre,
rodeado por el fervor de pinos de monte,
donde próximas hacían nido las atochas,
a perdigones que son de la tierra
como la montaña a su roca,
cosas talladas puras como amaneceres
pulidos sin grises hojas,
ola rota mecen mis pasos
de un mar olvidado del que cepas anclan
sueños de vida,
del terreno en el que grillos esperan
el frío en sus agujeros
y su despertar para morir al acoplarse
a la melodía que teje la vida.
Avanzo en este campo de víboras
para ser yo como mochuelo recogido en su olivo,
como mis pasos gorjean las carrascas,
todo mi mundo reverdece
para mí siempre es primavera,
y mi bravura llora flores por mis venas,
hasta tener del cielo
la malva del alba
hasta trepar las yedras del profuso claro oscuro,
del cielo y su luna cuarteada de platas auroras,
me nacieron simientes silbadas,
y mis ojos enraizaron el campo.
El Castellano
Trilla mi idea:
Canta mi cuclillo canta,
picotea en mi cabeza,
entra al silo de mi idea,
donde telarañas
coagulan mis pensamientos,
abre esta puerta hacia mi oscuridad,
allí donde negros ratones
cobijan con fijos ojos
mi sueño sin desempolvar,
me conduje por escalas
donde colgaban brillantes ojos
sin pestañear,
arriba donde se acumulaban los sacos,
un murciélago despertaba,
era como una sombra que flotaba
entre llenos agujeros de aire,
sombra con alas,
la guadaña estaba recta
pareciera que me esperara,
la trilla afilada,
era nueva de esta primavera
el grano no vio su oficio,
respirad este olor a trigo muerto,
habitantes de mi silo,
hasta la araña teje con tesón
su geométrica hambre,
pardas motas salpican las paredes
por las que corre pegada la salamanquesa,
grietas vivas por este frío infernal,
arriba la sangre parecía evaporarse,
sólo quedaba yo
y esa sombra colgada del techo.
El Castellano
Soles de cuarzo:
Libero vendavales furtivos,
acampo la idea en tremenda pradera
descolocada, mansa, abierta
en florestas húmedas de rocío
tempranero, sólo allí tengo nido,
entre trinos que excomulgan mi deseo,
como atardecer rojizo sin sangre
acaso es, envoltura dispuesta,
rezo que acompaso la franca vida
de mi caléndula del camino,
resumo que coarto su vida verdadera,
luz de los campos, luz de mi campo
acaso fuese mío,
aquí solo hundido mordiendo este papel,
traigo que quiebro tormentas en nido,
culebras del sonido perdido,
me desatan yugos de esparto,
arde la simiente mía,
entre clavos ardiendo,
entre amapolas dulces, risueñas sin cruz,
se desmenuzan abrojos
de mi soledad carcomida,
a la que entablo soliloquio
en cama, con ella sin ella soy el mismo,
verdades atrás qué necesito,
si el mundo me hizo completo,
quizás aburrirla a ella mi pena,
nacida en cuarentena,
avanza mi siega,
esta vida mía vale la pena,
rezogo brillos de metal
cuando deja de serlo,
y crispa al viento
lo que llevo dentro,
más que un tarro de miel
y unas flores asesinadas,
un corazón que sube por la garganta,
a decirla a ella QUE no se vaya
usted es mi compañera.
De estos siglos que me quedan,
eres la carcoma de mi madera,
hasta ser lanza,
estaca que somete al viento,
en aullidos, en graznidos dolidos,
en enjambres con reina.
Por ahora a tu lado
soy azada que socava mi camino,
sacando terrones de lamentos
para sembrar tu amor
que Dioses me indican
que tendría que estar ciego,
para negar que eres más de lo que siento,
como veleta que le falta lo principal,
para no ser dirección que marca,
una flor plañía a mi vera,
que le faltaba su insectito
que la besara sin diligencia,
así la belleza nunca completa,
recto escalafón retorcido al beso,
unión de dos, como escala sin peldaño
rampa no sería,
me encumbro de la fiera para ser yo
la fiera, de esta mi pradera,
se afila mi vida quieta,
entre soles que cuelgan,
y colores que lloran,
despierto para entregarla
a ella mi cardillo de la dama
para que me lo devuelva
cuando me una a ella,
como se unen dos gotas
del mismo agua,
como se desgrana el molinillo
cuando saluda el viento.
El Castellano
Carmesí inefable:
Turbado yaga mi espíritu,
sin voz yace mi gran momento,
puridad en crisálida perpetua,
oh, lacónica eternidad,
no te temo ya
ni tu crisol de hálito
me vence en inmortal secuela,
recto ganaré a la luz,
por su ceniza coronada,
cantaré hasta el etéreo vuelo,
me trasplantará el viento obscuro,
metálico azar,
erigiré un árbol de brea,
en mitad del todopoderoso silencio,
mi flor no sucumbirá,
ni mi verso armado
será litigio de crin en ascua.
Filial prestancia,
que nadie trepa mi solo nombre,
por cantos obtuso,
en sangre
suceden labriegos
fecundos.
Terrazgo de mi amor atado,
canto a mis generales,
despejen el camino,
y entre férreos cipreses
me avalen.
Tanta herida precedida,
tanta voz que muere,
sin soto de almíbar,
pena que no muere,
son este de mi bronce en ala
de un repecho carmesí,
soledad,
mi gloria tan fuerte.
Azucena helada de mi tarde,
resuena en ti
un azar indeleble
para indicar sin sonido,
que tengo corazón y cielo
atrapados en un solo verso.
Olvido sin espejo,
mantuvo suerte segura;
luz sin día ni ojos
fue perfidia en otro astro,
azul, paz,
cuchillo que mi vida hiendes,
a cercenar toda oscura alegría.
Förüq Castellano
Severidad enfilada:
Nota:
“Porque el silencio poético es un alto grado de silencio; él es el que nos libra de lo opaco de los signos y de las torpezas de la lengua. No es un silencio vacío, es un silencio excesivamente
lleno y hasta desbordante de sentidos silenciosos: un silencio trascendental.”
Luis Armenta Malpica
tercer incluido entre el signo y el sentido
“estado T”, el cual no es potencial ni actual sino ambos “la mayor parte de los sucesos son indecibles.
Y más inexpresables que cualquier otra cosa son las obras de arte” (Cartas a un joven poeta, 1906).
Armenta Malpica, Luis. “La poética del silencio”. Armas y letras. Revista de la Universidad Autónoma de Nuevo León 52-53, 2006. 16-14.
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Severidad enfilada:
Destino desvencijo.
Como un borbotón de sangre.
Suspiro rápido y hondo,
entraña amilano,
todo me lleva
sin redil ni correa;
a verme en el ojo de tu espíritu,
sí, resquicio parco, opaco, en tu voz,
en un patio de trincheras
y entes esferas, al crisol
de valles y venas,
en el recital jamás yerto de tu verso,
cauce perdido descubierto
entre sótano de luz injerto,
en la pupila del lugar mágico,
riera en rambla
donde crece mi amapola
de pecho abierto,
tu vida la saboreo despacio,
entre regio y mi coraje en flor
de nuevo cierzo;
tu sangre sabe bien,
alma invernada buscando
horizonte en mente concisa
y como no llega a destaparse
eterna dormida avanzo su esquela.
La veo en mis sueños,
resquicios oníricos del ser claveteado,
de vidas mías lejanas al tranvía etéreo.
¿Cómo no hay?
No hay nada que negar
nada que perseguir
que todo arte nace del sentido inerte inaudible,
en manos del destino me encuentro
y me encanta el momento
de verme en el ojo de tu silencio
recordando mi universo de astringente azur sarnoso,
tu voz, amada luz en mitad el reino tenebroso
donde allí sólo canta mi oscuridad.
Alma de fuego encandilada,
estridencia seca, armoniosa,
velo de sigilo
tu suspiro, nada más.
El tiempo es correcto
para la revolución; jamás mil máquinas
podrán hacer una bendita flor,
Densidad recta
en rienda plumosa lamo esta mi pluma estilográfica,
resguardo en Caja de Pandora es mi alma sin espora.
Cinceles celestiales, un soto veleidoso,
donde sembrar el final sin comienzo anunciado,
por esculpir, tu contorno,
con vistas a tu verbo;
divina tez a blancura helada
por deshojar mi fiel recogimiento.
Así me perdí yo
buscando tantos años
el abrigo
de tu amada voz,
haciendo que mi difunta
cobre su vida.
El Castellano
Soliviar llano:
A las aguas de mi memoria
primoroso apelo,
a tener yo un alma como rambla inmensa,
desapagada,
un tiempo sin días de cobijo alado,
rosario suyo por terco no incendio,
sueño en aras de corcel virgen en grandeza develada,
sudario sonrojado,
metal beleño todo olvido,
arrebujo sin mesurar vil posible
que por ella mi cruz y mi condena,
deslizan mi viva aflicción
de amor a propia ascua en la tierra,
sorprendido, letal no pienso,
neblina y fortuna
grandeza, gloria no gastan,
voy por epitafio soslayado,
remembra cautiva mi soledad infecunda,
alejar vida y belleza cuándo,
rosales míos crían ajos
cebollinos y puerros acuso,
tonada de mi sayal remiendo,
en boca de santo astro.
Peregrina de azar inamovible;
en alba de seda,
viste su dicha inmaculada,
insinuante su figura.
Sonora ella de silencios perpetuos,
oro de riveras
y burgalesas conciencias,
sendero atisbo
voy largo su densidad llana
aria agraria,
luminaria bajo luna de signo azabache,
luminaria gitana sólo su mirada,
mi repecho no fulmino,
ni faldeo,
arboleda de mundo monótono,
distinción no apremia,
ni estrella viola
su espuma de ceniza larga,
como lírica paz
se llamó magia.
