sábado, 29 de julio de 2023

ABABOL SANGRE DE SOL

ABABOL SANGRE DE SOL













Liras

 

7a, 11B, 7a, 7b, 11B.

Lira A Musa:

I

Todo lo que descubro

aliento ciego, bucólica siembra

como esbozo elucubro,

abre rayo, desmiembra.

Cercenada estalla, ella, brotada hembra.

 

 

 

 

II

En sangre de limpia agua,

carmines me recorren, eres mi hombro

un postrero abre fragua,

de mi sino un escombro,

quiero regar la vida de este combro.

 

III

Engarzando yo, quieto

ella el iris de mi bella natura

brilla en puente Himeto

desde ojo que aojo cura,

suerte, que labrada es sangre que apura.

 

 

 

IV

Hoy campos son de endrina,

para ser retozo que cruje solo.

Desnudar de la encina,

hoy olvido logrolo,

pero a ella con un rolo trina el piolo.

 

V

Libre por ti soy, ardo.

En rambla sin ribazo de secarral,

por transeúnte cardo.

como raíz de parral

esfumo, alcanzo, sones de su fractal.

 

 

 

VI

Mis astros que son santos,

obtusa furia que engulle impelida,

prosigue, consume a tos,

destapa desvalida,

de toda la tristeza que invalida.

 

 

VII

Hasta que engulla esta enorme

sombra que sigue procelosa, rauda

el siglo engasta fome

mi silvestre alma escuda,

te hablaré alto, como el amor exuda.

 

VIII

Sin directriz, ni engaste,

porque mi carne no tiene baraja,

hoy clamaré desgaste

mi ataraxia cuaja,

que cegaste tuya. Mi dama graja.

 

 

 

IX

Desde rejuvenecer

que gasta emblanquece por cielo extenso,

Sueño del resplandecer,

hoy no bastó lo menso,

sin solitud desaprenso, repienso.

 

 

 

 

 

 

El Castellano

 

 

 

 

 

 

Culto de mi cultivar. Oda en liras

 

7a 11B 7a 7b 11B

Culto de mi cultivar:

 

I

Traigo de mi alma en fuego

incrédula, extraña poesía runa,

al capítulo llego;

de tierra, viril luna;

seco abrojo regio, cumbre que ayuna,

 

 

II

Habitado tras yermo,

con mis sentidos inermes postrados,

llana música en termo.

Mi Virgen seduce hados, *

brazos aguerridos amancillados.

 

 

III

El silencio esquilmado

escondido de mi alma traigo hendido,

vislumbra trazo arado

solitario, nacido

sangre, impía herida yaga henchido.

 

 

IV

Traigo soles difuntos.

Melancolía hija, el siglo enajena,

alzo, beso mis adjuntos;

sin honrosos entrena,

lucha diaria enajeno en cuarentena.

 

 

 

V

Al pie de soto llano,

viperina sierpe de frondosa era

aspereza abre plano,

placer dioses quimera,

todo es bruma siempre gris la espera.

 

VI

Esfuma lecho real

de sangre gualda disputada grana,

mi directa pluma lean,

nimbo mis astros cana,

en sonrojada pupila mi lana.

 

VII

Misterio, azar o tinta

siderales ensueños, envanece,

avanzo, yelmo pinta;

arrepiente, fenece

piedad aflora yerta, no perece.

 

 

 

 

VIII

Ante Lugh no se humilla,

apego mi faz ya desorientada

cuarteada sien cepilla

mi jofaina aplacada,

mi semblante pardo no cambio nada.

 

 

 

 

IX

Fervor sí prendo fuego

desde este sueño de orgullo reseco,

Indefinido apego,

sin rastro yo la checo,

con puerta florecida llaga mi eco.

 

 

BONUS: (Rima y métrica libre o blanca)

 

Custodiada por los mil alacranes

que puridad cuida,

por los Suelos

¡Levanta la frente!

Y de placer sucumbe.

 

El Castellano

 

 

Oda completa en liras, ''Oscuridad germina'' 11-1-2019

 

OSCURIDAD GERMINA:

A Obscuridad

-Necvinceretenebras, et amat,

Oscuridad no se vence, se ama

 

I

Azar disuelto en viento ;

vienes, te lavas las manos soturnas,

ensuciando te siento.

