lunes, 18 de noviembre de 2024

A su merced

 








Estos son mis pecados solares
ardiendo entre sus llamas,
llamas de ojos abiertos
entre pestañas fugaces,
puedes oír sus clamores,
lejos su cristal,
todo sobre mi destino,
fundación infausta
viaje a la profundidad,
eco fugaz
de espirales desordenadas
muralla hacia mi sol,
capturo su guardia
lágrimas de infinito horizonte
malvas avancen su sino,
soy inmortal
todo cuanto puedo ver,
lejos de la paz,
lejos del comienzo, lejos del final,
dame instrucción,
rebrillaré más que el oro noble
primero arde, arde mesura,
son solo renace,
son de trompas
de trompetas todos ángeles somos,
puedes oír la voz del grito,
allá altura
allá riscos
y deshumanización del ser,
sobreviviré

sin engaste
sin falso bramido superior
sé quien no soy
siempre,
siempre vivirá mi condena
de morir viviendo feliz,
siembro mi pasado, voy cantando
con mi panida trigo
voy sembrando mi clamor
feliz simiente, resbala mis manos,
agusto labrador
que puse en labriego
el trigo mi verso
entre solana aguarda mi afán,
de vil labriego d' este sembrador
oh mi pardo amor,
te daré con viento
mi corazón reverdecido,
un soplido mi fiel compostura
al andar,
insondable tu acento,
hoy traigo
que sembrando voy cantando
dicha insoslayable mi marcha,
trino de pino,
y beldad,
rambla y coraje
reina salvaje 
compostaje noble
gloria de forja
y capazo de vendimia,
corazón y alma
sosiego y respiro
ay, mi Campiña,
lar de mi azada
jardín de mi hogar,
asoma que se alza
pulcra, dulce,
que incuestionable
arma mi letra es.


Förüq y Leannán-Sídhe
El Castellano, el Inocente.

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