El Castellano
Canto de luz fecunda:
Imperecedera faz,
en haz luminoso indeleble,
río de tinta terrena,
insubordinada cava mi azada,
sacando olvidos de la piedra,
anisados reflejos que hienden la carne
como el Sol me clava sus espejos en los ojos,
vítreo desliz enarenado,
es un sol bajo tierra,
hierro de vestido del acero infra-humano
que porto,
soñé desvestir mis sueños como sueño de flores
aguardando su fecundidad de nuevas muertes,
perpetuidad a flote,
en sima de raudales,
pila sacra bajo tierra hierro de estrella,
claridad del destierro
en relámpago de veta azabache,
voy sacando penas por olvidos,
azadón saca terrones a cal y canto,
es mi alma quien se destapa
que una vez en la vida se dispara
una soterrada vía sola, pierde el relente.
En manos de silenciosa vívida estampa,
y su desnudo de ángel custodio,
encenderé las novecientas noventa y nueve velas
del averno,
para encontrar lo que me pertenece
y siempre se me negó,
paz sin guerra...
Que va, otro día se venda.
crisol anidado en tus labios de mujer inmutable,
un deshielo y el cielo me trajo de nuevo,
sobre la luz monto mi corcel de viento,
allá donde la tierra es éter incoloro,
y la suerte es de metal,
de los árboles al bosque
de la sombra carne y cuerpo
de chirrío estacional,
y sus muros de venas
gira mi peonza,
trompo vivísimo,
de aurora incipiente,
montaña o preludio,
el gris se extingue,
luminosa mi trinchera erguida,
con desnudo bronce,
que no es más duro que yo.
Förüq el Castellano a 17-04-2019
Espinelas:
1
Enhiesta flor fue semilla,
altiva plántula fue ella.
Quién fuese aquella tan bella.
Él, pupa acabó polilla.
Aún plántula fue pilla,
él aún pupa la amaba.
Aún flor la respetaba
juntos cuatro meses bellos
cómo fue lo saben ellos.
Él desde pupa esperaba.
2
Bellis annua siempre bella
sin ningún pacto indebido,
licor de mora bebido
brindé yo por amor de ella
y mío mas la botella
casi entera, mi infinito
lleva en corazón finito.
sólo nosotros dos flores
libres en cante folclores,
soy alcalaíno, cito.
3
Amor te adoro bastante,
tanto que ni te imaginas,
volamos sobre colinas.
Nada encuentro yo distante
feliz yo, el único amante,
ambos somos golondrinas,
folclores mas las endrinas,
el weche, mapuche, arriano,
nunca solar artesiano,
no hay destino en las neblinas.
4
Ahora, es ayer, henchir.
Amor obtuso, incesante,
mi vida en valor constante
valiendo la pena hinchir,
sin pena yo, rehenchir,
vigoroso, parco, regio,
como corazón de arpegio,
ella firmamento mella,
mas yo nunca ser aquella,
hijo del viento, bastante.
5
Te observo, mas yo la endioso,
amor, pasión más los vinos
lo mismo, yo catavinos.
a ella doy mi sangre de oso.
Vivamos sin el ser soso.
Toda mi sangre antibaquio
a mi mujer; Lofobranquio.
Viva yo y más mi caballo.
mas es él saltacaballo.
A ella la amo, todo baquio.
6
Tesoro mío guardado
dentro tuya el sentir puro,
espíritu era ello oscuro,
espíritu mi candado,
en alma estaba bordado.
La espera, vida gallega.
Lluvia hasta aquí las allega,
Beltane, una, mas las diosas
Aurora, Flora preciosas
su ayer muerto, entalega.
7
De celos ya no latere*,
amor, tan viva a raudales,
nacido en los manantiales.
nocturna cuenta el me quiere,
luceros, el Sol mas mi ere,
todo lo quiero en las calmas,
nacer temprano, los ensalmas,
universo cisne e indemne,
desde quince años solemne.
Celta el fuego, hace reales.
8
Vida, para amor, morir
en tu pupila, en placer,
llegué donde renacer,
mucho tuyo a descubrir,
eterna alma, su existir.
Criaré las zarzas, hinojos,
mas viviré dorando ojos,
mi conversación es cena,
estabilidad la escena,
mas sabiduría, abrojos.
9
Este amor todas mis venas
se come mas manifiesto
toda mi sangre dispuesto
sin riendas cómo me frenas
te deseo sin cadenas,
te amo como sangres hiervo
deseo ser tu agua, siervo.
Ven a mí quiero tu risa,
ver que fui feliz deprisa
pero tu te amo fue FERVO.
10
Amado Nervo es el nervio,
fuera instintos y amistad...
de amistad mi lealtad,
amiga mi sombra, antuvio,
digna casa con compluvio,
antuvio en desuso ya anda,
hecho anticipado, banda
rosa por hierro, fragancia,
mi instinto digna elegancia,
del mío dragón parranda.
11
Mordedura con dolor,
amor ni cura ni ungüento,
puro y eterno es su cuento,
en mi abrazo le doy color,
envidia resbala, albor,
premisa estar en tu vida,
porque no hay razón, anida,
cuándo sepa dejaré esto,
este Miguel no es funesto,
tu merced de mi embestida.
El Castellano
Remanso y su era:
Avanza manso
un hontanal
de gramas frescas,
deshilacha al durmiente hombre,
se retira mece y avanza
su calvero expuesto
de su semblanza,
una dama cual blanca cierva
bebía, bebía del vientre
que emana la fuente,
plañía un ababol solitario
del camino, que la rambla sigue,
fiel, duro testimonio sacude
su cuchillo calizo,
huye, huye el tábano por el monte
buscando algún depósito de sangre,
el brezo se apoderó limpio
de un raspado testimonio
la tierra devora lo que es de ella
para ser mi sangre
su eterna ofrenda,
por descampados fugaces
corría mi alma,
como fiel testerazo de hombre,
la espiga rendida,
saludaba a la oliva,
siendo del viento
esta fiel niña
que nunca descubre a quien pasa,
sólo, solo ante ti
me acuerdo de la primavera,
me levanta un sol helado de verano,
para ser mi hoguera
una fuente niña
que desliza, siente, y no consume
mis labios de pradera,
siendo este pasto
mi infinito remanso,
que me habla de la ceniza del fresno,
de la nieve del álamo,
de la sombra de esta abeja,
y su testimonio deja,
entre almendros con sabor a metal,
y encinas sin gorrino,
hoy avanzo el barbecho
para enfrentar mi sino,
a ver si contesta
la brava dama lluvia
que es Dios.
El Castellano
Alborea el otro lado:
Destello que blanquea,
lechoso, estira un seto
en semicírculo,
la retama amarillea
oscuro el agua
de soto sin fondo
en cuchillo en haz de cauce,
compongo el suelo,
con un hueso en mandíbula
pereza coarta la raíz
en mitades que caminan
desencajadas.
Anidaba un cortavientos
la franca entre rendijas
que se ocultaban bajo paja,
decencia que iluminaba el sol,
patio largo del atardecer
lleno de harina.
Escuché a mis heridas
por francos capullos segados,
caídos asisten a ungirse
yazco en una hoja roja,
camino por mi corazón,
exime aliento
una raíz salvaje no sostenida
se deslizaba un rosario
con aflicción del marjal
cubierto por la flor.
Como febril estera
y larvas sujetas
en yunques iluminados por savia;
era mi vida el precio
de estas semillas.
El Castellano
Tañer de hiedra:
Cerro gordo de henchidas horas,
marcha lenta sin subrepticia,
pesadumbre del porvenir
sin hojas ni otoño de vastos
suelos empedernidos,
en este rincón deslizado
un senil canto que abre paso
tras espirales en cuencas de flor,
de floresta blanda,
húmeda donde la maravilla
será villa,
Yunquera llanos fueron
sotos sin perdigones,
pero de fuente
de lo que fue siempre
matiz destellado,
ultrajadas sin abrigo,
en este mausoleo de tiempo
que se pierde sin visiones
vientos sin azares de infelicidad
ni ajuares de inamovible primavera,
donde lo único inamovible
es todo lo que siento por ti,
como un carrusel sin soga,
ni cuerda que atañe,
desde esta urdimbre
anclada, armada, hondonada,
dónde mi manso destello
de esta asolada cuesta abajo
que avanzo
por la vera
verdes,
un ojo que endoseló,
sin compostura
mi dulce cicuta
secular es mi enredadera,
mi sentir sin espera
su blanca ojera de nácar
de rosas y crispadas espinas
flojas,
absurdo, burdo, doncel
en sandez segura
tapiz sin fusionar
dichas ni agravios
extiendo mi locura
¿Alguien duda de mi campiña?
Con murria
de escurrajas,
cuenta ni azada
sin sostener este descanso
que lo dicho tiende,
todo recuerdo de lo que alma tengo,
y recuerde mi cordura,
que Úbeda tiene monte
y yo blando su horizonte,
sin alarde
hago corral de lluvia.
El Castellano
Sombra desnuda:
Yermo terreno del sueño,
un trillado verso avanza
entre espejos y cristales,
fieles aullidos desvalidos
entre semillas sin iris del mal,
entre corceles del fuego,
entre sonrisas fugaces.
Es todo lo que siento
un canto de piedra,
un río desplomado
mi fiel apostada cordura
que viene por enjutos
ojos hirientes
hasta avanzar los besos
de labios grises
y sus fanales colmenas destapadas,
no quiero repetir estos destellos fugaces
ni herir por mis alambres
tejido mi atrapa-sueños
queda mi parca vida
desnuda con el hastío
que asesino de esta manera,
volando mi dulce murciélago de nácar
entre este amor
de estrella me alzo,
es glorioso este canto,
reducto en lúgubre sigilo
es esta inspiración,
tentación de ángel desertor
de morir,
justo la vida
acabará negándose a finalizar,
soy yo la salud
de la una solitaria de la madrugada,
conquistado el cortejo de la noche,
me cuelgo de mi profanado latido
por estos cordones de hueso
vive y viviré mejor
que mi traje funesto,
limará esta sin razón los ocres
hasta lucirlos verdes brotes,
hasta acabar rendida la caricia
por estos espasmos de cobre,
mi destino teñirá las vivencias
por solares complacientes
y lugares dignos de altos sueños,
esta araña dejará crías
por poemas
en escarchas mutiladas
en este hierro candente
y el incendio de mis hielos,
como dijo el grande
no acabaré de irme,
ni estas solapas fundirán
en tristezas secas,
la sombra será mi mujer,
cambiaré el prisma de ver,
y ahora la luz será
la dama siniestra,
por si un día acabo de irme
solo espero
haber podido contagiar mi locura
que ya es rápida,
desborda sus cauces,
brotando en espinas insomnes
el abrir de las compuertas
a ese abismo sin dueño
donde besan los azules
ese nido de malvas,
que mi ser desprende dominando,
sombras miles en este carruaje vespertino
de mi sangre,
mi río de colores
de almas en sus gotas ferviente,
atado a este sentir,
que late,
que sueña
la carcoma de mi estampa.