Grande en horas nocturnas,

mi potencial en horario alas diurnas.

 

II

Cuestan más, especias

que el guisado en resultado en finales.

Traje de brumas necias.

Sombra honesta en turbiales.

Granate lustre postrado a venales.

 

 

 

 

 

III

Jamás vendido al postor,

por mis colmillos guerra al error ido,

acrisolado impostor.

Voy por hervor florido,

y lunas en alabastro gemido.

 

 

 

 

 

IV

Es un son de los grillos.

Acaso se requiere don de gentes.

Redil de carrasquillos;

hematíes dementes;

acequia de almas o entes relucientes.

 

V

Crisol, hervor de soles.

Lucen lunas gimiendo en alabastro.

Indemne como moles,

yago, yace en mi castro.

Brilla mi malva rosa, ¡Fulge!, mi Astro.

 

VI

La vanal inmundicia,

anisando lo habitado en espejo;

ayer de hombre en malicia,

dicha, uno, dos, despejo,

tres, dolido, la rosacruz no alejo.

 

VII

Con besos por espigas,

y ángeles soterrados, sin vilo;

ya lo digo, no digas.

Hermana negro hilo.

Autocomplaciente la flama afilo.

 

 

 

 

 

VIII

Esta acequia rutila,

y ángeles soterrados, sin yermo,

malva salvaguarda, hila.

Estira aliento, en Lermo.

Mi sed en galego alzado digno ''ermo''.

 

IX

En el patio su araña,

suya su corona por candelabro.

Se siembra, tiesto apaña;

su saliva yo labro.

Sangre de ámbar atesoro, le jabro.

 

 

Serventesio:

 

Estampas de la sangre resplandecientes,

granate su sangre encumbrada, son venal;

sentido alerta; despierto los lucientes.

 

Sin bombilla 💡 en sótano de luz, el penal

Entre fauces brillantes adjunto abrojos.

Rebrote de oscuridad en el arañal.

Alguien ya vendrá por mis áureos añojos.

 

 

 

 

 

Epodo :

Caldea, hasta rebullir. Yo arrostro antojos.

Avengo eternal raíz; disparo aojos.

El Castellano

 

Reflexión :

A veces dentro la oscuridad;

a veces dentro de una luz.

MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA

 

 

Elegía a la vida. Oda en liras :

 

7a, 11B, 7a, 7b, 11B.

I

Perenne diamantino;

abro de tu mirada un absoluto,

cometa matutino,

raudo al Sol impoluto

como una gota cristalina en bruto.

 

 

 

 

 

II

Bajo el Sol humilde y ellos

conductores de fracasos y grietas,

reflectores destellos,

y epicúreos ascetas,

vigor de rayos, puridades quietas.

 

 

 

 

 

III

Sobre la grama mojada.

Murmullo de un goteo anisado claro,

serpea estela sajada,

en espiral aclaro.

En la incandescente rosa disparo.

 

 

 

IV

Un otoño caduco;

rosa sin cruz aquel cometa roto,

desnuda luz estuco,

casi lloraba, broto.

Como una estrella fugaz yo rebroto.

 

 

 

 

V

Astilla y ojos boscajes,

ella astilla, en bosque de ojos sedientos:

infinitos anclajes,

sorprende, son atentos,

son de azul perfidia no añila alientos.

 

VI

¡Oh transcender primero!

aire canto perenne, como estribo;

lanza en viento, el alero,

sus encuentros transcribo.

Aereperennius, ministerio inhibo.

 

 

 

VII

La noche quiere ahogarse,

sí, en sus ojos que su sonido visten,

desnace así asomarse,

por carcomas inviten.

Es sólo sangre en tu ojo que permiten.

 

 

VIII

Es solana mi vena,

cantando, alcanzando, la osada oscura.

Llora mi savia pena,

hada esfinge en premura.

Para tener piel sembrada en tersura.

 

 

IX

Brotes en azulete

brote y noche tapada en noctambules;

el nido ramillete,

teje araña hambre y azules,

así descolgar de ella azules tules.

