I
Estremezco, enarbolo, el canto tu silencio
función caída instrucción servida,
al final de los tiempos, entono
que reseteo mi escalar,
embebo tu nube argenta
vive, que vivirá esta hoguera
mi mente ciega, última lazada
que danza contigo, oh, mi siembra,
pude ser inexorable, pero no soy
adorable, mi Sol eléctrico
último Sol que siempre es primero
rayo crepitante que cuenta su libertad
extraña sombra me abarca,
si me ven, que soy diferente
soy demente, mis ojos, no les abarcan,
no ven, pero miran,
oh Sol fierro, Sol de mis Soles
divertimento mi escala,
me sube, que alcanza,
tu feraz, pulcra araña sin eje,
sin soga, cómo alcanzaré
tu vertiente, no sé, mientras mi sueño de ti.
II
No tiene rival, ni reseña
ni excusa diferente
tu felicidad sí, que es la mía,
al revés también valdría
sueño de mis amores, valor de millones,
ficha, desnudez violenta, que cursa,
desde mi estampa a aquella huella,
infausta, cada día, cada noche,
al despertar de la misma
pesadilla, un despertar y no verte,
sólo sentir soledad, que matan,
mis dioses que existen debido
yo los creo, aunque nadie
en ellos piense, existen,
Lugh, Lvgvs, señor dios, de todos
castos horizontes, te armo,
fiel de ventura en ojos,
siempre Musa Calíope, Artemisa.
III
Que Diancech,
que reina Hipsípila,
Akritas Rey,
oh, Mercurio, Loki,
vuestros nueve mundos
Apolo que Saturno,
Setanta viste mi brazo,
Conchobar Mac Nessa
hoy tu poder me alza
escriba sin tiempo, medio vivo,
os he vuelto a llamar
a mi servicio Candamvis dios del trueno,
alumbra, centellea este camino,
Tarannis, Epona,
abro lucha; Cernunnos, yo tu hermano
centauro, surcaremos y como
todo viene de y por uno,
eternamente venceremos.
Förüq y Leannán-Sídhe
MIGUEL ESTEBAN MARTÍNEZ GARCÍA
El Inocente
No hay comentarios:
Publicar un comentario