El Castellano
Suspiro en tierra:
Flor silvestre a ti te escribo esta lápida de mi latido
tú que me das la paz que yo necesito
haces mecer mi amor en tu floresta
cuando flores de margarita cobijan lo que necesito
mi vida gira en una flor de caléndula
avanza mi vida en un sentido hacia el sol como ellas
se siente abrigado mi pecho
que canta por soledades su te quiero
no más montañas oscuras por escalar
no más súplicas por dibujar
todo se mece en una caricia
todo cuelga del alambre
por ver si te tengo hambre
y tus besos me acompañan
fieles testigos desvelados
de todo lo que fui y soy para ti
así como una cascada que bulle hacia arriba
un cielo encerrado en mi pecho
un canto de tus labios
en verde espiga y girasol
un despertar entre pétalos
un parpadeo que me lleva a verte
un abrazo que me lleva a tenerte
es sólo la vida de la flor
y que la flor solo sea la flor
elevado albor
cuando mis pupilas se llenan de tu amor
solo allí amada mía
reinará la flor
y no solo al muerto dará calor
tu sangre se fundirá en polen carmín
tu vida gritará a mi vida
para encontrarla
florecida de los más bellos versos
sin dolor
sólo cantándote
mi amor.
Oh elevada flor de mi amor
a ti te canto sin dolor
que mi ser es primavera
cuando mis ojos te ven entera
y mi Dios es la lluvia
está cayendo ahora
como el invierno se desvanece
es mi tiempo ahora
los cielos tiño de malva
mi vida reverbera
llegó la hora es primavera
con el trino de los pájaros
se blande mi espíritu
al son del tambor de los grillos,
quieren un templo para mi flor
ojos aceitunados cuentan
de los giros de mi alma
al albor de su corazón
ojos de sus ojos donde me encuentro
en amor, bailando en sus pestañas
alzándola en beso
un continente despierto
un mundo y un océano
un hada y un cuervo
un día de mi vida
por si vuelvo
a la vida al viento le pido
que mi boca conozca su boca
y mis ojos
sean más que abrojos
mi beso sea tempestad
y mis labios fuego encendido
para encontrarla a ella
que mi cuerpo siga su estela
y para mi muerte
que ponga yo amé
y aún en este descanso sigo luchando
porque la volveré a ver y yo con ella
en amor estaré.
Me encuentro trenzando la flor de azabache
sí esa que llora la noche
por encontrarla a ella tan bella
cantan los cuclillos y los nocturnos grillos
se tiñe mi horizonte de jacintos
y yo a mi mujer la hago un nido
de pétalos de caléndula
por si vivo que ella sea mi flor
y al sol cantar nuestro elevado amor
sólo soy yo cantando mi epitafio al hueso de la luna
volviendo azul el alba
para que reine la noche sempiterna
y entonces volver a verla
encendida de traje de estrellas fugaces
es por ella por la que se eriza mi piel y corre mi sangre
mi caudal se llena con su amor
y almendros me acampan en flor
desde el verde trigo al verde olivo se mece mi sino
y es encontrarme con ella en un latido
al viento le pido viento bonito siémbrame en su pálpito
y así con el mío jamás verá un suplicio dormido
ojos de cuarzo corazón de granate
acércate te alcanzo una estrella
para que brille nuestro corazón en esfera
y esta amor no será una noche más por su azabache
brillará un reino para los dos
el cielo se vestirá de los más bellos colores
cuclillos entonarán sus sones
los murciélagos bailarán rasgando sombras
y yo amada margarita en tu flor estaré
pintando con mi sangre este amor de mi hiel
y aliento que juntó a ti no verá su desvanecer
y sí hoy es un día para luchar
por las ilusiones fugaces prometidas
mi piel encendida que con la tuya late
en la más tierna caricia
quedando por dibujar mi subrepticia
esta noche encendida
que dibuja y reina mi vida.
III
Amada te escribo mi piel en piedra
que este latido es más que fugaz de estrella,
viste y desviste mi vida,
el verso coagula mi sangre
hasta ser mineral de piedra cuando muera,
en este corral de rosas crece mi ilusión verdadera,
alzarte, rodearte, elevarte en mis brazos,
ganará a esta noche yerta,
tejida vestida en vilo de espera,
para ser yo el encargado de esta acequia
que riega con tus besos
esta elevada floresta.
Donde Margaritas cantan
que es por ellas que el destino nuestro se acuesta,
vivo para vencer este horizonte estirado,
vivo para vivir en tus besos desgañitados,
para sembrar el curso con mi sombra,
con mi divina fantasma que habla
como tú hablas mi amor,
mi amada,
hoy me raja la noche la entraña
para clavarme todo el polen
de nuestro amor,
nacarado, embestido, dibujado, anhelado, florecido
aliento por aliento,
sangre por venas,
hasta morir en tus piernas,
yo soy mi lápida,
esta primavera que comienza a avanzar,
resumo que coarto este tren
por lares insospechados de tu vida
hasta llegar a una Araucanía lejana,
donde se acuesta el sol con la tierra,
donde las nieves que lloran las montañas
viven renaciendo, bullendo, deslizando
manantiales de hierro y cobre
de su sangre de tierra y fuego de volcán,
viviré hasta que un abejorro siembre mi nombre
en todas las flores de tus campos,
seré dichoso orgulloso,
como soy en esta parca existencia taciturna,
por la que me lloras amor noches sin alba
por tus granates de ojos,
es por mis versos nacientes
que el cielo abandona la tierra,
para vivir siempre, por siempre y para siempre,
en tu sonrisa dulce, nacarada
porque yo nací amada
para ser tu primavera,
tu sonrisa verdadera,
y el hombre que dio su sangre
para luchar por su margarita
hasta tenerla en vena,
nadie puede ni podrá contra nosotros,
el tiempo estirará sus azules pétalos,
solo para decir:
Miguel nació, vivió, conoció
y dijo que su vida
no era vida si no podía entregársela
a ella mi flor
su única mujer de sus amores silvestres.
El Castellano
No tengo amigos ni enemigos,
sólo confío en mi alma y su capacidad,
el que alimenta su espíritu no teme al mundo,
deja que arda este en su materialismo,
en sus falacias que intentan dirigir la espiritualidad
de su ''dios'' personal,
yo encontré mi libertad
me baño en sus fuentes
para ser mejor en cada cosa que hago,
sin lucro ni ambición que no sea ser afilado como espada,
hasta cortar toda sumisión,
nada espero, nada quiero, nada deseo todo lo tengo
dejo que brille mi espíritu,
así es y será hasta el fin del tiempo,
del que coja su azada.
El Castellano
Iris de campo:
Adormidera pulcra entre la retama,
amapola esquiva sangre de la tierra
nacías lejos de la tierra que tú querías;
la fe mudó sus caricias
sobrecogido el triguero espárrago.
Serpeo el camino de Humanes,
el reino florido por tejer,
jacintos de botellitas azules
recuestan gramas del lindero
entre espinos amarillos del olvido
yo hablo con zarzamoras de rivera
del Henares.
Corrihuelas abren nuevos sentidos
bajo sauces y olmos viejos
grajean tordos la vida del endrino,
caracoles que trepan el abismo
de savia recia, dura.
El alacrán pasea la represa
cuando la araña lycosa encuentra presa.
Espartos y retamas
prenden su verdor al monte.
Cardos y cardillos de dama
tiñen blandiendo su horizonte
anual.
Cadillos invaden el yermo,
de hinojos y dispersos plantagos,
boquitas de dragón, perritos
que juegan con el viento.
Un ligero testero acoge raíz
a una flor de Odín
caléndula silvestre
flor de difunto que resiste
entre embistes de tiempo,
y heladas grises.
El Castellano
Si a la sombra canté:
No indagues el azar
que su relente tizna
a ojos indomables.
No luce la flor siempre
ni la casi viva yedra,
juventud y fortuna visten
como sombras huidizas
cual Escita sobrecogido
entre mares y el aquilón;
bebe de la fuente virginal
que la sierpe es honda vigía.
El mar de encinas
nos sobrepasa.
Las olas de tierra
son infranqueables
no vistas de alpaca
tu parda sepultura
los más duros son tierra,
el resto afilada ceniza.
Traspasa tu rienda
sé jinete de caballo muerto.
No dejes caminar a gusanos
cada cual busque y encuentre su lugar.
Por los siglos que llevamos
Nunca es bastante,
por amores dignos, pierde el hombre.
Aboco empeño que desafía
mi dorada, encontrada, mediocridad;
contenta ella sin miseria.
Azota el poderoso viento
mi erguido pino,
mi torre altanera jamás vencida
cae en estrépito para nueva siembra erigirse.
Júpiter dame ásperos inviernos
floreceré tus pies
con dignas rosas del atardecer.
No hay mal perpetuo
despiértame la musa de su sueño,
báilame la llama en vela recta.
Tiende el suspiro en el patio de mi araña.
El Castellano
Carne espectral:
Incauto silencio verde,
ignorando que la rosa
no ha muerto siempre,
antesala sin espera ni consulta
donde muerte pasea,
enorme llama en fondo de frío,
ojo helado fijo en labios ardientes,
enjambre solapado
a mis trescientos treinta y tres vidrios
de alma que gasto.
Hermosa ni roca te parió viva,
deshechas las estelas
queda asirse esplendoroso
al metal que ruge.