El Castellano

 

Reflexión:

-Ella la vida, sed de inmortal espera,

llama a la muerte en espiral,

para ser eterna como el tiempo deslizado,

y como todo principio depende del final,

vida llamando muerte, muerte llama vida

su eterno ciclo en resurgir de simiente

al albor elevado corazón de savia o sangre, o los dos.

Miguel Esteban Martínez García a 06-03-2019

 

Araña de noble silencio; Oda en Liras

 

Liras:

I

Encontrase siguiera,

novia, amor y mujer determinada,

mi dolor consiguiera,

de amistades borrada

de amores caduceos ya, consignada.

 

 

 

 

 

II

Tiempo libre, efímero,

clavado en tierra lenta, su estridencia

tumba muda en señero.

Toda divina ciencia.

Soterraña en limpios besos constancia.

III

Yacija filosa alma

Por Mercurio, Júpiter, Atenea, era

las mansas lindes calma

se acostó mi remera,

ya solivié que desterré rivera.

 

IV

La parca negra jabra

sus alfileres pulcros hilaba ella;

traje al yermo que labra.

De musa esencia, bella.

Afligido impetuoso no destella.

 

 

 

V

Solo halo no nacido

abre desdén de pocos, o ningunos.

Superior, advenido.

de melíferos tunos,

en madre conciencia, plañen, algunos.

 

 

 

 

VI

 

Sí acuné mi desdicha

en su llena, destapada tersura.

Patio manso, la dicha

con redil cercada aura,

mi cordura, hueso de luna premura.

 

VII

Desciende vespertina.

Helada esfinge, acunada ella labra,

parda, honda saturnina,

vine que traigo cabra.

Sus voces difuntas en la palabra.

 

VIII

 

En las rosas de labios

de mi amada, hablasen amores pardos.

Mecen lisos, los sabios.

negra sangre en los cardos,

brutos espinos, esquivos, lombardos.

 

 

 

 

IX

Sombra, ay de mi llegada,

sonríe mi noche furtiva, noche.

Lengua maligna, holgada

¡Divinidad en broche!

Cubran tu manto la flor su derroche.

 

Bonus, rima y métrica libre:

Y los ríos dejen de llorar

sangre mortal,

la fecunda alegría sea cenit

y dichosa ceñida a tu torso

de mujer fecunda,

a ti te abran mis flores

cada primavera,

¡Oh, esse Veris dilectus tui in melieribus!

Escucha, susurra nuestro silencio,

el tiempo que cerraba mis ojos,

y vestía la flor de opacidad,

con el color todos mis sueños,

buenos malos, no niego,

Abrid por Catulo

los cerrojos que atavían

a su agua de palabra,

hoy, siempre, se escuche mi marjal

de claras hierbas,

fecundando su clara tierra de piel,

de mujer valedera.

 

 

El Castellano

 

Raíz de candor mineral-Oda en liras:

A la vida soterraña.

I

Raíz arcana ligio,

dejas etéreo espacio acompasado

eterno su prodigio,

silencio amalgamado.

Era taciturno espectro clavado.

 

II

Misterio, parajes blancos

que salvajes concitan en tu lengua

confrontan en yermo flanco

saciando imperio en legua

de soledad que amilano sin yegua.

 

III

Sin inicio, futuro;

sólo aplacando de los diablos malos,

en esa idea carburo,

ojo que vence halos,

descansando en alegría, sí talo.

 

IV

Ocho hijos me has dado

más los bastardos impíos neonatos,

reconocido honrado.

Anudar yo, sensato

mi vida; que deshilacho. y trato.

 

 

 

V

Desfallecer, despedir,

corona y candelabro engarzo

sí, mi raíz es redil

fervor, soles esparzo,

comofue,  cobrizo capullo zarzo.

 

 

 

VI

Su polilla, o gusano

devana sangre, rueda transmigrada,

Transmigra verde plano,

sobre espica, encontrada.

Infecundo humor oscuro de mi hada.

 

 

VII

Coraza por pechera,

carcoma y espuela calzo voy al Parnaso,

tomo de tierra viera

roja sangre, que yo amaso,

pergamino en vana ciencia quiero y aso.

