Tu belleza germina:
Estar en tus pies de jara,
sé de un himno, grande y epicúreo,
en el que tú eres mi noche y su alma,
cadencia tuya,
que dilata la bella sombra,
de una aurora abismal,
yo, rebelde;
con palabras fuesen mi idioma,
quiero todo sin brizas ni mausoleos
tormentos dulces de imaginaciones.
He destellado profundas simas,
y tu pecho no me cabe,
mi latido pudiera fundirse a tu sentido despierto,
cuantas veces he soñado, oh bella,
heridas en memoria
no hay pócima, ni olvido fugaz perenne.
de tierra y de cielo,
he visto tus ojos,
mi corazón ardido en abismo,
hondo, era dolor, negro, era su color,
tersamente gime tu onda eléctrica,
voy a besar tus mil llamas liberadas,
besaré aquel fuego puro explayas y difuminas,
sólo de ese río que te besa,
y se vuelve mi sangre.
De purpura y cobrizo matiz,
de agua y de hierro,
mi entraña.
Förüq castellano Miguel Esteban
No hay comentarios:
Publicar un comentario