Mareas de afrecho
visten savias lloviznas
que avivan su verde intransigente,
ángel lánguido voz revierte
surcos en iris pervierte,
quedaba alto nacido del hierro,
el norte que soñaba el viento
fruncía de aojos la vestida noche
y su cenicienta espectral
de las maravilladas flores de difunto
acrisoladas en soles pudientes
hechos de silencio.
lúgubres hendiduras del sueño
y el vientre escamado
de la lagartija
que yo amé,
y seguiré perdido amando
porque yo existo.
El Castellano
Azares de lluvia:
Avanzo el día sufriendo con la luz,
escribiendo mi cuaderno
encima de una mesa de pino,
simple, ruda,
como ella misma.
Hacia el ocaso del nueve,
la cerviz descansaba sobre el rastrojo,
una carrasca enervaba sus flores de piedra,
era suficiente descansado el recodo,
abría el cielo un llanto
de llovizna asilvestrada de Abril.
Suave se esponjaba la oscura tierra,
la viborilla ahondaba su refugio
bajo la severa piedra,
era un tomillo afilado nuevo
de esta rigurosa primavera,
el solar lucía su verdor
de ángeles cazando lagartijas.
Diestro mi ser dudaba si llamar
al gamusino de escritura,
la cocina de baldosas
invitaba a merodear por algo de cafeína
era redondo el tiempo que alzar clavos
y unir galaxias sobre tejado de aspas,
un día cualquiera;
sin mozas en la vista,
era bastante y no se sujetaba mi pensamiento
de vanidades cualquiera.
Angosto trepaba el tejado de mis densas ilusiones,
atravesar raudales sujetando azabaches del cielo,
estirar la luz y bajar la luna,
era un puñado de estrellas apagadas
y volví a sufrir y endoselar cantando,
un reguero tieso de savia
y el vergel se encendía
clamando la desquicia
de que no duraría la siguiente estación,
sigo las ondas del charco
deslizando en él su solo reflejo,
rambla sin margen repleta
de esta lluvia sin cuartel,
un río me desquita de fluir
como lombriz azulada purpúrea al tacto,
es un recuerdo a mi río Henares
en localidad natal surcada,
un solitario flamígero pensar,
y cambio todos los lugares por ninguno,
que es lo mismo,
cimientos absolutos de oscura tierra,
en tímpanos calizos me sostengo,
como esparto del bronce,
y brezo desnudo sin soslayar herida,
el vals terreno me envuelve
y vuelvo a saltar el pretil gesto de Ostara,
anudando el ombligo de la tarde
con la ojera de la noche.
Förüq El Castellano
Son del ascua:
He venido por los sones sin tiempo,
resuenan todos en lo alto de la torre,
indico fiel muro
que acuartela voz sin muerte ni memoria,
bronce a lo alto,
pureza inmiscuida en áspero esplendor.
Risa sin agua, tiempo con sonido,
eternidad azogaba sin corazón
ni anchas calzas finitas,
el cielo cayendo turbado está.
Voz con muerte oí e hice caso,
penumbra de vendaval obscuro,
hálito perenne de triunfo en luz segura,
mi culebra, mi sola flor, un campo soterraño
armado en cantos, solapado,
viperina falaz un soto
al que me trasplante,
dulce miel de tosca celda,
filial que enmarca,
sangre sin latido del suelo terreno,
raíz de terrestre prestancia,
clavo instante, cabeza abajo
de la vida de este mundo,
tajo recto aguardo,
con la verdad profusa de cuánto he amado,
espiga de tinta bebiendo la luz,
de su ardor erizado,
crisol a raudo, puro odio,
eternidad sin voz,
agreste reverbera,
empapada en substancia.
no tendrá que aullar como los presos,
oh dignidad serena,
cuervos de muerte me caen los ojos,
reloj de alma y alba en despido,
como rubí dentro del zarcillo,
me senté en un junquillo,
y me entregó un zorzal su ovillo,
hiedra de espíritu suplicante
trepando quinto cestillo
mi torre anublada de hondo cielo,
sombras miro, me miran todas,
mi cántaro es como el de Dagda
ni fin ni repleto,
viaje eterno,
al encumbrar todo
de nuevo rocío.
Ababoles me cuentan
que todo se alza y rige
gracias a raíces primas.
Förüq Castellano
Tiempo en floración ruginosa:
Una flor que es flor
en mitad de tu tiempo,
floración que vino de raíz del averno,
escalando al cielo,
pluma en tinta
de servil vid de Ferento,
albor en cernícalo vigía
primo del vilano señor,
mariposa metálica que revuela
desde soto carmesí de tus muslos
desplegando su lengua furtiva por tu dulce
vientre de nieve,
corola de un silencio húmedo,
como si flor en palabra
nunca hubiese sido,
trampa de arañas en serviciales rosas
de la aurora más funesta, clavada la hora.
Curvatura morada de mi verde sueño,
corazón despierto o mudo
de grito sordo en el pecho,
amor de rayo empeño asolado.
venas en azur sobre tierra,
un destierro de la esencia intangible
al beso y ala vaga de sol minúsculo.
Rebelde en tierra resumen edificado,
sin vigilia feroz me despoblaba,
inmaculado fuego,
terrible y compasivo,
tú amapola,
crecida en luna de mi huero camino,
labrador de arduo sendero,
lebrela tú musa de mi gana acaudalada,
pez de hilo es este instinto,
a veces parco, a veces sumiso,
azul lento en flor de viento,
oval de campana tu concavidad en bóveda.
Mariposa negra que poema trae en ala,
gota de luz colmando el astro,
mariposa negra solar,
mariposa de muerte sembrando
orugas de vida nueva,
azur todo espejo,
de un tiempo que ya calla,
y todo frío, termina.
Förüq Castellano
Oda al Sol, musa en armas:
Gran Sol, gran hervor de rayos espadas
día clavado; tu iris sediento sanguinoso
en Vestal iridiscente en flamas a lo alto,
a lo alto brillas como crece el talento
sembrado en nuestro corazón,
rueda de fuego, Lugh en tu gloria,
germino toda dicha padre de mi conocimiento,
oidor, de cuánto arte ha conocido, padre Supremo.
Escúchame mientras te honren este,
el día de mi musa en armas.
El invierno se ha ido, nos dejo atrás,
los campos están verdecidos y cantando en flores
que trae Ostara y su caricia de divina nota
de savia que escala todo terreno, y fríos ya lejanos,
Toda la tierra duerme en tu ausencia.
Incluso en los mas oscuros tiempos
tu luz es el camino
para aquellos que necesitan un faro
de esperanza, de brillo, de sosiego,
relumbrando en la noche.
Tu esposa regentada por madre Luna,
buscando toda tu luz, toda oscuridad empuja,
La primavera está aquí, y días aun mas cálidos vendrán
los campos están desnudos y vestidos de celestial verde de lanzas
y el ganado pastando.
Encendemos estas velas en tu honor,
Regreses la vida de nuevo al mundo.
Mi lira te cante la sola noche que traes flagrante.
OH LUGUS
Solar y poderoso,
sol sobre nosotros, te pedimos
tu regreso al alma incendiada,
en virtud que te amima y habla,
que traigas a nosotros la luz
y el calor de tu vida.
Trae de nuevo la vida de nuevo a la tierra.
Trae de nuevo la luz a la tierra.
y aleja la saeta oscura que te retiembla la calma,
al alba más preciosa,
Maestro encumbrado
del arte que florece
y en nuestras entrañas germinamos,
nosotros los escribas
cabalgamos todo tiempo difunto,
guiados por tu sazón y hoguera de tu Honrosa Luz.
AWEN!
Diestro compás
en sol mayor,
bruma de idea socarrada.
Flamígero desdén;
congelado en ascuas
de fuego azul.
Horizonte sin prisas
que arrostró
todos los rostros
de abril.
Abre el nuevo fervor de tu luciente.
Y su solitario azar de relámpagos
de tu azur hermoseando,
enclaustrado.
Vírgenes encinas, y almendro de soto,
entre un nogal
dependiente de su sombra.
Al verdor de inusitados pinos,
me caracolea
la fronda del monte. Musario cerro desnudo,
Espino amarillo de mi dossier,
Caléndulas solariegas
que amarillean su silvestre ralea,
esposa complaciente de Sol naciendo.
Brilla esta infamia
de campo abierto.
A esta última lagartija
lanzo un baquio seguro,
sin disfraz ni apellido perenne.
Mudez última
de sangrada amapola.
Sanguínea tormenta
de dureza blanda
con agua de mi terco aljibe
obtuso en litigio de iris vespertino,
y su sangre que baila
el suelo terreno,
que en culto a ti Lugh yo beso.
Y avanzo como raíz de los dioses en la Tierra.
Hijo y sirviente de Candavmis dios del Trueno.
Förüq
Reflexión:
Como el Sol brilla en lo alto de los cielos,
es nuestro deber cuidar y hacer florecer todos los talentos,
y sus virtudes sembradas y habitadas en nuestro caduco corazón humano,
en y con manos de la divina Sabiduría madre de Superior Conciencia de Razón regentada en luminosa aura y amor a luz de rey Padre astro que otorga todo azar de vida en este planeta que dirige y domina.
El Castellano 29-04-2019
Sol ferro a tu gloria, compilación:
Voy por tus desangeladas, profusas luces.
Hierro que me tiembla la osadía,
oxidado resorte candente,
que afuello;
relamen linces del tamaño
tu dispuesta ternura.
Hirsuta ciencia tu tomo de tierra.
Acristalado vence marea súbita
de ojos realizados;
mi espada no luce marchita
afila latidos de mi corazón
ignoto, ante tu ser, casi desnudo.
Orando llegue revelado momento
de aspados dientes
y destellos secuaces.
II
Aruña mi tierra una vez más
como un grito en la vena,
como un gemido perplejo
que brilla el tiempo,
que empañó
tus vidrios líbicos,
atemporales, dispuestos,
sin margen, sin curva, ni acervo.
Saliva en aljibe de hondo deseo,
exasperado, irisando crisoles
que jamás marcharon;
beso y muerdo tus orejas malvas
profanando tu blancura primorosa,
en tus piernas gemelas, semi-abiertas.
III
Mis violáceas hojas marchas
raíces que maúllan mi calma;
profundo el zarpazo de amor
que me afliges.