 

VIII

Los abrojos espanto

espejo terrenal hondo crascita,

sonido injerto tanto.

Entre yertos mil, Escitas.

Escrita alma, el Castellano milita.

 

 

 

 

IX

 

Cáléndula, flamante

del camino, vieja, ya iluminada.

De la senda tu Dante,

ardor de luz brotada

entre florestas, hiriente, acuñada.

 

 

El castellano

 

 

Castilla Oda en liras:

 

 

Castilla: 7a 11B 7a 7b 11B

I

Perdurables sus ondas,

en cresterías estigias, esbozadas

de la honda voz Gioconda,

en voz difuminadas

de alta torre enfundada, mancillada.

 

II

Me esmalta la idea obtusa,

con fragor de las risueñas carrascas.

Las soledades  acusan,

del ser deshielan, lascas.

Agarrado a dulce señero tasca.

 

 

 

III

Colmillo umbrío tomo.

Cal y tierra entre follaje regio,

de mi sierra es el plomo,

yesca vida en colegio,

Oda al sendero de umbrío arpegio.

 

IV

Era vida atenta,

entre ojos de azores y sus colores,

se siente, se alienta,

se enraízan las flores,

esto es Castilla, ensalmaba contenta.

 

V

Esto es son de cerilla

de sangre henchida, abriendo helada fragua

linde quieto, esterilla.

Por solares besa agua,

sosiego que tu linde entona ascua.

 

 

 

 

 

VI

Lumbre de entrañas vivas,

en quietudes de escarcha, hiende derecha

lenta llama iba altiva.

sonrisas del alba echa,

quedarse, libérame este haz que arrecha,

 

VII

Quedarse piel segura

al retorcer del castillo de Almansa,

honda tumba hermosura,

entre sus piedras mansas

y caracoles de astros, nunca cansan.

 

 

VIII

Patio en somero alarde,

robusta era en Ermitas del mañana,

un talle del pueblo arde,

sembrado por tu mana;

aro en brea, cúspide nace, engalana

 

 

 

IX

Sueño en fruto severo

rojo carmesí, pesquisa sangrante

el corazón espero.

Ancho venal, cantante,

cantar de la espigosa honra, expectante.

 

 

 

 

Bonus rima y métrica libre:

Y su mañana,

honduras de vidas.

labradas cepas de sarmientos,

acoge en tu alma

este fiel ofrecimiento,

Castilla mi tierra, mi vida,

mi eterna semilla enamorada.

Fiel disparo entre acordeones

de encinas afligidas,

un marco difuso entre colchones de grama,

perdiz entre perdigones viajeros,

voy a tu encuentro,

me hablan fuentes y abrevaderos,

como tus tierras

hacen el amor con parajes dormidos,

respiro tus frías cuchillas

que entre clavos me marcan su herida,

fiel de caricia bebo la sombra

en tu calma sin despedida,

un trino quiebra el silencio

en blanca dama me avanza tu cebada,

un calor presto de caballero

a su dama hoguera,

servil entre abejas

y sus mieles alcarreñas,

tejida, lista,

vaporeada tu siembra

por años cobijan tus azadas

solariegas.

 

El Castellano

 

Río Tajo. Oda en liras a 01-06-2019

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Río Tajo:

 

I

Grita mi estupor, blande

cuchillos que hieren volteando, hendiendo,

una boca que es grande.

Ondas agita ardiendo.

Se duerme toda costilla crujiendo.

 

II

Altiplano enjutado,

de hayas, olmos y los fresnos cenizos;

geología alojado

saboreada en carrizos.

por soñar de los picos, quebradizos.

 

 

 

 

 

III

Virginal luna rige

con sus curvas en rotonda, fecunda,

castiza fuente inflige

y abrevaderos cundan,

dulce azada de agua, el sentir secunda.

 

 

 

 

 

IV

Enamorada palabra,

por cimas tu voz se hace la meseta

haciendo el amor, labra,

templo y morar asceta

sus pájaros dormidos, en pipeta.

 

 

V

De la cepa que alcanza,

agua furtiva corre por las eras

infinita bonanza,

pitanza riza la era,

vaporizadas Torres de su esfera.