Osadía acariciarte en destellatoria
entre vela y candelabro
avivado tu hornillo de espejos
supinales.
galvanizada garra llega
a arañar la puerta;
rumor de fiera vespertina.
Solo ante tu sosegado
siempre azul violín
que la humedad
de tu floresta,
nunca más virginal,
entona.
IV
Despierta, flamea nuevo cierzo
por tus sotos de rincones sedosos,
humedad permisiva blanden
al desnudar tus mieles
entre tu piel serena;
abejas mías
dejar que la flor duerma.
Corajes florecientes
en ocaso que el alba lanza.
Desde la luz del día
hasta dentro la oscuridad
más densa que late y envuelve.
V
Sus cerrojillos tersos yo beso
en esmero amilanado de erizar sus nervios
a flor de candor estrellado, navego que avanzo,
tus filos de rubores aplacados,
esta luna entre mi tierra y mi solferro
una vez que su luz perdure mi hierro.
Placer enarbolado, en lustre de acanto,
ya mi querer no es piedra rodera
ni de osadía alabastro,
fuera de la batalla,
tersura que gemía la espera.
Mi piel de quimera,
inimaginada senda,
es un hálito y su verbo
una escala y nuestra escuadra.
Al placer preso
de sonido extinto.
VI
Retiembla el agua
un haz sobre espada,
inabarcable sentido
sigue, ahonda fiel
su rendición
en estallido del tesón.
melodiosa sierpe
en un vals del gemido
secundando el alarido
sembrado en su interior.
VII
Fuentecilla parece mi noche oscura,
fuentecilla retozona,
y de verdes lamentos quejumbrosa
como sombra leve de mi pájaro piador
que acuesta a dormir su entraña.
Sombras largas que descubren
el canto los lisonjeros grillos.
Blancura y azabache descansa en la arcilla
el nido mi golondrina.
Al fresco respiro de mi chopo soñador
lanzo un severo destello argento.
Longevidad imperial cercenada
como retazo de persistente
carcoma manida a mi verde intelecto
grave;
embaucaría sin tenerla
todos mis instintos,
todos mis impulsos.
VIII
Canta , canta mi pena azul
sin ocre zozobra.
Abre el verde ramaje ,
a la espesura de mi idea.
Entre un camino serpeaba
como culebrilla de un destino azaroso.
El murciélago castellano
rasgaba bailando, ladeando
el cielo mullido
de levedad de colchón sin luz.
En sintonía opaca que rodeaba
y acariciaba.
El cielo abría su sangre a la noche.
Un sopor de estrellas
que en este invierno no tardaban,
y el rudo vigía ciprés soportaba .
IX
Bajo tenue luz de luna
que los sentidos arrugaba
y mi fiero ciprés de lanza colgaba.
Avanzaba por el camino
los álamos,
como un sendero
en cal de maderos cenizos,
rumbo al Valhalla.
Alumbrado , rememorado,
anhelado
por todo guerrero .
Era un olmo frente la tapia
de un cementerio
en Fuente la higuera.
Caminillos de hormigas dispersaban,
desplazaban los vástagos
de forrajes venideros.
El Castellano
Tangencial, severo, recto
a este sol ferro fiero
de luna pavorosa descolorida.
Rey astro de cielos huérfanos;
soliviaré su fervor
por albas depuestas,
hijas de rayos derretidos,
un eco del hombre resuene alto
en esta umbría noche
que sangre previa
ya desvaneció.
Campo de raices en negra visión
y viborillas temblorosas.
Carne y cuerpo de metal
es mi azada mordiendo la tierra.
¿Cuántos ángeles disolvieron el vuelo?
En son de la belleza tornasola
en quietud reverdeciendo
estas selvas de sombra.
La llamada del guerrero.
La llamada de su espada zorro,
a su silbido forjado.
No es lugar plácido tras la vida,
no es esto, es aquello,
a cuántos insultaron los cielos.
A cuántos a su alma sobornaron
llegado el cristal de espejos,
y su laberinto de reflejos.
Soles cromáticos de escalas
intangibles de luz,
y sus rayos acuartelados.
Llévame en tu estela irisada,
yo me mediré con el Rayo de Zeus.
De letal sonrisa azur,
bailaré sorteando su electricidad.
Acostaré, ceñiré sotos
de vientos arrebolados,
en espirales.
Apolo me dará su brazo,
pondré a bailar Valquirias
en la fiesta de los condenados
a siempre vivir.
El Castellano
Cuerno sonoro,
cuerno vivo,
cuerno hueco
brillo frío templado,
vive tu osadía la bravura,
osamenta quebrada,
viertes tu sangre,
dando brío a la fuerza,
tu luz no tiene rienda,
tu puñal me dio
vida,
y a Quoth el cuervo,
tu fiel agonía,
late, sangre fluye,
corre el lobo que soy
bailé entre serpientes
altura desbocada
he oído alzarse
almas bajo la tierra,
arde regio solferro,
oscuras alas blanden
sus filos de alba.
Regentan iris
la lucha que reinará.
Habla desde la leyenda
el origen de Iberia,
quién espantará
mis gritos entre ruinas,
desciende su poder
somos los otros,
canción de una piedra,
férreo el destino,
amplia senda
honro mis dioses
abridme el camino,
surcarán abiertos
libres vivos;
oda por esta tierra en llamas
por esta tierra en trizas.
Ahogarán alientos
bajo el dios del Trueno
ávidos guerreros resplandecen,
raíz de plomo
incandescente.
El castellano
Avanzas el campo
de mi irrigada sien,
cara por cara,
ojo por ojo de este abrojo;
Destino ciego de mi celaje,
bronco mar de trasiego
al broncíneo lar
encorajinado, nacido
de un pelo de un pelo,
rescoldo socavado
un acre sin pestaña hiriente,
vistas tras los espejos
para ser libre,
y enraizar este Sol ferro
que rehúye, desnuda las nubes.
Es un viento solar que me encara,
y afila mis fauces
que desencajan el tiempo
que ya marchó.
Pude venir a vivir
en la ola de luz serena,
el relámpago me alzó en compasión.
Pude renacer
pero no soy adorable,
desde estos acres
traigo
la flor de difunto
soslayada,
sembrado el tiento
queda resurgir del azabache,
y bailar sones de grillos
con sus raíces del mañana.
El Castellano
Magnánimo arrecido silencio
desnudado, su violín enardecido,
aromos fusilados, nacidos
en yerta conciencia,
y el férreo son amanecido...
Sangre belleza en pureza,
me abre éste el pecho,
sí bemol de opaco pío,
anuda mi clara secuela,
de ufanos clarines violáceos.
Afuello que venzo
mi claro oscuro fuego,
arrastra y consume esta tierra negra,
mi sangre y mi bandera,
esencia de una savia elaborada.
Soy el que abre
del nuevo árbol
un santo olivo,
que da miel a mi
reina madre.
Por mi árbol deshojado
en su nuevo muérdago,
troquel del inerte acto;
Parasitario.
Runas en sabiduría,
malvas granates de simientes,
simbología d'este solferro,
oscuro y su cuervo.
En nogal con su nuez
del tiempo, abriendo,
desnaciendo la nueva era,
afilando su fragua.
Los balcones extasiaban
por sones al llamado
del vítreo tras luz,
trasnochado,
en ascuas cabalgado.
El Castellano
Oscura noche me cuenta
de su vítreo trasluz,
cabalgado por extenuada sombra,
es mi carcoma está despierta,
yo condeno a los que no son de su estirpe,
destellos malvas de luna,
ahorcan su compostura,
es por mi patio de la gris araña,
por mi tejo de flamas,
por mi fuente azul,
y mi jardín de cristal,
cuando yo me vaya seré tan chulo
que me recordarán,
este filo pulirá el metal,
el pueblo gemirá una hoz y un martillo de tierra,
hasta yo ser caléndula encumbrada,
avanzaré por los senderos del alba,
mi brillo será luz intransigente,
yo seré eterno como una piedra,
idependiente de lo que digan y digáis,
cuervo soy grazno por el sol ferro apagado,
yo voy que me siembro,
soy hecho de mis propias cenizas,
traigo muerte en vena cava
mi talento no acaba,
estoy tejido yo del miedo,
soy más fuerte que el desvencijado
alarido crepitado en eco de yacija
con su espectro
hablando en eco de su silencio,
me casé con la parca negra.
Vino a visitarme y la puse a dormir
en mi cama,
ente de otro ente soy
voz de alma
con voz taladrada dentro de otra voz,
tengo que poseo
dos almas en este mi cuerpo,
por eso hay sombras que no entiendo
en qué realidad me encuentro,
soy Förüq y mi voz seré encargado
de apagarla,
El Castellano miles Dei lumen
rey y señor de su castillo
Efímero corre el segundo sin saludar
sin despedirse, sin preguntar si todo sigue
igual, avanza la manecilla de mi reloj,
hoy es de esas noches yertas,
que descubro mi tierra que late
bajo mis pies. hay avidez
en el subsuelo donde la sangre late,
destartalados pilares que me alzan,
recorrido de mi alarido
que muerde al conocerte,
he oído estaciones correr,
mi carne se funde bajo tierra abierta,
frente mis ojos
nebulosas abren, crepitan,
he nacido yo de su flamígera ascua,
mi solferro blande su noble falcata,
dentro mi carne la vida bulle,
su caída resplandeciente,
toda carrasca me dibuja al dorado tordo
de este atardecer,
el murciélago myotis
me cuelga la idea,
desde esta ojera férrea,
hoy me comí el firmamento anidado
en tu mirada aplomada,
soy experto recio como un lobo,
frío de segmentos cálidos de hielo,
maestro de mi espada,
escucha el brillar de mi navaja,
yo soy descendiente del miedo,
ámame como se ama
sólo una vez,
en el que nuestro color sea la piel,
afilo el poder de este silencio,
y te dicta
que te volveré a ver.
El CASTELLANO
Quiero deslumbrar mi camino,
ayen de estas víboras que caminan,
palpitar el látigo enfoscado
de sedientos corazones.
Entre sangres fugaces afilo
esta vida en grana marcada,
deshojada, por cuanto he conocido,
más que tristes metales lascivos.
Caparazón este el mío inerte,
vestido de marzos seniles,
agota, coarta la esquela
de mi memoria perturbada.
Camino sin camino
por donde se oculta el este,
veo la flor que desviste,
entre pétalos su iris difunto, imperturbable.
Te construyo sin verja, franca,
tapia ni acantonado te hago
a imagen y semejanza del aire.
Que pasa y mira,
que mira pero no descubre,
que nací dueño de tu avenida.
A este sol ferro cuelgo agravios,
ofensas que desvanecen,
como la noche devora lo que es suyo.
El Castellano
No rebotan los tiempos llorando,
en escalas a ese cielo anhelado,
voy que viajo
y bajo mis plantas
la tierra brota, rehúye, fluye,
todo me alza
sobre torres sembradas
y sus trompetas abiertas,
desenfundo esta esencia
de estaciones correr,
hogueras profundas
en lágrimas de lluvia,
plantada mi compostura,
me crepitan las montañas,
los cuervos me rinden pleitesía.
Ante estos ojos
el ávido brillo
de oscuras alas,
frente mi carne
fuego enraíza
esta noble falcata,
encinas me enraízan
el dorado anochecer,
noche oscura
entre espectros de letras,
el día derretirá mis flores,
trepando mis venas de encaje,
mi azada será sangre
no más cuerpo y carne de metal,
al erizado filo
clavaré sentidos despiertos,
mi letra será invencible,
en flamante rebosante inspiración
parida de un rayo de sol,
ay la tierra que me clava la siembra,
ay sol ferro,
yo te hablo
al fulgor de venas
al calor de llama azul,
tú invencible
como la palabra te formó,
extasía lumínica
en candor de lunas aulladas,
ven a mi pecho,
te daré asilo,
desgrana este silo,
que mis manos hablen colores,
solo ante la adversidad
esta negra noche que huye
enjaula su oscura sombra
donde la letanía esconde
sus garras de cristal,
quedando repleto este umbral,
he oído llamar
llamar tus sangres de luz,
a violetas nebulosas
sin cauce
empotradas en sagradas espirales,
busqué tu vida eterna,
me contestaron inviernos
desmochando brotes extenuados
de tiempos atravesados
por tu espada eterna,
fuente fría
que llena dulce la fontana,
la vieja luna sonríe,
lo efímero será áspero y duro,
a la caída de este plomo,
se levantarán estatuas de barro,
tu lobo vestirá el sincero metal
por ser de hierro,
hasta su aullido de plata
a la noche sempiterna,
y sus enredaderas malvas,
campo este de víboras nacido,
por un surco repto,
y el alacrán me saluda,
soy yo tiempo olvidado,
resplandores
de este patio de grillos,
me cuelga la corona de caracoles,
por todas mis lumbres
abiertas
de caléndulas solariegas,
más que hoy
no espero nada,
porque yo siembro lo perfecto,
me responden sus voces del suelo,
al intransigente destello
me parto, me quiebro,
hasta dar mi voz
a estos campos
y sus sotos perdidos
encontrados en cada sangre.
El Castellano
Era esta araña
como un Sol ferro con casa,
era como un encontrarse sin despedida,
por qué,
porque yo empiezo esta obra,
camino destrenzo este campo,
me desmigajan a mí
sus flores extasiadas de difunto,
para decirme
que lo suyo es de todas las estaciones,
como hacer el amor
con azares alados y soldados de los campos,
que su simiente no es vida de un día,
yo digno de admiración
digo que me adopten
pues soy familiar
así no tenga savia
tengo sangre carmín
y mi simiente escrita
dura lo mismo que dura
la tierra sosteniendo vida,
desnazco de la hoguera
al crepitar del rayo luminoso
no soy como él invencible,
pero me cincelo mas recto y recio
que un hierro de carne,
soto-vientos atrás
las montañas hablan con la gente,
que sin ciudad no hay gobernante,
sin poesía no hay mundo ni creado ni
ni por crear,
más duro que los montes,
cabalgo esta letra
flamígera, extasiada,
al son de una espuela escrita en bronce,
digna del brillante metal puro,
para yo decir yo aquí
me he curtido y tejido duro.
El Castellano
Horizonte de la caída de este solferro
a reinar como una falcata de rayos afilados,
hondos ojos fijos en solariega planicie,
donde frías juegan moteadas las flores de invierno,
el reposo de la vida que se fue a dormir,
como un río de luz brotaba la escarcha,
un diciembre tardío saludaba
con sus manos heladas,
acariciando estos campos redondos
de cardos y caléndulas silvestres,
era un día de hacer manteca,
a mí el frío me hacía sentir vivo,
en este soliviar traigo mi espada,
pongo a sentir la tierra a mis versos,
que con cepillos de grama joven
se blanquea mi calzado,
viajo en mi mente
por el cuchillo calizo de la piedra
del caserón terruño abandonado
que posee mi padre,
rodeado por el fervor de pinos de monte,
donde próximas hacían nido las atochas,
a perdigones que son de la tierra
como la montaña a su roca,
cosas talladas puras como amaneceres
pulidos sin grises hojas,
ola rota mecen mis pasos
de un mar olvidado del que cepas anclan
sueños de vida,
del terreno en el que grillos esperan
el frío en sus agujeros
y su despertar para morir al acoplarse
a la melodía que teje la vida.
Avanzo en este campo de víboras
para ser yo como mochuelo recogido en su olivo,
como mis pasos gorjean las carrascas,
todo mi mundo reverdece
para mí siempre es primavera,
y mi bravura llora flores por mis venas,
hasta tener del cielo
la malva del alba
hasta trepar las yedras del profuso claro oscuro,
del cielo y su luna cuarteada de platas auroras,
me nacieron simientes silbadas,
y mis ojos enraizaron el campo.
El Castellano
DOCTRINA DE INMORTALIDAD:
Este es mi reino,
este es mi camino, mi elección,
devoción,
al uno, al Sol.
Mi guerra mi señor.
Antorcha de sola libertad,
reguero tu luz.
Camino de la virtud,
ascua perenne,
tu amada verdad,
forja de mi sangre,
destino atronador,
tu inmortal destello
iridiscente al alma en guerra,
somos los hombres muertos bailando
en tu corazón.
Clama esta nuestra Legión de Luz
un son férreo,
a lo alto los cielos,
Padre Creador te imploro mi humilde servicio
a tus Falanges cromadas de creación.
Alzo mi recia vida a mi sola espada
nacida y sellada por tu tesón,
En tus hoyos crepita mi dicha Sol Señor.
Tráeme que besaré tu Luz.
A ti rindo mis cenizas
y perpetuidad de alma.
Guíame amado,
a incendiar en reino de las sombras
con tu amor,
es mi reverencia, es mi servicio,
osar mi entrega al lado mis castos dioses,
Padre tú de ellos,
mi amor, mi Sol, mi veneración,
soy tu hijo,
destellado te amo,
desde albor cantado,
al origen de tu hierro en mi sangre.
Hoy es siempre por ti,
ángel en tierra
estruendo ciego,
de la vida de tu ceniza,
Sol dador de hálito exuberante,
mi campiña,
mi suelo y mi cielo,
mi salvación sólo tú señor.
Förüq Castellano
Cauce en rectitud:
Empeño asolado,
flamante compostura
en fanal infinito
de las flores del campo,
del ababol al dulce hinojo
diestro me dirijo hacia la suerte,
por coraza mi pecho,
por yelmo mi palabra,
un fiel reflejo por escudo,
es todo lo que pudo la armada razón,
es todo lo que llegó
al río de las almas de mis venas,
dulce estampa de agua,
a vid de trigo y girasol,
la novena estrella me cabalga,
todo oscuro linde de mi vergüenza deslumbrada.
Ojo de mi ojo, viva siempre la virtud del aojo.
Vida de mi zarza quieta, de cristal en espinas
que su hielo en sangre me temerá;
una fiel hoguera de rizada ascua perenne,
rastrojo al fuego de mi quimera, sola su verdad,
es mi sed verdadera,
escarpada cumbre del hombre,
y su dicha en esquela,
yo lato sin nombre,
allá donde el astro esconde;
sentencio a mi olvido
a no volver jamás,
a este recipiente
de sangre que porto,
que hace cumbre,
resisto aleatorio,
en este panal de esbozos,
me enraízo lejos de este mundo,
me desdoblo en dos dimensiones,
las vidas de un día que me enjuicien
que mi camino no termina, comienza cada día,
en seno de espiral armada;
montaña, yo soy la montaña,
el Juez Supremo ya me dictó mi sendero,
que yo me he ganado,
que yo he tejido,
y que las lombrices
sigan siendo lombrices,
que yo sé donde dirigir mi vuelo
de cuervo poeta,
mi semblanza tejida
camina sobre una araña,
boca sin besos,
en cuarto umbrío,
me teje ella Litcher la llamo, a mi fiel araña,
un destino, pulcritud de estela alma,
un encuentro sembrado,
letra que complace mi tejado,
resbalarán las aguas,
mi navío fue llamado al negro puerto,
siniestro yo el comandante
sigo mi noche
que ahuyenta que se estampa,
mi letra quedará en mitad de tierra,
porque toda materia
es y será polvo de tierra,
un rezo y un ruego
para que sean iguales a mí
cuando me toque zarpar
al otro puerto blanco,
sin retorno cristalino,
ni rayos irisados.
Sólo un campo de zarcillos
y rosas caninas que destapan auroras,
semblantes del ser que fue alguien,
quien quiso ser...
El Castellano
Destello incesante Tornasola:
Sangre, pájaro, sombra luna. muerte en vaso de cobre, flor, estambre, lágrima, opacidad serena oscura, tristeza sola, destello incesante, contagioso azar inmiscuido, terco estruendo, vicisitud labrada...
Empiezo.
Desdén flamígero encorsetado,
en sangre de puridad, de alma o cristal en vaso
de alma y su terco sueño que era forma,
vicisitud o estela,
estambre y flor masculina,
luna de muerte oscura en yacija,
y su opacidad serena,
de argenta guillotina
cercenando al tiempo suelto y libre,
su oscura lágrima
de muerte en recipiente de cobre,
sombra y su noguera nunca ruginosa
de raíces en pulcritud de soledad de savia.