 

VI

Que en tu alma anidan, alas

sortilegio de rosa y clavel macho,

cenit cavan las palas,

quién a ti el ser lacho,

en su pecho sí, te lleva el despacho.

 

 

VII

 

Fuego, fanal hoguera

en anchos panales de tus abejas.

Cuentan vidas someras

del chopo sin las rejas.

Sus diez mil espumas, sierras no alejas.

 

 

 

 

 

 

VIII

 

Tu rúbrica ya me dejas.

Es navegante con alas azules

el terreno semejas,

secretos entre tules

tus aguas llevan puros noctambules.

 

 

 

IX

Tú río haciendo bullir

el inframundo, galas entre amores

del verde y azures bullir.

Agita con sangre y oren.

El candil que abre en espiga sus lores.

 

 

 

Bonus. Rima y métrica libre o blanca:

 

Anudando en tu cintura

tu idioma olvidado

pasando años fugaces por tu campo,

rodeando en ortiga

el triguero espárrago,

girando de la vid tu capazo

y sus manos,

haciendo de tu Vera

un Dionisio que al tiempo fermenta

tus besos de tierra.

¡Oh, río Tajo!

 

 

El Castellano

 

 

Grillo Oda en liras

Al grillo:


I

Clareando su lividez
por sotos vastos, reales, relumbrados
De mi río es avidez.
Soliviando el sembrado.
dirige, este mi grillo renombrado.

II

Es un tejado, él llora.
La acequia desnuda de molinete;
un cimiento que aflora.
Grieta, tiempo replete.
Sauce abatido, colchón al jinete.

III
Entre blanda alma sube,
entre un arpa estacional él, aflige,
lluvia a primera nube.
Nota en cúspide inflige.
Entre caracoles sonoros rige.


IV

El grillo único uno,
le pidió un deseo renegando
a manantial de fauno.
No aminorar cantando
tras acople, todo sonó silbando.



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V

Solar afán, entrega,
llegas que dictas tu no pertenencia;
tu arraigo de gallega,
hermana negra ciencia,
traes que cobijas mi sola conciencia.



VI
Mi grillo luce nuevo
su primavera luciente socava,
lira estrella relevo.
El centígrado cava
que tu lustre musa ya no era grava.


VII

Era un patio la sombra,
Vena, la acequia reverberando.
El grillo, desescombra
las arañas dictando.
Oraba como besaba alegando.


 

 

 



VIII

Vengo, avancé mi peral,
con mi grillo en mi bolsillo, cantando.
No divisé umbrío eral,
viva vid, entonando,
mi secuela estaba ya, recta reinando.

IX

Blande regia Oscuridad.
Ahondaba que saltaba, silenciosa
el ímpetu  en soledad,
resplandor de enojosa,
y quizá matrimonio en lacrimosa.




Bonus rima y métrica libre o blanca:

En unión con su oscuro astro,
blandía a la séptima sílaba,
luna que busqué por sombra y abismo
en esquela.
Era un disparo y azogué
lo que el cosmos me negaba.

Fui dichoso, me enaltecía
mi soledad pulcra arrebolada.
Espejaba ella el vestido a mi mujer verdadera.
No brillaba mi sola desquicia,
era lugar y tiempo suficiente;
para ser de la tierra enhiesta espiga.
Ella mi única amapola
Reina del jardín de Hipsípila.
Un soto y un llano;
desperté del bolsillo su oro trasnochado.
Blándeme Oscuridad,
en tu acero y  ala de pecho.
Que canten azabaches
tu magia del cinco
labrado este año.
Afortunado avanzo mi pulso
por candelabro este mayo.
Mi cenit por rectitud
del alma mía.
Un último acorde y me encontré
en la pluma tu arpa,
mi Ninfa que obligas no fenezca
el grillo que me da frenesí.




El Castellano


ROMANCE DEL DESTIERRO:

 

Mi raíz arcana anclada,

dejas el etéreo espacio

en eterno cementerio

tu silencio amalgamado.

Yo era taciturno espectro

misterio, parajes blancos

que salvajes en tu lengua

confrontan en yermo arcano

saciando mi baco imperio

de soledad que amilano

sin inicio, sin futuro;

sólo aplacando los diablos

y esa idea primigenia

cual ojo que jamás hallo

descansando en alegría;

ocho hijos que me has dado

más los bastardos impíos

reconocidos sin ralo.