Esencia en vals superior,
como ninguna hoja se retira del árbol
sin motivo elevado.
Tristeza caprichosa como pájaro caminante,
y espíritu en captura de azulada raíz
azul hermosea la vicisitud labrada.
Pureza de sangre su única campiña
yerto sentido,
de tuerto ojo sembrado,
sonaba el repicar del taladro,
como un clavo hendiendo otro clavo,
y una astilla sacando otra estaca,
azar alado,
en litigio de iris sediento,
era yo como cristal
de transparencia habitada
agradeciendo a mi musa de agua,
su fábula del pájaro y la flor,
despierto otra vida
que empezaba a soñar mi vida
a partir de mi presente muerte.
Y su vaporoso candor de estela,
un tambor sonaba mi tierra
abría del suelo una lira sobre un arpa
conjugando resonancia crispada
en cuerda y engranaje maldito
como una peineta de brujas afilando
el violín destino, que dictó
que abandono, sin haber comenzado,
y empiezo sin saber continuar,
porque acaso
¿hablo yo?,
¿O despierto sin haber dormido?
ni conocimiento,
seguiré indemne acontecido,
sin dejar de ser correcto,
jactaros del libre
os hace más esclavos,
perseguir sin incendiar vuestra casa del mal,
os lloverá lo cosechado,
se ama la virtud
la bondad destellada hace arder el odio,
y este en contrario resta luz cuando se le ampara.
Förüq Castellano
Secuencia presa en ''Arañal'':
Plantado mi solo eco,
que abría mayo hasta marzo,
dictaba que hermoseaba,
amor en virtud.
De mi dama cantada,
versos sublimes encontraba
bañándose en el pozo de Airón.
Su edad rezaba mi ignorancia.
Evanesciera el susurro de toda lira.
Recuerdo vagando
que Apolo me deja solo,
y yo con mi arrida sien.
Derramo que riego mi pecho
y su yunque en vello,
me hollaba la fatiga de mi neurología,
y su esplendor se retira;
encanto recordaba de mi ferviente
musa de mis dos umbrales,
uno cuerdo, otro mejor.
Mustio el dolor se arrugaba la frente,
atónito que danzaba perplejo.
Invencible Castilla me aguarda.
De foráneos no queda ni simiente,
de insurgentes mi bayoneta,
don funesto de letra bastarda,
preso y yerto ahincó mi historia,
sepulcral victoria me retenga
de mi guarda, la Gloria.
Förüq Castellano
EXTASÍA FUERA DEL TIEMPO:
Operación cero,
preparado para destrucción completa.
Temblando ruido agresivo
supresores activos,
hostilidad caótica
controlador inactivo,
ctrl.alt.delete
mente eliminada,
extasía fijada,
dominación eleva la distorsión;
extinta clase,
energía nunca muere.
Raza real avenga el paso,
controla el ruido ahora,
real es terror en el hueso,
juntos:
-Guerra al error,
guerra en la boca de locura,
nadie viene a morir hoy.
Tropas de la luna
blanden metal oscuro.
Más duro que el resto del tributo,
pura luz sellada;
fase helada en un dos tres segundos;
vidas en el ojo de una aguja
sistema sobre saturado
dirigiendo bajo tierra,
era del resplandor metálico.
Mortífera debilidad
perfección dicta
destruid el defecto.
Vandalismo ordena
descanse el tributo enajenado.
Llanto de la guerra crispada,
sórdida esencia implícita,
tercera fase encendida,
fuerza canta
ciega su falta,
exterminio en vena férrea,
faroles dormidos
esperanza difunta,
cobres almas anidan
sigilo deslizado
por entes de éter.
Energía, niveles óptimos.
Conquistar y destruir es lema,
pasado rueda
el olvido del tiempo.
Es hora de estremecer;
por un alma disuelta en electricidad,
fase oscura dispuesta,
era lumínica comienza decadencia,
telégrafos disponen alaridos en cópula
sobre postes de pino muerto.
Escarpias frías
sostienen pensamientos,
nueva era decreta,
hoy es mañana tejido en fábrica
de herramienta llamada éxito,
ilusión en cadena
para realidad de quien la estrena.
vanguardia
nombre femenino
1.
Parte de un ejército, o de una fuerza desplegada, que avanza en la parte delantera, por delante del cuerpo principal, o que se mantiene más cerca del enemigo.
"el escuadrón ganó la batalla gracias a la avanzada de la vanguardia"
2.
Minoría que extrema las tendencias ideológicas, políticas, literarias, artísticas, etc., de un grupo o movimiento más numeroso, o que anticipa las que después irán ganando adeptos.
"el cubismo y el surrealismo son dos tendencias de la vanguardia de principios de siglo"
sinónimos: avanzada
El Castellano 14-08-2018
I
Vanguardia
Oh vanguardia, tu azar,
no cabe en un hilo,
hendida, alzada,
de enhiesta flecha, clavada,
un ojal que surte grietas
en estas quietas esperanzas,
bañan y se bañan,
vuestras destrenzadas
primaveras.
II
Ocaso rendido
Ajuar del astro sostenido,
suspiro a media tinta,
del profuso, profano, pagano
horizonte malva y su abrojo lanzado,
clavado en el verdor
de mis silos,
otra noche traspuesta,
que se me escapa
por la rendija, entre barrotes helados,
de mi cortina.
III
Cañaveral prendido
Ríos bajan, dulces aromos
al frescor de albas derretidas,
fluye, vence su iris de plata,
espumas de blancos chopos
cabalgadas.
Frente de húmedas azadas,
lágrimas saciadas
del verdor de campos
cual guadañas,
y su casa será eterno sollozo
de hadas.
IV
Canto enterrado
Por ti mi alma,
cuervos rinden pleitesía de negra ala,
acequias no son grises yagas,
yo quien te da sangre,
tú mi hoguera que ni quimeras
alcanzan,
rendida jamás,
me alzas mi palabra
por cielos de espinas labradas,
siempre te quiero
verte florecer en este jardín de rosas
tus lindas alas,
de esta espiga te traigo la caricia,
de esta vida mi tiempo fusilado
sin despedida.
V
Soterrada vía
Alza resume y coarta
mi acequia verdadera,
sobre este famélico tren de espejos,
danza mi brío con fuerza e ímpetu
va que viene , desgasta,
la rienda enroscada en la espuela
de mi saliva verdadera,
como un azote de la noche
y su vieja escuela sangrando yagas de luz
silenciada en el regio hastío
de este rey lucero descansando su frío resplandor,
entre sus corajes sembrados.
VI
Sol de cristal
Oh lugh, invencible al crisol
de tus lenguas travesadas
fiel carrusel de rayos sin secuela
de su rizada espera,
blanca luz de tu vera,
entre compases que hielan,
a tu vespertino canto derriten, despiertan
tus mil llamas liberadas,
desnaces a la noche que aguarda,
oh Sol de mis soles,
acoge este iridiscente canto
en tu seno en mi pecho que te aguardo,
al fragor de serpientes frías,
al valor de fieras enardecidas,
bajo y bajaré para alcanzarte.
VII
Bocas de espuma
Libero ásperos aguaceros, vientos
de mi pueblo desierto,
me conducen a verte
mujer de flores entre horizontes
que escapan fugaces,
entre olas de colores,
yo con la ineptitud de estos antaños,
míos, dulces, inconclusos, repletos
en vasija de dolor sabor hondo
y alegría elaborada,
en campañas de etéreas travesías
donde el final eres tú,
un pétalo, una fuente y un ovillo.
VIII
Libero el nueve
Osadía de cerrojillos ciegos,
entre brillos asmáticos del corredor,
por este aspa, por este candado
vendo que regalo mi dicha consumada,
ojo del buen cazador,
matemático placer enjaulado,
por ojos abiertos,
por un pañuelo, donde secaba lágrimas
la hilandera,
destino abierto a la única primavera.
Afilaba surcos de hogueras
al final de la contienda,
mi letra y la parca efímera,
como pez en tierra.
IX
Del famélico trigo nacido
Reza que escapa, su luz en una botella,
al ocre deslizado se abría,
un parpadeo de la espiga,
un estupor que abriga,
y la rima fácil de tonto día,
liberarse puede de toda sangre
y ser hasta arena de la tierra,
de la espiga venidera nacido,
sólo al astro entiende,
desmenuza sus cuchillos,
afila su vida como aspa
enamorada de su tierra.
El Castellano
I:
Mitad luz,
mitad descampado oscuro
hondo esquivo tajo rutilante,
se besaban dos sombras
apuñalando su violeta.
Dulce, postrado
de retina escarchada.
Vida de una vida asolando.
II:
Fragor de estallido,
por almas crepitan su sentido,
angosto al paso del tiempo
en calizo terreno despojado,
dueño de la tela
y el vellocino de esta araña.
III:
Dos muelles se querían,
sobre silla dorada
saltaban alto como el nombre,
dando de sí la extensión
del aire.
IV
Infinito cerrado a solas,
desdén consumado
del colapsado ocaso sembrado,
vida de tu saliva que fluya,
fértil lluvia bajo mis pies,
piedras y su aliento perpetuo,
estrellas levantan.
V:
Cristalina de fuego
que deshace frentes
purpúreos ojos dementes,
descubierto haz
soterrada esta desquicia
yerta, iluminada
de visión clara.
VI:
Vorágines de trasiego,
una letra en la hoguera.
Sangre de mi quimera,
abre llorando
que blanquea
su nueva tierra.
VII:
Ensordecida siega
del mañana;
sudor que acampa,
espiga y su filo de alba.
VIII:
Perdida media noche
al furor de candores,
esquiva levantaba
por cuantos resquicios,
su soledad habitaba.
IX:
Hilvanando suspiros
en rejas, rectas porfiadas,
sus ademanes suaves creados,
flagrando ajuares disparados,
supervivencia temida de la caricia.
El Castellano
1
Erase una noche fría
de invierno.
Las lechuzas estaban recogidas,
lluvia caía al suelo,
la niebla y la bruma
eran intensas,
sólo una sombra caminaba
por la calle,
era la muerte.
2
Cuando la luna sale los vampiros
y los murciélagos están cazando.
Era la noche yerta,
los ataúdes se abrían,
pero sólo
para que entrasen los cuerpos
de la epidemia
que asolaba a la ciudad.
3
La vida del gusano Juan
era muy sencilla.
Él vivía dentro de una almendra
y tenía suficiente comida
para hacerse adulto
y hacer la metamorfosis
a los meses siguientes.
La hizo y nació
de la pupa un hombre
con vocación política.
4
Era la noche
de los gusanos
todos estaban bebiendo
licor de hojas en la cantina.
Pero un escarabajo encadenó la puerta
de la cantina
y la prendió fuego
con todos los gusanos dentro,
los escarabajos
recogieron la carne braseada
y tuvieron despensa llena
para pasar el invierno.
5
Soslayada la flor del cielo,
abría los caminos de la vida eterna,
una polilla como una hoja de adelfa
caminaba el cielo,
corrió hacia la luz estrella
con ímpetu y brío
hasta estamparse en ella,
se formó entonces
el hueso de luna
que todos vemos.
6
Era una noche
de cristales rotos,
los lentes míos cansados
reposaban sobre el escritorio,
miré al espejo no reconocí
al que estaba sentado,
pregunté ¿Quién está ahí?
Aturdida contestó una voz:
Soy el que nunca serás,
porque siempre has sido yo mismo.
7
Eco sordo
en alta voz
resurgía
entre la ceniza de su cigarrillo,
no tenía manera de saber
sólo apostaba
al nivel de la montaña,
quiso conocer
pero una mala oración
se llevó su tormento dulce
a la entraña del frío áspid.
8
Belleza si acaso estuvieses forjada,
quién sería tu padre
quién tu madre,
inconmensurable
por infinitud de sendas
ella abrió sus párpados
viendo su reflejo en el lago,
sólo de la impresión
acudieron todos los peces de colores
a besar su imagen,
llevándola a su profundidad.
9
Se retozaba
por acres difusos,
donde vuelan
polillas de las tierras,
de una flor
nació una polilla de cemento
con la esencia
de las ciudades
que dijo la oscuridad por poder
te puede pero la realidad
es que me supera.
el Castellano
A ese mirlo, mirlo único;
Córvido negro de profundo ojo
que picotea y escarba mi idea.
Que crascita su estirpe,
dejadle mi patio cada mañana
rubor de cristalina ala,
sólo hasta que no me queden ideas
que son como lombrices cristalinas
nacidas del agua de mi frente.
De esta enjuta tierra me camina
el alacrán.
Un campo de sierpes y torcaces
de grises ceños al ocaso del día
que entre mantas y saetas
se acuesta un sol ciego.
Audaz mirlo que ahuyentas
mis espadas.
Tordo entre espinas arreboladas
haz que se acueste mi mañana
bajo tus alas.
No me destrenzará la osadía
temprana, ni el día terminará
de llegar.
Tu risueña pitanza en corvo pico
ultrajada; Vine por tus voces
desenterrando abrojos y señales
uniendo el fin del día
con el fin de la noche
como tú quiero vivir,
termina mi idea.
El Castellano
Brota la rosa furtiva,
hinojos al fuego de sol
expanden ojos viendo
inusitada encina que me respira,
por ende se agita el olmo secuaz,
avanzo el camino de los cardos densos
todo lo que veo crece sin más importar
ababoles en rojo granate tinta
de tierra sin despedida
sangre en vereda en verdad
al chopo viejo defino mi ida
abrojos difuminan la verdad,
enclaustrada savia la reverdecerá
esa que llegado el verano desvanecerá
crepita el suelo en color
añil el canto, digno encanto
se viste de espiga
a la malva tornasol
escucho la súplica
de toda espina que mece mi vida
reposa el colorín
por las margaritas abiertas
nacerían mis te quiero
y los molinillos al viento
acamparían el sentido
y el aliento silvestre nacido
al estramonio seco
canta su renacer de simiente
para el verano y el otoño
brotar sus trompetas de los ángeles
en vida y fulgor
por la ortiga que su hoja pincha
mecería mi vista
con el poder de acariciarte
el pensamiento
por más que avanzo
el cardo llena mi visión
el camino sin final ni retorno
lleva a encontrarte
por los cuclillos nacidos
por la cepa de vino
por el olivar vetusto al sembradío
acampa y despliega mi sino
de trigo y centeno visto
la acequia mi sangre lleva
con el fin de inundar los campos
de mi verso que es mi sangre
diestro compás de espada
lleva la cicuta
al brotar de un cebollino se muestra
fiel la floresta
por el ciprés que los muertos vela
se duermen los siglos
y la morera dulce torna
al trinar de pardillos
visten los castaños de indias
hoja nueva
el umbral silente cocina el hueso demente
a la vista del Sol
la lagartija está
el tragopogon luce su flor
para su posterior de su simiente dispersión
hogueras cándidas al sol
tienen las caléndulas arvensis
en su flor
siendo flores de difunto de los caminos
por la que los muertos bailan en su luz
del pino avanza la procesionaria,
mientras violetas nocturnas
dan nombre y honor a flor
los plantago que tienen su flor de su espiga
fieles estambres enamorados
de la vertical caricia
ven llegar sus soldados alados
infinitud de vidas en color
con flores regadas por la primavera
que mi sangre y de todo lo vivo
altera y mece en alegría
y sutil caricia de vida
su fiel avenida
del sol y la sombra nacida
lluvias despiertan el sueño
de toda simiente caída
brotando mi vida en lluvia
de este abril que tardío marcea.
El Castellano
TORDO ACOMPASADO:
En el océano de este mundo
abierto al cielo,
vive el cuervo,
por el desvencijado respiro mío
avanza, mece y sostiene
un tiempo en réquiem de espadas,
por aquellas voces que sordas
laten, se descubren, alzan,
se quiebran al paso de altares de hueso
por mis atardeceres de murciélago
voy ciego al calor del astro,
siente mi caricia de pájaro
esta vida en un verso,
alzando nuestra luna de acanto
y alabastro gimiendo el ocaso,
azabaches ensortijados, derretidos, extasiados
por el sendero despierto,
por el cauce que trae la vida, la mía,
ojos en resplandores dorados al tacto
de mi astro soslayado,
mi azar es sembrado
vida de vida
late esta caricia
no hay retroceso ni regreso
todo está bajo tierras germinando
por la rosa de su pelo,
tu sangre me colmó en beso,
nuestro cielo de amarantos
fiel al respiro que alcanzó a ver
la belleza en noches de miel,
respira abre en ambrosía mi vida,
en este horizonte dormido
quiero ser de la piel resquicio,
que no me sientan perdido,
quiero ser Siempre tu sonido que acompasa
que clava olvidos
en despertares rizados que consumen
la retina y sus astros,
todo lo que anhelo es la verdad en silvestre flor,
tu eco alto que no hay pájaro sin nido,
esta noche será distinta,
el comienzo empieza ahora,
mi sueño de araña
que todo lo tejido
recompensa trae a lo sentido,
un avance de mi sangre,
ven al nirvana del ruido,
anticipa nuestro solsticio,
Yo que amo en mimbre de esparto
y verde espiga de trigo,
fiel comando el suplicio
de los valles de mi sombra
displicente, enamorada.
Encumbrada.
Sostenla, sostenme de la pestaña,
me nacerá un alba,
marcho, a través del hielo,
su azul en la mirada,
estoy sembrando mi escarcha,
y que venga y queme
este laborado tiempo,
que yo nací del viento,
alguien está llamando
oscuro este romance entre las malvas del cielo,
se escucha mi nombre,
tengo que cerrar este hielo,
colgando mi estampa
del árbol de las cenizas,
y que nazcan ojos de tierra
de este hueso,
que seguiré soñando
que fue sólo eso
un sueño en despierto umbral
de mi alma y su protectorado.
El Castellano
FINAL TIERRA YERTA MI ÉGIDA Y CELADA
FINAL

I
Recuerdo el arcoíris
traía la nube tras la tormenta,
la ruptura de la compuerta
traía mi iris;
y la ascensión,
cuando la noche cansada,
ascendía la luna de espejos.
Nunca quise dolerla,
dioses por qué se fue
al apenas respirar
el fuego la mañana,
en los hoyos del Sol
me alzo, oh dioses
traer a mi Luna,
traer a mi Mar y mi Musa.
II
Recuerdo de un sigilo
sin mi nombre,
venas del cielo, oh, arrasen,
surcos iridiscentes, otros lugares,
que yo amé antes,
mostrarme los leones,
los carros alados
de Babilón,
que Babilonia, entera retemblará,
osadía, injuria, y
alzaré sones y trompas
tronarán hasta
llegado el final,
volver a comenzar dictado,
pero mejor,
yo soy el León.
III
Recuerdo cuando muere la Luz
que baja y retumba
el amor, vence los lechos
y juega travieso con trinos
y pájaros dormidos.
Repiqueteo maestro,
concuerdo que cuando se
vence la luz, astros
despiertan, Luna alza
su sábana, miles fantasmas
planean sueños y mortales,
se pinta la Eburnea Puerta
y el sueño Abisal.
IV
Recuerdo su nombre y el mío,
ya queda esfumino,
avancé la sola lumbre,
centelleé interminable
como azur trueno ingobernable,
no me llamaron hereje,
el iluso, puede,
hoy alzo a su eclipse
que mi mundo ya cae
y desvanece
desde mi sendero, no esperé
nueva ruta ni que su relente
me blandiese una señal
y dioses, desvaneció sin
despedida valiente, quizá
un volveré.
V
Oh divina suerte
que de su barrizal me envuelve.
Un trino, un crascitar difunto,
me envía,
que sin ella
sólo reina un Sol negro,
apagado y muerto.
Luceros caen del cielo
y luciérnagas se recogen,
la vida hermosea dentro,
de una cueva llamada Tierra.
Hoy no murió, por hombre,
mi ilusión,
que juro,
renacerá cual Luz hermosa
de pluma este Ave Fénix.
Förüq y Leannán-Sídhe
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