Anudar aún sin vivir

mi vida; que deshilacho.

Desfallecer, despedirla.

Corona por candelabro

sí, mi raíz es de plata

al fervor de soles alzo

como cobrizo capullo

entre polilla o gusano

devana mi sangre, rueda.

Transmigra verde que escancio

sobre espica, sangre yelo.

De infecundo humor humano

con coraza por pechera

carcoma en espuela calzo,

mi tomo de tierra venzo

roja sangre que yo esparzo

pergamino en vana ciencia.

Que los abrojos espanto

espejo terrenal hondo

mi sonido injerto orando.

Sobre mi vil armadura.

Escita alma, el Castellano.

 

El Castellano

CRUEZA SEMBRADA:

 

Amándote ferviente, nueza llama,

presa amapola en sangre se quedó,

sonriente aurora, veza la heredó,

tu corazón alqueza, fuerte se ama.

 

 

Renuevo esta mi sangre, pa' ser rama;

Veraz la rosa, amor siempre alegó.

Al latido, su beso le ofreció,

la flor abierta en agua se proclama.

 

 

El estambre, súplica nocturnina,

piel acaricia, ya brindó mordaga,

su gineceo blanco, sanjuanina.

 

 

Óvulo y ataraxia, adreza aciaga,

tierra, anclada la doña saturnina;

Germina fértil vientre, enhiesta briaga.

 

 

El Castellano

 

Sonetillo:

Fuerte

veza.

Crueza

suerte.

 

Muerte

reza.

Nueza

vierte,

 

Diablo,

hablo

mudo.

 

Cielo.

Duelo,

viudo.

 

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Abreza que adereza,

aceza con agudeza,

esa belleza despliega,

con pronteza, la alteza,

escurraja desliza,

fiel perfidia en pereza,

dulceza habla su clareza,

corteza por variar

acaso adereza,

afirmo la alqueza una,

ancheza del alto lar,

 lindeza, listeza, por

llaneza, lleneza, 

abre longueza, sin par

de majeza abierta ella, 

maleza, la osada, 

ensimismada roza

malveza, manseza, ya.

 

 

El Castellano

 

Flor de Helecho romance:

 

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Agua lleva, suena río,

alma de roca ya merma,

bebía orilla leve.

Flor roja, sangre sí cuenta,

blanca cierva fada triste

cazador hiere su flecha,

blanda espina gemía

flor abierta grana aberra,

fada herida descansa

latiendo la parca negra,

yace helecho silente

suspira sangre plebeya, esta;

el helecho comprensivo

flor mágica forma bresca,

tambores suenan despiertos

vid en helecho acerba,

afligidos, piedra mueven

cazador choca sin venda

flor helecho coge alma

lo que frío bosque agremia

misterio de cierva fada.

Fada descansa, inverna,

cicutas toman la sangre

veneno hacen, su penca

cuervos la cena discuten,

cazador río conlleva,

lleva el río latido,

aliento verde no medra

duendes coronaban fada,

fada su vida dispersa

los espinos la cuidaban.

Suerte mecía atenta.

Enhiesta flor fue semilla,

altiva plántula bella.

Hada tenía la suerte.

Él apuesto, no daba prenda.

Recta plántula suspira.

La vida sí fue despierta.

Aún duende a ella quiere.

Ella, hada, como hiedra

ellos cuatro siglos ''juntos''.

Los dos sí saben, ya cuentan.

Entre pámpanos exhaustos

cuervos, que ciprés alegra,

ronca voz enardecida

ojos de tierra que viera.

Rompe mi leve oído.

Bruma que siglos almuerza,

Entre fugas y sus carros

negra sombra sube cuenca,

el Olimpo ya reinaba.

Venus baila, suerte tierna

furtivo, justo desliz ve.

Inframundo almas reseca.

Mal destino él mecía

rivera de calma gesta,

tuvo cetro agua brava.

Siglos, dicha es vil,alqueza.

Cierva fada. Lides, forja.

 

 

 

El Castellano

MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA


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